-¡Haruka-chan! No me olvides..si? -Decia un pequeño niño de cabello rubio suave y latentes ojos dorados-
-Claro que no Yuuta, recuerda traerme un regalo -Sonreia otro pequeño niño de cabello azul oscuro y ojos carmesi-
Desde pequeño siempre fui tratado como una chica, mi madre decia que dios me habia dado el cuerpo equivocado, asi que por eso no podia ser algo que no era para mi, mi cabello siempre lo llevaba medianamente largo, las faldas tomaron parte de mi ropa casi totalmente, a pesar de que yo tenia lo que cualquier chico tiene, nunca fui visto de esa forma, en el jardin siempre fui tratado como una chica, en primaria fui el primer dia con pantalones pero todos me trataban como chica, asi que luego segui con falda y el uniforme femenino, siempre fui tratado asi, y a mi realmente nunca me molesto, fui criado asi, siempre pense que algun dia lo descubririan pero no fue asi, y ahora, en mi primer año de secundaria solo me vesti con el uniforme femenino, el director nunca ha estado especialmente presente, asi que nadie noto mi cambio, a los dos meses me transforme en la mejor estudiante, tenia notas excelentes y todos decian que era la mas bella chica, lo que me resultaba una pequeña risa, pero nadie lo notaba, los chicos se enamoraban de mi cada año, las chicas soñaban con ser mis amigas, algunas las invadia la envidia, y me hacian las pequeñas travesuras a las que ya estaba acostumbrado, tirar mis zapatos a la piscina, romper mis materiales o libros, pero nunca me molesto, porque siempre estaban los que me regalaban sus propios materiales, o las chicas corrian para poder prestrarme sus zapatos.
Nuestra escuela estaba entre el margen entre riqueza y pobreza, nunca nos falto pero tampoco teniamos de sobra, teniamos una gran biblioteca, y era lo que mas amaba, siempre iba alli en mis ratos libres, todas las chicas me adoran pero a nadie podria considerar verdaderamente una amiga, igualmente por los chicos, siempre fue asi, solo tuve un amigo en mi infancia, el cual se mudo a America hace 7 años, desde alli nunca mas lo volvi a ver, es el unico amigo y el que sabe mi pequeño secreto, en casa siempre soy tratado como una chica obviamente, por mi madre y mi hermana mayor lo hace enfrente de mi madre para que no la regañe,pero luego cuando esta sola conmigo me trata como lo que soy, yo tengo 15 años, mi hermana tiene 17, solo es un año y unos meses de diferencia pero por lo demas siempre nos hemos llevado bien, de hecho ella tambien tiene un pequeño secreto que yo le guardo de mi madre.
-¡Haruka! Si no te levantas llegaras tarde -Se oia una suave voz desde el primer piso-
-Ya voy madre
Me levante refregando suavemente mis ojos para quitar el sueño que me quedaba, luego corri las cortinas y abri la ventana sintiendo el suave viento pasar por mi rostro, vi pasar un avion en el cielo y luego me fui hacia el baño, lavando mi rostro y soltando mi cabello, que estaba formado en trenza para que no se despeinara mucho al dormir, lo cepille hasta que quedara liso completamente y luego me coloque mi uniforme, ajustando la falda roja a cuadros en mi cintura, la blusa ajustada y el lazo que llevaba en el cuello, tome un pequeña parte de mi cabello en una coleta hacia el lado izquierdo, parecia infantil pero a todos le gustaba verme de esa forma, siempre me alagaban y a mi me gustaba estar de la forma que le gustara a los demas, tome mi bolso revisando antes que no me faltara nada y baje, dejandolo sobre mi silla y sentandome para ver el perfecto desayuno Japones que habia preparado mi madre.
-¿Y Hikari? -Miraba alrededor buscandola-
-Aun esta alistandose, comienza a comer tu, debe estar por terminar -Sentandose en el asiento del frente-
-Esta bien
Tome los palillos suavemente y comence a comer, siendo criado como una chica tenia mis modales perfectamente al igual que mi hermana, luego la vi entrar por la puerta, ella tambien era muy popular, tenia el cabello un poco mas claro que el mio y muy largo, sus ojos eran verdaderamente oscuros, se podria decir que era la segunda chica mas popular de toda la escuela, una sonrisa se dibujo en mi rostro al verla.
-Buenos dias Hika-onee
-Buenos dias Haru -Sonrie-
-Ya termine de ver el dvd que me prestaste, te lo regresare luego
-¿Dvd? ¿De que?
Un escalofrio recorrio a mi hermana ante la pregunta de madre y yo lo note soltando una leve risa.
-Es una pelicula de un romance de la epoca antigua madre -Sonrei-
-Ah, entiendo, por cierto, hoy comprare un pastel
-¿Pastel para que? -Pregunte confundido-
-Para tu cumpleaños mi niña
-¡Ah! Lo habia olvidado por completo -Rie levemente-
-Bueno, recuerda que al llegar del trabajo lo celebraremos
-Esta bien, ya me voy, llegare tarde, vamos Hika-onee
-Okey
Nos levantamos y tomamos el bolso, nos despedimos dando un suave beso en la mejilla a nuestra madre y salimos de la casa, la escuela no quedaba lejos asi que solo necesitabamos caminar unos minutos y llegariamos, al faltar dos cuadras para llegar ya comenzaban a saludarnos los alumnos, los mas pequeños de primaria nos regalaban flores que tomaban en el camino, era un gesto bastante tierno a mi ver, entramos y nos separamos al llegar a la sala de Hika-onee ya que la de ella estaba en segundo año A, luego venia segundo año B y C y luego primer año A donde estaba yo, al entrar todos dirigieron su mirada hacia mi y sonrieron comenzando a saludarme, algunos me pidieron ayuda en su tarea asi que como generalmente lo haciamos, los que quisieran ayuda se sentaron en la primera fila de asientos y yo usaria el pizarron para explicarles mientras aun no comenzaba la clase, me tome unos 15 minutos para explicar sus dudas y luego comenzo la clase cuando Julieta-sensei entro, todos fueron a sus lugares y se quedaron en silencio
-Buenos dias, hoy les presentare a un alumno nuevo
¿Alumno en esta epoca? Es casi mitad de año...
-El vuelve de America, y estara aqui por un tiempo, adelante
¿A-america...? N-no sera...
-Encantado de conocerlos mi nombre es Takashima...
-...Yuuta...
-¿Eh?
Su mirada se dirigio hacia mi encontrandose con mis ojos, esa mirada latente de ojos dorados...lo sabia...es Yuuta
-¿H-haruka-chan...?
-Bien ya tendran tiempo de presentarse luego, por ahora te sentaras al lado de Minamoto-san, pasa a tu asiento
-Ah, s-si
Disimuladamente en medio de la clase escribi en un papel pequeño y se lo di sin que nadie me notara.
"Ven al gimnasio a la hora de salida"