Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

The Only One por Smile Gazerock

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Soy novata en estas cosas de escribir así que espero que les guste y eso...

Notas del capitulo:

Supongo que tendrá otro capítulo más (?) el que aparecerá cuando me encuentre inspirada y disfruten del fic.

Siempre es lo mismo. Todas son iguales. Comienzo una relación con una chica y luego terminan con palabras como “ya no es lo mismo que en un principio”, “pensaba que eras otra clase de chico” y la última y lejos la más repetida “eres demasiado frío pareciese que no te gusto” y lamentablemente para ellas eso es verdad. Ninguna me gusta. No hay nadie que me atraiga emocionalmente por el momento, o al menos aun no me doy cuenta. Pero eso no me tiene tan preocupado hasta el momento.

 

Debido a que las chicas me persiguen no tengo muchos amigos, y eso es algo que no me preocupa en lo absoluto ya que tengo un excelente amigo, el único, que se llama Uke Yutaka aunque es conocido por todos como Kai, ¡ah! Y por cierto me llamo Takanori Matsumoto, pero prefiero que me digan Ruki. Bueno como les decía, solamente necesito a Kai porque él es un excelente amigo y siempre está allí para escucharme y darme consejos. En realidad le tomo más atención a lo que él dice  antes  de lo dice mi madre, e incluso llega al grado que le consulto si salgo o no con una chica ya que siempre son ellas las que se me declaran.

 

-“viene Kai”- pensé y no pude evitar que una enorme sonrisa se implantara en mi rostro. Dos pasos. Eso fue lo que duro mi sonrisa. Ya que apenas di dos pasos con la intención de acercarme a Kai, cuando la que era mi novia  se cruzo en frente mío desembocando en que una expresión seria y molesta se instalo en mi rostro.

 

-¿qué quieres?-

 

-pasar tiempo con mi novio, que otra cosa querré-

 

-si mal no recuerdo, fuiste tú la que me pidió un tiempo para distanciarnos y así pensar mejor –

 

-lo sé, pero ya recapacite y quiero seguir junto a ti y pasar más tiempo a tu lado, así que me sentare contigo en todas las clases-

 

-vamos, sabes perfectamente que yo siempre me siento junto a Kai-

 

-pero que importa, ¡maldición parece que él fuera tu novio!- frente a eso me quede un rato en shock, ¿cómo era eso?, seguramente eran sus celos. Salí de mi retardo cuando me percate que la figura de Kai se encontraba cada vez más cerca de mí.

 

-vamos dime, ¿quieres hacer un escándalo justo frente a la universidad?- y de este modo me encamine hacia Kai pero ella sujeto fuertemente mi brazo -¿ahora qué?-

 

-Takanori Matsumoto, te advierto. Si te vas ahora, hasta aquí llega nuestra relación- yo me limite a observarla con un rostro neutro y serio.

 

-adiós y espero que tengas un buen futuro- hable con una sonrisa por demás hipócrita mientras que me disponía a irme, ya que Kai ya se había percatado de mi presencia y me sonrió a modo de saludo. Iba a dirigirme hacia Kai pero de nuevo me agarro el brazo y me obligo a voltearme.

 

-¿vas a terminar así como así?- me pregunto con los ojos llorosos.

 

-yo no pienso seguir engañándome- le comente sin ninguna expresión.

 

-¡¿engañarte de que estás hablando?!- prácticamente me grito.

 

-de que nuestra relación hace mucho que dejo de ir bien y no pienso seguir con esta farsa, como si todo fuese color de rosa, porque no lo es- respondí cortante mientras que ella me quedo mirando con los ojos abiertos desmesuradamente.

 

Decidí beneficiarme de su asombro y escaparme en lo que durara este, pero a penas y di un paso cuando me volteo. Quería abofetearme lo sabía de antemano. Como dije en un principio todas las mujeres que me buscan son iguales y este es otro aspecto que se repite, así que decidí cerrar mis ojos y esperar pacientemente el golpe. Pero este no llego, y a cambio recibí una sorpresa.

 

-dime ¿qué mierda pensabas hacer?- Kai se encontraba agarrando la mano de aquella chica aunque para serles sincero no la veía muy bien –responde, que querías lograr con esto- fue cuando Kai levanto el brazo de la chica y me percate que traía unos anillos con púas. Lo que hubiese rasgado mi rostro si me hubiera golpeado.

 

-y tú ¿qué haces aquí?, no debiste entrometerte-

 

-claro que tuve que entrometerme o esto hubiese terminado peor- respondió bastante serio, como pocas veces lo había visto.

 

-peor para él pero mejor para mí-

 

-te equivocas, si algo le hubiese ocurrido a Ruki ten por seguro- dijo mientras se acercaba al oído de aquella chica que me atreví a llamar mi novia -que no vivirías lo suficiente- termino en un susurro aterrador que con suerte fui capaz de escuchar.

 

-¿me estas amenazando?-

 

-no solo estoy contándote lo que te hubiera ocurrido de no haber llegado a tiempo, o tu futuro si tomas la decisión incorrecta- comento con una sonrisa fingida y frente a esto ella solo dio un bufido y se retiro.

 

Supongo que esta vez no  fue tan similar a las anteriores. Y lamentablemente fue en mi contra.

 

-Kai ¿estás bien?- me atreví a preguntarle cuando emprendimos el camino hacia nuestra clase.

 

-esa es mi pregunta, pero yo estoy bien-

 

-yo igual, no me sucedió nada- comente con una sonrisa.

 

-gracias a mi- comento algo molesto.

 

-desde cuando eres tan egocéntrico- le pregunte a modo de burla.

 

-no es ser egocéntrico, lo que sucede es que si yo no hubiese llegado a tiempo tu rostro se encontraría todo desfigurado- me reprocho.

 

-lo siento- respondí despacio.

 

-Ruki no se trata de eso. Cuantas veces no te he dicho que no trates a las chicas como si fueran todas iguales-

 

-yo no digo que TODAS las chicas son iguales, son solo las chicas que me buscan-

 

-Ruki sabes a lo que me refiero-

 

-pero si ella fue la única que tuvo un comportamiento distinto, y solo uno, todo lo otro fue exactamente igual-

 

-Ruki te pueden hacer cosas peores, no te entregues tan fácilmente-

 

-está bien- accedí derrotado.

 

La clase fue otra más. Bastante normal, con exámenes en los que me fue horrible y claramente a Kai le fue excelente. Estoy pensando seriamente en la idea de que me enseñe. Luego de terminada la clase fuimos a comer algo bajo un árbol. Estábamos hablando de nuestro fin de semana cuando se me ocurrió proponérselo.

 

-Kai ¿puedes enseñarme la materia?- le pregunte completamente avergonzado.

 

-claro- respondió alegre -¿qué es lo que se te dificulta?-

 

-para serte sincero, todo- hable desviando la mirada.

 

-momento, ¿todo?- yo me limite a asentir –está bien, pero debemos juntarnos en mi casa-

 

-por supuesto

 

-Ruki, yo te digo una hora y tu llegas no esperare ni un solo minuto más escuchaste-

 

-sí, muchísimas gracias Kai- comente con una de mis mejores sonrisas.

 

-tranquilo para algo estamos los amigos- no sé porque en ese momento sentí un malestar en mi pecho. Como un sabor amargo en mi boca –bueno ¿Qué te parece mañana a las dos de la tarde?-

 

-claro, por mí no hay problema-

 

El resto de las clases fueron normales y me divertí como hace tiempo no lo hacía gracias a que ya no salía con esa estúpida. Y hablando de ella intento cruzarse en nuestro camino pero se fue de inmediato cuando Kai la fulmino con la mirada. Debo admitir que eso me causo mucha risa. Salimos juntos y me despedí de él ya que lamentablemente vivimos en edificios distintos pero no se encuentran tan lejos. Llegue a mi departamento y fui corriendo a mi armario para buscar la tenida perfecta para mañana. Pensaba sorprender a Kai llegando media hora antes. Cuando encontré la tenida perfecta la deje ordenada, fui a cenar y me dirigí hacia mi cama para dormir.

 

Al día siguiente me levante y fui a prepararme una tostada con un café. Debo decir que me he vuelto un adicto a este liquido, es como si fuese hecho para mí. Luego de lavar lo que utilice fui a darme un baño. Después me vestí con la tenida que ya había escogido, fui a verme en el espejo y no me veía nada mal. Me aplique un poco de perfume, arregle mi cabello y ya me encontraba listo. Agarre mi bolso y me encamine al departamento de mi amigo.

 

Iba por la calle y las chicas y chicos volteaban a verme, lo que me confirmaba que había hecho una buena elección en cuanto a mi atuendo. Sin embargo cuando me estaba acercando al edificio donde vivía Uke fui capaz de divisarlo afuera de este acompañado de una chica bastante linda. La opresión en mi pecho y el amargo en mi boca volvieron pero ahora con mayor intensidad. La sensación de que iba a llorar se hizo presente, pero lo peor de todo fue el no saber porque me ocurría lo anterior. Di la vuelta rápidamente y comencé a marcar el número de Kai, ya que sabía que si le mandaba un mensaje no lo leería.

 

-¿Ruki?-

 

-K…Kai em no p…podre juntarme hoy lo s…siento, eso cuídate adiós-

 

-espera Ruki, ¿Por qué? ¿Estás bien?- y finalice la llamada.

 

Camine rápidamente. Sabía que no aguantaría mucho. Sentía como el mobil vibraba en mi bolso pero no lo tome en cuenta, y el maldito elevador como nunca se estaba tardando demasiado. Cuando al fin llego a mi piso salí corriendo a lo más que podían mis piernas hacia mi departamento y apenas entre las lagrimas se soltaron haciendo que el maquillaje que llevaba en mi rostro se corriese. El teléfono del departamento no paraba de sonar pero no tenía el ánimo de contestar. Respire hondamente fui por un vaso de agua bebí un poco y cuando estuve más tranquilo decidí contestar.

 

-Ruki ¿Dónde estabas?-

 

-en mi departamento- respondí como si nada.

 

-¿y por qué no respondías?-

 

-estaba en el baño Kai, por dios pareces mi madre-

 

-es que me asustaste cuando me dijiste que no vendrías-

 

-Kai detente ¿sí?, estoy bien, perfecto ¿de acuerdo?, ahora sigue hablando con la chica debe de estar a…aburrida- y nuevamente finalice la llamada.

 

No pude evitar sentirme como un cobarde. Me dirigí hacia mi habitación, me lancé a mi cama, y agarre una manta que se encontraba por ahí para de este modo ahogar mis llantos, los que se hacían cada vez más fuertes. Permanecí así por unos pocos minutos hasta que decidí que debía detenerme. Fui a lavarme el rostro y quitarme el maquillaje, intentando eliminar todo rastro de lágrimas. Luego me dirigía a prepararme un café cuando el timbre sonó. Me acerque a la puerta y la abrí sin ver de quien se trataba. Y allí estaba el chico que había provocado mis lágrimas.

 

Ahora que lo pienso ¿por qué fue que llore?, ni siquiera yo soy capaz de entenderme.

 

-K…Kai ¿q…qué haces a…aquí?- pregunte luego de haber salido de mi estupor y de mis pensamientos.

 

-Ruki aquella chica...-

 

-Hey no es necesario que me des explicaciones, aunque la próxima vez que tengas novia podrías avisarme- comente bajando mi mirada.

 

-lo sabía- habló mientras que una sonrisa triunfal se posaba en su rostro y yo solo me limite a hacer una mueca al no entender –sabía que te habías confundido-

 

-Kai quieres hablarme claro, no te entiendo-

 

-aquella supuesta novia no es nada más que mi prima y a ella le atraes tu- en ese momento me asfixie con mi propia saliva, mientras mi cerebro intentaba procesar lo que recién me había revelado.

 

-¿t…tú prima y…yo le gusto?-

 

-así es- contesto simple, mientras que yo no pude evitar pensar en cómo era posible que me sucediese esto –además si es que tuviese novia serías el primero en enterarte- y otra vez mi pecho dolió, pero con toda mi fuerza lo ignore –entonces ¿estudiemos?-

 

De esta manera empezamos a estudiar entre risas sin embargo era capaz de entenderle. Hicimos una breve pausa en la que yo me encontraba comprendiendo lo último que me había enseñado Kai con un lápiz entre mis labios, porque tenía la manía de hacer esto cuando algo se me complicaba un poco. La verdad se me hacía extraño que Kai no me llenase de preguntas aunque su silencio me facilitaba bastante las cosas. Luego de un par de minutos más fui capaz de entender y cuando lleve mi vista hacia Kai me percate de que me estaba viendo fijamente lo que provoco que me sonrojara, así que mordí el lápiz por el nerviosismo lo que a la vez provoco ruido, que logro que Kai despertara de su ensoñación.

 

-¿ya terminaste?- me pregunto como si nada a lo que yo me limite a asentir -¿entendiste?- volví a asentir –que bien, entonces ¿Qué opinas?-

 

-¿qué opino de qué?- me atrevía a preguntarle

 

-¿que si crees que seré un buen profesor?-

 

-¿ahora quieres ser profesor?- le pregunte al tiempo que ponía una expresión de no entender.

 

-¿por qué pones esa expresión?-

 

-es que cada día sales con que quieres tener otra profesión y déjame recordarte que estamos en la universidad y no puedes estar cambiando así como así- comente esta vez con un tono divertido.

 

-no me daba cuenta- comento algo apenado, la verdad se veía muy tierno. Pero que mierda estaba pensando, necesitaba salir inmediatamente de allí para despejar mi mente.

 

-¿quieres algo para beber?-

 

-un jugo está bien-

 

-ok, vuelvo enseguida- salí a paso acelerado hacía la cocina donde lave mi rostro repetidas veces pero lamentablemente no había ningún cambio en mi cabeza, así que me decidí por llevar el jugo para Kai y para mí. Cuando llegue deje el vaso en la mesa justo enfrente de Uke.

 

-gracias- pronuncio con simpleza.

 

-no es nada, es más yo debería agradecerte por ayudarme a estudiar-

 

-eso no es nada para algo están los amigos- y nuevamente la maldita opresión en mi pecho se hacía presente, tenía ganas de llorar lo que se lo adjudique a la impotencia de no saber por qué me sentía así y además se me dificulto el respirar.

 

-c…claro- apenas y hable –voy al baño- dije con la intención de salir huyendo en un susurro.

 

-¿te encuentras bien?- pregunto preocupado ante lo que yo me limite a asentir.

 

Cuando llegue al baño comencé a llorar en voz baja logrando que el nudo que tenía en mi garganta se disipase, pero no así el  dolor en mi pecho. Luego de estar más relajado decidí salir creyendo que ya me encontraba mejor pero cuando mi vista se poso en su figura el dolor regreso y aun más potente.

 

-Ruki ¿te encuentras bien?-

 

-la verdad es que no me encuentro muy bien, podríamos dejarlo para otro día-

 

-por supuesto, tu salud esta primero- de esta manera acaricio mi mejilla de manera tierna lo que logro que una corriente eléctrica recorriese mi cuerpo haciéndome estremecer.

 

-a…adiós Kai, cuídate-

 

-adiós y recuerda que te quiero- y así se fue con una enorme sonrisa adornando su rostro mientras que yo me sentí morir.

 

Cerré la puerta y corrí a esconderme debajo de las cobijas de mi cama mientras que mi corazón no paraba de latir aceleradamente, era increíble como aquellas últimas palabras habían logrado todas estas reacciones en mí; sin embargo no sabía que significaba. Finalmente me quede dormido.

 

Al día siguiente no logre despertarme a la hora y preferí no ir a la universidad. Aunque para serles sincero no quería ir para evitar toparme con Kai y es que  las sensaciones que sentía cuando estaba a su lado me asustaban mucho, por eso también decidí faltar otros dos días y aparecerme para dar el examen. Por supuesto tuve que enviarle un mensaje a Kai avisándole que me encontraba en un pequeño viaje y para mi sorpresa respondió casi inmediatamente con un "entiendo espero  que te cuides".

 

Me estaba descuidando, me encontraba todo el día recostado en mi cama, casi no iba al baño para asearme, era un asco y sobre la comida, bueno no comí nada. Solo me preocupaba de hidratarme y estudiar para el examen. Después de todo Kai se esforzó por enseñarme y lo menos que puedo hacer es esforzarme para que me vaya mejor.

 

Con pereza apague el bendito despertador que no dejaba de sonar. Había decidido seguir adelante como si nada. Tenía una leve idea sobre qué era lo que me ocurría y si mis sospechas eran ciertas había decidido resignarme a ser su mejor amigo y apoyarlo cuando tuviese una novia. Estaba convencido de que se me iba a hacer difícil pero debía intentarlo por el bien de nuestra amistad. Sería un proceso que llevaría tiempo pero lo lograría. En fin me levante y me dirigí al baño. Para ser más específicos al espejo. Ese rectángulo en la pared que llevaba tiempo sin ver. De este modo se reflejo mi desgracia. Me encontraba pálido, demacrado, mis ojos rojos e hinchados por el llanto.

 

Me observe por unos segundos más cuando decidí darme un baño para relajarme y así lo hice. Me mire nuevamente en el espejo y por lo menos ahora mis ojos se veían un poco mejor pero las ojeras y el tono pálido de mi piel se negó a desaparecer de mi rostro. Con pesadez me dirigí a la cocina me hice unas tostadas con café, no me podía arriesgar a desmayarme. No quería preocupar a Kai, porque sabía muy bien que él sería el único que se iba a preocupar por mí.

 

Luego de haberme acabado mis tostadas y café me dirigí a mi habitación para cambiarme ropa. Me puse una de mis mejores tenidas, debía demostrar que nada había ocurrido conmigo en otras palabras fingir, mentir. Cuando ya estuve listo fui a maquillarme, hice maravillas con el maquillaje para que no se notara mi demacrado rostro y finalmente me decidí a salir de mi departamento pero no sin antes enviarle un mensaje a Kai, diciéndole que iría a la universidad y nuevamente me respondió inmediatamente que necesitaba decirme algo importante.

 

Cuando llegue Kai me recibió con un efusivo abraso, el cual gustoso correspondí. Llego la hora del examen y se me hizo bastante fácil gracias a la ayuda de Kai. Cuando lo acabe y salí del salón fui arrastrado por un ansioso Kai.

 

-¿qué sucede Kai?- pregunte sorprendido frente a su reciente acción.

 

-¿recuerdas que te envié un mensaje donde te dije que tenía algo importante que decirte?-

 

-claro-

 

-bueno yo, tengo novia-

 

Lo dijo con una enorme sonrisa pero yo la ignore, ignore todo a mí alrededor, a lo único que le preste atención fue a mi corazón rompiéndose. Allí mis dudas se disiparon y me quedo más que claro que lo que sentía por Yutaka era algo más fuerte que la amistad. Con el paso del tiempo me había enamorado de mi único amigo, de la única persona que se intereso por mí y me cuido. Pero como dije anteriormente debía apoyar a Kai y seguir actuando simplemente como su amigo.

 

-eso es sorpresivo, pero dime ¿quién es la afortunada?-

 

- es Himeko-

 

-es perfecta para ti- dije sinceramente porque era verdad aquella chica era perfecta, linda inteligente tierna, y Uke es el chico perfecto, sin duda alguna son el uno para el otro, mientras que yo era un mierda.

 

-gracias Ruki, te llevaras excelente con ella-

 

Y de esa manera comenzó mi infierno, por más que fuera un excelente actor no podía engañar a mi corazón y el dolor que este sentía. Con ellos me mostraba feliz pero cuando entraba en la comodidad y soledad de mi departamento comenzaba a llorar desgarradoramente pero eso daba igual mientras pudiese estar a su lado.

Notas finales:

Ese fue mi primer intento de fanfic, espero que les gustase, se perfectamente que mi ortografía es horrenda así que si encuentran por allí alguna falta me avisan (?), me gustaría un review, crítica, palabras de aliento (?), tomates, cualquier cosa es bien recibida.

 

bye <3


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).