Capitulo 11
Aunque en ese momento lo que menos quería hacer era hablar, sabía que debía de hacerlo, unas palabras a Bucky para que estuviera enterado de lo molesto que estaba con él (aunque de su boca sólo salían un par de gemidos) pero sabía realmente no sonaría muy creíble su enojo si lo había encontrado masturbándose.
De reojo miró a su amante que no le quitaba la vista de encima mientras que con sus labios acariciaba la punta de su erección para luego lamer todo lo largo que era, sin dejar de hacer ruidos y soltar pequeños suspiros en el miembro del rubio que era demasiado proporcional a su escultural cuerpo.
-Buck…después de esto vamos a hablar ¡Ah!
No termino su oración ya que comenzaba a hacerse difícil pensar en palabras coherentes cuando Bucky introdujo todo lo que pudo a su boca mientras succionaba sin quitar esa mirada lujuriosa que luego se convirtió en una algo concentrada, como si realmente intentara hacer su mejor trabajo
Lentamente decidió dejarse llevar para colocar sus manos en los cabellos castaños, que sin estar atados estaban dispersos y tiro un poco de ellos, obligando a Bucky a tomar aún más de su hombría, siempre resistía la tentación de empujar sus caderas para no presionarlo, pero esta vez no podía aguantar más al necesitar la humedad de su boca.
- ¡Ahh! Bucky Ngh...
Los sonidos de succión combinados con la lengua del castaño que presionaba la erección en su paladar fue suficiente para que luego de unos segundos más la mente de Steve se pusiera en blanco listo para llegar al orgasmo un poco avergonzado de no durar mucho pero al no tener ese tipo de contacto en meses simplemente no lo pudo resistir.
- ¡Bucky!
Con en el nombre de su amante en un grito termino por liberar su semilla en el interior de su amante que al no tener otra opción trago todo, aunque tampoco le fue desagradable porque después de todo aquello provenía de Steve y era algo que el mismo había provocado, lo que de cierta manera era excitante
Mientras se limpiaba la comisura de los labios, Bucky contemplo a Steve con sus mejillas sonrojadas, sus pupilas dilatadas por el placer, sus expresiones cuando llego al orgasmo una imagen mil veces mejor que de la que recordaba en su mente.
- Steve…
Sin pensarlo dos veces fue hacia donde el capitán estaba acostado y no dudo en acomodarse a un lado, en sus pantalones tenía una erección provocada por escuchar los gemidos de Steve, sobre todo la forma en la que decía su nombre.
Por más que le hubiera gustado continuar haciendo otro tipo de cosas, que atendieran ese problema decidió aguantar un poco el dolor ya que sentía que el rubio probablemente todavía estaría enojado con él por haberse ido y haber mentido de esa manera.
Pero en cuestión de segundos sintió unos toques en su entrepierna y al darse cuenta que era la enorme mano de Steve creyó que se trataba de un sueño sobre todo cuando esta se coló entre sus pantalones y ropa interior tomando su erección para acariciarla a un ritmo enloquecedor, alternando movimientos rápidos con lentos.
N podía estar enojado si se estaba preocupando por su placer ¿cierto?
Y al poco tiempo tuvo al súper soldado sobre él que sin dejar de acariciarle besaba su cuello buscando el punto más sensible del castaño, aunque ya sabía dónde estaba sólo era para torturarlo un poco y cuando finalmente lo encontró dio una mordida, haciendo gemir al ex asesino que arqueo la espalda.
- Steve...por favor, quiero…-Pedía el castaño sin dejar de empujar sus caderas para que siguiera los movimientos de las manos.
Con un par de toques a su hombría fue suficiente para que el soldado de invierno acabara con un grito algo agudo, sin importarle que hubiera ensuciado sus pantalones al liberarse, por el placer que lo había invadido, pero tuvo la suficiente energía para acercarse a su ¿novio? Y darle un apasionado beso en los labios, donde incluso dio unas mordidas a sus labios
Por unos momentos, luego de volverá a colocar la ropa interior en su lugar, ambos se quedaron recostados viéndose de frente, relajados y pensando que decirle al otro, debían decirse tantas cosas, estaban un poco molestos pero al menos resolver un poco su tensión sexual había aligerado un poco el ambiente
-Entonces ¿Piensas decirme que pasó en estos meses?
Pregunto Steve rompiendo el silenció y mirando hacia el techo, como si este fuera lo más interesante del mundo, pero James sospechaba que la verdadera razón era que no quería preguntarlo de frente para no ver sus expresiones y no molestarse, pero mientras pensaba que contestar escuchó un especie de sollozo.
- ¿Steve?..
Aun con la sensación de estar pegajoso se acercó al rubio, contemplando su rostro que tanto amaba aunque sus ojos azules se encontraban un poco húmedos, sabía que Steve no lloraría porque a ambos los habían educado a que eso estaba mal para un hombre pero sintió un remordimiento, que por más besos que dejo a sus labios no se iba.
-No espere qué harías algo así y luego ¡Tu brazo! ¡Por Dios Bucky! Tu brazo –En verdad se notaba el esfuerzo que hacía por no derramar lágrimas- Me sentía tan perdido… soñaba que volvían a torturar…
-Tampoco fue fácil para mí –Interrumpió el espía sin quitarse de la posición en la que estaba para que su pareja no pudiera ocultar sus expresiones - ¡Fue una decisión difícil! -Levantó un poco la voz, cosa que le molesto pero intento calmar su carácter- Temía equivocarme en una misión y que fueran detrás de ti
- ¿Y todo ese show de perder la memoria? -Ahora el Capitán parecía estar más molesto, aunque en verdad no sabía que sentir, estaba feliz por verlo pero quería hacerle llegar todo lo que sintió, no iba a perdonarlo fácilmente
- Lo mismo, esos días me asignaron una misión en América, Natasha me vio –Intento no sonreír al ver como el otro fruncía el ceño por los celos que le habían dado- y me quede en su casa esa noche, estaba hecho polvo, nunca imagine que llegarías..
- Te hubieras ido ¿verdad? – Steve le dedicó una mirada molesta un poco dolida pensando en cuanto tiempo hubiera pasado hasta que se volvieran a ver-
- Si, pero todo lo hago por tu bien, por favor tienes que creerme
Ambos permanecieron el silenció durante algunos segundos que parecieron eterno, ojos azules mirando a otros ojos azules, hasta que el de cabellos rubios soltó un largo suspiro y se acercó para quitar la tensión con un rápido beso a los labios ajenos.
-Voy a tardar en confiar en ti ¿y si te vas por cigarrillos y nunca regresas?
- Puedes vigilarme todo el tiempo que quieras, es más ¡Podías atarme con unas esposas…!.-Agrego Bucky con un tono sugestivo alzando una ceja, pero no fue eso lo que sonrojo al Capitán, sino el hecho de que ahora parecía más su Bucky, alejándose de ser esa máquina sin sentimientos que se encontró en un su baño pidiendo ayuda.
- No me de ideas, soldado… - Fingiendo un mal humor el miembro de los vengadores decidió contestar, pasando una mano por las muñecas de su amante, como si calculara que tipo y tamaño de esposas debía usar
-Entonces ¿Puedo cortejarlo Capitán Rogers?..-Pregunto Bucky con el tono más seductor que pudo hacer
-Tiene mi permiso, Sargento Barnes…
Sin saber porque ambos rieron, hasta que finalmente compartieron un par de besos más debido a que les parecía imposible aburrirse de los labios ajenos; justo cuando Steve estaba deseando más contacto Bucky pareció adivinar lo que pensaba y comenzó a lamer lentamente su cuello para luego subir a sus orejas y lamer su lóbulo no tardando mucho en morderlo con fuerza debido a que sabía que eso volvía loco a su novio.
Debido al largo gemido que salió de la boca del rubio James supo que probablemente iban a llegar algo más algo que fue confirmado cuando durante unos momentos observo los ojos de su pareja que con sus labios un poco hinchados dio un asentimiento de cabeza, llevando una mano a las caderas del otro que aún seguía arriba de él
Realmente las palabras sobraban, eran como una maquina engrasada perfectamente, no sólo al momento de estar en un campo de batalla, sino también en momentos tan íntimos como este, si se veía de un modo lógico tal conexión podía explicarse deberse al tiempo que pasaban juntos, pero desde un punto de vista muy romántico las palabras exactas serían que “Estaban hechos el uno para el otro”
Por ese motivo cuando el castaño llevo sus manos al dobladillo de la camisa, Steve no tardó mucho en levantar sus brazos para que esta pudiera ser levantada y luego arrogada a algún lugar de la habitación, pero si se sorprendió cuando el espía en lugar de comenzar a morder y marcar territorio dio un pequeño beso justo donde estaba el corazón.
-Es muy noble, me has perdonado todo lo que hice…
-Lo mantienes latiendo -antes de hablar coloco una mano en el corazón de Bucky sintiendo sus latidos- Me alegra tanto sentirlos,
Por unos momentos Bucky no puede evitar pensar que aunque viva mil años de una vida salvando gente, jamás podrá merecer a Steve Rogers…
La camisa de Barnes no tardo en unirse a la otra en el suelo ya que fue arrogada por el mismo dueño de esta, que no dudo en ofrecerle al capitán un buen espectáculo mientras la retiraba, disfrutando la cara de impaciente de Rogers que quería tocar todo lo que estaba exponiendo. Pero cuando estuvo sin ella, permaneció sin moverse durante unos segundos mientras analizaba algo de lo que no se había dado cuenta.
A Steve no le importaban esas cicatrices en su pecho que abarcaban un buen tramo de su abdomen, y parecía no darle importancia o la unión del hombro con el metal, como siempre le miraba como si fuera algo…
-Hermoso…- Susurro Rogers que lejos de darle importancia a esas cicatrices ponía más atención a su abdomen tan marcado y a sus oscuros pezones que no tardó mucho en pellizcar, jugando con ellos con la yema de sus dedos pulgares, observando como su amante reprimía gemidos mordiendo su labio inferior
Los dos hombres ya sentían su misma excitación en sus pantalones y en los del contrario, así que Bucky mordió aún más su labio para controlarse mientras buscaba el elástico de la ropa interior de Steve para poder retirarlo nuevamente por este día
Parte del entrenamiento de ellos durante la guerra había sido adoptar diversas posiciones para atacar o para esconderse arriba de un árbol, aunque en estos momentos la elasticidad de ambos tuvo otros fines, como lo fue retirarse la ropa interior sin dejar de besarse o separarse del cuerpo del otro.
-Buck…-Gimió el rubio entre besos pero como no podía decir nada muy coherente le empujo levemente porque de otra forma no se iba a poder concentrar- Esta vez… ¿Podrías hacérmelo tú primero?
Durante esa maravillosa semana que pasaron hace un par de meses, no solían tener ningún orden para decidir quién sería el activo, o si uno lo haría dos veces de activo o una y una, dependía de la situación o si alguno lo pedía específicamente; al principio se habían sentido extraños de turnarse guiados por los estereotipos de que uno de ellos debía ser “la mujer” de la relación, pero investigando en eso del ” internet” se dieron cuenta que no eran los únicos en hacer eso y que era algo común.
-¿Con los dedos de metal? –Pregunto el castaño tranquilamente dando pequeñas mordidas al cuello del otro, ansioso por dejar marcas para que las personas supieran que Steve ya estaba con alguien que no lo iba a dejar fácilmente.
- Si…-Un rubor invadió las mejillas del Capitán avergonzado de que su amante lo conociera tan bien- Por favor…creo que no tardo en…
Como si no quisiera que una palabra sucia saliera del héroe el espía lo calló con un apasionado beso, lamiendo el interior de su boca para luego ir a buscar el lubricante que no había cambiado de lugar y seguía en el mismo cajón de siempre, aunque se tardó más de lo debido pues sus movimientos eran muy torpes por lo ansioso que estaba.
-No me iré… -Comentó Steve riendo levemente contemplando el cuerpo desnudo de su pareja aunque en el fondo estaba igual de impaciente-
Bucky no tardó mucho en regresar a la cama al mismo tiempo que untaba el lubricante en sus dedos de metal, tardaba más cuando lo preparaba con esos, pero quería darle el gusto, así que cuando considero que tenía suficiente introdujo uno en la entrada del rubio que de inmediato arqueo la espalda soltando un pequeño gemido por la intromisión y lo frío que estaba el metal
-No te detengas,…-El capitán hablo con dificultad con sus mejillas rojas y esperando que su orden fuera cumplida, incluso haciendo el tono para dar órdenes que solía hacer- Otro...
El castaño no tardo en seguir lo que le pedían y de inmediato introdujo otro dedo, que movió en forma de tijera en la apretada entrada de su pareja, aunque estaba ansioso procuraba hacerlo lento, porque al no haberlo hecho en un tiempo estaba muy estrecho.
-Ya casi –Jadeo el soldado de invierno dando un par de besos en las mejillas del vengador- un poco más...metere otro.
-Con ese, no soy delicado, hágalo ya...
Y como buen soldado obedeciendo a su Capitán, después de darle un beso a sus labios, untar más lubricante en su propia miembro, comenzó a entrar lentamente como si quisiera recordar ese momento, disfrutando cada que avanzaba y las expresiones que hacía Steve que iban desde la incomodidad hasta una mirada de lujuria, así que termino entrando de una sola vez, lo cual fue bien recibido por el otro.
-Ah...te extrañe, Buck
- Ng, yo también, te sientes genial
Simplemente James no encontraba palabras para describir lo que sentía al estar en lo caliente y estrecho que era el interior de Steve que combinado con los sonidos tan eróticos que hacía, lo podían llevar al orgasmo sin moverse ni un poco, por lo cual decidió darle al rubio una advertencia para que se preparara.
-Voy a moverme –Tomo aire y luego dejo un beso a su cuello- ah, si te duele –Hizo otra pausa besando sus labios nuevamente – avisa
Al poco tiempo estuvieron moviéndose, como uno solo, adivinando lo que el otro deseaba, Bucky empujando tocando la próstata de Steve y este moviendo para recibir más, aferrándose en el cuello de su pareja además de poner sus manos en su espalda , hasta que la dejo completamente arañada al perderse en el placer
-Ah., Steve, Steve... –Lo llamaba entre gemidos al saber que eso le gustaba- n-no durare mucho –Un poco avergonzado el espia tuvo que admitir aquello, había sido tanto tiempo que la emoción le había terminado por ganar-
-Ni yo…-Mordiendo su labio para no gemir los intentos del rubio eran en vano- Buck, Ngh
De nuevo de una forma coordinada, al mismo tiempo llegaron al orgasmo mientras nombraban a su pareja, sin importarle mucho a Steve que su pecho se manchara con su propia semilla y el hecho de que Bucky liberara toda su semilla en su interior, estaba sucio pero realmente le importaba poco.
Duraron unos minutos así, medio agotados en las secuelas de su orgasmo y cuando recuperaron la conciencia sus labios volvieron a unirse otra vez, mientras se sonreían de la forma más tonta y enamorada posible al no creer que volverían a sentir lo mismo luego de creer que el otro ya los había olvidado por tanta separación.
-E-eso fue… increíble....–Dijo el de hebras castañas con el tono de voz más serio que sabía usar, mientras salía del interior de su novio y se recostaba de un lado- ¿Sabes que te amo?
- ¿Me amas de la forma de irte meses sin avisarme y luego creer que estabas muerto? -Pregunto el Capitán acomodándose de una forma donde pudiera verlo a los ojos, aunque sin esperar respuesta soltó un largo suspiro para decir algo igual de importante-Te amo.. Y estaré contigo
- ¿Hasta el final? –Pregunto Bucky intentando no arruinar este momento y pensando…que parecía una buena idea para pedir matrimonio-
- Hasta el final –Sonrió Steve de la manera que sólo le dedicaba a su novio, antes de bostezar, algo cansado.
En unas horas podían empacar las cosas
OOo
Cuando Steve se despertó y encontró el lado de la cama vacía, no pudo evitar entrar en una especie de pánico por lo que empezó a buscar su ropa desesperado con su corazón casi a punto de estallar hasta que escuchó el ruido de la regadera y a su amante tararear una canción en un inglés con acento ruso.
-¿Bucky? –Pregunto entrando al cuarto de baño, con cautela aunque podía ver la silueta de su amante en la regadera antes de correr la cortina.
-Tenía tiempo sin bañarme de esta manera –Comentó tranquilamente el aludido con una cara de satisfacción dispuesto a hablar sobre que se podía desayunar hasta que miró la entrepierna del rubio, al parecer él quería desayunar otra cosa-
-Es de mañana y ya sabes –Con sus mejillas completamente rojas el Capitán no encontraba que decir, era vergonzoso, pero encontrase a su novio en la mañana relajado y ambos completamente desnudos, era algo demasiado tentador- Yo…
-Puedes unirte, pero tallaras mi espalda…
Steve no tardó mucho en hacer lo que se pedía y además no pensó dos veces en poner a Bucky contra los azulejos del baño mientras usaba su lengua para preparar su entrada porque caminar hasta el dormitorio parecía un viaje de años, además, no era por presumir pero el rubio sabía que su miembro era un poco más grande de lo normal…por lo que requería una mejor preparación
El soldado de invierno tampoco se quejó mucho, disfrutando del placer en su cuerpo proporcionado por la lengua de Steve, lo excitado que su pareja se puso mientras lo preparaba y sobre todo lo placentero que fue hacer el amor de esa manera tan rápida e improvisada en el baño mientras el agua caliente corría.
Si, en definitiva esas cosas que empacarse y el traslado a la torre de los vengadores podían esperar un poco más, quizás un día, dos semanas o ¿Por qué no una semana?