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Un Nuevo Despertar por Natsuki Uzumaki

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Notas del capitulo:

Disculpen la tardansa... es que no habia podido usar la computadora y cuando lo hacia no terminaba de escribirlo... Pero aqui esta el final:) Espero que les guste y le den una oportunidad. Arigato a las personas que lo leyeron. Me gustaria poder saber que piensan de este fic. 

 

By. Shinen Uchiha

ACLARACION: La autora de este fic y la que lo está publicando soy yo, SHINEN UCHIHA. Nee-san, Natsuki Uzumaki, solo me prestó su cuenta para publicar este fic por cosas que ya explique en el primer cap. Espero que les guste este capítulo que es el final del two-shot.

Arigato por darle una oportunidad el leerlo y darme su opinión.

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                                                       By. Shinen Uchiha

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Una sombra se acercaba a ellos y poco a poco dejo ver a Itachi con un rostro indiferente y frialdad, vistiendo solo sus pantalones sin abrochar con el zipper arriba y dejando al descubierto su bien trabajado abdominal y pecho. Se coloco  a lado del rubio, lo tomo por la cintura y le dio un  apasionado beso que los dejo sin alieno, cuando se separaron un hilo plateado unía sus labios.

-Buenos días y feliz cumpleaños.- le susurro mirándolo a los ojos con una semi-sonrisa mientras se separaba totalmente y lo abrazaba posesivamente.

                                                      Sasori fruncía el ceño

-Uchiha Itachi.-dijo ácidamente.- No esperaba verte precisamente a ti aquí.

-¿Y porque no? Después de todo, estoy en la casa de mi prometido.- respondió burlonamente  con una sonrisa ladina en su rostro.

 

-¿Prometido?- repitió en shock.- ¿Eso es verdad Deidara?

-Si Sasori, Itachi es mi prometido, hum.

-Es por él que no quisiste aceptarme.- no pregunto sino que lo aseguro mirándolos a ambos. Ninguno paso por alto el coraje y tristeza con laque lo dijo.

-¡Claro! Sabes algo, Sasori.- pregunto rudamente Itachi.- debo dar las gracias por haberte ido hace 4 años al viaje de negocios con aquel chico castaño que conociste en un bar, ¿Cómo se llamaba? ¿Rem? Si no te hubieras ido nunca hubiera tenido la felicidad que he sentido los últimos 2 años al estar con Deidara; aunque debo decirte que eres un imbécil, me costó mucho que él volviera a creer en una persona y mucho más en el amor, además tu y yo sabemos que Uzumaki no es fácil.

Esto  provoco un sonrojo en el rubio.

Itachi estaba al tanto de la historia de Sasori y Deidara, cuando comenzaron su relación ambos  habían pedido sinceridad del otro y cuando Deidara le conto lo de Akasuna no pudo evitar sentir un enorme odio y coraje contra el  pelirrojo, no entendía como alguien podía dejar una maravillosa persona de esa manera y aun mas, aceptar un viaje de negocios e irte con alguien más.

Para su desconcierto, Sasori sonrió ladinamente, destilando arrogancia por cada poro de su angelical rostro.

-No sabía  que yo era alguien tan importante para ti como para que estuvieras al tanto de mi vida, Itachi.

-Y no lo eres Akasuna, todos en Akatsuki supimos acerca de su relación y como esta termino en... ¿Cómo podríamos llamarlo?- pregunto fingiendo pensar.- ¿Tragedia? ¿Estupidez?

-¡Vamos Uchiha! Solo 3 personas sabían de lo mío con Deidara, y tú no era una de ellas. Admítelo- sonrió mientras metía sus manos en los bolsillos de su pantalón.- desde que viste a Deidara quedaste prensado de él, pero sabias que estaba conmigo, aun así investigaste todo de él.- giro su vista al poco sonrojado ojiazul. ¿O me vas a negar que cuando conversaron por primera vez él te dijo algunos gustos similares y cuando tuvieron su primera cita te  sorprendió con un regalo y cena de tus favoritos que quedaste maravillado  al ver que él te dio lo que más te gustaba?

Su sonrisa se marco más al observar el ceño fruncido del  Uchiha y el ligero brillo de sorpresa en sus ojos.

-Y-yo… yo…-balbuceaba Deidara, su mente aun no procesaba lo dio por Sasori.

-¿De qué hablas Sasori?- gruño Itachi afilando su mirada contra él.

-No eres el único que tiene los medios apara vigilar a alguien, por mi parte era por protección y tu solo lo hiciste para saber más acerca de él, para saber todas y cada una de sus manías, gustos y diversiones. Siempre supe que tu también observabas a Deidara, si no te dije nada era porque sabía que no intentarías nada cuando te enteraste que yo también lo vigilaba

-¿Tan poco te importaba como para no reclamarme lo que estaba haciendo?- su mirada se entrecerró aun mas y sus puños estaban tan apretados que sus nudillos se  volvieron blancos.

Una carcajada resonó en los oídos de Itachi y Deidara.

-Es que, a diferencia de ti Uchiha, yo no soy inseguro.

-Maldito bas…

-¡Ya basta!- grito Deidara; cuando su mente logro recuperarse de la información  que había escuchado de la boca de ambos comenzó a molestarle el hecho que hablaran de él como n objeto y lo hacían como si no estuviese presente.

Tenía su ceño fruncido con una mueca de disgusto en su rostro, estaba sonrojado de las mejillas y este recorría de una a la otra pasando por la nariz pero deteniéndose antes de tocar las orejas. Estaba furioso e Itachi y Sasori lo sabían.

‘’Es sexy cuando se enoja’’ pensaron los dos

-Onegai Itachi, vuelve a dentro y déjame platicar con Sasori a solas, hum.- ordeno con voz firme mirándolo intensamente.

-No te dejare solo con este intento de hombre Deidara.-contesto de igual forma son correr la mirada.

Ante todo esto, Sasori solo sonreía divertido.

‘’Parece que al fin llego quien domara a Itachi’’ pensó.

-¿Acaso Sasori tiene razón y en realidad eres inseguro y por eso no te quieres ir, hum?.-pregunto, estaba  muy molesto, tanto que no se dio cuenta de lo que dijo hasta que ya era muy tarde. Le molestaba el haberse enterado que lo habían vigilado sabrá Kami desde  cuándo, que hablaran de él como si fuera un premio  y, aun mas, que todo Akatsuki se haya enterado de su relación con Sasori cuando ellos intentaron ser lo más discretos posible, y al parecer, no lo fueron tanto.

Itachi gruño molesto y, de nuevo, por runos momentos y por la luz, sus ojos se volvieron rojizos.

Cuando Deidara se dio cuenta de lo que había dicho su mirada se volvió más suave y dijo:

-Onegai Itachi.- tranquilizó su tono de voz y se disculpo con la mirada.

-Hmp.-  el azabache entendió el mensaje y lanzándole la última mirada de advertencia a Sasori, el cual le respondió con  una gran sonrisa, entro de nuevo en la casa perdiéndose de la vista de ambos.

El rubio Uzumaki suspiro.

-Supongo que debo explicarte lo de la vigilancia ¿no?-la voz del pelirrojo rompió el tenso  ambiente e incomodo silencio.

-La verdad sí; no puedo creer que me estuvieras vigilando. ¡Ni que hiciera cosas malas, hum!

-No es porque no confiar en ti, solo que cuido mucho lo que me interesa. Y tú no eras la excepción.- lo miro seriamente  y con eso el Uzumaki se dio cuenta que no bromeaba.

-Si te hace sentir mejor, cuando me fui unos meses después, deje de vigilarte. Pero Itachi aun  lo hace, cuando recién llegue lo primero que hice fue buscarte y fue muy fácil  saber lo que Itachi hacia. Después de todo, el detective que contrato trabajaba para mi.- comento tranquilamente mientras se encogía en hombros restándole importancia.

-¿!QUE!?.-los ojos de Deidara parecían salirse y su cara se  parecía al cuadro del hombre gritando en un puente.

-¡Por Kami, Deidara!  Todos sabemos lo posesivos que son los Uchiha y que no les gusta que nadie mire lo que es de ellos, si el hermano es así ¿Por qué Itachi no lo seria?

-Sasuke e Itachi no son iguales, hum. Tienen distinto carácter.- defendió el rubio

-¡Oh, sí! .- contesto sarcásticamente mientras rodaba los ojos.-Uno es mas extrovertido y el otro no dice más de 3 palabras en una oración, y sorprendentemente está casado. Pero aun así son Uchiha, es de familia ese comportamiento.- estaba molesto, y eso Deidara lo sabía.

-A que mas has venido Sasori.- contesto ignorando el último comentario del pelirrojo.- Ya viste que no estoy interesado en ti de la forma que tú quisieras, solo te puedo dar mi amistad.

-Tienes razón.- su tono ahora fue de tristeza y sus ojos mostraban decepción.- He venido demasiado tarde, no te supe valorar y tu seguiste con tu vida. Lo siento Deidara, por todo. Espero y  puedas perdonarme.

-No he pensado en ti con rencor en ningún momento, Sasori hum.- le regalo una pequeña sonrisa.

Una sonrisa lastimera salió de sus labios. – Es un gran consuelo. M e tengo que ir, no te preocupes Deidara, no te volveré a molestar; así que puedes casarte tranquilo que no impediré la boda.-bromeo un poco para sacar el tenso ambiente.

-Demo Sasori, aun podemos ser amigos hum.- respondió amablemente el rubio.

-Perdóname de nuevo, pero o podría ver como se casa la persona que amo y como une su vida con otra persona.

Deidara abrió los ojos enormemente ¿lo amaba? ¿Había dicho que lo amaba?

-T-tu…- tartamudeo

-Si Uzumaki, yo te amo.- sonrió.- No lo supe cuando me fui y te abandone, si no hasta que ya no estabas conmigo me di cuenta de lo necesario que eras para mí. Bien dicen ‘’NO sabes lo que tienes hasta que lo pierdes’’ y yo soy un claro ejemplo.

-N-no sé qué decirte hum.- y era verdad, se había quedado sin palabras.

-No tienes que decir nada cariño.- camino lentamente hacia atrás como si así pudiera evitar que Deidara lo siguiera, aun que  internamente esperaba que sí, que le arrojara en anillo a Itachi  y le dijera que no quería casarse por que se dio cuenta que en realidad lo amaba a él, a Sasori.- Me gustaría que me recordaras con amor y no como el idiota egoísta que fui.

-¡Sasori!.- lo tomo del brazo deteniéndolo, provocando que el corazón   del mencionado se acelerara a niveles insospechados, y más aun cuando sintió como lo rodeaban de su cintura y se recargaban sobre su pecho.

Por un momento quedo paralizado por la acción del rubio, pero después de unos momentos le devolvió el abrazo y con una mano le acariciaba lentamente la cabeza.

-Sa-Sasori-kun, siempre, escúchame bien, siempre te recordaré como la maravillosa persona que fuiste conmigo. Eres alguien muy importante para mí y me duele que te vayas y que no puedo hacer nada  para impedirlo, hum.-  susurraba al momento que levantaba su cabeza y miraba a los ojos ese par de perlas ámbar  que lo hipnotizaban.

Se miraron durante largos segundos y luego el suspiro de Akasuna  los devolvió a la realidad.

-La vida es muy impredecible, aunque  el destino es a veces cruel, siempre tiene sorpresas para nosotros que hacen que olvidemos los malos momentos y nos devuelven la esperanza de un  mejor mañana.- hablaba lentamente, como si temiera que todo fuera un sueño, seguía acariciando la melena de Deidara tiernamente.- Tal vez nos volvamos a ver en un futuro, pero solo el destino lo decidirá. No te digo adiós, si no  hasta pronto.

 Se inclino hacia el ojiazul quedando muy cerca de sus labios y después de unos momentos beso su mejilla.

-Quisiera besarte, pero sé que no viviría para contarlo por culpa del salvaje que tienes como prometido.

Ambos rieron, cada uno pensaba en lo que habían vivido, las risas,  los chistes, los buenos momentos, como se conocieron, su primer beso, etc.; pero de algo estaban seguros, esa no era la última vez que se verían.

-Me voy Deidara, se feliz y te deseo lo mejor a ti y a Itachi.- se fue mientras un nostálgico Deidara lo miraba con cariño y aprecio.

-Matta ne, Sasori-kun.- susurro al viento.

                         Gracias a Sasori un capítulo de su vida se había cerrado.

Camino a paso lento hacia la casa, cuando llego a la sala observo a un serio Itachi sentado,  ya llevaba una camisa y a juzgar por su apariencia había tomado un baño. Estaba sentado en el sillón con los ojos cerrados, sus brazos cruzados a la altura de su pecho y con una expresión seria y pensativa.

-Ya se ha largado Sasori.- hablo de repente asustando a Deidara por el tono y la fuerza de su voz.

-H-hai.- caminando a paso tranquilo se posiciono a lado del peligro.

-Hmp.- volteo hacia Deidara y lo beso apasionadamente.

-Dime que no intentara nada para estar contigo.- pregunto cuando el beso termino.

-Sasori-k.. are Sasori, se ha ido, solo quedamos como amigos y sinceramente espero volver a verlo, es una persona agradable, hum.

-Claro.- rodo los ojos.- es agradable cuando no intenta robarte a tu prometido.

-¡Itachi, hum!-rio juguetonamente mientras le daba un ligero golpe al azabache en su brazo y se ponía de pie.

El azabache hizo su cabeza hacia atrás recostándola y estiro sus brazos poniéndolos a los costados de su cabeza. Se veía cómodo  y también cansado.

-¿Aun estas cansado, hum?- pregunto el rubio observándolo.

-La verdad es que si, no dormí muy bien porque no podía creer que aceptaras casarte conmigo. Cuando desperté escuche voces, mire por la ventana y lo primero que vi fue una mata pelirroja sonriéndote y acercándose a ti. Corrí hacia la puerta para ver que estaba  haciendo eso aquí y me encuentro con que se le estaba  declarando a mi prometido. Eso no es precisamente un buen despertar.- término de contar aun  con sus ojos cerrados y en la misma posición.

-Ne… Itachi-kun hum…

-¿Nani?

-¿Estabas celoso y por eso actuaste de esa manera frente a Sasori, hum?

El ojinegro se enderezó tan rápido que Deidara podría haber jurado que escucho como trono su cuello. Un ligero tinte carmesí adorno las mejillas de azabache.

-N-no es eso. Solo no me agradaba la idea de que alguien quisiera quitarme lo que es mío.

                                                        Deidara rio levemente.

-Itachi, a eso se le llaman celos. Eso es lo mismo que dice tu hermano y tu padre de sus celos, hum.

-Sasuke-baka es un celoso psicópata, todos sabemos lo enamorado que esta de Sakura-chan  y viceversa, otouto solo cuida lo que es suyo por derecho.- agito su mano restándole importancia, pero luego se puso pensativo mientras se sobaba el mentón.- Aunque es muy  tonto, recuerdo la vez que vio como un hombre salía de su casa y estaba abrazado de Sakura-chan, el se puso como fiera  y fue a golpearlo pero resulto ser el tío de ella, él que nunca se presenta a las cenas familiares  y por eso Sasuke no lo conocía. Pobre Kakashi.

-Cierto, hum.- aun recordaba al pobre hombre tirado en el suelo y la cara de Sasuke al enterarse que era el tío de Sakura-chan.

-Ne... Itachi-kun…

-¿Mande?- respondió Itachi mientras recargaba su cabeza en el respaldo del sillón y cerraba los ojos.

-¿Tu y Sasori ya s conocían? Porque nunca oí que lo mencionaras y se hablaban con mucha confianza, como si ya se conocieran hum.

-¿Ah?- pregunto extrañado.-La verdad es que si. El quería ser la pareja de Sasuke hace algunos años.

-¿!QUE!?.- grito el rubio  que por la sorpresa hizo que se callera de sentón en el piso y mirara a Itachi como si tuviera un tercer ojo. Definitivamente eso era algo que ni en sus más locos sueños habría imaginado.-¿C-como dices?

Itachi se acostó en el sillón mirando a Deidara y contesto.

-¿Nunca te lo conté?

Deidara negó lentamente aúnen el piso. No tenía ánimos para levantarse después de la impresión. No todos los días te enteras de que tu cuñado el casado, el hetero, fue cortejado por un chico y que ese chico era nada más y nada menos que tu ex pareja.

-Cuando Sasuke entro a segundo año de universidad.- comenzó a relatar Itachi.- lo lleve al bar Akatsuki para que se despejara un poco y conociera ‘nuevos lugares’

-¿Dejaron entrar a Sasuke aun sin ser miembro, hum?.- interrumpió Deidara.

-¡Por supuesto! Recuerda quien es el dueño.- una sonrisa llena de orgullo le ofreció l rubio.

-Tienes razón, hum… -murmuró el ojiazul al recordar un pequeño detalle, el abuelo de Itachi, Madara Uchiha, era el dueño del bar.

-Como te seguía diciendo, lleve a Sasuke y ese día fue cuando Sasori lo conoció. Estábamos sentados  en la barra al igual que Akasuna, yo ya había notado que el pelirrojo observaba mucho a mi otouto así que no me despegaba de él.

-¿Y Sasuke no se dio cuenta? Digo, el siempre está con sus sentidos alerta y es extraño que no lo notara, hum.

-El estaba demasiado aburrido como para poner atención a lo que lo rodeaba.- explico el azabache haciendo un ademan restándole importancia.- Aparte por esas fechas creo que estaba presentando exámenes y oto-san lo estaba presionando mucho en la empresa, para ver si sería un buen sucesor cuando tomara su lugar.

-Ah…

-Durante esa noche me descuide porque tuve que ir al baño y cuando volví Sasori estaba  platicando con Sasuke, bueno, si se le puede llamar platica, tu sabes cómo son las conversaciones con él, hasta una estatua es mejor compañía.- Deidara rio por el comentario de su prometido.

-¿Y cuando supiste que quería algo son Sasuke, hum?

-Cuando volví estaba  literalmente pegado a la silla de Sasuke y seguía hablando con él. Pasadas de las dos de la mañana  otouto ya quería irse, no aguanta nada.-rodo los ojos. Todos sabían que cuando Itachi salía a ‘despejarse’  se tomaba muy enserio lo de ‘’Hasta que el cuerpo aguante’’ y su cuerpo normalmente aguantaba hasta las 7 u 8 de la mañana.

-¿Y qué paso después, hum?-la curiosidad lo estaba matando, quería oír la historia completa con cada detalle.

-Pagamos la cuenta y Sasori le hizo el truco de ‘’Préstame el teléfono para encontrar el mío’’ y como Sasuke ya lo que quería era largarse selo presto y así fue la manera en la que Akasuna  consiguió su número. Después de eso lleve a Sasuke otras 3 veces más a Akatsuki; en todas estaba  Sasori y, por lo que me contaba Sasu-chan, este le mandaba mensajes cada día. Una vez me moleste porque ‘casualmente’  le toco su traserito a mi otouto ¡Casi ultraja a mi hermano! El ya no quiso volver a Akatsuki porque decía que ese no era lugar para él . Siempre creí que fue por el trauma de su traserito violado.- dijo mientras se sobaba su barbilla.

-¿Y qué paso después, hum? ¿Qué más le dijo?- casi le da un paro cardiaco por tanta emoción, e Itachi que no terminaba de decirle que paso.

-A eso voy, tranquilízate.- le hizo un ademan con las manos para que se calmara.- Sasuke ya no volvió pero un día Sasori me pregunto por él, donde vivía,  porque como sabrás,  Sasuke tenía su propio departamento y no compro una casa hasta que se caso con Sakura-chan; me pregunto por la escuela en la que iba, sitios que frecuentaba etc., yo le respondí  -“No pierdas tu tiempo Akasuna, mi hermano es hetero y tiene novia, llevan juntos desde los 15 años y está muy enamorado de ella, a él no le interesa probar otras… cosas” Por la forma de su semblante me di cuenta que eso ya lo sabía y su respuesta solo me lo confirmo –“ Ya sé que tiene novia, pero esa pelirrosa no va a interferir en lo que yo quiero, él se puede hacer bisexual  por mí no hay problema. No puedes saber si no le gusta algo nuevo hasta que no lo pruebe” me enfureció la manera en la que hablo de mi hermano y de Sakura-chan pero solo me limité a responderle –“No seas imbécil Sasori, él ama a su chica pelirrosa de ojos jade, y también ama a las cerezas y no está dispuesto a cambiarlas por un… cacahuate”  Se molesto y se fue del lugar. Lo mejor es el final.- dicho esto, comenzó a reírse como un loco psicópata.

-¿Sasori se dio por vencido tan fácil, hum? Él es muy terco, hum

-Si eso ya lo sé, pero eso te digo que lo mejor es el final. Sasori investigo a Sasuke y dio con su departamento y consiguió una copia de su llave; un día fue hasta el departamento de otouto y se encontró con una fuerte escena.- Itachi volvió a reírse.- Digamos que entro al departamento de Sasuke y cuando llego a la sala se encontró con algo que nunca se hubiera esperado. Sasuke estaba acostado en el sillón con Sakura-chan debajo de él, ella tenía los botones de la blusa abiertos y él no llevaba camisa y las piernas de ella estaban enredadas en la cadera de Sasuke-baka.  Ninguno de los dos lo escucho entrar hasta que Sakura-chan se puso de pie y volteo hacia la puerta y fue allí donde lo miraron. Ella grito y corrió al cuarto de Sasuke y él muy molesto fue hacia donde estaba Sasori que aun no salía de su asombro y le dijo –“Maldito estúpido, no sé como entraste aquí ni porque pero deja de estarme jodiendo idiota, yo no soy gay y no estoy interesado en serlo. No te vuelvas a acercarte a mi o a mi novia o te juro que el no poder tener hijos será de lo último que tendrás que preocuparte”  Luego de eso Sasuke lo golpeo y hecho de su casa, cambio las cerraduras de su departamento y puso vigilancia.- Itachi estaba muy emocionado y Deidara lo notaba, le gustaba mucho contar esa historia y aun más el recordar como su hermano trato a Akasuna.

Él rostro de Deidara era un enigma, aun no creía lo que había escuchado. Reacciono cuando Itachi le trono los dedos frente a su rostro para hacerlo volver.

-¿Estas bien? No es normal que babees mirando hacia la nada, necesitas ir al médico.- comento distraídamente el azabache.

-¿Eh?- se limpio y efectivamente un rastro de saliva salía de su labio.- No es eso, es que nunca imagine que Sasori estuvo interesado en Sasuke, hum.

-Es un Uchiha, siempre causamos revuelo hacia donde vallamos.- la arrogancia y ego eran la firma de ese comentario.

                                Deidara rodo lo ojos; pero luego recordó algo.

-Ne… pero tu ¿Cómo sabes tantos detalles, hum?

- Sasuke me lo conto, como somos tan inseparables me tuvo confianza.- el rostro serio de Deidara le decía que no le creía nada.- Bueno, bueno… Sakura-chan me lo conto con lujo de detalles. Aparte que el depto. de otouto-baka tiene cámaras de seguridad en toda la casa.-dijo sin darle mucha importancia, como si estuviera hablando del clima.- Y pues yo era quien revisaba esas cintas y cuando Sakura-chan me lo conto rápidamente fui a verificarlo. Sasuke supo de las cámaras hasta unos meses después y le hice creer que los videos se borraban cada 3 semanas, que no tenia de que preocuparse.- contesto con orgullo de su gran mentira.

-A eso se le llama ser chismoso, Itachi, hum.- una sobra azul cubría el rostro del rubio y una gota de sudor resbalaba por su cabeza.

-No es cierto.- objetó Itachi.- Es ser comunicativo.- dijo con una gran sonrisa y el pulgar derecho en alto.

-Tu sí que no tienes re…- un olor extraño no dejo que terminara de hablar.- ¿No hueles a algo quemándose, hum?

-¡La comida!- grito Itachi corriendo hacia la cocina.

Cuando Deidara lo alcanzo el ojinegro tenía un sartén todo quemado en el lavabo y estaba abriendo las ventanas para que saliera el olor a quemado.

-Me puse a hacer de comer mientras estaba afuera con Akasuna y cuando volviste olvide lo que estaba haciendo.- se excuso el Uchiha antes de su seguro regaño.

Deidara iba a contestar pero antes de hacerlo sonó el teléfono. Al parecer el destino no quería dejarlo hablar. Un poco molesto por esa situación tomo el teléfono.

-¿Moshi? Hai… Arigato Sakura-chan… si, no te preocupes dile que gracias de todas formas, hum… ¿Una cena? ¿Para qué, hum?... ¡Oh! ¡Vamos Sakura-chan dime, hum! … ¿!QUE!? ¿Es enserio?.- este último grito llamo la atención de Itachi.-  ¡Por supuesto que sí, hum! ¡Nosotros seremos los padrinos!... ¿Naruto? Ese baka no será su padrino ¡seré yo! No me va a ganar, hum….Si está bien… Matta ne Sakura-chan, Arigato y cuídate.- colgó.

-¿Cuál cena?.- pregunto rápidamente el azabache.

-Hoy en la noche Sakura-chan y Sasuke darán una cena familiar por motivo de mi cumpleaños y para dar un aviso.- contesto con emoción el rubio.

-Y a juzgar por tu entusiasmo creo que tú  ya sabes cuál es ese aviso.

                                        Deidara asintió con mucha alegría.

-¡SAKURA-CHAN ESTA EMBARAZADA! Hum.- grito el rubio lanzándose a los brazos de su Uchiha.

-¿Em- embarazada?.- pregunto atónito Itachi, no podría creer que pronto seria tío.

-¡Si! Y nosotros seremos los padrinos, Naruto no nos vencerá, hum.- dijo con convicción el ojiazul. Su primo no le ganaría.

-¡Valla! Otouto si que trabaja rápido, apenas la semana pasada estaban en planes de tener un hijo y ella ya está embarazada. Mi tonto hermano menor me está ganando, a sus 25 años y con dos de matrimonio ya va a tener un hijo… y yo tengo 28 y aun no me caso.- un aura depresiva rodeaba a Itachi que se había tirado al piso haciendo una posición fetal.

-No te preocupes Itachi, todo a su tiempo. No seas envidioso, hum.- lo regaño Deidara.

-Tienes razón.- gimoteo un poco mientras le levantaba del piso.- ¿Sabes algo Deidara?

-¿Qué, hum?

-Te amo.

Tal vez aun falte tiempo para formar su propio hogar, pero de algo estaba seguro,  su hogar estaría lleno de amor y felicidad que son la base de cualquier matrimonio y familia.

-Y yo a ti, hum.

Aun les quedaban cosas por vivir, momentos que guardar en sus memorias, cosas por experimentar, ilusiones que compartir y ¿Por qué no? Tal vez algún día compartirían la dicha de ser padre.

-Deidara…

-¿Si, hum?

-¿Cuándo comenzamos a practicar para tener nuestros hijos?

-¿!QUE!?

                                                                 O quizás…

                                                         No le faltaba tanto.

 

FIN.


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