Juego de labios.
Esa fue la primera vez quehabíavisto a sus padres hacer ese tipo de cariño, sus labios se tocaron íntimamente y pudo percibir la lengua de su padre entrar en la boca de su madre, la mujer al darse cuenta se separo de su esposo y camino hacia su pequeño Sasuke, este se extraño bastante y cómo todo los niños, la curiosidad le invadió, había tenido la fuerza para preguntarle a su madre ya que su papa jamás le respondería de una forma tranquila y mucho menos honesta.
— Es solo un juego Sasuke— respondió a la pregunta con un sonrojo que llenaba toda su cara, realmente no sabía cómo responder a la pregunta de su hijo menor que tan sólo tenía seis años de edad. En ese momento se encontraban en la recámara de el menor.
— ¿Juego?
— Si Sasuke, un juego que sólo los grandes pueden jugar.
— y ¿Por que solo los grandes?, mama por favor no mientas — ¡La conocia demasiado bien!, era cómo ver a un pequeño Fugaku.
Responderle esa pregunta a un niño de esa edad es casi imposible.
— sólo es un beso — se acerco al menor y le dio un beso en la mejilla de este — el que te acabo de dar, es para los familiares y amigos un afecto, pero cuando se es grande no sólo tienes amigos y familiares, también se tiene a una persona especial.
— ¿Una persona especial?
— Si, llegará el momento en el que tengas algo así, y en ese momento tu no le darás besos cómo el que te doy yo a ti ya tu hermano.
— Si no cómo el que le diste a papa.
— Si, pero solo es un juego que se puede jugar en pareja — dijo roja sin prestar atención a sus palabras ni al alcance de estas, Sasuke era un niño, si tenía una inteligencia y razonamiento impresionante para su edad, pero eso no quitaba la corta edad que tenía y mucho menos su mente inocente.
Después de esa conversación la mujer salio sin ninguna preocupación, pero el pequeño azabache tenía un lío en su cabezita, lo que logro comprender es que sólo era un juego que se jugaba en pareja con una persona especial, ni con amigos ni familiares, ¿El juego era solo para grandes? Su hermano lo hacia con una chica de su preparatoria, un día lo vio despedirse así y no estaba grande, si era mayor que el pero no tanto.
Al día siguiente vio a su mama preparar su bentto(1. Un sándwich con doble de tomates, fruta picada con miel y su rico yogur natural. Salio rápidamente con el pequeño alado, caminando hacia su kínderKonoha (cómo se llamaba la escuela) y al llegar lo dejo en la puerta, se despido de el y este serio entró hacia su respectivo salón.
— ¡No! Ttebayo, No voy a entrar.
— Naruto tengo que trabajar ¡Suéltame por favor!
— Juro que si me dejas aqui te demandare por abandono.
— Kushina me matará si vuelves a faltar.
— ¡No! ¡No voy a entrar! No ttebayo—
Y ahí estaban otra vez, esos dos rubios armando de nuevo otro lío cómo cada mañana. Minato Namikaze era el nombre de el mayor, y usuratonkachi el menor... Esta bien su nombre era Naruto, el ojiazul revoltoso que se sentaba junto a el, tenía unos ojos bonitos pero siempre legritaba que era mejor que los Uchiha y eso si que no se lo permitia. Ahora dos maestras jalaban de los pies al pequeño rubio que en esos momentos estaba abrazado de la cintura de su padre, este sólo empujaba cómo podía, pero al parecer la fuerza de el menor era más que el de los tres adultos, después de varios intentos el pequeño rubio se soltó y el padre escapo a todo lo que sus piernas pudieran dar.
Entró malhumorado y se sentó en su lugar y ahí a su derecha se encontraba a la persona que más detestaba en el mundo, Sasuke Uchiha, el niño que se creía mejor que todos, ¡Se creía mejor que el!
— ¡Humm! — bufo, pareciéndose a su hermano Deidara, pero el azabache lo ignoro haciendo que este se enojara más.
— Teme, no ignores a tu superior ttebayo.
— No eres mi superior dobe.
— Claro que si, llevo treintaicinco juegos ganados.
— Yo yebo treintaisiete— si con eso decía que los Uchiha eran mejor que los Namikaze, esos juegos habían comenzado desde que empezaron a pelear, osea desde el primer momento en que se vieron, al inicio de el año escolar sólo se decían cosas sin sentido pero después la maestra Tsunade les dio ese método, jugar y llevar la cuenta de quien llevaba más victorias ganadas.
— Entonces hoy te ganaré tres beses... No, cuatro beses más.
— Cómo sí pudieras usuratonkachi.
— Claro que puedo teme, es más escoge tu el juego y veras que te ganaré ttebayo — Sasuke sonrió de lado, tenía el juego prefecto, después de todo Naruto era (de alguna forma) especial. La maestra había entrado al salón, no pudo decir más de el asunto, así que esperaría hasta los treinta minutos que le daban de receso, por fin cesaría ese pequeño dolor de la espina curiosa que mantenía en su pecho y con el rubio era la mejor forma. Lo que la mama no le había confirmado es que aquello se hacia de grandes cómo su hermano Itachi y jamás le dijo que era entre mujer y hombre, sobre todo se le olvido decirle es que la otra persona también debía desearlo y jamás forzarlo, ¿Pero que iba a saber un niño de seis cortos años?
El receso había empezado, y sin ningún impedimento Sasuke jalo a Naruto de la mano y lo llevo hasta los jardines traseros, se metieron donde había unos árboles y arbustos que escondía muy bien los cuerpos pequeños de los dos.
— Sasuke ¿Que hacemos aquí? Sabes que espantan. Shikamaru me dijo— ese lugar tenía fama de casa embrujada entre sus compañeros y eso estaba bien así nadie se acercaría a interrumpirlos.
— ¿Haa? Ya se, es una prueba de valor cómo en el que pasan en la tele.
— Claro que no usuratonkachi... Además aquí no espantan, solo es un rumor.
— ¡Teme!, además sí ese no es el juego no se que hacemos aquí.
— Aquí será el juego, además sólo es entre pareja.
— De todos modos nadie jugaría, dicen que ni los déjanos participar por querernos ganar uno al otro ttebayo — tomo una de sus manitas y las paso hacia su cabecita, Sasuke sonrió por lo dicho — y ¿Cómo se juega?
— Tenemos que estar muy cerca— Naruto dio un paso hacia el azabache.
— Más cerca — el ojiazul dio otro paso.
— ¡Mucho más cerca dobe! — sin paciencia tomo los bracitos de el rubio y lo pego a su cuerpo, se dio cuenta de que era por unos centímetros más grande que Naruto.
— Te-teme, ahora que — titubeando y sonrojadito pregunto y Sasuke continuo con un poco más de nerviosismo.
— Esto se juega con la boca.
— ¿Con la boca? Ttebayo
— Y co-con tu lengua— contesto sonrojado pero menos que el rubio que por alguna razón (muy extraña) estaba nervioso, era un juego lo que Sasuke hacia, eso no le preocupaba, pero se jugaba con la boca ¡¿Eso cómo era?!
— y ¿Eso cómo se hac... — sin poder terminar la pregunta Sasuke le tomo de la cintura y lo beso, fue algo casto pero muy tierno. Naruto quedo estático, Sasuke se separo y lo volvió a besar tímidamente pero con un poco más de ritmo, sinexperiencia claro, besaba y chupaba los labios de el rubio intento meter la lengua pero su miedo lo invadió y no lo izo pero no dejo de besarlo, Naruto seguía en sushok interno, sin mover su pequeña boquitadejándose hacer, fueel momento en que noto que el azabache se apartaba por segunda vez.
— Naruto, estas perdiendo— eso fue todo para hacer que el rubio reaccionara.
— ¿He?
— Estas perdiendo dobe.
— Ya escuche ttebayo — con un poco de valor ahora fue el quien beso a Sasuke, sorprendido el otro también movió los labios, unos minutos estuvieron así hasta que le falto aire a el rubio y se separo, unos dos segundos pasaron para que el ojinegro acorralara a Naruto contra un árbol y lo volviera a besar, embelesado por esos labios rojizos que en ese momento tenía a su disposición, sin saber realmente lo que estaba haciendo, pero le gustaba.
— Sas-mmmhhj... Sasuke mhhh— a Naruto le faltaba respirar pero Sasuke no entendía, lo habíamos perdido.
— ¡No! Sasuke ya — el ojiazul lo empujo y el se sorprendió al notar a Naruto respirando raro, con ojos llorosos y labios enrojecidos. Se miraron por un momento recuperando en silencio el aliento.
— Teme... ¿Quien va ganando? — se había atrevido a preguntar y la verdad es que ninguno sabía cómo seganaba el juego y que más daba, les gustaba.
— A quien le interesa — respondió Sasuke volviendo a juntar los labios con Naruto, pero ahora si tenía el valor para introducir su lengua y así lo hizo, sintió el cuerpo de el pequeño estremecerse y rápidamente se separo.
— Dobe ¿Estas bien?
— Si... Lo de hace un momento, ¿Fue tu lengua?
— Si — respondió, ¿Que había pasado? ¿El rubio se molesto? ¿Le abra gustado?
— Pu-puedes volverlo a hacer.
Sin contestarle sonrió y lo beso introduciendo la lengua, tratando de recorrer la cavidad de el ojiazul, sintiendo la de Naruto queriendo participar en la lucha, saboreo cómo sí fuera un manjar la boca de el otro y así continuaron, el menor cerro fuertemente sus manitas aferrándose a la playera de el otro y por la comisura de su labios salio un poco de saliva mezclada con la de el azabache.
Tus labios son mi adicción. Quisiera estar unido por una cadena junto ati para jamás separarme y embelesarme con tu dulce sabor.
Prepárate por que desde este instante eres mio, por siempre y para siempre, no dejaré que nadie te toque.
Y aunque el tiempo pase jamás nos separábamos.
Por que te amo.
La campana había sonado, todos los alumnos entraron, Tsunade se sorprendió al no escuchar ninguna queja de Naruto por que Sasuke había echo trampa y no escucho al azabache decir que el rubio no sabía perder, tranquilos los dos se sentaron y permanecieron de esa formahasta el final de la clase.
Los alumnos se iban, solo quedaba un azabache y un rubio en el salón, Tsunade salio rápidamente de el salón a llamar a sus madres, echaba humo por las orejas.
— Lo de antes — dijo el rubio— ¿Que fue?
— Sólo un juego Naruto— termino la conversación al ver a su madre en una esquina de el salón llamándolo. Naruto sólo vio cómo se retiraba.
— Sólo un juego hee — sonrió para sus adentros y miro a Kushina llegar agitada al salón.
El resto de el día fue normal, sin embargo los dos no se podían sacar de la cabeza los labios de el contrario, su sabor y el nerviosismo que sintieron al probarlos.
Al siguiente día fue normal para la mama de Sasuke, lo llevo a la escuela y serio entraba este, pero fue más raro para Minato que vio a su Naru despedirse alegremente de el y entrar sonriente a su escuela, «¿El fin del mundo?» Pensó, después hablaría con el. La clase paso normal, hasta que llego de nuevo el receso, Sasuke tomo la manita de Naruto y este sin decir nada le siguió.
Tenían un nuevo secreto que compartían y solo era de ellos, jamás le dirían a alguien que tenían un dulce juego de labios.
Omake:
Dos años habían pasado, Sasuke y Naruto ya no estaban el el kínder, estaban en segundo de primaria, nada había cambiado, Sasuke seguía siendo más alto, Naruto seguía retándolo y las peleas no habían cesado, pero seguían compartiendo el juego yahora en el baño de la escuela, el rincón donde jugaban tenía el mismo rumor que los árboles de su antigua escuela.
Ese mismo día por fin Naruto tubo el valor para preguntarle a su papa algo que le había querido preguntar desde hace bastante tiempo, respiro profundamente y...
— Papa, ¿Cómo juegas con mama con los labios? — en ese momento Minato escupió el café que tenía en la boca, y miro rápidamente a su niño.
— ¿Ju-jugar? ¿De que hablas Naru?
— Cuando tu y mama juntan los labios están jugando— el Namikaze mayor sonrió ante la pregunta de su niño de ahora 7 años, lo tomo de las manos y le dijo.
— No es un juego Naru, es un beso que le das a una persona a la que amas, no un amor cómo el que le tienes a tu mama o a mi, ni siquiera a tu hermano, es a una persona especial en tu vida, es el beso que le darías a tu esposa, cómo yo lo hago con tu madre— sonrió al ver a su pequeño, pero después se asusto al ver a el rubio menor ponerse rojo, hasta lograr competir con un tomate.
— Naru ¿Naruto que te pasa? ¡Naruto!
Al día siguiente el ojiazul entró callado a su salón, vio a Sasuke y se sentó en su lugar, el tiempo paso rápidamente hasta llegar la hora de el receso, cómo todos los días el azabache tomo la mano de el rubio y lo llevo hasta los baños, se arrinconaron donde siempre, y lo beso, de la nada Naruto lo alejo.
— ¿Que pasa?
— ¿Que es esto Sasuke?
— Un juego.
— Esto no es un juego ttebayo— Sasuke sonrió, así que ya lo había descubierto, había tardado más de lo normal, por un momento pensó que el inocente Naruto siempre estaría ahí pero párese que no podía ser así.
— Es un beso dobe.
— !Ya lo se! Ttebayo. Pero no es un beso normal— bajo la vos al decir lo siguiente — es un beso de esposos.
Sasuke bufo. ¿Esposos? Pensó que diría novios, pero jamás imagino que esa palabra atravesaría sus tímpanos, vio a Naruto sonrojado.
— Entonces, se mi esposo Naruto.
— ¿He?
— ¿Quieres ser mi esposo?
Realmente no sabía lo que decía, sólo quería seguir probando los dulces labios de el rubio que al pasar de el tiempo se habían vuelto necesarios para su día.El ojiazul había quedado callado, ¿Ser esposo de Sasuke? Pero si aún estaba muy chiquito, además el azabache era mayor que el por un año: si no lo negaba, amaba al chico que estaba alado de el pero aún era joven. Sasuke para apartar la duda de el ojiazul lo beso el la frente, no lo había pensado, ¿Y si Naruto le dice que no? Ya no lo podría probar sus labios, seacabaría todo. Volvió a besarlo pero ahora en la nariz y después un pico en sus labios. El rubio sonrióborrando cada pensamiento malo.
— Acepto ser tu esposo, Sasuke.
Este tomo a Naruto , lo abrazo y después junto sus labios.
Ya había llegado el momento de ser algo más, aún que se saltaran los pasos (por culpa de el papa de Naruto) ahora si estaban juntos, no unidos por un juego si no por un matrimonio de niños y un gran amor que habían creado durante ese pequeño tiempo de supequeña vida.