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Estúpida nubecita [one shot] por Claire Lawliet

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Notas del fanfic:

Los personajes de Death Note no me pertenencen, son de Tsugumi Oba y de Takeshi Obata.

Notas del capitulo:

Bueno este es mi primer one shot, y mi primer lemon, así que si por alguna casualidad de la vida alguien llega a este one shot y decide decjar una crítica, no seais muy duros :c

Gracias por leer y espero que os guste :3

Pov’s Mello

No aguantaba más en esa clase, sin apartar la mirada del reloj colgado en las sosas paredes y a penas escuchando lo que estaba explicando el profesor. Solo tendría que esperar un minuto más.

Rodé los ojos, paseando la mirada por la estancia y deteniéndola sobre esa “nubecita”. Mi puño se crispó sobre la mesa, involuntariamente, y cerré con rapidez los ojos para calmarme. Sin embargo, no solo noté rabia, noté...

El timbre interrumpió el hilo de mis pensamientos, y todos salieron corriendo sin prestar atención a nada. Me levanté y me apresuré a salir de allí, respirando con profundidad; quizás empujé o tiré a alguien, sinceramente, me importaba una mierda.

-¿Near de nuevo...? –escuché la voz de Matt, que caminaba ahora a mi lado.

-Ha vuelto a sacar un 10, sigue siendo el primero –cerré de nuevo los dos puños, clavándome las uñas en las palmas de las manos- ¡Estoy hasta los cojones de ese niñato! –me paré y le pegué un puñetazo a la pared con un grito, descargando mi rabia y consiguiendo que los de mis alrededores se apartasen.

Sacudí la mano; me había hecho algo de daño, pero seguía demasiado cabreado como para sentir el dolor que habría sentido normalmente. Saqué de mi bolsillo una barra de chocolate a medio comer y le di un mordisco, intentando calmarme, pero sin resultado.

-Mello, tranquilízate... –Matt me miró [ n/a: con la gotita anime en la cabeza cx ]

Le ignoré y me dirigí a la habitación del albino, con una mueca que denotaba el enfado que sentía.

Noté como Matt intentaba frenarme, pero sabía que no conseguiría, así que desistió. Al fin y al cabo, ya había pegado a esa bola de algodón antes. Estúpido crío.  No me voy a dejar vencer por un niño de catorce años, y menos por ese niño.

No se merece ser el sucesor de L.

 

//FLASHBACK//

 

Pov’s normal (este fb se supone que es poco antes de la narración de Mello)

Near y Mello llegaron casi al mismo tiempo a la oficina de Roger, esperándole justo como les había dicho.

Near se sentó, de su peculiar forma, y siguió haciendo su puzle de leche, completamente blanco a excepción de la letra L en la esquina superior izquierda, y Mello simplemente se limitó a esperar hasta que vio como el anciano se sentaba tras el ancho escritorio.

-¿Qué pasa, Roger? –inquirió este último, con impaciencia.

- L ha muerto.

-¿¡Qué quieres decir!? ...r-repítelo Roger.

- L ha muerto.

Mello se abalanzó contra la mesa, apoyando ambas manos en ellas con una cara de desesperación.

-¿¡Ha muerto!? ¿¡Cómo que ha muerto!? –gritó.

Roger solo asintió.

-¿Estás diciendo que lo ha matado Kira? ¿Es eso? –Mello apretó los puños, mientras Near seguía haciendo su puzle. Parecía no haberse enterado, dado que ninguna emoción se expresaba en su rostro.

-Es probable –le respondió el anciano.

-¿¡Han asesinado a L porque estaba investigando a Kira, él le ha matado!? ¿¡Ha sido así Roger!? –el chico le cogió de la chaqueta con fuerza, negándose a creérselo.

-Mello... –Roger fue interrumpido por el sonido de piezas cayendo al suelo. Los dos se giraron inmediatamente para ver como Near había tirado todas las piezas de su puzle ya terminado a la alfombra, quedándose solo con el tablero que usaba de base.

-Si no ganas en el juego –el albino colocó una de las piezas desperdigadas en una esquina- ni resuelves el puzle –continuó la hilera de arriba colocando piezas sin cesar- no eres más que un perdedor.

Mello se quedó mirándolo, boquiabierto, pero inmediatamente después se giró hacia el anciano y golpeó la mesa.

-¡Dime a quién eligió, a Near o a mí!

-Aún no había elegido a ninguno –respondió, bajando la cabeza- Y ahora que ha muerto ya no podrá hacerlo. Mello... Near... ¿qué os parecería trabajar los dos juntos?

-Vale, a mí me parece bien –susurró el albino, sin darse cuenta de la expresión que se había formado en la cara de Mello.

-¡Eso es imposible, Roger! ¡Sabes perfectamente que no nos llevamos nada bien, siempre estamos compitiendo!

Siempre...

//FIN DEL FB//

 

Pov’s normal

Near se encontraba en el patio, jugando con varias naves, apartado de los demás. No le gustaba salir, pero Roger se lo había pedido expresamente.

-Eh, tú.

El albino continuó jugando, sin prestar atención a la voz que acababa de hablarle.

-¿No me oyes? –aquel chico le obligó a levantar la cabeza a Near.

-Hola, Beyond.

-Lo siento, pequeñajo, pero no me gusta que tú seas el nuevo sucesor de L –una sádica sonrisa comenzaba a formarse en la cara del ojiescarlata, que agarró a Near del cuello y lo levantó hasta pegarlo contra la pared.

El albino tampoco mostró signos de dolor en esa ocasión, y simplemente se dejó agarrar, cerrando los ojos.

Soltó un grito de dolor al sentir el puñetazo en el estómago que acababa de recibir.

Notó como Beyond se disponía a continuar, sabiendo que el puñetazo no era ni un cuarto de lo que podía hacer ese psicópata, pero de repente escuchó una voz.

-¿¡Qué cojones te crees que haces!?

El agarre que lo sostenía desapareció y el chico cayó al suelo, a tiempo para ver como Mello empujaba a Beyond mientras este simplemente sonreía.

-¿A ti no te molesta que sea el sucesor de L? Vamos, si tú eras el siguiente... –la sonrisa sádica no desaparecía del rostro del pelinegro.

-No vuelvas a tocarle –le susurró con rabia, tirándolo contra la pared sin demasiada fuerza. Beyond tan solo seguía con su estúpida sonrisa, y se incorporó con agilidad.

Mello, que al no haberlo encontrado en su habitación había salido a buscarlo, lo agarró de un brazo y entró a los pasillos de la Wammy’s House, hacia la habitación del albino.

“Nadie toca o pega a mi nubecita, excepto yo”, pensó Mello, furioso.

Cuando llegaron, le soltó con rabia mientras el chico se enrollaba un mechón de su blanco cabello con un dedo.

Mello, al verlo tan tranquilo y sin que le dirigiese ni una sola palabra de agradecimiento, cerró de un portazo.

-No hacía falta que hicieses eso. Ya me ha pegado más veces, aunque no tantas como tú.

Mello se puso más furioso si cabía al oír esas palabras. ¿Beyond le había tocado más veces? Apretó los puños con fuerza.

-Si vas a pegarme otra vez, hazlo rápido, por favor. Tengo cosas que hacer –dijo Near, que seguía sin soltar el mechón de su cabello.

 

Pov’s Mello

Odiaba a Near. No se merecía ser el favorito de Roger, de Watari, y menos de L. Simplemente no se lo merecía.

Pero... no, ¿a quién quiero engañar? No odiaba a esa nubecita. Le deseaba. Le quería solo para mí y no iba a permitir que nadie lo tocase. Me divertía hacerle sufrir, y lo hacía por el simple hecho de ocultar mis sentimientos.

Miré al albino, con una sonrisa al oír lo que decía. Le agarré del pelo, pegándole a la pared y noté como se quejaba.

-No te atrevas a desafiarme así, nubecita –tiré un poco más fuerte de su pelo, notando como gemía- No tienes nada que hacer más importante que yo.

-Mello, me haces daño –agarré sus brazos, colocándoselos detrás de la espalda mientras le agarraba más fuerte. Noté como empezaba a llorar, pero sin mostrar expresiones todavía. Simplemente le dolía

-Entonces suplica que pare. Suplícalo.

-No. No pienso rebajarme a tu altura, Mello –gimió de dolor al notar un nuevo tirón de pelo.

-Vas a suplicar... –le susurré, mientras empezaba a lamer su cuello y a repartir pequeños besos.

-M-mello, qué haces –noté como el albino tragaba saliva con dificultad, y empecé a sentir un bulto rozando contra mis pantalones. Sonreí con perversión.

-No sabes cómo te deseo, estúpida nubecita –no pude controlarme y me lancé a por sus atrayentes labios, besándole.

 

Pov’s Near

Mello me estaba besando, devorando mi boca, y esta vez no era un sueño. No me estaba pegando.

Sentí como colaba sus manos por dentro de mi camisa blanca, y como empezaba a acariciar hábilmente mi torso. Solté un gemido, pero él me acalló inmediatamente, besándome de nuevo.

Noté como determinada parte de mi anatomía empezaba a crecer y eché mis caderas hacia atrás, avergonzado, pero él lo notó y acercó su cuerpo al mío hasta pegarme completamente contra la pared.

Hizo que pasara las piernas contra su cintura, mientras yo soltaba un gemido al notar como mi erección crecía. Me llevó hacia la cama y me tiró en ella, colocándose sobre mí.

Me quitó la camiseta, y bajó desde mis labios hasta mi pecho. Empezó a morderme con suavidad uno de mis pezones mientras me pellizcaba el otro con una mano, haciendo que gimiese de placer.

-M-mello... –subió hasta mi boca para acallarme con un beso.

-A partir de ahora, nadie podrá tocarte excepto yo, y eso incluye no dejarte pegar por otras personas –dijo, furioso, suponía que por lo de Beyond.

Levantó mis manos y las posicionó al lado del cabecero de reja de la cama, mientras se sacaba el cinturón con una sonrisa.

-¿Qué me vas a hacer, Mihael? –dije, con evidente excitación. Creo que mi masoquismo era un poquito evidente, aunque no me di cuenta de que lo había llamado así hasta que vi como su cara se tornaba más furiosa si cabe que antes.

Me ató hasta comprobar que estaba completamente inmovilizado.

-Te dije que ibas a suplicar –me mordió el labio con fuerza para después besarme con fiereza.

Noté como bajaba su mano hasta que empezó a acariciarme por encima de los bóxers. Empezó a repartir besos por todo mi cuello, dejándome alguna que otra marca.

-Mello, me duele –susurré, tragando saliva con dificultad.

Él tan solo sonrió, y bajó mis bóxers, mientras notaba mi cara ardiendo.

Empezó a lamer lentamente la punta de mi erección, arrancándome un gemido de puro placer.

-Es bastante grande, no sé si me cabrá entera –me susurró, con una sonrisa de perversión.

-S-sigue, por favor –gemí, sin apartar la vista de esa visión tan jodidamente sexy.

Mello sonrió, pero esperó un poco más por el simple hecho de hacerme sufrir hasta que se la metió en la boca, y empezó a succionar muy lentamente. Quería soltarme las manos para poder agarrarle del pelo y marcar el ritmo, me estaba desesperando que fuera tan lento.

Pronto empezó a ir más deprisa haciendo que gimiese aún más, sujetándome por las caderas mientras yo cerraba los ojos.

-M-Mello –gemí, a punto de correrme, y en ese momento noté como paraba.

-No, nubecita, no vas a correrte todavía –me susurró, para luego besarme.

 

Pov’s Mello

Mi erección me dolía demasiado, y no iba a poder aguantar mucho más con esa visión de Near gimiendo debajo de mí.

Le di la vuelta con rapidez, poniéndolo boca abajo y dejando su entrada expuesta. Noté como gemía, enterrando la cabeza en la almohada, así que le tiré del pelo y le susurré en el oído:

-Quiero que grites y gimas sin avergonzarte, y no que lo evites.

Bajé por su espalda hasta llegar a su entrada, arrancándole un profundo gemido. Al menos me había hecho caso.

Ya no podía con mi erección, pero me mentalicé a mi mismo de que si no le preparaba, se moriría de dolor.

Empecé a lamerle la entrada lentamente, penetrándola con la lengua, pero luego paré arrancándole un gemido de protesta a mi nubecita.

Me quité los pantalones y los bóxers, dejando mi erección libre por fin, y le di la vuelta, jadeando. Le desaté y luego le enseñé dos dedos.

 

Pov’s Near

Lamí los dos dedos con sumisión, sin apartar la vista de la cara de Mello.

Cuando pensó que estaban suficientemente húmedos, los bajo hasta mi entrada a la vez que empezaba a masturbarme.

Gemí de dolor cuando noté el primer dedo dentro de mí, pero Mello me hizo callar con un dulce beso.

-Si no te preparo, te dolerá más –murmuró mientras volvía a besarme.

-P-pero Mello... M-me duele... ¡Ah! –hice un gesto de dolor cuando noté como introducía un segundo dedo en mi entrada y comenzaba a abrir los dos en tijeras.

Cuando me acostumbré ya no sentía dolor, si no que estaba gimiendo del placer que Mello me estaba dando.

-Suplícame –murmuró contra mi cuello mientras sacaba los dedos y rozaba su erección contra mi entrada.

-Mello...

-Ya te dije que me ibas a suplicar. Suplícalo o...

-Quiero... que me la metas –gemí, desesperado. No podía más, le necesitaba ahora. Noté como se reía levemente y le miré.

-¿Qué has dicho?

-¡Que me la metas! –prácticamente lo grité, y noté como me penetraba de una estocada, haciendo que gritase de dolor y notando como se me escapaba alguna lágrima.

 

Pov’s Mello

Limpié con un beso su lágrima y luego le besé con dulzura.

-Near, relájate, o te va a doler mucho –noté como se relajaba poco, jadeando, y como él solo movía las caderas buscando más placer.

Empecé a embestirle con suavidad, mientras gemía, intentando hacerle gritar de placer.

-Ah... ¡M-Mello! –gimió mucho más alto que las otras veces y sonreí con satisfacción; lo había encontrado. Le agarré de las caderas, mientras él me pasaba las manos por el cuello, jadeando, y le besé con pasión, embistiendo cada vez más profundo.

Él intentaba acallar sus gemidos besándome, sin resultados a penas.

-M-Mello, me voy a... –su frase se vio interrumpida por un sonoro gemido al haber vuelto a tocar ese punto otra vez. Continué profundizando las embestidas cada vez más hasta que noté como la entrada de mi nubecita se contraía, presionando mi miembro.

-¡MELLO! –gritó, enterrando sus manos en mi pelo y cayendo exhausto en la cama mientras se corría entre los dos. Al notarlo, me corrí dentro de él.

El albino gimió levemente al notar como el líquido tibio le llenaba, y salí de él, echándome a su lado, exhausto.

Mi nubecita bostezó, acurrucándose contra mí después de besarme y pasándome un brazo por la cintura mientras yo le abrazaba posesivamente.

-Near yo... Te amo –murmuré, mirando al pequeño entre mis brazos.

-Y yo a ti Mello... –me contestó él, cayendo dormido.

Sonreí levemente, cubriéndonos con la manta de la cama, y le di un suave beso en el pelo, abrazándolo.

“Nadie más va a hacerte daño, mi nubecita”

Notas finales:

Mello: Al final me has hecho quedar como un blando, esta te la guardo ¬¬

Yo: Pero si ha sido un final muy bonito *3*

Near: Yo no me voy a poder sentar en una semana.

Mello: Pues si llego a ser duro...

Bueno, espero que os haya gustado (hombre invisble que será la única persona que lo lea, te quiero <3) y eso, es mi primer lemon, acepto críticas constructivas y todo lo que queráis dejarme en los reviews si alguien lee esto.

Gracias ^^


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