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To The Moonlight por Cony Min

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Notas del fanfic:

Hello! Este es el primer fanfic que escribo, el cual está dedicado a una amiga que ama el BaekSoo, por lo que lo hice con mucho cariño para ella, y ahora me gustaría compartirlo con todas las personas a las que les gusta esta couple, espero que lo disfruten. ^^

Era medianoche y el chico miraba por décima vez en cinco minutos la hora, la cual creía que no avanzaba nunca, pero por supuesto, ese era sólo su parecer, debido a que el insomnio lo estaba atacando, y como no estaba acostumbrado a él, no sabía muy bien qué se supone que debía hacer. Se movía de un lado para otro, cambiando cada cuatro segundos la posición en la que recargaba su cuerpo sobre la cama, como si de esa manera pudiese encontrar algún ángulo en el que el sueño por fin lo reclamara, sin embargo, por más que lo hacía, esto no sucedía. También llegó al extremo de contar ovejas, sí, había llegado hasta tal punto, pero nada, todo era en vano.

Totalmente aburrido y desesperado por no poder caer en el mundo de la inconsciencia, se puso de pie, ya resignado y bajó a la cocina del departamento, procurando no hacer mucho ruido, pues aunque él no pudiese dormir, eso no significaba que quisiera despertar a sus amigos, no, no era tan egoísta como para hacer eso.

Cuando llegó allí, pudo ver una figura que estaba de pie junto a la ventana, la que observaba cómo las gotas de lluvia caían y sostenía con su mano derecha, una taza. Al dar unos pasos más hacia adelante, pudo ver ahora una espalda, pero no era cualquiera, sino que era una que conocía bastante bien, la cual le pertenecía a un chico al que sólo le ganaba por un centímetro de estatura.

De improviso, la idea de jugarle una pequeña broma lo asaltó, así que aprovechó que éste estaba de espaldas a él y lo sorprendió por atrás, sin embargo, no obtuvo la reacción que hubiese esperado: una de horror, sino que el chico frente a él ni siquiera se movió ante su tacto, sólo se limitó a soltar un pesado suspiro y llevó la taza a sus labios, como si de ese modo se quisiera ocultar.

— ¿Qué es lo que sucede KyungSoo?

—Nada… es sólo que no puedo dormir.  No me asustaste porque escuché tus pasos desde arriba— Respondió KyungSoo.

—Vamos…Te conozco, tú no eres así, no conmigo, ¿crees que me vas a engañar? —Volvió a insistir, esperando obtener esta vez una respuesta, pero una verdadera.

—Ahora no BaekHyun, por favor, no me siento bien.

Byun sabía que D.O podía ser demasiado cerrado consigo mismo, tanto así que ni siquiera a él le permitía traspasar aquella fortaleza que se construía en su interior, en la cual se refugiaba cuando le pasaba algo malo y por lo general eso siempre sucedía cuando el chico tenía alguna discusión con ChanYeol.

—Es por él que estás así, ¿verdad?, ese chico de nuevo te trato mal, ¿no es cierto? —. Inquirió el mayor.

KyungSoo sólo pudo desviar su vista hacia la ventana, perdiéndose de esa manera con las gotas de lluvia que morían al chocar contra la acera, siendo esa la forma en la que BaekHyun pudo confirmar sus sospechas.

— ¿Hasta cuándo vas a permitir que te pase a llevar?, ¿qué no entiendes que debes hacerte respetar? —. Comenzaba a alzar un poco su voz, claramente molesto por la situación, pues por muy amigos que fueran todos, no soportaba cuando el chico frente a él estaba sufriendo, justo como estaba sucediendo en ese momento.

D.O seguía con la mirada clavada hacia afuera, no obstante, sintió cómo una suave calidez comenzaba a recorrer sus mejillas, sin tardar en descubrir que se debía a que silenciosas lágrimas empezaban a caer, por lo que se giró por completo, dándole la espalda a su compañero. Junto con ello, carraspeó con suavidad para poder hablar y que su voz se escuchara normal.

—Baek, ve a dormir, ya es muy tarde y mañana tienes clases, no deberías olvidar eso... ¿quieres que te prepare un chocolate caliente?, eso te ayudará…

—Idiota…—. Respondió de inmediato el más alto y cortó  la distancia que se interponía entre su figura y la contraria, mas sólo se quedó allí, de pie—. Guardarte los problemas terminará por hacerte daño y sabes que no quiero eso…Siempre me contaste todo lo que te preocupaba, ¿por qué ya no?

Con esas simples palabras, D.O no aguantó más y se volteó, encontrándose de lleno con el cuerpo del mayor, a quien no dudó ni un segundo en abrazar con fuerza, tanta que ni siquiera pudo pensar en que quizás podría ser demasiada, pues en ese momento no la podía controlar.

BaekHyun por otro lado, sintió que el chico estaba siendo demasiado fuerte, sin embargo, no dijo nada al respecto, pudiendo sólo corresponder el abrazo con una mano, mientras que la otra la llevó hacia el cabello contrario, comenzando a acariciar lentamente éste, tal como sabía que al menor le gustaba, porque sí, no existía nadie que lo conociera mejor que él. Cerró sus ojos y canalizó su poder en su mente, haciendo que la luz de la cocina se apagara, de modo que sólo quedarían iluminados por el suave resplandor de la luna, el que se colaba por la ventana que estaba justo frente a ellos.

BaekHyun no tuvo la necesidad de volver a insistir en el asunto, pues el menor comenzó a hablar por propia voluntad, en un tono tan bajo de voz, que estaba seguro que nadie aparte del chico a quien se aferraba, podría escucharlo. En su voz también se podía percibir una mezcla entre tristeza y desgano, como si ya estuviese tan, pero tan cansado, que todo le daba igual, sin embargo, Baek sabía que el chico a quien más quería en el mundo, estaba sufriendo, podía darse cuenta de ello con mucha facilidad.

   Hace tres días, nos quedamos ensayando como todos los jueves en la sala principal de la empresa, estábamos todos a excepción de ti y los demás chicos del M, quienes estaban ocupados en la grabación de un programa y bueno, tú…tú estabas enfermo en cama, saliendo de aquella horrible gripe que te atacó

Baek sintió cómo un profundo suspiro se arrancó de sus labios y percibió que el chico apretaba con fuerza sus dientes, por lo que lo estrechó un poco más hacia su cuerpo, queriendo demostrarle en aquel gesto que él ya estaba recuperado, que no había nada de qué preocuparse, no por el momento…

—Por suerte esta vez no fue nada grave, pero de todas maneras el manager quiso que descansaras, así que yo me propuse el esforzarme al máximo en la práctica para poder terminar pronto e ir a verte…pero nada resultó como lo había planeado.

Después de ensayar veintiuna veces nuestra parte de “Wolf”, supuse que ya era suficiente, así que sin decir palabra, comencé a guardar mis cosas, de modo que los demás comenzaron a hacer lo mismo. Cuando ya tenía todo listo, alguien agarró mi bolso, lo abrió y tiró todas las cosas al suelo, ante lo cual simplemente pude quedarme viéndolo anonadado, incapaz de creer el actuar del chico, ¿qué era lo que le pasaba? Extrañamente, cuando quise hablar, descubrí que ningún sonido salía de mi boca, mientras que por parte de aquel alto chico, éstas brotaban sin cesar.

— ¿Qué crees que estás haciendo?, ¿por qué induces a que los demás chicos te sigan en tu huída?, ¿acaso piensas que la práctica ya terminó?, ¿tan mediocre eres? —. Eran algunas de las preguntas que me escupía ChanYeol en la cara.

—Ahora recoge todo eso y regresa a bailar. Ah, y más te vale que los demás también vengan. —. Terminó de decir el delgado y alto chico, sin embargo, en ese momento intervino SuHo.

— ¿Quién eres tú para empezar a dictar órdenes así sin más?, yo soy el líder, así que al único que los demás chicos van a escuchar es a mí y no porque yo lo diga, sino porque ellos mismos lo aceptan y lo prefieren. —. En la sala se había plantado un silencio sepulcral, el que era roto sólo por las voces de ambos chicos.

—Ahora el líder pretende que le hagamos caso, después de que tú mismo seguías como un perro faldero los pasos de KyungSoo cuando planeaba huir de sus obligaciones y responsabilidades. ¿Pretendes que siga a un “líder” así? —. Replicó ChanYeol con sorna, acercándose más al de mayor autoridad, de modo que pocos centímetros separaban sus cuerpos.

—No sé qué bicho te ha picado, pero la práctica ha llegado a su fin por hoy, estamos todos cansados y así no se puede trabajar, ¿no puedes entender eso? —. El tono de SuHo era sereno, pero a la vez serio, digna actitud de un buen líder que intentaba manejar una  situación complicada.

ChanYeol no dijo nada más, se había quedado sin argumentos, así que prefirió aprovechar la ventaja de ser más alto que el contrario, por lo que terminó de acortar la pequeña distancia que los separaba y con su cuerpo empujó el ajeno hasta hacer que éste se estrellara contra la blanca pared de la habitación, generando un golpe seco que hizo que SuHo inevitablemente soltara un leve quejido.

—Agradece que no hay ninguna vela prendida, porque de lo contrario, yo mismo hubiese incendiado la estancia y tu estúpida práctica realmente se habría acabado—. Dijo Yeol escupiendo las palabras frente al rostro del líder, a quien cogió de la camisa y empujó con más fuerza, presionando con brusquedad su pecho.

Por su parte, los demás miembros observaban la escena sin ser capaces de reaccionar debido a la impresión que el actuar de ChanYeol ejercía en ellos, pero yo no podía permitir que atacasen así a uno de nosotros, así que aprovechando el poder con el cual fui dotado, me armé de coraje y caminé hacia ellos, con pasos firmes y agarré con fuerza a ChanYeol del hombro, obligándolo a voltearse hacia mí y haciendo que soltara a SuHo, siendo en ese momento en el que los demás despertaron de aquella especie de letargo y me siguieron, haciéndose cargo del líder.

 

—Miren quien viene aquí, si no es más que el súper D.O, el que juega a ser el más fuerte de todos—. Pronunció con aquel tono burlesco en su voz, encarándome y sacando discretamente un encendedor del bolsillo de su pantalón, del cual yo no fui consciente hasta que lo tuvo prendido frente a mi rostro.

 

En ese momento, BaekHyun llevó su diestra hasta el rostro de KyungSoo, queriendo cerciorarse de que éste estuviera en perfectas condiciones, mas con ese acto, el chico realizó una leve mueca de dolor, pero se apresuró a negar con la cabeza y alzó su diestra para tomar con ella la mano ajena, la que besó con suma ternura

—Estoy bien, no fue una quemadura demasiado grave.

Fue lo único que dijo antes de proseguir con su relato.

 

Los chicos se habían ido, llevándose con ellos a SuHo, pues querían comprobar que estuviera bien, por lo que ahora estábamos los dos solos en medio de la sala de ensayo.

 ­— ChanYeol, vuelve en ti, tú no eres así…vamos, ¿qué te está pasando? Pero intentar dialogar con él era imposible, puesto que el chico parecía tener una necesidad imperiosa de descargar su ira sobre algo o  alguien, y como yo era el único que le servía para lograr su cometido, me convertí en su objetivo o esa fue la razón que creí, hasta que el contrario por fin empezó a hablar de nuevo, no obstante, no me di cuenta cuando me tuvo acorralado contra su cuerpo y la pared, de modo que sentía todo su peso sobre mí.

—No entiendo cómo es que puedes ser unos de los favoritos de SuHo, no eres del todo sobresaliente en nada, sólo eres capaz de cantar bien, pero a la vez eres fácilmente reemplazable, ni siquiera eres guapo y si no fuera porque tuviste la suerte de que te otorgaran el poder de la fuerza, no tendrías nada, nada digno de lo cual alardear…entonces ¿por qué? ¿por qué tienes más amigos que yo?, ¿por qué los miembros te quieren más a ti? ¿por qué te buscan a ti cuando necesitan el consejo de un amigo?, es injusto, es asquerosamente injusto, pero eso se va a acabar pronto, porque yo me encargaré de que quedes tan irreconocible y feo, que nadie te querrá así…

Cada palabra que el más alto pronunciaba, en lugar de generarme miedo, sólo me daban pena, lástima…porque ahora me daba cuenta que eso no podía ser más que envidia. Aunque también debo decir que en ese momento me sentí mal, porque sí, las cosas que decían de mí, y más si las pronunciaban aquellos a los que consideraba mis amigos, me afectaban de sobremanera, por lo que no costó que esas oraciones me golpearan con fuerza en mi interior, lo que hizo que perdiera por completo la guardia, de modo que el contrario aprovechó para asestarme un fuerte puñetazo en la boca del estómago, dejándome por breves segundos sin aire y doblándome inevitablemente por la mitad, por lo que ahora sólo veía las largas piernas del mayor.

 

KyungSoo dejó de relatar para poder mirar los ojos del chico al cual todavía abrazaba, pese a que a su alrededor reinaba la oscuridad, pero gracias a la luz de la luna que se colaba por la ventana, pudo encontrar sus pupilas.

— ¿Pero sabes, BaekHyun?, lo peor de todo no fueron los golpes que siguieron de aquél que te conté, sino que fue el hecho de no poder hacer nada al respecto, sabiendo que podía haberme defendido, tanto con palabras como con acciones, no pude hacerlo…para mí era imposible el sólo hecho de pensar en que podía hacerle daño a unos de mis compañeros, a un amigo…

Baek no dijo nada, pues la rabia e impotencia que sentía que corría por sus venas no se lo permitía, pero poco a poco se fue convenciendo de que debía calmarse, tanto por él, como por el chico que tenía entre sus brazos, a quien procuró abrazar con suavidad, terminando por buscar con su rostro, el oído derecho contrario, lugar en el que se inclinó para comenzar primero a tararear el ritmo de una canción que había llegado a su mente mientras escuchaba el relato, y no era otra más que aquella que precisamente cantaban él y los tres miembros implicados en la narración de KyungSoo.

D.O comenzó a sentir un leve cosquilleo en su oído, el que provocó que se estremeciera con suavidad, sin embargo, no se apartó en ningún momento, y mucho menos cuando el mayor empezó a tararear y posteriormente a cantar con su delicada y dulce voz, aquella canción.

—Baby don't cry tonight eodumi geochigo namyeon

Baby don't cry tonight eobseotdeon iri doel geoya

Mulgeopumi doeneun geoseun nega aniya kkeutnae mollaya haetdeon

So baby don't cry cry nae sarangi neol jikil teni…[1]

Era como si Baek comprendiera a la perfección lo que él estaba sintiendo, ante lo cual al darse cuenta, no pudo evitar que nuevas lágrimas comenzaran a caer, pero éstas ya no eran el reflejo de una profunda tristeza y decepción a raíz de la pelea, sino que era debido a que en ese momento fue completamente consciente de los sentimientos que llenaban  su corazón cuando pensaba y compartía tiempo con el chico que se mantenía cantando con suavidad cerca de su oído.

 

—Ne nun soge gadeuk cha oreuneun dalbit woo~

Sori eobsi gotong soge heulleo neomchineun i bam…[2]

 

Al cabo de unos minutos su voz se extinguió, pero KyungSoo sintió que unos suaves labios besaban cada uno de sus pómulos, llevándose con aquel suave contacto, las lágrimas que allí corrían. No había la necesidad de llenar el silencio que ahora reinaba en la cocina del departamento, pues ambos se sentían muy cómodos estando en aquellas posiciones.

BaekHyun por un lado, estaba muy seguro de sus sentimientos, con los cuales llevaba viviendo hacía muchos meses atrás, pero por otro, KyungSoo se sentía un poco confundido, porque si bien era cierto, siempre le tuvo un cariño especial al pequeño chico que estaba a su lado, él creía que no se podía tratar de otra cosa que no fuera una profunda amistad, además de que ambos eran chicos, por lo que no, en definitiva, no podía existir otra cosa entre ellos, sin embargo, esa noche se había dado cuenta de muchas cosas mientras hablaba con él, y entre ellas estaba el notar que su corazón aumentaba el ritmo de sus latidos cada vez que estaba Baek a su lado.

Al comprender aquello, KyungSoo sintió como si una fuerza lo atrajera más hacia el cuerpo de BaekHyun, y a su vez, éste sintió una leve descarga eléctrica en su interior, por lo que ahora sólo eran milímetros los que separaban sus cuerpos, y por ende, sus rostros también estaban demasiado cerca, lo que generaba que sus labios quisieran fundirse en uno solo, mas en ese preciso momento, ambos sintieron un ruido, pero no cualquiera, sino que eran unos pasos, unos rápidos pasos que anunciaban la llegada de alguien que lo más probable es que estuviera colérico.

Pese a que no querían deshacer el enlace de sus cuerpos, aquello había logrado sacar a los chicos de la tranquila atmósfera en la que estaban envueltos, no obstante, mantuvieron sus manos unidas cuando el culpable de aquel ruido, entró en la cocina, lanzándose de inmediato sobre BaekHyun, quien cayó de golpe al frío suelo de baldosas.

ChanYeol ahora estaba sobre Baek, a quien tomó de las muñecas para inmovilizarlo y sin pensarlo dos veces, le plantó un beso con furia.

A KyungSoo casi se le salieron los ojos de sus cuencas al ver aquella escena, la que estaba iluminada nuevamente por las luces de la cocina, aunque él no se había percatado de cuándo éstas estuvieron encendidas, aunque le parecía lógico que había sido Baek quien se ocupó de ellas.

En un primer momento, D.O sintió que sus músculos no le obedecían cuando se quiso mover, pero al ver que Baek se debatía desesperadamente para zafarse del agarre de ChanYeol, ya no dudó más, y de manera decidida y sin detenerse a medir su fuerza ni a pensar en las consecuencias, se acercó a los chicos y con la diestra agarró al agresor de la camisa, pero al notar que éste también se resistía, lo tomó por el cuello con la ayuda de su otra mano, liberando así al mayor, pero más indefenso de todos.

—Con  BaekHyun no, a él no lo tocas, ¿me escuchaste?—. Pronunció con furia KyngSoo.

—Pues mira que ya es demasiado tarde, sus dulces y tiernos labios me pertenecen—. Se mofó ChanYeol con una sonrisa irónica en el rostro.

—Imbécil, esto no se quedará así —. Sentenció D.O.

Acto seguido, le asestó un puñetazo tan, pero tan fuerte a ChanYeol en el rostro, que de inmediato cayó al suelo inconsciente, noqueándolo fácilmente. Pero KyungSoo no se quedó tranquilo con eso, sino que siguió golpeando al chico, en el rostro, en el cuerpo y terminó por darle uno en el estómago, y hubiese seguido así, pero sintió que una mano atrapaba la suya en el aire, justo cuando iba a golpear de nuevo.

D.O supo de inmediato de quien se trataba, por lo que se quedó inmóvil y dejó que el dueño de aquella mano lo guiara y lo acunara entre sus brazos, mas él estaba en una especia de trance, sin ser capaz de asimilar lo que acababa de hacer. Tampoco fue consciente del punzante dolor que debería estar sintiendo en sus manos, ni de la sangre que manchaba sus nudillos, ni siquiera se preocupó de cerciorarse de si el chico en el suelo seguía con vida, de hecho, eso era lo que menos le importaba, pues la rabia lo consumía por dentro.

La diestra de BaekHyun comenzó a acariciar la mejilla de KyungSoo con tranquilidad, como si nada hubiese pasado, y fue sólo eso lo que hizo que éste volviera en sí y desesperado comenzara a hacerle preguntas al mayor.

 — ¿Estás bien?, ¿necesitas algo?, ¿quieres que haga desaparecer a ese idiota?

Baek sólo negó con su cabeza, y pese a que estaba bastante asustado y afectado por esa situación, sabía que alguien debía mantener la calma, pero el nudo que se había formado en su garganta no lo ayudó a contener sus lágrimas, las cuales brotaron sin cesar.

KyungSoo por fin volvió en sí, de modo que al ver llorar al chico al cual amaba, lo estrechó contra su cuerpo con cuidado, como si de un niño pequeño y delicado se tratara, intentado así darle el consuelo que ambos necesitaban.

—Ya pasó…yo estoy aquí contigo, todo estará bien, tranquilo… —. Susurró D.O con ternura cerca del oído del chico.

—Me siento sucio…esto es horrible KyungSoo…

—Deja que yo lo arregle…

KyungSoo se separó ligeramente del chico, pero sólo para hacer que sus rostros quedaran el uno frente al otro, de modo que así acortó la pequeña distancia que separaba sus bocas y unió sus labios con los del contrario, en un beso puro, con el cual procuraba limpiar de la memoria del chico, aquel desagradable episodio recién vivido, así como también, demostrarle y demostrarse a sí mismo, que ya estaba listo para asumir sus sentimientos, pues no era fácil el aceptar que estaba enamorado de alguien de su mismo sexo, pero esa era su realidad, una que por lo demás, le encantaba…

 

 


[1]Bebé, no llores esta noche – después que la oscuridad pase

Bebé, no llores esta noche – nada de esto habrá pasado

No eres tú la que tendrá una vida corta

Así que, bebé, no llores esta noche – porque mi amor te protegerá

 

[2]La luz de la luna llena tus ojos

Esta noche pasa silenciosamente el dolor

 

Notas finales:

Ojalá les haya gustado, cualquier duda, sugerencia o reclamo, será muy bien recibida, pues con ellas me permitirán ir mejorando en mi escritura. ¡Gracias por leer! ^^


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