Capitulo VIII
Seguir fingiendo que no hay sentimientos más allá de los que se tienen por un “hermano”, es algo que si bien parece fácil, no lo es. Es preferible que se amen a escondidas, a que sigan sufriendo por un amor del que todos, excepto ustedes se niegan a creer. ¡Estar con quien amas, vale la pena!
Entonces, ¿por qué no dar ese paso? ¿Por qué no arriesgarse a amar? ¿Por qué no simplemente enviar todo al demonio y vivir junto a la persona que más quieres? ¿Por qué diablos seguir sufriendo?
Esto era lo que había pensado JongUp, en cuanto supo que su hyung y el pequeño del grupo correspondían el amor del otro, pero por sus propios temores, ninguno se atrevía a hablar. Él ya se había arriesgado y ahora si bien no podía expresar libremente el amor que sentía por DaeHyun, estaba feliz y contento, sabiendo que era correspondido con la misma intensidad. Sí, hablar y declararse había valido la pena.
– ¿En qué piensas? – Preguntó DaeHyun abrazándose más a él. Había notado como su mirada se perdía en el techo de la habitación.
–En Zelo y Bang YongGuk – Contestó –. Ellos se quieren, pero no se dan cuenta de eso.
–Se darán cuenta algún día – Susurró –. Ya no pienses más en ellos – Pidió –. Solo puedes pensar en mí – Besó su cabeza.
– ¿Por qué tú lo dices?
–Porque yo lo digo – Respondió dándole un corto beso en los labios.
–Te quiero Hyunnie – Murmuró cerrando los ojos.
–Y yo a ti.
–Al fin terminó – YoungJae se levantó del suelo y se estiró. Luego se alejó para encender la luz – Oigan por que no… – Se detuvo, mientras una tierna sonrisa escapó de sus labios al ver a los cuatro chicos dormidos.
Bianca estaba recostada en el hombro de Himchan, mientras este tenía su cabeza sobre su brazo, el cual estaba apoyado en el mueble. Zelo acostado en el mueble con su cabeza sobre el regazo del líder, quien dormía en la misma posición en la que había estado desde que se sentó, mientras una de sus manos estaba sobre las del maknae, las cuales reposaban en su pecho. Sin perder tiempo, buscó su teléfono y tomo unas cuantas, en realidad muchas fotos, en todos los ángulos y perspectivas posibles.
–YongGuk… Babo – Le escuchó decir a Bianca. Pensó que se había despertado, pero un leve ronquido de su parte le hizo ver que ella en realidad estaba hablando dormida. O eso parecía.
–Será mejor que busqué con que arroparlos, ni loco los despierto o en su defecto los cargo hasta sus camas – Habló para sí, mientras subía al segundo piso y buscaba un par de mantas.
Estaba por bajar las escaleras cuando una maliciosa sonrisa se posó en sus labios. Dio media vuelta hasta posarse frente a la puerta de sus otros dos compañeros.
–De seguro todavía siguen despiertos –. Tocó la puerta lo suficiente para que un malhumorado DaeHyun abriera y le mirara molesto.
– ¿Qué quieres? – Sin emitir palabra, YoungJae le enseño una de las fotos que minutos atrás había tomado. Eso fue suficiente para que DaeHyun sonriera –. Jong, levántate – Alzó la voz llamando al moreno.
–No me jodas – Recibió como respuesta.
–JongUp, necesitamos tu ayuda – Intervino YoungJae.
–No me jodas – Repitió.
–Vamos a hacer una broma.
–Debieron haber empezado por ahí – Dijo llegando rápidamente junto a ellos – ¿De qué se trata?
– ¿Tienen marcadores?
–Píntalo más.
–No hables tan alto DaeHyun – Susurró –. YoungJae ¿tienes el pinta labios?
–Sí, aquí está –. Se lo entregó.
– ¿De dónde sacaste un pinta labios? – Preguntó DaeHyun, viendo como pintaban con la pequeña barrita de color rojo al líder.
– ¿Quién utiliza pinta labios?
– ¡Entraste a la habitación de Bianca!
–Shh. No hables tan alto – Reprendió –. Creo que es suficiente – Murmuró dando unos últimos toques a YongGuk.
Los tres hombres luego de haber terminado, se situaron frente a los cuatro chicos dormidos, admirando lo que habían hecho. Bianca tenía pintado un bigote en color azul, además de pecas verdes en casi toda su cara; cortesía de JongUp. Himchan tenía dibujadas flores de colores en ambas mejillas además de llevar los labios mal pintados de color rojo. Hecho por DaeHyun. Zelo además de llevar los labios pintados, también tenía los ojos lleno de color, mucho color. Y como si fuera poco, tenía también tres notorias líneas en cada mejilla; YoungJae se había dejado llevar. Y YongGuk… bueno, lo de él era una extraña mezcla de todo lo anterior. Tenía los labios pintados, además de llevar bigote; las mejillas con corazoncitos y puntitos, y los ojos… bien, ya se imaginarán el resto.
–Toma tantas fotos como sea posible – Murmuró DaeHyun tapando su boca. No quería que por su risa, los chicos despertaran. YoungJae con su móvil tomo tantas fotos hasta que estuvo satisfecho – ¿Se imaginan cuando despierten?
–Estaremos en problemas – Respondió el menor de los tres.
–Habrá valido la pena – Comentó YoungJae sonriendo.
– ¿Los dejaremos aquí? – Preguntó el mayor, recibiendo un asentimiento de parte de los otros dos –. Bueno, vamos a dormir.
–Sí, volvamos a la cama –. JongUp bostezó subiendo las escaleras tras DaeHyun.
–Duerman bien –. Antes de irse a dormir también, arropó a los chicos y besó en la frente a Himchan. Apagó todas las luces y subió a su habitación. Se cambió la ropa por algo más cómodo y tirándose en su cama, quedó rápida y profundamente dormido.
¿Quién iba a imaginar que uno de ellos no estaría tan dormido como hacía creer?
–Tontos – Murmuró acomodándose mejor para dormir –. Llegará su turno.
Bianca despertó dándose cuenta de que era la única, pues los otros seguían durmiendo. Se levantó del incomodo suelo y se estiró sin hacer mucho ruido. Subió las escaleras sin fijarse en nadie, aún estaba más dormida que despierta. Entró a su habitación y buscó la videocámara que el director le había entregado, pues no sabía cuándo llegarían los camarógrafos, y se le había ocurrido una muy buena idea para despertar a los bellos durmientes. Bajó nuevamente encontrándose con que, de forma casi mágica, los dos camarógrafos se encontraban en la sala. En realidad, los hombres ya estaban ahí, solo que ella no se había percatado de su presencia.
–Buen día –. Saludó haciendo una leve reverencia, notando como ambos hombre hacían extrañas muecas, como si estuvieran evitando reír.
El camarógrafo que estaba más cerca de ella, señaló a los chicos. Entonces se percató de lo que pasaba; en seguida se echó a reír junto con los hombres quienes no pudieron evitarlo más. Creía que había sido uno de sus raros sueños, pero ahora sabía era verdad. Las fuertes risas terminaron despertando a los tres hombres. El menor se incorporó rápidamente al notar como había estado durmiendo, mientras Himchan se levantó del piso tallándose los ojos y sentándose junto a Zelo.
– Oh, buenos días – Saludó el líder – ¿Por qué están riendo? –. Preguntó, acto seguido, se giró para ver a sus compañeros y después volver la vista a Bianca. Sus ojos se abrieron más de lo normal.
– ¡Hyung tu cara! – Exclamó Zelo señalándolo –. Bianca nuna también tiene la cara pintada.
– ¡Yoo YoungJae! – El gran grito de Himchan despertó a los otros tres miembros quienes brincaron de sus camas y bajaron rápidamente para ver lo que sucedía.
Frente a los tres que intentaban no reírse, se encontraban cuatro personas de brazos cruzados y ceños fruncidos.
– ¿Se divirtieron? – Preguntó señalando su rostro.
–Ay hyung, no te ves tan mal. En todo caso los que están peor son Zelo y YongGuk hyung – Contestó JongUp, recibiendo asesinas miradas de los tres mayores y el maknae –. Fue culpa de YoungJae –. Acusó enseguida.
–La cara de hyung quedó genial – Dijo YoungJae –. Buen trabajo JongUp.
–Oh ¿En serio? Gracias – Sonrió, para después darse cuenta de lo que había hecho.
–Idiota – DaeHyun rodó los ojos – ¿A poco no se ven bien? – Preguntó mirando a sus compañeros.
–Solo espero que no hayan fotos de esto – Dijo el líder –. No las hay ¿cierto?
–Claro que no hyung – Respondió JongUp –. Tan solo unas treinta más o menos – Murmuró.
– ¡Ja! – Soltó alguien. Las miradas fueron directamente a esa persona.
Bianca había comenzado a reír nuevamente. ¿Cómo no hacerlo? Los tres chicos a su lado se veían en extremo graciosos y sin in poder evitarlo todos comenzaron a reír.
– ¡Baby’s, así es como se hace! – Los tres cómplices veían muy sonrientes a una de las cámaras, mientras los otros cuatro, eran grabados por la otra.
Bianca sonrió a la cámara e hizo un “V” con sus dedos.
–Vendetta – Pronunció. Los dos mayores y el maknae dieron una rápida mirada a sus tres compañeros, y después miraron a la cámara.
–Venganza – Dijeron al mismo tiempo.
Tal vez no ese mismo día, quizás pasase mucho, pero de lo que sí estaban seguros, es que sería una dulce Vendetta…
–Por favor – Suplicó poniendo su mejor cara de perro –. Onew oppa.
–Vamos hyung – Minho se había unido a la chica, pues esta le había comentado sobre sus planes –. Hoy tenemos el día libre.
–Está bien ¿Qué se supone que debemos hacer? – Aceptó.
– ¿De dónde sacaron esto? – Llegó JongHyun cargando en sus manos una caja.
–No lo sé – Minho se encogió de hombros –. La producción lo mandó, de seguro Gaby lo pidió.
–Vamos, tenemos que arreglar todo – Gaby empujó a los chicos al patio.
Key regresó a casa con Taemin luego de haber pasado parte de la mañana metidos en la empresa, Taemin ensayando y el mayor hablando con su manager. Cuando llegaron, se encontraron a los tres chicos acostados sobre toallas en el patio, donde también había tres grandes sombrillas playeras y una enorme piscina inflable.
– ¿Qué se supone que es esto?
–La playa –. Contestó Onew.
– ¿La playa?
–Están en el patio Hyung…
–Sí y estamos tomando el sol ¿Se unen? – Preguntó JongHyun.
–También tenemos donde bañarnos –. Señaló Minho la gran piscina.
– ¿Toman el sol con camisas puestas? – Taemin enarcó una ceja divertida.
– ¿A quién se le ocurrió la gran idea de una “playa” en el patio? – Preguntó Key.
–Gaby – Respondieron los tres.
– ¡Aquí estoy! – Habló la menor acercándose al grupo –. Hola Key, Taemin – Saludó moviendo su mano –. Oppa vamos – Llamó a Minho quien en seguida se levantó de la toalla y siguió a la menor.
– ¿A dónde van? – Taemin les siguió con la mirada.
–De seguro por la comida, Gaby se ofreció en cocinar.
– ¿Ella cocina?
–Al parecer si, Taeminnie – Sonrió JongHyun, provocando que el menor frunciera el ceño.
Pocos minutos después Minho se encontraba de vuelta.
– ¿Qué es eso? – Preguntó el líder al ver la comida.
–Se ve… – JongHyun no sabía que decir. Taemin y Key sonrieron, al parecer la pequeña molestia no era tan buena cocinera. Lo que tenía Minho en las manos era una extraña mezcla de alguna crema sobre lo que parecía ser pasta o arroz. Solo quien lo preparó sabía que contenía –. Creo que ya no tengo hambre.
– ¡Minho! – Gaby apareció tras él, tenía el ceño levemente fruncido – ¡Ven a ayudarme! ¿Qué es eso? – Señaló el plato. Minho se encogió de hombros y se echó a reír
–Debieron ver sus caras – Dijo –. Lo siento, esto no fue lo que ella preparó, en realidad yo mezclé todo lo que quedó.
–Minho, vamos.
–Bueno, entonces esperemos a ver qué fue lo que preparó – Dijo Onew acomodándose nuevamente en la toalla – ¿Ustedes se quedarán ahí? Al menos vayan a cambiarse, estamos en la playa – Recordó.
–Ustedes son un caso perdido.
–Hyung – Llamó Taemin –. Vamos a cambiarnos, quiero meterme en la piscina –. Hizo un puchero. Los dos mayores se echaron a reír, ni el maknae podía resistirse.
–Key ve a cambiarte, los estaremos esperando –. JongHyun sonrió pícaramente a Key quien se sonrojó. El rubio rápidamente dio media vuelta y se encaminó con Taemin a la casa.
–Ella y sus ideas, son tan…
–Key eomma, creo que Gaby tuvo una buena idea – Interrumpió –. Ellos parecen disfrutar, aunque estén en el patio – Sonrió –. No hemos tenido vacaciones, esto parece relajarlos.
–Bien, entonces me cambiaré.
Ambos buscaron ropas más cómodas y cuando estuvieron listos, regresaron con los demás encontrándose con una divertida escena.
Gaby gritaba a Onew, el cual tenía en sus manos una bandeja repleta de comida; mientras ella trataba de quitársela, Minho y JongHyun silenciosamente estaban comiendo de otra bandeja sin que la menor se percatara.
–Estamos de vuelta – Habló Taemin, pero solo Minho y JongHyun prestaron atención a los recién llegados.
– ¡Onew no! Onew… ¡Lee JinKi! – Gritó al final molesta –. Espera a que lleguen Key y Taemin.
–Gaby… – Llamó Key.
– ¿Qué? – Lo miró y después bajó la mirada –. ¡JongHyun, Minho! – Ambos prácticamente habían acabado con la comida.
Enojada, Gaby regresó a la casa bajo a la atenta mirada de los cinco chicos.
–Esto está delicioso –. Habló el líder – ¿Quieren? – Ofreció y sin poder evitarlo, todos se acercaron y empezaron a comer.
– ¿Qué es? – Preguntó el menor después de probar la comida.
–Mini sándwiches, galletas, unas con algo no identificado y otras tienen macarrones con pollo y lo que nosotros comíamos eran tacos y tomates rellenos con no sé qué – Respondió Minho a su lado –. Dijo que había más, creo que postres…
– ¡Onew déjame comer! – Gritó a su lado Key.
–Tiene pollo.
–Yo también quiero hyung –. Taemin estiró su mano tratando de tomar una de las galletas.
– ¡Es pollo! – Gritó alejándose con la bandeja.
– ¡Onew, nos ofreces y luego te alejas con la comida! – Key lo seguía de cerca, tratando de llegar a la extraña pero rica comida.
Gaby reía desde el interior de la casa, era muy divertido verlos perseguir al líder para tratar de quitarle la bandeja. Parecían pollitos siguiendo a su madre. Regresó a la cocina y terminó de preparar lo que faltaba. Postres.
Si había algo que le gustaba además de hacerle la vida imposible a alguien, era cocinar. Todo eso, sumándole el hecho de que debía empezar ya con su plan, era a su parecer, una excelente combinación. Por eso, en ese momento se encontraba dando los últimos detalles a los pastelillos.
–El toque final… y listo –. Terminó, pero antes de volver con los chicos, guardó la pequeña botellita en un cajón. – Ya se calmaron – Comentó viendo como todos estaban sentados sobre las toallas –. Vamos a la piscina – Dijo señalándola.
– ¿Quieres que nos metamos?
–Acabamos de comer.
–De seguro te da un calambre y te ahogas – Se burló JongHyun –. Onew, es una piscina inflable.
–Aquí estoy bien.
–JongHyun oppa – Lo llamó. El mayor se puso de pie junto a la chica y bajo a la atenta mirada de todos, se metieron en la “divertida” piscina. Gaby hizo un puchero y salió del agua para entrar a la casa.
–Eso es aburrido… llamaré a alguien –. Subió a su habitación y buscó su teléfono. Marcó el número que necesitaba y esperó.
– ¿Qué quieres mono?
–Hola hermanita querida – Contestó con sarcasmo – ¿Qué puedo hacer para que una playa en el patio de la casa no se tan aburrido?
– ¿Una playa en el patio? Tus ideas son tan… ¿Lo copiaste de Phineas y Ferb?
– ¿Quiénes? ¡Oh ya lo recuerdo!
– ¿Todavía tienes esas coronas con flores que compraste antes de que empezaran las grabaciones? Me pregunto porque las compraste… – Dijo pensativa – ¿Y qué hay de las pistolas de agua que yo compré y que tú tomaste?
– Si, ya. Gracias, adiós –. Iba a colgar pero nuevamente escuchó la voz de su hermana.
– ¡Las quiero de vuelta! – Gritó – ¿Mono qué le puedo regalar a un chico?
– ¿Qué? Ah, el cumpleaños de Jr… – Murmuró –. No lo sé. Bye, bye – Colgó –. Ya lo tengo – Buscó las coronas y las pequeñas pistolas de agua, y volvió con el grupo.Los hizo ponerse de pie, y a JongHyun lo hizo salir de la piscina. – ¡Jugar!