Capitulo 2 Respuesta (Beso en la oreja)
Intentaba no hacer mucho ruido, no había gente alrededor, todos se habían ido, pero si era descubierta su travesura quedaría arruinada y realmente quería ver a ese rubio sin saber que hacer o ver como se ruborizaba.
Entrar a la tienda fue fácil, por suerte la luna estaba llena e iluminaba todo al perfección, aunque eso le dejo preocupado ¿y si algún villano entraba atacarlo en medio de la noche?
Aunque también pensó que eso pudo haber sido apropósito no dejarla tan asegurada, contando que no era la primera vez que se escabullía para ir a su tienda. En cuando lo vio dormir gracias a la fina luz de la luna que ilumino la el lugar cuando iba entrando no pudo apartar la vista, Steve parecía un ángel era demasiado hermoso y casi se arrepintió de quererlo despertar.
-Sé que estas ahí – Su misión fue interrumpida por el propio Capitán América, que no se veía tan firme levantándose de la cama dando un bostezo solo vistiendo ropa interior.-
- Oh vamos ¿No pudiste fingir que no sabias?
Aunque su travesura no salió como quería, se sintió tranquilo pues ahora su amigo tenía un buen oído y podría pensar en un buen plan para cómo enfrentarse a si lo atacaban en medio de la noche, no como escapar por que ese necio nunca evitaba una pelea.
- Buck, sea lo que sea que estas planeando, no lo intentes por favor…-Pidió para sentarse en la cama.
- Vamos, no seas idiota, te va a gustar –Intento sonreír aunque Steve tenía esa cara de “soy un héroe” y hago cosas buenas-
- Solo estamos tú y yo, los demás se fueron a beber. Si pones más atención notaras que no hay ningún ruido –Puso su mejor sonrisa, reservada únicamente para seducirlo-
Supuso que la cara de Steve cuando pronuncio esas palabras debía estar un leve rubor una de las cosas que más amaba ver (si hubiera una lista Steve llenaría los 100 primeros puestos)
- ¿Eso a que se debe?
- Todos creen que estás molesto por lo de hoy, y que mejor que dejar a su mejor amigo y “casi hermano” para que se calme.
Intento no reír para sus adentros cada que alguien mencionaba que eran como hermanos, si se habían criado un poco como eso pero en cuanto se dieron su primer beso todo dejo de ser tan inocente, aunque a Steve no le causaba tanta risa eso
- ¿Entonces viniste a mejorar mi humor?
- Claro que sí, mi capitán –Agrego en un tono cínico
De forma lenta comenzó a quitarse las botas, sintiendo la mirada de su amigo en él, estaba tan impaciente, aunque solo fueran unos besos necesitaba a Steve era demasiada tortura tenerlo cerca en las misiones para no poder dar ni siquiera un beso, pues se moría de celos cuando alguien notaba lo buena persona que era lejos de ese uniforme
- No hagas ruido – La voz del otro era un susurro, en lo que hacia un lado en la cama, que aunque era pequeña ambos se las arreglarían para estar los dos ahí apretados.
- Lo que ordenes –Respondió ya casi adentro de la cama
Apenas se acomodó en la cama unos enormes y fuertes brazos le rodearon posesivamente, como si soltarlo significaba que iba a irse para siempre Aunque sentía que podía morir asfixiado, era feliz de sentirse amado de esa manera
. – Calmado, idiota –murmuro buscando sus labios.
No necesito buscar mucho porque al poco tiempo sintió unos suaves contra los suyos dándole un tierno beso, aunque él quería más, siempre quería más de Steve así que lentamente tiro de su labio superior queriendo tener más contacto, pues quería saborear su boca y olvidar todo pensamiento, que su mente se llenará de esas sensaciones y por unos momentos olvidar que los nazis podían matarlos al día siguiente.
Las manos de Steve no tardaron en rodear sus caderas, intentando levantar su camisa necesitaba el contacto de piel con piel de inmediato, El mismo podía quitársela de inmediato pero prefería que su amigo lo hiciera porque sabía que le encantaba.
Pero de un momento a otro sintió como esas manos se detenían y los labios se separaban dejándolo con un vació y estuvo a punto de hacer un berrinche por más infantil que sonara aquello.
- Steve, vamos, no pasa nada –Pidió aunque parecía que rogara, no le gustaba hacerlo pero estaba tan necesitado.
- Mañana tenemos una misión muy temprano, solo hay que dormir hoy…
A Bucky realmente no le importaba si mañana iba a estar durmiéndose, unas tasas de esa cosa extraña que hacían pasar por café le bastaban para estar como nuevo y listo para pelear contra esos nazis. Pero para Steve siempre tan moral era importante, aunque pudiera estar varias noches sin pegar ni un ojo.
Así que decidió hacer algo que no fallaba, con cuidado se acercó a la oreja, específicamente a su lóbulo del rubio para darle un mordida algo juguetona y luego besarla como tratando de curarla, sabía que era demasiado sensible en esa zona así que casi de inmediato obtuvo un gemidito como respuesta.
- ¡Buck, ahí no! –Subió un poco la voz pero era difícil creerle cuando tartamudeaba y su temperatura corporal se elevaba
- Steve. .-susurró para volverá besar esa parte más sensible, luego podía bajar a besar su cuello y sería suyo.
El de cabellos oscuros sonrió, había ganado
¡Clack!
El soldado de invierno despertó alarmado de por ese ruido y al estirarse sintió una punzada de dolor en su estómago al tiempo que otra en su tobillo. Así que no tardo nada en recordar lo que había pasado en la noche. Como iba a hacer un negocio pero que al final terminó siendo una emboscada de la que apenas pudo salir para luego ir al departamento de ese sujeto que estaba seguro que le ayudaría.
- Perdón por despertarte –Se disculpó mientras se acercaba, quitándose un delantal, al parecer cocinaba algo que olía bien.
En cuanto el espía olfateo ese aroma prefirió no haberlo hecho pues su estómago comenzó a gruñir, solo quería quedarse en la noche e irse por la mañana pero el sueño le gano y termino quedándose más horas además que no paraba de llover y lastimado no avanzaría mucho.
Y entonces lo pensó: el sueño ¿Por qué tuvo un sueño así? Sabía que Bucky Barnes y Steve Rogers se llevaban bien pero no tanto como en su sueño donde parecía ser amantes ¿sería algo causado por tanta amabilidad?
“Parecía tan real” Se dijo a sí mismo, últimamente y desde que fue hacia ese museo tenía recuerdos de la vida de Bucky Barnes en los que casi todos salía Rogers pero ¿Cómo saber que era real y que o no?
- Te hice el desayuno, planeaba despertarte –El rubio le sonrió alegre señalando el comedor- Tienes hambre ¿verdad? Siempre comes mucho en el desayuno
Decidió no agregar un “¡No me conoces!” Porque no sabía quién era ¿un sargento que seguiría al capitán américa hasta el final? ¿O un asesino de Hydra? Además no podía dejar de pensar porque recibía tanta amabilidad, fuera quien fuera ¡había matado a tantas personas!
OoO
Steve no esperaba mucho del soldado de invierno-Bucky quien fuera, así que no le insistió con preguntas y comieron en silencio hasta que prendió la televisión para que hiciera un ruido de fondo, puso el canal de caricaturas, normalmente veía las noticias pero no sabía cómo podía reaccionar el otro y no quería saber si aparecería en las noticias.
-¿Qué tal estuvo el desayuno? –Pregunto cuando termino, no era gran cocinero pero estaba seguro que tenía buen sabor
- No se te quemo –Contesto el otro dando un sorbo de café
El rubio vio fijamente al otro, recordando que una vez cuando eran adolescentes intento hacer el desayuno pero se distrajo con un ataque de tos así que todo termino muy apenas comestible, aunque el accidente no se repitió solían bromear sobre eso.
Su cara debió haber sido épica pues noto como el otro fruncía el ceño una rara combinación entre incómodo y pensativo.
-A cualquiera le pasa – Agrego el castaño con voz un poco nerviosa, como dudando de algo.
- Bucky –El nombre salió de sus labios sin pensarlo- ¿Lo recordaste verdad?
Recibió un especie de gruñido como respuesta.
-¿Vamos a jugar a las preguntas y respuestas?- su excompañero le miro con esa mirada fría que ahora tenía y al capitán no le quedo más que asentir- Bien, empiezo ¿Hay cámaras o algo aquí?
- No, ya no hay nada de eso –Suspiro aliviado.
Lo miró durante unos segundos, al parecer quería decirle algo como que le tocaba seguir, así que pensó durante unos segundos que pregunta hacer, una que no fuera a dañarlo o hacerlo enojar.
- ¿Tú eras el que estaba robando comida de la cocina?
Vio el camuflaje en los ojos e intento no reír, pues ese especie de antifaz le daba apariencia de un mapache, “un huraño mapache que no se puede domesticar” pensó para sus adentros
- Si –Fue la respuesta no muy larga- Bien ¿Fuiste amante de Bucky Barnes?
Para el capitán América, capaz de esquivar disparos y arrogarse de varios de metros de altura esa pregunta lo puso algo nervioso, pues no sabía si el castaño lo había recordado o si alguien le había dicho (nada le sorprendía ya, alguien pudo enterarse y vender ese secreto)
Deseaba tener más tiempo para contestar pero esos ojos azules no le quitaban la tosca mirada de encima, así que después de pensar que solo podía terminar mal decidió contestar
- Si, fuimos amantes durante la Guerra, si es que a lo poco que tuvimos se le pudo llamar relación sobre todo por...
- ¡Basta! -Grito el soldado mientras llevaba sus manos a la cabeza, como si algo le doliera más que ese disparo en el estómago-
- ¿Por qué lo preguntas? ¿Recordaste algo? ¿Te lo dijeron?
Sentía como su pulso se aceleraba en lo que se paraba de su silla hasta que un vaso se estrelló contra la pared obligándolo a quedarse en su sitio.
- Tengo recuerdos sobre ti o alguien que se parece a ti – Parecía contenerse por no explotar en llanto o arrogar más cosas-
Steve decidió que no le importaba, si iba a terminar herido no le importaba no iba a dejarlo así por lo que de inmediato se enderezo y rodeo con sus brazos al que estaba seguro que era su amigo, sintiendo como este rompía en llanto a los pocos segundos
- Shh –Le susurro mientras le apretaba más, como intentando hacerle saber que estaba para él
Le dolía verlo llorar así mientras murmuraba algunas cosas en ruso un poco molesto, hasta que le fue devolviendo el abrazo y acurruco su cabeza en el pecho ajeno, intentando calmarse.
Durante esos segundos que pasaron Steve pudo darse cuenta lo mucho que había extrañado tener ese cuerpo en sus brazos.
- Todo esta tan confuso, solo te veo y comienzo a recordar cosas –dijo en voz baja-
- Bucky, yo te ayudare –Era tan complicado pero tenía la esperanza de que su amigo regresara a ser como antes
- Te diré algunas cosas que recuerdo
Y como si no hubiera pasado nada, se separó solo unos centímetros como si el otro le hubiera quemado y falto poco para que le empujara con la mano de metal, como si estuviera arrepentido de ser tan débil
- Podemos hablar de eso después si te resulta incomodo
- Es lo mejor
El otro era tan cambiante, pero Steve estaba seguro que aguantaría todo eso, había encontrado a su amigo y no iba a dejarlo ir otra vez, por más obsesivo que sonará aquella idea.
- Solo hay algo que quiero intentar –Dijo Bucky con una cara completamente seria.
- ¿Qué?
Pero antes de poder decir algo, sintió una mano en su nuca y unos labios que mordían suavemente su oreja, pensó que se la quería arrancar o algo así, pero fue todo lo contrario pues jugaba apretando su lóbulo de una manera tan lenta que no parecía querer hacer daño.
Por más que lo intento el rubio intento contener un suspiro de satisfacción que escapo de sus labios, seguía siendo muy sensible en esa zona así que no tuvo demasiada resistencia sobre todo cuando sintió una tibia lengua acariciar luego de una mordida un poco más fuerte.
- ¡Mhg Bucky! –Gimió sin poder evitarlo quedando un poco humillado por lo mismo-
- Eso quería saber.
Vio como el otro se paraba torpemente por su tobillo y se metía hacia el baño, como si le perteneciera aunque realmente no le molestaba en lo absoluto.
- Tomaré un baño –Comentó antes de cerrar la puerta.
Apenas era de mañana, afuera llovía como en la noche y Steve estaba aún más confundido. Aunque al tocar su oreja que estaba algo roja como sus mejillas, pensaba que tal vez las cosas no estaban mal.