SungMin se quedó discutiendo con KangIn acerca de quien pagaría la cuenta que no notaron cuando KyuHyun y JongWoon salieron del lugar, hasta que SungMin volteó
-¡Hyung! Dile a este bruto que el tiene que pa….-parpadeo incrédulo -No puedo creer que esos dos se hayan ido sin avisarnos.
-Eso pasa por tratar de ganarme en lo argumentos Minnie-le dijo algo burlón- pero no te preocupes, si lo que quieres es que page tu parte eso haré-dijo entregándole su tarjeta al mesero-aunque espero algo a cambio de pagar por tu comida-le dijo coquetamente.
-¿Por qué me estás viendo así? ¿De qué rayos estás hablando?- se cruzó de brazos y frunció el ceño para ocultar su nerviosismo.
-Oh vamos Minnie no seas así-le dijo acercándosele un poco mas- sabes perfectamente a lo que me refiero-murmuró guiñándole un ojo.
SungMin pasó saliva -¿En serio? A ver genio ¿por qué no lo dices mejor? Aún no me gradúo en leer mentes
Sonrió acercándose al menor, tomando con cuidado su rostro entre sus manos, antes de juntar sus labios moviéndolos con lentitud, pasando ligeramente su lengua sobre los labios ajenos.
Su cara se puso de todos los tonos de rojo, se separó del mayor y se levantó de la mesa -C-creo que deberíamos ir a otro lugar.
Sus labios se curvearon hacia arriba, siguiendo al menor parándose recibiendo entonces su tarjeta y su ticket, para tomar la mano de SungMin conduciéndolo fuera de aquel elegante restaurante.
-¿A dónde vamos?-le preguntó al oído.
Se estremeció al sentir el aliento caliente del mayor contra su oído -A…a mi casa, a un hotel…¡a dónde sea pero vamos!
-A mi departamento entonces-le dijo llevando hasta su auto, entraron y salió del estacionamiento hacia su lujoso departamento en el centro de la ciudad, entraron en el estacionamiento del elegante edificio, para después subir al elevador que los llevaría hasta el departamento del mayor.
Una vez en el elevador SungMin se fue encima de KangIn, atrapando sus labios en un beso necesitado.
Sus brazos rodearon la cintura ajena, pegando sus cuerpos lo más posible, dejando que el menor fuese quien controlara el beso, mientras el disfrutaba de su sabor y calidez.
Su lengua se paseo por el labio inferior de KangIn, abriéndose paso dentro de su boca, encontrándose con la misma del mayor.
Sus manos bajan apresando el firme trasero ajeno, elevándolo un poco para profundizar un poco mas aquel beso hambriento, hasta que las puertas se abren indicándoles que han llegado al piso, salen apresurados, entrando al departamento de KangIn, donde nuevamente vuelven a besarse como si el mañana no existiera, caminan a tropezones hasta la cama, donde el mayor empuja con suavidad el cuerpo menudo del menor, colocándose entre su piernas.
SungMin lo mira fijamente dándole una advertencia -Pórtate bien conmigo, la última vez me dejaste unos moretones horribles.
-Lo intentare conejito-le dijo sonriéndole antes de volverlo a besar con hambre, mientras sus manos se encargaban se abrir la camiseta que el menor portaba acariciando su suave y tersa piel.
Sonrió en el beso moviendo sus manos para también deshacerse de la playea de KangIn. Una vez que lo hizo sus manos se movieron por el firme pecho del mayor, bajando una de sus manos para tocar traviesamente su miembro duro.
Un gruñido escapó de sus labios, separándose de los ahora hinchados y rojos labios, para comenzar a bajar en medio de besos y mordidas suaves hasta sus pezones los cuales lamió y succionó hasta dejarlos duros.
-¡Ah! ¡YoungWoon!- el menor aventó su cabeza para atrás, disfrutando de las caricias del mayor en su cuerpo.
Sus manos se deshicieron del pantalón del menor, dejándolo completamente desnudo, viendo su miembro palpitante, pasando su lengua sobre sus labios antes de tomar en su boca el falo goteante de Min.
-Si…así…vamos KangIn…chúpamela más fuerte…ah- enredó sus dedos en el cabello del mayor empujando su cabeza más a fondo.
Sonrió al oír al menor hablar así, como le calentaba cuando se ponía en ese plan, chupó mas fuerte mientras su mano se encargó de jugar con sus testículos, mientras su otra mano tanteaba curiosa su estrecha entrada.
-Oh Dios...si...sigue así- se mordió el labio sintiendo el conocido cosquilleo en su vientre -¡Ah! Me...me voy a correr....
Soltó un fuerte gemido al tiempo en se corría en los labios del mayor.
Tomó toda la esencia del menor, separándose después mientras pasaba su lengua sobre su boca humedeciéndola.
-Delicioso como siempre baby-le dijo con una sonrisa coqueta.
Min le sonrió de vuelta -Lo sé cariño, ahora ¿por qué no vamos a lo bueno? Estoy ansioso por tenerte dentro de mí-le dijo acariciando suavemente su rostro.
Sonrió mordiéndose suavemente los labios, antes de deshacerse de su pantalón, quedando completamente desnudo, antes de masajear un par de veces su miembro lubricándolo con el líquido pre-seminal, para después hacer presión contra la entrada del menor.
Entró de una en aquel estrecho y cálido pasaje, gruñendo al sentir las uñas de Min rompiendo su piel, y casi de inmediato comenzó a moverse, duro y fuerte contra el menor, inclinándose para tomar sus labios en un beso caliente.
Movió sus labios con desesperación, gimiendo cada vez que el mayor entraba en él. Su agarre en la piel del otro aumentó dejando marcas rojas sobre ésta.
Las estocadas eran certeras, dando de lleno contra aquel punto que hacia al menor gemir y perderse en el placer, rompió el beso dando suaves succiones en el cuello y hombros ajenos, hasta que llegó al orgasmo llenando por completo al menor.
SungMin gritaba obscenidades al aire, disfrutando de las embestidas del mayor. Cuando estaba al borde del éxtasis, contrajo sus paredes apresando el miembro de KangIn, corriéndose entre ambos cuerpos y sintiendo el líquido caliente llenar su entrada.
Salió del menor recostándose a su lado, sonriendo satisfecho a pesar de sentir que el aire no entraba a su pecho.
-SungMin, enserio cásate conmigo-le dijo volteándolo a ver.
Se rió.
-No bromees KangIn, que te lo puedo tomar en serio.
-No estoy bromeando Minnie-le dijo dándose media vuelta quedando frente al menor, recargando su cabeza sobre la palma de su mano- enserio quiero que seas mi esposo.
Su rostro se puso serio.
-Deja de estar bromeando…no juegues con mis sentimientos cara de mapache- le dijo haciendo un puchero
-No estoy jugando-dijo parándose, tomando su pantalón sacando una pequeña cajita, la cual le pasó al menor- y no tengo cara de mapache, cara de conejo.
Tomó la caja y la abrió topándose con un hermoso anillo de plata -Yo…no sé que decir- estaba muy sorprendido que se quedó sin palabras.
-Que tal, Si acepto-murmuró nervioso, ante el mutismo del menor-Minnie…
Asintió rápidamente.
-Sí, si quiero casarme contigo- se fue encima del mayor para darle un beso.
Sonrió aliviado envolviendo al menor en un abrazo apretado, dándose un beso amoroso y cálido.
-Tenemos que avisarle a nuestras madres y a JongWoon-dijo rozando con suavidad sus narices.
Asintió -Podemos decirles luego, en especial a JongWoon, se ve que está muy ocupado últimamente con ese chico.
-Quien sabe, en una de esas él nos termina diciéndonos que también se casa-dijo riendo bajito.
Frunció los labios -No lo sé, ese chico es muy misterioso. Esperemos que todo salga bien, no quiero volver a ver a hyung herido.
-Lo dices como si JongWoon no lo fuera-le dijo dándole un beso corto-¿Otra ronda?-le preguntó besándole la línea de la quijada.
-No tienes que pedírmelo dos veces- sonrió coquetamente dejándose hacer por el mayor otra vez.