“Oh maldita juventud que impone su poder ante sentimientos poco convencionales”
“Oh maldito organismo que no para de reaccionar por situaciones fuera de tiempo y lugar”
“Oh maldito corazón que no logra ni por una sola ocasión obedecer a la lógica y la razón”
“Oh maldito él por caer tan bajo a algo que nunca vería venir”
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Rei prestaba mucha atención a algo que comenzaba causarle cierta incomodidad e inquietud.
Frente a sus ojos, un chico de cabellos rojizos y ojos carmín no paraba de resplandecer con semejante brillo el cual emanaba de su misma persona, no lograba concentrarse en su entrenamiento, no podía quitarle la mirada de encima.
Comenzaba a preocuparle ya que ni Nagisa, Haruka y Makoto se quejaban de ello
¿Acaso sólo a él le afectaba?
Incluso debía quitarse los lentes y frotar de sus ojos para que esos molestos resplandores se esfumaran.
Ya era algo que se preguntaba desde un principio, desde antes de conocer a Rin, ¿Qué de bueno tenía éste como para que no parasen de mencionarlo sus amigos?
Bueno, la respuesta la estaba consiguiendo desde hacía no tanto tiempo, cuando los cuatro amigos de la infancia se reconciliaron, y claro estaba, gracias a él mismo.
Rin era un chico extremadamente efusivo, detrás de su fachada engreída y molesta se encontraba un tipo de fácil trato.
¿Qué por qué no podía parar de mirarlo?
Quizás sería por su extraña fascinación a las reacciones de éste, todas eran variadas y sorpresivas, al menos a él le sorprendían, desde la vez en que se atrevió en ir al grano con el y obtener respuestas hacia su actitud tan desfavorable tiempo atrás.
Desde que pudo ver en persona, el lastimoso sentimiento que cargaba su corazón, aunque fuese solo una vez.
…
-¡vamos Haru! ¡Apresúrate!
Gritaba el aludido, quien apresurado se colocaba en posición para competir una carrera de estilo libre, y como era de esperarse con Haru.
¿Por qué tanta insistencia con Haruka sempai?
La cuestión estaba más que bien respondida, Rin se encontraba completa y enteramente enamorado de Haru.
Y era algo tonto, sobre todo porque no daba rienda suelta a demostrar los hechos. Si una persona te gusta y es tu amiga además de todo, lo normal sería confesarle sus sentimientos ¿no?
¿Entonces por qué Rin no lo hacía?
…
-mo… Rei-chan esta muy pensativo hoy
La voz de Nagisa logro interrumpir sus profundos pensamientos
-ah…
Acomodó sus lentes de puro nerviosismo obteniendo a cambio una divertida riza por parte de su amigo
-¿Qué es Rei-chan?
Era molesto tener que pensar en cosas tontas, en horas de práctica su mente volaba muy lejos que ni siquiera lograba aterrizar a la realidad.
-¿es alguna chica?
Ahora tenía un problema mayor, la terrorífica curiosidad de Nagisa
-no… no es eso
Respondió de inmediato queriendo detenerlo
-o… ¿entonces es un chico?
Los nerviosismos no tardaron en llegar, su cuerpo comenzó a temblar, si Nagisa seguía así…
-es por ¿Rin-chan?
Su rostro enrojeció por completo
-¿Qué…?
Los ojos de Nagisa soltaron un destello al ver como había atinado, no era de mucho pensar, después de todo Rei no paraba de mirar a Rin desde que llego al club a visitarlos.
-no… no, ¡no es eso! ¿De dónde sacaste semejante tontería?
Todo decía que esa era la razón, sus movimientos, sus gestos… Rió divertido, molestar a Rei era de lo más divertido.
-¿a Rei-chan le gustan Rin-chan?
-¡¿Qué dices?!
Gritó eufórico, ojala solo hubiesen sido ambos quienes escucharan aquello, pero por desgracia todos en el club lo oyeron, ahora eran el punto de atención para los demás chicos
-oigan, oigan no armen tanto embrollo
Makoto se acerco a ambos para inspeccionar el asunto seguido de Haru atraído por la curiosidad, Nagisa no paraba de reír algo que se convirtió en un problema pues su rostro no abandonaba aquel calor tan inmenso que estaba sintiendo.
-cielos Nagisa, si sigues riendo así seguro que tu alma se escapara de tu boca
Esta vez Rin fue quien llego a ambos, justo cuando volteo a verlo incluso antes de chocar miradas, ya estaba guindado de él.
-¿Qué es chicos? ¿Por qué no invitan al juego?
Estando en esa cercanía podía sentir el cuerpo húmedo del chico y el aliento fresco que chocaba muy de cerca a su rostro
-lo siento, lo siento…
Hablo Nagisa a penas intentando detener su burla, respiro hondo y mirándolo de nueva cuenta no tardó en volver a reír
-¡ya para Nagisa-kun!
Le reprochó en un estado peor del que se encontraba segundos antes de que Rin se repegara tanto a él, no ayudaba tener al chico así, no era como si debiera aceptar lo que Nagisa le estaba bromeando, ¡porque en definitiva él estaba en un grave error!
-vamos Nagisa para…
Río nervioso Makoto haciéndole señas para que éste se calmara, al no encontrar rastro de interés Haru opto por regresar a la piscina y seguir nadando, Rin entonces no tardo en alejarse de Rei para seguirlo.
“Que rápido”
Pudo darse cuenta de cómo su mente estaba siendo demasiado entrometida.
Y de nueva cuenta aparecían esos molestos destellos.
…
Podían haber varias razones para que a Rin lo viera así, por ejemplo, quizás debía hacerse un estudio de la vista, igual podían decirle que estaba empeorando y debían corregir su graduación o mejorar sus lentes, o podía ser que Rin usara alguna crema bloqueadora que contuviera brillo y por eso con los rayos del sol… o igual podía ser que la piel de Rin estaba mal y tenía que advertirle, porque podría ser que después le diera una enfermedad mortal y…
¿Por Dios en qué estaba pensando? Todo era ridículo, nada de eso podía ser, suspiro resignado. Con suerte hallaría una razón para explicarlo todo.
Después del entrenamiento Nagisa salió disparado excusándose que iría al dentista con su madre y que si tardaba esta se enojaría y le diría al doctor que le extirparan todas sus muelas para que dejara de comer tanto dulce, una explicación típica de él.
-yo también me adelanto, les prometí a Ran y Ren que los ayudaría con sus tareas, creo que se enojaran si llego tarde
El sol comenzaba a ocultarse y ya nadie estaba en la escuela, se estaba haciendo tarde.
-Haru ¿vienes conmigo?
Fueron segundos quizás los que conto, pero pudo percatarse de la mirada que Haru le dio a Rin, queriendo buscar alguna invitación suya, si, estaba seguro de que eso fue
Aquello lo enfadó, un molesto dolor en su pecho hiso que mirara de mala forma a Haru.
-si
Respondió en monotonía al no encontrar alguna objeción por parte de su rival, quien era lento en comprender la situación, incluso Rei lo entendió, ¿cuán torpe podía ser ese chico? Mejor dicho cuán curioso estaba siendo como para entender aquello e incluso enfadarle en cierto punto.
-ah… yo iré a ver a mi madre y a Kou
Menciono Rin sonando poco convincente, entonces todos se despidieron y al final, para su mala o quizás…
¿Buena? Suerte, ambos se quedaron solos.
-bueno… me voy llendo
Nunca se imagino sentirse tan incomodo con solo tenerlo a unos cuantos metros...
-espera Rei voy contigo, ah… la casa de mi madre queda cerca de la tuya
Y ahí estaban esos brillos de nuevo, nervioso atinó asentir y salir caminando junto a él.
…
El silencio era incomodo, pensaba en decir muchas cosas pero ninguna de ellas salía y ni siquiera llevaban mucho tiempo caminando. Cuando por fin quiso encararlo con algo, sus ojos parpadearon al presenciar a Rin sumamente pensativo y con su mirada ciertamente perdida.
-ah…
Soltó queriéndolo sacar de sus pensares, ante ello el chico no tardo en mirarlo buscando su respuesta.
-¿Por qué no quiere decirle a Haruka sempai lo que siente por él?
…
Como una fuerte cubetada de agua helada, o un fuerte golpe, si, así fue aquel comentario para Rin.
Rei era demasiado directo, ese era su don, aunque también su maldición, Rin había detenido su paso en total conmoción.
Si, él era directo y lo sabía pero no tenía porque retractar sus palabras, además seguramente le ayudaría ¿no?
¡¿No?!
-¿Qué dices?
La respuesta de Rin fue razonable, llena de vergüenza, euforia y soltado una que otra maldición mientras recuperaba el paso.
Era obvio que aquella plática hubiese sido terminada, y que su última oportunidad de averiguar su problema con el resplandor del chico se fuese por la borda.
...
-Haru no es cualquier persona
Sorprendente e inesperado, Rin le respondió dejándolo ahora por su parte impresionado.
-él es especial y no quiero lastimarlo… no de nuevo
Su respuesta estaba llena de dolor y desesperanza, su personalidad emblandecía cuando se trataba de Haru. Cuando hablaba así, incluso lograba remover su corazón, ver esa expresión de su rostro le conmovía demasiado.
-Eso, no impide a que usted vaya tras él, después de todo no volverá a lastimarlo ¿cierto?
De alguna forma, creía que todo tendría sentido si seguía con la plática, ayudaría a sanar la causa del dolor de Rin, lo único que faltaba para que éste se repusiera era un empujoncito, no era como si Haru fuera indiferente ante esos sentimientos.
Rei era un chico de corazón blando, ver a una persona sensible era como verse a él mismo así, era fácil comprender el sufrimiento.
-le falta determinación, Haruka-sempai no es de piedra seguro le dará alguna entrada
Se sentía extraño, como si estuviese hablando sin siquiera pensar en lo que estaba diciendo, cuando se percato de que Rin ya no lo seguía, se detuvo y miro hacia atrás.
Lo que vino en seguida lo dejo sin palabras, Rin lo estampó contra la pared de un callejón, teniendo al chico a muy escasos centímetros de su rostro, ambos respirando el mismo aire.
-no la hay…
Su voz sonaba profunda y ronca.
¿Qué era eso?
Su corazón comenzó a palpitar escandalosamente y sus manos empezaban a sudar, Rin había tomado su mano sujetándola firmemente para no dejarlo ir.
-¿Por-por qué cree eso?
Tenia dudas si su mejor opción fuese continuar con ello, pero su espíritu decisivo lo poseyó por completo
-él nunca me verá como yo lo veo a él
Rin bajo su mirada tratando de contener las lágrimas que seguro no tardarían en salir en cualquier momento.
Si n siquiera pensarlo, Rei levanto su brazo y acerco su mano hasta lograr tocas los cabellos del chico
¿Cuánto dolor podía tener?
Eso era demasiado, era eso o en serio era muy sensible. Sus pupilas se dilataron con aquella imagen del chico.
…
Por un momento deseo que alguien así sintiera lo mismo por él, seguramente a esa persona la amaría demasiado.
…
-vamos… ¿no es usted lo suficiente valiente como para darse la oportunidad? O a caso es demasiado débil para atreverse, sería demasiado bajo que se dejara vencer por Haruka-sempai una vez más
Rin levanto su vista y lo observo unos segundos. Aquello le sonó a reto y como consecuencia atinó a sonreír
-¿perder eh?
Se separo de éste dejándolo en libertad y caminó hacia adelante. Rei pudo ver como el viento movía rítmicamente los cabellos de Rin.
“Hermoso”
En ese instante, no pudo detenerse a recapacitar lo que pensó…
…
-te escucho Rei, ¿Qué debo hacer?
Su sonriza era contagiosa, logro dibujar en su rostro una igual, sintiendose confidente.
-usted si que me hace enojar
Acomodó sus lentes con el fin de obtener confianza.
…
Solo pensó en ayudar a ese chico tan desdichado y a cambio se ayudaría él mismo para dejar su ridícula curiosidad a un lado y seguir adelante sin más embrollos.
Eso era lo que quería intentar en ese preciso momento, quien diría que las cosas no saldrían como lo pensaba…