¿Un mal entendido?
Todos se encontraban en el gimnasio solo faltaba Kuroko y Kagami, Riko, la entrenadora de Seirin, se comenzaba impacientar por la tardanza de los dos.
- ¿Dónde están eso dos idiotas?- pregunto a nadie en particular y en ese momento como si los hubiera invocado aparecieron los dos y para su sorpresa Kuroko estaba cojeando.
- ¿Dónde han estado ustedes dos llegan veinte minutos tarde y porque estas cojeando Kuroko?
- Es culpa de Kagami-kun- hablo Kuroko monótonamente.
- Mi culpa quien es el que caminaba peor que una tortuga- hablo Kagami molesto volteándolo a ver.
- Pero eso fue tu culpa-dijo el peli azul también volteándolo a ver también.
En ese momento todos los chicos de Seirin se comenzaron acercar para escuchar la pelea.
- ¿Por qué es mi culpa?- el peli rojo lo miro sin entender.
- Porque por ti es porque estoy cojeando- dijo Kuroko juntando sus cejas un milímetro señal que estaba molesto.
En ese momento si Riko hubiera estado bebiendo algo lo hubiera escupido, miro a los dos con sorpresa y noto que el peli azul tenía unas marcas rojas en el cuerpo.
-También es tu culpa esto-hablo el 11 de Seirin señalando las marcas.
Ahora si todos estaban sorprendidos.
- Hey chicos que fue lo que ocurrió- pregunto Hyuga acomodándose los lentes; dándose una idea de la situación.
- Todo es culpa de Kagami-kun- volvió a repetir Kuroko como si eso explicara todo.
- Te dije que estaba caliente-Kagami se iba molestando cada vez más con su sombra.
- Hey Kagami ¿qué fue lo que hiciste a Kuroko?- pregunto Riko con una idea formándose en la cabeza y sonrojándose en el proceso.
- Tsk solo le dije que se quedara a dormir en mi casa-contesto sin mirarla, tenía la mirada fija en Kuroko parecía que tenías un duelo de miradas.
Todos de Seirin abrieron los ojos sorprendidos, ninguno dijo nada hasta que…
- USTEDES DOS DURMIERON JUNTOS- gritaron todos.
Los dos se voltearon, Kagami con un gran sonrojo y Kuroko con un sonrojo imperceptible, pero que el pelirojo pudo notar muy bien.
- No…no dormimos juntos-hablo nervioso Kagami.
- Kagami-kun es un mal mentiroso-suspiro Kuroko.
- Entonces sí lo hicieron-dijo sorprendida Riko igual que los demas.
- Si- hablo Kuroko sin ninguna emoción.
- Kuroko…-Kagami miro a su sombra irritado ¿acaso no veía la situación?
- Entonces ustedes dos tuvieron…- Riko no termino de preguntar porque Kuroko la interrumpió.
- No- Kuroko le corto a Riko, aunque no pareciera se sentía incomodo con toda esa situación.
- ¿Ah?- fue la respuesta inteligente de todos.
- Entonces por que estas así-pregunto Izuki.
- Ayer por la noche me levante para ir al baño y me termine tropezando con una silla que Kagami puso ahí
- Ves eso fue tu culpa por que no ves por donde caminas.
- Y las marcas-continuo Kuroko ignorando a Kagami – fue porque Kagami-kun abrió la ventana de par en par y los mosquitos me picaron.
- Como iba a saber yo eso hacía mucho calor no pensé que se iban a meter tantos mosquitos.
Todos de Seirin los vieron para luego negar con la cabeza, por muy amigos que sean, a pesar de las discusiones, no creían que llegarían a tener ‘’esa relación’’ entre los dos, Kagami era impulsivo y se molestaba muy rápido Kuroko en cambio analizaba más las cosas y más tranquilo podía decirse que eran como el día y la noche o luz y sombra por eso era imposible que los dos estén juntos, aunque todos olvidaron que los polos opuestos se atraen.
-Kagami darás treinta vueltas al gimnasio, Kuroko tu sentaras ya que no puedes correr, pero cuando estés mejor prepárate-Riko hablo con una sonrisa aterradora asustando a los dos chicos.
Los dos la vieron irse y luego se quedaron mirando Hey Kuroko vienes hoy a mi casa.
-Solo si quitas esa silla y cierras la ventanas.
- De acuerdo, pero igual terminaras cojeando y con marcas- dijo con una sonrisa malvada Kagami -Con tal que le hagas tu no tengo problemas-Kuroko sonrió vio a Kagami darse media vuelta para irse a correr por su castigo.