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-Bien ya se fue tu hermano, ¿Ahora qué?
-Ni idea, me largo a ver anime y tu haz lo que quieras
-¿Qué genero veras?
-No sé, a ver que me encuentro-(Este tipo porque pregunta, como si le interesara)-De todas formas no creo que te interese
-No me conoces-Sonríe
-Me voy a mi habitación-(¿Qué me pasa? mi corazón está muy acelerado y siento que estoy sonrojado ¿Por qué? Solo sonrió. Pero es que esa sonrisa jamás la había visto, es hermosa)
-¿Por qué estas sonrojado?-Sonríe maliciosamente-¿Es mi culpa?
-¿Qué? no… no estoy sonrojado-Se da vuelta e intenta correr a su habitación, pero es tomado del brazo
-Espera no huyas de mí, perdón no era mi intención ser tan brusco
Cuando menos piensan, Izaia tiene abrazado al chico, este al principio intenta escapar pero de pronto solo deja de forcejear. El menor mira al mayor, este solo piensa que los labios del chico castaño son hermosos y deseables, se acerca más y ambos sonrojados se dan un tierno y largo beso. Johan reacciona y empuja al mayor.
-Esto no está bien, somos chicos- agacha la mirada (Nunca pensé que mi primer beso iba a ser con un chico, menos que iba a ser con el mejor amigo de mi hermano)
-Lo siento no pude resistirme-(¿Qué estoy haciendo? besar al hermanito de mi mejor amigo, vaya sí que soy un idiota)
Sin decir nada más Johan se da vuelta y corre a su habitación.
-Valla forma de empezar-dice Izaia
Johan entra a su habitación, cierra la puerta y corre hacia su cama y se deja caer en ella.
-Pero ¿qué demonios paso? bese a Izaia, pero en que estaba pensando, no más bien en que estábamos pensando- subconscientemente se toca los labios-¿Qué pasaría si mi hermano se entera?
Mientras tanto abajo Izaia se encuentra sentado en el sofá, con rostro de preocupación
-Mmm... Ahora ¿Qué hago?, si antes era difícil intentar acercarme a él, ahora será imposible (Pero en verdad deseo volver a besar esos labios, que sé, jamás han tocado otros, ver ese dulce rostro sonrojado y esos ojos cafés verme con ese mirar de deseo)-¡Necesito hablar con él!
Sube y se dirige a la habitación de Johan.
-(A ver cómo me va)-Toca a la puerta-Podrías abrir necesitamos hablar de lo que sucedió.
-Abre la puerta-No hay nada de qué hablar, olvidemos lo que sucedió y mejor no hablemos, entre menos nos veamos mejor para mí-Lo dice sin mirarlo ni un poco a los ojos.
-¿Qué cómo puedes decir eso? yo….yo no quiero olvidar, quiero besarte de nuevo, volver a sentir tu cuerpo cerca del mío (¿Qué me pasa? yo… yo nunca me había comportado así).
-¡YO NO SOY GAY!-lo dice sonrojado
-Yo tampoco pero quiero tenerte-Se sonroja
Johan intenta cerrar la puerta, pero Izaia la detiene, la abre por completo y toma a Johan del brazo.
-¡SUÉLTAME! Búscate a otro-Forcejea
-Pero yo no quiero a otro, ¡te… TE QUIERO A TI!
Con la mano izquierda lo tiene del brazo y con la derecha lo toma del rostro y lo besa, ese beso que comenzó dulce, se convirtió en un beso lleno de pasión, suelta su brazo y lo toma por la cintura, comienza a guiarlo hacia la cama, lo empuja a ella y se posiciona sobre él chico castaño.
-Espera, no, detente- le dice el castaño asustado al saber hacia dónde se dirige todo.
-Confía en mí-Sonríe
Comienza a besarlo de nuevo pero ahora en el cuello, esto provoca que el chico se estremezca, con sus manos comienza a desabrochar el pantalón de este, se detiene, se aleja un poco y voltea a verlo. Johan se encuentra con los ojos cerrados, sonrojado y tomando con fuerza la cobija de la cama. Izaia vuelve a lo que estaba haciendo le quita la camisa al chico castaño y comienza a jugar con sus pezones, provocando gemidos del castaño, ahora bajaba una de sus manos hasta llegar al sexo del más pequeño y comienza a masturbarlo
-Haaa… De… detente
-¿Estás seguro? porque tu boca dirá detente, pero tu cuerpo me invita a que prosiga
Continúo con sus caricias, el chico castaño estaba a punto de correrse en la mano del mayor.
-Espera voy a… voy a venirme-Gimió, arqueo su espalda ante el espasmo que le vino, se quedó muy quieto mirando al mayor y con su respiración agitada
-Lo siento- dice el mayor- no debí haber hecho esto lo siento- sale de la habitación dejando al otro con un sentimiento nuevo, para él.
-¿Qué demonios acaba de pasar? si él no se hubiera detenido, yo me hubiera entregado… no en que cosas estoy pensando mejor me iré a bañar.