(Narrador)
Las camionetas negras mantuvieron una distancia prudente para no ser descubiertas. De ellas, salen Kris, Tao, Chanyeol y Junsu, rápidamente se dirigen a la casa teniendo cuidado de ser descubiertos por las cámaras. Para su ventaja, los arboles podrían ayudar en no ser vistos. Cada uno escogió su arma favorita, la colocaron en la funda y luego escogieron su rifle de francotirador.
Kris ordenó a Jaejoong, Minseok y Jongin que se quedarán a esperar dentro de las camionetas, después de todo no serían de mucha ayuda. Tenía confianza que con la compañía de Junsu, Chanyeol y su novio era suficiente. Podían manejarlo.
-Lleven esto con ustedes. – Jaejoong sacó de su maletín cuatro auriculares con micrófonos, y se los colocó a cada uno de ellos. – Yo hablaré con ustedes desde aquí – señaló su laptop. – Estaré al tanto de todo.
Los cuatro chicos asintieron, y con sigilo caminaron entre los arboles con dirección a la mansión.
Lograban ocultarse bien entre los arbustos.
-Necesitamos ser más rápidos – sugiere Kris.
-Apresuremos el paso. –Junsu empieza a caminar más rápido.
Al cabo de unos cinco minutos logran llegar a los muros de la mansión. Tao es hábil en ello y ya ha venido preparado con sogas para escalar montañas, tiene varias en su mochila. Con seguridad tira el anzuelo hasta el otro lado del muro, y cuando logra tenerlo asegurado, empieza a trepar por el muro.
Los tres no dudan en seguirle.
Con dificultad lograron trepar el muro y se apoyan en él cuando llegan a lo más alto, se aseguran estar bien atados para no caer y buscan su objetivo. Junsu se alejó unos metros más para buscar un ángulo diferente al de Kris. A la distancia podrían ver las ventanas principales de la mansión. Algunas cortinas no dejaban ver el interior de la casa, pero había sólo una ventana que estaba a su favor. Las cortinas estaban corridas a un lado y podían ver a Luhan y Yixing en una esquina de la sala. Esto provocó el estrés en Kris puesto que no llegaba a ver a los raptores.
-¿Puedes verlos? – preguntó a Junsu por el micrófono, pensando que tal vez él había escogido la ubicación correcta.
-Veo a uno con un arma en manos. Pero se mueve de un lado a otro que luego lo pierdo de vista.
-Necesitamos entrar.
-¿Los cuatro?
Kris pensó que tal vez Junsu estaba siendo un cobarde por no querer afrontar la situación frente a frente. Frunció el ceño confundido, se supone que Junsu estaba muy bien preparado para alguna pelea cuerpo a cuerpo.
-No pienses mal Kris, si algo se escapa de nuestras manos es mejor que uno de los cuatro se quede y presione el gatillo para dar el disparo final y definitivo.
-Entonces me quedo yo. – sugiere Kris.
-No tengo problemas en ello.
-¿Podrían dejar de retarse mutuamente? – Jaejoong les llama la atención, estaba escuchando todo desde la camioneta – Los dos son buenos, por favor contrólense.
-Lo siento – se disculpa Junsu.
-Iré yo. – interviene Tao. Kris sorprendido gira su cabeza ya que está a su lado y le mira sorprendido.
-No irás sólo. –advierte.
-He hecho esto miles de veces, Kris.
-Iré contigo.
-No, sólo me estorbarás.
-¡Uy! – pronunció Junsu de pronto.
Tao rodó los ojos. - ¿Podrían tomarse esto más en serio? – negó con la cabeza y sin esperar alguna opinión por parte de Kris, cruzó el muro con agilidad y tiro su cuerpo al otro lado de la casa. – Estoy dentro. – dijo cuando cayó al suelo como una gacela.
-Iré contigo. – dice Chanyeol y de igual forma cruza el muro y cae con destreza.
-Vayan con cuidado. – le alentó Junsu.
-Lo haremos. – Tao avanzó con cuidado y buscó la manera de entrar por la casa.
Kris por su lado acomoda su rifle y mira a través del mirador apuntando a la nada. No tenía una visión clara de a quién disparar porque no veía a nadie.
-Junsu, ¿Tienes a alguien en la mira?
-Sólo a uno cómo te dije. Por ratos apunto a su cabeza, y por otros lo pierdo de vista.
-Esperemos al aviso de Tao.
-Estoy de acuerdo contigo.
Al instante que dijo eso Junsu vio que Jaehyo le lanzó un teléfono a Luhan y le gritó algo apuntándole con un arma en el rostro. La situación se está saliendo de control y Junsu cree que es momento de intervenir. Al rato ve que Yixing le grita algo en forma retadora y la situación se vuelve desesperante. El desconocido con el arma alza su puño y le pega en el rostro al rehén que acompañaba a Luhan. Entonces otra persona aparece en escena y golpea al secuestrador. Junsu no entiende lo que está sucediendo dentro. El platinado se acerca al rehén golpeado y luego el secuestrador lo toma de la espalda y lo empuja hacía un lado de la sala, dónde lo pierde completamente de vista.
Kris ha escuchado los cristales de un objeto romperse. Se siente frustrado no poder tener un mejor panorama de lo que sucede dentro de la casa.
-¿Oíste eso? – pregunta Kris alarmado. - ¿Tao dónde estás?
-Lo oí y estoy buscando la forma de entrar.
-Aún no entramos a la casa. – comunica Chanyeol.
-¿Qué es lo que ves Junsu?
-El secuestrador tiro a alguien al suelo. No sé si es un rehén o el otro secuestrador. ¡NO LOS CONOSCO MALDITA SEA! – grita desesperado.
De la distancia dónde se encuentra Kris puede ver que Yixing es jaloneado a un lado, y luego se escucha el sonido de azotes sobre una piel desnuda.
-¡Mi**da! No sé qué hacer. – Kris se siente estresado.
-Encontré una ventana abierta, creo que es la de una oficina. – comenta Tao.
-Apresúrate. Adentro están perdiendo el control. Tienes que… ¡No puede ser!
-¿Qué sucede? – interviene Jaejoong.
-Luhan ha sacado el arma. Va a disparar…
-¡NO!
Kris apresurado y dejando su frustración de lado mira a través del mirador del rifle, pero no puede ver nada más allá que a un Luhan temblando y dudando de tirar del gatillo.
De pronto…
“Baaaaaammmmmm”
El sonido de un disparo se hace presente en el ambiente. De repente el cuerpo de Jaehyo con una perforación en la frente cae al suelo. La sangre no se espera en salir y manchar el tapiz de la sala.
Kris no ha visto a Luhan tirar del gatillo. ¿Entonces quién pudo ser?
-Junsu… - murmura bajito sin poder creérselo.
-No fui yo.
-¿Tao?
-También escuchamos el disparo, ya estamos entrando a la casa.
-¿Qué ha pasado? – quiere saber Jaejoong.
-Alguien mató a Jaehyo…
Sehun con mucha dificultad provocado por el dolor de espalda, llega a ponerse de pie. El ver a Yixing siendo golpeado siente su ira crecer por dentro. Cierra sus puños para soportar el dolor mientras logra mantenerse de pie. Casualmente baja la mira y observa el arma de Jaehyo en el suelo, aprovecha el momento que está distraído golpeando a Yixing, y se tira para llegar hasta el arma. Cuando lo tiene en sus manos quita el seguro y apunta hacía su objetivo.
-¡Jaeehhhyooo! – grita para que este voltee a verlo.
Jaehyo gira la cabeza y mira a Sehun con su arma en manos. Sehun sin darle oportunidad de hablar ni pensar, tira del gatillo…
Luhan suelta un grito al ver el cuerpo de Jaehyo caer al suelo. Yixing se queda anonadado al ver toda la sangre.
-Al fin… - murmura Sehun.
De pronto escucha unos pasos ajenos acercarse, y gira hacia aquella dirección. Ve a Tao acercándose a él.
-¿Tao? – pregunta dudoso mientras aún se encuentra en el suelo.
-Se terminó Sehun. – Tao no duda en darle un golpe y dejarlo inconsciente.-Pueden entrar… - comunica cuando todo ha acabado.
Chanyeol se acerca a Luhan, y le quita el arma con cuidado de sus manos.
-Todo ha pasado. – le dice Tao. Luego se acerca a Yixing para ayudarlo, pero este se niega.
-Ayuda a Jongdae. Sácalo.
-¿Dónde?
-En el sótano. – señala unas escaleras que van hacia abajo.
Tao deja a Yixing a un lado y se dirige hacia dónde señalaba. Corre escaleras abajo, y al final llega a una única puerta. La patea, y al fondo del lugar encuentra un cuerpo inconsciente sobre el piso helado.
Se acerca, y toma de su muñeca para verificar si aún tiene pulso. El pulso era débil, pero aún estaba con vida. Lo toma entre sus brazos y lo carga hasta arriba. Al llegar encontra a Kris junto con Junsu dentro de la casa. Junsu ayudaba a Yixing a cubrirle el cuerpo y evaluaba sus heridas, y Kris intenta sacar a Luhan del estado de shock en el que se encuentra. A un lado de la sala Chanyeol vigila a Sehun.
Sacan de la casa a los tres rehenes, y Chanyeol decide no quitarle el ojo de encima a Sehun, así que se queda dentro de la casa. Cuando salen del portón Jaejoong ya espera con las camionetas fuera. Minseok corre y se acerca a Tao para ver el estado de Jongdae.
-Aún sigue con vida, pero debemos llevarlo de emergencia. – comunica Tao.
Al instante lo recuesta en los asientos posteriores de una de las camionetas. Minseok no duda en subirse junto a él, y se acomoda en una posición dónde tiene la cabeza de Jongdae recostada en sus piernas. Con cuidado posa una mano en su rostro, y besa su frente.
-Dime que no estás muerto… – escucha el pequeño susurro de Jongdae.
-No lo estoy. – responde y no puede evitar retener una lágrima.
-No llores. Saldré de esta.
-Estoy seguro que sí.
-¿Y Jaehyo?
-Está muerto. – Minseok se ahoga con sus propias lágrimas. – Te llevaré al hospital.
-Prometes no irte de mi lado. – pide con dificultad.
-Lo prometo.
Jongdae confía en él, se recuesta una vez más en las piernas de Minseok, y esta vez duerme en paz.
Kris se apresura en subir a la misma camioneta y no demora más en salir del lugar y llevar a Jongdae de emergencia.
Por un lado, Tao regresa a la casa para sacar a Sehun y llevarlo a prisión. Cuando abre la puerta y llega a la sala, encuentra a Chanyeol cogiéndose la cabeza con las dos manos en una posición fetal sobre el suelo.
-¿Qué ha pasado? – pregunta sorprendido.
-Me distraje y me atacó por la espalda. Me golpeó con algo.
Tao le ayuda a ponerse de pie, y se adentra a la casa para buscarlo. Pero es en vano, no lo encuentra. Sin embargo, escucha el rugido de un motor prenderse a lo lejos, y de inmediato por la ventana pasa la sombra de un carro deportivo cruzar y ve a Sehun conduciéndola a toda velocidad. Tao se asoma por la ventana y sale a través de esta para poder alcanzar el deportivo, corre lo más que puede pero el deportivo se aleja muy rápido y escapa por un pontón en la parte posterior de la mansión. Un portón del cual todos desconocían, hasta entonces.
-¡Diablos!
-¿Qué ha sucedido? – pregunta Junsu a través de los audífonos.
-Se escapó.
-¿Qué?
-¡Sehun escapó!
Jaejoong le alcanza una botella de agua a Yixing, y este se la bebe sin dejar ninguna gota. Luhan se acerca a él, y lo abraza con fervor.
-He estado muy preocupado. – le dice al oído.
-¿Entonces por qué has traído a tu amante contigo?
Luhan se separa de inmediato, y le mira con sorpresa.
-Yo…
-No digas nada, Luhan. Ya lo sé todo.
-Yixing… - Luhan empieza a llorar y a temblar. – Perdóname, por favor.
-Ya hablaremos de esto en su momento. Ahora quiero regresar a casa y dormir.
-Tenemos que ir a una comisaría y poner la denuncia.
-No pondré ninguna denuncia. – dice con firmeza.
Yixing se separa de él, y se mete dentro de una camioneta. Luhan se limpia las lágrimas y mira a Jongin de lejos, luego desvía la mirada y sube a la camioneta a lado de Yixing. Jaejoong va en el asiento del conductor y solo espera a Junsu; quién está guardando los rifles en la maletera. Luego que Junsu se acomoda en el asiento del copiloto y se asegura el cinturón, Jaejoong prendé el motor y avanza de regreso a la casa de playa.
Jongin sube al auto dónde Luhan llegó al principio, Chanyeol prefiere ir atrás por el dolor de cabeza y Tao se sienta a su lado. Jongin tiene la expresión seria en todo momento, no está muy contento a ver visto a Luhan llorar después de rescatar a Yixing. Presiente que algo no está bien y eso le molesta de sobre manera.
-Por favor, ¿Podrías llevarme al hospital dónde fue Kris? – pide Tao.
-¿No prefieres esperarlo en mi casa?
-No, lo siento. – niega despacio con la cabeza – Le había dicho a Kris que iría con él, lo más pronto que salga de aquí.
-De acuerdo.
Jongin prende el motor, y se dirige al hospital. Mientras tanto el ambiente dentro del carro es algo tenso. Chanyeol tiene dolor de cabeza, y Tao mira a través de su ventana. Ninguno dice nada.
De pronto el teléfono de Tao suena, y al mirar la pantalla responde de inmediato.
-Hola, mi preciosura. – dice con ternura. - ¿Cómo has estado?
Jongin y Chanyeol fruncen el ceño, confundidos. ¿Acaso Tao engañaría a Kris con una mujer?
-¿Extrañándonos? Nosotros también te extrañamos preciosa, pero te tengo una noticia. Regresaremos muy pronto a casa. – guarda silencio – Sí, nena. Ya terminamos nuestro trabajo. – otros segundos de silencio – Yo también te amo. Tu papis de amamos. Adiós.
En eso tanto Chanyeol como Jongin abren los ojos como platos, y miran a Tao de reojo. Tao cuelga la llamada y siente las miradas de sus compañeros.
-Es mi hija. – comunica encogiéndose de hombros.
-¿Tienes hija? – pregunta Chanyeol – Pero tú eres hombre.
-Es obvio que no nació de mí.
-¿Entonces Kris te engañó? – pregunta Jongin de forma inocente.
-¡Claro que no! La adoptamos hace un año.
-¿Adoptaron? ¿Dónde? ¿Cómo? – ataca Chanyeol con sus preguntas.
-En Canadá.
-¿Es legal?
-Sí, lo es. Allá vivimos muy bien, nadie te discrimina por estar con un hombre.
-¿Lo dices enserio? –Chanyeol pregunta interesado. – Entonces podría ir a vivir allá con Baekhyun.
-Sí. Y hasta podrían adoptar.
-¡Oh no! Aún no quiero niños, quiero disfrutar del tiempo perdido con él.
-¿Cómo se llama tu hija? - Interviene Jongin.
-Ellen, y es la niña más hermosa el mundo.
En cuanto Jaejoong se estaciona delante de la casa, Yixing agradece por su rescate y sale del auto para meterse dentro. En la entrada lo espera Victoria quién lo recibe con un ferviente abrazo. Luhan observa todo desde el interior del carro, tiene miedo de entrar y afrontar la realidad. ¿Qué explicación va a dar a Yixing? ¿Cómo es que se enteró de todo?
-Ánimos Luhan. Ya todo pasó. – comenta Jaejoong.
-Tal vez todo pasó para Yixing, pero para mí no. Sehun ha escapado, y tal vez pueda venir por mí.
-Busca protección, Lu. Sé que es incómodo tener guardaespaldas a tu alrededor, pero tu vida es lo más importante.
-Le ofreceré trabajo a Kris y Tao.
-Es buena idea.
-Entremos de una vez, deben estar esperándonos.
Los tres salen del auto y se dirigen a paso lento a la casa. Sin embargo algo detiene el andar de Jaejoong. Yunho se encuentra en la entrada, lleva puestos unos lentes de sol, pero no hace falta mirar más para saber que está molesto.
Baekhyun se aparece y se apresura en abrazar a Luhan y no nota que Yunho ha avanzado con pasos firmes hacía dónde se encuentra Junsu y Jae, y mientras lo hace presiona fuerte su mano y le tira un golpe muy fuerte a Junsu en el pómulo de su rostro.
-¡Qué te pasa! – grita Jae histérico, luego avanza hasta Yunho y empieza a empujarlo y alejarlo de su amigo. – ¡¿Estás loco o qué?!
-Eso te pasa por quitarme a mi novio. – Yunho grita dirigiéndose a Junsu. – ¡TE JURO QUE NO SE VA A QUEDAR ASÍ!