En un día caluroso del mes de Junio, en el corazón de Corea, en la gran Seúl, un grupo de chicos algo particulares, vestidos con pocos ropajes y cubiertos con mucho bloqueador solar en las delicadas partes de su cuerpo. Se paseaban por esos numerosos parques que gracias a sus densos arboles hacían del ambiente ligero y vitable. Tal vez por ello preferían pasar un día en esos lugares con vegetación que en un lugar urbano rodeado de una capa densa de dióxido de carbono.
Como era la típica rutina semanal, al tocar las doce del mediodía, comenzaba el horario del almuerzo, que al parecer era el momento más esperado de las veinticuatro horas diarias. No solo porque últimamente acostumbraban a comer en un restaurante de buen gusto, sino, porque en ese horario, era el único donde podían dar un largo respiro y se olvidaban de todas las actividades musicales.
Solo eran ellos y su plato de comida.
-¡Hey chicos!- decía el manager llamando la atención -¡Hey chicos! ¡Escúchenme!- pero era casi imposible, eran fieras hambrientas que querían satisfacer su hambre.
- ¡¡Chicos!!- demandó el líder -¡Escuchen lo que el manager nos tiene que decir!- silencio total.
-Muchas gracias Soohyun- el aludido sonrió -Bueno, antes que vuelvan con sus “asuntillos” - refiriéndose a Kevin que daba de comer a un sonriente Kiseop -les tengo una gran noticia-
-¿Es buena o mala?- pregunto un curioso Eli.
-Bueno...que dirían si…- redoble de tambores- ¡Ukiss se va de gira mundial por Latinoamérica!- exclamo emocionado el adulto.
-¡¡Yupii!!- se exaltaron los menores por la enorme felicidad de volver a América.
-¿Y cuáles son los países que visitaremos?- preguntó un expectante Hoon.
-Por ahora está confirmado Colombia, Perú y México- respondía mientras sacaba una hoja de un folder negro -Y serán para…- analizo con la vista aquella hoja que parecía ser un horario -el 21 de este mes hasta el 28-
-¿¡Que!? ¿Tan pronto?- dijeron al unisono los hambrientos.
-Así lo determino el jefe- se encogió de hombros y le restó importancia.
-Pero señor…-cuestionaba con respeto el líder -Ahora nuestros horarios están a full, ya ni dormimos las 8 horas diarias. No nos estamos quejando, pero esperamos su comprensión. Diariamente solo dormimos 4 horas y los menores -desvió su mirada hacia el más pequeño- los menores están muy estresados- se acercó al pequeño que comía muy concentrado- hasta el pequeño Dongho tiene una apariencia terrible- el mencionado se sorprendió de una forma tan tierna que el mayor no pudo evitar acariciar su fino rostro con una sonrisa cálida -Mire este rostro- señalando la tez del maknae- estos pequeños ojos tienes bolsas con ojeras- acarició sus parpados inferiores- su piel está muy deshidratada- piñizcaba sus cachetes teñidos de un rosado leve- ¡y qué decir de estas manos!- las cogió con delicadeza- están muy resecas y…- al sentir el contacto con la piel ajena se dio cuenta que estaban…- frías…- dicho esto acerco sus labios a los delgados dedos del menor y los envolvió con tiernos caminos de besos.
-Hyung~- decía en risitas el tierno maknae sonrojado- me haces cosquillas…- pero a pesar de su suplica Soohyun no dejaba de atacar y sinceramente…le gustaba el contacto de su piel con la de su donsaeng aunque no lo admitiese.
- ¡COFCOF!- los demás miembros hicieron “notar” su presencia.
-…- trato de procesar la escena- Bueno, eso lo veremos luego, hablare con el jefe- y dicho esto se retiró el manager.
Era verdad, los pobres jóvenes estaban cansados hasta los huesos. Sus apariencias, como dijo Soohyun, eran simplemente desastrosas. Esos ojos rasgados estaban envueltos de bolsas llenas de ojeras con un notorio morado fuerte. La fina piel que cubrían sus cuerpos estaba pálida y reseca como un papel crepe gastada y áspero, que a pesar de ponerle capas y capas de maquillaje, no podían ocultar las imperfecciones expuestas producto del cansancio.
Y ni que decir de su alimentación, su desayuno era una chica taza de leche y un pan con soledad, no se debía a que el presupuesto era mínimo, sino que, debido al poco tiempo empleado hacia que su alimentación este seriamente descuidada …Pero ¿enserio valía la pena ser explotados de tal forma que ni comer podían?
En poco tiempo Ukiss se convirtió en una de las agrupaciones juveniles más famosas y reconocidas no solo en lo interior de Corea, sino que traspasaban esos límites y llegaban hasta nosotros los occidentales. Y como era de esperarse, tenían una series de actividades que hacer: entrevistas, secciones fotografías, MC de programas, locutores de radios, grabar los MVs, hacer las giras y concierto, firma de autógrafos y más entrevistas y más secciones fotográfica y…Aunque no lo crean, ese era el precio de ser una famosa celebridad, perdías tu vida privada y con el tus intimidades…
Pero…
No importaba lo que hacían o lo que dejaban de hacer, no importaba las horas que dormían o faltaban por dormir, no importaban lo que comían o lo que dejaban de comer, no importaba como terminaba su persona o como debía terminar. Simplemente eso no importaba, porque ellos eran UKISS, no solo un simple grupo con “fines de lucro”, ellos eran más que unos ídolos, ellos eran y serán lo todo y lo nada para nosotras, las Kissme.
-…- trataba de formar las palabras adecuadas para animarlos- …Se lo mal que se sienten chicos, pero no se olviden la razón por la cual estamos aquí…- fue lo único que pudo decir sin tartamudear.
-Lo sabemos hyung pero…no es sencillo- revelo con tristeza Hoon.
-Lo sé…pero vale la pena- le regalo una sonrisa reconfortante - No se preocupen, saben que pueden contar conmigo en todo y yo…les prometí cuidarlos y…eso hare- y con un tono de seguridad termino su “discurso”.
Después de terminar de comer abandonaron su lugar preferido y se dirigieron, con pesadez, a otra sección fotográfica. Últimamente estaban muy ocupados con su nuevo álbum “Inside of me”. El video ya estaba hecho, pero faltaban las promociones y propagandas las cuales se darían después de su gira por Latinoamérica.
Los siguientes días transcurrieron rápido y sin que se den cuentan ellos ya estaban en el avión esperando a que el vuelo llegase a su destino y poder volver a reencontrases con sus amadas Kissme’s. El manager estaba muy ocupado coordinando y puliendo los mínimos detalles para la llegada de la agrupación a Lima y Soohyun, como su mano derecha y como líder, se encargó de las organizar las maletas de los miembros.
Cada uno llevaba lo esencial como ropa de muda y sus útiles de aseo, o su colección de gorras coloridas como Eli y por lo visto, cada uno solo llevaba una maleta como máximo. Pero… ¿Qué traerá el maknae en esas dos maletas de ruedas que parecían ser muy pesadas? Soohyun rio en silencio viendo como el menor trataba de llevar a rastras sus maletas que parecían tener más peso que él, y sin pensarlo dos veces, se acercó a su pequeño niño y lo ayudo a cargar sus maletas.
-Hyung…- decía un tímido maknae- ¿Cree que llevo muchas cosas?-
-…- rio el mayor- No pequeño, si tú crees que es necesario todo esto…lo puedes llevar si quieres-
-¿En serio?- decía muy emocionado y feliz Dongho- Entonces lo subiré al avión- antes de irse, abrazo a su hyung- Soohyun- decía con ternura en un susurro mientras lo abrazaba- Gracias…-
Soohyun se quedo viendo como su donsaeng jugueteaba y corría como un niño llevando a rastras a sus dos grandes maletas y sin que quisiese que alguien lo ayudase. “Dongho…A veces me pregunto qué tan tierno puedes llegar a ser…” pensó mientras subía al avión detrás de sus compañeros.
Los asientos estaban agrupado de a tres así que, tres miembros podía ir juntos, pero como eran siete los que integraban Ukiss, uno sobraría, y como usualmente, era Soohyun, por ser el líder y el mayor se iba acompañado del manager. Pero…por alguna razón no quería eso, quería ser incluido en los grupos, no solo ser un miembro más, no solo ser el líder y el mayor…él quería también saber que podía contar con ellos y saber que ellos no solo eran sus compañeros de trabajo, sino, unos buenos amigos…o eso es lo que se decía aunque otro pensamiento corría por su mente “Pero Soohyun, ¿tú quieres que te incluyan los demás o que el maknae te incluya?” su conciencia le escupió como agua fría haciendo que vaya con duda.
¡Decídete Soohyun! En diez minutos el avión despegaría, y si no te decides en pasar las diecisiete horas al lado de un manager que no dejará de darte indicaciones o aceptar que quieres viajar con el pequeño maknae, no solo por ser su hyung, sino porque en verdad quieres estar con el…por que en verdad lo quieres.
No sabía lo que haría ¿o sí?
-Hey Hoon- decía mientras que se acercaba al castaño que estaba al lado del maknae y de AJ.
- ¿Uhm? Dime hyung- lo miro mientras se sentaba al lado de Dongho.
-Este…ah…bueno…yo- su voz se apagaba con cada palara que decía- yo…-
-Hoon creo que el manager te llamaba para que le ayudase con las maletas- llego para rescatarle AJ que le guiñaba el ojo con señal de complicidad.
-¿Con las maletas?- curiosó Hoon- ¿Pero Soohyun no las guardó?- bueno, AJ no pensó en casi todo.
-Ehh…sí, pero…dice que quiere que las guardes tú…porque, sabes cómo organizarlos…- dijo casi preguntando.
-Ash este manager- protestaba mientras se paraba- Ya le había enseñado que se tiene que organizar en orden alfabético…- se quejaba mientras que desaparecía de la puerta del avión.
-Gracias AJ- susurro Soohyun y el receptor le guiño el ojo con complicidad.
El plan salió a la perfección, luego de que Hoon haya ordenado las maletas no le quedó otra cosa más que sentarse al lado del manager claro sin que antes le cuente una de sus antiguas anécdotas y que el castaño fulminase con la mirada al líder por hacer de ese viaje, más aburrido aún. Por otra parte, en el lado derecho del avión iban viajando un sonriente Kevin, o mejor dicho el rey Kevin con sus doncellas Eli y Kiseop que estaban a sus costado y no paraban de darle mimos y engreimientos, es que Kevin con una sonrisa suya hacia que hasta el manager enojado le de vacación por un mes…y créanme que lo hizo.
Y por el lado izquierdo del aeroplano teníamos a un AJ ya durmiendo y como no con ronquidos por todos lados, seguido de un Soohyun muy sonriente al ver que su pequeño, que estaba en la parte de la ventana veía con curiosidad el paisaje y las nubes acompañado de pequeñas risitas que simplemente lo hacían ver muy tierno…a para Soohyun, muy apetecible.
No pasaron más de 3 horas y todos los pasajeros echaban feroces ronquidos. Kevin tenía la cabeza apoyada en el hombro de Kiseop mientras que se abrazaba a este teniendo a un Eli que tenía su cara pegado al vidrio de la ventana circular haciendo que se vuelva húmeda por tener la boca abierta.
¿Y dónde está Hoon? El pobre después de escuchar como el manager tuvo la dicha de casarse y como terminaron sus tres matrimonios en sus cuarenta años, se quedó más que seco no solo porque los bostezos de sus compañeros eran contagiosos, sino que en verdad, sin exagerar, esas historias ¡eran muy aburridas e increíblemente extensas!
Aunque no lo crean, los únicos que estaban despiertos eran AJ y Soohyun. El primero, por estar jugando con su Tablet ese bendito juego que no le dejaba pasar del nivel 7 al 8. Y Soohyun, porque simplemente su corazón latía con mucha fuerza por tener la cabeza del más pequeños de todos en su hombro dejando que escuchase su cálida respiración y que ansiara con más fuerzas los labios jugosos y bien formados de su dosaeng preferido.
-¿Sabes que se nota a kilómetros no?- comentaba sarcásticamente AJ sin despegar la mirada en su aparato.
-¿¿Uhm?? ¿A qué te refieres?- Soohyun apenas movió la cabeza, no quería moverse de donde estaba, no quería perder la perfecta vista de Dongho ni su cálida piel en su ancho hombro.
-Ya sabes…- decía riéndose- ¿Crees que pensamos que para ti Dongho solo es un maknae? Nosotros sabemos mejor que tú lo que pasa por tu cabecita- soltó sin mirarle a los ojos.
-…- se avergonzó- Yo…les quiero a todos por igual…- soltó una sonora carcajada AJ.
-No te engañes más Soohyun, tu mejor que nadie sabes lo que Dongho significa para ti, no solo es un simple compañero, no solo es un simple donsaeng, tú, más que nadie sabes que, lo que sientes por él es…- fue interrumpido por un ronquido de oso de parte del maknae
-…- rio con dulzura Soohyun- Lo se AJ, sé que no es un simple maknae, él es algo mucho más importante que eso…- Miro directamente a los parados del menor y no pudo evitar desviar su mirada en los labios ajenos.
¿Qué era lo que en verdad quería? Sin duda lo que deseaba más que a nada era al pequeño maknae, pero… ¿Era correcto? Desear a otro hombre con toda tu alma y pasión, querer estar con él siempre sin importar las circunstancia. Poder protegerlo y cuidarlo por ser de su propiedad. Soohyun quería que Dongho sea de él, y de nadie más que de él, porque esos sentimientos no eran simples gustos o atracciones…era algo más que un sentimiento, era algo puro.
Soohyun, inconscientemente ¿Quién sabe? Se acercó a esos labios carnosos de su mayor tentación, era verdad, lo que más quería era probarlos, le apetecía desde hace un tiempo sentirlo, quería ser el único quien lo podía comprimir contra los suyos y sumergirlo en la más pura y profunda sensación, porque de alguna u otra forma, ese beso sería la forma física de demostrar los sentimientos por su pequeño, porque…ese sería el primer beso del maknae…
El primer beso juntos…