Entre las penumbras de la noche se podía distinguir una gigantesca mansión que parecía que deslumbra por si sola aun siendo que era muy antigua, no dejaba de ser de las más prestigiosas y hermosa de toda la región, por su inigualable estructura del siglo XVI y sus extensos jardines. Era la residencia de la prospera familia Hyūga que en esa noche habría abierto sus puertas para recibir a un sin número de invitados, por el cumplimiento de un año más de vida de la hija del poseedor de tan extravagante fortuna y heredero de todo el imperio Hyūga.
--Si que es grande, llevamos como 10 min. Tratando de encontrar la fiesta y ¿si ya nos perdimos? ¿Y si nos confundes con ladrones? _ empezando a darle un pequeño temblor al imaginarse en una celda fría y húmeda.
--No exageres, mira ya vamos llegando_ en efecto se iban acercando a un recibidor que estaba rodeado por un sin número de flores, donde encontraron a una hermosa pelinegra con una hermosa sonrisa nada común en su tímida cara.
--Que pasa Kiba porque frenas _percibiendo como su amigo se quedaba pasmado al contemplar a la flamante pelinegra que todavía no reparaba de su presencia_ he a Kiba, no se pero creo que hoy es un estupendo día para que le digas ciertas cosas_ dándole un leve codazo para que reaccionara_ bueno como que sobro por ahí me buscas no andaré muy lejos ok.
Empezando a acercarse a la pelinegra y dándole un efusivo abrazo junto un sonoro beso en la mejilla dejando a la joven muy desconcertada y también un poco enrojecida, dándole las felicitaciones por su cumpleaños y halagos por su inusual atuendo que traía, que era algo raro ver ala pelinegra vestida y arreglada de ese modo, no porque siembre se vistiera mal pero no era muy de ella esa vestimenta.
--Hola Kiba _ por fin notaba su presencia y por alguna extraña razón no pudo mover ningún musculo, “que le diría se atrevería decírselo, siendo tan distintos ella están inalcanzable, merecía alguien mejor, no no te subestimes díselo ya, ella debe de enterarse de lo que sientes ya luego veras que haces, animo”_ ¿Kiba? _Hinata lo miraba con extrañeza ya que había quedado como ido y no daba ninguna señal de vida.
--Ha hola Hinata _ por fin reaccionando después de un rato de andar en coma _ que bonita te vez, cuando te vi quede asombrado _sacando le un leve sonrojo a la susodicha dándole un toque encantador a los ojos de cualquiera.
--Bueno unos toques por aquí y otros por allá, nada espectacular _ restándole importancia al asunto _qué bueno que pudieran venir pensé que no…
--Como crees _bajando su mirada y brotándole un leve rubor en las mejillas es ahora o nunca _ Hinata tengo que hablar contigo de algo_ sorprendiendo a la chica por el cambio de de su amigo ,de verdad debe ser algo importante para que allá tenido ese cambio.
--Si dime_ no le gustaba por donde iba la cosa, logrando ponerla un poco nerviosa por la tensión que se había puesto en el habiente.
--Lo que pasa es que quería decirte que….
--Hinata!!!! Qué bueno que te encuentro _ abrazándola como si se le fuera a escapar pasando sus brazos por arriba de sus hombros y volteando después a ver a Kiba quien la miraba con sorpresa, como se le ocurría interrumpir exactamente cuándo iba a decir algo de suma importancia_ te importaría que te robara a hinatita por algunos segundos ¿no te enojas verdad?
Kiba solo afirmo efusivamente a la petición de la chica que al verla bien también era muy bonita y tenía su cabello de una tonalidad muy extraña, soltando un leve suspiro “parecía que algo se negaba a que le dijera ala pelinegra de su amor.”
--Bueno tengo toda la noche para poder decirse _ soltó para después empezarse a encaminar hacia la fiesta.
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--Primero lo primero Hinata-chan, FELICIDADESS!!!!! Por tu cumple espero que te la pases excelente en este tu día _felicitándola efusivamente a lo cual Hinata ni se inmuto conocía de sobra la falsedad del actuar de aquella chica y según recordaba solo así a eso porque iba a pedir algo o…_ bueno lo segundo es pedirte disculpa con anticipación por robar cámara cuando Sasu-kun se me declare y me pongan más atención a mí que a ti aun siendo tu cumpleaños_ o claro restregarme en la cara cualquier cosa, en la cual se crea que esta mejor que ella _ que paso Hinata cuando vas tú a conseguirte un buen galán.
--Ha eto... bueno yo todavía no tengo pretendiente que me llame mucho la atención y bueno creo que en este momento mi atención está en los estudios, si eso _ a ella menos le iba a contar su vida amorosa, no por nada había experimentado en carne propia lo chismosa que era, mas relacionado con las cuestiones amorosas.
--Ha Hinata sigues ilusionada con ese chico, sabes que él no puede estar a tu lado, pero animo algún día podrás tener un novio tan bueno como el mío, no te desanimes _ “si supiera en el conflicto que metió por su estúpida ayuda según ella, quien le dijo que tenía que decírselo en la cara, tranquila que no te arruine tu día.”
--Hey Sakura que no hay va Ino _ logrando distraer de su monologo que estaba empezando a decirle y encaminándose a donde antes se encontraba ha claro y tenía que buscar a Kiba para sacarle todo.
--Bueno Hinata luego nos vemos y no le cuentes a nadie que es sorpresa ok _ poniéndose un dedo en la boca en complicidad y guiñándole un ojo se fue feliz con su amiga, la cual la recibió efusivamente y empezaron murar entre sí, y no tenias que ser adivino para saber de que hablaban, solo con verlas sabias que estaban criticando a las personas que estaban en la fiesta.
--Hinata ya es hora de entrar, empieza a hacer frio.
--Claro, Neji-kun.
--Y que tanto hablabas con es arpía, después de tantos problemas que te ha metido, yo que tu ni le hablaría _ colocándose a su lado lo cual provoco un poco de nerviosismo en la joven.
--Nada…nada importante solo me decía que puede que pronto se convierta en la señora Uchiha _ sobresaltando a su acompañante y sacándole una leva sonrisa _ de que te ríes.
--Que después de los problemas que nos ha causado con su chisme de que éramos novios por fin le van a dar su merecido.
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--Por fin se fueron todos _ entrando a una oficina la cual por donde la vieras se podía ver el lujo y el detalle con la cual la habían decorado, algunos archiveros, un amplio sillón color carmesí , un pequeño comedor , al fondo destacaba a la vista un amplio ventanal que abarcaba toda la pared por el cual en ese momento solo se podía observar la oscuridad de la noche pero en raras ocasiones también se podía contemplar la ciudad si claro las nubes no sé interponían, y en medio de todo un escritorio de madera preciosa, en el cual se encontraba recargada una persona un poco ausente de lo que pasaba a su alrededor, posando la mayoría de su atención en unas esferas de metal que reposaban en sus manos
--Por fin podremos estar juntos _ acercándose a él a paso tranquilo y quitándole de las manos el objeto posándolo en el escritorio y levantándole la cara con suavidad y tratando de observar sus ojos azules lo cuales rehuían de su mirar.
--Que sucede _ soltándolo como un susurro cerca de su oído y empezando a bajar hacia su cuello y empezando a besarlo con esmero.
--Lo que pasa es que esto no debe continuar así _ tratando de alejarse pero siendo apresado por los brazos del pelinegro_ Itachi espera tenemos que… _ ya no pudo continuar sus labios fueron apresados en un desesperado beso, sentía como esto lo absorbía totalmente ya no podía pensar, lo extrañaba, lo extrañaba tanto, pero estos encuentros solo dejaban una cosa, un sentimiento, una tremenda desolación, porque tenían que ocultarlo.
Uno a uno fue desabrochando la camisa de su rubio amor, ya no podía esperar más, no podía contenerse mas, la indiferencia al pasar a su lado y no poder hacer nada, aunque él había sido el que marcase esa regla, el seguirla era como estar sin vida, y si eso sentía él, que podría sentir el que estaba enfrente de él--Por favor, en este momento no te alejes de mi Deidara.
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--Por fin te encuentro donde te habías metido_ no era que la fiesta fuera muy grande pero sí que había bastante gente y mas que el rubio se había ido arrinconar en una esquina de la carpa, si carpa el padre de Hinata había decidido mejor hacer la fiesta en los amplios jardines y poner a salvo el sin número de obras de arte que tenía en su mansión _ Naruto estas,….estas tomando_ ya más cerca de la mesa donde estaba sentado pudo ver como el rubio se serbia de una botella, y claramente se veía que se había servido de otras.
--Como voy a desperdiciar tanta variedad de licores que hay aquí _ dándole otro sorbo ahora más pequeño y después acercándoselo a Kiba _ quieres_ pero Kiba solo observo el vaso con asco y negó rápidamente con la cabeza, Naruto solo se encogió de hombros y continuo en su tarea de embriagarse, agarrando otra vez las botellas y sirviéndose con alevosía _ y como te fue…digo con lo de Hinata.
--Pues no pude decirle nada, una de sus entrometidas amigas me interrumpió cuando estaba a punto de decirle, pero no te preocupes Naruto que de esta noche no pasa y eso te lo prometo _ solo levanto la cabeza para ver la decisión de su amigo y como este después contemplaba a la demás gente, más seguro buscándola.
--Si tú lo dices.
--Oye Naru, que no ese de allá es el chavo con el que estabas platicando la otra vez _ haciendo que el otro se parada rápidamente y se posara a su lado observando asía donde el dedo de Kiba indicaba. Efectivamente era él, alado de la improvisada pista se encontraba ese pelinegro el cual le había echado a perder una de sus más preciadas camisas, estaba platicando con otra persona pero por la posición se podía ver quién era, pero que ya se retiraba de su lado.
--Ese desgraciado me va a oír_ arremangándose las mangas de su camisa, dirigiéndose a él cómo fiera enjaulada, aunque Kiba lo tratara de detener diciéndole que esa reacción que estaba teniendo no era del todo buena, pero no le hacía caso y se lo llevo como corbata hasta el pelinegro.
--Tu quien te crees para echarme así porque si tu cerveza en mi ropa HE!!! _ Había agarrado de la solapa al pelinegro, el cual no se percato de nada hasta que el rubio se le había abalanzado, gruñéndole cerca de su cara, si ya estaba un poco pasado de copas.
--Hey tranquilízate, si quieres te repongo tu camisa_ después de fijarse bien en la cara del rubio, por fin se le vino a la cabeza de donde conocía a ese tipo, como poder olvidar su cara _ no ya se te invito a una fiesta mañana en la noche en el “Hard Rock” que dices _ logrando que se separada de él y pusiera cara de duda.
--Que no es ese el nuevo antro que inauguraron en la ciudad_ diciéndolo con duda.
--Claro que es, y yo pago todo lo que consumas que dices, trato _ estirándole la mano, y siendo estrechada por la de un sonriente rubio.
--Ni dudarlo_ siendo repentinamente jalado por Kiba, que se había mantenida al margen de la conversación, pero para el ya era suficiente.
--Oye Naruto ni conoces a este tipo, quien sabe que te pudiese hacer_ diciéndolo en un susurro a su oído.
--Hay Kiba si se ve que es muy buena persono_ señalándolo y el otro afirmando con la cabeza y como niño chiquito.
--Que!!!, que quieres decirme_ Estas palabras retumbaron en el lugar, aunque no fueron dichas con mucha fuerza, casi todos pudieron escucharlas claramente y centrar su atención a la pareja que estaba en medio de la pista y como la chica se desprendía de los brazos de su acompañante.
--Sakura aquí no es lugar para hablar de esto_ tomado la con suavidad de la muñeca y jalándola hacia fuera de la pista, evitando lo posible ser el centro de atención, pero la chica no tenía en mente esto y con un fuerte tirón libero su mano, y logrando que los dos quedaran uno frente del otro separadas solo por un metro de distancia.
--Dímelo!!! _ le grito, con desconsuelo, no podía estarle pasando esto.
Un suave bufido de resignación se logro oír del pelinegro, si ella lo quería así, así seria—Sakura, solo quiero decirte, que estoy arto de ser tu novio, nunca te quise, solo anduve contigo por qué no me dejabas de molestar, pero ahora me doy cuenta de que fue peor haber andado contigo, así que ya no me busques que tu y yo, ya no somos nada, nunca lo fuimos ni nunca los seremos_ decidido a retirarse, pero siendo detenido del brazo.
--Ya te escuche, ahora tu escucha lo que te tengo que decir_ jalándolo con fuerza para que volviera a encararla , se veía como temblaba, pudiese ser por tristeza, por enojo, y aunque no se pudiera ver su cara, ya que la tenia agachada se podían ver algunas lagrimas caer al piso, se las limpio y levanto la cara, sus ojos demostraban la furia que tenia dentro_ Yo sabía que tu no me querías, no tenias que escupírmelo en la cara, y sabes porque lo sabía, porque tú no tienes sentimientos, estas vacio, solo eres un maldito niño rico que piensa que todo se merece y que nadie merece de él, pero te voy a decir algo tu… TÚ NO ERES NADA, no hay insulto que pudiese abarcar la mierda que eres, que creías que solo por ser Uchiha Sasuke eras superior, ja no me hagas reír, eso solo demuestra la gran vasca que eres_ separándose de él y empezándose a alejar, parando de repente y regresando cerca de pelinegro_ Pero si en algún momento logras sentir algo por alguien, que lo dudo, espero que esa persona se dé cuenta de la basura que eres, y no cometa el error que en algún momento yo cometí y que se aleje de ti, para que tu única compañía se tu tan añorara soledad_ Alejándose corriendo del lugar, perdiéndose de la vista de todos.
Los demás que solo se habían mantenido de espectadores y regresaron a lo que estaban asiendo como si nada hubiese pasado, bueno menos uno, que al ver la salir corrió detrás de ella.
--Naru espera.
--No, no vallas, no conozco al rubio pero si conozco a ella y no le gusta que la molestan cuando está en ese estado, mejor ven, tomate una copa con nosotros_ caminando hacia una mesa, ya cerca se podía ver al azabache que momentos antes había destrozado a la joven, sentado tomando algo.
--Ahora estas feliz verdad_ provocando una mirada de indiferencia hacia Sai y luego posándola en el castaño que todavía no se había sentado, barriéndolo y volteando a otro lado, Kiba solo lo ignoro y lo observo de pies a cabeza, era de aceptase que era atractivo, vestía normal unos pantalones de oscuros y una camisa clara, pero lo que más resaltaba a la vista era un colgante una extraña gema.
--Nos vemos luego, tengo algo impórtate qué hacer _dijo después de a haber divisado a una pelinegra, pero los otros no le dieron importancia y siguieron en lo suyo.
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La noche era cálida, el manto estelar se encontraba limpio de nubes, y la único que se podía apreciar en el firmamento era una brillante y clara luna que opacaba las estrellas que por mas se esforzasen en brillar no lograban lucir tan grandiosas como en ese momento se veía la luna, que iluminaba con delicadeza los grandes jardines de la mansión, llegando a un lugar recóndito donde los frondosos árboles no le dejaba pasar hasta una fuente de la cual salían borbotones de agua y solo logrando colar unos finos rayos, los cuales desembocaron en la melena rosada de una chica que sentada en el ancho barandal, trataba de controlar su llanto, recargada en sus rodillas con la cabeza escondida entre sus manos, tratando de apaciguar su tristeza oyendo el sonido del agua caer a su lado ,tenía las piernas flexionada, con los pies descalzos sobre el frio mármol.
Quiero bailar, quiero sentirme hermosa. Quiero cantar ver el amanecer
Quiero sentir solo tu dulce boca y bailar quiero sentirme bien.
Como pudo llegar hasta ese punto, sabía de antemano que él no la quería, sí lo sabía, pero no le daba mucha importancia lo único que importaba, como claramente se lo habían enseñado cuando era pequeña, era el dinero y la posición en la que te encontraras y aun que en ese entonces no estuviera muy de acuerdo de eso, tenía que seguirlo y con el paso del tiempo se fue haciendo a la idea de que nunca se casaría por amor, que no tendría a su príncipe azul debajo de su balcón cantándole sonetos de amor.
Quiero bailar, quiero sentir el cielo. Quiero volar ver el amanecer
Quiero vivir solo el dulce momento y bailar quiero sentirme bien.
Por eso había buscado al empresario de mayor fortuna, de los más influyentes, si tenía que hacerlo por dinero lo haría con el mejor postor, y el único mejor prospecto fue Uchiha Sasuke, sin importar que era uno de sus mejores amigo, poderosa familia en los negocios, influyente y sin restar que eran excesivamente guapos, si perfectos, pero solo con un percance…su destructivo genio y acababa de sentirlo, no se echaría atrás con sus planes de casarse, ni loca, pero si se vengaría de él, no le iba a permitir que la humillara de esa manera, que la destrozara de esa forma en público, pero tenía que encontrar algo que en verdad le interesara al pelinegro, pegarle en donde más le duele porque aunque le costara admitirlo se estaba empezando a enamorar de él.
Y quiero, quiero sentir el calor que tu boca despide en cara oración
Que dices quiero ser el corazón que tú buscas, que tú buscas.
--Te encuentras bien_ la voz de un joven, la saco de sus pensamientos, no pensaba que nadie la iría seguir, de antemano lo sabía, pero él estaba ahí!! preocupándose por ella, un desconocido, y al levantar la cara pudo ver a ese rubio y su mirada se ilumino al observarlo, sus ojos le brindaban una calidez inmensa, parecía que con esa sonrisa se había llevado la tristeza que la embargaba_ no vale la pena llorar por alguien así_ ofreciéndole una mano para ayudarla a levantar, por algún motivo se sentía plenamente identificado con ella, porque a él también lo habían destrozado de ese modo y la soledad no era buena en esos momentos, la joven accedió a tomar su mano , y con un tirón, la jalo para darle un suave abrazo que ella correspondió, sintiéndose protegida entre sus brazos.
--Vente, vamos no le des la satisfacción a ese bastardo, de haber logrado su cometido.
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Con paso tranquilo caminaba por el estacionamiento en dirección a su automóvil, el frio le estaba empezando a calar los huesos, y la ventisca le empezaba a causar cierto mareo, producto del exceso de alcohol en sus venas, todo por aceptarle esos tontos brindis a Neji que la causaron que se cruzara, pero todavía podía andar más o menos bien, o eso creía él, conducir, conduciría bien, cualquier estúpido podría conducir bien y no había tomado tanto, sacando su juego de llaves y abriendo la puerta trasera de su auto, he inclinándose hacia el interior sacando una chamarra de cuero que se coloco y al acomodar el cuello choco con su preciada reliquia, quitándosela y observándolo con tristeza, “otro fracaso, cuántos más podría soportar”. Guardándolo en la bolsa de su chaqueta.
--Hey tu adonde crees que vas_ Al levantar la vista pudo más o menos ver un rubio que se aproximaba hacia el pero que paraba un auto antes del suyo_ si nadie te lo ha dicho , te lo voy a decir yo_ sentenciándolo con el dedo.
--Decirme que_ separándose del carro, para poder ver mejor al rubio, poniendo su pose de que le daba igual lo que le dijera, y el rubio al poder apreciarlo bien se dio cuenta que era el mismo tipo con el que había fantasioso en algunas ocasiones cuando no tenia mas entretenimiento que su hábil imaginación, pero no se echaría para atrás.
--No sé quién te ha dicho que tratar así a una mujer está bien.
--Yo las trato como se me dé la gana, tú no eres nadie para estarme sermoneando, además la víbora de Sakura lo tenia merecido _ lo dijo fríamente, lo cual provoco que le empezara a hervir la sangre al rubio, “maldito rico engreído”, y un momento ya tenía el puño al sado y corría en dirección del pelinegro para incrustarle su puño en la cara, quería quitarle esa estúpida sonrisa de arrogancia, pero antes de poder rosarlo , su mano fue interceptada, pero en vez de detenerse, trato de golpearle con su otro puño peor este también fue interceptado.
La mirada furibunda de Naruto chocaba con la frialdad de los ojos del moreno, uno enfrente del otro, un choque de voluntades se desataba entre los dos, cada una tratándose de imponer a la otra. Las muñecas del rubio eran estrujadas con fuerza, mientras que este apenas se daba cuenta de esto.
--Eres un idiota_ sentencio Sasuke, pero lo único que sintió el rubio fue el olor nauseabundo al alcohol.
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--“Tengo hecho un lio la cabeza, que les sucede a todos, porque esa necedad de confundirme más de lo que ya estoy, siembre fastidiándome la existencia, por un lado está el hecho de que casi ninguna chica me atrae y eso no lo veo tan malo, podría ser que esté buscando a la adecuada una que no sea tan berrinchuda, que no sea tan materialista, tan sentimental, tan, tan, tan, Grrrr!!!¡¡¡MALDICION!!!! _ ya no lo soportaba mas, aunque se quisiera enfocar en los estudios esa pregunta siembre le rondaba la cabeza no podía enfocarse en ninguna cosa, como en este momento estaba atareado por los próximos exámenes de fin de cursos que vendrían y no lograba ningún avance.
Aun recargado en ese viejo escritorio, con la cara hundida entre los papeles que se encontraban en este, solo alumbrado por la tenue luz que brindaba la laptop y alguna que otra que se colaba de la ventana frente a él.
--Hey Gaara ya vamos a comer, te esperamos abajo, la voz de su hermano lo saco del ensimismamiento en el que se encontraba, lograra que se levantara en segundos sobresaltado y regresando a su frialdad contestándole secamente.
--Kankuro, no molestes, comeré cuando se me dé la gana _acomodándose otra vez en su asiento, y tecleando algunas palabras se volvió a adentrar otra vez en sus pensamientos. “Bueno en si eso no es lo que más me molesta, sino que por el hecho de que no pongo mucha atención en las chicas crean que soy…grrrr….si ya tuve que aceptar una vez que me se burlaran de mí, si todavía recuerdo cuando ese torpe me lo dijo, yo que pensaba que era mi mejor amigo y lo arruino diciéndome esa sarta de estupideces, por que cuando las cosas van mejor siempre todo se termina yendo al infierno.
°°°° Flash Back °°°°
Recargado en una pared se encontraba un niño pelirrojo de escasos 12 años, se veía algo impaciente ya que movía sus pies con ímpetu y sus manos estaban un poco sudorosas, uno de sus mejores amigos si no es que el mejor le había dicho que necesitaba decirle algo de vital importancia, pero que se lo diría después, ya que en ese momento se encontraban en receso “podía ser algo malo” pensaba ya que el modo de decirlo fue muy serio y denotaba algo de angustia, después ya no pudo hablar con él entre los preparativos para su salida y las pesadas clases , no tuvo tiempo para aclarar las cosas con él.
Ahí se encontraba en una de las tantas aulas de la escuela, esperando a que apareciera ya que los dos sabían que casi nadie pasaba por ese lugar, y podrían platicar, era como su escondite.
--Ya estás aquí_ en la puerta se encontraba él, algo cansado por las clases de judo que tomaba este después de clases, pensó, restándole importancia_ podemos hablar de camino a la casa. El solo sintió con la cabeza,
Ya había pasado algo de tiempo desde que salieron de la escuela, ahora se encontraban pasando por enfrente de un parque, se podía ver que casi no había gente pero aun así no se veía muy solo.
--Y bueno que querías decirme_ le estaba carcomiendo las entrañas el hecho de que su amigo no tomara la iniciativa en contarle lo que pasaba, y más que su paciencia siempre brillaba por su ausencia _ dime no creo que sea algo tan malo _ viendo la indecisión que rondaba alrededor de él, y como miraba ido el parque, recargado en el barandal con los codos en la barda y con los brazos cruzados, perdido en el paisaje.
--Pero me prometes que sea lo que sea lo que sea que te cuente, no cambiaras tu forma de ser con migo_ no lográndolo decírselo en la cara y aun contemplando el panorama por lo cual el pelirrojo se acerco a la barda y recargo su espalda en esta viendo los carros pasar.
--Solo dilo_ le presiono, casi totalmente seguro de que solo se estaba preocupando por tonterías.
--Lo que pasa es que de un tiempo para acá me he dado cuenta que… bueno tu y yo hemos sido amigos desde tercero y desde entonces una persona muy importante para mí y… y… quisiera que supieras algo de mi… y que hace poco me di cuenta de ello _volteando por fin a verlo, sus ojos tenían un brillo raro, de tristeza, de alegría, de angustia, sin encontrar forma para expresar lo que quería decir, lo cual capto en instantes el otro.
--No te preocupes yo estaré a tu lado sea lo que sea _ logrando una leve sonrisa en el otro y llenándolo de valor para poder decir lo que quería y esperanza de seguir sin temor.
°°°° End Flash Back °°°°
El sentir que su cara se precipitaba hacia la madera del escritorio, le hiso reaccionar de su somnolencia y viendo que no iba a lograr ningún avance con sus estudios decidió mejor darlo por perdido he irse a dormir temprano.
--“En ese momento tome la mejor decisión”_ Y con ese pensamiento quedo profundamente dormido.
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--IDIOTA!!!............._incrustando por quincuagésima su puño en la pared, tratando de descargar todos los sentimientos que se le empezaban a agolpar en la cabeza_ “idiota eso es lo que soy un gran idiota”_ recargando su cabeza en la pared trato que el frio pudiera calmar su cabeza_ “todo esto está mal, hasta donde hubiéramos llegado si no fuero por….hasta donde, para el debió ser solo un juego, un pasatiempo, pero yo lo debí haber parado, pero no pude, desearía que esto no hubiera sucedido… que idiotez hice... porque termino todo de ese modo_ posando su espalda en la pared se empezó a deslizarse lentamente en ella hasta quedar totalmente sentando y acurrucándose como un niño, al cual acabaran de regañar. Abrazando sus piernas con fuerza “porque no puedes actuar como la gente normal Naruto" se dijo a sí mismo.
°°°° Flash Back °°°°
Ya habían pasado algunos segundos o tal vez minutos desde que se habían quedado en esa posición pero sus miradas seguían una enfrente de la otra. Aunque las emociones que trasmitían ya no eran las mismas. En realidad, Naruto sintió como poco a poco el ímpetu disminuía en su pecho y ahora la mirada fija del otro chico le empezaba a amedrentar, y no es que lo viera con odio o arrogancia, si no que él seguía viéndolo fijamente, sin mostrar algún interés o expresión.
Y por un momento Naruto se sintió totalmente fuera de lugar_ No vales la pena_ dijo como si en verdad ya no le importara toda aquello, pero sintiendo como su corazón se empezaba a inquietar por lo intenso de su mirar. Trato de empujarlo y separarse de él, pero el agarre de sus muñecas aun estaban ahí.
Naruto lo fulmino tratando de mover las manos pero el otro chico, no importaba que hiciera mantenía sus manos sometidas.
--Parece que he ganado_ le susurro el Uchiha de cerca burlándose de aquel atrevido rubio y dispuesto de aventarlo y por fin subirse a su carro, aun un poco mareado por todo lo que había tomado.
Pero sin duda no esperaba que un fugaz beso seria apenas dado con brusquedad hacia sus labios.
--Tengo muchas alternativas para vencerte_ dijo a un agitado Naruto, se sentía con la piel erizada y con el corazón a mil. Aquel olor del chico se había impregnado como una ráfaga en todo sus cuerpo, mientras que sin duda lo impulsivo de su ser, no podía quedarse con solo eso de él.
"Por primera vez lo boca floja me sirve de algo" pensó, justificándose a sí mismo de la locura que acababa de hacer. Esperando por fin una lucha campal, Naruto lo miro desafiante. Aunque la sonrisa de medio lado del Uchiha sin duda no era lo que esperaba.
Sasuke sin más volvió fusionar sus labio donde, sin nada de delicadeza, trataba de dejar en claro su victoria, cosa que si hubiera estado en sus 5 sentidos hubiera detestado con todo su ser, siquiera pensarlo.
Aunque sus dientes de repente chocaran no, parecía que ninguno cediera, aun así Naruto estaba con un remolino de emociones en su interior. Por un lado coraje, detestaba a aquel chico y le provocaba la necesidad de morder su lengua cuando esta quería entrar a su boca, pero por otro lado se sentía temblar ante sus labios y la forma que respiraba cerca de él. Su mente totalmente nublada, ya sea por el chico o por el alcohol en un instante se dejo de responder y simplemente su labios contestaron adecuadamente el beso.
Sasuke se sintió triunfador al sentir como parecía que dominaba completamente el beso, sus labios podían acariciar fácilmente los del rubio, su lengua fácilmente se deslizaba por su boca y sin duda disfrutaba su victoria. Se separo victorioso, pero no encontró los ojos furiosos del rubio, si no solo sus ojos cerrados, y sus mejillas sonrojadas, totalmente agitado. El también respiraba con dificultad, su corazón latía con fuerza mientras sin duda alguna sentía la necesidad insana de volver a ellos, a sus labios.
“Solo un beso” se dijo a sí mismo, antes de volver a unir sus labios lentamente, como si estuviera entrando un territorio prohibido, hasta el mismo choque de sus labios le proporciono una oleada de sensaciones hasta los pies, sabía que el simple acto de besar a aquel chico iba totalmente en contra de lo que era. Pero seguía presionando suavemente sobre ellos, como si pidiera permiso para poder entrar, aunque hace algunos segundos no hubiera estado devorándolos sin ninguna reserva.
Naruto succiono suavemente el labio inferior del chico antes de permitirle entrar a su boca mientras que colocaba sus manos sobre su cuello y trataba de profundizar el beso que sin duda se había convertido en algo totalmente placentero para los dos. Sasuke tampoco pudo mantener sus manos quietas un instante mas y empezó a recorrer la espalda del chico.
Se sentía impaciente de poder acallar ese fuego que sentía nacer en su interior, sus manos no parecían lo suficientemente amplias para poder acariciar la piel del rubio, el cual podía sentir que producía suaves jadeos entre sus bocas por sus caricias, que le hacían enardecer con más fuerza.
Apenas las manos frías del chico tocaron su piel, Naruto sintió que perdía la poca conciencia que le quedaba, y provocándole oleadas de placer que nunca en su vida había sentido, solo cuando choco con el asiento de piel se dio cuenta de que estaba dentro del carro del chico.
Sobre él, podía sentir como lentamente le devoraba el cuello y de repente hundía sus dientes en su piel, Naruto solo quería tenerlo más cerca, sus manos sacaban con desesperación la camisa del chico, sintiendo tan blanca piel.
Uuuwwooooo…..tum…tum….uuuuwwoooooooo_ el sonido de la alama de un carro logro que Sasuke separara de repente aun con espasmos de lo que estaba haciendo, Naruto por su parte se mantenía todavía recostado tratando de recuperar la respiración perdida, sin abrir todavía los ojos, preguntándose el porqué había parado.
--Lárgate!!!_ Abrió abruptamente los ojos, chocando con esas orbes negras que lo veían fijamente y luego en esos labios que a se algunos instantes lo llenaban de calor, ahora solo tenían frialdad_ ¿¡¿¡Que no oíste!?!? LARGATE!!!!!
Como pudo bajo del carro a tropezones, recogiendo del piso algo para resguardare del frio, y saliendo huyendo del lugar, sin si quiera voltear hacia atrás.
°°°° End Flash Back °°°°
Un fuerte dolor de cabeza, lo tenía recargado contra el volante de su auto, no quería pensar el dolor no se lo permitía, pero en ese momento era lo mejor. Porque sin duda alguna lo único que haría seria reprocharse a sí mismo. "Pero que he hecho", pensó el Uchiha antes de sentir que tocaban el vidrio del coche.
--Si quieres yo puedo conducir_ le dijo Sai antes de pasarlo al asiento del copiloto.