Taemin se encontraba en su habitación, solo, aburrido, y caliente, como siempre.
Caliente pensando en una persona en la que no debería, era un enfermo y sabía perfectamente que tenía entrada VIP al infierno, pero no le importaba, siempre y cuando esa persona no se diera cuenta de sus pensamientos, seguiria masturbandose pensando en esta.
Sus papás habían salido a un viaje de trabajo, como lo hacían cada fin de semana, y su hermano Jonghyun había salido a una fiesta con unos amigos, o algo así. Su hermano era todo lo contrario a el, hacía todo lo que un chico de su edad debería hacer; Fumar, drogarse, tomar, ir de fiesta, tener sexo.
En cambio Taemin era el hijo ejemplo que cualquier padre deseaba tener; Responsable, honesto, no salía mucho y obtenia muy buenas notas. Aunque en realidad nadie conocia sus profundos y oscuros pensamientos.
Termino de apuntar unas cosas de la escuela, cerro su mochila y se recosto en la cama, mirando hacía le techo y pensando en el. Sus penetrantes ojos, su actitud rebelde y se relamio los labios al pensar en su escultural cuerpo y su perfecto abdomen marcado, el cual le daban ganas de lamer cuando lo veía por ahí paseando sin camisa y sudando después de hacer ejercicio.
Esa persona era nada más y nada menos que su hermano.
Al seguir pensando en el, noto como su miembro se endurecia cada vez más, y empezo a tejer fantasías en su cabeza; Imagino a su hermano abusando de él, partiendolo en dos, diciendole cosas sucias, obligandolo a que le chupara su polla (aunque en realidad el lo deseaba) y cada pensamiento hacía a Taemin ponerse más duro y caliente, era increible el efecto que su hermano provocaba en el.
Bajo su mano derecha y la deslizo lentamente por debajo de sus boxers, sintiendo la cálida y sensible piel de sus genitales. Cerro su mano firmemente alrededor de su miembro, haciendo un poco de presión comenzó a moverla de arriba a abajo, sintiendo la deliciosa sensación de la piel resbalando por su glande.
Soltó un pequeño gemido de placer, su mano derecha seguía subiendo y bajando lentamente por toda la extensión de su miembro, mientras con la izquierda comenzo a acariciarse los testículos.
Los sostuvo cuidadosamente en su mano ahuecada, masajeándose ligeramente y sintiendo una deliciosa presión en su zona pélvica.
Pasó su mano por su zona perianal, sintiendo el delicioso cosquilleo e imaginando que su hermano era el que le provocaba todas esas sensaciones, gemía suavemente mientras continuaba moviendo su mano de arriba a abajo por todo su pene.
Tiraba con fuerza de él hacía los lados de vez en cuando.
Aumento la rápidez con la que se estaba masturbando y comenzó a gemir cada vez más fuerte, extasiado y lleno de placer, pensando en Jonghyun penetrandolo tan duro, tanto como si lo odiara y quisiera desquitarse rasgando su delicada zona anal.
Se corrió gimiendo el nombre de su hermano sin darse cuenta y mancho toda su mano con su espeso semen.
Cerro los ojos con pesadez, y cuando los abrió, vió de reojo a una persona parada bajo el umbral de la puerta. Taemin se quedo en shock.
—Mierda, Taemin.. — Escucho la gruesa voz de su hermano.
—Jonghyun, y-yo.. No es lo que piensas — Apenas y pudo articular palabras. No creía en Dios, pero esta vez rezaba con toda su alma para que su hermano no hubiese escuchado cuantas veces gimió su nombre.
—¿Te estabas masturbando pensando en mi? ¿En serio? — Preguntó Jonghyun y Taemin pudo observar como sus ojos se tornaban más oscuros y con una pizca de deseo.
Genial, ahora su hermano se había dado cuenta lo enfermo que estaba.
Taemin no respondió nada.
—Te acabo de hacer una maldita pregunta y quiero que me la contestes —
Taemin sentía que se corria solo de escuchar su voz ordenandole algo.
—Y..Yo.. No sé —Respondió nervioso.
—Uhmm.. ¿Así que no sabes? — Cuestionó Jonghyun, acercandose lentamente a el, y Taemin sintió como su cara se tornaba del color de un tomate, aún tenia restos de semen en su mano.
Se armo de valor y respondió por fin:
—Sí, me masturbe pensando en ti.. Yo, lo siento. ¿Puedes salir de mi habitación y dejarme solo? —
Aunque por supuesto que eso no era lo que Taemin deseaba en ese momento.
Jonghyun se acerco lo suficiente a donde se encontraba Taemin acostado y sin dejar de mirarlo a los ojos le pregunto:
—¿En serio, quieres que me vaya? —
Taemin volvió a quedarse callado.
—¡Maldita sea! Contestame cuando te pregunto algo — Tomo a Taemin de el cabello y lo jalo para que lo mirase a los ojos.
Dios, a Taemin lo ponía duro cuando Jonghyun le daba ordenes y lo trataba de esa manera, comenzó a sentir su miembro poniendose duro otra vez.
—Respondeme, pequeño — Esta vez hablo más tranquilamente, pero con un tono de voz demasiado seductor.
—Sé que no quieres que me vaya, sé que quieres que me quede aquí y te coja como la zorra que eres, pero me tienes que suplicar que lo haga —
Oh no, Taemin no haría eso, a pesar de que ya estaba duro como una roca. ¿O sí?
Jonghyun le dedico una arrogante sonrisa, dio la media vuelta, caminando por la habitación hasta dirigirse a la puerta, esperando a que Taemin dijera algo, y cuando llego al umbral escucho:
—¡Quiero que me folles! — Dijo Taemin en un tono de voz un poco alto y Jonghyun se volteo para verlo sin decir nada.
—Por favor, parteme en dos, te lo suplico, no me dejes así de duro —Suplico Taemin y Jonghyun se dirigió a el, haciendole una seña para que se parara y este obedecio.
Jonghyun analizo la dulce y tierna imagen de Taemin, la imagen de inocencia que siempre había puesto a su polla dura como a una piedra, sus deseos se iban a cumplir, lo iba a tener a su merced y lo iba a follar de las maneras que el siempre se había imaginado.
—Quitame la ropa —
Ordeno y Taemin hizo su trabajo desabrochando la camisa de vestir que su hermano llevaba y se acerco un poco a su cuello para inhalar su varonil aroma. Termino de quitarle la camisa y desabrocho el cinturon y su pantalón, bajandolo junto con sus boxers, liberando su grande y erecto miembro, Taemin se relamio los labios y le iba dar una lamida cuando Jonghyun lo agarro del cabello haciendo que se parara.
—Aquí el que da las ordenes soy yo, yo te voy a decir que me hagas y cuando —
Acerco sus manos al debil cuello de Taemin, apretandolo y haciendo casi que se pusiera morado y después lo solto e invadio salvajemente toda su cavidad bucal, explorandola por completo y después todo fue una guerra de lenguas, un beso demasiado excitante y lleno de necesidad.
Jonghyun mordió el labio de Taemin lo suficientemente para sacarle sangre y este gimió.
Después, bajo su mirada hacía el ya demasiado notable bulto de Taemin.
—¿Te gusta, eh? ¿Te gusta que te trate mal? ¿Eso te pone duro? —
Mierda, sí..
—M-me encanta, estas haciendome todo lo que siempre soñe que me hacías —Respondió con la respiración agitada.
—Mm.. Muy bien, ahora arrodillate y enseñame lo que puedes hacer con esa boquita —