No puedo creer que esté haciendo esto, y más aún, que haya accedido a hacerlo tan fácilmente. Nunca he sido alguien fácil, pero me es imposible negarme. Siempre estamos juntos, hacemos todo los dos, en cada cosa que hago está presente y siempre ha estado a mi lado apoyándome, por lo que no llego a comprender el por qué justo ahora, en este preciso momento cuando podemos estar más tiempo juntos me sale con esto ¿Un viaje completamente solo?
Nunca he viajado solo y menos por tanto tiempo. La perspectiva de dos meses lejos de casa jamás me había parecido tan eterna. Lo que no entiendo es por qué esta vez es diferente, la he acompañado a cada viaje de negocios ¿Por qué ahora no podía? No tenía escuela ya que las vacaciones de verano acababan de comenzar, así que ¿Cuál era el problema?
No me creía eso de que estaría tan ocupada que no tendría tiempo para estar conmigo y que terminaría aburriéndome encerrado en el hotel.
Siempre se hacía un tiempo.
Como madre soltera trabajó arduamente para mantenerme y darme todos mis caprichos, y aún así siempre estuvo presente. Nunca faltó a mis presentaciones con el club de teatro o a las reuniones de apoderados, me llevaba a la escuela cada mañana y siempre me esperaba con comida casera cuando salía de clases. Éramos tan cercanos que ni siquiera sentía la necesidad de tener demasiados amigos o ser agradable con los demás, que ella estuviera a mi lado es lo único que necesitaba.
Salíamos de compras, íbamos al cine y a comer. Me ayudaba con mis deberes y me consolaba cuando me sentía triste. ¿Por qué necesitaría a alguien más? La única persona a la que estimo casi tanto como a mi mamá es mi primo Taemin, que ha sido mi compañero de juegos desde que tengo memoria.
Me basta y me sobra con ellos dos.
Aún así en esos momentos me encontraba haciendo las maletas para el dichoso viaje. Dos meses en la casa de campo de la mejor amiga de mi madre. Es una mujer agradable, no tengo nada que decir, he compartido excelentes momentos con ella e incluso la llamo ‘Tía’ de cariño. Pero no creo ser capaz de soportar dos meses lejos de mi lugar de confort, lejos de mi mejor amigo y de mi mamá.
- ¡Bummie! ¿Ya terminaste de hacer tu maleta? ¡Ya falta poco, tenemos que ir al aeropuerto!- Gritó mi madre desde el primer piso.
- ¡Ya voy Omma! ¡Un segundo!- Sinceramente creo que necesito más de un segundo. Comencé intentando llevar solo lo imprescindible en una maleta y terminé con cuatro a punto de reventar. No sirvo para empacar, además ¡Dos meses son mucho tiempo! Entre la ropa, los zapatos, accesorios, libros, mi computador y mil cosas más el espacio se hace nada. Literalmente nada. Por otra parte jamás he ido al campo, no sé con certeza qué necesitaré y al estar en medio de la nada no creo poder ir de compras tanto como me gustaría.
Lo más seguro es que me será difícil acostumbrarme. Estoy habituado a la vida en la ciudad. He vivido toda mi vida en Seúl y las aglomeraciones, el ruido, la gente y la rapidez de la vida son una parte esencial de mi… no creo ser capaz de soportar mucho tiempo sin aquello. El ritmo lento y calmado del campo terminará logrando que me arranque el pelo a tirones.
- ¡Rápido Bummie, se nos hace tarde! – Exclamó abriendo la puerta de mi habitación. Ahogó una exclamación al ver tantas maletas pero finalmente no dijo nada. Me dio unas palmadas en el trasero antes de comenzar a arrastrar los pesados bultos al auto.
Ya casi no hay vuela atrás, estábamos a cinco minutos del aeropuerto y verdaderamente deseaba poder decirle que regresáramos a casa. Comenzaba a angustiarme ¿Qué haría allá solo?
- Omma… aún puedes arrepentirte y llevarme contigo.- Prácticamente imploré.
- Bummie querido, ya te dije que no puedo. Además tu tía está muy emocionada por tenerte allá, sé que el lugar te encantará. Tiene un establo con caballos así que podrás aprender a cabalgar ¡Estoy segura de que te verás como todo un príncipe a caballo! –Si se encontrara de pie en estos momentos lo más probable es que estaría pegando saltitos y aplaudiendo animadamente como una niña pequeña. -¡Prométeme que me enviarás muchas fotos!
- Pero Má… será extraño ir a ese lugar sin ti, te extrañaré demasiado.
- Yo también te extrañaré mucho, pero es la única opción, no puedo llevarte ni tampoco estaré tranquila si te quedas solo en casa. Te llamaré todos los días y te compraré muchos regalos de cada lugar que visite. Son solo dos meses y luego todo volverá a ser como antes, haz un esfuerzo por mí ¿Sí? – Pude notar la aflicción en su voz, de verdad le costaba dejarme ir. Me extrañaría tanto o más que yo a ella.
Hacer un esfuerzo no dañaría a nadie.
Suspiré – Está bien, solo porque tú me lo pides. Pero… quiero que me prometas que si llego a un punto en que ya no aguante más y me sea molesto seguir allá me permitas volver a casa, aunque este solo ¿De acuerdo?
- De acuerdo, es un trato. Aunque sinceramente no creo que quieras volver…- Sonrió mientras alejaba una mano del volante para acariciar mi mejilla. –Te amo hijo.
-Yo también mamá.
Será la primera vez que estemos separados por tanto tiempo, toda una nueva y aterradora experiencia, casi una aventura. Pero soy almighty Key, puedo superar esto ¿Cierto?