UNA NOCHE
MANSION KAIBA
Mokuba, no podía dormir, daba vueltas de un lado al otro, buscando una posición que le permitiera dormir, cansado de sus intentos fallidos, solo se sentó en la cama, cruzando sus brazos haciendo varios pucheros
Si sigo así, no solucionare nada, mejor voy por un vaso de leche tibia ^o^ --dijo un feliz Moky, para salir de la enorme cama e ir por su vaso de leche, evitando de hacer mucho ruido, para no despertar a los empleados, que merecían su descanso, entro a la cocina, para hacer su objetivo, al terminar y borrar cualquier evidencia de que estuvo ahí, se marcho a su cama, para al escuchar que la puerta principal se abría solo se escondió en una columna, donde podía ver quiénes eran los que entraban, pero en cambio ellos no, colocando una cara triste, al ver a su hermano acompañado por alguien, que no podía ver quién era, ya que el otro se había recargado en el pecho de su hermano –hermano, porque traes a extraños, solo para pasar un rato, porque no buscas a tu verdadero amor –pensó tristemente Mokuba, ya que aunque su hermano pensara que sus encuentros con sus amantes eran “secretos”, él los había visto, como desaparecían a la mañana siguiente, siempre lo miraban como si fuera un bicho raro, eso hacía que su corazón se rompiera, él deseaba una madre, como cuñada, que lo amara y lo protegiera, y que no lo viera como un estorbo, una carga indeseable, el único que lo miraba con un amor maternal, que se preocupaba por él, que siempre estaba cuando se sentía solo, porque su hermano tenía mucho trabajo y se olvidaba que tenía un pequeño hermano menor, que lo necesitaba era su amor y no los millones de lujos que le daba, era Joey, su madre como mejor amigo, y no es que no quería a sus otros amigos, ellos también eran especiales, pero Joey se sentía como un hijo, junto a su madre
KAIBA Y JOEY
Maldito gato roñoso, mmmh que tengo –decía un acalorado Joey, haciendo un ovillo en el asiento, sentía que su cuerpo estaba ardiendo, y que nada lo podía apagar, ya se las vería el maldito de Marcus por darle saber qué cosas, pero lo que no entendía era porque su némesis, lo estaba ayudando o qué demonios quería con él
Cállate perro, solo espera a que lleguemos a la mansión, para que tomes una ducha bien fría –dijo Kaiba, viendo de reojo, el cuerpo de Wheeler, con esa capa de sudor, sus mejillas sonrojadas, intentando acallar sus gemidos, mordiéndose su puño, es que el perro no se daba cuenta, que estaba mandado su autocontrol a la mierda, si deseaba tocar esa piel inmaculada, más suave que la seda, como lo sentía en sus sueños, pero no lo tocaría, por dos sencillas razones, uno no quería tocar ese cuerpo, porque sabía que sería dependiente, y Seto Kaiba, no dependía de nadie, pero en un rincón olvidado su subconsciente le decía, que temía al perro, si señores como lo oyen temía, al Joey, que cuando el joven, supiera su necesidad, se aprovecharía, el que vivió, que todas las personas no te dan algo, si no les das algo tu también, no lo hizo su padrastro con él, solo fue una herramienta, para sus propósitos, por eso solo buscaba él, su beneficio en las personas y nunca demostraba sus debilidades, pero al tener a Wheeler, jadeante en su limosina, algo cálido en su pecho, estaba naciendo por el de ojos dorados y él no lo permitiría, y la segunda razón, era por su hermanito, quería demasiado al perro, para que el por un calentón de una noche, hiciera que el pelirrubio decidiera alejarse de su hermanito, el dolor que eso provocaría en su pequeño Mokuba, jamás lo haría, era mejor solo poner un abismo entre él y el perro, cuando vio la mansión, dio un gran suspiro ya que de verdad le iba a dar ese baño y que el perro durmiera en una habitación de invitados, y que al día siguiente su vida seguiría como hasta ahora, al ver su mansión, dio un gran suspiro pronto se iba a deshacer del perro –ten ponte, ponte mi gabardina, no querrás salir así –dijo fríamente el CEO, ya que Joey, estaba medio vestido, porque él deseaba seguir viendo esa blanca piel por más tiempo, el joven con la mano temblorosa tomo lo que le estaban entregando, pero cada segundo para Joey, era una tortura deseaba que Seto, lo tomara in importar las consecuencias solo negó con la cabeza, para que luego ambos salieran del auto, para caminar hacia la mansión, en completo silencio, hasta que llegaron a la puerta principal, Joey se sintió débil, e iba a caer, si no hubiera sido por los fuertes brazos del gato roñoso, que solo abrió grandemente los ojos, al sentir el cuerpo ardiente del menor
Qué demonios te dieron perro, estas que hierves –susurro Seto, viendo que el menor solo lo observo con sus ojos dilatados por el deseo, para aferrarse a su camisa, para rozar susurro algo en el odio del mayor
Por favor kaiba, tómame, aunque sea solo una noche, pero necesito que me poseas –susurro Joey, para recargar su cabeza en el fuerte pecho de su amor secreto, Seto no podía creer que el perro le estaba rogando que lo posea , pero su orgullo le decía que no, solo le paso su mano en la estrecha cintura del joven, para entrar a su hogar, sintiendo el agradable aroma del menor que nublaba sus sentidos, ese exquisito aroma de vainilla, como el temblor por su cercanía
JOEY –susurro Moki, al descubrir la identidad del desconocido, teniendo una sonrisa de oreja a oreja, ya que nunca había visto a su hermano con ese brillo que tenía en sus ojos, pensando que su hermano se enamorara de su mami, el sería completamente feliz, ya que su amigo era alguien muy valioso, al ver que los dos pasaron cerca de él, solo se escondió para no ser descubierto, y con esta visión se fue a la cama para dormir inmediatamente, ya que quería levantarse primero para darles una gran sorpresa
HABITACION DE SETO
Seto entro con su preciada carga, con un solo propósito al carajo su orgullo, el menor le rogo que lo tomara y lo haría luego se ocuparía de las consecuencias, pero ahora iba a disfrutar de ese cuerpo, que se dio en bandeja de plata, levanto al barbilla del joven, para darle un apasionado beso, sintiendo que el menor solo envolvió sus manos en su cuello, para profundizar el beso, las manos del CEO, no se quedaban quietas tocaban todo lo que podía, para lentamente deslizar su gabardina, al tener la piel descubierta de los hombres de Joey, solo bajo un poco la cabeza para besarla, y guiar al menor a la cama, donde lo deposito, para levantarse y ver la mas erótica imagen, un lindo cachorrito desnudo y jadeante estaba en su cama
Cachorro, listo para jugar –dijo con la voz ronca Seto, viendo que el menor estaba con sus mejillas sonrojadas, como su vista fija en el, al ver eso sonrió maliciosamente para empezar a desnudarse con la atenta mirada del cachorrito, que no perdía ningún detalle al ver su miembro el menor abrió grandemente sus ojos, para empezar a retroceder al imaginarse “eso” rompiéndolo a la mitad, Seto solo sonrió de medio lado, para tomar de los pies al cachorro y atraerlo a él –se un buen cachorro con tu amo –dijo Seto, para nuevamente tomar esos labios cerezas, que tentaba a ser devorados, y el gustosamente lo haría, sintiendo el calor que emanaba del cuerpo del menor
No me digas cachorro –dijo Joey, haciendo un gracioso puchero, pero no pudo seguir discutiendo, cuando sintió una mano muy cerca de su intimidad –Kaiba, donde es-estas ahmg, uhm más rápido –gemían un cachorro, al sentir como Seto, masturba lentamente, para luego aumentar los movimientos de su mano, en su miembro, con su labios bajo a su cuello, para marcar esa cuello, como todo lo que tenía a su alcance, sintiendo los fuertes gemidos del menor, empezó a succionar uno de los rosados botoncitos, y con sus dedos masajeaba el otro
Mas Kaiba, sigue así –gemía Joey, sintiéndose feliz de entregar su virginidad a la persona que amaba con locura
Dime Seto, cachorro –dijo Seto, para introducir un dedo en la entrada de su cachorrito, viendo que el rostro del menor mostraba dolor como inconformidad, para que se distrajera empezó nuevamente a masajear su intimidad de su cachorro –relájate veras que el dolor pasara cachorrito –dijo Seto, tratando de recuperar su autocontrol y no meter sin preparación su necesitado miembro, de un solo movimiento metió los tres dedos en la estrecha entrada del menor, para empezar dilatar la entrada de su cachorro
Seto, Seto tómame, hazme tuyo –suplicaba Joey, con sus ojos nublados por el placer, deseando que su amor lo reclamara aunque sea solo una noche como suyo, que se sintiera de la pertenecía de Seto, aunque solo fuera una dulce mentira, pero el mayor sin saber que era virgen, era muy dulce como delicado, haciendo que su primera vez fuera mágica y perfecta, Kaiba ya estaba en su límite, viendo que su cachorrito ya está listo dirigió su enorme miembro en la estrecha entrada para entrar de una sola embestida para escuchar un potente grito, como el menor se arqueaba por el dolor, derramando varias lagrimas en sus bellos ojos, en cambio el CEO, tenía sus ojos grandemente abiertos el cachorro era virgen, él era el primero en poseer ese cuerpo, se quedo paralizado como excitado por el maravilloso descubrimiento, esperando que el menor le indicara cuando moverse
Cachorro porque no me dijisteis que eras virgen –dijo Seto, tratando de controlar su impulso para romper a su lindo cachorro con sus embestidas, al escuchar eso Joey solo se sonrojo, para que un rápido movimiento dejar abajo a su amor para que el mismo empezar a auto penetrarse, Seto no podía dejar de mirar el rostro de Joey, colocando su mano en la estrecha cintura ayudo con las embestidas con el menor, después de un rato Seto cambio de posiciones, para profundizar las embestidas, escuchando los fuertes gemidos del menor
Mas fuerte Seto, pártame en dos –gritaba fuera de si el menor, escuchado los gruñidos de su amor, cuando ambos sabían que faltaba poco para terminar Joey sin pensar lo ultimo abrió su corazón al mayor –te amo, te amo Seto –grito Joey para liberar su semilla, seguido del mayor que se derramo dentro de su interior llenándolo completamente, Joey al sentir eso se quedo completamente dormido, dejando a un confundido Seto que lentamente salió del interior del menor, viendo una mezcla de su semen, con la sangre virgen del menor, para pasearse de un lugar a otro en su habitación
Pero qué demonios dijo Joey, no puede ser, debió ser por el momento –susurro Kaiba, viendo dormir al bello ángel que tenía en su cama –maldición no debí haberme acostado con él, lo siento mucho cachorro pero no debió suceder eso, tú te mereces algo mejor que yo, si estás conmigo solo sufrirías yo no conozco el amor, ni mucho menos darlo, solo te traería dolor opacaría tu luz, perdóname cachorro por lo que te voy hacer –dijo Seto, acariciando por última vez los sedosos cabellos de su cachorro
CASA WHEELER
Dos hombres estaban en una mesa tomando unas copas de licor, uno más borracho que el otro que tenía una sonrisa de perversidad, como una chequera viendo al otro que se servía otra copa
Entonces amigo mío, estás seguro de hacer lo que te propuse –dijo el otro mirando fijamente al otro, este solo se tomo de un solo su copa
Estoy muy seguro Mario, para que algo me sirva mi inútil hijo –escupió con odio el señor Wheeler, al ver eso Mario, solo acentuó mas su sonrisa
Vaya amigo, vendes a tu hijo como una puta, solo para mantener tu vicio, la verdad me da igual, pero como te dije desde que vi por primera vez a tu hijo, es una belleza que deseo probar, luego lo venderé a mis clientes, pero si tu hijo es virgen te triplicare el trato, quiero ser el primero en probar el producto, para mis clientes –dijo Mario, relamiéndose los labios
Si como quieras, pero recuerda que tengo el 30% por cada hombre que se acueste con el estúpido de mi hijo –contesto el señor para que ambos brindaran
SABADO POR LA MAÑANA EN PARIS
Zero se separaba lentamente de los fuertes brazos de su esposo, acariciando su aun plano vientre con una hermosa sonrisa
Mi pequeño, no sabes cómo te quiero, veras que entre todos te protegeremos para que nadie te vaya a lastimar –susurro Zero, para acercarse a la ventana donde se miraba los primeros rayos de sol, pero al acercarse para ver la vista –KANAME –grito de dolor al escuchar eso el purasangre se levanto de un solo viendo que su esposo se alejaba de la ventana
ZERO AMOR QUE PASA –grito Kaname, acercándose a su esposo embarazado
Kaname, me quemo el sol que pasa –dijo un confundido Zero, observando cómo su mano se estaba terminando de curar, solo sintió un beso en su frente, viendo que todos sus amigos, como padres ya estaban en la habitación, mirando fijamente a su esposo
Tranquilos chicos y suegros no hay peligro, Zero es algo normal en nosotros cuando un doncel o mujer quedan embarazados, el primer o tercer mes, un par de días no pueden estar expuestos a la luz del sol, pero al parecer nuestro pequeño va a ser muy poderoso, ya que le falta un día para cumplir su primer mes, para salir ponte este capa para cubrirte para el lunes todo se solucionara –dijo Kaname, para colocarle la capa y que ambos salieran a dar su paseo matinal
Kaname, mañana será la lluvia de estrellas, como el primer mes de nuestro hijo, no sabes cómo lo espero –dijo Zero, para besar a su esposo, sin saber que el peligro se avecinaba