Wu Fan podía sentir todo el estrés acumulado recorriendo su cuerpo completo, sus músculos dolían, su cuello dolía, llevaba como mínimo unas 10 tazas de café, para poder soportar más horas despierto. Su trabajo lo estaba consumiendo.
Wu Fan solo quería estar en casa, en su calientita cama, con su amado Chanyeol. Pero no, el estaba en esta estúpida y aburrida oficina, deseando algo que por el momento no puede obtener.
Tantas horas de trabajo y estar lejos de su pareja lo tienen agotado, derrotado, solo quisiera tener más tiempo para estar con el menor. Acaso es mucho pedir eso? A veces odiaba su trabajo, por alejarlo tanto tiempo de la persona que ama.
Odiaba su trabajo, porque por esa razón a discutido algunas veces con el castaño, quien termina disculpándose y acurrucado en su regazo, mientras el mayor le susurra palabras de amor al oído, hasta que se queda completamente dormido.
Wu Fan lleva tres días, tres malditos días, encerrado en esa oficina, viendo solo el rostro agotado de su secretaria y algunos trabajadores. Si no hubiese sido por el percance que ocurrió en la empresa y estuviera a punto de perderla. Ahora mismo estuviese recibiendo mimos del menor, mientras están disfrutando de una película, ambos recostados en el sofá, con Chanyeol sobre su pecho, ambos aferrándose al cuerpo del otro.
Suspira por millonésima vez, tratando de disipar su cansancio, frustración, porque está seguro que pronto se volverá loco. Afloja el apretado nudo su corbata y da un nuevo sorbo a su taza de café. Dejando a su espalda hundirse un poco más sobre el acolchado respaldar de su silla de cuero.
Sus ojos se cierran por inercia, y sin poder evitarlo cae en un profundo sueño.
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Un alto castaño se dirige hacia el escritorio de una muy cansada secretaria, quien le regala una cansada sonrisa.
Se encuentra el señor – dice Chanyeol con un especial brillo en sus ojos
La señorita asiente algo cansada y le deja pasar, Chanyeol agradece con una amable sonrisa y una leve inclinación de cabeza y se adentra en la espaciosa oficina.
Sus labios se esbozan una amplia sonrisa, y sus ojos brillan con emoción, demasiada emoción, a extrañado ver aquellas doradas hebras, esa blanquecina piel, esos rosados labios que ahora están un poco resecos. A quien engaña, extraña todo de Wu Fan, sus sonrisas, sus brazos rodeándole protectoramente, sus labios unidos a los suyos, su todo, porque Wu Fan simplemente era su todo.
Camino lentamente, intentando no despertar al mayor, y recorrió las marcadas facciones del rostro de este con sus ojos. Adoración, si adoración era lo que esos ojos marrones reflejaban. Amor y sobre todo confianza. Chanyeol tenía muy claro cuán importante es Wu Fan en su vida,
Deslizo sus piernas colocándolas a los costados, quedando sobre el regazo del mayor, llevando sus largos brazos al cuello de este y los apretó. Dejó un suave beso en su frente, y en la nariz, y por ultimo sus labios.
Wu Fan sintió algo cálido en su abdomen y sentía una presión sobre él, y un olor usualmente familiar. Sus labios se estiraron hasta formar una amplia sonrisa. Llevó sus manos a las caderas de Chanyeol, atrayéndolo hasta si, sin abrir los ojos, escondió su rostro en el cuello del menor, rozando la delicada y sensible piel con su nariz, aspirando el embriagador olor.
Te extrañé –le susurro en el oído y sin más, mordió el lóbulo
Y Chanyeol gimió
Wu Fan apretó el delgado cuerpo al suyo, sintiéndose lleno, completo y feliz, cualquier rastro de estrés se esfumó, tenia lo que quería, no donde ni como lo quería, pero le bastaba.
Sus labios en un lento pero demandante beso, sus lenguas jugaban a encontrarse, a rozarse. Ahogaban pequeños gemidos en la boca del otro. Se acariciaban. Las amplias y delgadas manos de Wu Fan tomaron los glúteos de Chanyeol y los apretó y masajeó. Chanyeol gimió de nuevo.
Sus caderas se movían, sin pedir permiso alguno. Ambos buscaban contacto, contacto que se les había negado hace unos días atrás. Pero ellos lo buscaban ahora, y lo iban a conseguir.
Chanyeol retiró por completo la corbata del mayor, e iba desabotonando uno a uno los botones de la blanca camisa. Besando cada porción de piel que iba quedado descubierta.
Wu Fan llevó su cabeza hacia atrás, y se apretó más a Chanyeol. Este por su parte ya había llegado a uno de los pezones del mayor. Lo mordía, lo lamia con su caliente lengua. Sensibles. Ambos estaban sensibles y gemían, gemían por cada mínimo toque.
Fan levanto a Chanyeol haciéndolo sentar en el escritorio. Le sacó apresuradamente la camisa y empezó a deshacerse de los pantalones contrarios, hasta dejar al castaño únicamente en bóxers. Hizo lo mismo consigo mismo.
Su lengua recorría el suave cuello de Chanyeol, sintiendo como el menor temblaba y se aferraba mas a sus manos que estaban apoyadas en la mesa.
Volvió a sentarse, estando en la misma posición de antes. Chanyeol movía sus caderas, y sus miembros se ponían más duros a cada roce. Los gemidos eran más libres, sin importarles que alguien fuera podría escucharles.
Chanyeol tiró fuerte de los rubios cabellos, haciendo a Wu Fan gemir más fuerte y morderle el hombro. La mano de Fan ahora se encontraba acariciando toda la extensión del menor, apretándolo, y masajeándolo de arriba hacia abajo. Chanyeol llevó su cabeza hacia atrás, gimiendo mas fuerte mientras el mayor lo volvía loco.
El miembro de Fan dolía y palpitaba de sobremanera, el bóxer era cada vez más apretado, y su miembro rogaba por ser liberado. Volvió a sentar a Chanyeol en el escritorio, deshaciéndose a como pudo del bóxer de este y del propio.
Empujó las cosas fuera de la mesa y recostó al menor sobre esta, y Chanyeol gimió en sorpresa. Wu Fan Tomó las piernas contrarias y las llevo hasta sus hombros, pudiendo así deleitar su vista con la rosa entrada del menor.
Se relamió los labios bajó su rostro hasta quedar a pocos centímetros del erecto miembro de su amado. Dejo reposar su cálida respiración, sintiendo los temblores del cuerpo del castaño.
Chanyeol y su rostro eran todo un poema, labios rojos, hinchados y entreabiertos, sus mejillas teñidas de un rojo suave. Sus respiraciones eran aceleradas, y ambos estaban deseosos por sentirse.
Wu Fan tomo en la cabeza del miembro de Chanyeol, dejando pequeños besos y lamiendo de vez en cuando. Chanyeol apretó los cabellos de Fan entre sus manos. Moviendo inconscientemente sus caderas. Y Gimió.
Wu Fan había metido su miembro en la cálida cavidad de este, haciéndolo temblar y gemir fuerte. Y se movió. Rápido, ahuecando las mejillas para brindarla más placer. Y Chanyeol puso en blanco su mirada.
Espasmos y más espasmos recorrían su cuerpo desde la punta de los pies hasta el final de su espina dorsal. Wu Fan sin duda estaba haciendo buen trabajo.
Fa- Fan – gimió Chanyeol incitándolo a continuar. Y así lo hizo.
Mordió, su glande fuerte, pero suave y Chanyeol se corrió y Wu Fan se lo tragó.
Limpió con su lengua cualquier rastro de semen y lo besó. Haciéndolo probarse así mismo.
Busco algo a tientas. Abriendo algunas gavetas, sin dejar de besar al menor, hasta que lo encontró. El sonido de un Plop atrajo la atención de Chanyeol y asomó su vista hasta encontrarse con un tubo de lubricante en la mano del mayor. Y apretó los ojos, abriendo más sus piernas.
Wu Fan aplicó un poco del gélido y frio liquido en sus largos dedos, presionando uno en la entrada del menor, al mismo tiempo que ingresaba su lengua en la tan conocida cavidad. Introdujo hasta el fondo su dedo, moviéndolo en círculos, acallando con su boca los gemidos de Chanyeol.
Un segundo dedo fue introducido, moviéndolo en círculos y el menor gemía más fuerte, apretando sus manos en los hombros del mayor dejando marcas por tanta fuerza impuesta en la blanca piel.
Tres dedos entraban y salían de Chanyeol mientras buscaba más fricción, moviendo sus caderas en compas de los dedos que lo estaban volviendo loco.
Fa- Fan te necesito, te necesito dentro de mi ya mismo – le susurro al mayor, mientras apretaba aun mas los rubios cabellos. Wu Fan Tembló, sintiendo que sus piernas le fallarían en cualquier momento.
Su propio miembro vibro, al imaginarse al fin estar dentro del menor, después de haber estado apartado tanto tiempo de él.
Retiró sus dedos rápido y sin cuidado alguno. Colocando un poco mas de lubricante y espacierndolo por su extensión, estimulándose así mismo. Direcciono la cabeza de su miembro hasta la entrada del menor. Y se empujo lento. Puso sus ojos en blanco y se mordió fuertemente el labio inferior, al sentirse apretado y succionado.
Di- Diablos Chanyeol, so- solo no entro en ti en tres días y estas tan apretado – gimió el mayor entrando de una sola estocada en Chanyeol. El tener las piernas del menor en sus hombros lo hacía entrar fácilmente en el.
Dando estocadas certeras y fuertes. Saliendo y adentrándose cada vez más profundo. Ambos temblaban a cada embestida. Se sentía tan bien. Tan delicioso. Tan exquisito.
Sus labios se unían de vez en cuando, y sus movimientos de caderas cada vez eran más rápidos. Fan salió del menor y este gimió en protesta.
Quiero que me montes channie – dijo sonriéndole lascivamente y Chanyeol sonrió ampliamente, como amaba montarle, sentirse el del mando completo.
Wu Fan se dejo caer nuevamente sobre la silla de cuero, mientras Chanyeol se colocaba sobre él, dejando sus piernas a los costados del alto. Llevó su mano hacia abajo y tomo el duro miembro de Wu Fan, lo direccionó frente a su entrada y se dejó caer sin cuidado sobre este.
Ambos encorvaron sus espaldas. Chanyeol grito al sentir el duro miembro de Fan tocar directamente su próstata, haciéndole ver estrellas, juegos artificiales y cualquier cosa que pudiese estallar, a través de sus parpados.
Levantó sus caderas volvió a dejarse caer ahora con más fuerza, siendo tocado en el mismo punto. Una, dos, tres y muchas más veces. Sus cuerpos sudados golpeaban uno contra el otro, haciendo fuertes sonidos a cada embestida. Chanyeol mordió el labio inferior del mayor, escuchando el gemido de Wu Fan, más que dolor, la mordida le causó aun mas placer. Y Chanyeol sonrió.
Fan tomó el miembro del menor entre sus dedos, apretándolo levemente y acariciándolo ascendente y descendientemente, unas cuantas veces más, hasta que sintió la caliente semilla de este deslizarse entre sus dedos y salir disparada directamente a su abdomen.
Wu Fan gruño en cuando sintió como su miembro era apretado con mayor fuerza por las calientes paredes del menor.
Aceleró la velocidad en sus embestidas, apretando más el cuerpo del menor al suyo. Y soltando un ensordecedor gemido en cuanto se corrido dentro del menor.
Chanyeol sintió el caliente liquido llenar sus entrañas, y gimió, porque se sentía raro, pero también excitante. Wu Fan dejó caer su frente en el hombro del menor y este hizo lo mismo pero en el hombro del mayor.
Sus respiraciones eran rápidas, entrecortadas, sus pechos subían y bajaban, pero ambos sonrían, apretándose más al cuerpo del contrario.
Se separaron un poco, sonriéndose y uniendo sus labios en seguidos cortos besos. Chanyeol tomó el rostro del mayor entre sus manos, y comenzó a besarle por todos lados, susurrando un sinfín de te amo, por lo cual el mayor sonreía y cerraba sus ojos, dejándose mimar.
Esto es lo que necesitaba – habló el mayor
Lo sé – sonrió el menor, “yo también “
Te amo –susurro el mayor, besado su frente, acariciándole las mejillas con la yema de los dedos, mientras sus miradas estaban conectadas.
Miradas que estaban cargadas de silenciosas promesas de amor, de pura y completa sinceridad. De cariño, amor y mas… mucho mas.
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Wu Fan pasó el resto de las horas, como renovado, tarareando una canción que solo su imaginación conocía. Estaba cerca de terminar con los papeles que había tenido sobre su mesa.
Frunció los labios cuando vio al delgado cuerpo que reposaba sobre un largo sofá frente a su escritorio. Pero sonrió al ver lo tierno que su pareja se veía, con un pequeño puchero en sus labios.
Realmente la presencia del menor le había aclarado la mente, y ahora hasta encontró una solución más fácil, golpeándose mentalmente, pues se estaba ahogando en un vaso de agua. Pero solo bastó la presencia de Chanyeol para que pudiera aclarar a su alocada cabeza.
Te amo – susurro sonriendo al dormido chico frente suyo… y continuó con su trabajo.