Un día de trabajo al máximo había finalizo con éxito.
Ji Yong entra a su departamento, cierra la puerta y arroja las llaves sobre la mesa. Camina con pasos pesados y lentos hacia su habitación y sin siquiera quitarse la ropa o colocarse alguna pijama, se deja caer en la cama como si fuera un cuerpo inerte y sin vida.
Estaba muerto.
Agotado por un día de trabajo y por no dormir bien, por desvelarse y luego levantarse en un horario temprano. Se coloca de costado en su cama y cierra sus ojos, estaba seguro de que si se quedaba en esa posición por unos minutos más, se dormiría en esa posición. Su cama era amplia y cómoda después de todo.
Siente que desde el bolsillo de su pantalón, su celular vibra varias veces. Con pereza, lleva su mano hasta su bolsillo y quita el celular de allí. Lo abre y estando aun de costado, lee el mensaje de texto que acaba de llegarle.
“¡Llámalo! ¡Verás que las cosas se arreglarán si lo haces! ¡Mucha suerte, hyung!”
El mensaje era de Seung Ri, lleno de emoticones y de ánimos para incitar a Ji Yong a hacer lo correcto y a animarse realizar la tan ansiada llamada que deseaba hacer. G Dragon cierra el celular y lo arroja al piso sin medir las consecuencias. Por supuesto que quería llamarlo. Pero no debía hacerlo, no luego de que lo dejara tirado una vez más. Se sentiría mucho más patético, como si le estuviera rogando atención.
Ji Yong suspira y se recuesta en una mejor posición en su cama. Observa el techo, la habitación estaba a oscuras pero se filtraba la luz de la luna por la ventana del costado así que eso le ayudaba a distinguir los objetos de allí.
“¿En qué momento ocurrió, Seung Hyun?”
Se reprocha mentalmente volver a cuestionarse lo mismo. Las cosas se habían desarrollado solas hace tanto tiempo, hace quizás más de un año. Y todo había avanzado con naturalidad, ocultándose de medio mundo hasta que al final no pudieron mantenerse en secreto frente a sus compañeros de grupo.
Miradas cómplices, roces inocentes, minutos compartidos ante el más mínimo tiempo libre. Lo que al principio había iniciado como simple curiosidad, ahora se veía mucho más en serio de lo que tendría que haber sido.
Ahora a Ji, realmente le importaba a pesar de que nunca lo admitiría. Antes era diferente, antes verdaderamente no hubiera sentido lo que sentía en ese momento. El secreto se mantenía ante todo el mundo excepto para sus compañeros. Pero de por sí, nunca habían concretado nada serio entre ellos. Los demás solo sabían de las cosas que hacían porque era evidente ya que pasaban mucho tiempo juntos. Asumían que eran algo, pero la realidad era que ellos no eran nada en serio.
Le asustaba el hecho de lastimarse. Porque podría esperarlo de todo el mundo, pero no estaba seguro de soportarlo si se trataba de Seung Hyun. Lo veía diferente que al resto de las personas desde que lo suyo había comenzado. Pero principalmente, tenía muchos otros miedos que lo obligaban a ocultar su extraña relación del resto de la empresa y demás personas. Motivos que eran suficientes como afirmar que nunca podría concretar algo de verdad junto a TOP, por más que quisiera…
Frente a todos los que no fueran de su grupo, trataban de disimularlo y eran lo más distantes posibles. Trataban de ignorarse o alejarse tanto en cámaras como en los pasillos de la YG. La cercanía era solo notada por sus compañeros porque eran los que más pasaban tiempo con ellos.
Pero al estar solos todo era tan diferente.
Ji Yong se cubre los ojos con la palma de su mano y desea morirse.
Porque Seung Hyun le había mostrado cosas que nunca se hubiera imaginado salir de él, tantas facetas que nunca hubiera pensado que tenía. Tantos gestos, tantas sonrisas, tanto encanto. Se siente un idiota gigantesco al reconocerlo.
-¡Debo ser el estúpido más grande sobre la faz de la tierra!- Grita con fuerza como un loco de remate, enojado consigo mismo por dejarse llevar por sus emociones.
-¿Por qué piensas eso?-
Una tétrica voz grave llega hasta los oídos de Ji Yong y provocan que casi muera de un paro cardiaco. Ji se levanta y se sienta en su lugar de inmediato y observa con horror que había dejado la puerta de su habitación abierta y que por ahí mismo estaba ingresando a pasos lentos una figura indiscutiblemente fácil de reconocer.
-¿Q-Qué estás haciendo aquí?- Retrocede Ji Yong en estado de alerta y sumamente a la defensiva.
Seung Hyun arroja el bolso que llevaba en mano a un costado y camina hasta llegar a la cama de Ji Yong. Su presencia le había causado un susto de muerte al dueño del lugar, ¡Se había presentado de la nada misma como un jodido fantasma!
-Me diste unas copias de tus llaves. Prometí que vendría hoy y lo hice a pesar de que ya es tarde.- El rostro de TOP era extrañamente imperturbable, observaba a Ji con una ceja arqueada. Le extrañaba verlo tan a la defensiva y lo que era peor, le parecía extraño que le gritara a la nada estando solo en su habitación.
-¿Por qué no volviste a tu casa?- Ji decide contraatacarlo con otra pregunta. Se cruza de brazos sentado en su lugar y no duda ni por un momento fulminarlo con una mirada de odio. Aun no olvidaba el porqué de sus rencores justificados. Seung nunca cumplía con su palabra y a pesar de que ese día lo había hecho al fin y al cabo, se había tardado bastante y ni siquiera se había dignado a mandarle un mensaje de texto para avisarle de su retraso.
-Sabía que si no cumplía te enojarías conmigo.- Explica con naturalidad Seung Hyun, cerrando sus ojos y encogiéndose de hombros. G Dragon le desvía la mirada con molestia y se queda callado, si era necesario ignoraría a ese idiota el resto de su vida con tal de que aprendiera lo que era la consideración por el prójimo.
-Veo que estás enojado de todas formas.- El mayor se lleva ambas manos a la cintura y suspira con pesadez. El carácter de Ji era extremo en todos los sentidos. Podía estar extremadamente feliz o extremadamente enojado de un momento a otro, nunca había un punto intermedio. Da un par de pasos hacia adelante y toma asiento a su lado en la cama. Sabía que tenía que escoger sus palabras con cuidado para no ser mandado al diablo.
-Ji… ¿Podrías perdonarme? Sabes que no me retrase porque quise.- Tantea el terreno, disculpándose con sinceridad. Lo que decía era cierto, hasta ahora tenía una agenda muy ocupada y sus retrasos o faltas no eran por gusto. A veces Ji lo comprendía, o a veces se enojaba de muerte como en ese momento. Seung Hyun quería tranquilizar la situación, siendo un poco más racional. Solía tomar los asuntos con bastante madurez.
-Si sabes que no puedes hacerlo, no prometas cosas.- Ji Yong no iba a armarle una escena melodramática, nunca lo hacía ya que ya no era un niño. Tampoco planeaba actuar como una novia histérica. Solo decía lo que sentía con profunda sinceridad sabiendo que Seung lo trataba como un adulto de igual a igual. Cuando algo le molestaba, simplemente se lo decía sin rodeos.
Ambos se quedan en silencio por unos dos minutos. No se veían a los ojos y ambos sentían cosas muy diferentes en sus pechos. Ji seguía molesto a pesar de que las ausencias de Seung eran justificadas, la impotencia que sentía no podía ser descargada con nadie y eso lo frustraba. De la nada misma, Seung Hyun lo toma por el mentón con un par de dedos y lo obliga a dirigirle la mirada. El rostro de TOP luce serio, mientras que el de Ji permanece neutro, sin mostrar signos de perturbación.
-Te amo.- Suspira Seung Hyun con completa seguridad hacia la persona que tenía en frente. Porque sus sentimientos estaban claros desde el momento en que había cruzado la barrera prohibida con Ji Yong. Le importaba poco el resto del mundo, porque mientras que fuera mínimamente correspondido por Ji, él podría seguir adelante contra cualquier obstáculo que se le pusiera adelante.
-Yo…- Ji Yong lo había escuchado. Sin embargo mira hacia abajo evitando hacer contacto visual y se queda sin palabras, con gesto serio. Había oído tantas veces esa frase de parte de Seung Hyun, y todavía no podía corresponderla. No era como si fuera incomodo, porque reconocía los sentimientos de su hyung por él desde el momento en que todo había comenzado. Pero él nunca le correspondía con palabras, prefería utilizar las acciones ya que no era bueno en ser dulce o lindo cuando se trataba de sentimientos relacionados al amor. De sus labios, nunca habían salido frases como las de Seung Hyun.
Se desconcentra de sus pensamientos y no puede evitar gemir aturdido y cerrar los ojos al sentir como una de las manos de Seung se colaba por debajo de sus pantalones en busca de su miembro. Antes de poder protestar, TOP se le abalanza encima y lo obliga a caer de espaldas contra el colchón de su cama. Ambos cruzan miradas, Seung lo observa con decisión y seguridad. Mientras que Ji permanece quieto con sus muñecas sujetadas por las del mayor. Seung Hyun se acerca un poco más hasta llegar a rozar sus labios y en el momento que está a punto de encajarle un beso…
-No quiero hacerlo.- Ji Yong entrecierra sus ojos y provoca que Seung se detuviera precipitadamente. Entonces, TOP se aparta un poco y se le queda mirando por unos instantes, con completa confusión. G Dragon frunce el ceño y lo mira a los ojos sabiendo muy bien lo que estaba diciendo.
-Te portaste mal. No voy a hacerlo contigo.- Esa era su forma de castigarlo a la perfección. Y quizás estaba actuando como una novia histérica verdaderamente, pero en esa clase de posición lo ameritaba. Seung Hyun merecía un castigo y lo haría pagar a como diera lugar, no importaba cuanto tuviera que resistir.
-¿Ah no?- Inesperadamente, Seung Hyun sonríe con simpleza y lleva una de sus manos por debajo de la camiseta de Ji. Sonríe victorioso al sentir que ante ese primer contacto contra su piel, el cuerpo de Ji Yong tiembla estremecido. Era suave y cálido, la piel de Ji siempre era una delicia ante su tacto. De algo estaba seguro, esa noche no recibiría una negativa en respuesta a sus deseos. G Dragon abre bien sus ojos y se sacude un poco cuando siente como la mano de Seung recorría desde su estómago hasta su pecho.
-No…- Murmura en medio de un jadeo y hace lo posible para liberarse del agarre de TOP, pero el mayor no solo acaricia la piel de su pecho, sino que también llega a una de sus sensibles tetillas y la presiona entre sus dedos con suma delicadeza, provocando así que Ji Yong largara un gemido ahogado y tratara de retroceder.
-Te dije… que… n-no…- Ji no iba a complacerlo tan fácilmente, era consciente de que el contrario sabía sobre todos sus puntos débiles pero tenía muy presente en su mente que quería darle un castigo por su falta de consideración. El líder alza su rodilla y le encaja un rodillazo a un costado de su estómago, sin medir su fuerza.
Seung Hyun abre bien los ojos y siente dolor de inmediato ante ese impacto. En menos de un segundo se enfurece, hace lo posible para ignorar el dolor y entonces vuelve a aprisionar a Ji, sosteniendo sus muñecas con fuerza.
-Me las pagarás por eso, Ji Yong. Terminarás rogándome.-
-¡JA! ¡Claro que n…!- Ji no logra terminar su frase ya que sus labios son sellados por los de Seung Hyun. Un beso brusco que lo inquieta y lo pone tenso en un segundo. Gime con molestia dentro de la boca de Seung Hyun, pero el mayor empieza a entrelazar su lengua con la de Ji y muestra su dominio de la situación. Devora los labios del líder con pasión, siente la humedad de su cavidad y la forma suave en que empezaba a corresponderle.
Todo en Ji siempre era suave y delicado, sus movimientos nunca eran demasiado rudos cuando se proporcionaban placer el uno con el otro. Y pensar que siempre se mostraba tan fuerte en el exterior. En la intimidad era todo lo contrario. Y ese hecho excitaba de más a Seung Hyun, quien sabía muy bien cómo hacer ceder a su líder.
-Ahhh… S-Seung Hyun…- Cuando Ji siente que Seung se aparta de su beso, siente que era el momento de respirar ya que le faltaba el oxígeno. Jadea un poco para poder tranquilizarse, pero tiene menos de un segundo para poder estabilizarse porque en ese momento Seung Hyun lleva sus manos por debajo de la ropa de Ji y ataca sus tetillas con ambas manos. Levanta la camiseta del menor y lleva sus labios a su estómago para comenzar a besarlo y a realizar pequeñas mordidas que solo le proporcionaban placer a Ji.
El líder comienza a retorcerse en su lugar, su vientre plano era mordido y chupado con tal dedicación y perseverancia. No puede evitar gemir cuando la lengua de Seung llega hasta su ombligo y simula penetraciones en su interior. Entonces Seung comienza a elevarse al mismo tiempo que seguía presionando las tetillas de Ji, lleva su boca a una de estas y comienza a succionarla y a lamerla con morbo. Amaba cada uno de los sonidos que salían de la boca de Ji, el cual se estaba retorciendo de placer.
Ji se muerde el labio inferior, haciendo lo posible para no gemir tan fuerte y no darle el gusto a Seung. Se supone que debía resistirse pero lo estaba haciendo sentir muy bien y le era extremadamente difícil no ceder. Se encorva en su lugar y arquea su espalda hacia atrás, se estaba nublando y su mente estaba comenzando a quedarse en blanco. Lo único que tenía presente eran los roces de Seung en su cuerpo.
Entonces, cuando su excitación estaba en el punto exacto, su hyung le quita la camiseta y se apresura en arrebatarle los pantalones de un tirón. Ji Yong se siente indefenso y no impide que los actos ocurran de un momento a otro. Pero eso sí, Seung no se saldría con la suya totalmente. A veces lo perdonaba y pasaba por alto que el mayor lo penetrara aun con ropa encima, ya que no le gustaba mostrar su cuerpo. Pero Ji Yong no se la iba a hacer fácil esta vez, así que con su misma rapidez, se incorpora y le quita la camisa a TOP, se la arranca con facilidad y la arroja hacia un costado de la habitación. Sonríe victorioso al ver el torso desnudo de Seung, quien lejos de verse molesto o avergonzado, le sonríe de lado a Ji, quien queda confundido de repente.
-¿No era que no querías?-
Ji Yong se sonroja notablemente y luego le dirige una mirada asesina, ya que ese idiota se lo estaba diciendo con un tono totalmente satisfecho.
-Te odio.-
Seung Hyun se le arroja encima y vuelve a besarlo con rapidez y elegancia. Muerde los labios de Ji Yong lleva sus manos a su trasero y presiona esos glúteos firmes. Pasa sus manos por los muslos de Ji y luego acaricia esa espalda bien trabajada, para después acariciar sus brazos fibrosos y delgados. Todo en Ji era perfección, su figura era delicada y empezaba a sentir como una fina capa de sudor cubría su cuerpo.
Ji Yong gime sin parar y cierra sus ojos con debilidad, sonrojándose mucho, sentía sus mejillas arder. Su cuerpo estaba siendo tocado por todos lados, se estaba excitando muchísimo y odiaba el hecho de que el único hombre en el mundo que podía hacerlo sentir así era Seung Hyun. Sus manos eran tan firmes y grandes, acariciaban su espalda y lo rasguñaban levemente, pasaba nuevamente a sus glúteos y los sostenía con una fuerza dominante, los acariciaba y los presionaba entre sus dedos haciéndolo gemir con más fuerza. Su miembro estaba totalmente duro y él estaba increíblemente caliente. Ji siente cuando Seung comienza a frotar su miembro contra el suyo, ambos gimen dentro del beso que parecía ser infinito. Ambos troncos endurecidos se frotaban en uno contra el otro y los hacía excitarse de muerte.
El sexo podía ser rápido o lento. La mayor meta que tenía Seung en su cabeza era hacer desfallecer a Ji del placer, hacerlo gemir debajo suyo mientras gotas de sudor empapaban su tersa piel. Lo lograría rápido en esa ocasión, ya que sentía que su erección lo estaba matando. Los gemidos de Ji eran muy débiles y agudos, una exquisitez para sus oídos pero una tortura para su miembro endurecido que ya empezaba a dolerle.
Se separa del beso continuo con Ji Yong, lo atrae contra su cuerpo y ambos se sientan en su lugar. Seung Hyun abraza a Ji y lo aprisiona entre sus brazos. Con brazos temblorosos, el líder rodea su cuerpo y lo abraza de la misma forma.
-¿Podrías hacerme el favor, Ji?-
Ji Yong estaba demasiado ido como para poder reaccionar adecuadamente. Recordaba vagamente el tamaño del miembro erecto de Seung. Ese pensamiento obsceno lo hace jadear desesperado y morderse el labio inferior con deseo.
-Claro que sí. Te quiero dentro.-
Esas palabras son suficientes para iniciar la mejor parte del juego en el que estaban metidos. Seung pasa a recostarte sobre la cama. Ji permanece encima del cuerpo de Seung y le sonríe lleno de perversión. Separa sus piernas y las coloca una de cada lado de la cintura del mayor. Posa sus manos sobre su pecho y no para de sonreírle a Seung Hyun, quien también sonríe lleno de lujuria y repleto de pasión e impaciencia.
G Dragon toma el miembro de TOP con su mano derecha y se levanta un poco de su lugar. No necesitaba ser dilatado o por lo menos eso creía. Pensaba que le dolería pero que podría resistirlo al fin y al cabo.
Acomoda la punta del miembro en su entrada y poco a poco la va introduciendo dentro. Ji Yong se tensa y gime adolorido ante los primeros escasos centímetros de intromisión. Cierra sus ojos, totalmente sonrojado y entonces aparta su mano para realizar el movimiento naturalmente. De a poco baja su trasero y la intromisión se hace más efectiva. Seung Hyun deja caer su cabeza hacia atrás y gime ante la estrechez de las paredes internas de Ji. Era una sensación deliciosa que solo le ofrecía el menor y que nunca se cansaría de experimentar.
Ji Yong posa ambas manos a los costados del vientre de Seung y continua con la intromisión de su miembro con demasiada lentitud porque le estaba doliendo. De repente, las manos de Seung Hyun se colocan a cada lado de las caderas del líder, Ji lo observa con horror ante ese gesto y el mayor no hace más que sonreír con cierta maldad. Entonces, empuja a Ji hacia abajo y hace que su miembro entre completamente en su interior. El trasero de Ji choca contra la piel de Seung.
-¡AAAAAAAH!- Grita abriendo bien sus ojos y temblando notablemente por ese repentino movimiento. Pasa a bajar su cabeza y a jadear consternado haciendo esfuerzos sobre humanos para poder resistir el dolor y acostumbrarse a todo el miembro de Seung en su interior. Cierra sus ojos, sintiendo sus mejillas arder y sin parar de temblar ni por un momento. TOP se muerde el labio inferior al borde de hacerlo sangrar. Ya no podía seguir esperando que Ji se acostumbrara, su miembro era agradablemente apretado y moría por empezar los movimientos pélvicos. Sujeta por las caderas a Ji y empieza a hacer fuerza para subir y bajarlo, incitándolo también con el movimiento de sus caderas y al rebote constante.
Ji Yong al principio presenta gran dificultad para seguirle el ritmo, pero una de las manos de Seung se posan en su tronco erecto y empieza a masturbarlo para que el placer vuelva a invadirlo y reemplace el dolor que sentía.
-D-Dios mío…-
Al poco tiempo, Seung deja de realizar los movimientos pélvicos ya que Ji se estaba encargando de todo el trabajo. Ji Yong levantaba y bajaba su trasero, provocando que el miembro de Seung entrara y saliera muchas veces desde su interior, sonidos obscenos se originaban gracias a ese mete saca del que se encargaba G Dragon. Era gloria pura, Ji sentía que su punto más débil era tocado en varias ocasiones por el pene erecto de Seung en su interior, y cada vez que era tocado sentía que podría desfallecer del placer. Empieza a sudar en gran medida con cada subida y bajada. Seung se encarga de observar la picante expresión de Ji y a deleitarse al contemplarla.
-Ahhh… ahhh… S-Seung Hyun…-
Ji Yong subía y bajaba más rápido su trasero, cierra sus ojos y se siente en el cielo ya que cada estocada le daba una oleada de placer que sucumbía su razón. Gime fuerte sin parar mientras que las subidas y bajas se hacían más rápidas, Seung Hyun gemía de la misma forma, ambos empapados en sudor y sintiendo el orgasmo muy próximo. El mayor no dejaba de masturbar a Ji Yong, quien parecía dejar de responder a la razón.
-Ahh… ahhh… se siente muy bien… Seung Hyun… se siente muy bien…- Sollozaba del placer y gemía entrecortadamente ante cada estocada. Empieza a realizar movimientos muy rápidos, sus gemidos se vuelven gritos llenos de pasión.
-¡JI YONG!-
-¡SEUNG HYUUUN!-
Ji siente una descarga eléctrica recorrer su cuerpo, una violenta eyaculación es bienvenida de la mano de Seung quien deja de masturbarlo al momento de que ese líquido blanquecino sale disparado del miembro de su líder. Cuando las paredes internas del menor se contraen, él ya no aguanta ni por un segundo más. Se corre dentro de la estrecha y cálida entrada de Ji y llena su interior con su semen caliente. De pronto, el cuerpo de Ji se desploma sobre el de TOP y permanece rendido en esa posición tratando de regularizar su respiración.
Ambos jadeantes, se quedan en esa posición. Seung rodea el cuerpo de Ji con sus brazos y lo abraza apegándolo a su cuerpo. Cierra sus ojos y se deja llevar por los movimientos que realizaba el cuerpo de Ji al tratar de regularizar su respiración.
-Ngh… no te había… avisado…- Murmura Ji, empezando a cerrar sus ojos y correspondiendo como le era posible el abrazo a Seung Hyun.
-¿Mm?- Acaricia los cabellos del menor y trata de acomodárselos un poco. Seung Hyun abre sus ojos con pereza cuando Ji Yong se aparta de su cuerpo con lentitud y aparta su trasero del miembro de TOP, un sonido obsceno se escucha cuando todo el semen cae del interior de Ji hacia las sabanas. Pero a ninguno de los dos le interesa. El líder se aparta a un lado y se recuesta al costado de Seung, abrazando uno de los brazos de su compañero.
-Mañana a primera hora grabaremos con los demás. Despiértame a eso de las ocho.- Cierra sus ojos y se coloca en una posición completamente cómoda para dormir. No espera ninguna respuesta de parte de Seung Hyun, ni siquiera una opinión. Le daba igual, lo que había dicho era una orden más que un aviso informativo.
-¿Hablas en serio?…- Seung suspira frustrado, ya que su cuerpo estaba demasiado cansado como para madrugar al día siguiente. Espera una respuesta de parte de Ji, respuesta que jamás llega.
-Oh vamos, llegué hace horas. No puedes hacernos esto.- Gira su cabeza hacia un lado para seguir replicándole y cuestionando la idea de ese perfeccionista adicto al trabajo.
Pero la visión que recibe es algo muy diferente a lo que estaba pensando.
Seung Hyun no puede evitar sonreír sin remedio. Ji Yong se había quedado plácidamente dormido a su lado. Su respiración se había regularizado y se veía como su pecho subía y bajaba con lentitud. Su rostro se veía en paz y sus facciones eran muy suaves y relajadas. Podía apreciar un par de gotas de sudor en su rostro debido a toda la acción anterior. De seguro había quedado agotado y por eso no había resistido ni cinco minutos en quedarse despierto.
Lo único que hace TOP al contemplarlo es apresurarse y cubrirlo con unas mantas. Se cubre a sí mismo y se acomoda a su lado, acurrucándolo contra su pecho con todas las intenciones de dormir abrazado a él. Antes de quedarse dormido al igual que su líder, le es inevitable que recordar los momentos que había pasado con Ji. Las cosas absurdas que había realizado con él, las travesuras que habían atravesado juntos.
La irresponsabilidad juvenil de sus actos de ese último año, que los había incitado a no parar en su actual relación. Creía en lo más profundo de su ser, que si no hubiera sido por esa necesidad de experimentar la adrenalina de una travesura adolescente, nunca se hubiera ganado a Ji Yong.
Él no era muy amigo de realizar tales acciones. Pero Ji Yong era un manojo de juventud andante, ignorando su verdadera edad. Un poco de eso se le había contagiado a Seung en esos últimos tiempos y por eso ambos habían decidido seguir en el mismo ritmo. En la misma frecuencia.
Si… G Dragon le había contagiado cierta parte de su juvenil manera de pensar y de tomar riesgos.
Si tan solo hubieran sabido que esa clase de actos traerían ciertas consecuencias.
Too fast to live. Too Young to die ~.