- Creo que es hora de que descansen Kyungsoo- el nombrado levanto su vista, sus ojos adormilados, agotados y con clara sombras oscuras en su piel pálida y casi enferma rectificando el desagrado de Kyungsoo sobre los hospitales y medicamentos, el olor fuerte colándose directo a sus fosas nasales. Para entonces sus hombros estaban cubiertos por pura tensión, tal vez sus codos en sus rodillas dejasen marcas levemente lilas al estar en la misma posición casi dos horas, Kyungsoo suspiro, aun dedicándole una mirada nerviosa a su padre.
- ¿Todo estará bien?
- Ella está estable Kyungsoo, ya es hora de que tomes una ducha y descanses- Kyungsoo quería replicar que él no era el único aquí con ojos cansados y semblante decaído, su padre tal vez rompiese las expectativas que tenía Kyungsoo sobre su físico en ese momento.
- De acuerdo, si ocurre algo…
- Te llamare hijo…ahora ve, tienes que descansar- Kyungsoo asiente y prácticamente su cabeza solo se mueve escasos centímetros, la siente pesada y revuelta totalmente.
Al levantarse de aquel asiento plástico pegado a las baldosas del suelo, Kyungsoo se tambalea ligeramente mareado, toma varias bocanadas tranquilizadoras y es que pasar un día en una clínica, sin dormir y en la misma maldita posición esperando noticias de estabilidad, noticias que llegaron a las siete de la mañana y Kyungsoo al fin pudo relajarse, dejar de tapar sus oídos con fuerza y contar sus pulsación solo por la ambición de distraerse en algo diferente a su madre conectada a cables donde Kyungsoo ni si quiera podía identificar cual pertenecía a que maquina.
Kyungsoo viaja en taxi para entonces y duerme un poco en el camino, sus pies se arrastran por el interior de su edificio y pulsa sin muchos ánimos llamando el ascensor, se recuesta a una pared metálica y fría, cierra sus ojos mientras siente el vacío en el estomago al estar subiendo directamente al piso número 8.
Kyungsoo sale y rebusca entre sus bolsillos la llave, la deja en la cerradura y empuja levemente la puerta, un suspiro agotado y frustrado sale de sus labios cuando percibe el claro aroma relajante que significaba su hogar, su maldito departamento, el como el sol se filtra delicadamente por las ventanas, traspasando la tela fina de las cortinas.
Sin embargo Kyungsoo viaja primero a la cocina preparando el desayuno, algo sencillo, huevos revueltos y tostadas, esta vez Kyungsoo aplica un poco de jarabe de fresa porque Jonin se sonrojo al probarlo la ultima vez, chillando que realmente es delicioso Kyunoo Hun.
Sirve en dos platos, dos vasos con zumo de naranja y parpadea porque el sueño comienza a viajar por cada extremidad, volviéndola pesada y agotada completamente.
- Jonin el desayuno, levanta…- Kyungsoo termina de untar el jarabe.- ¡Jonin levanta! ¡El desayuno está listo! ¡Hice tostadas con jarabe de fresa!
Sin embargo el silencio es quien le responde, reinando por el departamento, se vuelve completamente aturdidor y Kyungsoo siente su pecho oprimirse porque tal vez este olvidado algo, apaga la hornilla y limpia sus manos con un viejo trapo sobre el mesón.
- ¿Jonin?- Kyungsoo pregunta ante el silencio, quiere hacerse a la idea de que el pequeño hibrido solo está durmiendo profundamente, pero aun así, sus pasos viajan hacia su habitación.
No hay nadie en la cama, sus sabanas están perfectamente tendidas y sin signo de arruga.
Todo era demasiado silencioso y helado en torno a Kyungsoo, siente que su cabeza comienza a taladrar y su respiración se vuelve irregular cuando, entre la inconsciencia y el bloqueo que supuso su mente a la situación, comprende por qué el cajón de su mesa de noche esta tirado por fuera con varias hojas y demás utensilios que solía guardar dentro, incluso nota lápices de colores esparcidos por el suelo.
Kyungsoo deja viajar sus ojos desesperados por cada tramo de la habitación, sin pensar en muchas cosas deja que sus rodillas choquen contra el piso de madera y observa bajo la cama, solo encuentra un par de tenis olvidados y una hoja.
Kyungsoo desliza su brazo en un quejido por la incómoda posición y arrastra el papel. Era el dibujo que Jonin hacía. Colores vivaces cubriendo los espacios, trazos irregulares y tiernos, algo que se supone es Kyungsoo sonriendo y siente como su corazón reacciona en una cruel marca agrietada cuando Jonin dibuja sus labios en forma de corazón, cuando Jonin hace sus ojos un poco grandes y aun así las líneas se vuelven frágiles en torno a la figura animada de Kyungsoo en el papel, se ve el trazo delicado como si realmente estuviese poniendo demasiado esfuerzo en que saliese perfecto y fuese lo que más sobresaliera en esa hoja de rayones y nubes demasiado azules, que fuese lo más importante.
Kyungsoo cae sentado y su trasero se queja ante el entumecimiento correr por sus piernas y coxis. Kyungsoo jadea aun con el dibujo en mano y sus ojos puestos en él, reparándolo, se siente ahogado para entonces.
- Jonin…- susurra y se levanta de golpe, tropezando torpemente y recorriendo el departamento. No está en el baño, escondido en el closet, dentro de algún gabinete en la cocina devorando a escondidas pequeñas galletas de animalitos, no está detrás del sofá. La casa es demasiado silenciosa entonces y a pesar de los llamados desesperados de Kyungsoo hacia Jonin quebrando su garganta, y la desesperación viajando por su sistema nervioso, Kyungsoo siente que todo está mal, porque Jonin no aparece por ningun lado y Kyungsoo recuerda ver varias prendas en el suelo y la falta de un abrigo en especial.
Kyungsoo siente un nudo en su garganta, áspero y de hecho parece viajar hasta acentuarse en la boca de su estomago, tal vez sus ojos estén abordados en liquido salino y sus manos tiemblan sudorosas cuando viaja en torno a la agenda de números en su móvil. Kyungsoo olvida que está agotado y que no ha dormido en todo el día, que antes quería simplemente revolcarse entre sus colchas y también olvida que aun el desayuno está intacto, enfriándose sobre el mesón.
Sus pies se ven renovados y olvida tomar el ascensor, baja las escaleras corriendo y agitado se cruza su mirada contra el guardia en turno nocturno, recogiendo sus utensilios y aclarando dudas a quien le remplazaría.
- ¡Oiga! – Chilla Kyungsoo con fuerza apuntando hacia el hombre frente al contrario, el hombre le mira desconcertado y Kyungsoo gimotea cuando al fin se plantea con prepotencia frente al hombre desconcertado- un niño…- jadea – un niño…gorro de lana- el aire parece escapar de sus pulmones y tiene que calmarse, respirar pausadamente- moreno…un niño moreno con gorro de lana, ¿lo ha visto? ¿Tal vez salió anoche?- el hombre ladea su rostro y sus ojos se entrecierran en concentración, sus labios se curvan en confusión y niega.
- No chico…no vi a nadie salir anoche.
Y Kyungsoo está corriendo fuera del edificio, es su turno de empujar a los hombres forrados en trajes o mujeres revisando listas de compras para el supermercado, la gente le insulta pero Kyungsoo no está de ánimos para ofrecer disculpas, en cambio piensa en devolver el favor.
No sabe exactamente dónde dirigirse, su cabeza está aún más revuelta y solo cabe Jonin en ella, imágenes del pequeño abandonado de nuevo en algún lugar sucio y repleto de cajas…
Sucio y repleto de cajas…
Callejón…el maldito callejón.
Y Kyungsoo se detiene en seco porque ha pasado el callejón cerca a su edificio hace aproximadamente dos cuadras, agitado y aun desenvolviendo sus pensamientos, aclara que es lo más lógico, Jonin no pudo haber escapado hacia algún otro lugar cuando el pequeño si apenas conoce el camino hacia el callejón, además Kyungsoo tiene la ligera idea de que, Jonin no se separaría mucho de donde Kyungsoo posiblemente este.
Pero aun así, dentro la suciedad y el olor penetrante a comida en descomposición, cajas regadas por todos lados y botes de basuras rodando por el suelo o apoyadas contra las paredes estrechas, Kyungsoo rebusca e incluso deja su temor de lado, entrando completamente relajado de que al menos es de día y hay más personas que pueden escuchar sus gritos de agonía.
- ¿Jonin?- Kyungsoo siente verdadero temor entonces – ¿Jonin? – sus ojos rebuscan entre las bolsas grandes y negras apiladas en esquinas- ¿Jonin estas aquí? Soy Kyungsoo…- no hay nada que significara Jonin en el callejón y Kyungsoo siente que esta mas perdido de lo que se sentía a principios, tal vez en su interior tenía la idea de encontrarlo cerca pero realmente no tiene idea de donde se encontraría el pequeño si no fuese el repugnante callejón.
- ¡Jonin…!- y Kyungsoo chilla porque justo a su lado se mueven ligeramente unas cuantas bolsas y cajas desocupadas, un ligero gimoteo y el corazón del mayor salta, inclinándose y apartando de manotazos apresurados encuentra entonces un perro un tanto adulto, rígido, rugiéndole a Kyungsoo mientras rasga una de las bolsas buscando alimento.
Claramente ese no es su Jonin, el pelaje es gris con motes negros. Kyungsoo siente la agonía crecer en su cuerpo, aplastando su pecho con fuerza descomunal y Kyungsoo siente entonces sus mejillas húmedas.
---O---
- Baekhyun….Baekhyun están llamando…Baekhyun…. – Baekhyun gimotea y se retuerce palmea a su alrededor y toma su móvil colocándolo en su oído.
- Baekhyun…- escucha la voz cuartada de Kyungsoo.
- Hmm eres tu…
- Jonin...Jonin… - es lo que apenas sale en balbuceos, Baekhyun entre su somnolencia logra comprender mínimamente y se acomoda entre sus colchas pateando el trasero de JongDae dormido a su lado y el menor rueda por la cama hasta caer al suelo de golpe.
- Hmm ¿paso algo con él?
- No…no sé dónde…Baekhyun por favor no lo encuentro yo…- y Baekhyun lleva su mano a alguien recostado a su lado, acariciando levemente los cabellos suaves y sedosos.
- Trae café latte y panecillos- sin embargo Baekhyun por unos momentos pensó que Kyungsoo había cortado la llamada, Baekhyun aparto el móvil y ve el conteo de los segundos y minutos mientras se supone, Do Kyungsoo aún seguía en línea.
- Hey…- JongDae gimoteo desde el suelo, alzando su cabeza vuelta un nido de pájaros, Baekhyun rodo sus ojos preguntándose aun porque su madre tenía que fijar su atención en el padre – aterradoramente parecido a su hijo- de JongDae.
JongDae se arrojó al suelo y siguió dormitando, Baekhyun atendió a Kyungsoo.
- Que sean tres café latte y panecillos.
Y Baekhyun termino la llamada.
---O---
Kyungsoo estaba malditamente encojonado, había intentado llamar a Baekhyun de nuevo, tal vez unas diez veces, pero el resultado era el mismo.
Hey son Baekhyun, en estos momentos puede que esté ocupado o te odie de tal manera que no quiera contestar tus llamadas. Te odio. Si no es así deja tu mensaje después del bip.
Y Kyungsoo dejo el móvil de lado mientras se hallaba perdido y alterado aun, las tasas de té solían hacer algo en su sistema sobre relajar sus músculos y apaciguar un poco la sensación de estrés.
Pero al parecer no estaba surgiendo efecto en estos momentos. Kyungsoo solía tomar té cuando peleaba con sus padres, cuando JongDae traía películas eróticas con la excusa de que Baekhyun trata de ser heterosexual y llevo a una chica a casa, cosa que a los minutos su puerta es tocada y esta vez es Byun Baekhyun quien trae sodas para la película erótica que trajo JongDae. Kyungsoo toma té cuando Sehun ruega por largos minutos detrás de él en el instituto pidiendo que le explicase calculo, Kyungsoo le dice púdrete, Sehun lloriquea y Kyungsoo es odiado posiblemente por la mayor parte de la población femenina en el instituto. Kyungsoo toma té cuando Kris dibuja en una de las hojas de presentación para algún trabajo importante que tenga Kyungsoo aquella semana.
Sin embargo esto estaba fuera del margen de estrés ocasionado por las personas a su alrededor, no era estrés albergado por la ira o la desconcentración o las ganas de asesinar, no…esta vez era diferente, era remordimiento lo que carcomía entre los pliegues de su piel causando estremecimientos y revoltijos, es dolor punzante cuando recuerda sus palabras hirientes explotando como pedazos de vidrio disparados en toda dirección, cayendo directamente solo en Jonin.
Kyungsoo no debió utilizar palabras como huérfano, deforme o fastidios, Kyungsoo no quiere rememorar las demás palabras que ha utilizado porque se siente como mierda, entonces no sabría exactamente en que quedaría si continua rebuscando en sus recuerdos y relucia el rostro del moreno llorando y escondiéndose en su oso de felpa.
Kyungsoo se siente aún más como mierda y cae en la mesa, ocultando su rostro entre sus manos mientras lloriquea patéticamente, está en una cafetería y el té sigue sin funcionar, no le gusta el dulce pero solo pidió pastel de chocolate porque a Jonin podría gustarle.
Pero no hay Jonin y Kyungsoo lo arruino de nuevo.
- Señor… ¿está bien?- Kyungsoo levanta sus ojos desbordados hacia la chica y quiere explotar de nuevo, sin embargo mantiene su compostura y se levanta ruidosamente dejando pago exactamente lo que no consumió, para entonces salió del pequeño café, deambulando aun en la calle y está pensando seriamente en llamar a la policía o a la perrera para que busquen a un hibrido.
Pero aun así tiene esperanzas y cuando llega al departamento de Oh Sehun, el menor incluso parece tener las marcas del colchón pegada en su mejilla izquierda y tal vez eso en su barbilla sea baba seca. Kyungsoo aclara el nudo en su garganta y con sus ojos cristalinos, acusa.
- He perdido a Jonin.
Sehun le insulta cuando Kyungsoo termina de contar lo que ha ocurrido la noche anterior, Sehun le llama despistado, idiota, inconsciente, estúpido, torpe, gay, lo siento Hyung pero eres un desgraciado.
- No lo he visto, no he salido del departamento. Aun así Hyung, esto es grave, ¿qué tal si pasa algo con Jonin? Si el realmente desaparece.
Kyungsoo recuerda a JongDae, tal vez nunca comprenda al chico pero en estos momentos la sensación de acidez y devastación en su interior puede asemejarse a lo que ha sentido JongDae después de tanto tiempo con respecto a Minseok. Kyungsoo se altera porque han pasado meses desde esa pérdida de JongDae y tal vez Kyungsoo no pueda seguir sin saber cómo esta Jonin, si tiene frio o hambre, si sigue llorando por las mismas cosas, si seguirá esperando por Kyungsoo después de esto.
Sehun no dice mucho después de insultarle, no hay muchas cosas que se le ocurran, él realmente no conoce del todo a Jonin y si el propio Kyungsoo no sabe dónde debería estar metido entonces ¿Sehun porque debería tener alguna respuesta?
- Hyung...tal vez- y Sehun repara el semblante decaído de Do Kyungsoo, el cómo está mirando fijamente sus manos como si estuviese perdido en algún punto, su piel se nota aún más pálida y sus ojos, a pesar de cansados, luchan para mantenerse abiertos y constate ante algún indicio sobre Jonin- deberías pensar mejor lo que dices, es solo un niño.
- Lo se…no quise, realmente yo…- Kyungsoo calla porque no sabe que decir para recomponerlo, los niños suelen ser más sensibles que un mismo adulto y Kyungsoo por experiencia sabia cuan sensible llegaba a ser Jonin, por lo que, su mente martirizaba al pensar en cómo debería estar sintiendo el pequeño ahora.
- Jonin quiere mucho a Tao, puede que este con Kris. – y Kyungsoo alza su mirada hacia Sehun, sonríe suavemente aunque solo parece una mueca de disgusto con sí mismo o claro nerviosismo. Sabía que algo bueno vendría de ir a buscar a Oh Sehun.
Sehun acompaño a Kyungsoo hacia el departamento de Kris, para entonces eran cerca de las once de la mañana, tal vez era obvio el aspecto del mayor en estos momentos.
- Que…mierda…hacen…en…mi….puta…casa…a….las….- Kris se queda callado un segundo, con sus ojos entrecerrados, su cabello revolcado exactamente horrible disparando a diversos lados sin ningún fin pulcro, lleva camiseta gigante y pantalones de basquetbol- diez y cuarenta de la mañana.
- Son las once y dos minutos- aclara Sehun mirando su reloj de pulso- y tú…te ves horrible.
Kris cierra la puerta en sus narices. Kyungsoo fulmina a Sehun con sus ojos agotados y Sehun se estremece porque aun así, resultan demasiado amenazadores.
Kyungsoo traga su orgullo y solo piensa en un pequeño cuerpo canela, su pecho se contrae por enésima vez, tal vez más porque ya perdió la cuenta. El timbre resuena por el departamento y solo se escucha un gruñido tosco dentro del hogar, sin embargo hay gimoteos y quejidos bajos.
Quien abre la puerta ahora es Tao, parado delicadamente en las puntas de sus pies porque no alcanzaba la perilla del todo, sus ojos abiertos de par en par demasiado curiosos y sonríe suavemente.
Gimotea como modo de bienvenida.
- Buen día- saluda Sehun revolcando el cabello azabache del pequeño y Kyungsoo sonríe ligeramente, bueno…no exactamente en estos momentos su rostro no se da el lujo de sonreír.
- Puede alguien decirme porque tengo que levantarme condenamente temprano y recibir al imbécil de Oh Sehun en mi puerta.
- Horrible Hyung. – puntualiza Sehun señalando a Kris y apoderándose del sofá.
- Mocoso petulante y homosexual.
- ¡¿Que dijiste?!- Oh Sehun se levanta de sus aposentos porque la palabra homosexual no estaba en su diccionario, en su léxico ni mucho menos en su persona.
- Kris…Jonin, dámelo ahora- ruge Kyungsoo y ambos se quedan en silencio, mirándole porque maldición ese tono de voz le helo la sangre a Yi Fan.
Tao estaba comiendo una manzana en sus dos manos pequeñas, sentado en el piso, pegado a las piernas de Kris, observando a sus mayores con ojos curiosos y tiernos.
- ¿De qué carajos hablas? – Kris enarca una ceja y bosteza dispersando la somnolencia, aun presente en su cuerpo.
- ¿Tú no lo tienes?- pregunta Sehun nervioso.
- ¿Tener a quién?
- ¡Jonin, idiota! ¡¿Dónde está?!- estalla Kyungsoo de nueva cuenta, su voz rompiendo a través del silencio y Tao da un ligero brinco, la manzana cae al suelo y el menor está levantándose tembloroso y escalando en las piernas de Kris, hasta ovillarse y ocultar su rostro en la nuca del mayor, pegándose al pecho de este.
Yi Fan suspira y acaricia el cabello de Tao.
- Cálmate Kyungsoo, lo has asustado- Tao tiembla ligeramente y sus ojos se asoman por entre el corto espacio que deja la piel de Yi Fan y la determinación de permanecer oculto. Kyungsoo gimotea ante la mirada temerosa del panda, cae sentando sosteniendo su cabeza y revolcando su cabello en plan de desesperación.
- Lo siento… yo…
- Jonin no está. – Tao mueve sus orejitas ante la acusación y sale a relucir, gimotea entonces o tal vez es alguna especie de imitación de bramido mientras observa a Kris, aparentando preguntarle al respecto.
- No sé de qué habla, no me mires así- acusa el mayor rodando sus ojos hasta Kyungsoo.
- ¿Cómo que no está?
- Le…le dije cosas horribles en la noche, mamá recayó de nuevo, yo…estaba, no sabía lo que decía y estalle frente a él. Se fue Jonin, Yi Fan.
Tao entiende levemente el asunto, sus manitas sudan y su mandíbula comienza a temblar, mientras sus ojos se llenan de lágrimas.
El silencio se adueña del departamento y solo se es audible la respiración alterada de Kyungsoo.
- Joder…esto está mal… malditamente mal- ruge Yi Fan cuando Tao comienza a sollozar.
---O---
- Baekhyun el móvil… Baekhyun…. ¡Baekhyun el puto teléfono, idiota! – Baekhyun se levanta de golpe y quita sus audífonos, gime porque sabe exactamente quién es, revuela su mano en la pequeña mesa a su lado mientras estira sus piernas dejándolas sobre la mesa de café frente a él.
- Aquí Baekhyun, haya Kyungsoo el desgraciado, lo se…te quiero.
- ¡Baekhyun! Realmente necesito que me ayudes maldición en serio- Baekhyun sonríe levemente cuando nota la desesperación e incluso… ¿qué era eso? Kyungsoo estaba a punto de quebrarse, cosa que pasaba en situaciones extremas, cosa que alguien como Kyungsoo evitaba de sobremanera cuando se haya en compañía, cosa que Kyungsoo odiaba.
- Hum… ¿ha sucedido algo?
- Te lo he dicho…es Jonin, no está con Kris ni con Sehun no sé qué hacer, lo perdí…Baekhyun por favor ayúdame…
- Un café latte y panquecillos- repite Baekhyun alargando su mano mientras era enredada en contrarias, el claro contraste entre ambas pieles.
- ¡Hey! – grita JongDae desde el baño, Baekhyun a veces pregunta porque JongDae tiene ese maldita audición sobrepasando límites.
- Que sean…- Baekhyun mira a su lado- tres café latte y panquecillos.
- Para que mierdas quieres…
Y Baekhyun cuelga.
---O---
Kris está manejando silenciosamente, de hecho todo el auto se encuentra de igual manera y fue difícil dejar que Tao se sentase cerca de Sehun, claramente Sehun no era el problema, la ocasión radicaba en que Tao no paraba de llorar, en su mente solo rodaban ideas inocentes de ser abandonado, de no ver a Jonin, de que Yi Fan no le quiera y el sigue gimoteando mientras extiende sus brazos hacia un Kris conduciendo. Yifan mira por el retrovisor y algo dentro de él se remueve bruscamente, tiene que anclarse con fuerza al volante y mirar directo a la carretera, recuerda vagamente.
Kyungsoo tenía la mirada ida fuera de la ventana, observando cómo la gente continuaba con sus jornadas diarias, como se veía tan relajada fuera del auto y como mierdas Kyungsoo estaba tan destrozado y agitado por dentro, entiende que el contraste era demasiado evidente y que Kyungsoo odiaba como algunas personas sonreían mientras hablaban por teléfono o charlaban ante alguna cena al aire libre, ellos no tenían la culpa, solo Kyungsoo, pero aun así Kyungsoo los odiaba.
Tenía tres café latte en sus piernas y una bolsa de panecillos, su pierna derecha con un tic nervioso sobresaltando el empaque de los panecillos pero él no lo nota, solo hay Jonin viajando en su mente y a pesar de eso quiere realmente haberle puesto algún chip de rastreo al hibrido. Habían cosas que Kyungsoo tenía en su vida de las cuales costaba acostumbrarse, habían ocasiones que la energía de JongDae y la risa de Baekhyun era diferente cada día y Kyungsoo a veces resultaba sobresaltado o sorprendido porque no se esperaba esos excesos de adrenalina.
Sin embargo Kyungsoo se acostumbró a Jonin, en como salía del baño dejando las huellas de sus pies pequeños y mojados en el piso de madera, el cómo se extendía totalmente adueñándose de la cama, como se ovillaba en Kyungsoo, como sus pequeños orbes chocolates brillaban porque Kyungsoo hizo pollo hoy, como aquella pijama de oso le sentaba demasiado bien y Kyungsoo aprovechó la inconsciencia de su menor, dormitando para hacer algún repertorio de fotos en su móvil.
Jonin se convirtió, tal vez, en algo indispensable para Kyungsoo, algo que Kyungsoo no esperaba evidentemente pero que termino necesitando, queriendo, incluso reclamándole de su propiedad.
Pero Kyungsoo era tonto, no sabía expresarse y menos en casos bajo presión. Punto en el cual aún pensaba como remendarlo todo cuando le encontrara, porque Kyungsoo no regresaría con las manos vacías a un departamento con recuerdos y olor de Jonin por doquier. Simplemente no puede, no se permite eso.
Cuando Kris baja del auto, Sehun deja de tratar de animar a Tao, de darle palmaditas o prometer helados pero maldita sea eso no funciona, no hasta que la puerta de Tao se abre y el hibrido está lloriqueando aun, sus puños restregando contra sus ojos y Yi Fan sonríe ligeramente, Tao le mira y extiende sus brazos mientras su llanto aumenta y Kris solo puede aparentar seriedad, bufar y rodar sus ojos mientras le da un abrazo a Tao, aun así, Kris baja su mirada y sonríe.
- No te dejare…- susurra para entonces y Kyungsoo siente algo quebrándose en su interior, porque él dijo esas palabras o tal vez era algo similar, palabras que Kyungsoo había prometido también.
El ascensor se vuelve realmente un lugar muy reducido e incómodo, Sehun permanece inexpresivo observando los números aumentar, Kris tiene a Tao pegado a su costado mientras el mayor sostiene la mano del pequeño, Kyungsoo está en la mitad y el piensa que dejara caer el café y los panecillos tarde o temprano, sus malditas manos tiemblan.
Cuando las puertas metálicas se abren salen a paso lento, tocan la puerta de Baekhyun y hay algo removiéndose en el interior, Kyungsoo se congela, Kris sonríe de costado porque tenía leves sospechas y Sehun suspira.
- Vaya…hola para ti- suelta JongDae con una toalla en su cabeza, secando su cabello. – ¿trajiste café y panecillos, mortal? Porque no abra trato entonces. – Kyungsoo entre su estado estupefacto levanta la bolsa y el empaque de los tres cafés. - delicioso, mi puto estomago ruge y Baekhyun no quiere hacer desayuno- JongDae deja la puerta del departamento y está sacando un panecillo dejándolo en su boca mientras deshace el empaque del latte y sostiene uno entre sus manos.
- Byun tenemos visitas- y Baekhyun levanta su cabeza del sofá, su semblante serio y frio.
- Baekhyun…- y algo gimotea detrás del sofá, algo se remueve y escucha un quejido.
Kyungsoo se tensa completamente y su piel posiblemente este erizada ahora, siente la agitación de su respiración y sus ojos se llenan de lágrimas.
Flashback:
Es de madrugada cuando Baekhyun esta recorriendo las calles heladas de Seúl, sus manos profundas en el bolsillo de su campera y aun así se está estremeciendo, había llamado a Kyungsoo y solo alcanzo a escuchar balbuceos, Kyungsoo corto la llamada de golpe y Baekhyun a las tres de la mañana está en pie, nada está bien y él lo sabía, no debería ser muy inteligente para captarlo en la voz rota de Kyungsoo.
Kyungsoo es de esas personas que guarda demasiadas cosas en su interior, demasiado reservado y Baekhyun aprendió a lo largo de sus años acompañado del menor, que simplemente Kyungsoo recae ante difíciles circunstancias y que era complicado ver esa faceta cruzando por el de ojos grandes.
Mete un poco más sus manos y se estremece ligeramente porque el viento choca contra su rostro y es tremendamente helado, colándose por su piel, llegando hasta los huesos.
Los faroles apenas iluminan las calles, a veces parpadean pero Baekhyun lo ignora y sigue su caminata, Baekhyun ríe ligeramente al divisar el callejón en el que Kyungsoo recogió a Jonin y quiere internamente tener la misma suerte, puede que no sea un buen cuidador y falte de responsabilidad pero el sería un buen…dueño o lo que sea que se tenga de relación entre hibrido y humano.
Baekhyun deja sus ojos profundizarse en el oscuro lugar, se encoge ante el olor desagradable a humedad y basura, sigue su camino alejándose y faltan pocas cuadras, incluso logra localizar en lo alto el edifico de Kyungsoo. Baekhyun agradece que el departamento de Kyungsoo diese contra la parte visible para él, en el piso ocho aún se ve una ventana con luces encendidas y Baekhyun frunce el ceño, Kyungsoo es amante de recogerse temprano entre sus sabanas.
Sin embargo Baekhyun tropieza y mira hacia el suelo, se sostiene de la pared a su lado y toma una bocanada de aire porque su corazón sufrió aceleradas palpitaciones, suspira y mueve sus ojos hasta una caja moviéndose fuera del callejón, un tanto en la entrada, Baekhyun frunce el ceño y se devuelve, apartando la caja entre sus manos y hay un cachorro un tanto mayor a un recién nacido, acuclillado y gimoteando mientras se ovilla en sí mismo.
- Vaya pero que ternura…- susurra Baekhyun y toma al pequeño, mirándole fijamente- que eres lindo Hum…
Aun así hay algo extraño, algo no concuerda con el pequeño animal y Baekhyun lo descubre, hay un pequeño oso tirado y escondido entre las cajas donde estaba el cachorro antes, hay ropa desgarrada en diferentes medidas de centímetros y Baekhyun reconoce ese pequeño abrigo.
Se agita, tiembla, sube sus ojos y algo en esos orbes le recuerda a cierta persona.
- Jonin… - susurra y el cachorro mueve sus orejitas, gime como si estuviese lastimado y Baekhyun olvida a Kyungsoo, Baekhyun abre su campera y mete a Jonin dentro a pesar de ser un poco grande ya, mínimamente apenas.
Toma el oso y devuelve sus pasos hacia su departamento.
Jonin regreso a su forma humana a las cinco de la mañana cuando siente el calor y el olor a Baekhyun acurrucado contra el pequeño cachorro, siente incluso el aroma de JongDae un tanto cerca.
Jonin llora escandalosamente y aprieta el oso entre sus brazos, ocultándose en él.
Fue difícil sacar las palabras, Baekhyun tenía cierta táctica con los pequeños y Jonin solo pronuncio un corto.
Kyunoo Hun me odia.
End Flashback.
Baekhyun se remueve en el sofá donde está sentado y Jonin está detrás de él, oculto y abrazando al pequeño bulto de felpa en sus brazos posesivamente, Kyungsoo está inclinado frente a Baekhyun.
- Déjame… quiero hablare.- Baekhyun le mira fijamente por varios minutos, se niega a moverse.
- Baekhyun…- JongDae pone su mano en el hombro de Baekhyun- déjale un poco. – Baekhyun vuelve a percatarse del semblante decaído y estropeado de Kyungsoo, aun con las lágrimas retenidas porque es suficientemente orgulloso para dejarlas caer ahí.
- Jonin… - sin embargo Jonin se aleja de la mano extendida de Kyungsoo.
Sin embargo Jonin huye del contacto de Kyungsoo, baja su mirada y tiembla atemorizado.
Jonin se niega a acercarse a su Hyung.
Y Kyungsoo se quiebra ahora.