-Uff, que cansado estoy hm- me estiro levemente mientras Naruto nos conduce a unas habitaciones traseras del lugar para que podamos cambiarnos tranquilamente, la gente ya se estaba empezando a retirar pues ya son las 1:30 am y todos estamos cansados, además que Naruto y Sasuke deben irse a disfrutar su luna de miel y por lo que nos dijo Naru en media hora más irán en un avión privado o algo así hacia Kumogakure, también nos dijo que era una tradición de la familia de Sasuke ir a una aldea diferente para oficializar un matrimonio y que generalmente se debe oficializar en el segundo día, pero bueno ellos quieren aprovechar su tiempo al máximo.
-Lo imagino hehehe…- Naruto se ve algo nervioso y se calla abruptamente, nos hace una seña para que entremos a la habitación y nos mira con lágrimas en los ojos- Chicos…gracias por todo, desde siempre me han ayudado y que cantaran en mi boda ha sido muy especial y…y no sé cómo agradecérselos adecuadamente ttebayo- las palabras de Naru me dejan anonadado y logran conmoverme hasta las lágrimas, dejándonos a ambos en mismas circunstancias.
-Naru…- reacciono abrazándolo para consolarlo y para consolarme a mí también- Esas palabras son suficientes como agradecimiento- seco sus lágrimas y le sonrío dulcemente- Somos tus amigos, más bien tu familia y lo único que queremos es verte sonreír ¿Sí?, así que no llores hm- observo a Nagato, konan y Gaara que hasta ahora estaban silenciosos en sus puestos y veo como también se encontraban conmocionados y con lágrimas, los tres se miran mutuamente y se acercan a abrazar a Naruto, formamos un abrazo grupal y logramos hacer sonreír nuevamente a Naruto.
-Primo, de ti solo necesitamos una sonrisa como agradecimiento, además en mi boda tú nos ayudaste mucho- Nagato sacude el cabello de Naru con suavidad y luego todos volvemos a nuestras posiciones –Recuerda que todos los que están aquí presentes te quieren mucho- Nagato mira la hora en su reloj de muñeca y su cara cambia a una preocupada- ¡Oh, por dios!, Naru se te hace tarde, son las ¡1:50!, vamos corre, corre que Sasuke debe estar endemoniado, hehehe- todos reímos nerviosos al recordar esa fase de Sasuke, ya que este no se caracteriza por el don de la paciencia, mientras tanto Naru corre hacia la salida.
-Ah- Konan suspiró y rio infantilmente- A pesar del tiempo siguen siendo igual que unos niños- Nagato la mira enternecido y luego ambos se van a otra habitación a cambiarse, lo cual no importa mucho porque nos iremos de forma separada.
Gaara y yo terminamos de cambiarnos de atuendo por uno más desapercibido y casual, no podíamos usar el mismo atuendo con el cual nos presentamos a la boda porque se supone que nos habíamos retirado de la ceremonia sin asistir a la fiesta. Abro la puerta de la habitación y vigilo ambos costados del pasillo antes de salir, cuando veo que esta todo despejado hago una señal a Gaara y nos retiramos directamente a mi auto. Aunque la calle se encuentra algo vacía debido a la hora no logro deshacerme de una mala sensación, desde que salimos de la sala del evento me he sentido observado, reviso los espejos retrovisores una y otra vez pero no hay nada, quizás son cosas de mi imaginación o quizás por el cansancio.
Llegamos a casa pero en deplorables condiciones, estamos muy somnolientos y prácticamente nos estamos arrastrando por la alfombra para llegar a cada una de nuestras habitaciones, no puedo más, así que me acuesto en el sillón y me tapo con una manta, está todo obscuro excepto por una brillante luz amarilla, por lo menos Gaara alcanzo a llegar a su habitación, debe ser porque él durmió durante el trayecto a casa, pero yo por obvias razones no podía hacerlo, dejo de pensar y lentamente mis ojos se cierran para dormir plácidamente.
Aun en mis sueños quedo algo preocupado, el mal presentimiento que tenía durante mi travesía a casa aún no me abandona, además que nos retiramos sin despedirnos de Nagato y konan, cosa que me deja más preocupado aún, quizás debimos habernos ido juntos, así me sentiría más seguro y no estaría como ahora, pero bueno nada puede hacer en este momento, cabe la posibilidad que sean cosas mías y que solo los molestaría llamándolos a esta hora, aparte me encuentro con nada de energía, así que con suerte podría caminar para buscar mi celular. Menos mal que mañana los veré nuevamente.
-Ei…Dei…desp…- ¿Ah?, alguien me llama, no importa- ¡Dei!- un grito fuerte hace despertarme inmediatamente, bueno también ayuda que me hayan lanzado ¿Agua?- Hasta que despiertas Deidara- refriego mis ojos y lo primero que veo es a un Nagato sonriente y con un vaso en sus manos.
-¡¡Tú!!- me levanto del sillón lanzando la manta lejos y apuntando a Nagato directamente con mi índice- ¡¿Cómo se te ocurre hacerme eso Maldito?!!- veo como Nagato da un paso hacia atrás y me hace ademanes para que me calme.
-Hehehe- Nagato ríe nervioso mientras tiembla ligeramente- Tranquilo Dei, solo trataba de despertarte- esto amerita una venganza.
-Así que tratabas de despertarme ¿Eh?, entonces quizás yo trataré de no matarte hm- trato de poner una voz amable a pesar de mi enojo y sonrío de manera tenebrosa haciendo que Nagato corra a través de la casa mientras yo lo persigo, la venganza es dulce hehehe.
-¡Papi!- Gaara nos interrumpió y justo que había alcanzado a Nagato, esto no es justo- hago un puchero mientras ayudo a parar a Nagato- vamos, sabes que hoy no podemos retrasarnos- ¿Hoy?... ¡Rayos!, se me había olvidado, Gaa-chan debe viajar a Suna para realizar un papeleo de transferencia de escuela, es algo largo así que le tomara más o menos una semana, ¿Cómo se me pudo olvidar algo tan importante?.
-Está bien, aún queda tiempo, deja darme una rápida ducha y partimos al aeropuerto hm- corro hacia la ducha sin esperar una respuesta de Gaara o de Nagato, ya estamos algo tarde y conversar no es una buena opción en este momento.
Me baño en 15 minutos y me visto en otros 5 minutos más sin secarme el cabello, me dirijo a la salida y veo que Ambos ya están en el auto, así que corro hacia ellos y me subo en los asientos traseros, mientras ellos están adelante. No tardamos mucho en llegar, al parecer aún nos quedan unos minutos libres.
-Papi…- Gaara suelta unas pequeñas lágrimas mientras me abraza- yo…- últimamente nos hemos llenados de lágrimas hehehe.
-Tranquilo pequeño- le sonrío dulcemente y me coloco a su altura para poder abrazarlo mejor- nos veremos pronto y cuando vuelvas ya nada nos separara, así que no te preocupes ¿Sí?- seguimos abrazados pero por los parlantes del aeropuerto llaman a abordar el avión que va en dirección a Suna.
-Gracias papi, te quiero mucho- Gaara me da un pequeño beso en la mejilla y luego se acerca a Nagato para poder abrazarlo- Tío cuida que mi papi no haga tonterías, o más bien dicho dile a la tía Konan que se encargue que ustedes dos no hagan tonterías- el comentario de Gaara nos hace reir, le damos un último abrazo y lo vemos caminar hacia la sala de abordaje.
-Será una semana larga, ¿No crees?- las palabras de Nagato me dejan pensativo y de repente mi cabeza comienza a doler, mi mal presentimiento cada vez empeora más y aún no sé el motivo- ¿Dei, te encuentras bien?- reacciono y veo como Nagato pasa su mano frente a mis ojos una y otra vez.
-Nagato, ¿Ayer llegaron bien, no les paso nada?- recuerdo que desde que salimos del evento he tenido este presentimiento, y los únicos que se encontraban en ese momento eran ellos, ojala no les haya pasado nada, aparte me preocupa que Konan no esté aquí.
-¿Eh?, sí, salimos unos minutos después de que ustedes se fueran, ya sabes estábamos solos y bueno…debía tranquilizar a Konan y una cosa llevo a otra y…bueno- Nagato se sonroja haciéndome comprender sus pensamientos, no me sorprendería que yo estuviese aún más sonrojado que él, ¡¿Cómo se le ocurre decirme esas cosas intimas?! -…¿A caso te paso algo a noche?-
-No precisamente, es solo que he tenido un mal presentimiento desde ayer- suspiro aliviado y comenzamos a caminar hacia el auto de Nagato- espera un momento- freno abruptamente y Nagato también- ¿Por qué Konan no vino a despedirse?-.
-Ah, cálmate un poco, es solo que no se sentía bien, estaba un poco mareada, creemos que ayer en la fiesta algo le hizo mal- mmm…solo mareada, no creo que mi mal presentimiento se deba a eso- ya sé, vamos al cine, así te olvidaras de todo y luego vamos a cenar a mi casa porque si dejamos a Konan sola toda la tarde se enojara ¿Te parece?- hace tiempo que no voy al cine, ah, qué más da.
-Me parece hm- sin mediar más palabras entre nosotros retomamos el camino hacia el auto que yo había interrumpido drásticamente, aún me encontraba cansado así que aproveche de descansar los ojos durante el viaje.
Esta vez fuimos con más lentitud, en total tenemos todo el día para llegar a una función. Me quede viendo el paisaje, pasamos por una calle principal rodeada de hermosos arboles, estamos en otoño y ver que se caen las hojas como una lluvia color marrón es espectacular, no paso mucho tiempo y ya se divisaba el cine frente a nosotros, nos estacionamos cerca para no caminar mucho y nos dirigimos a comprar los boletos.
-Buenas tardes señor, ¿Qué película desea ver?- una señorita que parecía de mi edad me atendió mientras Nagato iba a comprar cabritas y bebidas.
-Ehmm…- observe el lugar detenidamente para tener un indicio de los estrenos, la qué más llamo mi atención fue un cartel de una película animada donde había una casa con muchos globos, se ve interesante- quiero dos entradas para Up hm- Nagato es igual de infantil que yo, no creo que le moleste ver una película animada como los antiguos tiempos.
-La siguiente función está a punto de comenzar, ¿Desea esa función?- asentí levemente y luego saque mi billetera para pagar- Serán 3.800 pesos en total- qué barato, ah cierto hoy es el día de la semana donde el cine se encuentra a mitad de precio, pago lo requerido y luego me acerco a Nagato para entrar en la función.
Entramos silenciosamente y nos sentamos en la última fila de asientos, para no estar rodeados de niño, llegamos justo a tiempo ya que solo están dando los trailers de las próximas películas a estrenar.
La película estaba comenzando bien, mostraban la historia de un niño y como este fue creciendo con una niña hasta casarse, luego descubrieron que ella no podía tener hijos, pero aun así siguieron adelante hasta que fueron ancianos, él le quiso dar una sorpresa a ella, sin embargo terminaron en el hospital y luego ella falleció. Aunque estas escenas fueron cortas entraron muy profundo en mi corazón, se me partió el alma al ver ese amor tan sincero, ya que el anciano hiso volar su casa con un sistema de muchos globos para poder ir a un lugar que era especial para su esposa.
Me quedé pensativo durante toda la película, ¿Y cómo no hacerlo?, me muestran un amor puro y sincero que supera límites justo en este momento, han pasado unos meses desde que le deje, aunque ayer le pude ver nuevamente en el casamiento de Naru, pero ¿Y qué?, cuando uno se enamora con la intensidad con la que yo me enamoré nunca podrá olvidar.
-¿Dei?- salgo de mis pensamientos y vuelvo enfocarme en la vida real, la pantalla del cine muestran los créditos de la película y la demás gente comienza a retirarse. Me levanto sin contestarle y tomo mis cabritas que están casi llenas, ni loco las desechaba, podría comerlas viendo películas esta noche en mi casa. Junto a Nagato nos subimos nuevamente al auto y vamos a su casa para cenar junto a Konan que se encontraba enferma.
Llegamos a su casa y puedo ver a una Konan preocupada, con su rostro algo pálido y recargada débilmente en el marco de la puerta, ¿Por qué nos esperó aquí a fuera en esas condiciones?, Nagato estaciona su auto y yo corro hacia Konan, esta al verme parece angustiarse más y derrama unas lágrimas, ahora sí, algo malo está pasando.
-¿K-Konan? hm- la llamo algo angustiado, no me gusta verla así y además no quiero saber más de malas noticias- ¿Konan?- la llamo nuevamente y sorpresivamente me abraza pidiendo ¿Disculpas?.
-¿Por qué Dei?, ¿Por qué siempre tú?...¿Por qué la vida se ha encaprichado en tú contra?...- no entiendo nada de lo que dice, me tiene aquí cada vez más preocupados, esas no son palabras para saludar a alguien…, La sujeto de los hombros y la alejo un poco de mí, Nagato bajo apurado del auto al ver las condiciones de su esposa y puedo ver como la angustia también ha nacido en él- Su m-madre…ella llamó…él no está- ¡Esto me está desesperando!.
-Konan por favor me tienes preocupado, ¡Dime de una vez qué está pasando! Hm- Konan me mira impactada, pero parece que está calmándose, por lo menos su respiración ha vuelto a la normalidad.
-La madre de Gaara llamó…dijo qué Gaara…- ¿Gaara?, ¿Mi pequeño?- Gaara no ha llegado, más bien no llegó a Suna- esto no puede estar pasando…las lágrimas comienzan acumularse en mis ojos y no tardan en bajar por mis mejillas- Le dieron una nota…debes ir al valle del fin…solo- Konan me abraza disculpándose una y otra vez, ella no tiene la culpa para nada, pero sé que lo hace porque está devastada, es cosa de ver lo rojo qué están sus ojos.
-Nagato- no entiendo cómo pudo pasar esto si Gaara estaba en un avión, ¿Cómo nadie hiso nada?- puedes prestarme tu auto por favor, no quiero demorar más yendo a buscar el mio…- al igual que Konan me encuentro devastado, pero logro controlar mi voz, debo ser claro para no tardarme más. Nagato asiente con la cabeza y me pasa sus llaves, abraza a konan para alejarla de mí, cuando me siento que Konan me ha soltado corro hacia el auto y acelero hacia el valle del fin.
No me importan los semáforos, ni que los autos estén tocando la bocina o que los conductores me griten groserías a cada segundo, lo único que me importa es llegar y recuperar a mi pequeño, se lo prometí a Sasori y me lo prometí a mí que nadie nos volvería a separar o dañar, mi deber es proteger la sonrisa de mi pequeño, porque si lo pierdo a él mi vida no tendría sentido.
Llego y me siento al frente de las dos grandes figuras que me gustan, esta vacio como siempre, ¿De verdad debía venir aquí?, comienzo a caminar hacia las dos figuras y encuentro una nota en el piso junto a un celular, la leo y dice “presiona el botón 1”, lo hago y el teléfono automáticamente re direcciona a un número, él que haya hecho esto tomo muchas precauciones.
-¿A-alo?- pregunto algo dudoso, realmente tengo mucho miedo de lo que le puedan hacer a Gaa-chan.
-…¿Eres Deidara?- una voz gruesa y segura habla del otro lado de la línea, su voz es demasiado fría y logra hacerme temblar.
-Sí, ¿Qué quiere de mí?, ¡¿Por qué secuestro a mi pequeño?!- grito desesperado pero puedo sentir que el señor ni se inmuta.
-Te diré lo siguiente, tengo un trato para ti, si lo aceptas y cumples te devolveré a tu hijo- otra vez su maldita voz fría, ¿Cómo puede secuestrar a alguien y hacer como si nada?, maldito bastardo, pero no importa haré lo que sea…
-Está bien, haré todo lo que me pida, le daré todo mi dinero si es necesario, pero devuélvame a mi pequeño- ruego y vuelvo a rogar, debo recuperarlo.
-tsk- chasquea la lengua de manera impaciente- Escucha, no necesito tu dinero, sino algo más…hay un auto esperándote que te traerá hasta mí, deberías saber que este tipo de tratos deben hacerse en privado y en persona, no me arriesgaré a que hagas una estupidez y no cumplas- hago un pequeño sonido en señal que acepto y cuelga.
Me devolví hacia donde estaba el auto de Nagato y veo que una limosina negra se encuentra estacionada al lado de este, donde un joven pelinegro estaba esperándome.
-Lamento todo esto- el joven se disculpa ante mí y me hace una reverencia- Soy Shisui y mi jefe me ha pedido que le lleve a su mansión- asiento con la cabeza aceptando su disculpa y él abre me abre la puerta de la limosina.
¿Para qué me querrá?, por lo que veo es un magnate y lo confirmo aún más al llegar a su mansión, es tan grande que logra asemejarse a un castillo. Shisui me conduce a través de la “mansión”, hasta llegar a una amplia biblioteca.
-Bienvenido Deidara, Shisui ya puedes retirarte- ¡Oh, no!, no puede ser…
-Como usted diga jefe- Shisui me mira fijamente y demora en salir como si no quisiera dejarme solo con este hombre.
-¿Quieres beber algo?- hace un ademan para que me siente pero no lo hago, este tipo logra indignarme, secuestra a mi pequeño y con descaro me invita algo de beber, es un bastardo.
-Señor solo quiero recuperar a mi pequeño, así que vaya al grano hm- lo miro desafiante mientras él se sienta en un escritorio frente a mí.
-Como ya debiste haber dado cuenta ya nos habíamos visto antes, después de que cantaras decidí seguirte, así que mande a alguien y descubrí tu identidad. Veras tengo varias corporaciones, sin embargo necesito más promoción en el sector de la música, y como tu banda está en la mirada de todos te propondré el siguiente trato, si quieres volver a ver a tu hijo Gaara tendrás que casarte con mi hijo mayor, no sé si ya lo conozcas pero estuvo en la boda, se llama Itachi- él señor Uchiha me mira impaciente mientras me dedico a pensar.
Recuperaré a mi pequeño, me casaré con la persona de la que estoy enamorado, sin embargo esto me deja un trago amargo, quería que fuéramos una familia pero no así…¿Y si me vuelve a tratar mal? O quizás se enoje conmigo por como lo trate la última vez que hablamos, tsk, esto no debería importarme, si casándome con Itachi recupero a Gaara lo haré, además no es como si fuera un verdarero sacrificio…
-Acepto, ¿Cuándo recuperaré a mi pequeño? Hm- espero que este bastardo me lo devuelva pronto, Gaara no es un juguete para que cumpla sus caprichos.
-Recuperaras a Gaara después de la luna de miel, ya tengo todo preparado así que la boda será pasado mañana, por cierto será un evento muy grande, no debes fallar- ¿Un evento muy grande?, o sea que el mundo sabrá quién soy…
-tendré que despedirme de mi privacidad…-suspiro cansado, eso es lo que más hemos tratado de evitar durante toda nuestra carrera musical, ya saben que Gaara es mi hijo por la entrevista que tuvimos, así que no podré proteger su privacidad tampoco, por lo menos Nagato y Konan podrán estar a salvo, no quiero que pasen situaciones como esta, aunque tengo otra duda- ¿Y su hijo está de acuerdo con todo esto?- quiero saber lo que él piensa, él debe tener la culpa de todo esto , quías está vengándose de mí…
-¿Mi hijo?, hehehe- el señor Uchiha comienza a reírse a carcajadas e sarcásticamente- él no tiene decisión en todo esto, con que le dijera que debe casarse por el bien de la empresa aceptó, no tiene por qué saber los detalles, solo debe saber decir acepto en el altar- realmente me enoja todo esto, mi futuro suegro es más que un bastardo, es un mal nacido…
-Si es todo me retiro hm- di la vuelta pero no pude avanzar ya que el maldito me frenó jalando mi brazo.
-Nada de eso, deberás quedarte aquí para ver algunos detalles como tu traje y esas cosas, tenemos un cuarto listo para ti, mañana en la tarde te probaras el traje y pasado mañana te casaras, la ceremonia es a las 9 am- asentí disgustado, pero nada puedo hacer.
Él señor Uchiha llamó a una sirvienta y a Shisui que me dirigió a una habitación, no era para nada sencilla, era grande y luminosa con un gran armario, la sirvienta se retiró pero Shisui se quedo para hacerme compañía, con él revisé el armario, era del porte de una habitación y estaba lleno de trajes de boda, Itachi y Sasuke vienen de una familia demasiado ostentosa…
-Así que tu eres Deidara ¿Cierto?- es raro todos aquí son parecidos físicamente.
-Sí hm- estoy cansado, después de todo lo que ha pasado hoy tengo ganas de dormir durante una semana, pero si estoy solo me volveré a angustiar.
-Si no quieres hablar lo entiendo, solo que tengo el deber de protegerte- Shisui me miro fijamente, no lo conozco pero sus palabras suenan confiables.
-¿Por qué debes hacer eso? hm- nadie adquiere un deber como ese cuando acaba de conocer a la persona.
-Itachi- quedo anonadado al escuchar ese nombre, y Shisui lo nota- él es mi primo y mejor amigo, verás aquí somos todos familia, y bueno yo crecí junto a Itachi ya que sus padres son los lideres de esta familia y nunca estaban con él…mejor iré al grano hehehe- rió nervioso y yo solo me dedique a escucharlo- Itachi me ha hablado mucho de ti, sé lo importante que eres para él y por eso debo protegerte- soy importante para Itachi…, de solo escuchar esas palabras siento como mis mejillas se comienzan a sonrojar- Te explicaría más pero eso le corresponde a él y no a mí, nos vemos mañana para la prueba de trajes, buenas noches- Shisui me sonreí y se va de la habitación.
¡Qué día tan pesado!, las palabras de Shisui me han dado una pequeña esperanza respecto a Itachi, sin embargo hasta que no hable con él nada puedo hacer, además puedo amarlo y estar sonriente como idiota en este momento por saber que soy importante para él, pero eso no me hace olvidar todo el dolor que me provocó. ¿Por qué siempre me da por pensar cuando solo deseo dormir?, sinceramente no me entiendo para nada, busco un pijama en el armario y por suerte que pusieron ropa normal entre todos esos trajes, me cambo desganado y me acuesto para inmediatamente dormir.
No suelo soñar mucho, pero cuando lo hago realmente lo aprecio, como en este momento suelo soñar con árboles y arroyos, no es que no signifique nada, sino que es parte de un recuerdo muy especial para mí…
Siempre es el mismo sueño, siempre estoy sentado bajo un árbol frente un arroyo y alguien me habla, no puedo recordar quién es, siempre trato de encontrar al dueño de esa voz, pero siempre que me acerco hay una luz segadora que no me deja ver su rostro, pero aunque no sé quién me causa una gran paz.
-Se…rito…señorito despierte- ¿Eh?, despierto y veo a una muchacha y a Shisui, no sé por qué me habrá llamado señorito si ayer me ha llamado por mi nombre.
-Señorito, debe almorzar y probarse los trajes- ¿Almorzar?, rayos dormí mucho. Shisui me sonrió y luego se dirijo a la muchacha- está bien, puedes retirarte, yo lo acompaño en el desayuno y luego tú te encargas de los trajes ¿Sí?- la muchacha se sonroja y se retira.
-Realmente no puedo estar aquí, hehehe, solo vengo a decirte algo, después que te pruebes los trajes debes ir al centro de Konoha, alguien te esperará allí, a la hora que termines con los trajes será casi de noche, así que no te será difícil encontrarlo- ¿No se suponía que no puedo salir de aquí? Y además ¿Quién me esperará?.
-¿Y cómo llegaré allí?- no tengo idea de cómo llegar al centro desde aquí.
-Yo te llevaré, ahora almuerza que tienes todo un armario por probarte- pero ese armario es gigante, nunca terminaré. Entro al comedor y me siento a comer, es una mesa larga, pero solo un puesto tiene servido un plato, al parecer solo yo comeré aquí.
Almuerzo rápidamente, la comida estaba exquisita e incluso había postre, eran unos dangos pero si quería terminar con los trajes hoy no puedo comerlos, una señora viene a retirar los platos y me da un envase para guardar los dangos, los guardo y me los llevo a la habitación, en esta me esperaba la misma muchacha que me despertó que sin esperar más me llevo del brazo hacia el armario, me pruebo muchos trajes, obviamente que en un mini vestidor que allí había, después de todo no podía desvestirme frente a una señorita.
-Ese, ese le queda perfecto- traigo puesto un traje como de sacerdotisa, según la etiqueta se llama chihaya, yo también encuentro que es el mejor traje, digo somos dos hombres y si los dos vestimos igual sería muy raro, le doy mi aprobación a la muchacha y me cambio de ropa, mientras ella se lleva el traje a otra habitación para agregarle algunos detalles o algo así me informo.
Voy a buscar la cajita de dangos, y cuando estoy a punto de comerlos llega Shisui y me arrastra con él.
-Vamos, vamos se nos hace tarde- salimos a la calle y tiene razón, está a punto de anochecer.
Llegamos al centro y no se encontraba nadie, Shisui me dijo que él se retiraba y que esa persona llegaría pronto me senté en una banca que estaba al lado de un farol y me quede pensando mientras esperaba, ¿Cómo decirle a Nagato, Konan, Naru y Sasuke que me caso?, ¿Mi Gaara estará en la boda?, supongo que se enojarían conmigo si les digo hola mañana me caso hehehe, sería una situación muy cómica, oh, oh, ¡Nagato y Konan!, no he podido informarles lo que ha pasado, deben estar muy preocupados, espero que la persona con la que me encuentre me preste su celular para enviarles un mensaje…
-Así que viniste…- ensimismado en mis pensamientos alguien se posiciona tras la banca, y no es cualquier persona es…
-¿Itachi? hm- me giro levemente y allí estaba él con ojos tristes y sonriéndome como nunca, le quedo mirando como si me encontrara hechizado, sin embargo se mueve para sentarse a mi lado.
-Perdón por todo lo que estás viviendo, no creí que mi padre podría llegar tan lejos para conseguir lo que quiere…-
-Tú lo sabías…- si su padre dijo que no debía saber detalles, ¿Cómo Itachi sabe que se casará conmigo?- ¡¿Tú tienes que ver con esto?!- le pregunto casi gritando porque la paciencia no es lo mío.
-No, solo sabía que debía casarme, pero ayer en la noche Shisui me informo que eras tú la persona que se vió obligada a casar conmigo- aún así está mal.
-¿Y tú te ibas a casar así nada más? Hm- expreso mi enojo libremente, después de todo solo nosotros estamos aquí, además él Itachi que yo conocí no era así, él se hubiera enfrentado a sus padres, pero nunca dejaría que lo obligaran a algo como eso.
-Tengo que hacerlo, mi padre- más escusas tontas.
-¡Mientes!, tú no eres así -Me mira fijamente pero no me aguanta la mirada y se fijas en el piso- ¿y si hubiéramos estado juntos?...¿Me habrías botado como si nada solo porque te “mandaron” casarte con otra persona?,,,- responde, por favor responde, no me dejes con esta duda más tiempo por favor- …¿Acaso tan poco valgo para ti?- me encuentro afligido y mis lágrimas me delatan, pero veo que Itachi está igual.
-¡Tú no entiendes nada!- las lágrimas atacan con frenesí su rostro y más impactado yo no puedo estar- tenía que hacerlo, tengo que hacerlo más bien.
-¿Y por eso me trataste así?, si sabías que debías casarte con otra persona y que no harías nada para impedirlo ¡¿Por qué en vez de lastimarme tanto no me dejaste?! hm-
-¡Porque no podía!, Deidara, te amo como nunca he amado a alguien, sé que te lastime y me reproche siempre por eso, sin embargo no me atrevía a dejarte, ¡Soy un cobarde!, nunca alguien me había importado de esa manera, si no te amara te hubiera dejado desde el primer segundo, pero tú eres mi debilidad Deidara y cuando se trata de ti no puedo hacer nada…- él me ama, me ama, me ama, me ama, me ama pero…
-¡Entonces pudiste haberte negado a casarte!, Itachi, si tanto me amabas podías haber hecho algo- después de todo Itachi siempre ha tenido una solución para todo.
-Eso es lo que no entiendes Dei…, yo me iba a negar pero mi padre se enteró- ¿Enterarse?- se enteró que salía con alguien y que no era de su estatus, por supuesto que yo no te iba a dejar por nada en el mundo, sin embargo me amenazó de que si estaba contigo le haría la vida imposible a Sasuke con Naruto, él siempre ha tenido un cierto odio hacia Sasuke y al saber que este estaba saliendo con un chico que estudiaba gracias a una beca en la academia de Sasuke se enojó, e incluso se atrevió a pegarle, y yo…yo no quería que Sasuke perdiera la única felicidad que ha tenido…, ¡Es por eso que cedí a su petición!- no puede ser…, yo no era el único que estaba viviendo un infierno, él también sufría por el bien de nuestros amigos, ¿Debería creerle?...no sé cómo reaccionar ante lo dicho –Sin embargo Deidara no puedes reprocharme mucho, ya que no soy el único que ocultó cosas aquí- su rostro se aflige aún más, pero sus ojos no se despegan de los míos.
-Y-yo…lo siento hm- Su mirada me atraviesa y duele, pues tiene razón, le oculte todo mi pasado y trajo consecuencias, quizás si hubiera dicho quien era yo realmente nos habríamos ahorrado todo el mal rato.
-¿Eso es todo lo que me dirás?- me mira suplicante, el me dio las respuestas que yo necesitaba, supongo que debo devolverle el favor, aunque solo deseo irme de aquí para poder pensar y comprender toda esta información nueva.
-No…-Itachi toma mis manos y las aprieta suavemente dándome seguridad- Supongo que ya no puedo ocultarme más…-Soy Deidara Uzumaki, mis padres fueron asesinados cuando niño y fui recogido por la familia de Nagato, los cuáles ya habían recogido a otro niño antes llamado Sasori, los padres de Nagato fallecieron, así que Nagato tuvo que adoptarnos –Itachi me mira incrédulo ante la historia que le relato, quizás debe sentirse mal por ponerse celoso de Nagato –Por lo cual Nagato es legalmente mi padre. Cuándo crecimos formamos una banda llamada “Sakonade”, pero nos retiramos cuando Sasori falleció…-
-¿Y q-qué hay de Gaara?- no puedo cometer más errores, ya no más, recordar nuevamente esa historia me hace llorar desconsoladamente, ya sé que haré, diré la verdad e iré a pensar al lugar que debí haber ido hace tiempo…
-Es mi hijo…- sus ojos parecen a punto de salirse debido a su asombro, pero como había pensado antes no debo cometer más errores –Sasori tuvo un hijo y como ambos vivíamos juntos yo le ayudé a cuidarlo, cuando Sasori falleció yo pasé a ser el padre de Gaara, es como una adopción hm- Itachi suelta mis manos y se levanta.
-¿Por qué no me dijiste nada de esto?- me levanto de la banca también pero no le respondo…-Dime, ¡Por favor dime él porqué!-
-¡No lo sé!...solo no me atreví- ya no sé qué hacer, no aguanto estar aquí con esta atmosfera.
-Dei – su voz suena cansada pero dulce, quiero escucharlo un poco más, pero necesito procesar todo.
-Itachi-suelto algunas lágrimas y comienzo a correr, menos mal que ese lugar está cerca porque necesito verlo, ya he resuelto algo recién, pero aún no es suficiente.
Doy vuelta por una esquina y lo veo, tan espeluznante como siempre, sus letras doradas aún conservan el brillo que recita Cementerio de Konoha, vuelvo a correr con todo la energía que me queda porque si no me apuro cerraran. Hace años no venía aquí, solo espero no perderme, camino durante unos minutos y bingo, la tumba de mi hermano no es espeluznante, mejor dicho no para mí que me acostumbre a sus marionetas, su tumba era especial, llena de flores y su lápida era única, recuerdo que esa era su marioneta favorita, era igual a él, Sasori era el único que podía crear marionetas tan reales, pero ninguno de nosotros se atrevió de colocar esa marioneta aquí, esa marioneta es especial y la tenemos en un altar en casa, aquí yo construí una escultura igual a su marioneta, era mi regalo de despedida para él.
-Perdóname- me siento frente a su tumba y comienzo a hablarle, él me prometió que siempre me acompañaría, así que espero que me oiga…-Perdóname Sasori, te he tenido abandonado por mucho tiempo, pero no es que no te quiera, como le decía a Gaa-chan el día de mi cumpleaños…yo te amo hermano, así que te ruego que me perdones, soy un mal hermano, tú me devolviste la vida cuando era niño, e incluso me regalaste años de vida al salvarme ese día, pero debes entenderme…no fue fácil para mí haberte perdido frente a mis ojos y más si fue mi culpa…, bueno – creo que no debí correr así, las energías abandonaron abruptamente mi cuerpo y mis ojos comienzan a pesar- no estoy aquí para recordar eso, vengo a decirte que soy un idiota, siempre hago todo mal y por eso siempre salen lastimados los seres que amo, ¿Sabes?, por mi culpa lastime a Itachi, ojala lo hubieras alcanzado a conocer, es una buena persona que me ayudo cuando me hacías falta, es por eso que lo amo..., además que Gaara salió lastimado por culpa de eso…pero no te preocupes él está bien y pronto lo tendré conmigo de vuelta, así que no te enojes conmigo ¿Sí?- el cansancio me ataca nuevamente, mis ojos se comienzan a cerrar a pesar de que intento lo contrario…
Cierro los ojos y al abrirlos nuevamente me encuentro en el sueño de siempre, me intento levantar, sin embargo el suelo comienza a caer y de manera veloz termino cayéndome como en un túnel hasta llegar a un lugar obscuro, todo está negro y el único ápice de luz solo apunta hacia mí.
-Es bueno verte Dei- de repente una luz se enfoca a un ser que camina hacia mí…,Sasori –No te asustes, solo tenía ganas de verte y al fin puedo comunicarte- Sasori me sonríe y yo quedo petrificado, de verdad es él…
-¡Sasori! Hm- qué importa si es real o no debo aprovechar este pequeño momento así que salto a abrazarlo- Te extrañe tanto Sasori- sonrío con todas mis ganas mientras él me abraza más fuerte.
-Lo sé, escuche lo que me dijiste, aunque te tardaste un poco en venir-.
-Sí…¿Me perdonas?- mientras lo abrazo siento algo que recorre mis brazos, me alejo un poco de él y me asusto -¿Sangre?- me observo detenidamente y noto que estoy con otras ropas, estoy vestido totalmente de blanco, así que distingo rápidamente de donde viene la sangre, viene de mis brazos y de mi pecho.
-Dei, siempre te he perdonado- Sasori que hasta ahora tenía los ojos cerrados me observa- ¿Tan dañado estás?- no logro comprender –Verás, aquí se reflejan nuestros sentimientos de una manera física, es por eso que estás sangrando-.
-¿Y cómo puedo arreglarlo, Danna? hm- me observa detenidamente, luego toma mi brazo y lo lleva a su pecho, haciendo que ambos comiencen a sanar -¿Cómo lo hiciste?-.
-Se cerraran si tus sentimientos se calman, estás heridas te las hiciste por mi culpa, por eso sanaron- Sasori me mira inquieto y luego prosigue –Perdóname…, los sentimientos siempre se materializan en el pecho, así que si tus brazos están dañados significa que en el pasado estuvieron así, es por eso que perdóname Dei-.
-Nunca podría estar enojado contigo ni nada eso, esas heridas fueron hechas porque estaba enojado conmigo por dejarte ir hm- ambos nos sentamos y de a poco la habitación comienza a iluminarse –Danna dime una cosa, ¿Por qué mi pecho no ha sanado?-.
-Eso es porque yo no soy la persona que debe reparar eso, tú mismo me lo dijiste ¿No?, amas a Itachi, tu corazón le pertenece, así que solo él puede ayudarte con eso- si solo Itachi puede sanarme estoy perdido, lo deje solo y arranqué hacia aquí –No te preocupes por eso Dei, ¿Ves esa puerta?- asiento con la cabeza, mientras la observo detalladamente –Sé qué tienes un tema pendiente en tu corazón, pero si cruzas esa puerta obtendrás la respuesta que buscas –sé a lo qué se refiere Sasori, así que velozmente me levanto y me dirijo hacia la puerta- ¡Alto!- antes de abrir la puerta Sasori me detiene.
-¿Pasa algo, Danna? hm- me quedo parado, volteo y Sasori me abraza- ¿Danna?-.
-Cuando cruces ya no podrás volver aquí, pero no temas, nos volveremos a ver entre sueños nuevamente, ya que al fin me pude comunicar contigo podré hacerlo otra vez, así que adiós por ahora Dei, te amo hermano y felicidades por tu matrimonio- refuerzo el abrazo en forma de despedida y luego me dirijo a la puerta, estoy tranquilo ya que Sasori me dijo que volveríamos a vernos.
Al cruzar una luz ciega mis ojos impidiéndome ver, de a poco baja la intensidad y logro reconocer el lugar, allí está el árbol y el arroyo…
-Deidara- otra vez esa voz, la busco y me sorprendo, esta vez puedo ver claramente el rostro de la persona, es Itachi sonriéndome –Así que aquí estabas, corres muy rápido Dei, hehehe- Itachi se acerca hacia mí, me rodea la cintura y me besa, puedo sentir un montón de emociones floreciendo en este instante, me siento feliz y alivianado, esta es la respuesta que busco, después de todo él es mi luz, siento que dejo de sangrar, además que siento un calor especial entre nosotros.
Una vez que mi pecho sana completamente una luz nos rodea y siento como vuelvo a regresar al punto de inicio. Abro los ojos y lo primero que observo son unos mechones negros, yo recuerdo que me quede dormido en el cementerio, entonces ¿Qué hago aquí en esta habitación?.
-Itachi- susurro su nombre dulcemente y mi acompañante comienza abrir los ojos –Buenos días hm- sonrío embobado al verlo despertar, además me encuentro algo sonrojado por la cercanía, después de todo ambos estamos abrazados.
-Buenos días Dei- él también sonríe y se levanta- Lo siento si te molesta estar aquí, pero no podía dejarte dormir en el suelo de un cementerio –así que él me trajo eh…- Debes irte ya a tu habitación, en unos minutos nos prepararan para la boda y si te ven aquí nos retaran- ¡La boda!, rayos, después de todo no les avise a Nagato y a Konan.
-Antes de que me vaya Itachi, ¿Sabes si Nagato y konan vendrán? hm- este es un día especial, los necesito a mi lado.
-Sí, ayer les informé de todo a ellos, además convencí a mi padre para que Gaara estuviera presente, después de la boda él se irá a casa con Nagato en vez de esperar a que termine nuestra luna de miel- uff, menos mal, estoy seguro que me matarían si no se enteraran de esto.
-Gracias Itachi- Le doy un beso en la mejilla y corro a mi habitación, por suerte no me encontré con ninguna de las muchachas que me han atendido, abro la puerta con cuidado y me acuesto en la cama, después de todo yo nunca debí salir de esa “mansión”.
-Señorito, despierte- uff, llegué justo a tiempo, hago ademanes de querer estirarme y me levanto- Rápido vaya a bañarse que hoy no podemos retrasarnos- Hago caso a la mujer, me doy una ducha rápida y al volver al cuarto se encontraba la misma muchacha de siempre y una señora que llevaba algunas peinetas – Aquí le traigo su traje- la muchacha me paso el traje, que ahora estaba un poco diferente, seguía con los colores blanco y rojo como principales, pero ahora tenía unos bordados en negro y algunos dorados para darle más elegancia.
No demoro mucho en vestirme, llamo a la muchacha y a la señora, que ahora vienen con más objetos, me secan el cabello, y lo desenredan para poder peinarme, sueltan mi cabello, me hacen unas pequeñas trenzas en los costados y unos mechones los amarran atrás, recordándome al peinado de Legolas del señor de los anillos, el peinado es prácticamente igual, solo que dejaron el mechón de cabello que cubre mi ojo izquierdo como siempre.
-Listo, es hora de que baje- la señora termina de delinearme los ojos y luego me conduce por un largo pasillo, y llegamos a una gran puerta tallada en madera, en la cual Nagato me esperaba –Bien, me retiro señorito- la señora hace una reverencia hacia ambos y se aleja del lugar.
-Vaya Dei, no te veo por un día y ya estás a punto de casarte hehehe- Nagato nota mis nervios e intenta calmarme –Vamos, no estés nervioso, Itachi nos dijo todo, incluso se disculpo con nosotros, nos tenías muy preocupado Dei- Nagato me ofrece su brazo y yo me posiciono al lado de él, se escucha una melodia de piano indicando que la ceremonia va a comenzar.
-Lo único malo de todo esto es que tendré que decirle adiós a la privacidad hm- suspiro y Nagato solo ríe.
-No serás el único, todos se darán cuenta de nuestra identidad, piénsalo, somos solo 2 pelirojos y una peliazul en esta boda –tiene razón, la mayoría será familia de Itachi, ¡Los cuales son todos de pelo azabache! -hehehe, además que decidimos acompañarte en esto, así que nos presentaremos ante el público y así te apoyaremos- le doy un leve gracias ya que la música de entrada comienza a sonar.
Es un salón enorme y está conectado con el patio para hacerlo más grande aún, está repleto de gente y como dijo Nagato, nosotros somos los que resaltamos más, caminamos lentamente hacia el altar y me parece eterno, hasta que por fin llego, Nagato hace una pequeña reverencia y me entrega a Itachi.
-Queridos hermanos, estamos aquí reunidos para presenciar la unión entre estas dos personas –No le tomo mucho atención, pues son las típicas palabras de boda que uno puede ver en cualquier lugar, en vez de escucharlo me dedico a observar a Itachi disimuladamente, puedo notar su perfecto rostro, sigue igual de perfecto que hace tres años, solo que ahora se ve mucho más maduro, sus ojos obscuros no han perdido ese inusual brillo rojizo que divisé el día que lo conocí, y sus cabellos están muchos más largos, no se compara con mi largo, pero aún así es harto, veo que sus labios se mueven para decir acepto, siendo mi señal para despertar –...¿Y usted Deidara Uzumaki, acepta a Itachi Uchiha como esposo y fiel compañero de su vida para honrarlo y respetarlo en la salud y en la enfermedad hasta que la muerte los separe?- todo parece silenciarse de momento a otro.
-Sí, acepto- nuevamente al estar ante un público masivo intento controlarme para no soltar mi hm, esta vez es Itachi él que me observa “disimuladamente”, mientras me sonríe con cariño.
-Entonces ante todos aquí presente declaro formalizada esta unión- hehehe, menos mal no dijo marido y mujer, sería un suceso muy incomodo –Puede besar a su esposo –nos miramos fijamente, Itachi se acerca a mí, me rodea de la cintura y me besa dulcemente, al igual que en mi sueño.
Todos aplauden y nos dirigimos a otro salón igual de grande que este, donde se celebrará la fiesta, al final Konan, Gaara y Nagato no eran los únicos con cabellos que destacasen, ya que se encontraba Naruto y unos amigos que tenemos en común todos nosotros, Yahiko, el cual tiene el pelo anaranjado, Zetsu, que tiene el pelo verde, Hidan y Kakashi, de cabello plateado, Kisame, de cabello azul y Sakura de cabello rosado. Aunque no éramos mucho era gratificante, uno se sentía raro entre tantos azabaches.
Con mis amigos pasamos un buen rato, entre bromas y algunas burlas hacia mí por parte de Hidan, también aproveche de agradecer a Shisui y pude reencontrarme con Gaara, a pesar de que me reto en un principio por no decirle nada sobre Itachi antes, al final me felicito y me deseo suerte. Además que lo presente ante a Itachi, ya que los tres desde ahora seríamos una familia, ambos estaban nerviosos, pero lograron llevarse bien.
Llego la hora del baile y no podía encontrarme más nervioso, toda la gente nos miraba y eso me aterraba, no es lo mismo cuando cantas al público con mascara…¡Oh!, ahora que lo recuerdo debo cantar algo, ya que eso me pidió mi ahora suegro y también porque son palabras especiales hacia Itachi, yo he resuelto mis dudas con Itachi, acepto que lo amo, pero no sé qué concluyo él ayer, es por eso que deseo cantar esa canción. Termino de bailar y me disculpo ante Itachi, luego voy directo hacia Nagato, Konan y mi pequeño para que me ayuden, también le pido a Naruto que haga parar la música mientras nos listamos.
-Hola, buenas noches, lo siento por interrumpir su baile, pero quería hacer algo especial. Yo creo que muchos ya sabrán que soy D, de Sakonade y bueno, mejor les presento a todo el grupo. El pelirojo que está aquí a mi lado con una guitarra es Nagato, la hermosa mujer peliazul es Konan, su esposa, y este pequeño que está de aquí es Gaara, creo que me fui del tema principal, hehehe- me rio algo nervioso y la gente me acompaña gentilmente- Esta canción que tocaremos es nueva y va dedicada especialmente para mi esposo, así que Itachi presta atención- ahora llevo una vestimenta más casual, del estilo que usamos en los conciertos, no quería llevar el traje de la boda toda la tarde, desde hoy es un objeto valioso y no quiero dañarlo.
( N/A: Canción Wherever you are de One ok rock, a diferencia de las canciones que usé en el capítulo anterior esta se encontrara completa y traducida, para darle un toque más especial.)
Te lo estoy diciendo,
suavemente lo susurro
Esta noche, esta noche
Tú eres mi ángel.
Te amo tanto.
Ambos nos hemos vuelto uno
Esta noche, esta noche
Solamente diré que
Donde quiera que estés
siempre te haré sonreír
Donde quiera que estés
siempre estaré a tu lado
Y sin importar que digas
al pensar en ti, surgen estos sentimientos
Te prometo un "por siempre", ahora.
Oh Yeah...
No necesito una razón
Cariño, solamente te quiero a ti
Esta bien, esta bien
Día tras día.
A partir de este momento
y para siempre, porfavor
Hasta la muerte, quedate conmigo
Llevemoslo a cabo
Donde quiera que estés
siempre te haré sonreír
Donde quiera que estés
siempre estaré a tu lado
Y sin importar que digas
al pensar en ti, surgen estos sentimientos
Te prometo un "por siempre ", ahora
El día que nos conocimos
es uno de los recuerdos que más atesoro con cariño
Y el día de hoy,
será nuestro segundo recuerdo más preciado.
Para poder amar sinceramente a una persona
y para poder volverme una persona dulce y sincera
Mantendré por siempre el amor
que existe en el fondo de mi corazón.
Donde quiera que estés
siempre te haré sonreír
Donde quiera que estés
siempre estaré a tu lado
Y sin importar que digas
al pensar en ti, surgen estos sentimientos
Te prometo un "por siempre ", ahora
Donde quiera que estés...
Donde quiera que estés...
Donde quiera que estés...
Termino de cantar y veo que la gente está conmocionada, Itachi se acerca al escenario y extiende sus brazos hacia mí, doy un ligero salto y quedamos abrazados, es un momento bastante mágico, una lágrima traicionera cae de uno de sus ojos, por supuesto que yo no iba a dejar que esa lágrima fuera libre por el rostro de mi esposo, así que la seco con mis labios, la gente aplaude pero no son ellos los que tienen mi atención.
-Gracias, Dei- ambos nos dirigimos hacia la mesa principal, ya es tarde y debemos despedirnos de la gente y como he dicho desde el principio de esta aventura, odio las despedidas, son muy largas.
Mucha gente viene a despedirse de nosotros, no tengo idea de quienes sean, así que hago el proceso rápido, sin embargo Itachi demora mucho. Después de un largo rato nos hemos despedido de todos excepto de mi familia, Nagato, Konan y Gaara, mis fieles compañeros se acercan a nosotros y no sé cómo reaccionar, ellos me ayudan felicitándome y despidiendose velozmente.
-Los veré pronto chicos, especialmente a ti Gaara, no creas que has escapado de mí ¿Eh? hm- Gaara me regala una tierna sonrisa y luego se retira con los demás.
-Nosotros también debemos irnos Dei, iremos a Amegakure –esto debe ser la tradición de que hablaba Naru, por lo menos eligió un buen lugar ya que… –Sé que te encanta la lluvia- exacto, adoro la lluvia...
-Qué bien me conoces hm- me toma de la mano, haciéndome sonrojar y me lleva a través de los pasillos hasta llegar a una Limosina, en ella nos espera Shisui.
-Felicidades nuevamente por la boda, vamos que tienen un avión que abordar- nos abre la puerta y cuando entramos puedo sentir un ambiente diferente, mis mejillas aún están rojas, así que escondo mi mirada apoyándome en su hombro para descansar los ojos.
Tardamos casi 45 minutos en llegar al aeropuerto, la “mansión” Uchiha si que está lejos, Shisui se despide de nosotros y luego tomamos nuestras cosas para abordar el avión, al entrar al aeropuerto me sorprendo, ya que Itachi me informo que tomaríamos un avión privado de la familia, ya con esto nada me puede sorprender. Abordamos y partimos de inmediato, después de todo no había que esperar a nadie más, otros 45 minutos de viaje y ya estábamos en nuestro hospedaje, es una casa propiedad de la familia Uchiha, pero esta me parece más normal en cuanto tamaño.
He estado nervioso puesto a que Itachi no ha hablado durante todo el trayecto y hoy es nu-nuestra luna de miel…, ahora sí que debo parecer un tomate de solo pensar en lo que debe pasar…,aunque todavía me falta saber la conclusión de Itachi sobre ayer.
-Si te quedas allí te resfriaras- me había quedado pegado en mis pensamientos en medio de la lluvia –ya estás muy mojado, ¿Por qué no tomas un baño, Dei?- asiento y abro algunas puertas hasta encontrar la habitación principal, dejo mis cosas y saco una bata e una toalla del armario para dirigirme al baño de la habitación.
Me doy un largo baño para despejarme totalmente, ya que esta noche quiero estar con Itachi, solo espero que no esté enojado conmigo…, cierro la llave de la ducha y me seco completamente, tomo la segunda toalla y comienzo a refregar mi pelo, no quiero resfriarme en esta semana tan especial. Salgo del baño con la bata puesta y lo encuentro a él semidesnudo, sé está secando el pelo con una toalla pero no produce ningún cambio, su pelo sigue húmedo, y las gotas resbalan sobre su pecho y espalda que tiene descubierta, solo lleva puesto un pantalón de pijama. Me quedo embelesado observándolo y siento como mis mejillas vuelven a arder con gran intensidad.
-Itachi – Mi ahora esposo deja de secar su pelo para concentrarse en mí, puedo ver como también se sonroja, haciéndome sentir más nervioso. Se levanta y se acerca a mí, mientras yo retrocedo lo más que puedo, hasta que siento la fría muralla hacer contacto con mi espalda y dándole la vía libre para acercarse totalmente a mí.
-Dei- toma mi rostro y lo acerca hacia él, pero no me atrevo a verle –Mírame por favor- le hago caso y me besa de manera dulce como lo solía hacer antiguamente. Me agarra de la cintura para mantener la cercanía y luego siento como su lengua le pide permiso a mis labios para profundizar él beso, permiso que no demoro en concederle, nuestras lenguas comienzan una pequeña batalla en nuestras bocas, sin embargo la suya logra dominar el terreno y se convierte en la vencedora, llevo mis brazos alrededor de su cuello mientras nos tomamos unos segundos para respirar.
-Itachi…ah- jadeo por todas las sensaciones que me produce con sus besos- espera…mgh –nuevamente me besa e interrumpe mis palabras, mientras lentamente nos va acercando a la cama.
-Dei…- un hilo de saliva une nuestras lenguas haciéndome sentir aún más vergüenza- Si no quieres seguir detenme ahora- se separa de mí y me observa fija y lascivamente.
-¿T-tú de verdad quieres estar conmigo? hm- parece una simple pregunta, pero necesito volver a saber si lo que siente por mí es verdadero.
-Me sorprende que dudes Dei…, te lo dije ayer ¿No?, Te amo, si no te amara no hubiera ido tras de ti después de que arrancaras, si no te amara no te hubiera llevado en brazos hacia mi habitación, si no te amara no te hubiera recostado junto a mí y menos hubiera dormido abrazado a ti, sin embargo hice todas esas cosas porque te amo y deseo unirme aún más a ti –Itachi, estoy anonadado pero sabiendo esto no hay nada que me evite unirme a él, además que estoy ansioso de recibir sus caricias…- Entonces Dei, ¿Me dejaras se…? mgh –lo beso desesperado, dándole a entender que quiero seguir hasta el final.
Se separa de mis labios y abre mi bata para comenzar a recorrer mi cuerpo, se detiene en mi cuello y comienza a repartir profundos besos e algunas mordidas, de seguro me quedarán marcas allí, mientras lo hacer puedo sentir como todo mi cuerpo es recorrido con un extraño cosquilleo que nunca antes había sentido. Se encarga de lamer uno de mis pezones y masajear al otro aumentando mi excitación.
-Te aseguro que no te arrepentirás- Itachi me mira con lujuria y vuelve a besarme con desenfreno, sus dedos se sienten fríos al hacer contacto con mi piel, puedo sentir como bajan desde mi abdomen hasta llegar a mi pelvis.
-¡Ah! –gimo al sentir como toca mi miembro, al mismo tiempo que me avergüenza, pero no se detiene ahí, comienza a subir y bajar su mano provocando que mi voz salga sin escrúpulos y comience a jadear lleno de lascivia, cada vez aumenta más el ritmo de sus movimientos, siento que voy a explotar pero Itachi no me deja.
-Aún no es momento Dei, hehehe- rie levemente y siento húmedo mi miembro, ¡Por dios!, Itachi está lamiéndolo, estoy al límite, intento avisarle pero este no se detiene, al final termino corriéndome en su boca –De…licioso, pero ahora es mi turno de disfrutar – se desnuda frente a mi e dirije tres dedos a mi boca y me hace lamerlos, nada más puedo hacer, en este momento soy esclavo de su perversión, después de asegurarse que están bien lubricados los saca de mi boca y se dedica a besarme, luego siento un extraño dolor en mi entrada, no es del todo agradable pero después de un rato logro adaptarme a su pequeña intromisión.
-¡Ay!...sa…sacalo, ¡Itachi! –de repente a cambiado los dedos por su miembro y esta vez el dolor es insoportable, cierro los ojos con fuerza y las lágrimas no tardan en caer.
-Tran…¡Ah!...tranquilo, Dei –se ve que Itachi se encuentra excitado, pero aún así para y espera a que me acostumbre mientras me da largos y profundos besos, pasan unos minutos y el dolor va disminuyendo mezclándose nuevamente con los cosquilleos que sentía al inicio, muevo mis caderas indicando que ya puede comenzar. Itachi no me hace esperar y comienza con un lento vaivén, que cada vez se vuelve más rápido hasta que ambos alcanzamos el máximo punto de éxtasis.
-¡Itachi! –lanzo un gran gemido mientras siento como Itachi se corre en mi interior y yo entre nuestros cuerpos, ambos caímos rendidos, así que nos acomodamos en la cama y nos cubrimos con las fresadas –Te amo…-.
-Yo también te amo, Dei –me rodea con su brazo, me recuesto en su pecho y ambos caímos rendidos ante Morfeo.
Epílogo
Han pasado algunos meses después de esa noche y todo ha mejorado, volvimos a vivir juntos con Itachi, pero ahora estamos con Gaara, ambos se llevan bien y somos como una verdadera familia. Konan que siguió con sus mareos se enteró que estaba embarazada, ahora tiene 5 meses de gestación, por lo mismo nuestra banda se tomo un pequeño receso nuevamente. También ahora vamos a visitar una vez por mes a Sasori, de repente lo vuelvo a ver en sueños y puedo notar como las heridas que ese día me mostró están sanadas completamente,
-Dei, cariño ven para acá- Itachi me abraza con dulzura dejando atrás los amargos recuerdos que una vez vivimos, y así abrazado a él me di cuenta que al fin había recuperado mi luz, me sentía protegido, amado y mi corazón no dejaba de palpitar con frenesí cuando estoy a su lado, siempre había dicho que él era mi debilidad, pero ahora entiendo que él es el que me hace fuerte, y ahora por fin me siento completo.
Fin