Capitulo 29: Pequeña Preciosa Vida.
Casa de Sakura. 10 de octubre.
Naruto entro a tiendas a la casa, aquella venda que le puso Kiba en la entrada le estaba fastidiando mucho.
¿Por qué ponerle eso sí solo le iban a saludar y de seguro darle un pastel? ¿Por qué tomarse tantas molestias de ponerle una venda y hacerle entrar así?
No le importaba, pero ya quería que todo acabara pronto. Ese día se había levantado con un malestar, y no se sentía con ganas de hacer nada.
-Ya te puedes quitar la venda, Naruto. –susurro Kiba a sus espaldas. El lentamente se quitó el vendaje, y parpadeando para aclarar su visión miro fascinado todo a su alrededor.
-¡¡¡SORPRESA!!! –Gritaron los presentes, con sonrisas en el rostro.
Sasuke se le acerco y lo abrazo cariñosamente.
-Feliz cumpleaños Naruto. –susurro, dándole un beso en la mejilla y alejándose para sonreírle. Naruto le devolvió la sonrisa y le agarro de las manos. Algo tímido agacho la mirada, queriendo evitar que las lágrimas salgan.
Estaba feliz, esos meses que había estado viviendo con Sasuke habían sido felices y lindos para él, todo le estaba yendo bien ahora en su vida, y por alguna extraña razón se sentía nostálgico. No sabía porque, pero sentía que no todo sería felicidad para siempre. Pero aun así, lo quería disfrutar al máximo. Aun no sabiendo cuanto le quedara de ella.
-Gracias por esto Sasuke, gracias por todo. –dijo alzando la vista y dejando salir las lágrimas al fin. Sasuke se sorprendió por eso y lo volvió abrazar para consolarlo.
-¿Qué le pasa a Naruto? ¿Acaso se puso sentimental por la sorpresa? –ironizo Sakura, sonriendo con burla.
-Naruto ha estado raro todo el día. –informo Neji, mirándola de reojo. –Y si no quieres hacerlo llorar más… No digas nada.
-¿A qué se debe eso? –pregunto Kiba acercándose, dejando a la parejita para que tenga intimidad.
-Quien sabe, pero hasta en el trabajo ha estado llorando por cualquier cosa.
-Eso ya es preocupante. –dijo Sakura cruzándose de brazos.
-¿Ahora qué te pasa? –pregunto Sasuke, sobándole la espalda y escuchándolo sollozar en su hombro derecho.
-No es… nada –susurro negando –, solo… que estoy feliz por todo… –alzo la vista –Me emocionó mucho la fiesta sorpresa. –sonrió –Eso es todo.
-Sí que eres un tonto, ¿lo sabes verdad? –sonrió secándole las lágrimas. Naruto solo asintió y volvió a sonreír.
-¿Esto acaso es un velorio? –pregunto Tenten, saliendo de la cocina con una bandeja llena de vasos. –Por favor Haku, pon algo de música. –pidió caminado hacia la mesa.
Haku se apresuró a prender la radio y puso una canción cualquiera.
Naruto se calmó y comenzó mirar con mayor determinación la decoración. Había uno que otro globo en las paredes y alrededor de la mesa, esta estaba llena de bocaditos y bebidas, miro de un lado a otro pero no vio el pastel, pero no le importó, miro la pared de enfrente y le gustó mucho el dibujo que habían puesto ahí. Con letras naranjas fosforescentes, en la parte superior decía: “Feliz Cumpleaños Naruto” en medio estaba puesto en numero 23 y alrededor estaban representados todos sus amigos en modo chibi1, sonriendo y saludando al frente, cargando un pastel que tenía como dibujo la cara de Naruto.
Este sonrió, y solo pudo atinar que el responsable de tal dibujo había sido Sai. Ya que era el mejor dibujante de todos, y era el único que podía hacer que sus dibujos se movieran como si tuvieran vida.
Solo rezaba que Sasuke le permita llevárselo, ya que lo quería tener de recuerdo.
Ya había pasado un buen rato, y varios invitados se hicieron presentes. Ino llegó acompañada por Hinata y Hanabi, Sasori hizo su aparición al rato, con un enorme paquete que entrego a Naruto con hostilidad, deseándole un feliz día, Yamato llego después, en esos instantes aparecieron Kakashi y los chicos, anunciando que le harían un show privado y solo para Naruto como regalo de cumpleaños. Neji se enojó por eso, y quiso saber quién los había invitado, a lo que Obito contesto: <<Somos amigos de Naruto, y no necesitamos invitación para venir a saludarlo. >>
Ahí se armó la pachanga. Los chicos tocaron canciones populares y de la época. Varios comenzaron a bailar, hasta Sasuke se animó a bailar un par de piezas con Naruto.
Tocaron la puerta, Naruto fue abrir, y para su sorpresa un ave echa de arcilla apareció sobrevolando en la puerta, dejo caer un gran paquete, que Naruto sostuvo rápidamente, luego vio al ave alejarse hacia el horizonte, donde el sol ya comenzaba a ponerse, y estallo, dejando ver entre explosiones y luces de colores el enorme mensaje enviado.
“Feliz 23 Cumpleaños Otooto-baka. Pásala bonito. Saludos papá, mamá y Deidara”
Varios de los invitados se asomaron a ver y se alegraron por esa sorpresa.
-Otooto-baka… no se a que me recuerda eso. –susurro Sasuke leyendo por pura suerte el mensaje, antes que este se desvaneciera en otras explosiones, formando figuras de gorritos de fiesta, serpentina, globos, signos musicales, un pastel, y por último, la silueta de los cinco Uzumaki, cada uno con el color que lo caracterizaba, juntos en un parecido abrazo familiar.
Naruto sonrió, pensando cuanto le habría costado hacer todo eso a su “queridísimo” hermano, pero se sintió feliz por un regalo así de hermoso.
Volvieron a la fiesta, y la puerta volvió a sonar. Naruto que estaba cerca la abrió y encontró un montón de paquetes de distintos tamaños en la entrada, los miro uno por uno y se sorprendió de leer los nombres de los remitentes: Gaara, Nagato, Jūgo y Karin. Se asustó al leerlos, pero igual los metió, después vería su contenido junto con Sasuke.
No puso cuanto más estuvieron bailando, hasta que Sai hizo su aparición con un enorme pastel, que en efecto, tenía la cara de Naruto dibujada en toda la cubierta.
-¡Feliz Cumpleaños Naruto! –grito dejando el pastel en medio de la mesa, y fue abrazar a su amigo. –Gaara se disculpa por no venir, le salió un trabajo de última hora y tuvo que ir. Pero igual te desea un feliz día.
-Claro, no te preocupes. –contesto igual que su amigo, gritando, ya que la música sonaba muy fuerte y no los dejaban hablar con normalidad.
-¿Y dónde está el organizador de la fiesta? –pregunto buscando con la mirada a Sasuke. –No me digas, ya lo encontré. –y se acercó hablarle.
Siguieron bailando un poco más. Sai saco a bailar a casi todos en esa casa. Y más lo hizo con Naruto por ser el cumpleañero.
La hora de soplar las velitas llego, y todos se pusieron alrededor de la mesa y cantaron la canción de cumpleaños, en todos los idiomas que se sabían e hicieron que Naruto soplara las velas, pero antes, haciéndolo pedir un deseo. El rubio soplo emocionado, y algunas lágrimas se le escaparon.
Las fotografías del momento no faltaron, como mucho menos las tomadas en grupo.
-¿Cómo se siente dejar de ser la nena del grupo, Naruto? –pregunto Sakura con burla.
Naruto se secó las lágrimas y la apunto con el dedo.
-¡Que te quede bien claro! ¡Soy Naruto Uzumaki, y soy el mejor cumpleañero y persona de todo el grupo! –grito, sonriendo como bobo, y cortando la primera rebanada de pastel.
Nadie dijo nada, y solo se dedicaron a comer.
Siguieron bailando un poco más, pero de la nada Sasuke le dijo que ya debían irse, que mañana ambos tenían trabajos que cumplir. Y sin replicar nada, Naruto cogió todo sus regalos y salieron de la casa.
Justo a tiempo. Ya que una riña se libró apenas salieron.
Tenten había invocado un montón de armas, y todas iban dirigidas a una persona: Neji. El castaño trataba de defenderse, pero la castaña invocaba más y más armas, que en vez de atacarlo a él, estaban golpeando la casa, y si no fuera porque lo esquivaban, a uno que otro invitado.
Haku salió de la cocina, furioso, y de un movimiento de la diestra, congelo a todos los invitados.
-Se puede saber… ¡qué diablos está pasando aquí! –espeto perdiendo la paciencia. Es que los ruidos le hicieron perder un momento que le costaría ganar otra vez. ¿Por qué no boto a todo el mundo antes de proponerle aquello a Yamato?
-Neji… está muerto. –tirito Tenten, apretando los dientes y mirándolo con recelo.
-Te lo puedo explicar. –pidió preocupado, mirándola con cautela.
-Muy bien, simplemente hablen, y si van a pelear… ¡se van afuera! –advirtió soltando a todos, y volviendo a la cocina a paso lento.
Todos los presentes miraban avergonzados a distintos lados, hasta que la banda comenzó a tocar un poco de música.
Neji le pidió a Tenten lo siguiera, y ambos salieron al patio.
----------------------------------------------------------------------
Naruto estaba recostado en la cama, mirando desorientado el techo, pensando en lo ocurrido en su día.
-Naruto… -este alzo la vista y miro sin mucho interés a Sasuke, que acababa de salir del baño, pero al percatarse de lo que traía puesto, lo miro con más atención. –Feliz cumpleaños. –dijo coqueto, moviendo entre sus dedos un nuevo consolador y las esposas.
-Sasuke… ¿Qué haces vestido así? –pregunto semisentandose.
-¿Qué? ¿No te gusta? –pregunto un poco preocupado, mirándose a sí mismo en el espejo.
-Pues… -lo miro detenidamente.
Sasuke traía puesto un uniforme de colegiala, de falda corta, medias largas, blusa transparente, lazos en el pecho y el parte de atrás, y estaba peinado con dos coletas.
-Estas diciendo… que deje mi orgullo de lado… ¡por las puras! –grito tirándole las cosa que traía en las manos. -¡Y yo que pensaba que sería un lindo regalo! –refunfuño, sentándose al borde de la cama.
-Si lo es… -dijo recostándose a su lado, apoyando su cabeza en su regazo. –Y te vez muy lindo. –le sonrió. –No me esperaba este regalo extra. –se alzó y le dio un beso en la mejilla. –Gracias.
-Y… ¿quieres jugar un rato? –pregunto sonriéndole con picardía.
-Pues… No me siento muy bien. –dijo arrastrándose a gatas por la cama hasta llegar a la cabecera y echarse de costado. –Me duele mucho la cabeza.
-Estas bromeando. –se le acerco, lo giro, y se sentó en su regazo. Naruto negó cerrando los ojos. Sasuke le toco la frente. Y en efecto, tenía calentura. -Y ahora, ¿Por qué estas mal?
-No lo sé, pero todo el día me he sentido mal. –aseguro, cogiendo la mano de Sasuke y guiándola por todo su rostro, hasta llegar a sus labios, donde la beso tiernamente.
-¡¿Eso quiere decir que hice todo esto por las puras?!
-No te enojes. –lo miro arrepentido. –No quería malograr tu sorpresa. Lo siento.
-Pero igual podemos divertirnos. Tú déjame todo a mí. –susurro acercándose a su cuello y besándolo delicadamente.
-Lo siento, Sasuke, pero no tengo ganas. –susurro apenado. Sasuke suspiro, pero igual siguió con las caricias.
-No importa, yo hare que te den ganas. –dijo comenzando a descender con cada beso, desabrochando lentamente la ropa de Naruto.
-Bueno, si lo logras está bien. –musito dejándose hacer. Agarrando delicadamente las manos del azabache.
-----------------------------------------------------------------------------
-¿Quién es ella? –pregunto aguantándose las lágrimas. -¡Merezco saber quién es! –exclamo apretando los puños.
-Sé que esto no debió pasar así pero… yo… lo siento Tenten. –dijo cabizbajo, evitando mirarla.
-¡Yo creyendo como una estúpida que era tu prima, pero no, el caballero estaba con otra chica, engañándome a mis espaldas, y para colmo, la invita a la fiesta y se pone a besuquear con ella, delante de todos los presentes! ¡Qué suerte que Naruto no vio nada de eso! ¿Te imaginas? ¡El pobre chico presenciando que su mejor amigo le es infiel a su novia, y en su propia fiesta!
-¡No menciones a Naruto, que él no viene al caso! Y en verdad lo siento Tenten, no quería que esto acabara así.
-¡Si no querías que acabara así hubieses sido más hombre y hubiese terminado antes conmigo! ¡Y no esperar que te viera como lo hice hoy!
-En verdad lo siento, y tal vez tengas razón, pero como decírtelo, como decirte que termino contigo por…
-¿Por quién? Tengo derecho a saber. ¡Quiero saber por quién me dejas! –reclamo ya sollozando. –Anda Neji, dime quien es aquella que gano ahora tu corazón.
-Lo siento, pero se acabó. –hablo, pasando por su lado, caminado hacia la casa. –Y disculpa que no te diga quién es, pero, no lo entenderías, y estoy seguro que me matarías antes que verme con esa persona. –volteo a verla. –En verdad lo siento Tenten. –una lagrima rodo su mejilla. –Pero ten en cuenta que si te quise, y si no funciono fue porque tus celos pudieron más que tu racionalidad. Trate de que todo siguiera bien pero ya no pude más, ¡alégrate tus celos ganaron! Y si te dejo no es por que quiera, y mucho menos por la otra persona, te dejo… porque a pesar de que lo intentemos nunca va a funcionar. –se secó las lágrimas traicioneras que comenzaron a salir. –Y es mejor acabarlo aquí, y lamento que acabara así, pero es mejor terminar ahora que no nos hacemos tanto daño, que acabar heridos y odiándonos.
-Sabes que es injusto, pero lo acepto. –se secó las lágrimas. –Y tienes razón, lo nuestro… no daba para más. –voltio a verlo. –Pero terminar así no era la manera.
-Lo sé, pero en parte es lo mejor. –volteo a encararla. – ¿Crees que algún día volvamos a ser amigos? –pregunto más calmado.
-Lo dudo Neji. –suspiro. – ¿Sabes que me da más cólera?
-¿Qué?
-Que otra haya podido lograr en ti algo que nunca pude.
-¿Y es?
-Hacerte sonreír y mostrarte tal cual eres. –dijo con sonrisa fingida, aguantándose las ganas de llorar por aquella despedida.
-Tú también lo hiciste en su momento. –dijo con una pequeña sonrisa.
-Sí, pero la malogre con mis inquietudes. Y no supe ver que a la única que querías era a mí.
Estuvieron en un breve silencio, que a ambos les pareció eterno.
-Gracias por todo Neji. –dijo Tenten caminando hacia la casa. –Gracias…
-Igualmente. Gracias por todo Tenten… -dijo girándose, mirando la hermosa luna, que esa noche estuvo presente, y sería su confidente, en sus amores penitentes.
-------------------------------------------------------------------------
-Naruto. ¿Qué haces vestido así? Sé que Tenten dijo que vinieran vestidos como quisieran pero… ¿de una chica?
-No digas nada, Sakura. –hizo un puchero. –Sasuke me obligo a venir vestido así. ¡Y no te rías! –reclamo al ver a la Haruno aguantándose la risa.
Ya había pasado una semana desde la fiesta de Naruto, y Tenten para distraerse un poco, hizo una fiesta en su nuevo departamento. Ya que tras la ruptura con Neji, necesitaba distraerse y alejarse de todo que le recordara a él. Así que por eso se mudó, y decidió hacer una fiesta también, para celebrar su reciente soltería.
Y ahí se encontraban varios de los conocidos y amigos de la castaña, celebrando junto a ella su reciente libertad.
-Esta fiesta pudo haber sido mejor organizada, ¿no lo creen? –pregunto Sasuke, parándose al lado de Naruto, y mirando curioso a Sakura, que lo miraba asombrada. -¿Qué? –pregunto mirándola curioso.
-Se te ve genial con el cabello largo. –dijo fascinada, sorbiendo un poco de su bebida.
Sasuke se sujetó el cabello, y si, estaba algo largo, le llegaba a los hombros; y por alguna razón… no le incomodaba que estuviera así.
-Gracias. –contesto al alago con una pequeña sonrisa.
-Que bien que vinieran chicos. –dijo Tenten acercándoseles, mirando curiosa al Uzumaki. –Naruto… ¿Por qué de chica?
-Haaaaa ¡te dije Sasuke! ¡Te dije que esto estaba mal! –grito desesperándose. -¿Por qué hacerme venir así? ¡Eres cruel! –sollozo, y se alejó corriendo hacia los servicios higiénicos.
-Está muy sensible, ¿verdad? –indago Sakura, mirando de reojo al azabache.
-No. Solo se siente humillado. –comenzó a caminar a paso lento. –Voy por él.
-¿Esos dos están bien? –pregunto Tenten un poco preocupada.
-Quien sabe. –contesto la Haruno un poco distraída.
-Eres cruel. –recrimino Naruto, mirándolo entrar atreves del espejo.
-¿Y tú no fuiste cruel conmigo?
-¡Solo porque ese día no tuvimos nada!
-Ese día… ¡Va ser una semana que no tenemos nada, Naruto!
-Es que no me he sentido bien. Pero no por eso vas hacerme venir vestido de niña.
-Es una con otra. –sonrió de lado. –Yo ya me vestí así, ahora te tocaba a ti. –Le alcanzo una toalla. –Ahora salgamos, que se están comenzando a preocupar por ti.
-No quiero salir así. –recibió la toalla y se secó la cara. –Va ser vergonzoso. –susurro.
-Nadie va sospechar que eres un chico. Estas tan lindo que cualquiera te confunde con una chica. –garantizo, acomodándole las coletas falsas.
-¿Lo dices enserio?
-Sí, nadie se va dar cuenta. –le dio un besito. –Ahora salgamos, que nos están esperando.
Naruto sonrió y tomados de la mano salieron del cuarto de baño. Y además… ¿quién sospecharía? Si con ese vestidito de encaje negro de falda corta, chaqueta, zapatillas y coletas, nadie podría sospechar, si pasaba como una chica más de aquella fiesta. Claro, los únicos que lo reconocerían serían sus amigos pero… ellos no dirían nada.
Ya había pasado un buen rato, y entre bailes y pláticas, Sasuke reconoció claramente, a los dos chicos que lo miraban insistentemente.
-Que desgracia. Veo ex novios… -le susurro a Naruto.
-¿En plural? –volteo a ver en la dirección que miraba el azabache.
Y en efecto, ahí estaban, parados contra la pared, el pelinegro y el albino, platicando con algunos invitados.
-Kuro Zetsu y su hermano, Shiro. –los miro de reojo. –Los gemelos.
-¿Qué hacen ellos aquí? –pregunto sorprendido, mirándolos fijamente.
-Tal vez deberías preguntarles. –susurro Sakura, que estaba junto a ellos.
Ambos se les acercaron, y llamaron su atención.
-Hola chicos. –saludo Sasuke, indiferente, viéndolos con recelo.
-Por dios, es Sasuke Uchiha. –dramatizo irónicamente Kuro, mirándolo con burla.
-Que adorable. ¿Viniste solo? –pregunto indiferente, Shiro, mirándolo atentamente.
-Está conmigo. –hablo Naruto, airado y apretando los puños.
-Vaya Sasuke, ¿de cuándo aquí tu saliendo con chicas? -pregunto el pelinegro, mirando de pies a cabeza a Naruto.
-¡No soy una chica! –reclamo el rubio, mirándolos con odio.
-No sabíamos tus gustos por los travestis, Sasuke. –bromeo el albino.
Sakura se palmo la cara con la mano, aun no creyéndose lo que escucho, Naruto se ruborizo y agacho la cabeza avergonzado, y Sasuke los miro escéptico, aun no entendiendo porque dijeron semejante estupidez.
-Esto está mal. –musito Naruto, apretando los puños y temblando de ira.
-No porque ahora lo veas vestido de chica, quiera decir que es travesti, Shiro. –contesto Sasuke con desdén, mirándolo indiferente.
-Discúlpanos. Es que aún no nos adaptamos a las costumbres de esta ciudad. –se excusó Kuro, mirando con sorna a Naruto. –No sabíamos que tu amiguito tenía esa… clase de gustos.
-¡Ya basta! –grito alzando la vista y mirándolos con odio. –Están aquí para pelear, ¿verdad? –interrogo, alzando los puños.
-¿Pelear? ¿Qué somos barbaros? –pregunto con una pequeña sonrisa Shiro.
-Además, si nos ven a nosotros golpeando a una chica, ¿te imaginas lo que pensarían? –espeto Kuro, haciéndole unas señas con la mano a su hermano
-No entiendo, entonces… ¿Qué hacen aquí? –pregunto crédulo, Naruto, mirando como el peliblanco hacia signos con las manos y de su espada salió un clon idéntico a él. -¿Un clon? –susurro desconfiado, retrocediendo unos pasos.
Todo paso rápido. El clon corrió rápidamente hacia el Uzumaki y se le echo encima, haciendo que este caiga y terminara de bruces, pero rápidamente se puso de pie; y comenzó una pelea entre esos dos, que se extendió por casi todo el lugar.
-Tienes algo de estilo estos días Sasuke, muy chic. –comento atento, Shiro, mirándolo detenidamente.
-Es atuendo de una fiesta casual. –contesto con menosprecio, siguiendo con la vista la pelea que libraba Naruto en esos momentos.
-Luces… saludable. –dijo Kuro, sonriendo de lado.
-No recuerdo haberte visto con el cabello así de largo. –comento Shiro, mirándolo receloso. Sasuke algo desconfiado volteo, y se les quedo viendo.
-Bueno, yo aún necesito tomar aire. –Sakura se agarró al brazo de Sasuke. –Así que hablaremos con ustedes en otra ocasión, caballeros. –dijo cortes, y algo apresurada alejo a Sasuke de ahí.
-No creo que hayamos sido presentados… debidamente. –comento Kuro, mirando con desdén a la pelirosa.
Sakura le dio una última ojeada a Naruto, que seguía golpeando y ser golpeado por el clon, y decidió salir al balcón, aun jalando a Sasuke del brazo.
-Así que… -comenzó hablar después de un breve silencio. Había dejado que Sasuke se calmara un poco, ya que antes de salir parecía alterado. –has salido con unos completos idiotas. –comento, mirando atentamente como Sasuke encendía un cigarro.
-Aja, pero ¿y quién no? –pregunto, llevándose el cigarrillo a los labios y prendiéndole fuego.
-Dímelo a mí. –susurro cansada, apoyándose en el barandal.
-¿Quieres fumar? –le pregunto ofreciéndole un cigarro.
-No soy buena. –contesto con una pequeña sonrisa.
-¿El estará bien? –se giró y miro preocupado hacia el interior.
Los presentes adentro gritaban y alentaban a que continuara la pelea. En esos momentos, Naruto la estaba viendo difícil, ya que su oponente le estaba ganando en ventaja y fuerza.
-Vamos es Naruto Uzumaki. –alentó Haruno, con una sonrisa. –No porque este vestido de chica le va ir mal.
-Tienes razón.
-La banda en vivo ya está por tocar. –anuncio una chica, que se asomó por la puerta corrediza.
-Wow, música en vivo. –comento Sakura. –Al parecer no ha escatimado en gastos. –sonrió de lado, pensando cuánto dinero habría gastado su amiga.
-Oye, ¿ustedes no tenían una banda? –pregunto curioso.
-Que no has escuchado. Estamos grabando un disco. –dijo lo último tratando de imitando la voz de Neji. Puso su mano en forma de pistola sobre la sien, se disparó drásticamente, y cayó muerta dramáticamente. Sasuke solo sonrió de lado al ver tal acción.
-Hablemos de eso. –propuso de repente, tratando de armar una plática con la chica.
-Solía tocar la batería tres veces por semana. Es vida y estructura, pero ahora… -suspiro –llevamos grabando por meses.
-Tal vez, podrías tomar clases de taijustu2 o algo así.
-Sí, o simplemente podría comenzar una serie de asesinatos. –contesto con sonrisa sádica y morbosa. El celular de Sasuke sonó. –Dime que es una excusa para podernos escapar. –suplico.
-No…, es un mensaje de Sai. Soy como su secretaria personal para sus pequeñas y perturbadoras notas para Naruto. –le dio el celular. Sakura leyó curiosa.
<<Hola amigo!!! Estoy ebrio :D Espero estés bien Naruto =U >>
-Aww… que adorable.
-¿Tú crees? –pregunto fingiendo entusiasmo.
-No. –contesto con frialdad. Sasuke sonrió de lado.
-Y… ¿Por qué no tocan ustedes? –pregunto curiosa, Hinata.
-Ya te dije. Rompimos.
-¡Sex Bob-Omb Rompió! –grito alarmada, luego cayó en cuanta de su error, y bajo la cabeza apenada.
-¿Qué? No. Tenten y yo rompimos.
-Como por decimoquinta vez. –susurro preocupada.
A pesar de no ser nada, Neji, estaba en la fiesta, y no precisamente como invitado, sino como chaperón de Hinata, que si había sido invitada, y solo podría asistir si Neji la llevaba.
En esos instantes estaban viendo como la banda ecualizaba sus instrumentos. Hinata se estaba sobresaltando al ver a Naruto pasar volando de un lado a otro, siendo seguido y golpeado por un chico de cabellos blancos.
-Aun, estas encaprichada con él. –dijo Neji, mirando de reojo a su prima.
-¡No, yo no! –se sobresaltó al ver caer a Naruto fuertemente contra el suelo. –El se ve feliz con Sasuke-kun. –se llevó la mano al pecho. –Y yo… también soy feliz. –susurro apenada.
-Sabes que él te engaño, ¿verdad?
-Bueno, sí pero…
-El salía contigo porque se le hacía fácil. –la pequeña sonrisa que tenía Hinata desapareció –Y de pronto cuando Sasuke apareció… ya sabes lo que paso.
-Yo, ¿era fácil? –pregunto en un susurro arraigado.
-Él los engaño a ambos, y míralo actuar como si nada, es mi amigo pero, vamos… -sorbió de su bebida. –Como sea, ya pasaron como seis meses desde que rompieron, ¿verdad?
-No, son siete. Siete meses… el lunes…
-Bueno, ¿vez? Tienes derecho a saber…
-¿Sasuke-kun sabe sobre esto? –pregunto pensativa y decaída. Neji dejo de beber su cerveza y la mira con lastima.
Naruto prosiguió golpeando al clon repetidas veces. Ya no le importaba nada, las coletas habían desaparecido, se le había robo parte del vestido, y aun así continuo con esa pelea. Ya su contrincante estaba tendido de bruces en el piso, recibiendo sus últimos golpes de gracia, hasta que se rindió, dejándose golpear un poco más, antes de desaparecer en un estallido.
Naruto Uzumaki ganó la partida…
Todos los presentes le celebraron con aplausos y uno que otro silbido.
-¿Qué eso es todo? ¿No hay premio esta vez? ¿Eso quiere decir que gaste mis energías por las puras? –suspiro –Pelear con clones apesta. –refunfuño cruzándose de brazos, buscando a Sasuke con la mirada, hasta que lo encontró en la mesa de bocaditos. – ¿Ya podemos irnos? –le pregunto cuando se paró a su lado. Sasuke lo analizo, y se dio cuenta de que no podría salir así a la calle.
--------------------------------------------------------------------------
Departamento de Sasuke. Al día siguiente.
Naruto estaba poniendo los platos usados en el lavaplatos, cuando Sasuke apareció de la nada y lo abrazo por la espalda.
-Buenos días, Naruto. –le dio un beso en la mejilla -¿Qué tal amaneciste hoy?
-¿De cuándo aquí tu tan cariñoso? –se giró para verlo, y lo vio poniéndose los zapatos.
-No sé, hoy estoy con ganas. –sonrió –Bueno, voy a entregar esos libros –se puso de pie y cogió su mochila -,no te olvides de tomar tus pastillas, ya le di de comer al gato, lavas los platos –le dio un beso -, yo regresare con la comida.
-Está bien. –le tomo de la mano. –No tardes mucho.
-No, regresare rápido. Nos vemos. –salió de la casa.
Naruto suspiro y se sentó frente a la mesa, y se percató de que Sasuke había olvidado su celular. Curioso lo tomo y comenzó a buscar un juego, lo encontró, y se puso a jugar, pero de la nada le comenzó agarrar sueño y se quedó dormido ahí sentado.
La puerta sonó y algo asustado fue abrir.
-¿Sai? –susurro al ver a su amigo en la entrada. -¿Qué haces aquí? –pregunto abriendo la puerta.
-Hola Naruto. Vine a ver como estabas, me comentaron que estabas enfermo. ¿Ya estás bien?
-Más o menos. Sasuke me ha estado dando unas pastillas que me han hecho pasar el malestar. Pero pasa. –se hizo a un lado.
-No, solo vine de paso. –se excusó. -Pero ¿seguro que estas bien? Te vez cansado y pálido.
-¿Tú crees? –sonrió –Es que no pude dormir bien ayer.
-¿Qué habrás estado haciendo?
Y los recuerdos le vinieron de súbito. Al principio un simple coqueteo y besos, luego el en la cama, Sasuke sobre el arremetiendo sin darle tregua a nada, luego el pidiendo por más y que no se detuviera.
-¡Naruto! –y este volvió a la realidad. –Debes ir a ver a un médico. Me preocupas amigo.
-Sí, sí, Sai, ¡tengo algo que hacer! Nos estaremos viendo. –y cerró la puerta. Camino hacia la mesa y se sostuvo de ella, casi se desmaya por el mareo que le dio al recordar aquel recuerdo tan subido de tono. Miro el celular, y el juego que había dejado en pausa le volvió a llamar la atención y siguió jugando un poco más.
-¡Estoy en casa! ¿Cómo estuvo tu día? –pregunto parándose a lado del rubio y mirando atentamente lo que hacía. Este se sobresaltó, y de un salto se puso de pie.
-Hola… Ya regresaste. –puso el celular en la mesa.
-¿Estabas jugando videojuegos en mi celular? –pregunto fingiendo indiferencia.
-No… (Si) –contesto nervioso.
-Lavaste los platos. –dejo su mochila en la mesa y se comenzó a quitar la chaqueta.
-Estaba por hacerlo. –susurro, y rápidamente abrió el grifo.
Naruto estaba nuevamente recostado en la cama, escuchando el agua de la ducha caer. El gatito, sigilosamente se subió a la cama y se recostó sobre su pecho, comenzando a ronronear.
-Naruto, ¿podrías poner a cargar mi celular? –pidió desde la ducha, Sasuke.
-Claro, ¿Dónde está el cargador? –quito al gato de su encima y se puso de pie.
-Creo que está en el primer cajón de la cómoda.
Naruto se acercó y lo abrió lentamente, miro su contenido, y se exalto al leer entre líneas un sobre que tenía como destinatario a Orochimaru.
-¿Lo encontraste?
Naruto rápidamente saco el cargador y cerro el cajón con brusquedad.
-Sí, ¡no hay problema! –contesto con fingida voz, tratando de ocultar su nerviosismo. Por alguna extraña razón, no le gustó nada descubrir esa carta.
-¿Debería cortarme el cabello? –pregunto Sasuke, terminando de doblar la ropa limpia.
-Oh… como quieras. Para mi te vez bien así. –contesto distraído, jugando con el gatito. –Tienes un cabello muy hermoso. –Sasuke sonrió de lado.
-¿Te gustaría que me lo deje crecer largo? Parecido al de Menma Shiin.
-Tú te vez lindo con cualquier estilo. Y no sé porque mencionas a Menma Shiin ahora.
-¿Alguna vez piensas en él? –se acercó al ropero y comenzó a guardar la ropa.
-¿Por qué hacerlo? Si ahora solo pienso en ti. –lo voltio a ver. -¿Tú piensas en tus ex?
-Solo me trae curiosidad que lo olvidaras así de rápido. Es como un poder tuyo.
-¿Rápido? Si ya pasaron como dos años. –se paró a su lado. – ¿Te preocupa algo?
-No. Sabes, así con el cabello largo me parezco mucho a mi hermano Itachi.
-¿Tu hermano mayor?
-Sí, mira… -le entrego una foto en la que aparecía el mayor, sosteniendo un libro y con gafas puestas, mirando sorprendido a la cámara. –Se la tome de improviso, por eso esta con esa cara y las gafas aun puestas.
-Guau… Sí que se parecen mucho. –dijo mirando alternativamente la fotografía y a Sasuke. -¿Algún día lo conoceré? –le pregunto devolviéndole la foto.
-¿Quién sabe? Tal vez.
Naruto se volvió a sentar en la cama y siguió jugando con el gatito, Sasuke se acercó a la ventana, y miro con cierta nostalgia hacia la distancia.