Shopping Day
La música resonaba entre las paredes mientras miles de prendas comenzaban a volar del closet para terminar su camino entre la cama y el suelo. Cada prenda era revisada meticulosamente para terminar siendo rechazadas al igual que las demás. La paciencia se le empezó a agotar poco a poco a medida de que el armario quedaba vacío provocando que la frustración se apoderara de él
- Ji, ¿has visto mi…?- una chaqueta estilo militar aterrizó en la cara del intruso acallándolo de inmediato mientras intentaba quitársela
- Lo siento Dae- rio el peli naranja intentando desenredar el cierre (zipper) del cabello del ángel- no te vi llegar- se dirigió a su computadora bajándole el volumen a la música
- Esto es un desastre- la mirada de Daesung se posó en los montones de ropa esparcidos sin cuidado por la siempre ordenada habitación del líder- ¿pasó un huracán y no me di por enterado?- preguntó riendo mientras se apoyaba del marco de la puerta
- Aaalgo así- volvió al armario pero al notar que no quedaba prenda colgada se dejó caer al suelo con violencia- no tengo nada que colocarme- lloriqueo tirando una camisa hacia el lado
- ¿Y el millón de prendas esparcidas no sirven?- sugirió sonriendo burlón Daesung tomando unos pantalones ajustados para doblarlos de forma mecánica
- Estoy eligiendo mi atuendo para los MAMA, Dae- escuchó un resoplido por parte del ángel haciendo que se girara a verlo- no me había fijado que tienes el cabello marrón otra vez- notó algo sorprendido
- Esta vez tiene reflejos de color- sonrió tomándose un par de cabellos- al parecer a mi estilista le aburrió el plata que me había colocado
- Te ves bien-sonrió apoyando los codos en las piernas para poder dejar descansar su cabeza
- El camaleón también se ve bien- rio Dae por el nuevo look del líder de la boyband- aunque me agradaba el blanco de “Who you”- una sonrisa se le formó entre los labios mientras miraba hacia el vacío closet- Bueno… ¿Qué me estabas diciendo de la ropa?- el mayor de los dos lo miró con una ceja arqueada para preguntar de que hablaba riéndose al momento de su propio descuido
- Ah, sí. Que estoy buscando algo para ponerme en los MAMA pero no encuentro nada adecuado
- Valla sí que te preocupas por tu imagen- Daesung se agacho tomando más ropa para doblar
- Por supuesto, siempre con todo el estilo- sonrió ayudando a recoger las prendas del suelo
- Yo no me complico tanto, deberías relajarte, eso solo te hace mal. Además tenemos estilista, se supone que se encargan de eso ¿no?
- Es que quiero verme extra bien, este año debemos brillar- Daesung miró fijo al líder que se sumía en su imaginación preparando todo para el show. Una carcajada se le escapo cuando se lo imagino con estrellitas en los ojos con tanta emoción
- ¿De qué te ríes? La imagen del grupo es importante- un pequeño puchero se le formó entre los labios mientras se cruzaba levemente de brazos- y me gustaría encargarme personalmente de eso
- Aunque en realidad siempre te encargas de eso- dijo en un susurro colocándose el jockey que ocupo en el Inkigayo con Cl cantando R.O.D
- No me estás ayudando de mucho- Ji fingió enojo quitándole el jockey con gracia
- Lo sé, lo sé… lo siento, es que estoy un poco cansado también. Estos días libres me han venido como anillo al dedo
- A ti más que nadie, ya que los tienes todos ocupados- rio Ji tomándole las manos a Daesung llenas de joyas brillantes
- Pesado…- Daesung se dio la vuelta riendo dirigiéndose a su habitación.
La casa estaba extrañamente en silencio lo que le incomodaba un poco. Se tiró en su cama y prendió el notebook para colocar algo de música que llenara el ambiente mientras se colocaba boca arriba con los brazos cruzados por debajo de la nuca. Las primeras notas comenzaron a sonar provocándole una gran sonrisa en el rostro. Era extraño sentirse incómodo por el silencio, cuando muchas veces era lo que quería, pero en realidad no tenía mucha gracia si se conseguía cuando los chicos no estaban. Estaba acostumbrado a ver a TOP en el sillón de su habitación o en el del living leyendo o conversando animado con Taeyang y Ji, escuchar las bromas y peticiones infantiles de Seungri, tal vez una o dos travesuras que siempre sacaban las risadas de todos al ver que uno de ellos había caído, o ver los bailes improvisados que sacaba Taeyang en su habitación… los ojos le comenzaron a pesar poco a poco sumiéndolo en un sueño liviano
- ¡se me ha ocurrido una excelente idea!- exclamó el peli naranja entrando a toda velocidad a la habitación de Dae tirándose encima de él- ¡Oh! Te habías dormido, lo siento- el menor lo miró con una ceja arqueada ¿De verdad creía que con él encima podía seguir durmiendo?
- Tranquilo, apenas había cerrado los ojos- sacó una mano de su nuca para restregarse con suavidad los ojos
- ¡Entonces perfecto!- volvió a decir emocionado sentándose levemente encima de Dae mirándolo desde arriba- se me ha ocurrido lo que quiero usar para los premios, pero no lo tengo
- Me suena a compras- Dae se incorporó levemente rodando los ojos mientras sonreía- suerte para encontrar algo que te guste, que contigo las compras son de horas y horas.
- Y por eso me acompañarás tú- Ji posicionó el índice en el pecho del peli marrón sonriendo ampliamente
- ¡¿Qué?! No Ji- se quejó Dae haciendo fuerza con los brazos para sentarse con dificultad debido a la posición del rapero quedando a solo centímetros de su rostro
- Si, si Dae- subió las caderas levemente facilitándole el trabajo a Daesung- ya lo tengo todo planeado
- No quiero ir. Quiero descansar un poco estos días
- ¿Te niegas a la petición de tu líder?- haciéndose el enojado se puso de pie mirando con los brazos cruzados a Daesung
- Es que Ji, yo quería jugar al… ahora que me acuerdo a eso fui a tu habitación… ¿sabes dónde está mi juego? Quería sentarme a jugar un rato con la consola pero no lo encontré
- Oh no- con prisa le tomo el brazo atrayéndolo hacia él- me acompañaras a comprar
- ¡Pero Ji!- se quejó el ángel intentando huir
- Si me acompañas te daré algo
- No quiero regalos, Ji. En otro momento te acompañaría pero hoy no quiero- ¿En realidad lo acompañaría? Me sabe a qué no…
- No me abandonaras ¿verdad?- le hizo un puchero gracioso tironeándolo hacia fuera de la habitación
- Es que te demoras demasiado en elegir ropa… ¿por qué no vas con alguno de los chicos?
- Por si no te has dado cuenta estamos solos- rio Ji tomando sus cosas para salir- es mejor que te coloques unas gafas y un gorro si no quieres estar rodeado de fans al salir
- Me refería a que esperaras por uno de los chicos- suspiró pesado viendo como el dragón se “disfrazaba”
- ¿¡Qué!? ¿Por tres días? No lo creo- sonrió al notar que ya estaba por ganar la batalla. Se colocó unos lentes (gafas) de sol chequeando su imagen en el espejo- Además- continuó- si voy con TOP, se aburre. Taeyang suele dejarme botado probándome la ropa y me gusta recibir opiniones
- ¿Y Seungri?
- ¿El panda? Se compraría todo lo que yo me compro- rio poniéndole un jockey al castaño
- ¿Aún no se le quita esa manía?
- Solo un poco, pero aún lo hace
- ¿Entonces yo…?
- Digamos que aunque estuviesen todos te lo hubiera pedido igual
- ¿Significa que no tengo opción?- rio Dae resignado arreglándose bien el jockey
- Te lo compensaré, lo prometo- sonrió victorioso tomando su móvil y sus llaves para salir- ¿Vamos?
- Tu billetera- el menor le paso el bultito café yéndose para su habitación- me coloco los lentes y salgo
- ¡Así me gusta!
El castaño resignado se dirigió a su habitación para poder disfrazar su cabello, aunque considerando que todas buscarían al chico de los cabellos plata podía estar tranquilo, sin embargo iría con Ji y a Ji lo reconocen en cualquier parte, están tan acostumbrados a sus cambios que jamás dudan en que ande diferente al día anterior o como en la presentación pasada. Sonrió para sí mismo convenciéndose que sería divertido y que tal vez si aportaba demorarían menos y estaría en casa durmiendo en unas horas más. Tomó las llaves de la casa y bajo a la primera planta (primer piso)
- ¿Nos vamos?- preguntó Dae viendo al líder sentado en un sillón esperándolo
- Pensaba que nos fuéramos a pie- comentó éste incorporándose
- ¿Cómo pretendes traerte las bolsas?- el castaño le mostró las llaves sonriendo
- Toda la razón D-lite
- Vamos, yo manejo- sonrió saliendo de la casa. Ambos subieron al vehículo con ligereza y el motor comenzó a ronronear despacio al momento que Daesung metió las llaves- ¿Adónde?
- Pienso en algo exclusivo, ahí encontraré lo que quiero- Ji lo miró sonriente abrochándose el cinturón
- Eso me trae a la memoria un solo lugar- suspiró Dae poniéndose el cinturón también para partir- no sé cómo me has convencido de venir, no saldremos de allí al menos en tres horas- lloriqueo haciendo partir el auto
- No te me echaras para atrás ¿verdad?
- Me arrepentiré pero ya que…- la sonrisa de Ji era kilométrica y con la misma alegría prendió la radio buscando algo de música- deja esa...
- ¿Crooked? No sabía que te gustaba- subió un poco el volumen tirándose hacia tras disfrutando del viaje. Abrió un poco la ventanilla dejando colarse el aire por ella
- Es extraño- rio Dae esperando la luz verde
- ¿Qué cosa?
- Oír tu música siendo que te tengo a un lado- lo miró divertido notando como este se sonrojaba levemente- la letra de esa canción me pone loco
- ¿Acaso quieres un concierto personal?- preguntó con una sonrisa torcida arreglándose el cuello de la chaqueta
- No estaría nada de mal- rio de nuevo pisando el acelerador- si me haces uno yo te regalo otro
- ¡Hey! excelente idea, cuando he ido a tu concierto me la he pasado genial- apoyó su brazo en la orilla de la ventana sacando levemente la cabeza sintiendo la brisa que se formaba chocarle el rostro
- Luego de eso todos andaban hablando de ti y mi concierto “El líder de la boyband BigBang es visto en el concierto de Daesung” “GD muestra su apoyo en uno de los conciertos de D-lite”- las manos de Daesung hacían como que enmarcaban el título de los diarios haciendo que el peli naranja se largara a reír
- Eso no fue nada, recuerda cuando me llevabas con muletas, eso sí fue noticia
- Es verdad- sonrió para sus adentros entrando en los estacionamientos del centro comercial
- Hemos pasado por tanto este año- suspiró Ji mirando hacia delante en busca de un lugar libre
- Pero terminaremos bien, ya lo siento. Seung ya está mejor de su espalda y “Doom dada” suena en las radios como loco, a Taeyang le ha ido de maravillas con “Ringa Linga”, Seungri no se ha metido en más líos, sin mencionar el éxito de “Let’s talk about love” tú has ganado muchos Inkigayo con tu segundo álbum “Coup D’etat” y estás nominado hasta en la categoría de artista femenina en los MAMA- rio Dae dirigiéndose al estacionamiento que le había indicado el líder
- A pesar de todo eso, los he extrañado un millón- sonrió quitándose el cinturón- Y no estoy nominado a tantas categorías, pesado- golpeo despacio el hombro del peli marrón riéndose con ganas
- A que no por poco no te han creado una exclusiva para ti, en cada categoría en la que podías estar estás nominado - se apuró a bajar del auto antes de recibir otro golpe pero pisó mal cayendo al suelo
- ¡Dae!- el líder se dio rápido la vuelta ayudando al ángel a ponerse de pie- tonto, si me hubieses dejado golpearte no te hubieses caído- rio el líder sacudiéndole el polvo del trasero
- Es que con los lentes no veo bien el suelo…
- Babo…- tomó de la mano a Daesung atrayéndolo hacia él mientras miraba fijo hacia el otro lado del vehículo
- ¿Qué pas…?- la mano de Ji le cubrió la boca mientras hacía un poco de fuerza con su cuerpo para dejar a Daesung contra la puerta del auto. Dae se extrañó por la actitud del mayor intentando poner atención a lo que ocurría pero no logró oír nada más que el cerrar de una puerta y el motor encenderse. La mano de GD pasó de su boca para apoyarse de la puerta del auto riéndose con ganas por el color carmesí que habían tomado las mejillas del menor
- Era una conductora de un programa de música- explicó Ji alejando su cuerpo del de Dae
- Podrías haberme dicho eso antes de acorralarme- se quejó empezando a caminar delante del peli naranja
- Lo siento, no suelo hablar, solo actúo- se encogió de hombros apurando el paso para quedar a un lado de Dae- además…
- ¿Además qué…?- preguntó mirándolo fijamente
- No, nada. Olvídalo ¿sí?- un resoplido por parte del ángel le respondió. Se sonrió solo, Daesung no solía discutir, eso era punto a favor- ¿Tienes hambre?
- No
- ¿Sed?
- No
- ¿Un helado?- ofreció medio frustrado, tal vez estaba molesto con él
- ¿Helado?- pensó un segundo Daesung mientras una sonrisa aparecía en su rostro- ¡Vale!
- Vamos por uno entonces- Ji tomó a prisa la mano de Dae llevándolo a su heladería favorita. Se puso en la cola de la caja comprando dos helados dobles (dos bolitas) entregándole el vale al ángel- elige dos sabores- sonrió Ji mirando hacia la vitrina donde se exponían los helados
- Estoy intentando averiguar si he salido con Seung o con Ji- rio Dae posando sus ojos en los letreros donde ponían el sabor
- ¿No te gusta andar conmigo?- preguntó sonriendo al momento que le daba a conocer su elección al vendedor
- Claro que sí, pero si te sigues comportando como un niño harás que me cohíba- sonrió amable Dae recibiendo su helado- ¿ahora dónde?
- No dejan entrar a las tiendas comiendo- comentó Ji lamiendo su helado
- No se nos ocurrió antes, deberemos esperar hasta terminarlo
- ¿Vitrineamos* un rato?
- Vale- sonrió el ángel caminando a su lado. Comenzaron a ver las prendas que se exponían en las vitrinas mientras el menor intentaba terminarse lo más pronto posible su helado
- ¡Mola!- pegó una carrera hasta una vitrina casi pegándose al vidrio- ¿Te gusta esa polera?- preguntó al aire notando que el ángel lo miraba extrañado desde donde lo había dejado. El menor meneo la cabeza de un lado a otro mientras poco a poco reanudaba la marcha acercándosele- ¿Te gusta esa polera?- preguntó nuevamente indicando la vitrina
- Está bastante linda- respondió lamiendo su helado con tranquilidad
- ¿Me lo tienes? Iré a verla- sonrió entregándole su helado- no te lo comas ¿eh?
- Me iré a sentar ahí, te espero- rio Dae indicando una banca- no demores, cariño
- ¿C-cariño?- el leve sonrojo en las mejillas la mirada confundida de Ji le hizo gracia a Daesung haciendo que soltara una carcajada- no demoraré
- Eso espero- sonrió pasándole un dedo por la comisura de los labios quitándole una mancha de helado que tenía. Los ojos de Ji siguieron la acción del menor con atención esperando que se lamiese los dedos o algo parecido pero éste solo se los limpió con una servilleta. Entró a la tienda a toda velocidad intentando que su rubor no fuese notado por el ángel que ya comenzaba a caminar en dirección a una banca que se ubicaba en frente a la tienda. Pidió ver la polera en todos los colores que tuvieran evaluando cual se le vería mejor
- Me llevo esta- sonrió victorioso- la quiero en “M”
- Disculpe pero, en mi opinión, la “S” le quedaría bastante bien- la vendedora evaluó al cliente notando su contextura delgada
- No es para mí- explicó mostrándole la tarjeta de crédito dispuesto a pagar- ¡Uh! Esos pantalones me encantan ¿me los podría mostrar?
Resignado fue a tomar asiento a una banca que daba en frente a la tienda donde Ji había entrado. Un suspiro profundo se coló entre sus labios mientras lamía con ligereza su helado mientras sostenía el de GD en la otra intentando no mancharse con alguna gota a la que se le ocurriera escurrir. Por un momento deseo no haber aceptado el helado y haber entrado a la tienda con el peli naranja ya que cada tres segundos una mirada curiosa se posaba en él haciendo que su cuerpo se tensara
- ¿Tendré algo que llame la atención? ¿Sabrán que soy yo?- se comenzó a sentir un poco incómodo en su lugar por lo que decidió levantarse y esperar fuera de la tienda. Cerró los ojos tras los lentes respirando profundo, era increíble que después de tanto tiempo aún le costara encontrarse rodeado de gente. Lanzó un resoplido algo disgustado intentando espantar los recuerdos que se venían a su memoria mientras volvía a tomar su helado
- Intenta no disfrutarlo tanto- la voz de Ji lo trajeron de vuelta a la tierra asustándolo levemente- maldición, te lo comes de una manera sugerente
- ¿S-Sugerente?- el sonrojo comenzó a invadir poco a poco las mejillas del peli marrón provocándole una sonrisa al líder
- Es que estás que te lo devoras… y con los ojos cerrados…- la mente de Ji comenzó a maquinar unas imágenes poco aptas para la hora haciendo que el color carmesí también tiñera sus mejillas
- ¿Has comprado algo?- intentó cambiar el tema mirando hacia las bolsas de Ji mientras le extendía su helado
- Si, un par de cosas- sonrió comenzando a caminar- pero no cantes victoria que no son para los MAMA- rio el mayor de los dos al ver la cara de decepción del ángel
- Me rindo- suspiró mordiendo el barquillo
- ¡Perfecto! Vamos entonces, quiero que me ayudes a elegir- tomó la mano de Dae llevándolo a una tienda de ropa exclusiva.
A penas colocó un pie dentro de la tienda tres chicas se le acercaron para atenderlo cohibiendo a Daesung. El líder se hizo de rogar mientras lo hacían sentarse en unos sillones que se ubicaban frente a los probadores ofreciéndole hasta té y galletas. Pidió ver algunas chaquetas que tenían en la colección de ropa exclusiva, la misma donde no hacían más de dos prendas por talla pidiendo algo “especial”
- Vamos de inmediato, señor Kwon- sonrió una chica de cabello castaño tomado en un moño descuidado saliendo junto con una colorina rápidamente casi chocando con otra que llevaba una bandeja
- Te atienden como rey- suspiro Dae recibiendo un té con infusiones
- No te quejes, al menos me esperaras cómodo- rio Ji guiñándole un ojo mientras se ponía de pie analizando las prendas que le mostraban las chicas que apenas se habían demorado en llegar. Se probó un par mirándose al espejo en todos los ángulos posibles
- Me gusta esa- indicó Dae haciendo que el mayor se la probara- luces genial- aprobó apenas este se dio vuelta modelándola
- ¿Me la apartas, muñeca?- pidió con una sonrisa seductora entregándole la chaqueta a la castaña. Dae rodó los ojos concentrándose en su té que estaba delicioso mordiendo con descuido las galletas que lo acompañaban- me gustaría ver algo que me sirva para los MAMA- comentó a la otra chica poniendo una pose pensativa- ¿Crees tener algo que me guste para la ocasión?- la chica lo tomó como un desafío por lo que salió disparada hacia los percheros desapareciendo por unos momentos- también me gustaría ver unos pantalones- la segunda chica desapareció también en busca de su encargo
- Te gusta jugar al papel de diva - dijo para sí el ángel mirándolo a través de un espejo
- ¿A qué te refieres?- preguntó Ji dándose la vuelta para mirar al peli marrón
- Que todos corran por el gran GDragon- rio Dae poniéndose de pie revolviendo un perchero mostrándole unos pantalones- los miras a través de los lentes (gafas) y todos se desmayan ante tu presencia
- Buen gusto- sonrió entrando al probador para ver cómo le quedaban hablándole desde dentro- ¿Todos?- preguntó riendo mientras salía- ¿Tú también?
- N-no es lo mismo- se sonrojo Dae bajando la mirada- yo te admiro y respeto, somos compañeros y parte de un equipo- levantó el pulgar en señal de aprobación cuando el mayor se indicó los pantalones dándose una vuelta
- Creo que también me los llevo, son perfectos para lo que tengo pensado- satisfecho entró al probador para quitarse los pantalones- Entonces- continuó hablando más fuerte para oírse a pesar de la puerta cerrada- ¿Crees que parezco de esos artistas que se creen dioses?- preguntó con un poco de preocupación
- ¿La verdad? No- le agradeció a la chica que retiraba su taza ofreciéndole algo más a lo que recibió una negativa del menor. La chica de las chaquetas le entregó tres ejemplares por lo que el peli marrón que se las ofreció a Ji por arriba de la puerta- Cuando te veo das una sensación de seguridad más que de arribismo o arrogancia, pero debo admitir que en WIN casi me dio desmayo con tu presentación- rio apoyándose de la puerta
- Já ¿En serio? ¿Y eso por qué?
- ¿En serio lo preguntas? Veamos, lentes oscuros, abrigo largo , dándole la espalda al público en un principio, tu cabello, esos movimientos despreocupados y las poses que colocas como si te fueses a devorar el micrófono pero no sin antes seducirlo- analizó recordando aquel día- apenas había terminado Climax del Team B. Había terminado con todos emocionados, estábamos a minutos de saber quién era el ganador y llegaste a mover el escenario- una carcajada se escuchó del otro lado de la puerta contagiando a Dae- ¿De qué te ríes?
- De ti- la honestidad de Ji ofendió a Dae quién se cruzó de brazos aún apoyado de la puerta como si el mayor lo pudiese ver- ese día estabas que llorabas de la emoción. Bueno, pero no me has dicho nada aún
- Ah, sí. Es que no lo sé… te veías tas duro, tan fuerte ante las cámaras y no solo en ese minuto cuando cantaste, sino antes, cuando recién participaste del programa. Esa fortaleza me desarma un poco, es como si jamás le temieras a nada
- Sin embargo me conoces- suspiro desde el otro lado
- Es extraño…- susurró Dae metido en sus pensamientos
- ¡Es hermosa!- se oyó gritar desde adentro. Abrió la puerta con rapidez haciendo caer a Dae dentro del probador botándolo a la vez- ¡Dae!- riendo se intentó poner de pie pero el peso del cuerpo del ángel se lo impedía- ¿Qué hacías apoyado en la puerta?
- Espero que te lleves esa chaqueta porque me ha costado un buen golpe- se quejó riendo ayudando al líder a ponerse de pie
- ¡Es como la de Rihanna! Me la llevo- sentenció Ji pasándoselo a la vendedora que había presenciado la mitad de la escena
- Sabía que le encantaría- sonrió orgullosa la muchacha corriendo a dejar la chaqueta con el resto de las cosas- también me he dado la libertad de traerle algunos accesorios que combinan y algunos zapatos
- Y yo le he traído los pantalones que me pidió- extendió las prendas enseñándoselas al líder
- Bueno, ya tengo los pantalones que usaré, pero un par más nunca está de más- rio el peli naranja indicando dos modelos que le habían atraído
- ¡No más compras!- cantaleó en su mente Daesung sentándose en un sillón
- Me gustaría ver algunos ternos- pidió Ji sonriente
- De inmediato ¿Para qué ocasión?
- Me gustaría verlos personalmente
- Con gusto, acompáñeme señor Kwon- Ji miró a Dae dándole a entender que no demoraría demasiado a lo que este le respondió con la mano diciéndole que no se preocupara.
El menor lo siguió con la mirada hasta que desapareció de su vista por lo que se tiró hacía tras hundiéndose en el sillón recordando las palabras de Ji que solo minutos antes había pronunciado “Sin embargo me conoces”. Era verdad y algo que solo se veía cuando estaban en privado. Ji podía ser fuerte, un gran líder e incluso dar un poco de miedo de tan serio ¡Si el mismo CEO le temía en cierto sentido! Y no era algo que había supuesto si el mismo Yang lo había dicho. Pero cuando estaban solos no era tan así, se mostraba de la manera menos imaginable posible. Pero ambos le gustaban, debía admitirlo, tanto ese GD comprometido con la banda, ese que no dejaba a nadie tranquilo si no era perfecto, el que te reprendía por no ser puntual y a ese Ji juguetón, el amigo en el que podías confiar, hablar sin restricciones y de apoyo incondicional. De alguna manera sabía que él siempre estaría ahí para apoyarlos a todos, en las buenas y en las malas sin importar de quién había sido el error o que tan mal podía estar él mismo.
Su corazón se aceleró levemente al pensar en él de esa manera, hace bastante tiempo que le pasaba cuando pensaba en él... Sintió una mano apoyarse en su hombro asustándolo levemente
- Estás sonrojado- notó riendo Ji al sorprenderlo
- E-es que tengo un poco de calor, debe ser el aire acondicionado- contestó rápidamente dándose cuenta de su falta de coherencia. Ji lo miró extrañado pero prefirió no decirle nada más, en cambio le regalo una sonrisa revolviéndole el cabello
- Tengo lo que andaba buscando, pago por las cosas y nos vamos
- ¿En verdad?- preguntó Daesung algo extrañado. Por alguna razón escuchar esas palabras no le había dado la felicidad ni el alivio que había estado esperando- P-pero si quieres seguimos mirando por un rato
- Como el ángel quiera- concedió Ji alejándose
Salieron de la tienda con una cantidad de bolsas descomunal. Daesung se preguntaba como una sola persona podía comprar tanta ropa y aun así tener el armario “vacío” riéndose a la vez al imaginarse que algún día abriría su armario y solo encontraría ropa de Ji. Coincidieron en ir a dejar las cosas al auto antes de seguir mirando más prendas pero Ji notó que Dae no hablaba sumido en sus pensamientos
- ¿Pasa algo?- preguntó cerrando el maletero
- ¿Eh? No, nada ¿Por qué?
- Hace un rato que no hablas- contestó con una mueca ladeada- pensé que estarías molesto conmigo
- Lo siento, no quise preocuparte- la sonrisa de Dae tranquilizó al líder
- Es que estabas tan sumido en tus pensamientos…
- Pensaba en ti- respondió como si nada Dae comenzando a caminar dejando al líder con las manos puestas en el frío del metal del auto medio desconcertado. Vio alejarse a Dae dirigiéndose nuevamente al centro comercial por lo que se apresuró a cerrar el maletero con llave para alcanzarlo
- ¡Es Daesung!- oyó decir el líder a una chica detrás de ellos haciéndolo parar en seco. Tres chicas pasaron por su lado dirigiéndose al peli marrón sonrosadas mirando hacia el suelo pidiéndole una foto a lo que accedió el menor para evitar que más chicas las oyeran- e-es genial verlo… oh… no me la puedo creer, es usted mi ídolo- decían a penas por los nervios. Ji optó por quedarse en su lugar observando la escena apoyándose despreocupadamente de un árbol- ¿Viene solo? Oh por Dios, ¿andan los demás también?
- Ha sido un gusto señoritas, pero debo irme- dijo amable Daesung regalándoles una sonrisa mirando hacia alrededor notando que más de uno había visto la escena- con su permiso- volvió a pedir con un tono suave intentando irse buscando a Ji con la mirada notando que este se estaba riendo apoyado de un árbol no muy lejos de él. Salió a prisa en su dirección pero al momento de estar frente a él escucharon las mismas chicas de antes gritar que GD también andaba por ahí
- ¡Corre!- gritó Ji tomándole la mano para salir corriendo mientras se reía. Llegaron agitados al auto prendiendo el motor apurado viendo que las chicas se habían multiplicado saliendo a prisa del lugar. Cuando estuvieron en las calles de la ciudad se relajaron mandándose a reír
- Malvado, me viste en aprietos y solo te dedicaste a ver el show- se quejó aun riendo Daesung
- Es que si hubiese visto tu cara…
- Debería haberte dejado abajo- reclamó mirándolo hacia el lado
- No te enojes, Dae- le sonrió el líder pidiendo disculpas
- Si no se me hubiese ocurrido volver no me hubiera pasado- suspiró el peli marrón con la mirada en el camino
- No entiendo cómo te reconocieron, andabas con lentes de sol y jockey- meditó mirando hacia fuera de la ventana
- No tengo la menor idea- se encogió de hombros bajando la velocidad al divisar la casa- ¿Puedes bajar a abrir el portón?- el mayor no contesto abriendo la puerta del auto para bajarse abriendo el portón para que entrara el auto. Espero a que el motor dejase de ronronear para poder abrir el maletero y llevarse las bolsas a su habitación
- Iré a preparar algo para comer- anunció Dae desapareciendo en la cocina
- Regalonéame- pidió Ji regalándole una sonrisa mientras subía las escaleras
- Regalonéame- repitió Dae en voz baja riendo- está bien, prepararé algo rico para los dos
El líder subió tarareando una canción de D’scover animado. Entre cerró la puerta de su habitación notando que algunas prendas todavía cubrían el suelo como si hubiesen pasado por una guerra en la cual no se sabía quién había ganado. Comenzó a doblarlas para hacerle espacio a sus nuevas ropas colgando las dos chaquetas y el abrigo corto que había comprado más los pantalones. Se detuvo unos segundos a mirar los que había elegido Daesung sorprendiéndose por el buen gusto que tenía. Tal vez lo había influenciado un poco, pensó al notar unas tachas en los bolsillos que no había visto antes. Recordaba que hace no mucho el ángel se vestía un poco más casual, libre, pero ahora se preocupaba un poco más en producirse para salir ¿Sería por su culpa que ahora fuese así? Suspiro profundo mientras los doblaba para guardarlos e ir a ver el otro paquete. Sonrió al ver lo que tenía dentro por lo que lo cerró nuevamente dejándolo a un lado dedicándose a las demás bolsas
- Te preparé un suspiro limeño- el líder pegó un salto al escuchar la voz de Daesung viendo que entraba con dos vasos
- ¿Suspiro qué?- preguntó ocultando la bolsa con el pie
- Es un postre que encontré por internet- se encogió de hombros entregándoselo para sentarse en la orilla de la cama junto al peli naranja
- Está delicioso- se metió dos cucharadas seguidas saboreando la cuchara
- Es obvio, lo hice yo- rio Dae mirándolo de reojo
- Se te ha pegado mi ego- rio también tomando un poco más de su postre
- Eres mi mala influencia
- Estamos mucho tiempo juntos- tiró al aire de modo despreocupado
- ¿No es extraño?
- ¿Qué estemos juntos?- preguntó mirándolo con una ceja enarcada
- No necesariamente, me refiero a estar sin los chicos
- Ah…
- Es que estos días, aunque lo he pasado bien estando contigo, no he podido acostumbrarme a estar sin los demás miembros- suspiró girando el vaso entre sus manos- no me gusta sentirme así
- ¿Temes a que nos…?- el corazón de Ji dio un vuelco al entender las dudas del menor. Lo miró fijo pero Dae estaba perdido mirando su vaso casi vacío por lo que dejo el suyo a un lado pasando un brazo por la espalda del ángel- no pienses en eso- pidió sonriéndole
- A veces me atormenta la idea de que no volvamos a estar juntos
- Dae, no seas así de inseguro. Hemos pasado por muchas cosas juntos… incluso cuando tuve problemas seguimos unidos aunque todos digieran que no lograríamos superar la crisis
- …
- No te volverá a pasar, Gummy pasó por lo mismo y ya ves que sigue cantando- Dae lo miró asombrado, había dado en el clavo con sus pensamientos- El pasado quedó atrás, ahora solo debes mirar hacia delante- el menor seguía en silencio como meditando sus palabras- Mírame- pidió Ji inclinando la cabeza para poder ver mejor al peli marrón- mírame- insistió. Daesung subió la cabeza enfrentando las orbes oscuras del líder- te prometo que no nos alejaremos y si llega a pasar inevitablemente, no me alejare de tu lado ¿Si? ¿Es un trato? Tú no me dejas solo y yo no te dejo solo. Seremos compañeros siempre- sonrió sintiendo un nudo en la garganta
- Es un trato- sonrió Dae a medias levantando una mano con el meñique estirado. Ji le devolvió la sonrisa imitando el movimiento del menor uniendo sus dedos
- Así me gusta- se levantó con energía de la cama volviendo a su closet para cerrarlo- ¿Qué tal si jugamos un rato? Tengo ganas de ganarte en una partida
- Bueno, pero Link es mío- pidió Dae poniéndose de pie
- No si llego antes- rio Ji saliendo de la habitación a toda velocidad bajando las escaleras
- ¡No es justo!- alegó riendo el peli marrón corriendo tras él. Lo alcanzo en medio de las escaleras tomándolo de la cintura para tirarlo hacia tras y pasar primero- ¡Te voy a ganar!
- ¡Hey! Quiero el mando principal- reclamó GD tras el ángel
- Lo siento- sonrió victorioso prendiendo la consola y metiendo el juego- ya es mío- sacó la lengua cerrando los ojos mientras se sentaba en el sillón
- ¿Mario Kartz? Creí que jugaríamos el Super Smash Bowl…
- Más tarde- sonrió Dae viendo como el líder se acomodaba en el sillón pidiéndole su mando (control)
- Bueno pero no llores cuando pierdas contra mí- frunció los labios eligiendo su jugador
- No perderé- dijo confiado Daesung poniéndole play
La partida comenzó tranquila, en la primera vuelta ninguno de los dos se adelantaba a los demás competidores tratando de ser cautelosos en los movimientos del otro. La segunda vuelta siguió igual pero Ji la dio primero por lo que Dae se acomodó hacia delante dispuesto a dejar de jugar. La sonrisa de GD marcó su rostro, sabía que ambos eran demasiados competitivos para jugar juntos, era difícil que alguno perdiera sin que su bichito de la competencia los mordiera por lo que se puso en la misma posición dándole fuerte al botón intentando pasar al ángel y ganar la carrera. Poco a poco dejó de ser un juego y las trampas y trucos salían por arte de magia intentando de todas las formas posibles dejar al otro fuera de competencia sin lograrlo. El grito victorioso de Dae terminó la carrera dejando a Ji con el ego herido
- Pura suerte- dijo entre dientes mientras el otro celebraba
- Te dije que no perdería
- Venga, que solo ha sido la primera, si jugamos nuevamente perderás- desafió Ji sonriente
- Te probare que fue más que suerte- le dio fuerte al botón de play dando inicio a otra carrera
Ninguno de los dos quería ceder y las apuestas comenzaron a llover jugando a 30 de 50 para dejar bien marcado quién era el mejor. En un minuto terminaron ambos tirados en el suelo jugando olvidándose de la comodidad del sofá. A pesar de que jugaban sin darle tregua al otro las bromas iban y venían contrastando con el ambiente del juego que se ponía cada vez más caliente haciendo casi humear los pobres autos de la pantalla. El grito de frustración de Ji lleno el lugar provocando la risa del menor
- ¿Qué decías que era? ¿Suerte?- se burló dejando el control a un lado
- Jamás pierdo- Ji seguía mirando la pantalla indignado por los números, había terminado en 7° lugar en la última carrera
- Saboréalo- rio Dae poniéndose de pie- llevamos dos horas jugando- soltó sorprendido al ver la hora
- ¿Dos? ¿De verdad?- Ji miró la hora incrédulo yendo hacia la consola- maldición, ¡Esto está caliente!- se quejó agitando la mano
- Creo que le dimos mucho en muy poco rato
- Al parecer
- Iré a mi habitación
- ¿Me ganas y me abandonas?- rio Ji viendo como subía las escaleras
- Llamaré a Seungri. No ha llamado en todo el día- se justificó desapareciendo
- A Seungri- repitió medio molesto entre dientes- el ingrato no llama pero este angelito anda preocupado. Mire que dejarme por el panda- medio mosqueado guardó el juego subiendo las escaleras y sin saber realmente que iba a hacer se dispuso a abrir la puerta de la habitación del ex platinado pero se detuvo
- ¡No ha pasado nada, te digo!... estás loco si crees que… babo…- oyó a Dae reír. Quizás que le había dicho Seungri al segundo menor del grupo que le había hecho tanta gracia. Sintió el calor agolparse en sus manos notando sorprendido que tenía los puños apretados ¿Por qué lo hacía? Meneo la cabeza de un lado a otro disgustado: se le estaba yendo de las manos. La fragilidad de Dae siempre le había atraído, pero no era una fragilidad de debilidad, sino como el constante temor a decepcionar a los demás. Y no lo culpaba. Cuando quiso audicionar no muchos lo apoyaron porque era el chico tímido, reservado. No creían mucho en él y sin embargo lo había logrado sin problemas, aunque eso no significase que no los tendría más adelante. Su sonrisa, sus juegos, su forma de ser era tan única, tan especial.
Daesung era uno de los miembros de BigBang que más se abría con él, era el que hablaba con él sin inhibiciones, le contaba sus penas, sus alegrías, sus dudas, sus inseguridades ¿Y él que hacía? Le oía y aconsejaba pero jamás se detenía a darle las gracias por la confianza que este le otorgaba
¿Hace cuánto que le quería? Ya ni siquiera se acordaba, es que nunca se dio cuenta de cuando sus sentimientos cambiaron. O tal vez siempre fueron los mismos.
- Eso sería un milagro Ri-ah- la voz de Dae lo volvió al presente sacándolo de sus cavilaciones. Decidió dejar de oír la conversación por lo que se dio la vuelta dirigiéndose a su propia habitación. Las dudas lo comenzaron a embargar. La cercanía del panda con Dae bien se podría mal interpretar ¿no? No tenían casi nada de diferencia de edad y los proyectos juntos en Japón que les dejaba mucho tiempo disponible por lo que no era del todo descabellada la idea de que esos dos fuesen pareja. Sintió su estómago revolverse, seguramente los celos le estaban haciendo una huelga entre sus entrañas. Tomó el paquete que había ocultado con el pie revisando su contenido. Un suspiro se escapó de sus labios dejándose caer de espaldas en la cama mientras se quedaba dormido lentamente entre sus pensamientos.
Daesung colgó el teléfono sonriente, siempre le servía hablar con el panda, le entregaba buenos consejos aunque no sabía bien de donde los sacaba. Notó que la casa estaba en silencio nuevamente por lo que decidió ir a buscar al líder
- Ji- llamó despacio a la puerta sin recibir respuesta- ¿Ji?- abrió la puerta con cautela encontrándose con la imagen del líder durmiendo plácidamente encima de la cama. Sonrió ladeado mirándolo casi con ternura, su semblante parecía pacífico. Quizás hace cuanto se había dormido. Quito el paquete que tenía aún en sus manos dejándolo a un lado. Con delicadeza lo movió para abrir la cama corriéndolo despacio entre las sábanas. Al tocarlo sintió su piel fría así que se dirigió a las ventanas para cerrarlas. Volvió al lado de Ji comprobando que estuviese bien tapado y se dio la vuelta para irse pero al momento de dar el primer paso una mano le aprisiono la muñeca tirándolo levemente
- ¿Dae?- preguntó con un solo ojo abierto
- Debes estar cansado, te quedaste dormido encima de la cama- sonrió Dae sentándose en la orilla
- ¿Cómo está el panda?- la mirada de Dae se transformó en una gran pregunta pero decidió responderle
- Mañana sale en el programa, está chequeando los últimos detalles. Manda saludos- resumió
- Gracias…
- Me iré a poner la pijama- anunció Dae poniéndose nuevamente de pie
- Creo que también debería vestirme para dormir- concluyó Ji levantándose dando un gran bostezo
La mirada de Ji parecía perdida preocupando a Daesung que se apresuró a alistarse para poder averiguar que le sucedía al líder. Tal vez había llamado a Seung. Sacudió la cabeza con energía evitando ponerse a sacar conclusiones y se encerró en el baño de su habitación. Al salir se dirigió a la cocina para tomar un poco de agua pero al pasar por la habitación de Ji notó que aún tenía la luz encendida
- Ji- llamó antes de empujar la puerta
- Creí que ya te habrías ido a dormir- se sorprendió GD sonriéndole
- Es que estaba algo preocupado por ti- soltó Dae entrando a la habitación- Actúas algo extraño
- Lo siento, debe ser el cansancio- se apresuró a justificarse sentándose entre los cojines de su cama- ¡Oh! Yo te tengo un regalo- sonrió viendo la bolsa a un lado de su cama
- ¿Un regalo?- Dae arqueo una ceja levemente mirando con la cabeza ladeada al líder
- Si- rio estirándose para alcanzar la bolsa sin levantarse de la cama- ábrelo- notó como el ángel lo abría con ceremonia impacientándolo levemente. Cuando logró sacarlo quedo impresionado inspeccionando con detalle su regalo
- E-es un saco (traje, terno?)- rio poniéndoselo- y rosa…
- Te compré una camisa negra y una corbata del mismo color- sonrió buscando el resto del regalo- así destaca solo el traje
- Pero hay un problema- dijo Dae intentando poner una cara seria
- ¿Cuál?- se preocupó Ji subiendo la mirada sin notar que Dae estaba fingiendo pero a penas lo miró este se le abalanzo riendo acariciándole los cabellos
- Es que el chico rosa eres tú- sonrió apartándose para mirarse en un espejo
- Entonces ¿Te gusta?
- Es extraño, pero si- miró al líder por el espejo sonriendo con ternura- gracias
- Pensaba que lo podías ocupar para los premios- dijo sin notar su sonrisa mientras inspeccionaba como le quedaba el traje en los hombros felicitándose a sí mismo por no haber fallado en las medidas
- ¿No destacaré mucho? Digo, por el escenario y los vestuarios de los demás…
- ¿Y?
- Nada, solo decía
- Me alegra que te guste, estaba dudoso por el color pero creí que se te vería bien- sonrió cruzando las piernas en la cama balanceándose hacia delante y atrás como un niño. Daesung se dio la vuelta sonriente quedando frente al rapero. El color carmesí invadió las mejillas del mayor sin saber realmente el motivo sintiendo su estómago revolverse. Las dudas que tenía antes se volvieron a presentar ahogándose en su garganta- Dae…- llamó mientras observaba como se quitaba el traje
- ¿Sí?
- Me gustaría preguntarte algo… pero me preocupa que te molestes- suspiró mirando hacia otro lado
- Tranquilo, estamos en confianza ¿No?
- Es que… quería saber si… Bueno- aclaró la voz intentando formular la pregunta adecuada- Seungri y tú han tenido muchos proyectos juntos últimamente y eso es bueno ya que su popularidad en Japón ha aumentado sobre todo luego que sacaras D’scover y Seungri su álbum en versión japonesa- Daesung lo miró confundido sin saber a donde quería llegar con todo eso pero decidió escuchar hasta el final- por lo mismo creo que tú y él se han acercado más ¿no?- la cabeza marrón de Dae se ladeo observándolo atentamente. Chasqueo la lengua cayendo en cuenta de lo que el líder le hablaba
- No me gusta Seungri- soltó dejando a Ji con las palabras en la boca
- ¿Qué? P-pero yo…- el sonrojo aumento haciendo que la temperatura de sus mejillas ascendiera- no termine de hablar- susurro mirándolo. Sintió como el nudo de su garganta se iba soltando dejándolo respirar tranquilo
- ¿Era eso no?- sonrió divertido abrazando una almohada
- Si… algo así
- ¿Por qué lo preguntas?
- Es que no lo sé- decía mientras meneaba la cabeza de un lado a otro pensativo haciéndole gracia al menor- como siempre lo llamas aunque él no lo haga…
- Solo amigos- cortó amable con una sonrisa- ¿En realidad pensaste que me gustaba?
- No es que tenga algo en contra, solo era una duda que me asaltaba- se apresuró a contestar
- No, la persona que me gusta no es Seungri
- Entonces ¿Si te gusta alguien?
- Si- sonrió levemente acomodándose en la cama quedando frente al líder
- ¿Es alguien que conozco?- preguntó un poco decepcionado
- Si- volvió a decir sonriendo
- Ah…- bajo la mirada hacia sus manos que jugueteaban hace un rato con la orilla de su polera sin darse cuenta. Llegó a la conclusión que la conversación había perdido su objetivo por lo que decidió cortarla para poder dormir- es algo tarde, deberíamos dormir
- Como quieras- se despidió Dae poniéndose de pie- descansa y sueña con los angelitos- bromeo sonriente dirigiéndose a la puerta
- Faltó mi beso de las buenas noches- reclamó Ji en son de broma. Vio como Dae se daba la vuelta riendo para volver a acercarse a él. Se apoyó de la superficie blanda con la mano empuñada inclinándose sobre el líder. Acercó sus labios a la frente pero se desvió hasta su nariz depositando un pequeño beso en la punta sintiendo como el líder la arrugaba levemente riendo- eso no es un beso- reclamó aun riendo. Su respiración se cortó al sentir que Dae le tomaba el mentón con suavidad depositando otro beso casto en sus labios. Fue apenas unos segundos que sus labios estuvieron juntos pero el mayor sintió el calor imaginario que habían dejado impreso en sus labios
- Duerme bien- dijo sin más abandonando la habitación
No fue hasta que oyó la puerta de la habitación de Dae cerrarse cuando pudo reaccionar. Subió una de sus manos hasta sus labios tocándolos incrédulo intentando comprobar si lo que había sentido era real
- Pequeño osado- rio tapándose con las sábanas acomodándose entre sus almohadas- jamás provoques al dragón- suspiro cerrando los ojos.
Se levantó temprano a pesar de que el sueño lo embargaba aun amenazando con cerrarle los ojos en cualquier momento. Con el pijama aun puesto bajo a la cocina para comer algo apenas su estómago se lo pidió con un fuerte pero agonizante rugido, pero apenas entró sintió el olor a café recién hecho con una mezcla de frutos rojos recién cocidos
- Buenos días- saludó sonriente el ángel dando vuelta un panque en la sartén
- ¿Tan temprano de pie?- preguntó abriendo una alacena de dónde sacó dos tazones- ¿Té o café?
- Café, recién lo hice- se dio la vuelta buscando un plato que fue alcanzado por Ji- Gracias. No tenía sueño, desperté antes que mi alarma
- Te creo- rio despacio sirviendo el agua caliente encima del café- Huele delicioso
- ¿Me pasas la fruta? Hice una mezcla de frambuesas con arándanos para la salsa y relleno
- Delicioso- se relamió los labios sonriente- ten- entregó el pocillo con el contenido dulce-ácido- te voy a nombrar mi chef personal
- Merezco un aumento de suelo, te cocino puras exquisiteces- alegó Dae riendo sirviendo un par de platos
- ¿Esto será suficiente?- los ojos de Ji soltaron una chispa mientras sonreía tomándolo del mentón para unir sus labios. El cuerpo del peli marrón se tensó por unos segundos para luego ir sucumbiendo poco a poco a la dulzura con la que le besaba el líder pasando con delicadeza la lengua por los labios humedeciéndoselos para pedir la entrada que fue concedida con lentitud. Sintió su cuerpo golpear suave contra el lavaplatos (Lava vajilla?) pero poco le importo sintiéndose hipnotizado por la danza que mantenía el rubio con su lengua. Decidió tomar un poco de iniciativa tomándolo de la cintura para apegarlo más a su cuerpo. Un gemido se coló entre los labios del mayor sacándole una sonrisa a Dae que sin separarse tiró un brazo hacia tras intentando afirmarse. Sintió que el aire comenzaba a escasear poco a poco obligándolos a separarse. Las orbes oscuras del líder se perdieron en las del ángel quedando a solo unos centímetros sintiendo la respiración del otro con una sonrisa boba aflorando en su cara
- Creo que es suficiente- meditó Dae riendo dejando un beso casto en los labios del otro pero al momento de separarse sintió que lo tiraban hacia delante del cuello de su polera atacándolo nuevamente. La respuesta fue inmediata y en menos de un segundo sus lenguas se vieron sumidas en una guerra que ninguno de los dos estaba dispuesto a perder. La presión de Ji hizo tambalear a Dae haciendo que se resbalara cayendo ambos al piso. Una risa traviesa de Ji quedo atrapada entre el beso negándose a cortarlo mientras una de sus manos se dirigía al torso del menor acariciándolo levemente provocándole más de un escalofrió.
- Ji…- susurró entre el beso intentando incorporarse pero la mano en el pecho lo tiró levemente hacia abajo
- Shhhh- rio Ji separándose levemente sonriendo- no lo arruines
- Babo- tomó las caderas del líder con fuerza dejándolo bajo su cuerpo haciéndolo sentir el frío del piso de la cocina contrastar con el calor que iba adquiriendo su cuerpo. Presionó con sus rodillas las piernas del mayor dejándolo inmovilizado mientras atacaba con gracia su punto débil- o fuerte, depende de donde se mirara- con mordidas y besos. Pasó la lengua de forma lasciva delineándole las clavículas provocando que pequeños gruñidos salieran de la boca carmesí del dragón provocando más a Dae. La respiración se le volvió agitada gimiendo con dificultad el nombre de su torturador intentando levantarse para tomar un poco el control pero sus manos fueron sujetas con fuerza contra el suelo y sus piernas no tenían como moverse por la posición de éste. Decidió que luchar no le serviría de nada entregándose a los pequeños espasmos de placer que le producían las caricias y besos en su zona heterogénea. Sintió la presión en una de sus manos desaparecer al mismo tiempo que la parte superior del pijama comenzaba a ascender dejándole el vientre y costillas desnudas de forma gradual. Los dedos del menor optaron por delinearlo con presura mientras que su boca bajaba con un camino de besos por medio de su torso. El calor de su cuerpo comenzó a hacer efecto en una zona clave de su anatomía haciendo que sus mejillas se encendieran al notarlo
- Dae…- gruño sintiendo un escalofrío recorrerle la espalda
- ¿Mmm?- preguntó volviendo a su boca con una sonrisa ladeada que le pareció atractiva al mayor
- E-estamos en la cocina- habló a penas se logró zafar de sus labios
- ¿Y?- lo mordió con ternura perdiéndose en su mirada
- No deberíamos…- intentó seguir la frase pero las caricias del menor lo acallaron haciendo que cerrara los ojos por un instante
- Hace un momento no parecía importarte- rio Dae viendo con detalle las reacciones de su líder- ¿o es que ya no te gusta lo que estoy haciendo?- preguntó ladeando la cabeza mientras hacía caminar sus dedos desde el vientre hasta la orilla elástica de los pantalones de dormir
- D-Dae…
- ¿Eso es un sí o un no?- sonrió viendo cómo éste se mordía los labios abriendo un solo ojo- Tal vez necesitas algo más que besos- posó su mano en el bulto cubriéndolo por completo acariciándolo con ayuda de todos sus dedos- ¿Te gusta así?
- G-gah… Dae-Sung…
- Tal vez más rápido- dijo malicioso apurando su trabajo bajando las telas para agarrarle el miembro por completo comenzando a subir y bajar por él
- D-Dae- volvió a llamar intentando fruncir el ceño mirándolo fijo. Hasta entonces no había recordado que sus manos habían sido liberadas notando que estas se negaban a cortarle el paso al menor sucumbiendo ante el placer que le estaban entregando- Para…- pidió de igual manera intentando no ser tan fácil
- ¿Seguro?- comenzó a masturbarlo más lento pasando por toda su extensión apretándole levemente la glande
- Ahhh… mierda… me vuelves loco- gimió tirando la cabeza hacia atrás- Daesung-ah
- ¿Ne?
- No pares- pidió riendo con dificultad
- ¿Quién te entiende GD?- rio sentándose mejor para poder inclinarse hacia delante
- ¿Qué haces?- preguntó levantando la cabeza para verlo
- ¿Qué te imaginas que hago?- sonrió antes de comenzar a lamer toda la extensión de su miembro palpitante sacando más de un gruñido de la boca entreabierta del mayor. Enredó su lengua en el falo dándole mayor dedicación a la punta desde donde ya comenzaba a salir el líquido pre seminal humectando su paso por él. Con una de sus manos fue lentamente acariciándole los muslos desnudos sintiendo cada centímetro de su piel se estremecía a su paso apretando levemente las piernas. Decidió darle un poco más de espacio para moverse liberando sus piernas al separar las suyas quedando un poco más inclinado para continuar a gusto con su trabajo. Comenzó con un juego hipnotizante metiéndose y sacándose el miembro de la boca apretándolo cada cierto tiempo entre sus labios escuchando gemidos y jadeos mientras lo hacía. El cuerpo del menor se tensó levemente anunciándole el clímax por lo que aceleró el proceso ignorando las advertencias del mayor recibiendo una descarga completa que lamió hasta el final dejando un pequeño rastro escurrirle por la comisura de los labios cayéndole en la polera del pijama. Se relamió los labios quitándose la polera sucia tirándola hacia un lado
- Lo siento- rio GD con dificultad mirando la escena expectante
- Delicioso- sonrió Dae limpiándose para luego ir a besar nuevamente al líder. La mano de Ji se coló por entre ellos tocando por sobre las telas el miembro erecto de Dae haciéndolo sonreír entre el beso- Hey, eso es mío- lo atrajo desde el cuello comiéndole la boca sintiendo el sabor dulce de los besos de Ji mezclarse con su esencia
- Mírate- sonrió seductor Ji cuando pudo separarse del menor apretando con un poco de fuerza lo que tenía entre manos- estás caliente
- Pues tú me has puesto así, no me culpes- rio Dae tirando el cuello hacia atrás- además el que se corrió fuiste tú… y en mi boca- gimió fuerte llenando el lugar con su voz- ¿Qué dirían tus fans si supieran que su líder favorito es un pervertido?- preguntó sintiendo como le acariciaban la glande palpitante
- Que no demore más y te coja luego
- No sé porque te creo- rio subiendo una de sus manos al rostro de Ji eliminándole una gota de sudor que quería comenzar una carrera por su tez- pues las apoyo
- Pervertido- colocó un beso casto en sus labios tomándole una mano para comenzar a lamerle los dedos
- No pareciera que te disguste- dijo sonriente mientras miraba la escena
- Ni un ápice- se mordió los labios mirándolo a las orbes oscuras y brillantes
- ¿Lo quieres hacer?- preguntó Dae entrecerrando los ojos
- ¿Qué crees?
- ¿Conmigo?
- ¿Con quién si no?
- ¿Aquí?- rio acariciándole las clavículas
- ¿Sugieres otro lugar?
- Tu cama- sonrió besándolo- sino jamás volveré a ver la cocina de la misma manera
- Ahora vienes a preocuparte
- Tú tampoco querías hacerlo aquí hace momentos
- Es que luego si te veo cocinando aquí lo recordaré
- ¿Y?
- Querré que se repita
- ¿Qué hay de malo?- preguntó seductor atrayéndolo con fuerza hacia él
- No vivimos solos y creo que no me importará demasiado
- Exhibicionista- rio Dae mordiéndole el lóbulo de la oreja susurrándole despacio- no me molesta la idea
- Y me llamas pervertido- acalló con un beso bajando con un poco de fuerza la mano de Daesung hasta su entrada.
Alcanzó a ver una chispa de lujuria en los ojos del menor, jamás lo había visto de esa manera y comenzaba a gustarle de sobremanera. Por un momento pensó si la timidez del peli marrón era para ocultar lo caliente que podía llegar a ser, aunque debía admitir que él tampoco era un ángel y la situación lo excitaba al extremo. Sintió un dedo acariciar con suavidad alrededor de su entrada haciéndolo desear lo que venía.
Un pequeño gruñido salió de la boca del mayor al sentir la intromisión haciendo que sus mejillas adquirieran un color carmesí intenso. Cerró levemente los ojos intentando adaptarse al intruso pero antes de poder hacerlo un segundo dedo pidió permiso tensándolo levemente.
Daesung sintió que los hombros de Ji adquirieron un poco de tensión por lo que decidió acariciarle la espalda con su mano libre. Comenzó por marcar el camino que hacía su columna sintiendo como pequeños espasmos de placer subían por ella mientras comenzaba a jugar con sus dedos en la entrada. La cabeza de Ji se tiró un poco hacia tras por lo que el menor decidió dejar un camino de besos por él cambiando al mismo tiempo su movimiento lento con los dedos por tijeras y círculos dilatándolo poco a poco invitando a un tercer dedo al juego. Elimina un par de dedos para quedar como en el principio comenzando a hacer círculos para hundirlo y volverlo a sacar.
- Dae- llamó con dificultad el líder
- Ya casi- sonrió ladeado
- Creo que estoy listo- abrió un ojo observando el cuerpo desnudo de su compañero cubierto de una fina capa de sudor
- Te haré daño- el mayor meneo la cabeza de un lado a otro con energía mientras sonreía
- Estaré bien, hazlo- ordeno apoyando su espalda en el suelo sintiendo de inmediato el frío de éste contrastar con el calor de su cuerpo
Dae fue quitando los dedos despacio mientras se acomodaba para quedar a la altura de la entrada de Ji. Colocó la punta de su miembro con la misma delicadeza observando con detalle el cuerpo de Ji que se estiraba frente a él. Comenzó a entrar lento notando como los músculos del líder se tensaban pero decidió continuar de todas formas. Un gruñido salió sin permiso de sus labios al sentir que ya iba por la mitad, los músculos de la entrada de Ji comenzaban a apretarlo levemente haciendo que miles de sensaciones se agolparan en su miembro invitándolo a seguir pero con presura. De una sola estocada terminó de entrar escuchando un gemido ahogado de parte del dragón
- D-duele- gimió despacio buscando algo que agarrar con sus manos sin encontrar nada- Dae, me duele
- Lo sé- dijo con la respiración agitada el peli marrón- pasará en unos momentos… creo- respiro profundo intentando relajarse. La mueca de dolor de Ji fue disminuyendo poco a poco por lo que decidió comenzar a moverse. Con lentitud dio la primera estocada.
Sentía un dolor inmenso pero sabía que debía disminuir en algún momento. Su cuerpo decía que no aguantaría pero su mente le decía que aguardara, que se vendría mejor si tenía un poco de paciencia por lo que se comenzó a relajar un poco. Confiaba en el ángel y tenía razones. Sintió como empezó a moverse con lentitud dentro de él haciendo que un atisbo de placer se hiciera presente haciendo a un lado por apenas unos segundos el dolor. Levantó levemente las piernas intentando hacerle el trabajo más fácil acostumbrándose de apoco a la intromisión del miembro de Dae. La inseguridad en el movimiento del menor lo comienza a volver loco, cada centímetro que recorría parecía un delirio haciendo que pequeños espasmos de placer lo recorran por completo terminando su recorrido en su propio miembro. Decidió tomar un poco la iniciativa por lo que levanta y bajó las caderas aumentando el ritmo haciéndole entender al peli marrón que la fase de dolor ya había pasado y necesitaba más. Las manos de Dae se aferraron a las caderas de Ji sin saber si quería contener al mayor o a sí mismo sintiendo que las energías se le comenzaban a ir por cada embestida.
El concierto de gemidos se hizo presente en la habitación mientras se entremezclaba con el sonido de sus respiraciones entrecortadas.
- J-Ji- gimió el menor acercándose a la boca del líder para atacarla con fuerzas. Sintió su cuerpo tensarse levemente incitándolo a aumentar las embestidas. Una estocada profunda sacó un gemido ahogado de la garganta de Ji sintiendo como las uñas de éste se le clavaban en la espalda
- A-Ahí- pidió jadeante el líder. La sonrisa de Dae se hizo presente intentando poner sus últimas fuerzas en dar en el mismo punto con embestidas largas y fuertes. Su boca se dirigió hasta los pezones erectos del líder atrapando la punta con su lengua pasándolo incesante por los timbres rosas. La excitación hizo que Ji tirara la cabeza hacia tras abriendo la boca causando que los gemidos se transformaran en jadeos que llegaban directo al oído del menor haciendo que su lujuria aumentara. Si es que era posible.
El cuerpo del líder se tensó apretando levemente el miembro del peli marrón anunciando su orgasmo por lo que el menor decidió cambiar las embestidas por unas rápidas y cortas. La voz jadeante del menor anunció que no aguantaría mucho más recibiendo una sonrisa de parte de Ji.
- Juntos- fue lo único que alcanzó a decir el peli naranja arqueando la espalda para terminar con una descarga manchando ambos vientres con su esencia.
El menor alcanzó a dar un par de embestidas antes de venirse dentro del rapero liberándose por completo. Lentamente fue saliendo dejando que su semen comenzara a salir lentamente de la entrada provocándole pequeños espasmos de placer. El cuerpo de Ji cayó exhausto contra el de Dae siendo recibido con un abrazo y un beso casto mientras éste apoyaba su cara en el hombro del peli marrón con la respiración agitada
- Ji- susurró Dae haciendo que el mayor levantara la cabeza. Una sonrisa salió sin permiso al ver las mejillas sonrojadas del menor debido al esfuerzo sintiendo como uno de sus cabellos era apartado con delicadeza de su rostro por los dedos finos del peli marrón
- ¿Estás bien?
- Tengo hambre- se quejó riendo mientras lo abrazaba
- ¿Se habrá enfriado el desayuno?- preguntó riendo también
- Tal vez…- bajo la mirada al suelo delineando con un dedo las costillas de Ji
- Te quiero- soltó de una vez provocando que el ángel subiera rápidamente la cabeza- ¿Me quieres?- preguntó mirando fijo a las orbes oscuras del menor notando como sus mejillas se encendían
- ¿Y lo preguntas?- sonrió dándole un beso largo y fogoso- te quiero- dijo en un susurro apenas al separarse
- Me gusto oír eso- dijo con una sonrisa arrogante que de inmediato cambio por una tierna
- ¿Nos damos un baño?- sugirió levantándose despacio ayudando al líder a imitarlo
- Como quiera mi ángel