Capítulo 6
Nutella
{Al día siguiente}
-¿Cómo que tengo que llevarte? – preguntó Kai tras ser interceptado por Baekhyun en el estacionamiento de la escuela.
-Déjame recordarte que soy tu novio y que tengo 6 meses de embarazado y ya no puedo estar andando en transporte público – explicó con aires de diva.
-Y si no quiero, ¿qué? – Jongin levantó una ceja, desafiándolo.
-Si me pasa algo se quedará en tu consciencia – Baekhyun dramatizó.
-Agh… ¿qué hice para merecer esto? – exclamó -Súbete de una puta vez.
-No seas grosero, mi bebé te está escuchando.
Kai se le quedó viendo, como si fuera un loco. Encendió el motor y salió del estacionamiento.
-¿Ya sabes qué es? – le preguntó al bajito.
-Ya te lo había dicho.
-Oh, lo siento. Lo que pasa es que casi no tengo trabajo ¡haciendo mi tesis!
-Eso te pasa por no estudiar. De nada te sirvió el intercambio porque eres un flojo de lo peor.
-Ah, claro. Me presumes que tienes un excelente promedio y vas a graduarte gracias a eso.
Baekhyun suspiró con pesadez. Era su primera “discusión” como “pareja”.
-Es un niño.
-Mmm, bien. ¿Y qué vas a hacer con la escuela?
-Pues sólo nos quedan 2 meses de clases, así que si todo sale bien, mi bebé nacerá en vacaciones.
-¿Y seguirás ocultando tu panza?
-Haré hasta donde pueda. Tengo que agradecer que no se ve muuucho – suspiró -¡Oye! Vamos a comer algo.
-¿Ah? Baekhyun necesito seguir haciendo mi tesis.
-No hay problema, podemos comer en tu casa.
-No.
-¿Por qué?
-Porque quiero estar solo. Tú me estresas.
-Vamos, vamos, vamos~ - le daba de empujoncitos en el brazo, sin importarle que el otro estaba al volante.
Kai se encontraba al límite de perder la paciencia.
-Bien – bufó entre dientes.
[*]
Apenas llegaron a casa del moreno, ordenaron comida china a domicilio.
-¿Cómo vas? – preguntó Baekhyun, invadiendo la habitación de su amigo.
-Estoy atrasado, gracias a ti – Kai tecleaba como loco mientras tragaba su arroz.
-Me dejaste solito en la sala~
-Te dije que necesitaba privacidad para escribir.
-Qué aburrido eres – Baekhyun se sentó en la cama.
Una vez que acabó de comer, se recostó y observó el techo hasta que el sonido de las teclas le fue adormeciendo.
-¡Basta! – exclamó Jongin -Ya no doy más. Seguiré en la noche – se levantó de la silla y vio a su amigo tendido en la cama.
-Oye, Baekhyun, despierta, son las 5 de la tarde. Baekhyun.
El chico no se movía para nada.
Kai se dio por vencido y se recostó a su lado. Se quedó viendo aquella panza. Inconscientemente, acercó su mano.
-Pensé que no te gustaban los niños – murmuró Baekhyun.
Kai iba a alejar la mano, pero su amigo lo impidió.
-Sólo…estaba…
-Shh, se está moviendo – interrumpió Park.
Jongin abrió los ojos y se concentró en lo que sentía.
-¡No puedo creerlo! – exclamó.
-Serás un buen padre.
-¡¿Qué?! – gritó y cayó de la cama.
-Sólo estaba bromeando. Ay, qué agrio – bufó -Llévame a mi casa.
-¿Y el por favor?
-No hay.
-Pues no te llevo – Kai se cruzó de brazos.
A Baekhyun se le descolocó la quijada. Parecían unos infantes peleando por algo sin sentido.
-¿Perdón? – Park arrastró los dientes.
-No te voy a llevar y punto.
-Bien, le diré a mis papás – sacó su celular.
-¿Tanto te cuesta decir un simple por favor?
-Jódete – le mandó un mensaje a su madre. Al poco rato recibió la respuesta:
Estamos en el cine. Chanyeol irá por ti.
-Oh, por la mierda – exclamó.
-¿Qué?
-Mandaron a Chanyeol.
-¿Y cuál es el problema?
-Está molesto porque estoy contigo.
-¿No será que está celoso?
Baekhyun se quedó estático.
-No, claro que no – se apresuró a responder.
Ambos fueron a la sala.
Quince minutos después escucharon el claxon de la camioneta. Baekhyun acechó por la ventana.
-Trajo a Dara – suspiró con alivio.
-¿Temes quedarte a solas con él? – cuestionó Jongin sonriendo traviesamente.
Baekhyun le sacó la lengua. Kai abrió la puerta.
-Ad… - el moreno fue interrumpido por los suaves labios de Baekhyun. Intentó separarlo, pero parecía que se había pegado con chicle o algo así.
Cerró los ojos dejando que la lengua de Baekhyun jugara con la suya. Aquel húmedo sonido podía ser escuchado por todos gracias al silencio que había en la calle, lo cual avergonzó enormemente a Kai. Se separaron.
-Te voy a matar – le susurró a su bajito amigo.
-Aw, yo también te quiero – Baekhyun dijo con voz fuerte y se despidió moviendo la mano de un lado a otro.
-Casi te lo comes – exclamó Dara, apenas Baekhyun ingresó en la camioneta.
-Así le gusta – dijo viendo fijamente a Chanyeol, a través del retrovisor.
Su hermano tenía una mirada seria y fría.
[*]
Dara fue la única que habló durante todo el camino. Chanyeol parecía molesto; Baekhyun se sentía victorioso.
-Bájate – dijo el menor de los Park.
-¿Qué? – exclamó Baekhyun.
Chanyeol se había estacionado una esquina antes de llegar a la casa.
-Pasaré la noche en casa de Dara.
-¿Y pediste permiso para llevarte la camioneta?
-Qué te importa.
-Me hubiera quedado con Kai – murmuró antes de bajarse.
Chanyeol arrancó y se fue a toda velocidad, quemando las llantas de la pobre camioneta.
Baekhyun, molesto, comenzó a caminar. Sus pies estaban hinchados, le dolía la espalda, tenía sueño y moría por comer una sopa instantánea; todo gracias a su embarazo.
En cuestión de minutos, ya estaba frente a su casa. Metió una mano dentro de su mochila en busca de las llaves.
-No es cierto – exclamó -No puede ser. ¿Dónde están? – volteó aquel bulto y vació todo en la calle -¡Mierda, Park Baekhyun, eres un idiota! – se regañó.
Rápidamente le mandó un mensaje a su madre preguntándole si les faltaba mucho para volver.
La respuesta fue:
Es nuestro aniversario, tesoro. No sé a qué hora volveremos. Cuídense mucho.
Baekhyun quiso lanzar su teléfono.
-¿Y si le digo a Kai? No, ya lo molesté lo suficiente. Ah, no tengo dinero. ¿Qué hago? – revisó todos sus contactos y… -Lo siento, Kai – murmuró antes de presionar “llamar”.
-¿Qué? – se escuchó desde la otra línea.
-Kai, necesito que me ayudes.
-¿No te parece que ya hice mucho?
-Pero es que…no encuentro mis llaves y…¿Kai? ¡Maldito negro, me colgó!
Comenzó a lloriquear mientras se quejaba de lo injusta que era la vida.
-Embarazado, con hambre y sin casa – repetía con dramatismo.
Se sentó en la acera, metió sus cosas a la mochila y se puso a escuchar música; en eso, un auto rojo pegó junto a él.
-¡Kai! – exclamó tras ver que su amigo bajaba de ahí. Lo abrazó con fuerza -Pensé que moriría aquí.
-Me debes una muuuuy grande – le dije y le ayudó a subir al auto.
-Dime, ¿qué quieres?
-Que tecles mi tesis.
-¿Ah?
-Vi lo rápido que le mandaste el mensaje a tu mamá, así que eso puede servirme.
-Ok, pero primero cómprame un sopa Nissin, ¿si?
El moreno se golpeó contra el volante.
-Esa cosa es petróleo con cartón, mejor te preparo una sopa casera cuando lleguemos - bufó.
-Ay, eres un novio muy dulce~ - Baekhyun dijo melosamente mientras le jalaba las mejillas.
Kai contó hasta 100 en cuestión de segundos. Baekhyun le estresaba peor que el hecho de tener poco tiempo para terminar su dichosa tesis.
[*]
{2:40 am}
-Kai, tengo mucho sueño – se quejó Baekhyun.
-Te dije que pararíamos hasta las 4:00 am. Sigue tecleando.
-Pero estoy embarazado~
-Deja de usar tu embarazo como pretexto para todo.
-Kai~ - ronroneó. Eso siempre funcionaba con sus amigos.
-No.
Baekhyun se dio por vencido y continuó tecleando lo que Kai le dictaba.
{3:45 am}
-¡Kim Jongin! – gritó Baekhyun.
-¡¿Qué?!
-¿Podrías dejarme descansar?
Kai suspiró con pesadez.
-Está bien – cerró sus libros.
-Estúpido negro, ojalá y quedes más negro – “insultó” -Ah, muero de hambre.
-Ve a la cocina. Yo me encargo de guardar el documento.
Menos de 3 minutos después, escuchó varios ruidos.
-No debí dejarlo solo – bufó.
Cuando llegó a la cocina, Baekhyun tenía la boca bañada en chocolate.
-¡¿Qué hiciste?!
-La Nutella con fresas es lo que más le gusta a mi pequeño – respondió.
-Esa Nutella la compré ayer y era especial y exclusivamente para mí – alzó la voz.
-Kai~ - de nuevo, el ronroneo.
-¡¿Qué?!
-¿Me das un besito?
-¿Te sientes bien? Creo que te afectó robar y comer ¡mi Nutella!
-Ay, vamos, los novios se besan – comenzó a acercársele.
-Pero nosotros no somos novios.
-Pero fingimos serlo. Un besito y ya – paró los labios.
-No.
Baekhyun hizo un puchero y amenazó con acabarse aquel frasco de Nutella.
-¡Está bien, lo haré! Sólo…deja mi Nutella en donde estaba, por favor – suplicó.
Baekhyun sonrió y obedeció.
Kai se acercó a su amigo y, con miedo, puso sus labios sobre los del otro. Aquel sabor a Nutella le estaba volviendo loco, por lo que intensificó el beso, con tal de probar más y más de aquel chocolate. Baekhyun comenzó a alzarle la camisa.
-N-no…Baek… - se separó unos centímetros.
-Sí… - contestó el otro.
Kai no supo en qué momento, lo sentó en la mesa. Le besaba y succionaba el cuello. Baekhyun buscaba desabrocharle los pantalones; pero una vez más, la razón de Jongin apareció.
-No podemos pasar a más – Kai tomó ambas manos de su amigo.
-¿Por qué?
-Porque no quiero – decía agitado.
-Sí quieres – Baekhyun buscó besarlo de nuevo, pero Kai se alejó.
-Ve a dormir.
-Ash, se me hace que sigues siendo virgen – Baekyun empujó al moreno y se bajó de la mesa.
-¿Y qué si lo soy?
-Sólo espera a que tenga a mi bebé…
Jongin quedó blanco ante aquellas palabras.
-Mi virginidad está en peligro – murmuró asustado.
Continuará…