-En realidad hay algo que deberia decirte, John.
Este podria ser el adios para siempre, penso para si...
No. No; Sabia con seguridad que podria salir bien librado de aquella mision. La pena que lo invadia, muy a su pesar y de no poder decirlo en voz alta, era la separacion. Saber que ya no habria espacio para el en su vida, almenos no de la manera en que secretamente lo deseaba.
Antes de proseguir contemplo como viento acariciaba torpemente la rubia melena de su amigo. Sus ojos castaños debajo del seño que el sol obligaba a fruncir, y,entre el mar de claras señales de querer abrazarle, cada una de sus deducciones se fueron desvaneciendo.
El avion aguardaba por el para llevarlo a su probable ejecucion; cortesia de su querido hermado Mycroft, gesto sorprendentemente fraternal para su gusto.
Y ahi delante de el, el hombre que sin duda, tal como habia afirmado el dia de su boda, le habia salvado en incontables ocaciones de distintas maneras. De pie, ahi mirandole y a tan solo unos pasos de el...su amada esposa, Mary.
Y antes de permistirse una breve entrada a su palacio mental, para confirmar los hechos que lo llevaron a salvar a esa mujer, a salvar a la que probablemente seria la unica posiblidad de su mejor amigo para ser feliz, la voz de john pronuncio sus palabras impacientes.
- Solo sueltalo Sherlock - John paseo la mirada del bello rostro de su mejor amigo el gran Sherlock Holmes, hacia el horizonte imaginado lo tediosamente cotidiana que seria la vida (almenos durante los 6 meses que iria cumplir la mision impuesta por su hermano Mycroft salvandole asi la vida). Regreso de nuevo la mirada a esos ojos azules, preguntandose que estaba apunto de decirle esta vez, algo increiblemente hiriente y estupido, algo muy propio de Sherlock seguramente.
- John he querido decirtelo siempre, y nunca he podido, y ya que es poco probable que nos volvamos a encontrar, bien podria decirtelo ahora... -
Sus ojos azules pasaron de Watson, a Mary y una vez mas a Watson.
El pensar en el bien emocional de otra persona era nuevo y confuso para si. Su mente ascelerada imagino 26 escenarios diferentes en una fraccion de segundo. lLo que estaba apunto de decir, tendria graves y dolorosas consecuencias, para Watson y lo seres queridos que alrededor de el.
La mirada nostalgica y agradecida de Mary no hacia mas facil confesar aquel secreto. Si moria en esa mision, no se perdonaria el daño que haria al decir toda la verdad.
Watson iba dibujando una sonrisa en su rostro en espera de alguna frace idiota por su parte.
-Sherlock en realidad es nombre de mujer.
Tras una fraccion de segundo en silencio, acompañada de la brisa fria del viento, su querido amigo rompio en una carcajada.
Sherlock decidio conformarse en el consuelo de su sonrisa sincera. Conteniendo las lagrimas en los ojos, mientras guardaba para si el dolor de su corazon, penso que mentirle por su propio bien, se habia vuelto un acto reflejo.
Lo cierto es que habia tomado una decision que solo contemplo como el ultimo de los escenarios; morir con la verdad de los hechos sellada para siempre en sus labios.
- No, no lo es.- Contradijo Watson algo divertido, todavia con la sonrisa en el rostro - No le pondremos a nuestra hija tu nombre Sherlock.
"Finjir una sonrisa mas, solo una sonrisa mas y el secreto estara sellado para siempre" penso Sherlock- Valia la pena intentar. - Agrego al tiempo que extendia su mano para sellar el secreto, conteniendo como el exelente consultor que siempre ha sido, sus emociones para no dejarse llevar por ellas, estrechando asi la mano de su mejor amigo.
En la suave marcha del avion, y el completo silencio, mirando por la ventanilla alejarse de todo aquello que solo en ultima instancia contemplo tener; El exentrico Consultor se abandono por primera vez en su vida a unas lagrimas sinceras.
Minutos mas tarde una voz lo saco de su ensimismamiento.
-Señor...Tiene una llamada de su hermano.- Al otro lado del telefono, reconocio la voz de Mycroft.
-¿Como te sienta el exilio querido hermanito?
-Solo han pasado 10 minutos.- señala en un tono asqueado, un tanto molesto por la interrupcion, al parecer su querido hermano quiere regocijarse como es su costumbre.
-Bueno, espero que hayas aprendido la leccion, al parecer te necesitan aqui.
-¡Por el amor de dios Mycroft!, ¡Decidete!... ¿Para quien te apetece el favor?
-Para Inglaterra.Al parecer Moriarty regreso.
Dos horas mas tarde, en la calidez de su viejo apartamenteo, tumbado en la comodidad de su sillon y en compañia de la señora Houdson, cierra los ojos para reposar, despues de todo, sus investigaciones habian dado frutos: Los subalternos de moriarty estaban actuando por su propia cuenta, Moriraty debio dejar instrucciones para despues de su muerte, la trampa para que ellos cayeran estaba tendida. Lo unico que podia hacer ahora era esperar.
Ya no quedaba mas que analizar, y eso lo irritaba, pues a su mente acudia una y otra vez ese recuerdo en el aeropuerto privado del servicio secreto, la confecion que se guardo para si.
No, no podia pensar en eso ahora, pero nada mas ocupaba su mente.
Watson no habia acudido a su apartamento apesar de los multiples mensajes de texto envidados a su celular.
El y Mary habian tomado su camino a casa, dejando a Sherlock por su parte, y el no tenia intenciones de estropearle la noche a Watson y su esposa, despues de todo debia velar por ella y su hijo aun por nacer. Si quedaba tiempo Watson lo alcansaria en la escena, de eso estaba seguro.
Aun asi la idea de ver Watson a la cara despues de eso era una idea insoportable, su amigo no era por completo un idiota y se daria cuenta de su comportamiento e insistiria en averguar lo que le pasaba, claro siempre podria darle una mentira creible y satisfactoria, pero la idea lo molestaria toda la tarde.
Decirle la verdad parecia la solucion, le permitiria pensar claramente y continuar con el caso, pero la culpa (sentimiento bien aprendido de su colega) lo molestaria en su lugar, y liberarlo de la culpa no estaria en su propio poder si no en el de watson, pues en esta nueva leccion (la de preocuparse por los otros), expiar la culpa, segun Watson, era cuestion de los demas y no propia.
-La opcion mas viable es callar.- Afirmo para si en voz alta sin darce cuenta.
-¡Por fin lo entiendes!.
Sherlock se incorporo rapidamente en el asciento, para ver el rostro propietario de la voz, que al instante habia reconocido: De pie en el humbral de puerta, con su acostumbrada camisa a cuadros, su abrigo de parches y su pantalon de vestir, rubio como los rayos del sol, mirandlo con una sonrisa en la cara, John Watson le devolvia la mirada.
-¡Tu!- un grito de sorpresa tras ponerse de pie y señalarlo dramaticamente con el dedo indice - tus botas llevan lodo, y llevas la misma camisa que hace 2 hr con 37 min, probablemente llegaron a casa y tuvieron una discucion, por las marcas en la comisura de tus labios, bebiste en un bar, no por la pelea, si no para darte valor. No llevas puesto el anillo de bodad, conociendote, no por infidelidad, tratas de esconder tu matrimonio, eso indic...
-¡Basta Sherlock!...Mira, si tuve una pelea con Mary, yo... No queria venir ayudarte, no almenos hoy, no quiero exponerla a peligros, le he dado el anillo para que se esconda, tal vez los compinches de Moriarty todavia no saben de mi matrimonio con ella... No se si saldremos vivos de esta...De nuevo...No planeaba venir hasta mañana pero ella me ha obligado a marchar antes...Y si he bebido ha sido p...
-Vienes a interrogarme.- intervino Sherlock, arqueando una ceja tan sorprendido como nervioso.
-¿Q-Que? No!, no no...si, bueno algo asi.
Sherlock hizo ademan de ofreserle el sillon de costumbre a su amigo.
Su nueva habilidad adquirida de pensar en los sentimientos de los demas venia con gran cantidad de desvenjaas, como el sentirse nervioso. Pero por Watson, su unico amigo verdadero, bien valia soportarlo.
-Te escucho.-Afirmo Sherlock al tiempo que el mismo tomaba asciento con aire de paciencia en la voz.
-Bien Sherlock, desde que bajaste del jet, no he dejado de pensar...
-Oh!...-dejo escapar con sorpresa el consultor - ¿Con que de eso se trata?- Levantandose del Sofa. Paseo unos instantes por el salon sintiendo la mirada de Watson sobre el- Bien, si quieres saber... Les he tendido una trampa. Todo esta puesto en cooperacion con Mycroft, y algunos oficiales de Scotland Yard, no es tan complicado en realidad, cuento con quien sea que tomo el mando sea lo suficientemente estupido par...-
-No Sherlock- intervino Watson perdiendo la pasciencia- no es eso lo que he venido a preguntarte sientate porfavor- Sherlock volvio a tomar asiento. No sin antes fijar la mirada en algun punto que no fuera el rostro de Watson.
-Gracias. Como te venia diciendo, desde que basjaste del jet, solo pasaste por mi lado y dijiste que Moriarty habia vuelto. Yo por supuesto tuve que ir con mary a casa antes de actuar. Sin embargo... Lo que en realidad me preocupa... - hizo una pausa breve, tratabndo de hilar sus ideas - Mira... Niquiera volteaste a verme, lo que es usual en ti cuando estas pensando en in caso. Pero has evitado llamarme. Incluso mirarme a la cara, y cuando no respodi tus mensajes no me acosaste como es tu costumbre... Estoy seguro de que algo te sucede.
-Deducciones. Solo eso Watson, nada mas. Como bien dices conoces mi condicion cuando acepto un caso en cuyas circunstancias tu preocupacion (como siempre he afirmado) es un desperdicio de tiempo y energia.
-...Deacuerdo. Pero almenos podrias sacar la cara de esa revista de cocina y dejar de pretender que estas leyendo algo importante para decirmelo de frente.
El no lo habia notado, pero en su afan de evitar la mirada de Watson, Sherlock habia tomado una revista al azar que sostenia del revez.
-Oh...-coloco la revista en la mesita a su derecha, ambos por fin, se miraron fijamente a la cara por largo rato.
-No me dijiste lo que en realidad querias decir, no es cierto? - Sherlock con aire de superioridad abrio ampliamente la boca para responder mientras inhalaba todo el aire posible.-Y NO...te atrevas a decir que no es cierto.- Amenazo su amigo antes de que pudiera inventar cualquier excusa. Sherlock cerro abruptamente la boca, dirigiendo la mirada al suelo mientras recargaba los codos sobre sus rodillas y entrelazaba los dedos, al cabo de un rato se llevo las manos entrelazadas a la boca.
-Es verdad, no dije lo que en realidad queria.-Respondio serio y mirando fijamente a Watson.
-Bien.- Acordo este. Guardo silencio en espera de una explicacion, pero Sherlock no parecia dar señas de querer explicarse si no se le alentaba.-¿Y bien?
-Y bien que?
-Que tenias que decirme?. Note como mirabas a Mary, no querias decirlo frente a ella. Ahora no esta por aqui, puedes decirmelo.
Reclinadose hacia el enfrente Sherlock guardo silencio con las manos entrelasadas fuertemente pegadas a sus carnosos labios.
-Vamos Sherlock,. Sabes que puedes decirme lo qu...- pero a mitad de su frace Sherlock, con la frente perlada en sudor, lo interrumpio:
-Te amo.