Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Forbidden (Prohibido) - Hunhan. por LexaWolf

[Reviews - 237]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

¡Aquí está lo que os prometí! Feliz año nuevo, aquí ya es 2015 :) 

Capitulo I. PROHIBIDO. (POV Luhan)

Estamos en el escenario, rodeados de miles de rostros que miran nuestros cuerpos y analizan cada uno de nuestros movimientos, pero a pesar de eso, solo soy capaz de centrar mi atención en Sehun. «Oh Sehun» el pequeño maknae del grupo, un chico que al principio parecía distante pero poco a poco fue mostrando su cálida personalidad al grupo. Y también a mi. Al principio sentía simpatía por él por ser el más pequeño y por su agradable y tímida personalidad hacia mi. Me gustaba ver cómo su rostro se sonrojaba cuando tenía que hablar conmigo, o cómo una pequeña sonrisa aparecía en su rostro cada vez que me dirigía a él. Eso era, en un comienzo, simple simpatía y consideración, sin embargo poco a poco mi simpatía fue convirtiéndose en otra cosa. Algo extraño, algo que dolía cada vez que me daba cuenta de ello. Algo que aun duele ahora, cuando veo su perfil. La luz nos ilumina a todos por igual, pero el sobresale entre todos los demás. Tal vez sea por su largo y delgado cuerpo, tan esbelto que al principio me daba envidia la buena forma en la que creció, a diferencia de mi. Antes teníamos la misma altura, pero ahora él puede perfectamente mirarme desde arriba. Eso era, envidia, pero ahora ese sentimiento también se ha trasformado en otra cosa, algo que me provoca acercarme a él y pasar mis dedos por su espalda para ver si es tan firme como parece, pero sin duda, no hay forma de que pueda hacer aquello. Sería raro. «Muy raro» También quiero pasar mis dedos por su suave piel, sobre todo por la piel de su cuello, que es tan suave que mis dedos se podrían fundir con ella. Y su rostro, otra cosa que ha cambiado en él es su rostro. Antes era lindo, sólo eso, lindo, pero con el paso del tiempo sus rasgos se fueron haciendo más marcados, mostrando un rostro más varonil y atractivo. «Atractivo» Aun me pregunto si todos los demás lo ven de la misma forma en la que lo veo yo, intento convencerme de que es así, tengo miedo de darme cuenta de lo contrario. Me pregunto si todos sentirán la necesidad de acercarse a él y apartarle el pelo del rostro, me pregunto si todos se le quedarían mirando fijamente, examinando cada centímetro de su piel, desde sus bonitos ojos marrones hasta llegar a sus pequeños y rosados labios...

Cómo si sintiera que pienso en él, mis ojos se encuentran con la mirada de Sehun, y me quedo sin aliento. Me sonrojo tanto que temo por esos inacabables segundos que Sehun pueda leer mi mente y saber las cosas que pienso de él. Por más que aparto mi rostro rápidamente, mi corazón no deja de golpear duramente contra mi pecho en los segundos posteriores. Mis manos tiemblan, mi cuerpo por completo se estremece, no soy capaz de verlo pero sigo sintiendo su mirada sobre mi. Mi cuerpo se siente caliente, como si alguien estuviera recorriendolo con sus manos. Me siento incomodo y por primera vez entiendo los sentimientos detrás de la expresión “tierra trágame”, pero no es cómo si pudiera desaparecer en medio del escenario sin dar más que unas cuentas explicaciones. Debo quedarme ahí, fingiendo no sentir nada, cuando cada parte de mi cuerpo siente una multitud de cosas.

 

{♥} {♥} {♥} {♥}

 

Cuando el evento termina, tengo ganas de gritar de emoción. Me siento agotado, al igual que el resto de los miembros del grupo, eso se puede notar al ver su cansados rostros y al escuchar sus sonoros bostezos. Cómo siempre, lo único que quiero hacer es dormir por años hasta sentirme otra vez capaz de rendir al 100 %, pero tampoco es cómo si pudiera hacer eso. Todos caminan tan rápido que mis pies duelen al intentar seguir sus pasos, y cuando me detengo a tomar el aliento, un Lay sonriente aparece frente a mi.

— ¿Luhan estás bien? — me pregunta con la preocupación reflejada en sus ojos.

— Solo necesito dormir en un baúl por al menos 2 eternidades — bromeo, riéndome al terminar de hablar. — estoy bien, solo estoy cansado, ya sabes, las personas mayores como yo no tenemos tanta energía cómo un joven de tu edad.

— Ahjussi necesita mi ayuda entonces — dice Lay, siguiendo mi juego — apóyate en mi hombro para andar.

Por más que me niego a aceptar la propuesta de Lay, este insiste hasta que termino aceptando. Apoyo parte de mi cuerpo en el de Lay y eso me ayuda a caminar con más facilidad que antes.

— 谢谢 (Xie xie)* — digo después de que Lay me deje caminar solo nuevamente.

— 不用谢(Bù yòng xiè) * — responde él, riendo junto conmigo.

Me rio libremente junto a él, sin cubrir mi rostro, ya que con Lay siempre siento que puedo ser yo mismo sin preocuparme. Por lo general, cubro mi boca al reírme, desde que los miembros mencionaron que luzco cómo una persona mayor al hacerlo, y en esa ocasión Lay me defendió ante los demás, es por eso que puedo reírme frente a él sin preocuparme. Sin embargo, mi risa se desvanece casi por completo cuando siento una mirada sobre mi. «Sehun» pero cuando miro en su dirección, veo que este está mirando al frente, ajeno a mi. Eso me hace sentir aliviado y triste al mismo tiempo, y sentir esos dos emociones contradictorias hacen que me vuelva a molestar no poder entender mis propios sentimientos. «¿Por qué pienso siempre que Sehun me está mirando cuando no es así?» «¿Acaso quiero que me mire?» Y me siento aun más molesto cuando dirijo mi atención otra vez a Sehun y veo que Tao está junto a él. No puedo evitar sentir una punzada de celos, antes Sehun y yo estábamos más unidos, íbamos a comprar Bubble Tea y eramos capaces de hablar durante mucho tiempo mientras los bebíamos, pero eso cambio hace algún tiempo y mi lugar fue ocupado por Tao. No es que sea su culpa, no odio a Tao, todo lo contrario, lo aprecio mucho cómo mi compañero en el grupo y como amigo, por eso me siento sucio al sentir este pequeño odio irracional hacia él.

Intento olvidar todos estos pensamientos en el auto que nos lleva hasta el hotel, pero por más que intento dormir, mis pensamientos siguen centrados en Sehun y en todo lo que respecta a él.

 

{♥} {♥} {♥} {♥}

 

Cuando me dicen que debo compartir habitación con Sehun, debo de luchar para intentar mantener la sonrisa en mi rostro intacta. «¿Por qué me tiene que suceder eso a mi?» Justo cuando tengo este tipo de pensamientos... es cómo si el mundo entero estuviera en contra de mi. Pero Sehun no tiene la culpa de mis confusos sentimientos hacia él, es por eso que debo intentar a toda costa hacer que desaparezcan, para que lo dos podamos estar cómo antes.

Llego hasta la puerta de la habitación y ordeno a todo mi cuerpo a tranquilizarse, pero cómo siempre, no me hace caso y tiembla sin parar. Levanto la mano y mi puño tembloroso golpea la puerta un par de veces, hasta que escucho unos pasos al otro lado de la habitación. «Todo va bien, todo va perfecto» me repito una y otra vez en mi mente y esbozo una gran sonrisa en mi rostro, una sonrisa que refleje amistad y nada más.

Sehun abre la puerta y mi sonrisa flaquea cuando aparece frente a mi, tan alto e inexpresivo como siempre.

— Sehun, te toca compartir habitación conmigo. — digo mientras entro a su habitación rápidamente, evitando mirar su rostro.

Sehun no responde nada y un gran silencio aparece en la habitación, lo cual me hace sentir aun más nervioso. Pongo mis cosas a gran velocidad sobre la cama libre y me encierro en el baño, respirando profundamente una vez que estoy dentro. Miro mi reflejo en el espejo del baño y me avergüenzo del deplorable aspecto que tengo. Parece que estuviera a punto de llorar, y odio llorar, así que muerdo fuertemente mis labios hasta que siento el sabor de mi propia sangre. Intento convencerme a mi mismo de que todo está bien, de que todo irá bien, pero cada vez que me lo digo suena como una gran mentira.

Me sentiría feliz de quedarme por siempre en el baño, pero tengo que salir para no lucir sospechoso. Cuando salgo, veo a Sehun frente a su cama, mirando en mi dirección. Mi mirada se aparta de la suya y me siento sobre la cama, sin saber cómo comportarme o qué decir. Tal vez debería hablar con el sobre lo cansados que debemos de estar todos y reírme tontamente al terminar, pero antes de poder decir nada, la voz de Sehun interrumpe mis pensamientos.

— Esto...sí. Ten buenas noches. — se da la vuelta tras decir esto y se mete rápidamente en la cama.

«Debe estar muy cansado» pienso, porque él no suele comportarse de esa forma conmigo. Normalmente hablaría de muchas cosas hasta quedarnos dormidos, pero hoy no será así. Y lo comprendo, todos estamos agotados. Yo también lo estoy, pero estos pensamientos no hacen otra cosa que atormentarme.

Suspiro y me meto en la cama, siguiendo su ejemplo. Trato de dormir por unos horribles minutos, pero mi mente se mantiene despierta. Siento la cercanía de Sehun, y me siento nervioso por ello. No hay forma de poder dormir en estas condiciones.

Finalmente, me rindo, y abro los ojos. El cuerpo de Sehun está cubierto casi por completo por las sábanas, solo están al descubiertos la mitad de su espalda y su cabeza. Viéndolo así, me recuerda al antiguo Sehun. En mi mente destella la imagen de su antiguo rostro sonriente, el rostro de el Sehun que me llamaba siempre “hyung” y me pedía acompañarlo a todos lados. En esos momentos sentía ganas de protegerlo y ayudarlo en todo lo que pudiera. Sólo un cariño fraternal. Y aun debe de seguir siendo eso, definitivamente, no hay nada amoroso en mis sentimientos. Solo estoy confundido. No está bien mostrarme tan nervioso y angustiado frente a él, no hay nada malo con estar juntos, al fin y al cabo los dos somos amigos y somos hombres. No debo mostrarme nervioso por su presencia.

Mi cuerpo se mueve antes de que pueda controlarlo si quiera y sin más, me encuentro de repente al lado de Sehun, en su cama. Escucho una simple exclamación de sorpresa por parte de Sehun, al sentir mi presencia cerca a él. Mis manos también se mueven por acto reflejo y rodean su cintura, con mi cabeza descansando en su espalda. No es la primera vez que dormimos juntos, ya habíamos dormido juntos antes, en esos días en los que hablábamos hasta quedarnos dormidos, en ese tiempo en el que aún lo trataba cómo mi hermano pequeño y lo abrazaba de la misma forma, sólo que en ese entonces él no se sentía tan cálido y reconfortante cómo se siente ahora. Mi respiración se acelera al sentir el abrumante calor que desprende su cuerpo y los latidos de mi corazón se descontrolan, pero lo que más me sorprende es notar que a él le sucede lo mismo. Su cuerpo está rígido, pero su corazón golpea rápidamente contra su pecho. «¿Se sentirá también nervioso?» me pregunto. Se siente tan bien estar cerca de él, mi mente está tan nublada que mis preocupaciones desaparecen por completo y el sueño comienza a manifestarse por fin en mi cuerpo. Me siento relajado, pero Sehun parece no sentirse de la misma forma, está tan tenso que temo que vaya a romperse.

— Sehun...no puedo dormir sólo — siento la necesidad de justificar de alguna forma mis acciones – déjame dormir contigo por favor — pido esto último en un susurro.

No quiero que la paz que siento en este momento desaparezca y vuelva a aparecer la sensación incómoda de antes. No quiero pensar en nada, solo quiero dormir junto a él, disfrutando del suave aroma que desprende su cuerpo.

— Luhan no seas bebé, ve a dormir sólo. — contesta él de forma fría, lo cual me sorprende y me hiela la sangre.

Su voz parece tan fría, y sus acciones demuestran lo mismo, ya que aparta mis manos con brusquedad. Un nudo se forma en mi garganta y un dolor agudo aprieta mi pecho, haciendo que cada respiración duela. Siento que estoy a punto de volver a lo que era hace un momento, y no quiero regresar a ello. No quiero volver a tener que sentirme de esa forma. Siento pánico sólo de pensarlo. Mis manos se vuelven a cerrar sobre la cintura de Sehun, tan fuerte que temo hacerle daño, y agradezco que no me vuelva a apartar de él. Sin embargo, parece tan alejado de mi, se queda en silencio e inmóvil, cómo si no estuviera junto a mi, sino en algún otro lugar. Y eso es aun peor, sentir que me ignora es mucho peor.

— Sehun dime, ¿te he hecho algo? Últimamente te has alejado de mi...— mi voz se quiebra a la mitad de la frase y siento vergüenza por ello, no me gusta parecer débil y se que me estoy comportando de forma infantil, pero las palabras no pueden dejar de brotar de mi boca — dime que he hecho mal por favor...— le suplico.

Odio cómo suena mi voz al decir esto último, sueno tan herido, tan suplicante, tan patético. Quiero retractarme, volver atrás y no decir nada, pero eso no va a suceder. Lo dicho, dicho queda.

— Luhan déjalo ya, estamos muy cansados, los dos. — la voz de Sehun parece cansada. «Cansada de mi»

Aparta mis manos y se da la vuelta, mirando hacia mi. Sus manos mantienen las mías lejos de él y rezo porque no note la forma en la que tiemblan, tan descontroladamente, tan fuera de si. Sus ojos permanecen cerrados, y el deseo porque los abra crece en mi en cada momento, necesito que su mirada me reconforte y me haga ver que no hay nada mal entre nosotros. Pero sí que hay algo mal. Toda la situación delata eso. Por más que intento pensar qué he hecho mal, no logro encontrar la razón de su comportamiento. «¿Habrá notado la forma en la que lo miro?» sólo pensarlo hace que todo mi cuerpo se enfríe. Tengo tanto miedo de que haya notado que en mi mirada hacia él hay algo más que un cariño entre amigos y que ese sea el motivo de su comportamiento.

— Tu y yo sólo somos compañeros de trabajo. No tenemos porque ser amigos ¿Está bien? — susurra Sehun, con la voz más fría y lejana que jamas había escuchado en él.

Me quedo tan sorprendido por sus palabras que soy incapaz de hablar, por más que lo intento varias veces. Mi boca no hace más que abrirse y cerrarse, sin poder pronunciar ni una sola palabra. Otra vez, un destello del rostro del Sehun sonriente del pasado aparece en mi mente, lo cual me produce unas grandes ganas de llorar. Y otra vez, vuelvo a morder mi labio para evitar hacerlo. Duele, porque la herida que me hice antes no ha terminado a sanar, pero lo que más daño me hace no es eso, sino son las palabras de Sehun. Debo dejarlo ir, obviamente está enfadado conmigo y todo lo que dice no es verdad, o al menos intento convencerme de eso. Sin embargo, mis manos no pueden dejar de aferrarse a las suyas. Lo único cálido que hay en él en estos momentos. Me sorprendo a mi mismo al sentir cómo las lágrimas empiezan a deslizarse por mis mejillas, me sorprendo tanto que sólo soy capaz de creer que estoy llorando cuando pruebo el sabor salado de mis propias lágrimas cuando se deslizan hasta mi boca.

— No digas eso Sehun, hemos pasado mucho tiempo juntos como amigos, no se porque dices esto ahora...yo quiero ser tu amigo — balbuceo.

Lo último, lo digo más para mi que para él. Intento creer que realmente lo que quiero es ser su amigo, intento creer que el motivo de mis lágrimas es ese y no otro, pero una vocecita en mi interior no deja de gritarme un incesante “Mentiroso”.

— Ya me cansaste. Tu y yo...no tenemos nada en común. Deberías andar más con otras personas, que estés siempre sobre mi me molesta. Lo siento pero es así. — dicho esto, Sehun se levanta y se va a la cama de al lado, donde yo dormía en un principio.

Eso es lo que termina por quebrarme por completo. Empiezo a sollozar fuertemente, como nunca antes lo había hecho. El nudo en mi garganta duele tanto que apenas soy capaz de respirar. Me siento culpable por todo. Por hacer sentir a Sehun de esa forma por culpa de mi extraña obsesión de querer estar junto a él para “protegerlo” cuando en realidad lo que quiero es otra cosa que ni yo mismo sé. Me siento también confuso, por no ser capaz de entenderme a mi mismo. Todo ello, hace que el dolor se multiplique. Me siento avergonzado por llorar de esa forma, y aun más, frente a él, que es más pequeño que yo. Se supone que yo tendría que ser el maduro, se supone que no tendría que llorar por más que quisiera; nunca lo había hecho por ello, odio tanto mostrarme débil ante otras personas, no necesito su protección, ni su pena, pero en estos momentos fue inevitable hacerlo. Estoy seguro que Sehun ya fue capaz de ver la debilidad en mi mirada, no hay forma de ocultarlo. Y lo peor de todo, es que no es la primera vez que me muestro débil frente él. Hace un tiempo, cuando aun estábamos en el periodo de entrenamiento, los días eran tan agotadores y el dolor de encontrarme en un lugar desconocido, lejos de mi familia, terminaba por acabar con mi espíritu cada día. Tener que levantarme era un suplicio, hubo un momento en que pensé en abandonar, más por la añoranza que por mi desgaste físico. Hubo un día, en el que me rompí por completo cómo ahora, ese día fue en el cumpleaños de mi madre. Estaba hablando con ella por teléfono, y cuando ella dijo que me echaba de menos, yo no fui capaz de responder nada, así que solo asentí como si me pudiera mirar y colgué; las lágrimas no tardaron en aparecer en mi rostro, y lloré durante mucho tiempo, hasta que Sehun apareció frente a mi. Me sentí realmente avergonzado, sin embargo el no dijo nada, el pequeño maknae sólo me miro y se sentó a mi lado, reconfortandome con su presencia. En ese momento, me miro a los ojos y sonrió, diciéndome con su mirada : todo va bien. Esta vez, su mirada decía todo lo contrario. Nada iba bien, y nada volvería a ir bien.

 

{♥} {♥} {♥} {♥} 

 

Pasé gran parte de la noche intentando controlar los sollozos que luchaban por escapar de mi boca. No quería parecer aun más patético de lo que parecía. Pero eso no evitó que llorara varias veces, llorándo por todas esas veces en las que no pude hacerlo y tuve que mantener una sonrisa falsa en mi rostro. Lloré por mi, por mi familia, por mis sentimientos y por Sehun, pero llorar por él fue una de las cosas más dolorosas que hice.

 

{♥} {♥} {♥} {♥} 

 

Me despierto muy temprano, tanto que la habitación se encuentra iluminada por una tenue capa de brillo, proporcionada por el sol. Mis ojos duelen cuando intento abrirlos, y se sienten muy pesados. «Las bonitas consecuencias de llorar casi toda la noche » pienso de forma irónica. Froto mis ojos con las yemas de mis dedos hasta que estos duelen un menos y soy capaz de mantenerlos abiertos.

Me levanto, no tendría que hacerlo porque aun es muy temprano, pero no puedo soportar estar echado en esa cama por más tiempo. Así que me siento sobre la cama y cuando por fin tengo las fuerzas suficientes para hacerlo, hecho un vistazo a la cama donde Sehun duerme. Veo su cuerpo envuelto por las sábanas, las cuales se encuentran hechas todo un caos sobre su cuerpo. Sus piernas, sus brazos y gran parte de su pecho quedan al descubierto. Su piel brilla de una forma muy hermosa gracias a que los pequeños rayos de sol inciden sobre ella. Su rostro dormido se ve también de la misma forma, me recuerda tanto al antiguo Sehun, se ve tan “lindo”, nada parecido al frío Sehun de ayer.

Me acerco a él, y pronto me encuentro al lado de su cama, mirando su rostro fijamente. Mis manos no resisten la tentación y paso las yemas de mis dedos por la suave piel de sus mejillas, acariciandolas lentamente. Sehun mueve la nariz al sentir mis caricias, por lo que mi corazón se encoje por un momento, temiendo que despierte, pero eso no ocurre, sino que permanece dormido.

No puedo explicarme que es lo que me impulsa a hacer lo siguiente, pero mi rostro se acerca al rostro de Sehun y mis labios rozan los suyos, delicadamente, es a penas un ligero toque que me permite probar la suavidad de sus labios. Me alejo rápidamente, con el corazón latiendome tan rápido que temo que vaya a salir de mi pecho. «No debí haber hecho eso» pienso, pero aun más, «¿por qué lo quize hacer? ¿por qué quiero volver a hacerlo?»

— No te alejes — murmura Sehun y sorprendiendome, me acerca a él y vuelve a unir nuestros labios en un salvaje beso.

Su lengua se apodera de la mía, mueve sus labios con gran rapidez por los míos, tanto que los entumece en un instante. Yo solo me dejo hacer, sin saber cómo responder ante su impulsivo acto. Y lo que más me sorprende, es que no siento deseos de alejarlo, sino que quiero más. Más y más. Si fuera otra persona, simplemente lo alejaría de mi, pero con él no puedo hacer eso.

Me quedo inmovil hasta que Sehun se aparta de mi y vuelve a dejar descansar su cabeza contra la almohada.

— Que bonito sueño, no quiero despertar — admite con una sonrisa en el rostro.

Sus ojos estan entrecerrados, por lo que pronto me doy cuenta de que está medio dormido. «Debío confundirme con una chica, con alguien que le gusta» pienso con pesar.

La sonrisa de Sehun se mantiene en su rostro, pero de un momento a otro, empieza a llorar. Las lágrimas se deslizan por sus mejillas y su expresión se transforma por completo. Un gran dolor se refleja en su rostro.

«¿Quién te ha roto el corazón y te ha hecho de esta forma?» mis palabras en mi mente saben amargas. Acaricio su rostro una última vez antes de alejarme de él y regresar a mi cama. No le diré nada de este momento, seguiré haciendo que piense que solo fui un sueño. Solo un sueño.

Notas finales:

¿Os ha gustado? Espero que sí. Podeis ir a leer el primer capitulo del fic para comparar lo que uno piensa y el otro y así. Me explico (?

Ahora sabemos por qué Sehun piensa a veces que Luhan es un sueño y no es real. -se le rompe el kokoro al pensarlo-

Subiré un capitulo especial a continuación de este así que no os vayais, además os contaré en las notas finales de ese cosas importantes sobre el fic :) 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).