Itachi veía hacia el mar, mirando como el sol entraba poco a poco detrás del océano, los rayos bañaban el ocena azul, los cielos pintados de anaranjados y rojizos, un bello ocaso, todo era tan pacífico y hermoso, sin ningún ruido más que las olas, el viento tenue, y una que otras gaviotas, respiro profundo y sintió que alguien se removía de su pierna, vio hacia abajo y ahí estaba su esposo, dormido sobre su pierna, la escena no podía ser más hermosa, el rubio agarraba su pancita ya de 9 meses, se veía enorme pero por eso no dejaba de ser bello, habían pasado 9 meses caóticamente hermosos, y los había disfrutado cada uno de ellos, miraba a su esposo este tenía un puchero en sus labios, ‘’¿acaso sigue enojado? Que adorable’’
Poso su mano en la mejía del rubio acariciándolo suavemente, no quería despertarlo solo para que comenzara a rabiar otra vez, sonrió divertido pensando unas horas antes lo que había pasado
Flasback
-te gusta el lugar Dei?
-sii, claro que si está cerca de la playa
-te equivocas es la playa privada de los Uchiha.
-y ahí vas con tus modestias-decía fastidiado.
-oh vamos Dei-chan-decía cantado.
-odia que me llamas así Itachi idiota!!
-oh que adorable.
-imbécil no sonrías cuando digas eso! Aghh vete a la mierda.
Itachi no pudo ni replicar porque su esposo salió de la mansión tan rápido como si hubiera visto un fantasma, salió tras él, agarro un suéter para Deidara y las llaves y salió tras él, el rubio sintió las pasos detrás de sí, cada vez más cerca.
-te atreves a acercarte y te arranco las pelotas.
Itachi no dijo nada, pero si le dio espacio al rubio, no tenía miedo de su amenaza solo sabía que su rubio necesitaba su espacio, ese día había amanecido con un mal humor y eso que esas etapas del embarazo habían acabado, cuando vio que el cuerpo del rubio estaba temblando, podía que estuvieras cerca de la playa, pero era una época de frio, se acercó con cuidado y le puso el suéter con cuidado, Deidara no dijo nada y solo agacho la mirada, cuando sintió la mano de Itachi alejarse la agarro.
Itachi abrió los ojos sorprendido, y correspondió al apretón de su mano acariciándola suavemente para caminar al lado del rubio, no dijeron nada, solo iban agarrados de las manos, mirando hacia adelante, Itachi desvió la mirada un poco al ver una floristería, estaba repleta de flores hermosas, y de la tienda salió un bello doncel , con su traje de trabajo, estaba regando las flores, Itachi lo miro un segundo si duda era hermoso, sus cabellos lisos y algo largos en azul, y sus ojos grises, seguro tendría un buen varón que le cuidara, así como el cuidaba a Deidara, sonrió y el doncel lo vio, sonrojándose de inmediato.
Itachi aparto la mirada sutilmente, Deidara había visto todo, y no estaba de buen humor ni paciencia, se soltó de la mano de Itachi de una manera brusca.
-qué pasa?
-ve y comete a ese doncel!!
-oh vamos Dei….
-TE LO DIJE!! Te dije que me engañarías y no me querías cuando tuviera tremenda pansa!!
-Dei…
-NO, CALLATE!! ERES UN CAPULLO! Pues vete con él, engendra tu hijo en él, pues quien sabe si este que llevo aquí es tuyo!
-Deidara!-lo había dicho fríamente.-compórtate, nos están viendo.
El rubio sintió un nudo formarse en su garganta, Itachi nunca le había hablado así, sus lágrimas se acumularon en sus ojos azules, y salió de donde estaba para caminar rápido y así nadie los viera.
Itachi suspiro, eso le había dolido, y actuó así por el dolor, había sido un patán, solo veía como su rubio se alejaba, sus piernas no se movían, todo mundo le veía, era irritante.
Se puso a pensar en él bebe, si no era de él, que aria? Tendría que dejar ir al rubio para que estuviera con el pelirrojo, todavía recordaba su promesa con Sasori, simplemente todo era un desastre, sintió como una delicada mano se posaba en la suya llamando su atención.
Itachi lo vio y se dio cuenta que era el chico de la floristería, este le miraba con un cierto brillo inocente, no tuvo ni tiempo de decir ‘’hola’’ porque el chico lo condujo hacia la floristería, entraron y el chico comenzó a buscar algo, Itachi le miraba curioso.
-espera… solo dame un minuto…
Tenía la voz un tanto ronca y provocativa, el chico salió del escondite de flores, y se paró frente a Itachi, viendo a todos lado.
-diablos no lo encuentro…
-se podría saber que buscas…
El doncel lo vio a los ojos, parecía que esos ojos negros le llamaban, Itachi igualmente contemplo esos bellos ojos grises, nunca había visto unos así, y se dio cuenta que el chico se aproximaba hacia él, pudo sentir el cálido aliento del doncel en sus labios, y reacciono, ladeo un poco su cara para que el doncel besara la comisura de su labio y parte de su mejía, el doncel entendió y se alejó un tanto triste y avergonzado.
-oye… no me mal entiendas, eres hermoso, pero yo no soy el adecuado, -le enseñaba su anillo- le amo tanto que no puedo darte un beso, un simple beso… lo siento.. –decía mientras acariciaba las mejías del doncel de un modo amable, el doncel soltó una lagrima y sonrió apenado.
-lo siento mucho, no quería…
-se nota que has sufrido, pero sabes las cosas buenas pronto vendrán, no desesperes y nunca te rindas…-limpio la lagrima que Corría por la mejía pálida del doncel, se acercó y beso su mejía.
-y-yo vi la pelea… te traje aquí para que llevaras una flor para reconciliarte y no… AHÍ ESTA!!
El doncel paso al lado de Itachi este le siguió con la mirada viendo como el doncel se metía entre tantas enredaderas cayéndose para después levantarse efusivamente y alcanzar una rosa de varios colores, paso por lo mismo llegando donde Itachi y se la entrego.
-es una rosa arcoíris, es la única que tengo, toma…- El doncel se la entrego e Itachi sonrió, era hermosa,-deberías ir tras el ahora… vete, vete…
-gracias… de verdad gracias… por cierto soy Itachi
-ya sabes… soy Lían.
Itachi estaba a punto de salir de la tienda cuando escucho el suspiro del doncel, lo miro y le sonrió.
-pronto vendrá el adecuado…
Y salió del lugar, el doncel al verse solo susurro ‘’el amor termino para mí’’
Itachi corrió por todas las calles buscando al rubio, pero simplemente no lo hallaba, hasta que llego a la playa, a lo lejos vio al doncel caminando en la playa viendo las olas, mojando un poco sus pies, se veía hermoso, se acercó rápido y cuando Deidara lo vio su mirada se llenó de enojo.
-te gusto quedarte con él? Ah?
-Dei… estas celoso.
-JAMAS!! Nunca lo estaría! Te lo advertí Itachi te engañare con el jardinero!
-ni que estuviera bueno…-decía burlón.
-pues me conseguiré uno bien bueno, para que me coja bien rico como dios manda.
-si claro, mejor que yo no encontraras, conozco todo de ti, querido.
-Eres un capullo de mierda.
Itachi se acercó y lo abrazo por detrás, poniendo la rosa cerca del estómago de Deidara para que lo viera, este al verla se le llenaron los ojos de lágrimas y no las contuvo más.
-t-tengo m-miedo que me dejes…
-eso no pasara, te amo demasiado como para dejarte ir…
-Y si este bebe no es tuyo?-preguntaba con temor.
-no lo sé Dei… no lo sé…
-Itachi…
El varón lo abrazo con cuidado, después que se tranquilizaron un poco se sentaron en la arena y Deidara se acostó en la pierna de Itachi, quedándose dormido, con la rosa cerca de el…
End del flasback.
Todo lo que en un día pasaba, Deidara abrió sus ojos perezoso al sentir como era acariciado, viendo los ojos negros de Itachi, este se acercó con cuidado y beso los labios de Deidara con cuidado, deleitándose con suavidad los labios contrarios, pero algo los hizo parar.
De pronto Deidara lo había agarrado del brazo de una manera dolorosa, se alejó un poco para darse cuenta que su rubio estaba mal, tenía la cara deformada por el dolor.
-qué pasa?
-n-no lo sé… aghh duele!!
-el que te duele?-preguntaba alarmado.
-mi estómago… no mi bebe… Itachi… tengo miedo…
-madre mía!!! -Itachi se levantó en seguida, y ayudo a levantarse al rubio, pero este no podía ni caminar.
-duele, mucho –comenzó a transpirar por el dolor.
-agárrate de mí, no te sueltes.
Itachi lo cargo y salió lo más rápido que podía, por algo tenia músculos y podía llevar al rubio de una manera fácil, llegaran a la residencia Uchiha, el rubio gemía del dolor y se veía pálido, lo subió al auto y se dirigió al hospital, acelero todo lo que podía, tenía que llegar al hospital, como fuera y no le importaba romper las reglas del tránsito, que se podía ir a 64 km por hora al diablo con eso él iba al 100km por hora.
Cuando llegaron volvió a cargar a Deidara y pido ayuda, las enfermeras llegaron, y trataron de tranquilizar a ambos padres primerizos.
Los condujeron rápido a la sala de partos, Itachi iba temblando, sus hijo iba a nacer, o diablos, todo había pasado rápido, pusieron rápido a Deidara y lo alistaron, mientras gimoteaba por el dolor, Itachi estaba entrando en pánico, la doctora entro y lo vio divertida.
-es su primer hijo?
-s-si…
-ja… tranquilícese todo saldrá bien-decía divertida.- él está sano y por lo que veo también él bebe, será una cesaría muy rápida, así que le pido que este al lado de su esposo y póngase ese traje por favor.
Itachi asentía a todo por más que él quería que sus piernas dejaran de temblar no podía, se puso rápido el traje y se acercó al rubio que estaba tendido, ya listo para el parto.
-maldito Itachi!!!! NUNCA MAS DEJARE QUE ME TOQUES IMBECIL!!! DUELE, A LA MIERDA TODO ME DUELE MUCHO SOLO SAQUENLO!!!!.
Itachi agarro la mano del doncel y este le miro con odio.
-tu maldito cabron!!!! Nunca más me la meterás! Entiendes!! No más ‘’bebes!!! AGHH MALDICION!!! PUTA MADRE SAQUENLO!!!
-Dei tranquilo….
-a la mierda la tranquilidad, así que cállate Itachi!! A ti no te están partiendo la maldita madre entiendes, la mierda de anestesia no me está ayudando…
le decía con enojo y dolor, Itachi trago duro, así que decidió quedarse callado mientras Deidara lanzaba una y mil maldiciones al aire, las enfermeras reían, era tan común ver a donceles o madres primerizas maldecir por todo y hasta sus esposos, hasta había pacientes que les había tirado zapatos, pero sin duda era la mejor versión.
-tenía que ser primerizos-decía la doctora, mientras todos asentían.-ya casi esta fuera, ya pronto acabara.
-oh claro que acabara si no todos ustedes se van a ir…
Itachi callo a Deidara para que no dijera otra barbaridad, después de un momento de silencio, un llanto quebró el silencio formado, Itachi suspiro cansado, y Deidara ahogaba un gemido de alivio, eso había sido lo más doloroso que había sentido en toda su vida.
Los dos se miraron, y ambos tenían u brillo especial, Itachi beso los labios del rubio y se separaron al escuchar a voz de la doctora.
-sin duda un varón hermoso, sano y fuerte, quieren verlo?
Itachi dudo por un momento, y si no se parecía a el? Y si no era el su padre, su mundo se vino abajo, Deidara lo noto y su mira se tornó triste, agarro la mano de Itachi esperando lo mejor, y asintió, Itachi volvió a temblar, la doctora se acercó a ellos con su bebe envuelto en mantas, cuando se acercó lo suficiente se lo entrego a Deidara, quien lo agarro torpemente, no sabía cómo cargar bebes y si se le caí, que iba hacer…
Tenía miedo pero al sentir como él bebe buscaba su calor olvido todo y solo lo vio a él, viendo su pequeño pecho subir y bajar, pequeño y sonrosado.
Itachi sonrió… su bebe era hermoso y si era ‘’SU’’ bebe no cabía duda, tenía el pelo oscuro azabache, y la tez blanca, sus ojitos se abrieron dejando ver esos pozos negros, era tal cual un ‘’Uchiha’’.
Su pequeño Uchiha, sus padres ya eran abuelos!! Tenía que decírselos, beso la frente de Deidara de una manera cariñosa y acariciaba a su hijo.
-gracias a dios…
Salió del lugar para llamar a sus papas, familiares, cada miembro de la familia fue llegando, todos le felicitaban, las puertas se abrieron y por ellas paso un pelirrojo cuando diviso a itachi corrió hacia él.
-Itachi… él bebe…
-Velo tú mismo.
Sasori acompaño a Itachi y llegaron al cuarto vieron a Deidara de lejos cargando al pequeño bebe, y Sasori no tuvo dudas, era de Itachi y no de él, tenía que rendirse como había sido su promesa, su corazón peso, pero era hora de decir adiós, apretó sus puños
-bueno me voy… cuídalos quieres.
-espera!
-qué?-decía cortante.
-conozco a alguien que podría hacerte feliz.
-eres increíble, me estas lanzando a los brazos de alguien más, que mal amante eres!.
-no seas capullo, lo hago para darte una pisca de dulzura a tu vida.
-no estoy para…
-se llama Lían, es hermoso y está falto de amor, no lo hagas sufrir más ni le rompas el corazón, quizá sea difícil pero después de lo difícil, de lo que te costó tanto podrás disfrutar de lo bueno.
-pero…
-está en la floristería, la única de este pueblo.
-lo pensare…
El pelirrojo se fue, dejando a Itachi, ‘’ahora le haces de cupido’’ se rio de su propio pensamiento, solo esperaba que todo fuera bien, y pues el, él estaba feliz.
Al fin tenía todo lo que necesitaba.
Tenía a sus dos amores.
-mira dobe se parece a mí!-decía Sasuke.
-por favor kami que no se parezca a Sasuke!!
-oye dobe!!!
Sasuke pellizcaba la mejía de Naruto y todos en la sala reían, Itachi entro y vio a cada miembro de su familia disfrutando de las tonterías de Sasuke y Naruto.
-este Uchiha se parecerá a mí-decía Itachi.
-oh claro que no!! Será como yo-decía Sai.- que no ves que salió igual a mí?
-eso quisieran todos… se parecerá al abuelo-decía Fugaku.
-pobre niño lo que le espera en esta familia.-decía con resignación Naruto y todos lo vieron.
-y que piensas dobe, que no me darás hijos? Estas muy equivocado tu tendrás muchos hijo de mí, de eso me encargare yo…
-oh insulso hermano menor cállate no hagas que me hijo escuche esas cosas.
El chiquito veía atento a todos regalando una que otra sonrisa dejando ver unos enormes hoyuelos, los donceles estaban fascinados viendo a esa cosita ‘’con patas’’ según Deidara.
Si… la vida le había dado lo mejor y de eso no le cabía duda.
-te amo Dei.
el rubio se sonrojo al máximo ya que lo había dicho con todos los presentes ahí.
-cállate…