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Destino por Yangjali

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Notas del capitulo:

Vengo de rápido porque es día de las mamis y me di una escapadita. 

Espero les guste :D

 

-He pensado en la posibilidad que Chanhee se vaya a vivir conmigo- No desistía, Suho ya le había dicho que la elección recaía sobre el niño, Chanhee no era tonto, era lo suficientemente capaz de decidir con quién vivir, Chanhee lo había escogido y aún así la señora no se daba por vencida.

-Hemos hablado sobre esto muchas veces, Chanhee es el que debe elegir- soltó un suspiro cansado, agradecía que el niño lo quisiera a él, no sabía que sería de él sin el pequeño.

-En estos días hable con él sobre eso…-

-Preferiría esperar a que él me lo diga-Su cabeza comenzó a dolerle y sintió como un gran peso caía sobre su pecho, se sentía triste al pensar que Chanhee se podía ir de su lado. Buscó con la mirada algo, lo que sea, para lograr distraerse, esperaba que el tiempo haya pasado más rápido y comiencen con el evento, esperaba que la persona a su lado desapareciera, pero nada es como uno espera, sin embargo sintió un profundo alivio cuando vio al chico chino acercarse a ellos con una sonrisa, se sentó a su lado y le dedicó una mirada con un especial brillo.

Un poco antes del comienzo aparecieron Sehun y Han tomados de la mano sentándose alado de Yixing, por dentro Suho agradeció que estuvieran lo menos cerca posible su hermano y la persona a su lado. Las luces del auditorio se apagaron y unos pequeños de primer grado mostraron una canción entonada por sus vocecitas tiernas, los siguientes fueron un grupo que mostró una canción de la película de Mary Poppins, seguramente esos niños se avergonzarían mucho cuando fueran grandes, fue muy divertida, y así grupo tras grupo mostró su presentación. El grupo cinco-verde era el sexto en salir, fue una presentación realmente muy linda; la música era una sinfonía con batería,  trompetas, violines y teclado tocados la mayoría por lo niños mientras que las niñas bailaban y cantaban “Feliz navidad”. Se notaba como Yixin se esforzaba por no equivocarse en catar en coreano y sus pasitos de baile fueran siempre acertados, los niños con instrumentos estaban a los costados del escenario, Chanhee tenía una linda sonrisa en los labios, pero en sus ojitos sinceros se veía lo nervioso que estaba. Las luces iluminaban todo animadamente siendo de colores azules, dorados y plateados. Todo verdaderamente hermoso.

-¡Lay lo hice bien!- En cuanto todo terminó cada niño pudo ir a buscar a su familiar para que pudieran retirarse de la escuela. La pequeña en cuanto vio a su hermano comenzó a llorar por la emoción y corrió hasta él siendo recibida por un fuerte abrazo.

-¡Lo hiciste perfecto, kitty!- Quería cargar a su hermanita de pura emoción, pero no podía, trabajar en un hospital era realmente agotador y su cadera era la prueba de eso, estaba muy lastimada como para levantarla.

 

-Hey Chanhee- llamó al pequeño que miraba para todos lados buscándolo, en cuanto lo vio sonrió y caminó rápido hasta él.

-Estaba muy nervioso, Suho ¿Lo hice bien?-se veía inseguro aunque tratara de ocultarlo.

-Lo hiciste más que bien, tu mami estaría orgullosa- dijo con una sonrisa mientras estiraba la mano para que el niño la sostuviera, Chanhee sonrió orgulloso de su esfuerzo, estaban a punto de caminar cuando Chanhee se acercó repentinamente a Joonmyun y lo abrazó.

-Gracias, Suho- El corazón del mayor comenzó a latir rápidamente, el niño temblaba, ambos estaban conmovidos por el momento, los dos le agradecían enormemente al otro de estar ahí.

-Te quiero Chanhee- No esperaba que el niño se lo dijera de vuelta, sin embargo le gustaba demostrarle y decirle cuán importante era el pequeño para él. Kim Joonmyun amaba con todo su corazón a Kang Chanhee.

 

 

La escuela ya no estaba rodeada de vehículos, la mayoría de las familias habían partido a sus respectivos hogares, el invierno se sentía bien, los sentimientos que los envolvían eran aún más cálidos que un rico plato de tapioca, todo estaba como ninguno se imagino. LuHan y Sehun estaban con los niños a una distancia considerable de los otros dos, cerca del estacionamiento, Yixing y Joonmyun estaban parados justo frente a la puerta de la escuela, en medio del patio delantero de la ésta, no querían irse, no quería dejar al otro, querían sentir esa seguridad que el contrario le daba.

-Espero que no creas que es tonto, pero me gustaría que hicieras esto- Sacó la botella nuevamente y se la entregó al mayor, Suho sólo la tomó sin entender, pero para él todo acerca del chico era increíblemente interesante. Yixing le explicó la tradición de la botella de estación, el otro al escuchar sonrió.

-Claro que lo haré- cerró los ojos unos segundos pensando en su deseo para después destapar la botella y decir con un tono muy bajo –Deseo ya no sentirme solo- Le había temblado la voz, el viento chocó contra su rostro cuando topó la botella. Recordó cuando conoció a Minah, recordó el día que el doctor le detecto a la chica Lupus, también vio pasar las imágenes de cómo la enfermedad se la llevaba paulatinamente hasta el día de su muerte. Negó un poco para sacarse las imágenes de la mente.-Tu turno-le sonrió al menor, su mirada era triste y hacía que Lay sintiera como sí su corazón fuera oprimido dentro de su pecho, cómo su sistema endócrino inyectara en su sangre algo que lo hacía sentir lento, como si todo a su alrededor pasará en cámara lenta.

-Deseo no tener miedo- Sus ojos nunca apartaron la mirada del mayor, sopló en la botella y la cerro lentamente. Quisiera hoy llegar a casa y quitar los nuevos recordatorios de la pared, quisiera no tratar de reprimirse cada que estaba con la persona frente a él, quiere no sentir como sus pulmones se oprimen cada vez que recuerda su pasado, quiere estar cien porciento seguro que ésta era una nueva vida y que nada le haría daño, quería no tener miedo de dejar fluir esos sentimientos hacia el mayor.

 

-Hey Han, mira allí está Kimmi- Dijo la niña emocionada.

LuHan y Yixin se habían quedado solos cuando Sehun y Chanhee fueron a comprar algo calientito. Han volteó hacia un auto negro, donde estaba Sehun hablando animadamente con dos jóvenes mientras Chanhee platicaba con un niño.

-¿Chanhee? ¿Te gusta Chanhee?- Han se sintió confundido por el odio que según Kitty le tenía al mencionado.

-¿Qué? ¡No! ¿Cómo puedes pensar eso? Me gusta el que está alado de él, Kim Moonbin- Sehun al sentir la mirada volteó a su dirección y con un ademan le indicó que se acera.

En cuanto se reunieron con los demás Kitty se escondió detrás de Han avergonzada y le pidió, casi suplico, que se diera prisa. Sehun presentó a los otros como Jongin y Kyungsoo, Jongin era amigo desde el instituto de Sehun y al parecer el joven bajito era su pareja, no fue necesario mencionarlo, era evidente por los constantes besos que el alto le daba. Yixin se sintió aliviada cuando los dos desconocidos se fueron llevándose consigo a Moonbin, que era primo del de tez morena. Chanhee no desaprovechó la oportunidad y se burló de la pequeña. Pero cuando la amiguita de Yixin se acercó a despedirse el avergonzado fue él, Kitty la presentó como Lucí y venía de Canadá. Chanhee harto de que se burlaran de él fue en busca de Suho para que se diera prisa y se fueran a casa.

 

 

Estaban aún parados allí en medio del patio, viéndose directamente a los ojos, tratando de leer la mente del contrario, pero no había nada que leer, se conocían demasiado bien aun sin las palabras suficientes, el viento invernal daba de lleno contra sus cuerpos, pero no importaba, sólo importaba el otro, Joonmyun se acercó un poco al menor hasta que sus labios se posaron en la comisura de los labios contrarios, ambos habían cerrado los ojos y se dejaron llevar por la sensación de tener al otro tan cerca, por la seguridad que se daban mutuamente.

El momento fue interrumpido por un  golpe que dio fuertemente en el flanco izquierdo de Lay haciéndolo caer al suelo encajándose en el brazo derecho un minúsculo vidrio oculto en el pasto, comenzaron salir unas cuantas gotas de sangre, pero aquello era un problema para alguien con hemofilia, como Lay.

-¡Chanhee!- Lay levantó la mirada del suelo y vio como Joonmyun miraba con enojo al pequeño, Chanhee veía con ojos llenos de coraje a Yixing. Lay se sentía mareado por toda la escena, se levantó con ayuda de Joonmyun y con su otra mano agarró la herida.

-Está bien, no es nada-Dijo tratando de desaparecer la tensión que se cernía sobre el niño y su tutor.

-Te llevaré a que te curen, ve al auto- no había esa dulce voz que siempre tenía el mayor, era una voz firme. Lay no tuvo la oportunidad de negarse cuando el mayor posó su mano en su espalda indicándole que se fuera al estacionamiento –Ve al auto, Chanhee- el tonó había sonado horrible para los oídos del niño, era un tonó que nunca había escuchando, ni siquiera cuando hacía algo malo en la escuela y llamaban a su tutor Suho se veía tan enojado como en ese momento.

-Suho…Yo…-intentó decir entre sollozos, no se arrepentía de lo que había hecho, pero sí se arrepentía de poner en ese estado de humor al Joonmyun.

-¡No, Chanhee!- suspiró tratando de relajarse un poco, sentía como sus manos temblaban por el coraje y como su cabeza repiqueteaba fuertemente por la sangre que subía a ésta –Te escuchare después, no quiero hacerlo ahora porque estoy enojado- Suho sabía cuan despectivo puede ser cuando está enojado así que prefería tranquilizarse.

-Pero…-El niño trató nuevamente acercándose un poco al mayor.

-Dije no- Y le dio la espalda a Chanhee para irse al auto, pero siempre cerciorándose de escuchar las pidas detrás de él.

Han estaba ayudando a Lay a limpiarse la sangre con unos pañuelos que les había dado Sehun, Suho se acercó al lastimado y apartó a Han para él poder ayudar, la sangre ya no salía en pequeñas gotas, ahora era un flujo constante. Cuando Yixin vio al niño le dedicó una mirada furibunda y le dijo al oído “mi hermano está enfermo y si le pasa algo será completamente tu culpa” hasta ese momento Chanhee se sintió culpable de su acción, levantó la mirada para ver al chico chino, sus ojos estaban rojos llenos de lagrimas pidiendo silenciosamente que le perdonaran, Yixing cuando apartó la vista de su herida vio los ojitos tristes del niño y le sonrió dándole a entender que todo estaba bien, pero Chanhee no pudo evitar sentir recelo hacía el mayor.

Notas finales:

Sentí feo por Chanhee, pero se lo merecía

Les tengo una mala noticia; habrá actualización hasta el viernes, espero no se enojen, lo siento. 

Les deseo lo mejor muuuua. Las quiero. 


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