Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

¿Por qué no podemos ser Eternos? por LuYongchy

[Reviews - 4]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Este One Shot es de solo 1 capítulo, es 100% GTOP y está cargado de drama.

 

AVISO: DRAMA!!!

 

Para que no me tiren tomatazos xDD ... Ya están avisadas ;)

Notas del capitulo:

Hola!!! 

La verdad es que pensaba actualizar el Fanfic pero andaba toda emo, sin sueño y esto simplemente surgió, si no quieren ponerse tristes les recomiendo que se salgan y lo lo lean xDDD

 

Para quienes si lo quieran leer espero les guste y gracias por tomarse el tiempo para leerlo, disculpen si dramatice, fue mi forma de sacar muchos sentimientos que tengo mezclados.

 

Bueno no doy más el rollo, a leer :)

 

PD: para quiene leen el fanfic intentaré actualizar mañana, aunque he recibido tan pocos comentarios que me desanimo u_u, porque no me cuentan si les gusta o no??.. Son malvadas ;;;A;;;

 

 

Y con tanto y con tan poco, 
se hizo grande la ilusión, 
se acercaron las distancias, 
dejamos clara la intención... 
de ser todo lo que somos 
el dos en uno, y uno en dos... 


 

-Ji Yong, ¿sabes que eres el amor de mi vida?, ¿no?.. ¿Por qué pones esa cara?, ¿Estás sonrojándote?, Te ves tan adorable cuando lo haces, EY, espérame!!  No camines tan rápido o comenzaré a gritarle a todo el mundo que TE AMOOOOOOOO!!-

- Shhhhhh- corrí a taparle la boca, la gente se nos quedaba viendo y yo estaba muerto de la pena, él era el babbo más babbo que había conocido en toda mi vida, pero vaya que lo amaba, era la razón de mi existir, el motivo para levantarme cada mañana y agradecer a quien sea que lo hubiese puesto en mi camino.

-TE AMO- me dijo y mis mejillas se pusieron más rojas de lo que ya estaban- Eres la única persona con la que quiero estar el resto de mi vida, ¿Quieres vivir conmigo y jamás alejarte de mí?

-Pe.. peee.. ¿Pero qué dices?- logre articular, ¿me estaba pidiendo que viviera con él?, mi corazón comenzó a latir frenéticamente y unas escurridizas lágrimas inundaron mis ojos, él, el hombre más maravilloso en todo el planeta me amaba y deseaba vivir conmigo, ¿Acaso estaba soñando? Y si era así esperaba no despertar jamás.

-QUE VIVAMOS JUNTOS!!!! .. Tú, yo .. una casa, una enorme cama, sueños compartidos,  alegrías, tristezas, enojos, peleas, reconciliaciones, pero sobretodo años eternos cargados de mucho amor, ¿Te agrada?- me dijo con una enorme sonrisa en el rostro y una mirada esperanzada y llena de emoción.

-Cla.. cla..- No pude terminar, las palabras se me quedaron atrapadas, tenía un enorme nudo en la garganta y comencé a lloriquear sin poder parar, Seung me abrazó fuertemente, después me separo y se me quedó viendo, yo seguía llorando, estaba demasiado emocionado y no podía creerlo.

-No llores tonto, debes estar feliz ¿O acaso no te agrada la idea?- me dijo y comenzó a besar mis mejillas y después mis ojos.

-Claro que estoy feliz, snif snif, demasiado feliz, tanto que solo puedo llorar, si quiero que vivamos juntos, tu y yo juntos por mucho pero mucho tiempo.- Le dije y me lance a sus brazos, él me atrapo y abrazó fuertemente, aún había gente mirándonos pero no me importaba.

-Por mucho, mucho, pero mucho tiempo-

-¿Es una promesa?

-Claro, nuestra promesa, juntos hasta que estemos tan viejos que no nos reconozcan entre tanta arruga.-

-Te amo Hyunie-

-Y yo a ti Yongie, mi Yongie- Y me besó, tan tiernamente que provoco que mis ojos volvieran a llenarse de lágrimas, era el ser más afortunado del planeta, estaba inmensamente feliz, tan feliz que lloraba lágrimas de inmensa alegría.

 

- - - - - - - - - 

 

De momento abrí los ojos, desorientado, no sabía dónde me encontraba, tenía los ojos inundados en lágrimas, todo había sido tan real, aún sentía su beso en mis labios, su calor y ese sabor tan enviciante, pero desde hacía un mes todo eran sueños, uno tras otro que me hacían despertar llorando, la vida sin mí Hyunie  no era nada sencilla, me sentía morir.

Habíamos vivido felices durante tres años, los tres años más felices de toda mi vida, no había día que no me sintiera bendecido por tenerlo a mi lado, pero la vida era cruel e injusta, se terminaba llevando a las mejores personas y te dejaba con un enorme vacío imposible de llenar.

Me voltee sobre un costado y abrace mis piernas, intentando controlar los sollozos que se avecinaban, siempre era igual, comenzaba con lágrimas y terminaba con fuertes sollozos que me impedían respirar.

Esa maldita enfermedad se lo había llevado de mi lado, durante varios años había luchado incansablemente para derrotarla, pero no lo había conseguido, ella había sido más fuerte y yo me sentía tan frustrado, no pude hacer nada, solo ver como su vida se iba apagando día con día.

 

--- Un mes atrás ---

 

Un fuerte ruido me despertó, al parecer venía del baño, en la cama no se encontraba Seung, mi corazón se aceleró enseguida, presintiendo algo malo  muy malo, me levante y corrí al baño, cuando abrí la puerta la imagen que vi me aterró, allí estaba él, tirado en el suelo, en medio de un charco de sangre y varios coágulos de la misma.

-Seung, Seung cariño, despierta- comencé a gritar mientras me acercaba, agachaba y colocaba su cabeza en mis piernas, las lágrimas no dejaban de fluir, comencé a temer lo peor, él no respondía, no daba señales de seguir con vida.

Me levante muerto del susto y con manos temblorosas comencé a llamar a una ambulancia, algo tenían que hacer, él no podía morir, no podía dejarme, él lo había prometido, juntos hasta que estemos viejos ¿cierto?, no me puede abandonar, no puede hacerlo.

La ambulancia llegó unos 10 minutos después, yo estaba histérico y no paraba de llorar, ¿Qué sería de mi vida sin él?, no quería ni siquiera pensarlo.

Estuvo internado varios días, había caído en coma y no sabían si despertaría, al parecer toda esa sangre él la había vomitado, su estómago estaba demasiado dañado, el cáncer lo había invadido, las cosas se habían puesto aún más feas,  cuando el doctor me lo dijo me desmayé, ¿cómo podía pasar esto? ¿Por qué a él?, ¿Por qué a nosotros?, ¿Acaso era una especie de castigo por amarnos a pesar de que lo consideraran incorrecto?, ¿Tan malo era que dos hombres se amaran con tal intensidad?

Yo estaba hecho un desastre, mi rostro tenía ojeras, no tenía hambre y no sabía como pero aún tenía lágrimas, era un misterio como podía seguir llorando y no me había quedado seco aún.

Al tercer día por fin despertó, cuando el doctor me dijo que podía pasar a verlo caí de rodillas llorando como un niño chiquito, mi Seung había despertado, seguía con vida, estaba demasiado débil pero con vida, yo no sabía cómo agradecerle al doctor, él no tenía ni idea de lo agradecido que estaba, Seung era mi todo, sin él nada tenía sentido.

Como pude me controle y pase a verlo, estaba tan pálido y demacrado que mi corazón se oprimió, no quedaba ni rastro de ese hombre lleno de vida que apenas años atrás era, sus piernas y brazos estaban delgados, era como si hubiera bajado 10 kilos en unos días, el doctor decía que era porque ya no comía, su estómago no lo toleraba y el cuerpo ya no retenía ningún nutriente, por el momento estaba siendo alimentado vía intravenosa, pero poco a poco sus venas se adelgazarían a tal grado que sería imposible encontrárselas.

Toda esta información me había dejado en Shock, en pocas palabras me estaba diciendo que mi Hyunie no viviría mucho, ya no me daba esperanzas, era como una bomba de tiempo imposible de desactivar, solo quedaba esperar a que explotara y aniquilara todo a su paso.

Él abrió los ojos y me miró, era una mirada tan llena de culpa y unas lágrimas comenzaron a salir de sus ojos, yo me acerque lo más rápido que pude y tome su mano, él la apretó lo más fuerte que pudo, aunque en sí no tenía ya nada de fuerza.

-No llores cariño, por favor no llores- le dije y mi voz se cortó, él no tenía la culpa, él no había decidido enfermarse, solo había pasado de esa forma, sin que ninguno de los dos se lo esperara.

Al escucharme comenzó a llorar aún más, las lágrimas no dejaban de fluir de sus ojos, intentó hablar pero no logro articular palabra, yo me sentía destrozado, ver al ser que más amas en ese estado, consciente de que va a morir y que no puedes evitarlo es el peor sentimiento que una persona puede experimentar.

-Te amo Hyunie, has sido, eres y siempre serás el amor de mi vida, por favor no llores cariño, todo va a estar bien, todo va a estar bien- repetía sin parar mientras  le daba besos en el rostro, mejillas, frente, nariz, ojos y con mis manos intentaba secar sus lágrimas.

De pronto comenzó a respirar con dificultad, los aparatos a los que estaba conectado comenzaron a hacer un sonido raro, algo no estaba bien, enseguida entraron varios médicos y enfermeras, me hicieron a un lado y comenzaron a checar el estado de Seung, yo me quedé quieto, mi cuerpo no reaccionaba, se negaba a moverse, solo me quede viendo como ellos se movían e intentaban regresarlo a la vida.

Las caras de los doctores estaban cargadas de preocupación, al parecer nada de lo que hacían funcionaba y fue entonces cuando lo escuche, ese maldito sonido que tantas veces había escuchado en dramas y películas, justo en el momento que alguien muere, ese piiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, que creí jamás escucharía en la realidad, seguido de un fatídico: -Hora de la muerte, 5:30 pm- y fue todo lo que escuche, mi vista se puso negra, no distinguí más que un fuerte dolor en el rostro, ya nada más importaba, solo quería sumirme en la más profunda oscuridad.

 

Yo te extrañaré 
tenlo por seguro 
fueron tanto bellos y malos momentos 
que vivimos juntos. 
Los detalles, las pequeñas cosas, 
lo que parecía no importante 
son las que más invaden mi mente 
al recordarte. 

Ojala pudiera devolver el tiempo 
para verte de nuevo 
para darte un abrazo 
y nunca soltarte. 

 

Al velorio asistieron pocas personas, o al menos las pocas de las que me percaté, al parecer la doble moral se hacía presente, nadie quería darle el pésame a un dolorido homosexual, pero no importaba, sin Seung lo que los demás pensaran daba igual, yo lo único que quería era seguirlo lo más pronto posible y encontrarnos en dónde sea que él estuviera.

Verlo en esa caja, sin moverse, sabiendo que ya jamás podría abrazarlo, besarlo, que nunca más escucharía su voz, que ya no me diría te amo, me estaba matando, sentía que me faltaba el aire, quería salir de allí, correr hasta destrozar mis piernas, no sabía de qué forma sacar el dolor que inundaba mi alma y hacía añicos mi corazón.

 -¿Por qué Seung, por qué tú, por qué no yo.. o por qué no los dos?, ¿Por qué me abandonaste?, lo prometiste, prometiste que estaríamos juntos, que serían largos años de amor inmenso, ¿Por qué me dejas aquí?, en este mundo que sin ti ya no tiene sentido, ¿Por qué, POR QUÉ?.. RESPONDEME MALDITA SEA.- comencé a llorarle y gritarle sobre su caja, estaba enloqueciendo de tanto dolor.

A mi alrededor la poca gente que estaba me miraba con ojos llenos de lastima y eso me enfureció aún más.

-¿Qué miran?, ¿Acaso soy su circo?, ¿Se alegran de que este gay como ustedes nos llaman se haya quedado solo?, LARGUENSE, FUERA DE AQUÍ, NO QUIERO SU MALDITA LASTIMA FINGIDA… LARGOOOOOOOOOO!-

Les grité fuera de control, poco a poco se comenzaron a ir y el lugar se quedó vacío, tan solo me encontraba acompañado de su cuerpo inerte, sabía que la hora de enterrarlo se avecinaba y yo me encontraba agotado, ya no podía llorar más, mis ojos estaban excesivamente inflamados, poco a poco se fueron cerrando y me quede dormido sobre el suelo de la funeraria, abrazándome a mí mismo.

Un movimiento me despertó, cuando abrí los ojos esperaba que todo hubiese sido un sueño, verlo allí junto a mí en nuestra habitación pero no, aún me encontraba en la funeraria.

-Señor, es hora del entierro, por favor levántese- Me dijo uno de los trabajadores mientras me ayudaba a levantarme.

Condujeron el ataúd a la carroza fúnebre, mientras yo me subía en la parte delantera, no tenía la menor intención de manejar, necesitaba llegar con vida a su entierro y despedirme de la mejor manera.

El recorrido fue rápido, cuando llegamos la tumba ya había sido cavada, solo quedaba meter el ataúd, aún no sabía si sería capaz de verlo, temía terminar desmayado o aventándome al agujero junto con él.

Los empleados comenzaron a hacer su trabajo, amarraron de tal forma el ataúd que iba bajando poco a poco, mi respiración comenzó a volverse frenética, sentía que mi corazón no paraba de latir y las lágrimas salieron a borbotones, él se estaba yendo, en verdad se estaba yendo para siempre, comencé a caminar sin siquiera pensarlo, me acerque demasiado a la tumba y estuve a punto de caer pero uno de los trabajadores alcanzó a jalarme, me alejo y dejó en un lugar más seguro, yo caí de rodillas llorando desconsoladamente, mi Hyunie había dejado de existir físicamente, ya no estaba, en verdad ya no estaba, ¿Qué sería de mi sin él?... no lo sabía.

Una vez que terminaron de enterrarlo me acerque a la tumba y me recosté sobre ella, no quería moverme de allí, no quería dejarlo solo, no quería llegar a nuestra casa y sentirme totalmente vacío, quería irme con él, eso era lo que quería.

-Por favor cariño, por favor llévame contigo, no me dejes aquí solo, ven por mí, quiero ir contigo y jamás separarnos, juntos por siempre, por siempre mi vida, lo prometiste, tú lo prometiste- solloce sin parar hasta quedar sumido en un profundo sueño, un sueño dónde estaba él.

 

- - - -  Actualmente - - -

 

Basta de recuerdos, me dije y levante de la cama, no tenía ganas de hacer nada, tenía frío y quería sentirme cerca de él, así que fui al clóset y saque uno de sus abrigos, aquel que más me gustaba y él sabía que yo amaba, era suyo pero a la vez mío, allí seguían todas las cosas de Seung tal como él las había dejado, aún no me atrevía a mover nada, sentía que si las guardaba era como hacerlo aún más real, aceptar definitivamente que él nunca volvería.

Quizá era una locura pero así pensaba, a pesar de que había pasado un mes de su muerte seguía con la esperanza de verlo entrar por la puerta, sonriéndome como siempre lo hacía y yo lanzándome a sus brazos para comérmelo a besos.

Extrañaba tanto besarlo, comerme esos labios carnosos que tanto me gustaban, que él besara mi cuello y dejara infinidad de marcas difíciles de camuflar, esas marcas con las que decía “eres mío”.

Todo esto era una locura, ¿cómo se le hacía para sanar una herida tan grande?, el dolor seguía siendo de la misma intensidad que el primer día que estuve sin él, sentía que mi pecho estaba abierto, sangrando y punzando, era un dolor que no se comparaba con nada.

Me puse el abrigo y me volví a recostar en la cama, me envolví bien con él y aspiré el aroma, aún olía a Seung, ese olor tan suyo, tan masculino y sensual, metí mis manos a los bolsillos para calentarlas y en uno de ellos sentí algo raro, lo saqué y entonces lo vi, era un sobre y tenía la letra de mi Hyunie, decía: “Para mi amor, mi Yongie”, la cabeza me dio vueltas de la impresión, ¿acaso era una carta?, comencé a abrirla con manos temblorosas.

 

Para mí Amado Ji Yong, mi Yongie:

 

Cuando leas esta carta yo ya no estaré contigo, no sé cuánto tiempo pasará desde mi partida hasta el día que estés leyendo esto, espero no sea mucho, debes estar demasiado triste ¿cierto?, yo me siento muy mal, me odio por no poder estar a tu lado, por dejarte y no cumplir mi promesa, ¿soy una mala persona, verdad?, el doctor me ha dicho que ya no tengo esperanzas, el cáncer me ha ganado, soy demasiado débil, no pude con él, por favor perdóname.

Desde el momento en que te conocí quise que estuvieras a mi lado, no me importaba que fuéramos del mismo sexo, daba igual, a mí lo único que en verdad me importaba era compartir mi vida con un ser tan especial como tú, eres un ser único, de esos que si los encuentras sabes que no puedes permitirte perderlo y así lo hice, me sentí la persona más afortunada cuando me aceptaste como tu pareja y casi morí de la felicidad cuando comenzamos a vivir juntos.

En verdad esperaba envejecer a tu lado, compartir largos años llenos de amor, pero no pude, te fallé mi amor, te fallé de la peor manera, pero por favor nunca olvides que siempre  fuiste el único y mi más grande amor.

Prométeme que vivirás tu vida, que me guardarás en tu corazón como un bello recuerdo pero que a pesar de todo serás feliz, por favor no te decaigas, eres fuerte, lo sé, sigue adelante, cumple tus sueños y no te encierres ni pierdas las ganas de vivir, por favor vive, vive y ven a mí en muchos años, yo te esperaré donde quiera que me encuentre.

Y recuerda:

La muerte no nos separa 
solo prueba la esperanza

Respira 
y llenaras de tu vida mi vida 
y morirá la melancolía 
cuando descubras que sigo aquí 

Respira 
y llenaras de tu vida mi vida 
y sentirás que sigo aquí 
en el aire 
que NUNCA ME FUI. 

 

Eternamente tuyo, tu Hyunie.

 

La carta terminó empapada en lágrimas, leer lo que Seung me dejaba, saber que él estaba consciente de que moriría, todo esto me ponía en la peor de las formas, estaba en posición fetal, presa de los interminables sollozos, nada tenía sentido, estaba solo, me sentía miserable y Seung me pedía que siguiera viviendo, ¿cómo vivir sin ti? ¿Cómo?

No tenía le menor idea, pero sabía que debía hacerlo, debía vivir, debía vivir por Seung, no podía ser tan cobarde y simplemente dejarme morir, él no estaría de acuerdo y si me veía desde algún lugar seguro que se sentiría triste y culpable.

-Lo Prometo cariño, viviré, no sé como pero viviré, no me olvides que yo jamás te olvidaré y espérame que algún día llegaré a ti y seremos amantes eternos.-

 

¿Cómo explicarle al corazón que hoy te vas?
¿Cómo decirle que sin ti puede seguir?
¿Cómo fingir para que no se dé ni cuenta 
que desde hoy ya no estarás junto a mí? 

Que difícil es aceptar el adiós de lo que amas..

Pero este corazón nunca pero nunca dejará de buscarte. 

 

FIN.

Notas finales:

Sorry por matar a Seung y hacer sufrir a Ji Yong, soy mala D:

 

Gracias por leer :3


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).