Capítulo 8
“Empujado hacia la persona equivocada: SuLay, KaiSoo, ChenMin”
—Se nota que ese rubio está enamorado de ti —soltó Tao, deseando que Sehun sonriera al menos una vez. Su amigo estaba muy enojado y no era para menos, ese hijo de puta había golpeado a Tao y nunca nadie lo había golpeado jamás.
—No me enorgullece que ese tipo de persona esté enamorado de mí —espetó con el ceño fruncido.
Tao se encogió de hombros y terminó de enjuagarse la boca. Tenía poca sangre, pero se cubrió los labios con un trozo de papel higiénico.
—¿Sabes? —Sehun hizo ademán de asentir con la cabeza—. Creo que Kris está enamorado de él.
—No digas tonterías, Tao —contestó el otro, tratando de no desanimar a su amigo.
El tonto Panda todavía estaba enamorado de Kris, joder… ¿cómo demonios olvidaría a su primer amor de preparatoria de la noche a la mañana? Nunca podría olvidarlo, y menos recordando la noche anterior: aquella noche de sexo desenfrenada en la cual perdió su virginidad…
—Kris verificó el cuerpo de él siendo que el herido era yo ¿esa no es demasiada evidencia? —musitó con la cabeza hundida, el otro sólo se negó con la cabeza.
—¿Estás ebrio?
—Además, ese rubio te dice Papishingo…
Sehun sonrió de la nada. Tao lo acompañó en la sonrisa. ¿Le estaba jodiendo? ¿Qué era ese apodo de puta? Ahora el cara de póquer sería el más odiado del instituto por traer tras él a Luhan.
—Si eso significa algo bueno, entonces lo aceptaré —contestó el Papishingo.
El pequeño pelinegro dijo que sí con la cabeza, luego se quedó viendo a Sehun porque simplemente no dejaba de sonreír.
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Un paro cardiaco consumió a Lay, para luego revivir al segundo de haberse muerto. ¿Una mamada? ¿Lo único que Suho podía ofrecerle era su polla para que le diera una mamada?
En primera, Lay nunca antes había dado una mamada, y en segunda, Lay siempre quiso ver una polla erguida. Todavía recordaba sentirse como todo un idiota por no poder ver si quiera su verga, incluso se sentía un total perdedor cuando sus recuerdos le aseguraban que ni siquiera podía masturbarse porque le daba vergüenza. Y como conclusión, Lay pudo notar que eso no era el ofrecimiento que deseaba que Suho le diera. Lay buscaba algo más que físico, y no se rebajaría… en su carta lo decía y respetaría sus palabras de amor.
—¿Felación? —Preguntó el chiquillo con una ingenuidad nunca antes vista por Suho. El labio inferior le tembló, produciendo que su estómago se encogiera y le doliera, pero pudo continuar—. ¿Una fe-felación?
—¿Debería dejarte chupármela?
—No entiendo lo que quieres decir, yo… yo no…
—¿No qué?
—No quiero. —Mintió, amarrándose mentalmente el testículo derecho.
—Bien, entonces no me encerraron contigo para dejarnos solos y tener sexo, ¿cierto?
—Yo… yo…
—¿Entonces sí?
—Yo…
—Comienza a desvestirte, no serás ni el primero ni el último que haga este tipo de cosas para ser follado.
—Yo no quiero —gritó lastimosamente, viéndose como un total bebé. Las mejillas le ardieron como fuego y cuando estuvo a punto de llorar, alguien los salvó. La puerta de la bodega se abrió; Kai y Chanyeol habían encontrado el paradero de su amigo Suho.
Ante la escena y viéndose como un total miedoso, Lay corrió a toda velocidad, perdiéndose como humo de cigarrillo…
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Al día siguiente todo fue mero chisme para el grupo inteligente. Lay le contó a Chen y a Sehun sobre lo que tuvo que pasar por culpa de Baek, pero al final no se sintió tan enojado ya que gracias a las ideas locas de su amigo, fue que pudo darse el lujo de ver de cerca el rostro de Suho.
Por otro lado, Tao se enteró que ese rubiecillo que ayer se atrevió a golpearlo, se llamaba Luhan y ya con su nombre memorizado, se burló de cómo le decía a su amigo Sehun. Todos rieron al enterarse que Sehun tenía un pretendiente y que era nada más y nada menos que la más buenona de la escuela, inclusive Tao les platicó que Luhan le decía Papishingo a Sehun como muestra de cariño.
Entre otras noticias, Chen también se enteró que tenía un pretendiente: Xiumin. Muy temprano se encontró una nota pegada en su casillero, y al parecer el dúo de zorras andaba muy interesado en chicos inteligentes, ya que aquella nota “romántica” poseía una excelente ortografía. Decía:
“Te espero en la última mesa de la cafetería. No preguntes por qué, sólo espérame ahí a las doce del mediodía. Deseo encontrarte puntual. Saludos, Xiumin”
Y en el sobre de la nota estaba una foto de aquel chico para que Chen pudiera hacerse a la idea de quién era.
—¿Y vas a ir? —KyungSoo abrió la boca para poder preguntarle lo más importante de aquel chisme.
Todos esperaron la respuesta de Chen, pero éste solamente sonrió de lado. Algo le decía que tenía que jugar un poco con el segundo integrante del dúo de zorras de la preparatoria.
—¿Irás? —Esta vez, Tao le preguntó.
Chen asintió con la cabeza, soñoliento. Sehun posó su mano derecha en su amplia frente para verificar si su amigo Chen estaba con altos grados de temperatura, pero cuando lo sintió normal, se confundió. No podía hacerse a la idea de que Chen, sí… Chen se uniera a la línea de Tao, Lay, Baek y KyungSoo. Eso era imposible…
*
Tao salió primero del punto de reunión, tenía una clase más temprano que los demás y eso siempre echaba a perder el chisme, pero no podía cancelar sus clases para platicar ¿Qué no? Así que sin poder hacer nada, caminó en dirección al salón 116, pero no logró seguir andando ya que Luhan se le pareció de la nada.
—Te he investigado. Amas a Kris, ¿cierto?
*
Cuando terminaron de hablar y de rogarle a Chen para que hablara sobre su nueva cita con Xiumin, Baek, Lay y KyungSoo se fueron a la sala de música. En el trascurso de su camino, hablaron de un montón de cosas y por supuesto, siguieron burlándose de Chen y de Sehun. Esos dos tenían pretendientes hombres y eso se miraba extraño ya que sus amigos no parecían ser homosexuales ni mucho menos bisexuales. De ahora en adelante a Sehun le llamarían Papishingo y a Chen lo molestarían hablando todo el tiempo de ese tal Xiumin, de eso no había duda.
KyungSoo cantó una canción que escribió una semana atrás, por su parte Baekhyun se encargó de hacerle doble voz y Lay los acompañó tocando la guitarra. Eso hacían ellos en todos sus ratos libres: cantar y tocar instrumentos. Después de repasar la misma canción más de tres veces, decidieron salir. Era momento de tomar un poco de aire fresco.
Caminaron juntos hasta el jardín, pero cuando Baek detectó a Kai hablando con una alumna muy extravagante, de nuevo se le ocurrió una idea. Llamó a Lay con la mano y le comentó sobre su plan, el del hoyuelo en la mejilla sonrió malicioso; le gustaba el plan maléfico.
Sin importar que Kai estuviera ligándose a una hermosa adolescente, Baek se atrevió a empujar a su amigo KyungSoo para que se impactara con aquel integrante del cuarteto más popular de la preparatoria. Lay y Baekhyun salieron corriendo, dejando a su amigo ahí, frente a Kai.