Capitulo XIII
–Se ha convocado esta rueda de prensa con el fin de dar un anuncio.
Para ese momento, en el salón se encontraban una pequeña cantidad de periodistas y camarógrafos, ubicados frente a una larga mesa, la cual solo estaba ocupada por el director Kim, quien fue el encargado de dar inicio a la rueda de prensa
–Imágenes como estas –. En una gran pantalla tras el hombre, aparecieron varias imágenes de los chicos con las hermanas –. Rondan en todas las redes sociales e incluso en las noticias. Queremos aclarar este mal entendido y así acabar con los rumores que se han generado últimamente –. Dio una pausa al tiempo que las imágenes cambiaban, ahora por un brillante logo y bajo este, borrosas fotografías con lo que parecían ser nombres.
– ¿Cuál es el anuncio que tiene que dar? – Preguntó una periodista de repente.
– ¿Qué significado tiene la imagen mostrada? – Preguntó otro.
–Hablarán sobre los idols y las desconocidas. ¿Confirmaran sus relaciones?
–Preguntas después, por favor – Pidió Sara, la esposa del director, quien ahora estaba cerca de él.
–Multicultural, es el nuevo programa de tv en el cual, cuatro grupos de famosos cantantes, convivirán con personas de culturas diferentes –. El hombre se puso de pie para señalar con su mano izquierda la pantalla –. Bianca, Abby, Alex y Gaby, cuatro chicas internacionales que han sido escogidas para participar en este proyecto junto a B.AP, B1A4, NU’EST y SHINee –. Las imágenes se volvieron visibles para todos los presentes. En ellas se mostraban a los grupos y las hermanas –. Con esto, queremos desmentir cualquier relación amorosa en la que algunos de los miembros se han visto involucrados. –. Una pausa más, en la que el director dio la señal para que las chicas aparecieran ante las cámaras –. Todas las imágenes vistas anteriormente, no son más que parte de las convivencias de los grupos y las señoritas en las grabaciones del programa. Antes ustedes, multicultural
El director se hizo a un lado para que, una por una fueran pasando las hermanas, hasta que todas se ubicaron junto a él.
–Bianca –. La mayor avanzó un paso para que la distinguieran, justo como le había dicho Sara –. Abby –. Así como su hermana, ella también avanzó un paso –. Alex –. Repitió lo mismo que las anteriores –. Y Gaby.
Cuando todas volvieron a estar a la par, se inclinaron levemente. Después de esa presentación, las chicas pasaron a tomar asiento en la mesa que había sido preparada para ellas anteriormente. Aún no habían mencionado palabra alguna, por lo que las preguntas de parte de todos los periodistas no se hicieron esperar.
–Antes de iniciar con las preguntas, quisiera hablarles sobre el proyecto y su finalidad –. El director Kim se sentó en el centro de la mesa, quedando junto a Alex y Abby –. Multicultural ha sido creado con el fin de que famosos idols convivan, aprendan y compartan, junto a personas de otras culturas. Estas cuatro señoritas hablan diferentes idiomas. Eso es lo que hace más interesante la convivencia entre ellos, pues los grupos deben hallar la forma adecuada de comunicarse con ellas, en sus idiomas.
Luego de que el director terminara de hablar, dejo por fin la vía libre a los periodistas quienes con ansia, empezaron a preguntar. Abby, sin hablar siquiera, fue quien puso orden al dar la palabra a una mujer que se encontraba sentada en una de las últimas sillas dispuestas para ellos.
– ¿Podrían presentarse ustedes mismas y decirnos de dónde vienen?
Siguiendo todo al pie de la letra, las hermanas se hicieron las desentendidas, provocando así que el grupo de traductores interviniera.
La primera en presentarse fue Gaby, quien después de hablar dio paso al hombre que traduciría todo lo dicho por ella. Lo mismo sucedió con las demás; todas se presentaron diciendo todo lo que debían, excepto el apellido. Eso era lo único que no podían decir, pues las cuatro a pesar de tener diferentes padres, tenían como primer apellido, el de su madre.
Y mientras ellas eran bombardeadas con preguntas, en otros lugares, los ambientes pasaban de tensos a relajados y hasta sorprendidos.
– ¡Esa es la chica con la que nos topamos en el palacio! – Baro se levantó de la silla, mientras señalaba la tv.
–Dirás, a la que casi aplastas – Corrigió GongChan.
–Así que ellas son las demás… – Comentó el mayor viendo detenidamente la pantalla. Aunque parecía ver a todas, en realidad, solo tenía su vista fija en una de ellas.
– ¡CNU! – El mayor dio un respingo al oír el grito.
– ¿Sucede algo? – Preguntó a quien le había llamado.
–No, nada –. Negó Sandeul, notando como nuevamente el mayor volvía la mirada a la pantalla.
–Lo único que importa es que todo ese mal entendido se ha solucionado – Baro suspiro con gran alivio.
–Pero nadie olvidará que fuiste a un súper mercado a comprar productos femeninos –. JinYoung se echó a reír y los demás también lo hicieron. Excepto Baro, él solo frunció el ceño y se cruzó de brazos.
–No es gracioso – Murmuró, ganando la atención de su pareja, quien nuevamente se echó a reír pero sin apartar del todo la mirada de Dongwoo.
El mayor parecía estar más pendiente de lo que pasaban en la televisión, que en lo que hablaban los otros miembros, y eso le estaba intrigando a Sandeul, pues le parecía extraño que Dongwoo no estuviera burlándose también de Baro. Y si de extrañezas estamos hablando, en otro grupo, las cosas empezarían a tornarse también extrañas.
– ¿Ven? Les dije que todo se iba a solucionar – Dijo por fin el líder, rompiendo el silencio que se había generado desde que encendieron la tv.
–Sí, tenías razón – Aceptó Key, acomodándose mejor en los brazos de Jjong.
– ¿Saben? Me gustaría conocerlas – Dijo Minho refiriéndose a las chicas.
– ¿Por qué tanto interés, Minho? – Taemin le miró.
–No lo sé, supongo que sería interesante tratar con ellas –. Se encogió levemente de hombros.
–Yo también quiero conocerlas – JongHyun se unió a la conversación –. Y ahora que lo pienso… ¿Recuerdan cuando confundimos a Gaby con esa chica? ¿No creen que todas tienen algo de parecido?
–Todos los occidentales se parecen – Comentó Taemin.
– ¿Era un chiste? – Preguntó Key, provocando que al menor se le formara un gran puchero en los labios.
–No le hagas caso –. Minho beso tiernamente su mejilla, logrando que sonriera – No todos los occidentales se parecen, pero JongHyun tiene razón, ellas tienen algo… aunque no estoy seguro en que se parecen.
–Es bonita –. La sala quedó en completo silencio ante el comentario dicho por el líder –. ¿Quieren algo de comer? – Preguntó como si nada, levantándose del mueble y dirigiéndose a la cocina, bajo la atenta mirada de los cuatro.
– ¿Bonita? – Murmuró el maknae, volviendo la vista a la pantalla donde se enfocaba a una de las chicas –. ¿Quién?
– ¿El que dijo eso fue Onew? – Preguntó Key, mirando también el televisor.
En ese momento todos pensaban lo mismo. Quien fuera la chica que vio Onew, en realidad le había cautivado, pues, para estos cuatro chicos, que el líder dijera eso, era algo extremadamente raro y fuera de lo normal. ¡El solo sentía amor por el pollo!
Pero dejando eso de lado, el buen ánimo había regresado a estos hogares. Ahora veamos que sucede en los otros dos. Si bien, los miembros de B.A.P no tenían ni idea de lo que había ocurrido esa tarde, lo supieron después de que el manager los llamara, pues ninguno tenía intención de encender la tv.
–Miren, miren, esa es… ¿Himchan cómo es que se llama?
–Abby – Respondió en seguida, ganándose un codazo, cortesía de YoungJae. – ¿Por qué me pegas? ¡JongUp me hizo una pregunta!
–La recuerdas muy bien ¿no?
–No sé porque te molestas – Dijo –. ¿No te has dado cuenta de que ella está en este programa también? ¿Y si nos hubiera tocado convivir con ella? Además, ahora es obvio que lo de ese encuentro fue planeado.
–Déjalo, solo está celoso – Comentó DaeHyun burlonamente.
YoungJae se cruzó de brazos y formó un gran puchero con sus labios. No admitiría que Himchan tenía razón y mucho menos, admitiría que estaba celoso, aunque se le notara.
Y si él no quería admitir sus celos, había otra persona que nunca admitiría que en ese momento se sentía aliviado y hasta feliz.
– ¿Por qué sonríes? – Ren se le acercó picando con sus dedos, las costillas del mayor.
– ¿Quién sonríe? – Preguntó tapándose el rostro con su mano izquierda –. Detente, me haces cosquillas.
–Min, pareces estar feliz – Comentó BaekHo.
– ¿Quién está feliz? – Aron regresaba de la cocina junto a Jr, ya que ambos habían decidido preparar algo de comer, mientras esperaban a que Alex regresara para así decidir lo que harían de cenar.
–Nadie – Respondió en seguida MinHyun.
–Yo – Ren también respondió reprimiendo una risilla.
– ¿Por qué?
–Nada en especial – Se encogió de hombros –. ¿Tú por qué estás feliz?
– ¿Yo? Yo estoy feliz por… ¿Tú por qué lo estás? – El mayor señaló a Jr.
–Yo… ¿Tú lo estás? – Y él, señaló a BaekHo.
–Tontos – Dijo MinHyun, acabando con la diversión de los otros cuatro.
– ¡Espera! Yo te quería preguntar – Gritó BaekHo –. MinHyun, eres un amargado –. Le tiró la primera cosa que encontró. Una almohada.
– ¿Amargado? – Preguntó devolviéndole el golpe – ¿Soy un amargado? – Volvió a lanzar la almohada, pero esta vez fue a parar en la cara de alguien más.
Y entonces deseó no haber dicho nada, así BaekHo no le hubiera golpeado y él tampoco lo hubiera hecho, pues no contó con que la segunda vez que el lanzara la almohada, le diera a quien menos deseaba.
– ¿Jr? – El mencionado no pronunció palabra, simplemente tomó otra almohada y se la lanzó.
–Estamos a mano – Sonrió como si nada.
– ¡Ah no! – BaekHo les señaló –. ¡Amargados, todos amargados!
–Ya se enloqueció – Murmuró Ren, tomando también una almohada – ¡BaekHo! – En cuanto el mayor se giró a verlo, recibió un fuerte almohadazo.
Pero eso no fue todo, los demás también empezaron a lanzarle las almohadas al pobre rubio, quien inútilmente intentaba cubrirse.
– ¡Esto no es justo, todos están contra mí! – La próxima vez, procuraría no decir cosas que le perjudicaran.
Luego de esa movida tarde, en la que las chicas se presentaron y acabaron con los rumores; por fin regresaron a sus hogares. Claro, después de que se reunieran con todo el equipo de producción, para hablar algunas cosas del programa.
Aunque ya pasaba de ser las nueve de la noche, todos los grupos esperaban a que ellas regresaran para poder ir a dormir tranquilamente. La primera en hacerlo fue Abby. La pobre entró a la casa, casi a rastras; estaba muerta de cansancio, le dolía la cabeza a horrores y también los pies, gracias a los zapatos que había tenido que llevar. Sandeul la recibió con una cálida sonrisa que apenas y pudo corresponder.
– ¿Are you ok? – Preguntó un tanto preocupado.
–I’m ok – Respondió tambaleándose un poco –. Don’t worry oppa –. Subió lentamente las escaleras, bajo la atenta mirada del mayor.
–Si ella dice que está bien, pues está bien –. Baro se le acercó por detrás y le abrazó –. No te preocupes, tal vez solo está agotada.
–Tienes razón – Respondió no muy convencido. Abby ni siquiera había saludado o preguntado por la comida, como hacía todos los días, además su rostro lucía descompuesto.
Por su parte, Abby en cuanto entró a su habitación, se tiró a la cama. No se cambió, ni siquiera retiró las sabanas para arroparse y mucho menos había cerrado la puerta. Estaba tan agotada que no le importó. Llevaba desde el día anterior sintiéndose de esa forma y hasta esa mañana nadie lo había notado, pero el estrés, el nerviosismo y todo lo que conllevaba la entrevista, le habían intensificado el malestar.
Sabía a qué se debía su agotamiento, el dolor de cabeza y todo lo que en ese momento sentía; pero también sabía que con solo comer lo necesario, podía recuperarse. Después de todo, la anemia era algo normal para ella.
Unos minutos más tarde, uno de los miembros entró a la habitación de la chica y con mucho cuidado para no despertarla, la acomodó mejor en la cama y la arropó. Él estaba pegado a la ventana y la había visto llegar. Supo, desde que Abby se bajó del auto, que no estaba bien y eso le preocupó.
Estuvo tentado a bajar pero no lo hizo, porque sabía que Sandeul y Baro estaban en el piso de abajo. Ellos le ayudarían si ocurría algo, aun así no estaba tranquilo y menos lo estuvo cuando la vio entrar a la habitación y la encontró ya dormida. Abby nunca dejaba la puerta abierta y se acostaba como lo había hecho.
–Duerme bien –. Susurró aun sabiendo que no le escuchaba.
–Dongwoo oppa… – Le escuchó murmurar. Creyó que se había despertado, pero no. Abby solo había dicho su nombre en sueños, lo que le provocó una gran sonrisa.
La contempló durante unos minutos, se veía tan linda dormida. Ese pensamiento le impulsó a besar con delicadeza su frente, para después retirarse rápidamente asustado e impresionado por tal acto… ¿Qué había sido eso?
Cuando Alex llegó, se encontró un gran desorden en la sala, debido al pequeño juego que habían tenido los chicos mientras ella no se encontraba. Eso la molestó, pues a ella le encantaban ese tipo de juegos en el que tenías que pegarle a alguien. Por eso en ese momento, se encontraba frente a los chicos con los brazos cruzados.
–Estaban jugando sin mí – Les miró con seriedad –. Yo también quería pegarle a BaekHo oppa.
– ¿Hyung? – Todos giraron sus rostros al mayor.
–Puedes hacerlo – Respondió a Alex. La menor, con una gran sonrisa en sus labios tomó una almohada y la estampó en el rostro de BaekHo.
– ¡Hyung! – Gritó el chico sobando la zona adolorida – ¿Qué le dijiste para que me pegara?
–Pues… Creo que dijo que quería pegarte, así que yo le dije que podía hacerlo – Contestó como si nada.
– ¡No es gracioso! – Gritó a los otros que se estaban riendo –. Ella pega más fuerte que ustedes.
Ya más contenta porque había logrado lo que quería, volvió a hablar para comunicar lo que ahora pasaba por su cabeza y por su estómago.
–Jr oppa, tengo hambre –. Esa simple frase fue entendida por todos, pues era lo que más decía la chica; pero fue la mención del nombre del líder, lo que provocó que el buen humor se esfumara y la tensión invadiera el ambiente.
Alex lo notó y se sintió mal, pues ahora no era solo MinHyun el que se molestaba porque ella tratara más con el líder; si no que ahora también tenía que aguantar la molestia de Aron e incluso, la del mismo Jr. No lo entendía y menos le hallaba una explicación lógica al enojo de los dos mayores.
Lo de MinHyun eran celos, eso lo tenía más que claro y quiso ayudarle, pero desistió de esa idea porque el chico hacía lo imposible por no dirigirle la palabra y solo lo hacía cuando era muy necesario.
Pero ese no era el problema, su problema ahora era que no tenía ni la más mínima idea lo que pasaba últimamente con Jr y Aron. Entre ellos se llevaban bien, pero cuando Alex aparecía, todo cambiaba. Desde el humor, hasta la forma en que se trataban. Tal vez a Aron le gustaba MinHyun, pero él sabía que Min botaba babas por Jr y que le dolía cuando este pasaba mucho tiempo con la menor; por eso Aron se molestaba, porque no quería que MinHyun sufriera…
Sí, tal vez eso era lo que pasaba entre ellos. O eso era lo que Alex pensaba.
–Eh… Voy, iré… dormir. Hasta mañana –. Una leve inclinación a modo de despedida, para salir corriendo escaleras arriba, encerrándose en seguida en su habitación.
– ¿No que tenía hambre? ¿Por qué se fue? – BaekHo preguntó, pero fue ignorado.
–Están enojados y actúan muy raro –. Ren se fijó en los tres mayores –. El problema es que se están desquitando con Alex y eso claramente le afecta… No sé qué es lo que les sucede, pero no olviden que ella ha venido para divertirse, no para que la hagan sentir mal, con sus palabras, malas caras y desplantes –. Hizo una pausa viendo como los chicos bajaban las miradas –. Alex es más sensible de lo que parece y se ha dado cuenta de que ustedes no la tratan como al principio.
–Es verdad –. BaekHo adoptó una actitud más seria, poco común en él –. Se supone que nosotros también estamos aquí para divertirnos con Alex, pero hacemos todo lo contrario.
–No me importa lo que pase con ella, yo no pedí estar en este estúpido programa – Dijo MinHyun asombrando a los demás.
–Ese no es el problema y lo sabes muy bien.
–No me importa – Repitió –. La seguiré tratando como lo he hecho hasta ahora – Sin decir más, dio media vuelta retirándose del lugar.
–Jr, Aron, ustedes son los que mejor se llevan con Alex y que cambien de un momento a otro su forma de tratarla no es bueno – El maknae habló nuevamente.
–Piensen muy bien lo que están haciendo.
–Y que no pase de hoy. Vamos a dormir, Baek… – Ren lo tomó de la mano y así ambos fueron a su habitación.
–No sé qué me pasa – Dijo Aron cuando quedaron solos en la sala –. Es como si algo me molestara, pero no tengo idea de que.
–No creí que se sintiera así – Habló Jr –. Pensé que si dejaba de tratarla como antes, él estaría más feliz...
– ¿MinHyun? – Interrumpió el mayor.
– ¿Eh? Ah no, él… Sí – Suspiró –. Creo que hice mal y metí más la pata.
– ¿Por qué no hablas con él?
– ¿Sobre qué?
–Le quieres.
–No sirve de nada –. Se levantó del mueble en el que ambos estaban sentados –. Hasta mañana hyung.
–Nunca se darán cuenta si no hablan – Habló para sí – ¿Por qué tienen miedo a expresar lo que sienten?
Sus pensamientos cambiaron en cuanto apareció la imagen de Alex en su cabeza. Debía admitir que su actitud estaba cambiando para mal, pero aún seguía sin descubrir a que se debía.
–Alex… – Murmuró de repente.
Esa era la respuesta. Alex estaba provocando grande cambios en él, pero ¿qué clase de cambios? No estaba muy seguro.
Cada vez que la veía se alegraba, pero cuando estaba con otro, especialmente con Jr le molestaba. Quería que pasara más tiempo con él y no con los demás, pero a ella parecía agradarle en extremo la compañía del líder… Molestia, molestia y más molestia.
Estaba celoso. Sí, esa era la palabra. Aron estaba celoso de que Alex conviviera más con Jr que con él.
–No – Se negó en voz alta –. No son celos, solo quiero que ella pase más tiempo conmigo que con Jr, que se divierta conmigo como lo hace con BaekHo y que… ¿Qué diablos estoy diciendo? Ah, lo mejor será que vaya a dormir –. Apagó todas las luces y subió a su habitación.
No quería darle vueltas al asunto, pero no contó con que, en cuanto tocara la almohada, todos los pensamientos volverían.
Él no estaba celoso, solo quería que no pasara tanto tiempo con los demás. Él no tenía envidia, solo quería hacer lo que hacían los otros con Alex. No eran celos, no era envidia, no estaba molesto.
Solo estaba enamorándose, pero aún faltaba mucho para que se diera cuenta ¿o no?