Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

UN COMETA ILUMINANDO EL CIELO... por cecyhb

[Reviews - 3]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Pues llevo mucho sin subir nada, me trasé y pues por eso hasta ahora subo este, perdón.

Espero les guste y perdón por el final.

Dedicado con todo mi amor a Puppy lindo y a Andrea

:D

Lo que sentí era muy raro, algo que nunca antes me había pasado, se parece a un enfriamiento que recorre cada parte de mi cuerpo y sin evitarlo me dio risa, no entendía porque, me sentía tonto en ese momento pues nunca me había ocurrido algo similar, nunca. Como curioso que siempre he sido, decidí averiguar, me acerqué a paso lento mientras mi vista no se alejaba de su objetivo, realicé esto solo sin sentir nada más que ‘’eso’’…  Un tonto sentimiento, que hace que me aflija, que se vuelve fuerte inesperadamente sin poder evitarlo, que me llena de deseo y pasión, un maldito sentimiento. ¿Qué es? ¿Por qué a mí?  Quería saber la razón de esto, quería dejar de sentirme como un ingenuo ignorante, en cada paso que daba sentía que algo cambiaba a mi alrededor, las luces tenues a mi alrededor brindaban un bello espectáculo, el viento que ondeaba mi cabello, ‘’Como un Drama’’, me hubiesen dicho, cada segundo, algo dentro de mi explotaba floreciendo nuevas sensaciones, desconocidas pero exquisitas.

Esa mirada, esa sonrisa, esa forma de ser, se sentía que estaba volando y me daban miedo. Cuando te enfrentas a cosas nuevas no sabes cómo actuar exactamente, el miedo invade todo tu ser, la sangre que recorre cada una de tus venas se siente helada, hasta pareciera que pierde su solubilidad y cuesta que corra por ellas. Cuando hubo contacto visual, sentí por primera vez como es cuando tu corazón se detiene, tu corazón muere para luego revivir e intentar salirse de su caja torácica, esas sensaciones que las personas ligaban al tan conocido sentimiento llamado… No, me negaba a pensar en que era algo como eso, era imposible para mí.

Estaba ahí parado sin saber exactamente qué hacer, parecía que el tiempo estaba paralizado. Pero era una equivocación de mi parte pensar de esa manera, pues aunque no lo sintiera, el tiempo seguía corriendo como siempre, llegó la oscuridad de la noche y yo seguía ahí.  Las luces de la ciudad, ahora opacas, que daban un aspecto lúgubre a mi alrededor eran las que nos acompañaban, a pesar del estrés que había vivido ese día, de saber que pilas de documentos y otras cosas me esperaban al día siguiente en la oficina y por eso debía ir a descansar a casa, a pesar de todo el cansancio acumulado, mi cuerpo no reaccionaba y yo seguía ahí ‘’perdiendo el tiempo’’.

Cuando cumplí 20 años, siempre pensé que las puertas maravillosas de un futuro resplandeciente se habían abierto ante mí, que mi sería como un sol elevándome brillantemente, pensé que mi juventud sería como el ardiente verano, deslumbrante y hermosa. Ese era mi sueño, el sueño de un niño. Pero en la vida siempre existen secretos que forman piezas importantes en ella, esos secretos que nadie te quiere decir, no importa cuánto eres capaz de esforzarte, nada cambia, nada. Y aun así intenté correr con fuerza, intenté escapar de lo que mi destino ya había marcado, corría hacia lo único que veía, lo único importante para mí. Cuando me convertí en un adulto, pensé que todo sería más fácil, ya sería independiente, pensé que sería como las estrellas resplandecientes, brillando en lo alto del firmamento, pensé que mi juventud sería apabullante como un festival apasionado. Si uno permanece sentado, si no te mueves y te quedas quiero entonces nada cambiará, si te quedas ahí con la mirada perdida, nada cambiará. Eso era lo que yo pensaba, entonces me hacía el fuerte y corría, intentando llegar a lugares lejanos ‘’al fin del mundo’’, quería ser fuerte y extender mis alas, llegar al fin del cielo, al fin del sol. Eso era lo que yo pensaba, pero las cosas cambian cuando llegas y te topas con la realidad.

Estaba cansado, me dolía la cabeza, pero aun así la curiosidad y el sentimiento que afloraba en mí, eran mucho más fuertes. Entonces decidí acercarme más, intentar tocar ese sueño, algo en lo profundo de mi interior me decía que era el indicado, que era el momento que estaba esperando, ese sol que debía alcanzar. Justo estaba ahí sonriendo a las personas que pasaban, solo, bajo el farol más opaco de todo el parque, me acerqué y me senté a su lado, una corriente eléctrica recorrió todo mi ser cuando me vio, intenté fingir que no me afectaba y me quedé ahí viendo hacia el horizonte, perdido en mis pensamientos y en el miedo que todo esto me causaba, de pronto escuché esa voz, una hermosa voz. Solo alguien que lo ha sentido puede explicarlo, algunas personas pueden imaginarlo, pero es imposible llegar a entenderlo verdaderamente, porque es algo que te llena por completo y es capaz de desconectarte de la realidad. Era tan solo un simple comentario sobre el clima, ‘’Creo que pronto lloverá, fui un despistado y olvidé una sombrilla, seguro terminaré más que empapado’’, palabras que en cualquier otra situación me hubiesen parecido de un tonto que le cuenta sus problemas a alguien desconocido, al cual no le interesa, pero una cosa extraña ocurrió conmigo en ese momento, le sonreí a un desconocido, le hablé a un desconocido, con palabras extrañas, con emoción, dejando que mis sentimientos hablaran por mí. ‘’Entonces nos acompañaremos, ambos terminaremos mojados’’…Y luego, luego todo a mí alrededor fue desapareciendo, algo que me dejó maravillado, como un cometa iluminando el cielo poco estrellado de esa noche fría, una sonrisa hermosa.

Le dije mi nombre a un desconocido, le regalé una sonrisa sincera a un desconocido, algo que nunca en mi vida había hecho. Él me dijo el suyo, él me sonrió de vuelta y mi corazón fue feliz, estúpido corazón. Hablamos por largo rato, él era un niño atrapado en el cuerpo de un hombre, era una persona que a diferencia de mí había logrado cambiar su destino y no terminó atrapado en una oficina, lleno de estrés y dolores de cabeza, lleno de rutina y aburrimiento, él era un soñador, yo también lo era, pero él era un soñador activo mientras que yo, uno pasivo. Las historias que él contaba me dejaron maravillado, pero a la vez con un deje de melancolía y tristeza, suspiraba de frustración al darme cuenta que me la pasé mucho tiempo soñando, cosas irreales, mientras que él a pesar de su aparente inmadurez había logrado equilibrar la realidad con los sueños, él había roto esa barrera y vivía un sueño, era libre, había logrado extender sus alas y estaba a punto de alcanzar el cielo, alcanzar el sol. Mientras tanto el tiempo no se detenía, sabía que al día siguiente estaría cansado y el mi trabajo se sentiría más pesado, pero por primera vez no me importó y continué sonriéndole a, un ahora, no tan desconocido. Sin embargo todo lo bello se acaba y debía volver, por más que intentara parecerme a él, no podía, algo en mi me gritaba que tenía responsabilidades que cumplir, deudas que pagar, facturas que saldar, así que con todo el pesar de mi vida me despedí de un desconocido con un abrazo, el cual fue correspondido, me sonrió y me dijo que esperaba un encuentro más. Caminé lejos de ese parque, ahora mágico para mí, y me adentré de nuevo en mi vida gris, guardando la esperanza de volver a encontrarlo en mi vida.

 

~~~

 

Pero el tiempo pasó y con él  mis esperanzas de un nuevo encuentro tan agradable como ese, tan solo continué con la rutina de todos los días, siendo un robot más de esa sociedad manipuladora, del capitalismo. Fue un año después que estando en ese mismo parque, acompañado de un amigo de la infancia, que lo volví a ver, al tener contacto quiso acercarse a mí, lo vi en sus ojos, pero en cuando estos vieron a Woohyun algo ocurrió, incluso yo fui capaz de sentir como la brisa del viento se volvía mucho más helada y tan solo me dedicó un sonrisa triste para luego irse sin decir nada, quise ir tras él pero luego recordé que era un desconocido y que mi amigo me preguntaría por él, ¿Qué le diría? No tenía razón aparente para ir tras él.

 

~~~

 

El tiempo nunca se detiene, sigue pasando segundo a segundo y con él se lleva tus mejores años, tus mejores sueños. Caminaba rápidamente intentando llegar a mi casa lo antes posible, al parecer se acercaba una gran tormenta y no quería estar aún fuera de mi hogar cuando ella llegara, solo quería tener un baño relajante, tomar una taza de café caliente y luego ir a la cama para regresar a mi rutina al día siguiente. Entonces las gotas empezaron a caer una tras otra cada vez más rápido, hasta formar un torrente igual a las maldiciones que salían de mis labios en ese momento, maldecía el momento en que olvidé una sombrilla, maldecía el momento en que se me había ocurrido salir de casa sin un abrigo, aun sabiendo que eso me podría pasar, quería salir corriendo pero no poseía una buena condición física, así que sabía que si lo hacía terminaría agotado y mojado, lo mejor era caminar un poco rápido sin excederme. Intenté guardar la calma y dejar de maldecir. De nuevo, todo a mí alrededor fue desapareciendo, algo que me dejó maravillado, como un cometa iluminando el cielo oscuro de esa tarde casi noche, estaba ahí, parecía un niño jugando bajo la lluvia, quería reír pero sabía que si me quedaba con él de nuevo mi tiempo se acabaría y terminaría más agotado de lo normal. Intenté pasar desapercibido, me sentía un delincuente tratando de escapar de él, y de pronto me vio, cada célula de mi cuerpo se estaba derritiendo con esa sonrisa hermosa, era la misma de esa vez, no como la que me dio la última vez, no, era como esa primera vez que nos habíamos visto. No pude evitarlo, de nuevo le sonreí a un desconocido, ahora, mi desconocido hermoso. Me miró fijamente y con su hermosa sonrisa camina hacia a mí, mi lado consiente me decía que tan solo lo saludara y siguiera mi camino, pero al parecer mi cuerpo se negaba a seguir las órdenes de mi cerebro. Yo estaba ahí de pie, tímidamente, y se acercó a mí.  ‘’¿Quieres bailar?’’ Algo que en cualquier otra situación lo hubiese visto como tonto y extraño ahora me parecía hasta en cierto grado, tierno, sin miedo extendí mi mano y una sola palabra fue suficiente para que su piel mojada hiciera contacto con la mía, ‘’Si’’…

No me importaba la lluvia, la idea de que tal vez enfermaría, el trabajo que tendría al día siguiente, el dolor, nada era importante al estar con él, mientras él tomaba mi mano todo parecía mejorar, parecía que podía extender mis alas y volar como nunca antes lo había hecho, el miedo a todo. El miedo a que me olvidaba de mí mismo, eso era lo único que aparecía en mí, el miedo a perder de vista mi horizonte por su culpa, pero también estaba la otra parte que quería seguir así, olvidarme de mi vida, solo permanecer a su lado sin nadie más.  Pero la última neurona que quedaba funcionado en mi cerebro envió su señal para que mi cuerpo se detuviera, me vio preguntándose qué me pasaba, tan solo me separe, me incliné en agradecimiento y emprendí mi camino de vuelta a casa, algo en mí se rompió en el momento en el que su vista se volvió triste, su voz hizo que me paralizara por completo, sonaba tan triste, tan fría, que solía, me dolía que un desconocido actuara de esa manera. ‘’Perdón, tú ya tienes a alguien en tu vida y yo solo vengo a confundirte, enserio lo siento mucho’’,  no entendía a qué se refería pero no hice ni dije nada, tan solo continué caminando como si nada hubiera pasado. Al llegar a casa no sabía que hacer exactamente, tan solo me senté en el sofá aun con la luz apagada y sentía como mi rostro se mojaba de nuevo, pero esta vez las gotas eran saladas, mis lágrimas no se detenían y me odiaba por eso, lloraba por un desconocido, lloraba porque en el fondo había entendido sus palabras cargadas de tristeza y no había hecho nada por evitarlo, lloraba porque yo ya lo sabía, yo sabía lo que en verdad sentía.

 

~~~

 

Muchas veces las cosas ocurren sin que nosotros las busquemos o podamos evitarlo, estaba ahí de nuevo, sentado junto a él en ese mismo lugar, en el que nos conocimos, hablábamos animadamente como buenos amigos, ahora ya no parecía un desconocido, era más bien un amigo, el cual creía que yo ya tenía a alguien a quien amar, al cual no le había dicho que estaba equivocado, pero una parte de mí tenía miedo a ese sentimiento y pensaba seguir con esa mentira hasta el final. Su sonrisa era mi adicción, sus sueños los míos, su mirada el cielo en el que me perdía y cada vez que hablaba, un cometa iluminaba el cielo oscuro de la noche, solo nos veíamos por las tardes casi noches pues era la hora que yo tenía libre, nunca le importó esperarme hasta tarde, siempre estaba ahí con esa sonrisa y una taza de café, el aroma era esquicito y alegraba por completo mi vida, lograba hacer que olvidara lo malo que había sido el día, el trabajo que tendría esperando por mí, todo. ‘’Quiero viajar, pero no quiero dejar de verte’’. En cualquier otra situación le hubiese dicho que era una tontería renunciar a sus sueños por mí, porque así era, pero en esta yo también sentía lo mismo, no quería dejar de verlo. ‘’Deberías seguir tus sueños, tal vez algún día yo te alcance’’. Suspiré pesadamente mientras miraba al horizonte intentando no llorar, sabía que el momento en que sus alas levantaran vuelo de nuevo llegaría, sin embargo yo aún no estaba preparado para dejarlo ir. ‘’Si te dejo sé que no buscarás tu sueño, te conozco, estás tan acostumbrado a tu rutina que sin nadie a tu lado que se vuelva en una molestia y te acose cada día, no saldrás de ella’’. Reí divertido por sus palabras, porque sabía que era verdad, porque él tenía toda la razón, yo seguramente permanecería en el mismo lugar, en mi zona de confort y moriría tal vez solo sin una aventura en mi vida, luego sonreí triste, porque para mí, él era como un sueño inalcanzable. ‘’Mi rutina no es tan mala, además, tú mereces alcanzar el sol, llegar a tocar el cielo, eso es lo que mereces’’. Siento como acaricia mi rostro y sin poder evitarlo un sonrojo aparece en mi rostro, me ve fijamente logrando traspasar mi alma por completo, lo veo y no puedo evitarlo, quiero estar más cerca de él, tan solo un poco más. ‘’Tu rutina es la peor, siempre permaneces encerrado, del trabajo a casa y viceversa, ¿Nunca has soñado con ir de viaje, con ser libre?’’. Lo vi y no pude evitar sonreír de nuevo, claro que lo había hecho, pero hay cosas que me mantenían atado a mi vida cotidiana. ‘’Lo he hecho, pero las facturas no me lo permiten’’. Unió su frente a la mía, tenía su aliento tan cerca de mí, tan cerca que parecía uno solo con el mío. Y luego dijo algo que llenó mi ser de infinita felicidad. ‘’Huye conmigo’’…

 

~~~

 

¿Cómo hice para estar aquí? Di la vuelta y lo vi allí, me miraba con esos ojos característicos de él, me sonreía como siempre lo había hecho, sus manos recorrían mi cuerpo haciendo dibujos, sus caricias eran las que alimentaban a mi corazón provocando en mí la más inmensa felicidad jamás vivida. Sus labios tocaron una vez más los míos, como tantas veces lo habían hecho la noche anterior, me subí en él y le sonreí juguetonamente, tan solo con un rose sentí como su miembro crecía de nuevo, me sorprendió que luego de haberlo hecho tantas veces aun tuviera fuerza para una vez más, claro que yo tampoco me quedaba atrás. En un movimiento rápido lo sentí dentro de mí una vez más, con vaivenes desenfrenados lo sentía palpitar en mi interior, sus besos por mi cuerpo hacían que cada una de mis células se activarán, estaba a punto de terminar y él también, de nuevo éramos uno solo, de nuevo era solo suyo y de nadie más, y así iba a ser desde ese momento, completamente suyo. Alcancé el orgasmo una vez más, y luego, luego todo a mí alrededor fue desapareciendo, algo que me dejó maravillado, como un cometa iluminando el cielo sentí como el llenaba mi interior con su esencia, sentía como de nuevo me marcaba como suyo.

 

No lo había pensado ni dos veces al escuchar su propuesta, en contra de todas mis leyes, en contra de todos mis miedos, porque lo sabía, sabía que era más que simple química, sabía que él se encontraba ya muy dentro de mi corazón, creía que era demasiado bueno para ser verdad, lo vi y con una sonrisa boba surcando mi rostro le susurré quedito por la vergüenza que me causaba pedírselo ‘’Pellízcame’’, Sonrió divertido y me besó, un besó lento y dulce, ‘’Los besos son mejores’’. ¿Dónde estaba la trampa de eso? Porque el cielo era tan claro, no había ni una nube que manchara su perfección, por eso me asustaba, por eso quería despertar y dejar de soñar, pero las cosas eran diferentes, me acostumbré tanto a él que soñaba igual, que vivíamos conectados por un hilo invisible que nos hacía dirigirnos el uno al otro. Las personas dicen que la cosas buenas toman su tiempo, pero en realidad las cosas suceden en un parpadeo, cuando estás ahí y menos lo piensas las cosas llegan a ti, y es entonces cuando tienes que abrir los ojos para no dejar pasar a tu cometa, siempre pensé que encontrar a alguien como él, una persona soñadora igual a mí sería una entre un millón, tuve suerte, mi destino se apiadó de mí. Porque él era uno entre un millón. Todo el tiempo había buscado alcanzar mi tan preciada libertad, y justo cuando lo tenía a mi lado olvidaba eso, cuando él tomaba mi mano no me importaba perder mis alas, no me importaba alejarme del sol, porque él era mi sol. Intenté quedarme atrapado en la rutina, cuando tropecé en los brazos del único que sería el perfecto para mi imperfecta vida.

Una persona que me hace sonreír con tonterías, me dice que soy un diamante en bruto que debe pulirse, y lo hace con sus besos, con sus caricias. Entonces es cuando el miedo se apiada de mí, porque me siento demasiado afortunado, casi un imposible. Su mirada penetrante es tan hermosa, ‘’No sé dónde habías estado toda mi vida, porque acabo de empezar a vivir, ¿Entiendes? Eres mi todo’’. Me sonrió y sus labios de nuevo prueban los míos. ‘’Te amo, te necesito a mi lado para el resto de mi vida’’. Es tan lindo, tan perfecto, tomé su rostro entre mis manos sonriendo como nunca antes, porque él era mío, no, él lo es. ‘’Cuando dices que me amas, no, yo te amo más, cuando dices que me necesitas, no, yo te necesito más, Dios, yo te adoro, eres mi vida, eres mi todo, mi todo.’’ Rio tierno y besó cada parte de mi rostro provocando cosquillas en mí, le sonreí de la misma manera y besé sus labios lentamente. ‘’Me encanta estar a tu lado, me encanta cada parte de tu ser, ese soñador que vuela a mi lado, por eso te amo, te amo y nunca me cansaré de repetirlo’’.

Esa es mi pequeña historia, de un chico tonto que se sometió a la rutina, de un chico esplendoroso que llenó la vida del tonto de pura felicidad y luz, el cometa que ilumino cada parte de su vida. Esta es solo la historia de cómo nos conocimos y como nos amamos, es tan solo una parte de nuestra vida juntos, la historia del porqué el no la contó conmigo es otra, la historia del porqué estoy solo justo ahora tomando una taza de café, es otra.

Él se llamaba Jonghyun, hoy cumpliría años, él fue, es y será el amor de mi vida. El cometa perfecto que iluminó mi vida, él es mi amor.

 

Notas finales:

Pues digánme en los review que les pareció, espero que me dejen algunos.

Saludos ^.^


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).