POV Jonghyun
Jodido día de mierda, jodidos profesores y sus pruebas de mierda, jodidos minutos que pasan tan lentos, jodidas manos ¿Por qué no escriben mas rápido,ah? , Jodido asiento incomodo y distractor, Jodido idiota que habla con Kibum ahora en el Patio de la escuela mientras yo estoy aquí cual imbécil terminando la jodida prueba de Ciencias Sociales.
Mierda, aun quedaban 20 minutos de la prueba y Kibum había sido uno de los primeros en entregar el bendito examen y sin más el cabron del profesor lo saco diciéndole “Joven Kim, debería dar una vuelta y despejarse pues su trabajo aquí termino” a lo que el de la forma habitual y con esa hermosa sonrisa plasmada en su rostro dio un asentimiento con la cabeza y salió del salón.
Mierda ¿De qué demonios le hablaba esa sabandija a Kibum? ¿Por qué él estaba sonriendo y riendo?. Mis nervios se estaban crispando entre mas pasaban los segundos y una mierda que podía concentrarme en el examen.
Exasperado suspire de forma pesada y todos se giraron a darme una rápida mirada y con la cara de pocos amigos que me cargaba en esos momentos no hicieron más que ignorarme o girarse de nuevo al jodido examen.
—Joven Kim Jonghyun, si usted ya ha acabado no distraiga por favor a sus compañeros y retírese. No sin antes entregarme su prueba. — Que le den al viejo.
—Aun no acabo. — refunfuñe dándole una rápida mirada de nuevo al patio que era escena ridícula de aquellos dos.
—Acabaría mas rápido si dejase de ver por la ventana, regrese a su lugar ya que el joven Kim Kibum no está. — Mierda, Mierda, Mierda ¡JODER! Bien ahora no vería ni una pisca mas de las acciones de Kibum.
Exasperado regrese a mi lugar propio, deje caer el examen junto con la palma de mi mano haciendo sonar el pupitre y me senté echando la silla hacia atrás. Menuda mierda, estaba de ogro y sabia cual era la razón, cierta persona de mejillas rosadas como algodones de azúcar.
Sonreí cual idiota al imaginar lo dulces que sabrían seguramente sus mejillas, lo suaves que se sentirían al tacto contra mis—
—Muy bien entreguen exámenes. — Mierda, Mierda, Mierda .
Había pasado el resto el tiempo pensando en Kibum y aun no acababa el examen, contesto a lo bruto los incisos y a otros les di una leída a la velocidad de Flash. El Profesor tomo todos los exámenes y sus cosas y salió del salón. Por fin.
Me pare de inmediato y no mire a Kibum por ningún lado por más que me esforcé en encontrarlo.
—¿Qué pasa Jjong?. — su suave voz me hizo girar hacia él, ¿Cuándo llego?.
—Nada, me estreso una mierda el examen. — soltó una pequeña risita y me miro divertido. —¿Qué?. — pregunte de la misma forma, alzando una ceja.
—Nada, es que todo el tiempo me la pase intentando pasártelo pero solo me sonreías mientras te hablaba y te decía los incisos. — cubrió su boca y rio bajito—¿No querías mi ayuda Jjong?. — pregunto interesado. Mierda, todo ese tiempo me la pase mirando sus esponjosos y pequeños labios y sonriéndole cual idiota, porque estaba seguro que así me veía en esos momentos.
—No es que no las quisiera Bum, el pobre Perro tiene un retraso y se bloqueo por completo ¿No, Kim?. — dijo el Renacuajo dándole una sonrisa de medio lado.
—Posiblemente se bloqueo ¿Contestaste todo Jjong?. — ni siquiera pude protestar ante la estupidez de Choi.
—Si.. algo, igual no importa el examen no valía mucho. — dije, dirigiendo mi vista hacia la entrada donde estaba de nueva cuenta aquel sujeto que estaba con Kibum. ¿Qué mierda quería ahora?.
—Jjong… el examen valía el 70% de la calificación final….— Kibum coloco un rostro de horror ante mi desinterés.
—¿Ah, sí?. —
—Si. — esta vez Minho y Kibum mencionaron al unisonó la afirmación. —Oh Kim esta vez metiste la pata ¿Dónde tienes la cabeza?. — dijo Minho en negativa.
—Pregúntale a Kibum .. — dije seco mirándolo con atención mientras abría los ojos de par en par. — Creo que te buscan en la puerta. — dije lanzando mi mirada hacia el lugar señalado, Kibum se disculpo varias veces y fue hasta donde el insecto ese esperaba con una boba sonrisa.
A decir verdad no escuchaba absolutamente nada, sin embargo el rostro del chico parecía irse derritiendo con cada palabra soltada por Porcelana, este último se veía apenado y ciertamente se disculpaba muchas veces. Aquel chico solo asentía y de un momento a otros sus ojos parecieron perder el brillo de hace unos instantes.
—¿Qué tanto miras Perro?. — Minho alzo una ceja y me miro interrogante, sabía que él sabía lo que pasaba solo se hacia el estúpido.
—Sabes a quien miro Choi. —
—¿Cuánto tiene que le diste la rosa? ¿3 días o quizá 4? Casi es la semana y Kibum pareció no entender de qué iba aquello ¿Se lo dirás?. —
—A su tiempo….—
—Alguien se te adelantara . —
—Partiré su cara si es así. —
—¿De Kibum?. — Joder
—¿Eres retrasado Renacuajo? . — rodé los ojos y me senté de nuevo, la siguiente clase eran las Matemáticas con el Profesor Lee.
Una última mirada le dedique a Kibum ( por el momento) quien se despedía del chico que ahora lucia con los ánimos bajos. Enseguida se encamino hasta su pupitre, me miro y me sonrió de esa forma cálida y dulce, yo solo atine a darle una media sonrisa. Estaba cabreado y sabía que era culpa de mis putos celos.
La clase comenzó , el Profesor Lee entro y comenzó a dictar como loco apenas puso sus libros sobre el escritorio. Eran varios problemas que teníamos que resolver por nuestra cuenta, pasar al frente si así se requería y explicarlos. No tenía ganas de absolutamente nada, ni siquiera de intentar resolverlos pero estaba haciendo un esfuerzo enorme por ya no mirar a Kibum y por apartar aquella sensación inquietante que tenia encima desde que los vi platicar a él y al insecto aquel.
—Kim Kibum, pasa a resolver este problema a la Pizarra. — pidió el Sr. Lee.
Kibum algo despistado y torpe se levanto de su asiento haciendo que se moviera de mas este provocando las típicas risas estúpidas que no se hicieron esperar a lo ancho del salón. Aquello me estresaba , aun así me dio un respiro saber que Bum poco le importo o de los nervios ni siquiera lo noto.
Paso a un lado mío y enmarco una hermosa sonrisa de nuevo, aquella que parecía tener fuerza de un tiempo acá, aquella que brillaba hasta en los días más nublados, aquellas sonrisa que hacen que sus pómulos se eleven de mas y sus ojos se miren pequeños y alargados. Hermosos, parecían montañas de malvaviscos pues ese rosita en sus mejillas y el volumen de estas ayudaban bastante a echar a volar mi imaginación.
Un nuevo apodo para Bummie.
De nuevo puso ojos de perro a medio morir y sonreí perdido y bobo, mientras se encontraba con la tiza para pizarrón en mano y se disponía a resolver la problemática ecuación.
Al carajo mis celos idiotas, al carajo las matemáticas; solo lo miraba a él. Era su pequeña espalda, sus caderas anchas a pesar de ser un chico, sus brazos y piernas muy tocables, muy deseables , rellenitas ( aun) y su pequeño abdomen con esa curva que para él era en exceso incomoda y molesta, pues deseaba uno plano.
Perfecto, esa era su palabra. Me gustaba demasiado como para cegarme en otras cosas , como para dejarlo ir o perderlo por otro insecto ; Kibum era tan dulce y apetecible como un malvavisco.
—Muy bien Kibum-si, regresa a tu lugar. — Kibum intento devolver la tiza a las manos del Profesor , sin embargo este me miro con el ceño fruncido y continuo. — Kim Jonghyun, pasa a la Pizarra y explica el problema de Kim Kibum paso a paso. Estabas distraído y no repliques, Kibum dale la tiza. —
Mierda, …. Fue culpa de Mejillas de Malvavisco.
Todos se quedaron en silencio a excepción de 2 risas : La del Renacuajo Choi y la risita adorable de Bum.
Me levante con molestia, exhalando y rascando mi nuca camine hasta encontrarme con Kibum quien me tendió la tiza entre sus dedos. La tome y por una fracción de segundo nuestros dedos se rozaron haciendo que el levantara la mirada y se topara con mis ojos, aquellos ojos que podían casi ver el color de su alma.
3 segundos estuvimos así hasta que ambos reaccionamos y continuamos con nuestro andar respectivo, no sin antes Kibum dejo escapar en un pequeño susurro un “Figthing”
Sonreí ante sus buenos deseos de Bum y con ese porte de cabron superior me dirigí a la pizarra.
—Bien, pues lo que aquí hizo mi compañero Kibum fue despejar esta variable convirtiéndola en…..— continúe toda la jodida explicación, estaba babeando y distraído en su momento pero no era un retrasado y sabia del tema.
Mi explicación parecía dirigida a una sola persona en especifico, el me miraba con ojos brillantes y atento, no supe en qué momento comencé a tener más soltura a tal grado de sonreír aunque me percate de esto porque al concluir mi boca dolía de tanto realizar esta acción.
Las cara de atónitos e imbéciles del salón no faltaron; transforme mi rostro de nuevo a aquel tipo malo que todos conocían para dejar las cosas claras.
—Muy bien Jonghyun, toma asiento. — cuando me dirigí hacia mi asiento la bendita campana sonó era momento de largarnos, gracias. Solté un suspiro de alivio y me relaje por completo.
—¿Cansado Jjong?. — dijo Bum, asomando su cabeza a un lado. Su acción fue adorable.
—Un poco. —
—Y te toca trabajar. — hizo un pequeño mojin con la boca, torciéndola un poco. — ¿Tendrás un día agitado?. —
—Pedí el día, ¿Hoy pueden ir a mi casa?. — lo solté así de repente. — Tú, Choi ¿Podrás?. —Minho se quedo pensativo un momento y asintió brevemente.
—Claro, no tengo planes para hoy ¿Ya amueblaste? No pensaras que los chicos duerman en el suelo frio o ¿si, Jonghyun?. — soltó una sonrisa burlona, sabía que era lo último que haría aunque pensándolo bien el renacuajo dormiría en la bañera.
—Alguien más dormirá en la bañera Choi, y no serán los chicos ni yo. — le regrese la sonrisa burlona.
—Oh no te preocupes Jjong, si quieres puedo decirle a Tae que llevemos bolsas de dormir y—
—Wow Wow.. ¡espera! Vas rápido bonito. — Puse mi mano sobre su cabeza, a pesar de la diferencia de estaturas, de esta forma lucia tan pequeño Kibum—En primer lugar, ya tengo todos los muebles en casa, está equipada perfectamente. Segunda , si no la tuviera arreglada ¿Me crees capaz de abrir la boca e invitarlos?. —
—No. — contesto tímido bajando la mirada y mordiendo su labio, joder Kibum.
—Tranquilo Mejillas Rositas, lo tengo todo bajo control. — le guiñe el ojo y el solo atino a sonrojarse y asentir.
En la entrada de la puerta esperamos a Taemin quien se puso feliz con la noticia ¿Añoraba tanto esto?.
—Eso está Súper Duper Incre-Genialisimo, haremos una noche genial. —
—Minnie mañana tenemos escuela ¿Lo recuerdas?. — sentencio Kibum al diablillo de su primo.
—¿Incre-Genialisimo? ¿Existe esa palabra?. — pregunto Minho bajito hacia mí.
—Tienes razón Minho. — subí el tono de voz un tono un poco más alto para llamar la atención de Taemin. — Minnie no sabe lo que dice. — Minho me miro incrédulo abriendo mas sus ojos de rana hacia a mí. Me asesinaría pero valdría la pena.
—¿Te parece tonto, Choi Minho, ¡AH!?. — exclamo Taemin poniendo a Minho alerta y confundido por la situación, me miro con cara de “Te matare”.
—¿Qué? No, no yo- yo no lo dije Minnie. — intento excusarse con el menor pero pareció ignorarlo olímpicamente.
—¿Sabes que Rana? Jodete. — le giro los ojos y se adelanto. Me reí a lo bajo y Minho termino golpeando uno de mis costados. Se veía molesto pues sus ojos me clavaban cuchillas ( si pudieran hacerlo claro estaba) , aun así se adelanto hasta con Taemin y se estaba disculpando de mil y un forma e idiomas.
—Jonghyun, eso fue descortés. — sonó la vocecita de mi conciencia de rosadas mejillas.
—Oye, no fue para tanto Kibum. — alcé una ceja y el hizo una mueca con la boca en desacuerdo. —Además la Rana se notaba aburrida, yo le pongo diversión a su vida. — solté sonriendo triunfal.
—Aja.. — me dio una última mirada y un rodar de ojos leve se hizo notar.
—Oye, Bum ¿Estas enfadado conmigo?. — me puse frente a él lo que hizo que se sorprendiera.
—Jjo-Jjong eso fue muy grosero, deberías decirle a Minnie que tu lo dijiste y no Minho. — me miro paciente. Oh no por favor esos ojitos no.
—No hay necesidad Bummie, míralos. — señale a las “victimas” de mi “malvado” acto. — Ya están bien,… supongo. — Minho se veía no más relajado pero Taemin pareció ignorarlo por completo, al menos pareció haberlo perdonado.
—Si, supongo. — miro atento.
Unas calles más y ya estábamos en mi departamento. Era realmente agradable a primera vista, no era mal vecindario y la fachada era modesta aunque con estilo.
—Entremos. — metí la llave y gire la manija, todos miraban a sus alrededores. La verdad es que me había esmerado en arreglar el departamento lo mejor posible hasta pude darme el lujo de contratar a uno de esos tipos Decoradores de Interiores para que ayudasen a arreglar mi nuevo hogar. Los muebles eran obscuros de madera pintada de negro o bien madera obscura. Los sillones eran negros, la cocina era blanca con piso de azulejos de igual blancura, mientras que el piso restante de toda la casa era de tablones de madera obscura. —Y bien ¿Les gusta?. — intente mirar sus expresiones y conseguí sorpresa, asombro y brillo.
—Esta vez te superaste Kim, felicidades por tu nueva casa. — Minho extendió una de esas sonrisas que harían suspirar a mas de una chica, comenzaba a sentirme mal por el mal rato que le había hecho pasar.
—¡Wow! Es hermosa tu casa Jonghyun en verdad muy genial. Me hiciste caso y nos invitaste. — dio pequeños codazos Minnie. — Gracias Jjong y felicidades. — una sonrisa cálida e infantil en su rostro no se hizo esperar.
—Es muy bonito tu departamento Jjong, va mucho con tu estilo. Me da tanto gusto por ti felicidades y gracias por la invitación. — hizo una reverencia Kibum y sonrió de forma gélida y dulce.
— Gracias y no hay nada que agradecer. — devolví la sonrisa, quería que se sintieran como en su casa. — Bueno pueden dejar su cosas en donde gusten, si desean ocupar el teléfono háganlo. Siéntanse libres ¿de acuerdo? Iré a acomodar la recamara . No está lista. —
—De acuerdo Jjong. — escuche decir a Taemin quien seguía ideando cosas y hablando mucho.
La recamara tenía una cama matrimonial, si, compre una cama así de grande para mí. Me gusto y estaba barata además que era reconfortable. Aparte de la cama había dos muebles de noche a los lados, 3 pinturas en la pared de frente a la cama, un mueble con espejo a un lado, el closet y finalmente un pequeño pero confortable sillón que tenia de vista hacia la ventana del mismo cuarto. Era espacioso así que intente acomodarlo con tantas sabanas y cobijas así como almohadas y almohadones para que pareciese cuarto árabe o algo así.
Les impresionaría, lo tenía por seguro
Fin POV Jonghyun
POV Kibum
—Jonghyun ¿habrá comprado aperitivos, bebidas, dulces y esas cosas?. — pregunto Minnie rebuscando en su mochila. — Podríamos ir a algún mini-súper y comprar todo eso ¿no?. —
—Buscare en su refrigerador y en los estantes. — dijo Minho, dirigiéndose a la cocina, yo asentí y me quede con Tae.
—¿Traes dinero Minnie?. — pregunte curioso, el era un chico muy precavido, siempre.
—Si, no sé porque pero sabía que hoy gastaría así que traje algo de mi dinero ¿Tu traes Bum?. —
—Si también tengo un poco en mi mochila, supongo que alcanza. — sonreí y el devolvió la sonrisa.
—Al parecer nuestro chico anfitrión solo tiene algunas cosas pero harán falta. Puedo ir a comprarlas si quieren. —
—Oh vaya, gracias Minho ¿Falta mucho?. —
—No, no mucho solo algunas cosas. Tengo dinero lo pagare no se preocupen. —
—Hey Hey, Príncipe no quieras lucirte ¿si?. —lo miro de arriba abajo Taemin. — No eres el único con dinero. —
—Yo lo decía de la mejor forma Minnie. —
—Aja. —
Parecía que Tae seguía molesto con Minho así que mala idea sería mandarlos juntos a comprar las cosas restantes por lo que pensé que sería conveniente acompañar a Minho.
—Vamos Keroro, repartamos el gasto entre ambos. — sin embargo Minnie decidió al final ir con Minho, este ultimo sonrió alegro y se dirigieron hacia la salida. —Regresamos en un rato Bummie ¿Algo en especial?. — pregunto Tae.
—No nada Minnie, con cuidado. —
—¡Si!. — cerraron la puerta tras de ellos y me quede solo en la gran sala. Era espacioso y muy agradable el departamento de Jjong.
¿Seguiría ocupado?
Me dispuse a entrar a la habitación donde se había adentrado. Al girar la perilla y abrir la puerta me tope con algo increíble y hermoso.
La habitación estaba un poco a obscuras pero ese no era problema porque hermosas figurillas fluorescentes brillaban de color azul y blanco en el techo, y a los alrededores un montón de mantas, cobijas, almohadas de todos tamaños formaban lugares para reposar y recostarse. Como pequeñas carpas 2 en total; 1 por encima de la cama y la segunda a los pies de la cama. Era perfecto. Di unos pequeños pasos y tropecé. Torpeza ven a mí.
—Auch. — sentí un poco el dolor de la caída pero no pude evitar reír pues tantas almohadas grandes definitivamente amortiguaron mi caída.
—¡Kibum! Kibum ¿Estas bien?. — Jonghyun salió de una puerta, se miraba preocupado pero después de mirar mi rostro se torno divertido. — Hey, ¿Qué hacías muñeco?. —
¿Muñeco? Me dijo ¿Muñeco? Oh por mi dios.
—¿Ah? Si estoy bien- Yo!- bueno quería saber si estabas aquí y luego… y luego .. ¡Wow! Jjong es hermoso ¿Cuándo lo hiciste?. — estaba sorprendido y las palabras en mi léxico comenzaban a faltarme, siempre me pasaba aquello cuando estaba a su lado.
—Lo comencé ayer por la noche, ¿Te gusta?. — dijo recostándose a un lado de mi. Ambos mirábamos hacia el techo el cual no dejaba de brillar de hermosa forma.
—¡Claro! Es hermoso Jjong y divertido. — me gire a mirarlo y ahí nuestras miradas se quedaron atrapadas una a la otra, mire como paso saliva con dificultad al ver el bajar y subir de su nuez de Adán. Kim Jonghyun el hombre con la quijada y nuez de Adán más hermosa que haya visto jamás.
—Me alegro que te gustara, Mejillas Rositas. — levanto su mano lentamente y poso dos de sus dedos sobre mis mejillas, rozando con la ante parte de las yemas de los dedos estas. Sentí su tacto gentil y suave recorrer solo esa pequeña extensión de mi que al parecer le gustaba mucho.
Sus ojos profundos e infinitos miraban atreves de los míos, sentí mis mejillas arder y mi corazón acelerarse, fue ahí donde recordé la rosa que me había regalado hacia 4 días atrás. Aquella que estaba intacta en mi habitación, donde lucia hermosa y abría cada día mas.
—Kibum. — su voz ronca y un poco grave me saco de mis pensamientos de ensueño y nublosos. —¿Qué es lo que has hecho conmigo pequeña pieza de Porcelana? ¿Qué has hecho de mi hermosa criatura?. — sus ojos mostraban una intensidad y sinceridad que jamás había visto en el, era algo que llegaba hasta mi corazón y lo hacía dar brincos que no sabía si eran de alegría misma o nervios de estar así con él.
Sus dedos descendieron hasta mis labios dándole un pequeño y apenas susceptible contacto a estos.
—Estaba tan celoso hoy Bummie. — comenzó a hablar con aquella voz delirante propia de mi Anti-Héroe. — Tan celoso de que aquel sujeto estuviera tan cerca de ti, que te hiciera reír de la forma que lo hacía, que le sonrieras y que le dedicaras un tiempo que quizá no lo mereciera. — mis pensamientos volaron hasta Hyungsung, el chico que ese día había llegado hasta a mi charlando de cosas triviales y divertidas y termino confesándoseme.
Mi corazón tuvo que rechazar el suyo pues este tiene su latir a nombre de alguien más y ese alguien mas estaba recostado justo ahora frente a mi mirándome de una forma dulce e intensa.
—Yo- Oh… Jjo-Jjong era solo.. — mis palabras fueron calladas cuando sus dedos de nuevo dieron un suave roce sobre mis labios.
—No Gatito, me toca hablar. —me dedico una seductora y tierna sonrisa de medio lado, oh mi dios el aire está haciéndose pesado ¿verdad?. — No quería decirlo ahora, no en este tiempo sin embargo eh estado temiendo que cualquier imbécil llegue y quiera quitarte de mi lado. Oh joder Kibum, no sabes el tiempo que dedico a quebrarme la cabeza pensando las palabras y las acciones correctas para ti. — su voz comenzaba a ser un susurro solo entre él y yo. —Quería darte más de una rosa blanca pero aquella era la indicada para ti ¿sabes porque?. — me miro suplicante y con los ojos brillando de decisión, Oh mi Jjong.
Sin embargo ante la falta de palabras solo negué con la cabeza, las palabras se extraviaron en mi boca y el ardor en mis mejillas comenzaba a subir.
—Por que eres tu Kibum, por que no puedo parar de pensar en ti. Joder tu disipas mis miedos, mis fantasmas y toda aquella mierda que me rodea. No quiero lastimarte, me gustaría meterte en una caja de cristal para que nadie te tocara, para que nadie te hiciera daño y eso me incluye. — sus ojos se mostraron dolorosas antes su propias palabras, parecía molestarle ese algo.
—Jjong. — lo tome entre mis manos, acune su rostro. —Tu jamás me harás daño, eres una persona estupenda, maravillosa, tierna, fuerte pero sensible y sobre todo …— sus ojos estaban abiertos de par en par atentos mientras que su respiración pareció irse de si. —No eres mala persona Jjong, eres tan especial para mí. Te quiero demasiado Jjong, mucho —
Sentía que una sonrisa floja llena de todo sentimientos se apoderaba de mí, me le había declarado a Kim Jonghyun.
El se quedo estático unos momentos y después apego su rostro más a mis manos.
—Te quiero Kibum, joder si que lo hago. — sonrió encantadoramente .
—No quiero perderte como mi amigo Jjong. — su ojos se abrieron de par en par…. Oh , había empleado mal las palabras.
—N-no y-yo lo que . —
—¿No quieres salir conmigo Mejillas Rositas?. — Jonghyun enmarco su cejo fruncido, estaba confundido y no era para menos.
Estúpido de mi , le había dado a entender otra cosa.
—¡N-no!, espera quiero decir ¡Si!. — estaba nervioso, moría de los nervios, el solo me miraba atento. — Claro si t-tu quieres Jjong. — esto último fue más un susurro pues mi voz se fue apagando conforme avanzaba, la vergüenza era demasiada que luchar contra ella era inútil.
Jonghyun soltó una carcajada y después esos dulces ojos que siempre me miran sonrieron a la par que su hermosa boca.
—Claro que me encantaría Bummie, prometo cuidar de ti Bonito. — acarició mi mejilla, se acerco levemente y deposito un casto y cálido beso sobre mi frente. —Se lo diremos a Minho a Taemin por separado ¿de acuerdo?, el pequeño tornado es muy escandaloso y Minho me bombardeara. Comportémonos solo por hoy Porcelana. — me guiño el ojo coqueto y yo asentí.
No podía creerlo, estaba saliendo con Kim Jonghyun desde ahora.
_______________________________________________________________________________
La puerta sono y Jonghyun la atendió, yo estaba mirando la tele junto con él, por momento intento tomar mi mano aunque al final no lo hizo, me sentí un poco nervioso y ansioso pero quizá entendía que era complicado para el después de todo Kim Jonghyun era completamente heterosexual ¿verdad?.
—Tardamos demasiado porque Minho es un lento. — dijo riendo Tae, mientras dejaba las 2 pequeñas bolsas sobre le mesa.
—¿De qué hablas Minnie? Tú eras el lento. — dijo Minho en tono divertido, al parecer se habían reconciliado, continuaron hablando un momento. Nos reíamos cuando el teléfono celular de Jjong sonó.
—Ahora Minho sirve la botana. Los juegos están haya comencemos a patear traseros. — dijo en forma divertida y “malvada” mientras contestaba su móvil.
Fui hacia unas cajas nuevas de juegos de mesa, al parecer Jonghyun lo había comprado todo para hoy, sonreí ante esto sin embargo pensé en lo mucho que habría ya gastado y me agobie por ello.
—Joder, ¿Hoy?. — escuche decir a Jonghyun, gire hacia su dirección y solo atino a darme una débil sonrisa y hablar más bajo aun ¿Seria trabajo?.
Después de un rato el teléfono paso a manos de Minho quien parecía molesto con la persona del otro lado de la línea, Jonghyun se veía atento pero no molesto. Poco después terminaron la llamada con un — Bueno, es su decisión. — Jonghyun miro a Minho y Minho parecía no conectarse con él.
—Dime que no lo harás Kim. — Jonghyun miro a Minho y después este último suspiro pesadamente. —Haz lo que se te venga en gana, estúpido. — movió la cabeza en negativa y comenzó a sacar algunas de las botanas.
No entendía nada.
Comenzamos a Jugar palillos chinos y fue bastante estresante al menos para Minho y Jonghyun quienes se tomaban en serio estos juegos. Tae gritaba de vez en cuando pero terminaba cediendo ante el control de la ira. Pasamos a jugar verdad o reto después con la torre de rectángulos ( Jenga) para finalmente hacer el reto del Papero o Pocky por parejas haber quien dejaba justamente 1 cm de este.
—Recuerda Jonghyun dejar un centímetro, no cuenta besar a Kibum. —
—Aja. — apenas se le entendió pues sonrió pícaro contra el Pocky mientras yo literalmente temblaba, jamás lo había tenido así de cerca a mi rostro. Continuo comiendo de él y yo hice lo mismo.
Su boca estaba tan próxima a la mía y su mirada me dejaba en shock completo, sentí su fresco aroma chocar contra mi cuando un crujir me saco de mis pensamientos.
—Lo tenemos Mejillas Rositas. — señalo el pequeño trocito entre sus dedos. Minho y Tae hicieron lo mismo sin embargo al parecer Minho mordió de mas y al final resultamos vencedores.
Nos disponíamos a mirar una película cuando el teléfono de Jonghyun sonó de nuevo, esta vez no dijo ni una palabra y solo cerro el aparato.
—Tengo que salir, pero no tardare en regresar. — Minho no aparto la vista del televisor , de nuevo se veía furioso.
—¿A dónde iras Puppy?. — pregunto Minnie con la latente curiosidad.
—A hacer negocios, vuelvo en un rato. — me dirigió una última mirada y le di un rápido “ve con cuidado” antes de que el pausara el cerrar de la puerta y después se escuchara continuar con el acto de cerrarla.
—Menudo idiota. — dijo Minho mientras tomaba unas palomitas y las comía.
¿A dónde fuiste Jjong?
Fin POV Kibum
POV Jonghyun
El mismo lugar cerdo de siempre, la misma gente de mierda de siempre, los mismos viciosos hijos de puta de siempre. Nada había cambiado desde hace 8 meses, era la misma mierda de siempre. Aunque en esta ocasión quería acabar más rápido que en otras ocasiones, esta vez había gente esperando por mí, en casa.
Kibum
A mi pensamiento vino mi pequeño Bummie, en verdad sonaba mejor de esa forma MI BUMMIE.
—Bien, bien ¿Qué tenemos aquí? Si es nuestro Perro, Jonghyun . — dijo el imbécil de Ryan
—¿Dónde están?. — pregunte directo.
—Tranquilo, esta ocasión podrás elegir; Carreras o Pelea. —
—Vamos necesito largarme pronto, la pelea es certera ¿cierto?. — el cabron de Ryan palmeo mi nuca y retire su mano con molestia, me cabreaba que hiciera eso.
—Ese es el buen Jonghyun, por aquí. —
Entramos a lo que parecía ser un pequeño Ring bien equipado, a los alrededores la gente estaba ansiosa por ver sudor, sangre, golpes y mucho dinero.
—Sabes lo que tienes que hacer ¿No?. — asentí lentamente y me dirigí hacia el cuadrilátero. Me retire mi chamarra de cuero negra y solo me deje la playera negra de tirantes gruesos y mis desgastados pantalones.
El tipo con quien pelearía era más alto, mas grande y más estúpido; si , ganaría la pelea.
Había demasiado dinero en juego por ello me anime a venir, aunque Choi definitivamente reprobara mi acción y ni que decir de Mejillas Rositas, si le hubiera dicho posiblemente no habría venido acá si él me lo hubiese pedido.
Me prepare y en unos momentos estuve listo para la pelea, el Ring sonó y con ello comenzó la lluvia de golpes certeros. 1, 3 y 3 hasta sus costados, en la quijada un rodillazo en la boca del estomago y ya estaba semi-muerto aunque no aun.
En estas peleas se podía hacer de todo así que para terminar opte por dejarme caer con uno de mis codos golpeando su espalda esto lo hizo de inmediato tirarse al piso.
Fue bastante rápido, sin embargo baje la guardia y cuando menos me di cuenta el gran mastodonte tiro de mi pierna haciéndome caer en el cuadrilátero, me propino 3 golpes que le permití fueran suficientes pues le devolví 6 puñetazos directos al rostros. Uno tras otro hasta que cayó de espaldas nuevamente esta vez inconsciente.
El muy hijo de puta me había roto el labio, sentía el sabor metálico en mi boca. Le escupí en su camisa y camine fuera de ahí. La gente se alebrestaba y gritaba yo únicamente quería salir de aquella mierda.
—Bien hecho Cachorro, aquí está tu paga y tu parte. — Lo mire unos momentos a Ryan y después abrí el pequeño maletín que contenía el dinero.
—Quiero que lo cuentes frente a mi pedazo de Imbécil, no me jugaran chueco esta vez. No vengo de humor Ryan. — Alzo las manos en su defensa y conto paquetes de billetes uno por uno mostrándome su contenido pieza por pieza.
Termine mas tarde de lo previsto pues cuando Salí de aquel asqueroso lugar las calles reposaban serenas.
Mierda, mire el reloj del cruce de la calle y eran las 2:00 am ¿Tanto había demorado? Joder.
Camine muy a prisa, hasta dar con una base de taxis, el conductor me miro con desconfianza pues la menuda pinta que me cargaba dejaba mucho que desear. Una mierda me importo y le indique la dirección. Pareció tranquilizarse un poco cuando entro hacia el vecindario con aires de tranquilidad.
—Aquí tiene, quédese con el cambio. — tendí 7 billetes, no sé qué cantidad era y no me importo. Cerré la puerta del Taxi y me dirigí a prisa a mi departamento.
Con sumo cuidado abrí la puerta de mi morada, me sentí cual adolecente llegando tarde a casa y con miedo de encontrarse con una madre loca que terminaría sermoneándome. Sin embargo mi visión se topo con el cuerpo acurrucado de Kibum en el sillón. El había estado esperándome.
No pude evitar sonreír ante tal suposición que estaba seguro era cierta, avente el maletín en el closet de servicio y me acerque a Kibum. Su respiración era apacible, será y muy calmada. Su boca esponjosa y pequeña estaba un poco entre abierta y esos ojos alargados y exóticos hermosos hacían de mi visión algo digno de quedarse viendo toda la jodida madrugada.
Sus ojos se removieron y los abrió poco a poco como si de una princesa se tratara.
No era una Princesa, era mi Príncipe de Rosadas Mejillas.
—Jjong. — su pequeña voz apenas audible debido al sueño anterior. —Haz vuelto, oh dios estaba tan preocupado por ti. Disculpa me quede dormido . — tallo un poco sus ojos
—Hey, está bien. Estoy en casa. — le dedique una sonrisa y el hizo lo mismo sin embargo desapareció enseguida de mirarme mejor.Mierda.
—Jjo-Jjong estas…. Es-estas herido. Oh cielos déjame- déjame curarte. — se paro intento parar de inmediato pero lo frene.
—Estoy bien, el otro tipo termino peor. — dije divertido y riendo bajo aunque me doliera la boca y la mejilla izquierda. —Hey, solo.. solo quiero descansar Bonito ¿si?. — le tendí una mano y el la tomo.
No dirigimos a la habitación y encima de la cama estaba Taemin y Minho durmiendo plácidamente, mientras Kibum y yo nos recostábamos entre cobijas, almohadones, sabanas y cojines.
—Iré a darme un baño Mejillas Rositas, no tardo. — le sonreí y el asintió. Ya en el baño retire toda la ropa asquerosa y tal cual me metí a la regadera. El agua salió un tanto fría pero se fue nivelando fue fresco y relajante. No tarde ni 5 minutos cuando ya me encontraba colocándome mi pantalón de la pijama fue entonces cuando la puerta del baño se abrió y ahí la figura de Kibum apareció.
—Per-perdón Jjong, escuche que ya había terminado y quería curarte. Es-eso puede infectarse. — dijo sosteniendo una pequeña cajita que había visto en ocasiones en su mochila.
—¿Siempre cargas con eso, Bummie?. — pregunte alzando la ceja divertido
—Si. — esbozo una sonrisa sincera. — no se sabe cuándo podrá ocuparse. — admitió y de esa forma se acerco a mí dejando en el lavabo todo lo que necesitaría. —Quizá duela un poco pero intentare que no sea así. — coloco un poco de solución en algodón y lo puso sobre mi labio. Dolía un poco pero nada que no pudiera soportar. Otra solución la aplico en mi mejilla después coloco un parche en esta y un adhesivo en mi labio y problema resuelto.
—Así está mejor, ahora a dormir Jjong debes de estar cansado. — dijo tomándome de la mano, se sentía bien, sin embargo pare en seco.
—¿No me preguntaras donde estuve?. —
—Yo… yo lo supuse por el rostro de Minho y su actitud Jjong. —bajo su cabeza y su agarre se fortaleció mas—Pero ¿sabes? Agradezco tanto que hayas regresado con bien a casa Jjong. — se giro a verme y me dio otra hermosa sonrisa entera, mostrando esa hilera de dientes brillantes y hermosos.
Me sentí liviano y deje llevarme por el hasta recostarnos entre toda aquella espuma, tela y texturas que ofrecían las sabanas, cobijas y almohadas.
—Buenas noches Jonghyun. —
—Buenas noches Príncipe de Malvavisco. — dije riendo bajito.
—¿Pri-principe de Malvavisco?. — pregunto en un susurro.
—Tus mejillas siempre se tiñen de rosa. — intente explicar en un tono bajo, sabía que su rostro lo tenía demasiado cerca a mí. — cuando hablamos, pero cuando sonríes o te ríes para mi, tus pómulos se alzan formando montañas esponjosas. Joder Kibum luces deliciosamente hermoso. — dije sin más, ¿Qué mierda había dicho? Oh joder seguro habia sonado patetico y tonto.
Kibum no dijo nada unos instantes sin embargo la escaza luz de la luna y de las figurillas fluorescentes me hizo notar la hermosa curva en sus labios pequeños y esas hermosas montañas rositas en su rostro, ese bonito color que en este chico encajaba con él a la perfección.
Fin POV Jonghyun