Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

El hijo de Harry Potter por Shindokun

[Reviews - 35]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Aqui os dejo la continuacion. Espero que os guste. Gracias por todos los reviews, siempre me anima mucho leerlos todos.

Dudas

 

James despertó y miró a su alrededor. Se encontraba acostado en una cama, cubierto con una sábana blanca. A su lado izquierdo y derecho había sendas mamparas blancas y el techo y las paredes también eran blancos. Parecía que se encontraba en la enfermería pero no recordaba cómo había llegado hasta allí ni que le había sucedido. Se intentó incorporar pero le sobrevino un mareo y se recostó de nuevo. Enseguida apareció la enfermera.

 

- Tranquilo chico. –dijo Pomfrey.- No te intentes levantar de golpe. ¿Cómo te encuentras?

- Algo mareado. ¿Qué ha pasado? –preguntó James desorientado.

- Esperaba que tú me lo contaras. Harry te encontró desmayado en el pasillo y te trajo de inmediato a la enfermería.

 

De repente los recuerdos volvieron a él. Iba hacía el Gran Comedor cuando había visto a su padre. Se había escondido para espiarle y le vio besar a una chica pelirroja. Tras aquello se había sentido mal y había perdido el conocimiento al instante.

 

- ¿Por qué esperaba que se lo contara yo? –preguntó James extrañado

- Te hice algunas pruebas mientras dormías. Tienes la tensión bien. No parece que sufres anemia. Y tras otros exámenes negativos no sé qué te puede haber causado el desmayo. Me dijeron que habías venido del futuro. ¿Puede ser debido a eso?

- No he viajado antes en el tiempo así que es probable que sea un molesto efecto secundario aunque no creo que se repita. –mintió James.- Si fuera peligroso viajar en el tiempo ya estaría prohibido.

 

Pomfrey se alejó no muy convencida de la respuesta. James se quedó reflexionando. Si nada físico le había hecho desmayarse y el viaje en el tiempo no tenía nada que ver solo había una explicación. Harry había empezado a salir con aquella pelirroja, él había oído perfectamente la conversación. Eso, a la larga provocaría que él no llegara a existir nunca y eso le estaba provocando ese malestar. Esta vez había sido un leve desmayo pero si las cosas continuaban así, las consecuencias podían ser catastróficas. Cerró los ojos cansado. Cuando su padre le había enviado en el tiempo para solucionar el problema causado por aquel estúpido mortifago del futuro le había advertido que le iba a costar mucho solucionarlo pero, hasta que no llegó, no se imaginó lo ciertas que eran esas palabras. En ningún momento le había contado que Harry tenía a una chica esperando en Hogwarts porqué, por la conversación que había oído, era obvio que habían estado juntos con anterioridad y su padre la había dejado para no ponerla en peligro. En su realidad, durante el tiempo que se había separado, Harry se había acabado enamorando irremediablemente de Draco pero era obvio que si eso no había sucedido Harry iba a acabar haciendo una familia feliz con su exnovia. Y, ¿qué pintaba él en todo eso? Parecía que sobraba completamente porque sus padres se odiaban profundamente y no creía que la cosa fuera a cambia en un futuro cercano.

Mientras estaba ensimismado en sus reflexiones no se dio cuenta del chico que se le acercó preocupado. Solo notó su presencia al notar una cálida mano sobre su frente. Al abrir los ojos sobresaltado vio que él chico tenía su otra mano sobre su propia frente comprobando su temperatura corporal. Al verle despierto sonrió.

 

- ¿Blake? –preguntó James extrañado

- Me tenías preocupado chico del futuro. –dijo el pelirrojo.- Cuando no apareciste a la hora del almuerzo supuse que te habías retrasado pero al no verte en clase me preocupe. Temí que hubieras regresado a tu época justo ahora que empezabas a caerme bien.

- Te tengo dicho que no me llames así. –dijo exasperado.

- ¿Prefieres que te llame Golden Boy? –preguntó Blake para picarlo.- Para alguien que es hijo de un miembro del denominado trío dorado sería un buen apodo y además te pega.

- Llámame simplemente Potter. –dijo James enfadado con las bromas.

- Que frío llegas a ser. ¿Así tratas a alguien que se preocupa por ti? Recuérdame  que no te convierta en mi enemigo, chico del futuro.

 

James se levantó de la cama dándole la espalda y se disponía a irse solo de allí cuando se notó débil de nuevo. Mañana probablemente se encontrará mejor. Al menos físicamente. Pero hoy iba a necesitar ayuda para ir a su dormitorio. Iba a tragarse su orgullo y pedirle ayuda a aquel chico tan impertinente cuando notó un brazo sujetándolo por la cintura ayudándolo. Al notar la proximidad del chico se estremeció y su corazón se aceleró al oírle susurrar en su oreja.

 

- Perdona James. Te enfadas con facilidad y es divertido picarte. No lo haré más pero al menos deja que te ayude porque no pareces poder sostenerte en pie. ¿Vas a quedarte aquí o prefieres ir al dormitorio?

 

James estuvo dudando durante un rato. Lo más prudente era decirle que prefería quedarse porque su cercanía le estaba turbando sin saber el motivo. Pero por otro lado, si se quedaba, se iba a tener que enfrentar a su padre que, tarde o temprano, vendría a visitarle y necesitaba un tiempo para reunir el valor suficiente para mentirle descaradamente cuando le preguntara como se sentía. Nunca había mentido a sus padres y rara vez les había ocultado secretos pero, por el bien de su futuro, debía empezar a aprender a hacerlo. Si es que aún le quedaba algún futuro.

Blake notó como James se tensaba bajo su agarre y parecía entristecerse. Sin saber el motivo real que estaba ocasionando aquello supuso que su cercanía le molestaba.

 

- Perdona James, no quería que te sintieras incómodo. –dijo Blake e iba a apartarse cuando notó como James le cogía por los hombros para sostenerse mejor.

- No es por ti. Tengo los pensamientos demasiado negativos hoy.

- ¿Entonces que prefieres hacer?

- Llévame a la sala común de Griffindor. Directamente a los dormitorios.

- De inmediato chico del futuro. –dijo Blake y luego dirigiéndose a la señora Pomfrey añadió.- Te rapto al bello durmiente. Me asegurare de que descanse en su cama durante todo el día pero prefiere estar solo ahora.

 

James suspiró resignado al oír de nuevo aquél apodo y el nuevo que se había inventado al hablar de él a Pomfrey. Al hacerlo oyó a Blake reírse en su oído. Realmente le gustaba fastidiarle. Había pocos alumnos en los pasillos cosa que le hizo suponer a James que era la hora de la comida. Tardaron un buen rato en llegar hasta el cuadro de la señora gorda y Blake le subió a su cuarto de inmediato sin pararse a descansar ni un momento. De inmediato lo tendió en su propia cama.

 

- Descansa en mi cama mientras no estoy. Me costaría demasiado subirte a la tuya.

- ¿Qué hora es?

- Es la hora de comer. Avisare a unos elfos domésticos para que te traigan algo de comer.

- ¿Y tú has comido algo?

- ¿Preocupado por mí? –preguntó Blake sorprendiéndole.

- No es eso. –dijo James sonrojándose. – No quiero causarte problemas.

- Comí algo antes de ir a visitarte. No te preocupes por mí. Descansa toda la tarde, pareces necesitarlo.

 

James no quería dormir más porqué llevaba prácticamente todo el día durmiendo. Pero el cansancio que aún le atenazaba pudo más que él y se quedó dormido al instante. Despertó al cabo de un rato creyendo que aún seria la tarde del mismo día pero pronto se dio cuenta de su error al ver entrar los primeros rayos del sol por la ventana. Pronto se percató de que alguien le había quitado la capa y los zapatos y le había arropado. Probablemente había sido Blake porqué aún permanecía en su cama mientras el chico pelirrojo dormía en la litera de arriba.

Se levantó y se puso el otro uniforme que tenía como substituto. Tras dejar la ropa sucia doblada a los pies de la cama y la cama bien hecha se arregló su pelo. Luego se dirigió hacia la sala común. Aún era demasiado pronto para ir a almorzar aunque tenía un hambre voraz. El día anterior se había dormido antes de que llegara el elfo doméstico y tampoco había cenado nada. Aún así no notaba ni una pizca de cansancio. El sueño reparador de casi 24 horas seguidas le había hecho recuperar todas sus energías.

Iba a salir a dar una vuelta por Hogwarts cuando vio a Hermione sentada en el sofá de la sala común. De inmediato se sentó a su lado.

 

- Buenos días Hermione. –dijo James sobresaltando a la muchacha.

- James. –exclamó Hermione al verlo.- Estaba preocupada por ti. ¿Dónde te metiste todo el día de ayer?

- ¿No sabes lo que sucedió?

- Harry dijo que te encontró en el pasillo desmayado y que te había llevado a la enfermería. Pero cuando te fui a ver tras haber comido no te encontrabas allí.

- Un alumno de mi clase me ayudó a volver a los dormitorios. Me quede dormido al llegar y no me he despertado hasta ahora.

- ¿Te encuentras bien ya?

- Perfectamente. –dijo James pero al ver a Hermione supo que no la había sabido mentir.

- ¿Qué paso?

- Tuve un bajón de azúcar. –dijo James girando el rostro para que no leyera en el la mentira.- Recomiendan consumir cosas muy calóricas hasta 48 horas después del viaje en el tiempo.

- James, prometiste no mentirme más.

- ¿Quieres saber la verdad? –preguntó James mirándola al fin. Algunas lágrimas luchaban por salir de sus ojos.- La verdad es que ayer vi a Harry con una mujer pelirroja. La chica le pidió para salir y Harry aceptó. Cuando se besaron me sentí tan mal físicamente que acabe desmayado en el pasillo.

- Ginny. –dijo Hermione que se había olvidado de aquello hasta el momento.

- La verdad es que estoy aterrorizado porqué parecían hacer mucha mejor pareja que la de Harry y Draco. Y eso me hizo pensar que no tengo derecho a separarlos.

- ¿Qué estás diciendo, James? Si no los separas nunca nacerás. Dejaras de existir.

- ¿Quién soy yo para truncar la felicidad de mi padre? Se le veía feliz con esa chica y, al fin y al cabo, ya he cambiado lo suficiente el futuro. Contando que Voldemort está vivo le podrán detener a tiempo y el futuro será mejor, nazca yo o no.

- No puedes estar hablando en serio.

- Por supuesto que sí. Que aquel estúpido mortifago evitara que Harry y Draco estuvieran juntos solo ha traído beneficios.  Hay gente que ha sobrevivido gracias a eso y, si Harry se queda con Ginny puede que él también sobreviva y el terrible futuro que iba a suceder cambie para bien.

- Cuando llegues al Gran Comedor siéntate a mi lado. Quiero mostrarte algo.

 

James iba a añadir algo más pero se calló al ver bajar a Harry y Ron del dormitorio. De inmediato se enjuago las pocas lágrimas que había permitido que salieran y se giró hacía su padre sonriendo.

 

- Buenos días papa. –James no pasó por alto la mueca de disgusto que se formó en la boca de Ron al oírle.

- Buenos días James. ¿Te encuentras mejor ya?

- Perfectamente. –dijo esta vez fingiendo mejor.- Siento haberte preocupado. Id hacía el Gran Comedor. Tengo que esperar a alguien.

 

James se dirigió Hacía el dormitorio dejando atrás a los chicos. Al llegar se encontró con Blake que estaba prácticamente vestido.

 

- Gracias por lo de ayer.

- No hay de qué chico del futuro ¿Has venido a buscarme para ir a almorzar juntos?

- Solo venía a agradecerte lo que hiciste. No te lo creas tanto.

 

Acto seguido salió de allí para dirigirse al Gran Comedor seguido de cerca del pelirrojo. Al llegar allí se sentó al lado de Hermione como esta le había pedido y Blake tuvo que buscar otro lugar porque allí no quedaba más sitió.

 

- Y bien, ¿qué querías decirme? –preguntó James intrigado.

- Hoy te voy a proponer un ejercicio de observación. Quiero que observes a tus padres imaginándote que son otras personas.

 

James hizo lo que Hermione le dijo. Harry se encontraba junto a la chica pelirroja, Ginny. Estaban almorzando juntos mientras tenían una conversación amena. Mientras, Draco se encontraba en su mesa almorzando tranquilamente.

 

- ¿Y qué pretendes que consiga con eso? –preguntó James sin entender nada.

- ¿Alguna vez te has enamorado?

 

James se giró inconscientemente hacía Blake que se encontraba unos sitios más allá pero de inmediato negó con la cabeza. ¿Por qué su subconsciente le había hecho mirarlo justo tras esa pregunta? Era absurdo. Luego se volvió a girar hacía Hermione.

 

- No, jamás.

- Entonces te costara más verlo. ¿Realmente crees que Harry está enamorado de Ginny?

 

James volvió a observar a su padre. Recordaba muy poco de él porqué había muerto cuando apenas tenía 5 años pero la manera en la que miraba a aquella chica no se parecía en absoluto a como miraba antaño a su padre. Podría llegar a ser feliz junto a esa chica, incluso a formar una familia, pero se notaba que no la amaba realmente. ¿Cómo no se había percatado antes? Luego, volvió a mirar a Draco más atentamente. Estaba como los primeros años tras la pérdida de su marido. Estaba melancólico y parecía sentirse realmente solo. Algunos a su alrededor intentaban iniciar alguna conversación pero este ni siquiera parecía escucharles. ¿Realmente conseguiría ser feliz sin Harry?

 

- Harry no mira a Ginny con el mismo amor con el que miraba a Draco y Draco parece estar realmente deprimido.

- ¿Qué vas a hacer entonces?

- Aunque eso sea así, ¿qué puedo hacer? ¿Y si intentado que acaben juntos hago que Harry deje a Ginny y los dos sean infelices? ¿Y si en el futuro Draco conociera a alguien que le hiciera tan feliz cómo Harry? No quiero poner las cosas peor de lo que están.

- Puedes dejar las cosas como están. Harry tendrá una vida feliz pero nunca será plena porque no amara a su pareja. Y Draco, quien sabe que pasara con él. O puedes intentar luchar por ellos haciendo lo que ellos no harán solos. Puede salir mal o puede salir bien. Esa decisión solo es tuya.

 

James se quedó pensativo mientras almorzaba y seguía observando a sus padres. De repente notó una presencia detrás de él que le sobresaltó.

 

- ¿Vamos ya a clase chico del futuro?

- ¿Podrías dejar de usar tus andares ninja antes de que me mates de un infarto?

- Perdón. Es que siempre estás en babia.

- Yo no estoy en babia. –dijo James enfadado.

- De acuerdo como prefieras. –dijo Blake removiéndole el pelo de esa manera que odiaba y riendo a la vez.

 

James apartó la mano del chico con brusquedad y se dirigió de inmediato hacía la siguiente clase ignorando a Blake que le seguía riendo sonoramente.

 

- Vamos James no te cabrees conmigo. –se disculpó Blake

 

James no le contestó y se quedó plantado ante la puerta esperando que abrieran. Se había percatado que siempre que estaba enfadado usaba su nombre para disculparse en vez de su apodo. Eso le había servido en el pasado pero no iba a servirle entonces. Pero su resistencia duró poco cuando notó que Blake le cogía del mentón y le giraba el rostro hasta que sus ojos conectaron. Se había acercado bastante sin que James ni siquiera se percatara de ello cosa que provocó que se sonrojara sin poder evitarlo.

 

- Perdóname James. –dijo Blake muy serio.- No volveré a revolverte el pelo. Lo prometo.

- De acuerdo, te perdono. –dijo James algo turbado.- Pero como vuelvas a hacerlo no te voy a volver a dirigir más la palabra.

 

De inmediato se apartó de su amigo y se dirigió hacia el interior del aula. No soportaba que le trataran como un niño pequeño. Cuando llegó a Hogwarts le confundieron con un niño de 11 años porqué su cuerpo aún no se había desarrollado del todo a pesar de su edad. Y no había corregido el error porqué le era mucho más fácil entrar como un nuevo alumno que entrar en el verdadero curso que le tocaba. Además, cómo Hogwarts solo enseñaba magia oscura en su futuro y se había librado de ir de milagro había aprendido mucho menos de lo normal aunque su padre le había puesto un profesor particular. Sabía hechizos y pociones pero a sus 15 años ignoraba gran parte de la historia de la magia, transformaciones, herbologia y otras tantas asignaturas que se cursaban en Hogwarts. Así que en parte, le iba genial aprender desde 0. Pero siempre había odiado que le trataran como un niño. Odiaba su aspecto infantil. Y envidiaba a Blake porqué a su edad, perecía mucho mayor que él.

Dejó atrás todos esos pensamientos y mientras hacía el hechizo de levitación sin ningún problema sorprendiendo al profesor Flitwick sin ni siquiera percatarse, empezó a pensar en lo que Hermione le había dicho. Estaba en lo cierto sobre sus padres. Quizás por separado no iban a conseguir ser tan felices pero, ¿y si lo estropeaba más de lo que estaba? Pero de inmediato otra pregunta le vino a la mente. ¿Y si conseguía que terminaran juntos y, al haber advertido sobre Voldemort, Harry seguía vivo aún en su época? Al fin y al cabo le había matado un mortifago enviado por Voldemort y ahora podrían matar al Lord Oscuro mucho antes o, al menos, estar mucho más prevenidos. ¿Se iba a rendir sin ni siquiera haberlo intentado? Ese nunca había sido su estilo. Ya era suficiente de preguntarse qué sucedería si no lo conseguía. Iba a lograrlo y punto.

De repente volvió en si al notar la clase muy silenciosa y se percató de que todos lo observaban asombrados.

 

- James, eres realmente bueno. –dijo el profesor Flitwick- Ni siquiera parecías estar atento mientras usabas el hechizo de levitación y aun así lo controlabas perfectamente.

- Mi padre me enseño algunos hechizos en el futuro. –dijo James.

- Eso es imposible. Los menores no pueden usar magia fuera de Hogwarts.

- Allí la ley contra el uso de la magia en menores no es tan restrictiva como en la actualidad supongo. Sí que podemos usar magia siempre y cuando estemos seguros de que no hay ningún muggle en kilómetros a la redonda que pueda vernos.

- Aun así es asombroso. Tienes talento chico. Igual que tu compañero de pupitre. –dijo girándose hacía Blake.- Tu también lo has hecho asombrosamente bien.

-Estuve practicando el hechizo en la sala común. –dijo Blake sin darle más importancia.

 

James se recordó a si mismo que debía evitar usar los hechizos demasiado bien. Se suponía que solo tenía once años. Que ahora le descubrieran en otra mentira, por pequeña que fuera conseguiría que volvieran a desconfiar de él. Y ahora es lo que menos le convenía porqué por fin se había decidido a unir a sus padres. No iba a desaparecer, ni su hermano tampoco y, si podía evitarlo, no permitiría que Harry muriera en el futuro.

Notas finales:

Espero que os haya gustado. Últimamente me había dado cuenta de que hice a James demasiado joven asi que he buscado la manera de solucionarlo. Espero que haya quedado bien.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).