(Baekhyun)
Salí de la cama con pocos ánimos de ir a trabajar. Casi no había podido dormir, me estuve removiendo sobre mi cama y pensando en Chanyeol y su novio. Me sentí triste por no ser esa persona quien estaba a su lado, quien pudiera cenar con su madre y hermana, tomarlo de la mano y besarlo sin ningún problema delante de todos.
Pero esa persona no era yo.
Salí de mi nuevo apartamento con dirección al canal. Durante todo el día estaba distraído y mi cabeza no estaba en este mundo.
-¡Baek! ¿Me escuchaste?
-¡Qué...! - salí de mis pensamientos.
-Estoy que te habló sobre tu propuesta de poner la radio... No me escuchaste ¿verdad?
-Lo siento, Junmyeon. Estoy algo distraído. Mi cuerpo está aquí, pero mi mente en otro lado.
-Deberías ir a casa. Tal vez estás cansado.
-Si, tal vez...
-¿No has pensado ir de vacaciones? Digo, ya pasó un año desde que te hiciste cargo del canal y aún no sales de vacaciones.
-Cuando se trabaja en un canal no existen los descansos.
-Eso dile a los reporteros. Tú eres el dueño y jefe, podrías hacerlo.
-¿Y quién se haría cargo de mi puesto?
Junmyeon me fulminó con la mirada.
-Ya no te acuerdas quien te enseñó todo sobre el canal, ¿cierto?
-Fuiste tú, te estoy agradecido. Pero esto sería mucho para ti.
-Tengo experiencia. Sal de vacaciones por un mes. Pero si tanto te preocupa el canal, regresa en una semana.
-Lo pensaré Junmyeon. Ahora, continuemos con el trabajo, por favor.
Junmyeon asintió y continuó explicándome sobre la propuesta de poner una emisora de radio, cuanto seria la cuota inicial, el monto a pagar por mes, etc y etc.
La noche llegó y con ello la finalización de mi trabajo. Salí a las ocho, y me fui directo a mi piso. Me duché y antes de ir a dormir, llamé a Luhan igual que la noche anterior, pero no respondió. Al final le dejé un mensaje de voz.
“Ehhh, bueno… solo llamaba para decirte que estoy viendo la posibilidad de ir contigo a la Isla Jeju. Pensándolo bien, creo que me hacen faltas algunas vacaciones. Supongo que ahora estas en un hotel y dejaste la casa de Jongin. Espero lo hayas hecho…
Por favor, si escuchas mi mensaje, llámame.
Adiós.”
Dejé el teléfono sobre la mesita de noche y me recosté con esta maldita sensación de soledad. ¿Qué me faltaba en la vida? La respuesta era obvia, me faltaba amar a alguien y que ese alguien me ame de la misma manera y con la misma intensidad con la que una vez ame a Chanyeol... Le extrañaba en ese aspecto, nuestro amor era perfecto, al menos para mí lo fue.
¿Qué hice mal para que me cambiara por otro? Necesitaba respuestas, pero qué caso habría buscarlo ahora. Después de dos malditos años, él era feliz y yo aún sufría por él.
(Luhan)
Desperté en los brazos de Yixing mientras los rayos del sol entraban por la ventana. Removí el cuerpo de mi novio y se despertó de a pocos.
-Buenos días, precioso... ¿Por qué despiertas tan temprano? - preguntó mientras ocultaba su rostro en mi cuello.
-Quiero regresar a Seúl - dije de pronto. Trataría de convencerlo para irme de este lugar a como sea.
-¿Por qué? - se sorprendió - ¿No te gusta el lugar?
-Prefiero estar en un lugar donde solo estemos los dos.
-Lu, realmente me sorprendes. Nunca te ha molestado la presencia de nuestros amigos. ¿Por qué los míos si te molestan?
-No es eso, solo que... bueno, no hemos tenido la oportunidad de estar solos.
-Pero tú me dijiste que no querías hacerlo... - se refirió cuando me negué a que me hiciera el amor.
-Si quiero hacerlo, pero no aquí. No cuando tus amigos están en otra habitación y nos pueden escuchar.
-No entiendo cuál es la diferencia, siempre hemos tenido intimidad incluso cuando nos quedábamos en el departamento de Minseok. Nunca te has sentido incómodo.
-Ahora es diferente.
-¿Cuál es la diferencia? - preguntó sin comprender.
Suspiré porque no sabía que más decir. ¿Cómo le puedo decir a mi novio que estamos bajo el mismo techo que mi ex? Si Yixing llega a enterarse, no me sorprendería que no se lleve bien con Jongin.
-De acuerdo, tú ganas. Pero no quiero estar dentro de esta casa - advertí - Hemos venido de vacaciones y quiero salir.
-No se diga más. Hay que vestirnos...
Salimos de la cama para ducharnos y luego cambiarnos. Salimos de la casa sin avisar a Victoria y nos dirigimos a un restaurante para tomar nuestro desayuno. No regresamos a la casa y nos mantuvimos comprando durante la mañana. Por un momento me olvidé de los problemas, pero no podía ser tan simple después de todo.
El celular de Yixing sonó, y él inmediatamente respondió a su amiga.
-Qian... ¿Sucede algo? - preguntó y luego se quedó en silencio – Ah sí... Lo siento. Luhan quiso salir... - una vez más, silencio - ¿Qué Kai está preguntando por nosotros? - sonrió - Si, Dile que estamos bien… - ¿Jongin? Abrí los ojos. Claro que estaba preguntando por nosotros, de seguro quiere asegurarse si ya estamos tomando el vuelo para regresar a Seúl - No hay problema, Qian. Nos vemos en la noche - Luego colgó.
Tomó de mi mano y seguimos caminando mientras buscábamos que comprar como recuerdos, pero yo quería preguntar qué era exactamente lo que había hablado con Victoria.
-¿Qué te dijo, Victoria? - me hice como si el tema no fuera importante.
-Bueno, que Kai se preocupó por nosotros.
-¿Enserio? - dije sin creerlo y levanté una ceja - ¿Por qué?
-Pensó que habíamos regresado a Seúl... - Lo sabía, solo se estaba asegurando si ya nos había ido de su casa - Pero ahora está más tranquilo ya que sabe que solo salimos - ¡Si cómo no! Eso no me la creo. Rodé los ojos - Qian dice que ellos también saldrán y que regresemos en la noche.
-No tengo problemas en regresar muy muy noche. Es más, podemos ir a ver a Minseok.
-Esa es una muy buena idea. Llámalo y pregúntale donde se encuentra.
Me comuniqué con mi amigo, y quedamos en encontrarnos en el centro de la Isla Jeju ya que tenía firma de autógrafos cerca del lugar. Pasaron tres horas y nos encontramos en un restaurante privado para que algunas fans no llegaran a molestarlo.
-¿Cómo has estado, Xiumin? - quiso saber Yixing.
-Algo agotado, pero bien. Gracias - respondió Minseok muy amablemente.
-¿Has terminado con tu agenda el día de hoy? - cuestioné a mi amigo.
-Sí. En hora buena.
-¿Y qué piensas hacer más tarde?
-En la noche quedé con Heechul y Key en ir a un Night Club. ¿Quieren venir? Va a estar muy divertido.
-Lo pensaremos - dije dudando, la verdad era que no tenía ganas de ir a una fiesta.
-Yo quiero ir - se adelantó mi novio.
-¡Muy bien Yixing! Felizmente tú no eres tan aburrido cómo Luhan - bromeó Minseok.
-Si si... ¿Cómo no? - dije con rin tin tin.
-¿Entonces vas? – retó.
-Claro que voy - aseguré.
Pasamos toda la tarde con Minseok. Busqué un momento a solas con él para contarle mi encuentro con Jongin, pero la oportunidad no llegó mientras Yixing se mantenía a mi lado.
Cuando llegó la noche regresamos a la casa de playa y Victoria con Jongin ya se encontraban ahí. Entré a la casa y solo los saludé para luego meterme a mi habitación y alistarme con la misma velocidad como la que entré. Al rato Yixing entró y me miró con un poco de preocupación.
-¿Sucede algo? - pregunté ante su mirada.
-Estoy empezando a sospechar que Qian y Kai no te agradan.
-¿Por qué crees eso? - dije sorprendido.
-Ni bien llegamos te has encerrado en la habitación.
-Es que quiero salir... - mentí para tratar de desviar el tema.
-Pero cuando estábamos con Minseok no querías ni salir. ¿Y ahora sí? - curvó una ceja.
-Me animé.
-Ahhh~ - asintió sin creérselo del todo. Cogió su toalla y caminó con dirección al baño, pero antes de entrar se detuvo y se giró - Le dije a Qian y a Kai que nos acompañan esta noche, espero no te incomodes… - me quedé sin habla y cerró la puerta del baño.
¡Maldición! Mi propio novio estaba haciendo esto más difícil. Yixing no era tonto, si seguí evitando estar con Victoria y Jongin él se daría cuenta que algo malo sucedía. Y que peor si Jongin salía esta noche con nosotros, iba a ver a... ¡Minseok! ¡No! No pueden encontrarse. Estaré perdido si Minseok no finge cuando lo reconozca.
Busqué mi teléfono y llámame constantemente a Minseok, pero en ninguna llamada respondió. Tal vez ya estaba en el local y haya olvidado su celular.
Cuando Yixing salió de la ducha me dediqué a arreglarme. Me puse un poco de delineador en los ojos y arreglé mi cabello para atrás dándole un poco de onda. Al terminar de alistarnos nos encontramos en la sala con Victoria quien estaba sentada sobre las piernas de Jongin en uno de sus muebles. Desvié la vista con incomodidad pero fue Victoria quien llamó mi atención.
-Luhan... - dijo con mucho entusiasmo como era típico en ella - Lay me comentó que tu amigo es Xiumin... ¡Estoy realmente sorprendida! Xiumin en uno de mis modelos favoritos - llevó sus manos a cada lado de sus mejillas y se sonrojó como toda una fan enamorada.
-Bueno... sí. Minseok es mi amigo desde hace años... - respondí y miré a Jongin, me fijé que me miraba y en ningún momento desvió la vista, pero yo si lo hice de puro nervios - Nos hicimos amigos en la universidad.
-¡No lo puedo creer! - se sorprendió ella - ¿Y cómo era él?
-Sencillo, humilde, una muy buena persona...
-Cuéntame más.
-No ya no - interrumpió Yixing - Tenemos que irnos ya, si quieres llegar a conocerlo sobrio.
-¡Vamos de una vez! - ella muy entusiasmada se levantó de las piernas de Jongin y lo jaló hasta la salida con mucha prisa.
Los 4 nos subimos al auto de Jongin y condujo hasta el Nigth Club donde se encontraba Minseok. No fue necesario hacer cola para entrar, tan solo con decir su nombre en la entrada nos guiaron a la zona VIP de inmediato.
Ahí, en condiciones no muy agradables, encontré a Minseok besándose con un chico. Yixing me miró con sorpresa, jamás se imaginó encontrar a Minseok con una pareja. Jongin y Victoria se quedaron anonadados por tal espectáculo, por un momento sentí pena de Victoria. Enterarse de esa manera que su idol era homosexual no tenía precio.
De pronto Minseok se soltó del beso tan apasionado y acarició al joven de las mejillas y una vez más volvió a besarlo. Esto era suficiente, tenía que intervenir y no dejar que otro se aprovechara de mi amigo mientras este no estaba en sus cinco sentidos.
Tomé fuerte la mano de Yixing y caminé firme hasta Minseok.
-¡Buenas noches Minseok! Se ve que ya empezaste con tu fiesta - grité cuando estuve delante de él. Minseok se separó de golpe de quien lo acompañaba.
-¡Luhan! - se sorprendió. Le miré con mucha atención y no había rastros de estar fuera de sí. Estaba sobrio - ¿Llegaste hace mucho? - limpió los restos de saliva de sus labios con sus dedos.
-¿Por qué lo preguntas? ¿Acaso estabas haciendo peores cosas?
-¡Para nada! - se sonrojó - Te presentó a Jaehyo - tomó del brazo al joven a quien besaba.
-Mucho gusto - saludó él y Yixing correspondió el saludo, yo no.
-Buenas noches, Yixing - Minseok se dirigió a mi novio y se acercó a él solo para evitar mis reclamos.
Fulminé con la mirada al tal Jaehyo, aquel tipo no me cuadraba en nada. No me daba confianza pero si miedo. Y aun así me mantuve firme con la mirada.
-Xiumin, por favor. He traído a unos amigos... ¿Puedo presentártelos? - escuché decir de pronto a Yixing. Me giré nervioso para poder evitarlo pero mi reacción fue muy tarde. Yixing ya se estaba acercando con Minseok donde se encontraban Jongin y Victoria.
Caminé para detenerlos pero me detuve en seco cuando ya era demasiado tarde. Minseok saludaba a Jongin como si ellos no se conocieran, y luego Minnie me miró muy sigiloso. Victoria sacó su cámara y se tomó una foto con Minseok luego de ser presentados. Ella se quedó emocionada y luego Minseok los invitó a tomar asiento en una mesa disponible. Yixing, Jongin y Victoria se sentaron y mi amigo se despidió con una reverencia. Se giró y me buscó con la mirada. Me hizo una señal con la cabeza para entrar al baño, él caminó apresurado y yo le seguí después.
Al entrar, Minseok me esperaba sentado sobre el lavado de manos. Sabía que me reclamaría por no habérselo contado. Felizmente no había muchas personas que pudieran oír nuestra conversación.
-¿Cuándo pensabas contármelo? - exigió.
-Te he llamado antes de venir, y no me has respondido. Pensaba decírtelo por teléfono.
-¿Yixing lo sabe?
-No - negué de inmediato - Solo lo sabe Baekhyun.
-Claro, siempre a él primero - pronunció con fastidio.
-¿Estás molesto?
-No. Solo que hubiera preferido que me lo contarás antes de verlo. Casi meto la pata hasta que el mismo Jongin se presentó ante mí y entendí que no quería que lo reconociera.
-Gracias por no decirle nada a Yixing.
-No me lo agradezcas. No lo hago por ti, lo hago porque Yixing me agrada - dijo bajándose del lavado de manos - Hay que salir, Yixing vendrá a buscarte - pasó por mi lado sin mirarme y salió.
Todo esto estaba de mal en peor. Primero Jongin me trata mal y ahora Minseok. Si esto seguía así, yo sólo tomaría el primer vuelo a Seúl.
(Minseok)
Salí del baño molesto por la situación de Luhan. ¿Por qué no decirme antes sobre su encuentro con Jongin? ¿Y por qué siempre tenía que ser Baekhyun antes que yo? Baekhyun esto, Baekhyun lo otro. Siempre primero… ¡¿Y yo qué?! Siempre estaba de más entre ellos, el segundo, o tal vez el último recurso a quien acudir. Estaba harto siempre quedar excluido…
Busqué a Heechul y le encontré junto con Key y Jaehyo.
-Xiumin, ¿Qué pasó? ¿Por qué traes esa cara? – preguntó Key.
-Nada importante – Y era cierto. Si Luhan no me consideraba su mejor amigo después de todo, sus problemas no eran los míos - ¿Podemos irnos ya?
-¿Por qué tan apurado? La noche recién empieza – cuestionó Heechul con su vaso de Ron en la mano. Bebió de su trago y continuó – ¡Oh! ya sé. Estas ansioso por conocer nuevas personas ¿verdad? – me miró con una sonrisa en los labios.
-Sí, la verdad que sí – asentí devolviéndole la sonrisa de complicidad – Vamos de una vez.
-De acuerdo. Los veo en media hora… - Heechul dejó su vaso vacío sobre la mesa donde se encontraba y se incorporó – Yo iré con Key, tú ve con Jaehyo – luego miró al susodicho – Te lo encargo.
-Con mucho gusto – asintió él.
Heechul salió primero con Key por la puerta posterior, ya luego los seguiría yo. Busqué con la mirada a Yixing, por lo menos de él tenía que despedirme. Lo encontré sentado junto con la novia de Jongin, los dos solos en una mesa… ¿Y dónde estaban Jongin y Luhan? Me negué a aceptar que ahora estén juntos en algún rincón de este local.
-Jaehyo, iré un momento a los servicios – avisé.
-Te acompaño.
-No, quédate aquí. Solo será un rato.
Una vez más entré al baño en busca de Luhan. Algunos cubículos estaban desocupados, pero ante mi desconfianza busqué hasta el último. Con todo el ruido del local, no podía distinguir si provenían gemidos de algún lugar. Pero me detuve en el último cubículo. Me incliné y vi dos pares de pies ahí dentro. Los dos eran hombres porque ningún llevaba tacos. ¿Podrían ser Jongin y Luhan? Recosté mi oído sobre la puerta y escuché con mucha dificultad, eran gemidos. Definitivamente ahí dentro dos hombres tenían su faena. Pero dado a mi desconfianza, di fuertes golpes a la puerta.
-¡Luhan, sal de ahí! – di una patada a la puerta - ¡Te juro que te mataré! ¡Sal! – lancé golpes y por ultimo una patada que hizo que el seguro cediera y la puerta se abriera - ¡Luhan!
-¡¿Qué diablos te pasa?! – gritó uno de los jóvenes - ¡¿Acaso buscas problemas?!
Quedé cómo un estúpido, ninguno de los dos jóvenes dentro eran Jongin, ni Luhan.
-Lo siento, pensé que…
-¡Qué! - gritó el otro – Te daré un golpe por entrometerte donde no te llaman… - el joven alzó su puño al aire, pero de la nada apareció Jongin y le sostuvo fuerte del brazo.
-No – pronunció con voz seria y decidida – Él dijo que se confundió. Discúlpenlo, por favor.
El joven que me iba a golpear bajó su brazo y miró a Jongin con mirada retadora – Lleva a tu amigo lejos de aquí. No queremos problemas.
-Lo haré. Disculpen este mal entendido.
Jongin me tomó del brazo y me arrastró dentro de otro cubículo. Cerró la puerta detrás de él y me encaró.
-¿Qué crees que estabas haciendo?
-Buscando a Luhan.
-Eso me quedó claro cuando empezaste a gritar su nombre. La verdadera pregunta es, ¿Pensaste que tu amigo estaba conmigo?
-Si – confesé al instante y sin rodeos – Ninguno de los dos estaba fuera. ¿Qué querías que pensara?
-Te dejaré las cosas muy claro, no pienso destruir la relación que tengo con Victoria por una noche de sexo con Luhan. Eso no sucederá. ¡Jamás! – dejó bien en claro – Luhan ya quedó en mi pasado.
-Que bien que tengas las cosas muy en claro. Espero yo estar equivocándome – no le quite la mirada de los ojos - Ahora con tu permiso, déjame salir.
-¡No! No hasta que respondas algunas de mis preguntas…
-¿Qué quieres saber?
-De Luhan…
-¿No qué era tu pasado?
-Lo es, pero ayer me enteré que estuvo en estado de coma. ¿Qué sabes al respecto?
-¿Tu novia sabe que estas aquí preguntando por Luhan? Se decepcionaría mucho si se entera, ¿verdad? – reté.
-Sé que no dirás nada. Ahora habla de una maldita vez… - alzó la voz.
-¿Qué quieres saber con exactitud? ¿Si fue por tu culpa? Bien, lo fue. Después de que lo corriste de tu casa él se adentró al mundo del alcohol, no había día en que no dejará la maldita bebida. No almorzaba, solo era trago, tras trago. Eso provocó que Luhan se intoxicara, y a consecuencia quedó en estado de coma. Si no hubiera sido por Yixing… tal vez Luhan no estaría vivo para contarlo – el rostro de Jongin cambió de ser exigente con sus preguntas, a una de preocupación y culpabilidad - ¿Estás conforme Jongin? Ahora que sabes la verdad, vive con eso para toda tu vida – le empujé fuerte del pecho haciendo que se hiciera a un lado para poder salir del cubilo, y una vez fue salí del baño en busca de Yixing.
Me dirigí hacia la mesa de Luhan, él se encontraba ahí sentado junto a Yixing y la novia de Jongin.
-Es hora de retirarme – le comuniqué a Luhan y Yixing.
-¿A dónde te vas? – preguntó Luhan de pronto y se incorporó para acercar a mí – No puedes dejarme aquí – pronunció con dificultad y dando la espalda a Yixing para que no escuchara.
-Tengo que irme Luhan.
-Por favor Xiumin. Eres mi amigo, no puedes dejarme – rogó.
-¿Ahora si soy tu amigo? ¿Por qué no llamas a Baekhyun? – alcé la voz – Él si te cubre todo ¿no?
Luhan se quedó atónito ante mi reacción y sin más lo hice a un lado para despedirme de Yixing, y la novia de Jongin.
Por último salí de ese local por la puerta posterior como habían hecho Heechul y Key. Jaehyo ya me esperaba dentro de un taxi cruzando la calle, y en veinte minutos llegamos al hotel donde Heechul había separado una recepción para sus invitados. Al llegar al piso, la fiesta de orgia ya había comenzado. Algunos ya se iban a los cuartos para disfrutar mejor de la noche, y otros estaban teniendo relaciones en alguna esquina de la sala.
-Xiumin, ¿Por qué demoraste tanto? – Key me recibió.
-Solo tuve un inconveniente… - miré a Jaehyo esperando que él me apoyara con mi versión.
-Xiumin se demoró despidiéndose de sus amigos – comentó Jaehyo de pronto.
-Pero que bueno que ya estás aquí. ¡Disfrutemos de la noche! - gritó Key a todo pulmón - ¡Wooooooww! ¡Qué comience la noche!
Cómo había gritado Key, la noche comenzó. Me sirvieron un trago el cual no pregunté el nombre, me lo bebí de un porrazo y al terminarlo besé a Jaehyo con mucha posesión. Él como siempre correspondió a mis besos, y sin decirme nada se separó de mí para irse con dirección a los cuarto con una mujer que escogió entre la muchedumbre. Como ultima amenaza le dije que se protegiera y que luego regresa conmigo para tener una fiesta en privado.
Jaehyo y yo éramos así. Nos gustaba compartir, nos divertíamos con quien quisiéramos y luego para terminar la noche volvíamos a buscarnos. Esa era la simple rutina de la cual ya me estaba acostumbrando… siempre regresar a los brazos de Jaehyo, como si de alguna u otra manera lo necesitara en mi vida.
Aunque siempre digo que no quiero nada serio con nadie y que amar a alguien es un gran error, muy en el fondo de mi corazón amo a Jaehyo.
(Jongdae)
Al llegar al apartamento todo era un completo silencio. Los muebles estaban cubiertos por sábanas blancas desde ya quien sabe cuánto tiempo atrás. Los cubrecamas y algunas sabanas estaban guardados en el armario. Las luces del piso iluminaban con fuerza, como si no se hubieran prendido en años. Sentí nostalgia al recordar mis mejores momentos con Minseok, los recuerdos llegaban como flashes en mi cabeza, cada sonrisa, cada beso, cada momento, desayuno, almuerzo y cena que viví con él. Y la cama, todas las noches que me dormí teniéndolo en mi brazos… Extrañaba todo aquello y anhelaba que cada recuerdo deje de ser un recuerdo, y los momentos de felicidad regresen y vuelva todo a la normalidad.
-¿Jong, me ayudas hacer las camas? – Sohee apareció en la entrada de mi habitación a sacarme de mi ensoñación - ¿En qué pensabas? – preguntó de repente - ¿Estas llorando? – se acercó para verme el rostro.
-No – me di la vuelta y le di la espalda para limpiar mis mejillas, porque el realidad si había estado llorando.
-Si estás llorando, dime por qué – se colocó delante de mí y con sus pulgares limpió algunos restos de lágrimas – No te pongas triste por los recuerdos… - me abrazó y escondí mi rostro en su cuello – Todo estará bien ¿Si? Encontraremos a Minseok… y ustedes solucionarán cualquier problema que hayan tenido, cualquiera que haya provocado que él se alejara de ti.
-Sohee, lo extraño – rompí en llanto y ella acariciaba mi cabeza y me daba palmaditas en la espalda – Tengo que encontrarlo Sohee, tengo qué.
-Yo te ayudaré en todo… - separó mi rostro de su cuello y siguió limpiando mi rostro con sus pulgares – No me gusta verte llorar. Me gustas más cuando troleas a la gente por diversión – se echó a reír de pronto y yo intenté hacerlo también.
-Tienes razón. Creo que soy más divertido cuando me divierto a costa de los demás – me reí porque Sohee me contagió su risa. Nos reímos por un buen rato y recordamos las travesuras que hacíamos en la universidad.
De un momento a otro cuando las lágrimas quedaron atrás y el cuarto se llenaba por el sonido de nuestras risas, ayudé a Sohee arreglar su habitación. Ya eran altas horas de la noche, casi media noche y más el viaje necesitábamos un descanso. Dejé a Sohee durmiendo en su habitación y me dirigí al mío en busca de mi teléfono. Tenía que hablar con cierta persona quien sabía dónde podría encontrar a Minseok.
-Diga… ¿Quién habla? – respondieron del otro lado y con la voz somnolienta.
-Baekhyun…
-¿Jongdae? ¿Eres tú?
-¿Dónde se encuentra Minseok? – pregunté sin rodeos.
(Jongin)
Pasaron solo un par de horas para que Luhan convenciera a Yixing de regresar a casa. Victoria y yo no nos apusimos, y regresamos juntos los cuatro. En buena hora que decidió regresar, yo no tenía ganas de permanecer un minutos más en ese maldito lugar, no tenía nada que celebrar, ¿Para qué? No después de las duras palabras de Minseok.
“¿Qué quieres saber con exactitud? ¿Si fue por tu culpa? Bien, lo fue. Después de que lo corriste de tu casa él se adentró al mundo del alcohol…
… Ahora que sabes la verdad, vive con eso para toda tu vida.”
Era horrible saber que todo había sido mi culpa, por eso no me buscó más, y sus regalos y cartas cesaron de un momento a otro. Ahora todo tenía sentido, no era que se había rendido, solo había estado durmiendo por cinco largos meses.
Busqué su mirada a través del espejo retrovisor del carro, pero Luhan se mantenía mirando el paisaje que le brindaba desde la ventana del carro. En ningún momento despegó sus ojos de la ventana, y cuando llegamos a mi casa fue el primero en salir de coche. Yixing y Luhan nos dieron las buenas noches y se encerraron en su habitación.
Victoria y yo nos encogimos de hombros y de igual forma entramos a nuestra habitación. Victoria se desvistió delante de mí, y después de mucho tiempo sentí vergüenza al mirarla desnuda. Le di la espalda y me senté al borde de la cama esperando que termine de vestirse con el pijama para yo hacerlo también, pero me equivoqué… Ella estando solo con ropa interior me abrazó por la espalda y besó mi cuello para luego morder en lóbulo de mi oreja.
-Amor, ¿No estás cansada? – pregunté para lograr que me suelte.
-Claro que no – susurró en mi oído – hemos regresado temprano y podemos seguir con la fiesta aquí en nuestra cama – esta vez lamió mi cuello lo cual fue el tiro de gracia. Separé sus manos con violencia de mi cuerpo y sin medir mi fuerza ella cayó sentada bruscamente sobre la cama.
-¡¿Qué sucede, Kai?! – quiso saber ella ya un poco malhumorada.
-Lo siento amor. Estoy cansado.
-Pero no es para que me rechaces de esa manera – alzó un poco la voz.
-En verdad lo siento amor. Perdóname.
-¡No! – negó al instante – Quiero que te vayas…
-Victoria, por favor.
-Vete, Kai. ¡Vete! – chilló.
Deje mis hombros caer por resignación. Victoria estaba furiosa y era mejor no hacerla enojar más. Tomé mi almohada junto con mi pijama. Busqué una manta en el armario y salí sin decir nada. Por lo que era visto hoy dormiría en el otro cuarto de invitados, la que quedaba justo de lado de la de Luhan y Yixing. Esperaba que no tuvieran algún encuentro sexual, tarde o temprano haría que se callaran…
¿Y por qué rayos tendría que hacer eso? Era su vida de ambos, ni que tuviera celos. ¡Qué estupidez!
Dejé mi pijama sobre la cama tanto como la almohada y la manta. Luego salí hacia la piscina porque quería fumar antes de irme a dormir. Me acomodé en la hamaca que colgaba entre las dos palmeras… prendí mi cigarro e inhalé el humo hacia mis pulmones. Intenté relajar mis músculo después del pleito con Victoria… ¿Qué demonios me sucedía? ¿Qué de malo había en verla desnuda? Ya lo había hecho antes muchas veces, y no entiendo por qué ahora me dio vergüenza. ¡Esto era ridículo! ¡Totalmente ridículo!
De pronto escuché que la puerta corrediza que daba a la piscina se deslizó y cierta persona apareció para mi desgracia. Luhan no se percató de mi presencia y se sentó en una de las banquetas que se encontraban a lado de la piscina. Estaba vestido solo con su pijama, me preguntaba si no tendría frío. Alzó sus ojos al cielo y miró las estrellas para luego soltar un suspiro y dejar sus hombros caer. En ese momento quise saber qué era lo que tanto le preocupaba, por qué estaba aquí y no con su ahora novio. Al rato inclinó su cabeza y miró la pantalla de su celular, apoyó el aparato en su oído, y luego marcó el número de alguien. No respondieron, por lo que dejó un mensaje de voz:
“Baekhyun, lo siento. Olvidé mi teléfono en la casa de Jongin. Qué bueno que reconsideres en tomar vacaciones. Si tú vienes ten por seguro que me iré de esta casa y nos hospedaremos en un hotel ¿De acuerdo? Disculpa que te responda a estas horas de la madrugada, es solo que no tengo sueño… Llámame horas antes de abordar el avión, por lo menos para tener tiempo de alistar mis cosas… Estamos hablando por si las dudas. Buenas noches. ”
¡¿Quééé?! ¿Qué va a venir Baekhyun? ¡Y se va a llevar a Luhan! A no, eso no pasará hasta que yo aclaré las dudas que tengo… y que mejor momento que aclararlos ahora mismo.
-Luhan… - pronuncié con voz demandante, él dio un saltó de puro susto y se llevó una mano al pecho.
-Me asustaste, Jongin. ¿Qué haces aquí?
-¿Tu qué haces aquí? – pregunté bajándome de la hamaca y acercándome lentamente hacia su posición.
-Ok, lo sé, lo sé – retrocedió unos pasos – Solo necesito un par de días para convencer a Yixing de irnos de aquí. Juro que lo estoy intentando, pero no sé qué decirle cuando me hace preguntas, no puedo mentirle, no sé mentirle. Por favor, solo dame un par de días más y te juro que no me vuelves a ver más… - las palabras chocaban entre sí. Luhan se notaba nervioso porque sus manos empezaron a temblar sin poder controlarlos.
-No me refería a eso… - dije una vez estando delante de él – Me refería a que haces despierto a estas horas, deberías estar con tu novio.
-Ahh, era eso – soltó el aire de los pulmones y sus temblores cesaron un poco – Verás, no tengo sueño. Además tenía que llamar a Baekhyun – alzó su mano mostrándome su celular – Disculpa por andar a estas horas de la noche por tu casa, creí que todos dormían.
-Ya vez que no…
-Sí, claro – desvió la vista – Disculpa una vez más – se giró para irse pero por impulso tomé de su muñeca e impedí que diera un paso más.
-¿Jongin? – me miró sin entender del por qué ahora no lo dejaba ir.
-Necesito que hablemos… - pedí con voz serena.
-¿Hablar? ¿De qué? Si es que recuerdo tú dijiste que no teníamos nada de qué hablar.
-Eso fue antes de enterarme que estuviste en coma.
-¿Solo por eso cambiaste de opinión y ahora quieres que hablemos? No Jongin, debiste de escucharme cuando te lo pedí – intentó soltarse de mi agarre.
-Por favor, perdóname – dije sin más rodeos. Luhan me miró sorprendido y sin creérselo – Perdóname por todo el daño que provoqué en ti. Yo fui el culpable por el cual tu caíste en ese mundo, solo yo tengo la culpa por no haberte escuchado a tiempo, por haber sido tan cerrado. Pero entiéndeme por favor, desapareciste sin decirme nada, no dejaste ni siquiera una nota. ¿Cómo querías que no pensara que me habías abandonado en mis momentos más difíciles? – reclamé.
-Jongin… - quiso interrumpir pero no lo dejé.
-Luhan por favor, tú también tienes gran parte de la culpa. Luego te apareces en mi casa como si nada hubiera pasado, ¿Cómo querías que te escuchara después de meses sin comunicación? ¡Luhan eso era ridículo! ¡Yo no soy del todo culpable! Además, es estúpido haberte refugiado en la bebida… ¿Luhan en que mundo vives? ¿Acaso querías llamar la atención? El alcohol no soluciona los problemas… se supone que eres inteligente y sales con tonterías como esas. ¿En qué cabeza cabe qu…? – un fuerte golpe llegó a mi rostro el cual hizo que me callara de pronto. Una vez más Luhan me había abofeteado. Sentí mi rostro arder y solté de su muñeca para cubrirme el rostro con la mano.
-¿Para esto quieres qué hablemos Jongin? ¿Para que sigas diciendo tonterías? ¿No te das cuenta acaso que todo lo que dices me hace daño? – una lagrima resbaló por su mejilla - ¡Eres un idiota, Jongin! ¡El peor de todos, y me arrepiento de haberme enamorado de un mocoso cómo tú! ¡Te odio! – escupió sin contenerse más, y muchas más lagrimas empezaron a salir sin control de sus hermosos ojos.
Luhan se giró para adentrarse a la casa, pero no podía dejar esto así. No podía simplemente dejarlo ir una vez más. La bofetada me dolía, pero el dejarlo ir me dolía mucho más.
Caminé apresurado y antes que llegara a la puerta corrediza, lo abracé por la espalda y lo giré para que me diera cara.
-Suéltame, no seas… - lo tomé con tanta fuerza y posé mis labios sobre los suyos, no dejé que hablara más, y solo me dejé llevar por su sabor dulce. ¡Dios! ¿Con qué esto era vivir? Después de dos años, al fin sabía del valor que tenían sus labios para mí. Sentí que mi vida regresó, Luhan se había llevado gran parte de mí con él, y ahora me regresaba la vida con este beso.
Poco a poco el cuerpo de Luhan cedió ante mi tacto, su cuerpo se relajó y sus labios empezaron a corresponderme. Nos fundimos en ese beso el cual cada uno lo necesitaba después de tanto tiempo. Si, era un hecho… él y yo nos habíamos extrañado.
-Jongin no… - se separó sin más – Esto está mal. Tú tienes a Victoria… y yo a Yixing.