Capítulo 2: Semana de sentimientos
Ocho meses después...
El verano estaba por comenzar y una onda de intenso calor azotaba Konoha aunque esto no era impedimento para que los ninjas continuaran con sus misiones.
-Equipo 7 reportándose- anunció con voz cantarina entrando a la oficina de la Hokage
-Terminaron temprano- reconoció Shizune
Kakashi señaló con su cabeza a la derecha y las dos mujeres observaron a los tres genins que se habían dejado quedar pegados a la pared
-Nos estábamos cocinando vivos- se quejó el rubio, el cual se había quitadó su chamarra naranja
-No seas quejica Naruto- lo reprendieron
-Es verdad Tsunade-sama, un poco más y nos deshidratábamos- dijo su alumna
-El sol es demasiado abrasador- comentó el moreno pero sin sonar a queja
-De acuerdo, pueden retirarse; refrésquense y consuman líquidos. Kakashi tu no, hay una reunión con los maestros jounin-
El peligris asintió y los menores se retiraron.
***
Como se había hecho costumbre, los miembros del equipo 7 se dirigieron a la tienda de té de en la que se reunían con los demás genin, fueron los primeros en llegar y se sentaron en la mesa de siempre
-¿Qué les ofrezco chicos?- los atendía la mesera
-Agua- respondieron simultáneamente
-Enseguida- se retiró
Ya con su pedido, esperaban a sus compañeros bebiendo en silencio o con pequeñas charlas sin sentido; desde aquella noche en la que el destino de Sasuke pudo ser otro la barrera que había creado a su alrededor comenzó a quebrarse, si bien seguía siendo reservado su relación con sus compañeros era otra, especialmente con uno
-Que problemático es este calor- se quejo Shikamaru llegando a la mesa junto con Chouji y los demás novatos.
-¿Ustedes también?- preguntó burlesco Uzumaki
-¡Prefiero el invierno!- exclamó Kiba
-Mi flor de la juventud se seca-
-¡Hay que ir al rio!- propuso emocionado el jinchuriki
-Eh...chi...chicas- habló tímidamente la Hyuuga
-¿Qué sucede Hinata?- le dio la palabra Ten-ten, sino no le harían caso nunca
-Mi...Mi padre me dio permiso de invitarlas a mi casa un fin de semana y llenar la piscina-
-¡Que buena eres Hina!- exclamó su compañero perruno
-lo…lo siento chicos, pero la condición es que…que únicamente mujeres-
Un aura de pesada cubrió a los varones
La risa burlona de Neji se escuchó -No se preocupen, yo les contare como nos la pasamos-
-So...sobre eso Neji-nisan, pa...padre dijo que solo mujeres. Lo si...siento mucho pe…pero tienes que buscar un lugar donde dormir-
Las carcajadas no tardaron en aparecer mientras la depresión del genio Hyuga se acentuaba
-No te preocupes amigo, eres bienvenido en mi cada-
-Gracias Lee- contestó sin ánimo
-¡Oh vamos! nos la pasaremos genial -
-¿Tienes aire acondicionado?-
-Mmm...Sí-
-Creo que sobreviviré-
-Si las niñas hacen su fiesta, nosotros también podemos- intento animar Rock
-Acampemos cerca del río- insistió Kiba
El revuelo y los planes seguían
-Hey chicos- los interrumpieron
-¿Qué hace aquí Gai-sensei?-cuestionó Ten-ten
-Vine a avisarles que por orden de la Hokage todas las misiones genin quedan canceladas hasta nuevo aviso-
-¿¡Qué!? ¿Por qué?- se alarmaron todos
-Esta decisión la tomó como médico, hay demasiado calor y ya ha habido afectados pues algunos ninjas ya han terminado en el hospital, de hecho la aldea de la arena ha tomado las mismas acciones-
-Problemático- habló el Nara -pero en Suna no hay misiones ninjas ahora por riesgos a la salud-
-¡No dejen que su flor de la juventud se marchite, aprovechen esto tiempo como unas pequeñas vacaciones o para entrenar! ¡Ánimo!- hizo su pose y se fue
-Vamos teme- llamó el rubio encaminándose a la salida
-¿A dónde dobe?-
-Con la vieja ¡pero muévete!-
Sin ánimo, Sasuke metió a su boca el resto del tomate helado que había pedido y siguió a su escandaloso compañero.
***
-¿Y cómo van con el entrenamiento esos dos mocosos, Jiraya?-
-He de admitir que hacen un buen equipo, compiten entre ellos pero de ser necesario se ayudan. Fue una buena elección-
-Bien. ¿Ya decidiste lo del viaje de entrenamiento?-
-Sí; nos iremos después del examen chunin, ya solo falta un mes para las pruebas y han entrenado para ello tampoco sería junto no dejarles participar, pero no esperaremos los veredictos. Además en este lapso Kakashi ayudará a Sasuke con los genjutsus- el mencionado asintió
-Me parece correcto-
-¿Y no ha habido noticia de...?-
-¡Vieja!- grito un rubio entrando a su oficina
-¡No me digas vieja mocoso irrespetuoso! ¿y qué haces aquí?- dijo molesta
-¿¡Cómo que no va a haber misiones!?-
-Hace una hora te quejabas del calor y ahora de que no tendrás que asolearte-
-¡Pero sin misiones cómo voy a sobrevivir!
En ese momento los tres adultos cayeron en cuenta de la situación del niño, en realidad de ambos infantes aunque el azabache no hubiera hablado
-Escucha Naruto- comenzó más calmada la rubia -tú situación es especial, pero ha habido buenas misiones debes tener algo ahorrado ¿no?
-Si, tengo algo-
-¡Pues ya esta! pero si tienes algún problema ven y lo resolveremos-
-Ya que- comentó desilusionado -¡Ero-sennin!- Llamó con su habitual alegría -¿vamos a entrenar? tenemos tiempo-
El aludido miró a la rubia
-No- sentenció la Hokage
-Vamos, no soportaré estar sin hacer nada ¡teme di algo!-
-¿Así que para eso me trajiste?- alzó una de sus cejas
-¡No seas terco Uzumaki! empezó a regañar la Senju -podrían sufrir un golpe da calor-
-¡No somos tan débiles!- objetó
-No les estoy diciendo débiles, solo no quiero que terminen en el hospital-
-Ero-sennin -
-¡No te atrevas Jiraya! te recuerdo que a nuestra edad tu acabaste en el hospital por deshidratación
-Sasuke-
-A mí no me metan en su discusión- respondió con voz cansada
Ambos rubios lo miraron
-¿estás bien Uchiha?- observó al moreno que estaba bastante colorado
-Si, solo tengo calor-
-Por esa razón Naruto, Sasuke empieza a deshidratarse. Y tu niño- señaló al moreno -ve a casa, refréscate, date un baño y bebe muchos líquidos- recomendó
-Lo haré, pero el dobe tiene razón, no podemos estar de vagos quien sabe cuánto tiempo-
-Será una semana -los menores la miraron con los ojos entrecerrados y suspiró derrotada -de acuerdo, si quieren entrenar háganlo, pero únicamente entre ustedes y tiene que ser en un lugar fresco y de preferencia con una fuente de agua cercana y solo puede ser antes de las 11 de la mañana y después de las 6 de la tarde sin excepción y siempre consumiendo abundantes líquidos ¿entendido?-
Ambos niños asintieron
-Ahora largo-
-Adiós- gritó el rubio, el moreno solo hizo un movimiento de cabeza
-Por cierto- inició el ojiazul -deberías tener cuidado vieja, con el calor el silicón puede perder su forma- para recalcar hizo como me apretujaba su pecho
La Hokage comenzó a emanar chakra, tomó su escritorio y se lo lanzo al rubio, este y su compañero salieron corriendo de la oficina y de la torre
-¡NARUTOOOOOO!- escucharon un grito furioso
Unas calles más ambos ninjas se detuvieron con la respiración agitada
-¡Usuratonkachi!-
El mencionado soltó una ruidosa carcajada
-Tienes que admitir que fue gracioso-
-Idiota-
-Ya, ya. No estés de amargado-
El moreno soltó un gruñido y comenzó a caminar, el rubio lo siguió hasta ponerse a su altura
-¡Me asaré en mi casa!- se quejó el jinchuriki
-¿No estabas ahorrando para in aire acondicionado?-
-Si, pero con eso de que no hay misiones tendré que esperar-
Siguieron avanzando hasta la bifurcación que dividía sus caminos
-¡Nos vemos teme, vamos a ir un día al lado aunque tenga que arrastrarte!-
-Hm- contesto pero mostró una sonrisa ladeada
-Adiós- volvió a despedirse el rubio y continuo su andar
Sasuke se quedo unos segundos observando el camino que tomo su compañero –Naruto- pensó
Aterrizó en la puerta de su casa y la abrió, ya nunca le pasaba llave total nadie mas vivía en el barrio Uchiha. Entró y se descalzó rápidamente, recorrió los largo pasillos de la casa y por donde pasaba encendía las luces, nadie lo sabía pero no le gustaba que su casa estuviera a obscuras.
Pasó por una botella de agua a la cocina y se dejo caer en su cama, ya le dolía la cabeza. Sin darse cuenta se quedo dormido mirando al vacío pasillo interior.
***
Se lanzó en su cama y se estiró, la ducha había sido refrescante y con las ventanas abiertas y el ventilador la tarde era muy agradable.
Unos golpes lo obligaron a levantarse y sin ánimo abrió la puerta
-¡Sasuke!- se sorprendió al ver a su compañero
-Dobe- saludó
-¿Qué haces aquí? -
-¿Puedo pasar antes?-
-Claro entra- dijo haciendo espacio -¿y bien?-
-¿No quieres ir a mi casa?-
-¿Cómo?- se extraño
-Mi casa es grande y fresca. Tiene un amplio jardín y mi cuarto posee aire acondicionado-
-¡Suena bien!- exclamó emocionado
-¿qué esperas?- preguntó irritado el ojinegro
-¿Ahora?-
-Por algo vine-
-Oh- Uchiha alzó su ceja izquierda -¡ya voy!-
El rubio corrió a su habitación seguido por su visitante a paso lento
-¿Y cuanta ropa debo llevar?-
-Serás baka... como de una semana- respondió sentado en la cama -no olvides el traje de baño-
-Ya sé-
Pasaron unos diez minutos en los que ojiazul terminó de alistar su mochila bajo la mirada atenta del azabache
-¡Listo!-
-Vamos- salió de la habitación con su amigo siguiéndolo.
El dueño del apartamento aseguró la puerta y se dirigieron al otro lado de la aldea.
Llegaron al desolado barrio accesando por una de las puertas laterales, inmediatamente el Uchiha se impulsó hacia uno de los tejados y su invitado lo siguió; de esa manera continuaron hasta la única casa iluminada justo en el centro, aterrizaron en el jardín.
En todo el trayecto el rubio contempló el silencio y la obscuridad que los rodeaban, era asfixiante.
-Tu casa es bonita teme-
-Gracias- respondió sin emoción
-Podríamos dormir en el pasillo del jardín- sugirió
-Creo que nunca he dicho esto pero es una buena idea- reconoció con sarcasmo
-Teme- chilló indignado
-Dobe- respondió con gracia -no empecemos a pelear, vamos a la habitación-
Naruto lo siguió aun refunfuñando
-¡Que limpio!- exclamó sorprendido
-Obvio, no a todos nos gusta vivir en un pocilga-
No recibió respuesta así que se acerco al Uzumaki que se encontraba sentado en la cama, y fijó su vista en lo que observaba tan curioso: una fotografía de él con sus padres y hermano.
En un rápido movimiento tomó el objeto y lo guardó en el cajón de la mesa de noche
-¡Ah!- se sorprendió el rubio -lo siento teme, no debí mirar- el eludido no contesto -es solo… que nunca había visto una de esas- se disculpó
-¿En serio no tienes nada de tus padres?- el rubio negó lentamente
El moreno se quedó en silencio, si bien sus padres ya no estaban con él, al menos le quedaban los recuerdos. No se podía imaginar cómo sería no saber ni quienes te habían dado la vida.
-Era muy bonita- escuchó a su lado y observó al ojiazul -tu mamá, era muy bonita- repitió con una sonrisa -y... Te pareces un poco a ella-
-Tu mamá también debió ser bonita- dijo un poco cohibido
-Creo que todas las mamás son bonitas y nos cuidan siempre donde sea que estén-
Permanecieron unos minutos en silencio sin saber que decir
-Entonces... ¿dormimos cerca del jardín?-
-Si dobe-
Después de preparar los futones y ponerse las pijamas, decidieron preparar algo de cenar
-¿En serio quieres eso?-
-El ramen es delicioso teme-
-Si tu lo dices dobe- rebatió con sarcasmo -además hay demasiado calor para los fideos calientes-
-¿Entonces qué siguieres cerebrito? y no me salgas que tomates-
-Los tomates son frescos y saludables y estaba pensando en una ensalada-
-¿Acaso me viste cara de conejo?-
-No solo los conejos comen frutas y verduras
La discusión siguió mencionando animales herbívoros y unos inventados por el jinchuriki, hubieron insultos y unos cuantos golpes y finalmente con un genjutsu Sasuke ganó por lo que terminaron cenando ensalada de frutas, con bufidos de Naruto incluidos.
-¡Que linda noche!- comentó el Uzumaki ya en su futón y con Uchiha al lado -no se siente el calor-
Con la brisa nocturna y el manto estrellado ambos niños se durmieron.
El sol le dio de lleno en la cara y le molestó, apretó los ojos con fuerza y se cubrió totalmente con la sabana pero fui inútil.
Se estiró y bostezó, a su lado estaba el azabache profundamente dormido
-Teme- lo llamó pero no recibió respuesta –teme-
-Mmmm-
-Vamos despierta-
-¿Qué hora es?- preguntó con voz pastosa
-No sé, pero tarde. Ya despierta-
-Ya voy, ya voy-
Se levantaron, desayunaron ramen y onigiri respectivamente, se cepillaron los dientes y vistieron
-¿Y que hacemos?- preguntó al dueño de la casa
-¿Quieres entrenar?-
-Sinceramente no. ¿Qué es eso?- preguntó señalando una bolsa de plástico cerca de la puerta
-Nada importante-
Sin pedir permiso el rubio empezó a curiosear
-¡Usuratonkachi, no agarres cosas ajenas sin permiso!-
-Semillas- cortó el regaño del otro quien solo suspiró resignado
-Si, semillas y otras cosas para jardinería. Quiero plantar hortalizas y similares en el patio trasero-
-¿Y por qué no lo has hecho?
-No he tenido tiempo-
Naruto puso una sonrisa zorruna, sujetó firmemente la bolsa y tomo de la muñeca al moreno-¡ya sé que vamos a hacer!- gritó recorriendo la casa hacia la parte exterior arrastrando a su amigo.
Seleccionaron una parte del patio, la limpiaron y prepararon la tierra lo que les llevo el resto de la mañana. Cerca de las 2 de la tarde almorzaron yakitori que preparo el moreno y siguieron trabajaron.
Naruto plantó girasoles, sandias y zanahorias; por su parte Sasuke sembró sus preciados tomates, camelias y patatas. Al atardecer regaron las semillas y ya casi al anochecer se ducharon, bebieron un vaso de leche e inmediatamente se durmieron en el mismo lugar que el día anterior.
El olor de algo cocinándose llegó a su nariz, su estomago rugió y con pereza abrió los ojos, cayó en cuenta en que era el único que aun dormía
-Al fin despiertas dobe -
-Buenos días a ti también teme- respondió con sarcasmo -¿qué hiciste para desayunar?-
-Para mí prepare tamagoyaki, tú ve que te cocinas-
-¡Avaro egoísta!-
-No hagas drama, como no tengo mas opción te invito-
-Bastardo- murmuró
-¿Quieres entrenar? preguntó el ojinegro a la mitad del desayuno
-Si, pero estoy cansado. La jardinería no es sencilla-
-Algo simple: puntería con las diferentes armas-
-Podre usar tu cabeza como tiro al blanco-
-Tu no podrías darme con un shuriken ni aunque estuviera atado, ciego y a menos de dos metros-
-No dirás lo mismo cuando seas un porta kunais humano-
-¿Es un reto?-
-Una predicción-
El desayuno continuo en silencio y miradas retadoras, terminaron y lavaron los platos utilizados. Ya con sus armas el Uchiha guió al rubio por su barrio hasta un pequeño bosque con blancos y diferentes pruebas de destreza. Después de horas lanzando objetos punzocortantes estaban empatados así que como ultimo reto cada niño selecciono un tronco y con sus armas tenían que darle en lo que serian los puntos vitales de un adulto, antes de iniciar el rubio talló en su árbol un mal dibujo del azabache
-Así pensare que te estoy matando- le informo con burla
-Hm- gruñó con fastidio por la burla, de igual manera con su kunai talló una imagen de su compañero con mejores resultados pero aun así desproporcionado
-Esta mejor que el original- se burló
-Digo lo mismo del mío-
Se retaron nuevamente con la mirada y la competencia empezó, pero en algún punto y sin saber exactamente cómo sustituyeron los troncos por los cuerpos reales iniciando una persecución que terminó con Naruto sobre la espalda de Sasuke mientras el azabache pataleaba Y amenazaba de muerte al de piel tostada. Después de 10 minutos, para el Uchiha humillantes, el ojiazul lo liberó y regresaron a la casa.
Como ya estaba atardeciendo decidieron regar el jardín, así cada uno echaba agua a sus cultivos con una manguera, el azabache estaba tan concentrado en lo suyo que no sintió la mirada traviesa de su acompañante hasta que el agua a presión impactando su espalda
-Usuratonkachi- gritó enojado
-¿Que pasa teme?- preguntó con fingida inocencia, la cual le fue borrada por una descarga de agua directa al rostro
-¡Bastardo!-
Y así inicio una pelea con agua en la que ambos ninjas terminaron completamente empapados de pies a cabeza. No fue hasta que la brisa nocturna les hizo saber la hora.
-Hay que ducharnos- sugirió el moreno, el frio comenzaba a hacerse presente
-Pero mojaremos por donde pasemos- el rubio estaba en iguales condiciones
-No importa, después me ayudas a limpiar. ¡Vamos!- Empezaron a recorrer la mansión a paso rápido lo cual después se convirtió en una carrera, en uno de los pasillos el Uzumaki no logró doblar por lo mojado de sus pies y se dio de lleno con la pared soltando un aullido de dolor
-Torpe- gritó su compañero al superarlo, pero de igual manera resbaló y se dio de bruces contra el piso de madera. De inmediato se paró y siguió su recorrido hasta llegar al baño de su habitación.
Una vez ahí se despojo de su ropa y abrió la llave para llenar la bañera con agua tibia, mientras el líquido aumentaba procedió a lavarse el cuerpo, en eso llego el rubio aun sobándose la cara
-No seas quejica y apresúrate a ducharte- exclamó arrojándole el jabón líquido
-Ya, no seas impaciente- se quejó e inicio el tallado de su cuerpo.
Una vez enjuagados ingresaron a la bañera, cada uno en un extremo y estirando el cuerpo.
El rubio abrió los ojos al sentirse observado y se dio cuenta que el azabache observaba detenidamente el complicado sello de su abdomen por lo que se removió incomodo rompiendo la concentración del otro y sin saber que decir al verse descubierto
-Yo también tengo uno- pronunció finalmente pasando su mano por su hombro marcado por Orochimaru, el cual no le había dado ningún problema después de la técnica de los sannin
-El mío es más genial- presumió más relajado
-Lo que digas- concedió antes de ponerse de pie y salir de la bañera -me siento como una pasa -exclamó al ver sus dedos arrugados por tanta agua
-También te ves como una- lo molestó el otro
Por respuesta le lanzo una de las esponjas de baño
-Solo bromeaba amargado- reclamó al tiempo que también salía de la tina
Se secaron y envueltos en una toalla salieron a la habitación para vestirse
Cenaron korokke que ambos prepararon y limpiaron el reguero que dejaron en su lucha en agua. Después se alistaron a dormir en la habitación de moreno, ya que la noche estaba húmeda y el tatami estaba mojado.
El calor los despertó muy temprano y sudados por lo que se dieron una ducha rápida. Revisaron el jardín recién plantado pero como la tierra seguía húmeda por el día anterior no tuvieron que regarlo.
-¡No quiero moverme, me cocino vivo!- se quejaba el rubio pues no sabían que hacer ese día
-¿Y si entrenamos?- propuso
-No quiero estar en el sol -
-No tenemos que salir, sígueme-
Caminaron hasta el dojo de la parte este de la construcción
-Aquí pero solo taijutsu, tampoco quiero destruir mi casa-
-De acuerdo-
Ambos ninjas se prepararon y al mismo tiempo se lanzaron a atacar, las patadas y los golpes no se hicieron esperar aunque en algunos momentos más pareciera un juego por los gestos y las burlas.
La mañana y parte de la tarde se les fue intentando derribar al otro quedando en empate y sin ganas del desempate
-Toma- le extendió una botella de agua
-Ahora entiendo porque la vieja nos advirtió lo de la deshidratación. Siento mi lengua más seca que el desierto de Suna-
-Vamos a bañarnos-
-¿Quien primero?- el moreno le dedico una mirada severa al mismo tiempo
-Ayer así nos bañamos, además los dos somos hombres-
-Por mi no hay problema-
Después de ducharse empezaron a sentir las consecuencias del entrenamiento
-Tienes moretones teme-
-¿Y quién crees que es el culpable?- suspiró -y lo peor es que no me queda analgésico-
-No te preocupes teme yo tengo- dicho esto, el de piel tostada empezó a rebuscar en su mochila hasta hallar un pequeño recipiente
-¿No será el que te dio Hinata en el examen chunnin, o si?- preguntó receloso
-No, este me lo dio la oba-chan. Deja te lo pongo- una gélida mirada fue su respuesta -solo quiero ayudar-
-No necesito tu ayuda-
-No seas malagradecido-
La discusión dio paso a un forcejeo, en el cual un roce en los pies del moreno le provocó una risita
-¡Tienes cosquillas!- exclamó el rubio por su gran descubrimiento para poner su sonrisa zorruna
-No te atrevas dobe- advirtió, aunque de nada sirvió para evitar que el otro niño se le lanzara encima y empezara a hacerle cosquillas y por más que intento terminó soltando carcajadas, pero por supuesto no se quedo quieto pues respondía a los ataques girando y moviéndose por toda la cama.
Si percatarse, quedaron cerca del borde por lo que en el siguiente ataque Naruto cayó llevando consigo a Sasuke
-Auch- se quejo al principio -¡ay!- gritó al sentirse aplastado
-Por fortuna quedaste abajo- comentó burlesco
-¡Bastardo quítate!-
-Mmm...no-
-¡Sasuke!- reclamó indignado y empezó a removerse, el moreno sonrió para después acomodarse en la cadera de rubio y sujetar sus muñecas por encima de su cabeza dejándolo inmovilizado
-Solo tienes que decir las palabras mágicas-
-¡Jamás!-
-¡Dilo!- retó acercando sus rostros
-¡Nunca!- recalcó
-Tenemos toda la noche si quieres, pero tengo hambre así que acepta tu posición de una vez-
-¡No!- afirmó removiéndose pero siendo inútil para librarse del sometimiento
-¿Te rindes?-
-Eres odioso ¿sabías?- giró su cara y suspiro derrotase- me...me rindo- escupió indignado
-¿Ves que no fue tan difícil?- preguntó sarcástico mientras se ponía de pie
-¡La próxima vez yo seré el de arriba!-
-En tus sueño usuratonkachi-
-¡Mas te vale preparar una buena cena!-
Escuchaba el agua correr mientras curioseaba entre los estantes del Uchiha, estaba tan entretenido que no se fijó en el silencio-¿Qué crees que haces dobe?- brincó al verse descubierto
-Jeje, nada teme- se rascó la nuca con nerviosismo
-Eres un caso perdido. Solo no desordenes nada-
-Claro-
Rodó los ojos y se tiro en su cama a leer un pergamino sobre el katon
-Teme, teme- lo sacó de su concentración el incesante llamado de su compañero-¿qué es esto?- le mostro un DVD
-es una película infantil dobe-
-¡Oh! ¿Y de que trata?-
-¿En serio nunca viste Magic Tree House? tendríamos como cinco años cuando la estrenaron-
-No- susurró. Un deje de tristeza opaco sus ojos haciendo que el azabache se recriminara por sus palabras
-¡Rayos!- pensó - solucionémoslo -
-¿Cómo?-
-¿Que te parece un maratón de todas las temporadas de Magic Tree House?-
-¡Como en el cine!-
-Si cerramos las cortinas podríamos simularlo-
-Pero faltarían las golosinas-
-Pues... -la misma idea cruzó por su mente, rápidamente tomaron sus monederos y salieron hacia el supermercado de la villa.
-¡Palomitas con extra mantequilla teme!-
-Pero soda de manzana-
-Con tal de que no sea de tomate- murmuró
-¿Que dijiste?-
-Que faltan unos dulces Sasuke-
No le creyó- yo no quiero- pero tampoco quería iniciar otra tonta pelea
-Pues yo sí, adelántate a la caja -
-No tardes o me voy sin ti- amenazó
Con los bocadillos listos y el cuarto del azabache simulando ser un cine inicio un maratón de clásicos infantiles que duro todo el día y parte de la noche al quedarse dormiros en algún momento sin darse cuenta.
-¿Y si vamos al rio? quiero nadar-
-El agua tal vez esté caliente-
-De todas formas seria refrescante-
Una idea se le cruzó por la mente aunque no estaba muy seguro -te voy a enseñar algo- se convenció
-¿Qué?-
-Vamos y no protestes pero lleva tu ropa de baño-
Con todo listo se adentraron en la barrio Uchiha dejando atrás las casas e ingresando a un bosque. Treinta minutos después llegaron a un manantial de agua cristalina.
-¡Esto es increíble teme!- Naruto se acerco a la orilla y remojó su mano -¡esta helada!-
-Es porque un río subterráneo alimenta el manantial-
-¡Eres egoísta Sasuke, se supone que somos amigos y nunca me habías traído!-
-No había venido aquí en años-
-¡Ya no importa!- gritó el rubio, se sacó la playera y corriendo se tiró al agua
-¿Qué esperas?¡ ven!-
-Ven Sasuke, el agua esta deliciosa- lo llamó Itachi, inconscientemente retrocedió unos pasos
-Sasuke-
-¡Sasuke! ¡teme!- su apodo lo sacó de sus recuerdos -¿estás bien? te pusiste pálido-
-No es nada- contesto rápidamente, retiró su playera y tranquilamente ingreso con su compañero
-Sigo diciendo que estás raro-
-Imaginaciones tuyas-
Mojarse la cara, competencia de aguantar la respiración, clavados y algún intento de ahogamiento accidental fueron las actividades del día
-¿Me vas a decir que te pasa?- irrumpió el rubio a su lado sobresaltándolo
-Este lugar era nuestro sitio favorito -
-Tu y…-
-Itachi, siempre que podíamos veníamos. En los veranos nos escapábamos de los entrenamientos para venir, aquí jugaba conmigo y me enseño a nadar-
-Sasuke-
-No había regresado desde la matanza...hasta hoy y la verdad, no sé porque te traje-
El de piel tostada lo abrazó sin saber que más hacer, minutos después recibió respuesta de parte del moreno. Se quedaron así, sintiendo el calor Y la comprensión del otro.
-Hay que volver, ya oscureció- hablo el ojinegro
Lentamente se separaron, observaron sus ojos unos segundos para darse espacio y salir del agua. El trayecto de regreso fue en completo silencio, se ducharon por turnos, primero Sasuke y de último Naruto, el cual encontró al moreno dormido de lado en su futón
-Teme- murmuró, pues no se creía que su amigo estuviera del todo bien
Escuchó el murmullo del rubio pero prefirió seguir fingiendo estar dormido
Sintió movimiento al lado y abrió los ojos fijándose en su compañero
-No...mamá... sangre... muertos...¡no!- escuchó decir mientras se removía
-Sasuke- lo llamó intentando despertarlo -Sasuke ¡Sasuke!-
Se sentó bruscamente empapado en sudor y con la respiración agitada -¿qué pasó?- preguntó confundido
-Tenías una pesadilla-
Sujeto su cabeza con sus manos e intento regular su respiración
-¿Son frecuentes tus pesadillas?-
-No son pesadillas... son mas como recuerdos- murmuró
-Debe ser duro vivir en el lugar donde asesinaron a tu familia- comentó
-Más de lo cualquiera se podría imaginar-
-¿Teme?- cuestionó sorprendido ya que no esperaba respuesta
-No puedo caminar por las calles del barrio sin sentir nauseas por lo que avanzó por los techos, no me gusta la obscuridad así que enciendo la luz de toda la casa hasta el amanecer, no salgo de mi casa porque en realidad... no me gusta estar aquí. Es por eso que por años fui a sentarme al muelle, para no llegar a una casa sola y vacía-
-Entonces… ¿qué no te mudaste? el tercero te hubiera ayudado-
-No puedo, pese a todo esta es mi casa... es todo lo que me queda de ellos-
-Tus padres estarán contigo siempre-
-No lo siento así, hay días que no logro recordar cómo eran sin la ayuda de una fotografía-
Soledad, frustración y mucho dolor de años acumulados llego al límite en amargas lagrimas que salieron de los ojos negros mientras se abrazaba a sí mismo
-Tranquilo Sasuke- intentaba calmarlo el rubio mientras lo abrazaba; sintió al moreno sujetar su playera y el llanto se volvió más intenso.
Así se mantuvieron hasta que solo se escucharon hipidos
-¿Mejor? el moreno asintió en respuesta y lentamente se separó -Sasuke, te has guardado tu dolor mucho tiempo pero soy tu amigo y cuando te sientas triste ven conmigo, yo siempre estaré ahí para ti finalizo el rubio depositando un suave beso en la frente del Uchiha; este ultimo sonrió levemente susurrando - gracias Naruto-
Uzumaki se puso de pie extendiendo su mano hacia el moreno él cual la tomo inmediatamente, se dejo guiar por la casa apretando la tostada extremidad al caminar entre penumbras.
Finalmente llegaron a la habitación del dueño
-Durmamos un poco, lo necesitamos-
-Generalmente no puedo volver a dormir- no especifico pero el rubio entendió
-Yo cuidare tu sueño, lo prometo- tal seguridad convenció al azabache
Se metieron a la cama y el jinchuriki atrajo al moreno para que se acomodara, lo cual hizo con gusto y sintiendo como jugaban con sus negros cabellos se quedo dormido.
El sol le molesto así que se acomodó mejor volviendo a dormir sintiendo un agradable calor. Un rato después sus ojos querían abrirse pero luchaba por lo contrario, desganado alzó sus parpados encontrándose unos hermosos orbes azules observándolo curioso
-Buenos días-
-Hola- saludó
-¿Dormiste bien?-
-Si-
Desayunaron y no sabían cómo actuar, lo de noche anterior seguía demasiado presente y no sabían cómo manejar esas muestras de afectos
-Naruto- llamó captando su atención- lo de ayer... yo... -
-No tienes que decir nada-
Sin encontrar las palabras adecuadas lentamente acerco su rostro al contrario a la vez que cerraba los ojos, a escasos milímetros
-¡Yo!- apareció Kakashi en una nube de humo -¿interrumpo?-
Por instinto ambos niños se apartaron -¡NO!- gritaron al unísono
-¿Que quieres Kakashi?- preguntó bruscamente el moreno
-Solo pase a avisarles que las misiones se reanudarán pasado mañana, así que nos vemos a las 9:00 donde siempre ¡adiós!- el peligris se fue como llegó
El silencio en que se quedaron los niños era incomodo, no sabían si debían terminar el contacto o como explicar la situación
-Has...has sido muy amable teme pero debo irme-
-¿Porqué?-
-Tengo que preparar las cosas para la misión-
-Si, hay que alistarnos- concedió el moreno no muy convencido
Sin mucha ceremonia el ojiazul guardó sus pertenencias y se marchó a su hogar dejando al Uchiha desconcertado y con una desagradable sensación en su pecho.
Naruto llego a su departamento, lo limpió, afiló sus armas y hasta hizo el supermercado para apartar su mente de su azabache amigo.
Tanto desconcierto lo agotó y se durmió temprano; cerca de las dos de la mañana escucho ruidos y afianzó el kunai que ocultaba bajo su almohada, afinó sus sentidos y se lanzó por el invasor
-¡Soy yo dobe!- se defendió el intruso
-¿Sasuke?- el resplandor rojo de los ojos confirmaron su identidad -¿teme que haces aquí?
-Olvidaste ropa en mi casa-
-Y esperaste a la madrugada para traérmela. No me creas tan estúpido, dime la verdad-
-Solo si no te burlas- pidió
-¿Porque lo haría?-
Suspiro armándose de valor- no... No podía dormir, no me fije cuando llegue aquí, pero si te incomoda me voy-
-Si no te importa estar un poco apretado durmamos- respondió el rubio
Se acomodaron en el lecho y se internaron en el mundo de Morfeo.
Se despertó temprano y observó a su compañero dormir, intentó deslizarse fuera pero se vio apresado por el de cabellos dorados, no luchó solo se quedo ahí, frente a él.
-No me dijiste la verdad- aunque no dormía había cerrado los ojos, fingió no escuchar -no me engañas-
-No quería estar solo- confesó en la misma posición
-No estás solo, me tienes a mi-
-Creo que esa es la razón por la que vine- seguía sin abrir los ojos
-Me alegra que confíes en mi-
-Es más que eso- murmuró
Sintió una leve presión en los labios y abrió los ojos de inmediato
-Eres muy importante para mí, no quiero que te sientas triste o solo; siempre me tendrás a mí, pase lo que pase yo estaré contigo- prometió
Su corazón latía rápidamente y los ojos azules que observaba le brindaban seguridad y felicidad
-Lo sé- aseguró
Lentamente acercaron sus rostros mientras cerraban los ojos, sus labios se tocaron y así permanecieron, en un beso pacifico y amoroso, pero sobre todo puro e inocente.
***
Un mes después y tal como había decidido Jiraya partían a entrenar; habían participado en los exámenes chunnin llegando a la última ronda, destruyendo la arena en su combate y terminando empatados. Un par de noches en el hospital, en la misma habitación, fue suficiente para quedar como nuevos.
Estaban en la puerta principal de la Villa con mochila a los hombros, los acompañaban sus senseis Iruka y Kakashi, la Hokage y su compañera de equipo
-Cuídense, cuídense, cuídense- no dejaba de repetir mientras los abrazaba a ambos
-Estaremos bien Sakura-chan-
-Los voy a extrañar mucho a los dos-
-Nosotros también te extrañaremos ¿verdad teme?-
-Si- secundó
-Esforcémonos mucho para ser grandes ninjas- animó el rubio
-Prometo estudiar mucho para ser una buena médico-
-Sabemos que lo serás- apoyó el moreno
-E iremos a misiones difíciles sin Kakashi- exclamó el rubio
-Eso será lo mejo-r se burlo el azabache
-¡Alumnos malagradecidos!- reclamó Hatake
-Te lo mereces Kakashi- lo calló Umino -chicos aprovechen esta oportunidad y no se pongan en peligro innecesario ¿entendido?... Naruto- el aludido hizo un mohín y los demás rieron -les traje esto- entregó un bento a cada uno -les durará unos días-
-Gracias Iruka-sensei- dijeron ambos
-Aprendas cosas nuevas pero no olviden las enseñanzas adquiridas, los estaré esperando para probarlos- fueron las palabras del peligris
-Tengo buenas expectativas en ustedes, no me decepcionen- habló la Senju -procuren que su maestro no se meta en problemas y si lo hace, no lo imiten-
-¡Tsunade!- exclamó ofendido Jiraya
-Uno de los vicios ninja no es problema para ellos, no les inculques los otros- amenazó
-De acuerdo vieja- aceptó -como si tú no fueras una borracha apostadora -murmuró
-Jiraya…- siseó
-Basta de despedidas, es hora de partir- apuró el sannin de los sapos antes de ser víctima de la rubia.
Con una sonrisa y mucho entusiasmo emprendieron su viaje. El rubio tomó la mano del moreno y entrelazó sus dedos, recibió un leve apretón por respuesta
-Saben mocosos- habló el mayor -tendrán que darme un poco de tiempo para acostumbrarme eso- señaló el agarre
-¿Y a esto Ero-sennin?- cuestionó Naruto para unir sus labios con los de Sasuke por unos segundos
-¡USURATONKACHI!- gritó el Uchiha con un leve sonrojo, recibió una gran sonrisa por respuesta -eres un caso perdido- negó con diversión
Su vida no había sido fácil y tenían la certeza de que el camino que todavía les faltaba sería largo, muchas veces triste y con dolor pero mientras se tuvieran el uno al otro superarían cualquier obstáculo.