Camino entre la gente sin poner demasiado atención a nada en realidad. Ya estaba cansado de darle tantas vueltas al mismo asunto la mejor salida que encontraba era sin duda el observar a las personas pasar, podría decirse que el verlos tan sumergidos en sus propios problemas y complejos, le hacía sentir que no era el único con problemas “mal de muchos, consuelo de tontos” resonó en su cabeza y ante ello negó con una tonta sonrisa en sus labios, en este momento lo único que deseaba era solo dedicarse a respirar, solo inhalar y exhalar, que su vida solo fuera eso.
En estos momentos lo que más quería seria estar con su familia y la tranquilo que era estar sentado en la sala escuchando a su abuela corriendo de un lado a otro mientras su abuelo se dormía viendo el televisor. Aunque siempre estaba renegando de lo que le hacían hacer, ahora se daba cuenta de la falta que le hacían aunque era muy exagerado que los extrañara solo por 2 días que no los había visto y no era que Iruka y Kakashi no le dieran ese calor que todo buen hogar tiene. Solo que esos días había puesto el solo su vida patas arriba y aunque deseara contárselo a alguien, las palabras no le salían de la boca, se sentía totalmente avergonzado por lo que había hecho, pero no arrepentido, un Uzumaki jamás se arrepiente, tomo asiento en una de las bancas de la gran plaza, cansado de deambular si sentid.
Cerró los ojos y recargo la cabeza en el respaldo de la banca, dejando divagar su mente de nueva cuenta, ¿y qué tal si “Sasuke” no lo hubiera rechazado? Lo hubiera llevado a su casa y hubieran intercambiado teléfonos para que se citaran en un lindo lugar para qué se conocieran mejor “y no querrás un departamento en Miami, verdad” cierto era demasiado fantasiosa esa idea, pero no podía quedarse en la fatídica idea de que al despertar le preguntar el por qué no sea había ido ya, con esa mirada tan fría y llena de odio que le dedico esa noche en el carro “lo único que queda es esperar a encontrarlo de nuevo y que él me pueda recordar”, recordar, si él me recuerda quiere decir que no solo fue una noche mas, no solo una persona más. Y me recuerda, ¿en verdad fui el primer chico con el que se acostaba?.
Sintió que una mirada se posaba en él y un poco incomodo levanto la cara para ver quien lo miraba con tal intensidad, chocando con la mirada de la única persona a la cual en ese momento no quería ver, trato de hacerse el disimulado y voltear la cara, pero cuando la chica levanto la mano para saludarlo supe que no había escapatoria.
Camino con prisa hacia donde estaba sentado, empujando a la gente con el montón de bolsas que traía cargando, parando justo enfrente de él y con una enorme sonrisa, lo saludo. Vestía un lindo vestido blanco el cual apenas le llagaba a las rodillas, perfectamente arreglada y maquillada _ Hola Naruto-kun, creo que el destino quiere que nos ágamos amigos_ “o torturarme” pensó Naruto, mientras se levantaba y tomaba algunas bolsas al verla tambalear.
--Te ayudo Sakura_ pronuncio y ella pareció ruborizarse por la atención, ese chico parecía el hombre perfecto.
--Claro que si_ le entrego un manojo de bolsas y después pareció pensárselo un poco para preguntarle_ ¿Quieres una taza de café?
El rubio solo asintió con la cabeza.
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--Y que quieren tomar_ pregunto la camarera del establecimiento, Naruto miro la inmensa lista de bebidas que había en el establecimiento, decidiéndose por un frappe, mientras que Sakura pedía una limonada.
Después de que se fuera y regresara con las bebidas, Naruto observo meticulosamente a Sakura, la cual ni cuenta se daba, viendo con más claridad esos ojos esmeraldas, y en instantes pensó que estaba viendo los ojos aguamarina de un arisco pelirrojo_ que bonitos ojos tienes_ le dijo y ella pareció atragantarse con la bebida_ eres pariente de los Sabaku_ pregunto sin querer.
--No, como crees, si mi familia y la de él no se pueden ver ni en pintura... bueno, si _ rio y señalo su ojos_ lo que pasa es que mi madre es de esa familia pero cuando se caso con mi padre, le quitaron toda relación que tenia con ellos y por eso yo no los considero familia.
--Mmmm_ el rubio se lo pensó _y por eso tu cabello es rosa no, porque ellos son pelirrojos o bueno es algo así como...
--Que bien informado estas_ le sonrío Sakura y enredo uno de sus dedos en su mechón de cabello_ pero ahora si te fallo, lo que pasa es que mi cabello no es de este color jajá.
--¿No?
--Jajajaja, claro que no, cuando has visto a alguien con el cabello rosa, lo que pasa es que me lo pinto así, te contare que mi cabello es de un color negro opaco, pero a mí no me gustaba para nada, así que me lo puse de este color jejeje.
--Pues en mi opinión se te ve muy bonito_ le dijo el rubio, mientras que tocaba un mechón del cabello de ella.
--Eres muy lindo, como desearía poderme enamorar de una persona como tú y no del gañan con el que estoy……_su vos se quebró y bajo la cara, aun no estaba totalmente recuperada_ bueno con el que andaba.
Naruto pareció congelarse por lo dicho, el tan tranquilamente platicando con ella, siendo que se había acostado con su “ex novio”, se fue a aventurar con él, que cucaracha tan pequeña era. Ella tomo ese silencio y autoregaño del rubio como molestia.
--No, Naruto, pensaras que tonta soy por seguir a alguien de ese tipo, pero es que tu no conoces al verdadero Sasuke, al detallista y meticuloso, el que da esas pequeñas sonrisas pero tan llenas de cariño, comprensión y aprecio aunque pocas veces lo hace, cuando lo hace te sientes tan llena y protegida de su amor que solo te queda el tratar de nunca separarte de él, soñado con nunca poder alejarte de él_ sintió como su cuerpo empezaba a colapsar y templaba, todo lo antes dicho se había clavado como agujas cizañosas en su piel recordándole los momentos que había pasado con él. Queriendo volver a estar enredado entre sus brazos y calor de su pecho, sus ojos se cristalizaron y haciéndole un nudo en la garganta, el mismo que podría jurar que sentía la chica. Los dos padecían el mismo síndrome, todo daba referencia a que estaban totalmente enamorados del mismo chico y eso extrañamente le hacía sentir mejor, alguien lo comprendía, levanto su mano y acaricio la de la chica que reposaba sobre la pequeña mesa
Ella levanto la cara y una dulce sonrisa fue la primera que pudo observó. La comprensión en la mirada azulina, hizo que su corazón se sintiera consolado, como si unos brazos invisibles lo rodearan y le trasmitieran un dulce calor_ gracias.
--Creo que es lo mínimo que puedo hacer_ sus ojos demostraron duda, porque le decía eso, el no tenía nada que ver con lo que estaba pasando y aun así estaba ahí, apoyándola, el chico le volvió a sonreír, haciéndola preferir no preguntar.
--Tienes algo que hacer_ al rubio le extraño la pregunta y ella continuo lo que quería decir_ es que quería saber si podías ayudar con todo esto, no creo poder llegar en una pieza con todas estas cosas encima, jejeje.
--Claro que si dattebayo.
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--Parece que aun no despierta verdad_ con bandeja en mano entro a la habitación, cuidando que no se callera ningún vaso ni frituras de la charola que traía
--Sigue igual_ comento apenas Sai mientras seguía observándose en el espejo meticulosamente. Dejo la bandeja en la cama, echando el cabello hacia atrás de su oreja cuando levanto la vista y la poso en su hermano, el cual aun parecía entretenido con el paisaje rural que le daba el balcón, se acerco a él, recargando sus codos en el barandal de metal, cruzando sus brazos para tener mejor apoyo y también observo el lugar. Se podían ver las diferentes casa, pequeñas y sencillas, acomodadas de una forma chusca y desordenada, demasiado apretujadas entre sí. Un aire volvió a soplar y desalineo el largo cabello de Itachi, asiendo que volteara la cara para que no le entrara ninguna basura a sus ojos, desalineando todo su siempre liso y acomodado cabello, el moreno bufo y miro a su hermano que parecía no inmutarse con nada.
--Que tanto piensas_ trato de empezar una conversación, sin éxito alguno ya que ni siquiera el otro se digno en parpadear para dar a entender que había escuchado lo que dijo.
--Nada _se escucho apenas, e Itachi comprendió claramente lo que se significaba el “nada” de su hermano, que claramente se trataba de un mucho.
Se separo del barandal y dejo que el otro siguiera pensando, volteo a ver a Sai el cual parecía luchar con una corbata mal puesta y suspiro para sus adentros, más torpe no podía ser, vio por última vez ese hermoso cielo despejado, tan puro y limpio, de un claro azul para después adentrarse en la pequeña habitación.
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--Y que piensas de todo estos
--Creo que es demasiado, chusco, que nos hallamos vuelto a encontrar
Caminaban por la cera, ya se había hecho un poco tarde, pero ellos apenas se habían dado cuenta, solo cuando al salir de la plaza vieron los distintos tonos de naranja y rojo del atardecer entendieron que en verdad había pasado el tiempo.
--Mira este es mi departamento_ señalando un pequeño edificio que apenas contaba con tres o cuatro pisos, nada ostentoso, como había imaginado que sería su departamento, hasta podía decirse que ese lugar no parecía para nada fuera de lo común_ bonito no.
--Eto sí_ Sakura camino, hacia al escalón de la entrada y dejo algunas bolsas en el piso, para poder buscar las llaves de sus bolso, el rubio también se acerco y empezó a buscarlas, encontrándolas, entre una bolsa de zapatos.
--Que desorden _no quería separarse del rubio, pero se les estaban acabando las escusas, bueno otro día lo vería_ muchas gracias Naruto-kun, por traerme hasta acá.
--No fue nada_ le tomo su mejilla la acaricio con ternura, mientras ella parecía ruborizarse un poco más. Ella le brindo una de esas sonrisas, llena de amistad y aceptación, haciéndolo sentir la peor basura podrida que podría haber en el planeta.
La pelirrosa se acerco para darle un dulce beso en la mejilla, pero en el último momento sintió que su tobillo se lastimaba y apenas se pudo sostener del cuello del rubio, el cual la agarro con fuerza de la cintura para que no se fuera a caer.
--Mira qué hermoso, uno sale a caminar con este atardecer y me encuentro con una linda escena de enamorados_ el rubio giro la cara, para ver quién era la susodicha que hablaba. Mientras que Sakura mantenía la cabeza gacha tratando de contener toda la furia que le causaba esa tipa, mejor momento tenía que encontrarla, claro, se entera que rompe con Sasuke y la muy desgraciada vuelve para poder reconquistarlo.
Naruto la observo de pies a cabeza, una chica pelirroja, con gafas gruesas, y una vestimenta un poco inadecuada, para el frio que hacía, pero haya ella, lo que si no entendía era el por qué se entrometía, ni que la conocieran….
--Hola Karin_ hablo Sakura volteándola a ver, caminando enfrente de la tipa esa, la cual también se acomodo enfrente de ella, como si se estuvieran preparando para una batalla_ que haces por aquí, yo que sepa este no es lugar para que andes buscando clientela.
--Claro que no, ni te preocupes que no pienso bajarte la tuya, solo quería pasar a saludar.
--A fastidiar será no crees
--La que quieras, pero como veo que estas un poco “ocupada”_ marcando las comillas con los dedos, ironizando, lo que decía_ que poco te duro el encanto querida ja, no que jurabas amor eterno, apenas te vez libre y te andas revolcando con cualquier persona.
Sakura sintió reventar, dispuesta a golpear a la otra tipa hasta que se tragara todo el veneno qué había ido a esparcir, pero no pudo moverse, ya que estaba sujetada por la cintura por unos brazos, levanto la vista y pudo ver al rubio, el cual ya no tenía esa linda sonrisa en sus labios, si no que sus gestos era serio y su mirada parecía lanzar fuego hacia la otra chica.
--Que te importa si ella y yo somos pareja, deberías preocuparte mejor por tu forma de comportarte con las demás personas y no andar de metiche, si Sakura se busco a alguien más, es que comprendió que el novio que tenia no era para nada bueno para ella, que no vale la pena buscar a alguien que juega con los sentimientos y la toma como menos _la otra solo lo observa de pies a cabeza y se giro con aires de superioridad, despidiéndose con la muñeca.
--Como sea, una contrincante menos para mí _y con eso se alejo tan tranquilamente como había llegado.
--Naruto, no sé qué decir_ La chica parecía bajar la guardia.
--No te preocupes_ le dijo, levantando la cara para ver apenas la silueta de la chica qué se alejaba_ pero me pregunto que tendrá el para que todo mundo se vuelva loco_ miro a Sakura que lo miraba cautivada, él le sonrió dándole un dulce beso en los labios, un apenas roce entre ellos, haciendo que Sakura quedara en shock, el rubio camino hacia el montón de bolsas y cogió la gran mayoría.
--Y bien donde las pongo.
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--Hágalo pasar_ colgó el teléfono, y miro hacia la puerta de su despacho, esperando que entrara, cuando vio la puerta correrse, miro con dureza a quien pasaba_ Sasuke.
--No soy el representante oficial de la empresa Varnas y vengo a comprar su empresa.