If you want to
UchihaNaru
Puedes cansarte de estarlo pero pasar página es difícil cuando se esta enamorado
Las luces de la habitación estaban apagadas, lo cual no fue una sorpresa para él. La situación ya había pasado antes, aun recordaba aquello con sumo disgusto y en verdad le dolía que la cosa se hubiese repetido. Con su mano tanteo la pared hasta encontrar el interruptor y prendió la luz, un quejido molesto y lastimero llegó a sus oídos y, al tiempo que suspiraba, miró con sus ojos azules el cuerpo tendido en la cama con tristeza.
-¿Qué eres? ¿Un vampiro? Sal de esa cama ya Uchiha, tus padres y tu hermano están preocupados, mira que tuvieron que llamarme a mí para sacarte de aquí -Paso su mano derecha por su cabello rubio y se dio cuenta que ya estaba algo más largo de como acostumbraba llevarlo, casi como el de su padre y decidió que después de acabar ahí iría a que le cortaran el cabello, pero en fin, las prioridades eran otras en ese momento, sus ojos miraron la habitación sabiendo de ante mano que esta estaría en efecto en un estado deplorable después de que el dueño de aquel lugar pasara tres días seguidos sin salir de ahí, incluso estaba seguro que si no fuera porque el cuarto contaba con un baño el chico de ojos negros que en cuanto prendió la luz se tiró una almohada en la cara pasa seguir durmiendo se haría en alguna de las esquinas de su habitación, el rubio suspiró y comenzó a levantar el desastre de su amigo, empezando por las dos cajas de pizza que el pelinegro en la cama había pedido antes de encerrarse todo ese tiempo en la habitación, por lo menos tenía que apremiarlo, su amigo no era tonto y no solo la pizza había pedido, sino también había hurgado en la cocina para meter chucherías e infinidad de botellas de agua en el cuarto estando consiente que estaría un buen tiempo encerrado, el ojiazul negó con la cabeza incapaz de poder seguir viendo al siempre prepotente y orgulloso Uchiha Sasuke en tales extremos de depresión.
-Largo Naruto, no pienso salir y no quiero que estés aquí -Naruto Uzumaki, mejor amigo de Uchiha Sasuke desde que tiene memoria, siempre incondicional, siempre intentando que la pase bien hasta en los peores momentos, sabía que el que menos se merecía su tono de voz y aquellas palabras era su amigo, más al escuchar un bufido de parte del rubio, pero la verdad es que no tenía ganas de ver a nadie.
-Tú a mí no me das ordenes, te levantas y te das una ducha o juro que tomaré esas botellas y te bañaré yo mismo -Sasuke refunfuñó y se levantó, no por nada conocía bien a Naruto y sabía que cuando decía algo con ese tono autoritario/enojado lo decía muy en serio, Sasuke tomó ropa y se encerró en el cuarto de baño, Naruto lo había seguido con la mirada y cuando se encontró solo no pudo evitar suspirar, el rubio sacudió su cabeza para concentrarse en limpiar aquel apestoso lugar, justo estaba por agacharse para seguir recogiendo los pedazos de piña de las pizzas que Sasuke había pedido y las cuales sabía que no le gustaban mucho pero a pesar de eso seguía comprándola -el muy teme las había esparcido al rededor de la caja en vez de dentro de esta- cuando la puerta fue abierta para dejar pasar al mayor de los hijos Uchiha, Itachi.
-Deberías dejar de hacer el papel de mamá, no te lo mereces -Itachi le sonrió con comprensión al tiempo que se agachaba a su lado para ayudarlo sin dejar de hablar -Aun no puedo creer que el idiota no se dé cuenta y siento que todo esto no es justo para ti, deberías mandarlo a la mierda a él junto con sus problemas -Itachi dijo esto para finalizarlo con el ceño fruncido, Naruto suspiró dándose cuenta que prácticamente todo el mundo sabía lo tan estúpidamente enamorado que estaba de Sasuke, menos él.
-Sabes que no puedo simplemente darle la espalda, me gusta tanto que si lo ignoro y lo dejo a su suerte me dolerá más a mí que a él -Itachi lo miró con tristeza, él, que conocía a Naruto desde que usaba pañales y que, incluso más que su hermano, sabía leer a Naruto como a un libro abierto, no le gustaba para nada ver así al menor, Naruto era demasiado atractivo y tenía un buen corazón, no podía aceptar que siguiera enamorado de su hermano durante siete años cuando tenía a miles de pretendientes babeando por él; Sasuke era su hermano, pero estaba seguro que de entre todos los chicos hormonados que seguían a Naruto como perros abandonados debía haber uno que fuera mejor que el tipo que se duchaba en ese momento y quien no se daba cuenta de la tan especial persona que tenía a su lado -Además, no puedo verlo triste, soy su mejor amigo ¿Recuerdas? Nos apoyamos hasta en las peores situaciones y lo que pasó con Karin es una situación de ese tipo, dejarlo a su suerte no habla bien de mí como amigo -Itachi dejó el tema por la paz, sabía que Naruto se estaba esforzando por mantener en pie su papel de amigo con Sasuke, cosa que lo ponía enojado, ¿Qué tan cabezota se tenía que ser para no darse cuenta de la mirada de enamorado que ponía Naruto cada vez que miraba al capullo de Sasuke? ¡Arg! Su hermano era un completo idiota. Punto.
Después de una hora Sasuke no había salido de la ducha, Naruto e Itachi habían terminado de arreglar todo y el mayor se despidió de él porque iba algo tarde a la universidad, igual que él, aunque al paso que iba dudaba mucho lograr sacar a Sasuke para que fueran juntos, es más, estaba casi seguro que él tampoco iba a ir por no querer dejar solo al Uchiha. En situaciones como esa es que odiaba estar tan perdido por un tipo como el pelinegro al no ser capaz de dejarlo solo y cumplir sus obligaciones como alumno ejemplar.
-Me pregunto cuánto tiempo más podré aguantar esta situación -El susurro de Naruto se perdió entre los minutos que nunca dejaron de pasar, harto de estar esperando a Sasuke, se levantó y fue a tocarle la puerta escandalosamente -¡¿Qué haces ahí adentro pedazo de teme?! ¡Sal de una vez-ttebayo! ¡Llegaremos tarde a la universidad! -Naruto movió la perilla con enojo, si había algo que recordaba con odio y no con tristeza de la situación que se presentó dos años y medio atrás era lo berrinchudo que se ponía el Uchiha, como un mocoso.
-¡Este es mi baño y me quedó el tiempo que quiera! ¡Además no iré a ninguna parte, así que largo! - Naruto pegó su frente a la puerta y suspiró con pesadez, sus pensamientos viajaron a la responsable de todo, Karin, ex novia de Uchiha Sasuke y la peor mujer después de Sakura Haruno, malditas brujas fue lo que pensó Naruto.
Antes Sasuke nunca había mostrado interés en ser parte de aquello que llamaban amor adolescente, aun recordaba con alegría aquellos días en los que Sasuke le decía que tener un mejor amigo era como tener una novia y que Naruto era aun más complicado que eso, así que estar con él era suficiente... Se sentía tan dichoso a pesar de que después de aquello no pudiera evitar pensar que su título de mejor amigo no pasaría de ahí. Pero en fin, no se quejaba, estar junto a Sasuke era más que suficiente, además, los dos tenían en aquel entonces 17 años y no había prisas, él siempre iba a mantener la esperanza de poder conseguir una relación con la persona que él clasifico desde que se dio cuenta que estaba enamorado de Sasuke como el único amor de su vida, y todo iba de maravilla, no podía negar que cada día que pasaba con Sasuke era mejor que el anterior, así que, un día se levantó con la idea de que ya era tiempo de que Sasuke supiera sobre sus sentimientos así que, aquella tarde, se quedaron de ver en la casa del mayor, que era Sasuke, a las 4 de la tarde.
Ese día había sido de nervios puros, se había bañado, se había vestido de la mejor manera posible, había hecho de todo con tal de parecer atractivo sin darse cuenta que incluso podía ir en las peores condiciones y seguiría siendo el más guapo de la faz de la tierra; cuando la hora llegó fue a la casa de Sasuke y cuando llegó fue este quién le abrió la puerta, lo dejó pasar y lo primero que captó fue la mirada llena de pena de Itachi hacía él, no sabía por qué lo veía así, mucho menos comprendió por qué cuando lo saludo con un abrazo, lo había hecho con más fuerza de la necesaria, nada tuvo sentido en aquel momento... Hasta que la vio.
Era una chica muy mona, tenía que admitirlo, tenía unos ojos verdes hermosos y su cabello color rosa, que aunque no le agradaba, se veía suave y sumamente bien cuidado, era de estatura promedio y a pesar de eso era un poco más alta que él, tenía una sonrisa muy linda y, aunque se veía tierna y dulce, Naruto la catalogó como alguien material y superficial. El menor no era de las personas que juzgaba a primera vista, pero algo le decía que aquella chica iba a traerles problemas, aun más cuando miró como Sasuke se ponía a su lado y la tomaba de la mano, y puede que Sasuke no hubiera sonreído cuando ella lo miró de reojo y le sonrió como niña enamorada, pero en sus ojos negros pudo ver que le tenía cariño, que a Sasuke le gustaba aquella niña. Y fue entonces que su mundo se desboronó.
Sasuke la presentó como Haruno Sakura. Su novia.
Habían estado saliendo desde un mes atrás y Sasuke no había querido decirle nada porque para él Naruto era una persona muy especial para él, quería que, cuando le presentara a Sakura, él estuviera seguro de que aquella relación valía la pena y que de verdad la quería; el grado de importancia que tenía para Sasuke hizo que su corazón saltara de alegría, pero al escuchar de la propia boca de aquel egocéntrico chico que quería a Sakura fue un golpe bajo. Ahora entendía la mirada de Itachi, incluso la de los padres de este cuando, una vez que hablaron de todo lo lindo de la relación de Sasuke y Sakura, se sentaron en el sofá y los Uchiha mayores llegaron a su hogar, fue casi automático lo que vio, los ojos de la mamá de Sasuke en la chica y luego en él, el abrazo fuerte del señor Fugaku y luego las palabras en susurró de Mikoto en su oído cuándo le tocó saludarla. Lo siento Naru-chan. Ese día había sido el peor de toda su vida.
Pero en fin, los días pasaron, de vez en cuando se veía obligado a participar en las citas de aquellos dos y no podía sentirse más incomodo, rayos, le enfadaba cada mimo, cada beso, cada puta caricia que Sasuke le daba a la niña boba de Sakura, incluso estaba seguro que la muy boba incluso se ponía más melosa con Sasuke cuando tenían que invitar a Naruto a sus tontas citas. En pocas palabras, a Naruto no le agrado Sakura cuando la vio, ahora cada vez que la veía, no podía evitar sentir una opresión en el pecho y sentir como la odiaba con cada poro de su cuerpo y, la verdad, el sentimiento era reciproco, de alguna manera Sakura sabía que le gustaba Sasuke y no había minuto en que le recordara a espaldas y frente al Uchiha que él era suyo, ya fuese con un beso, con una tonta sonrisa prepotente o susurros amenazadores sobre mantenerse alejado de su novio. En serio, si hubiese tenido el valor, la hubiera matado en cualquier momento.
Después de un año las cosas habían cambiado radicalmente, Naruto y Sasuke seguían siendo amigos muy íntimos, pero el tiempo que pasaban juntos era considerablemente menor al de antes, aunque, cuando se veían y hacían sus noches de chicos aprovechaban y recompensaban el tiempo perdido, de esa manera Naruto no se sentía tan solo y Sasuke no se sentía cambiado por Shikamaru Nara, a quien había visto pegado a Naruto más de lo usual. Y ¿Qué podía decir? Era un Uchiha. Era territorial. Shikamaru había entablado amistad con Naruto y, aunque no se sorprendió cuando se enteró que el castaño tenía la intención de tener una relación con el rubio, no estaba muy a gusto sabiendo que cada día su amigo y él se iban separando mientras ellos dos iban compartiendo la vida del otro justo como él lo hacía con Naruto antes de estar con Sakura, incluso una vez le comentó a su novia la susodicha situación, pensando que de esa manera podría conseguir que la chica aceptara que algunas citas se hicieran nuevamente con Naruto incluido, cosa que fue rotundamente rechazado.
Fue entonces cuando la pelirrosa le preguntó que si sabía que Naruto era gay y él le había dicho que sí, que lo supo antes que el mismo Naruto y que era algo que le tenía sin cuidado, el problema de la situación era Shikamaru, Sakura le echó en cara aquella vez que estaba comportándose como si estuviera celoso del Nara y él no negó nada porque era la verdad, Naruto era SU mejor amigo, así que no tenía porque negar que sí, se sentía celoso y traicionado por el menor, quien ahora iba todo el tiempo al lado de Shikamaru. Ese día había discutido con Sakura tan fuerte que recuerda no haberle hablado durante dos días, como siempre las cosas se arreglaron entre ellos y todo volvió a la normalidad, menos la situación con Naruto.
Después de unas semanas Sasuke había notado a Sakura bastante distraída y muy pendiente del teléfono, en el instituto incluso Naruto lo había notado al ser la chica muy obvia y, al ver a su amigo algo preocupado tuvo que investigar la situación. Al final resultó que la muy inocente se veía con otro desde cuatro meses atrás, el chico no iba al instituto y era mucho mayor que ellos y, la razón por la que Sakura había estado distraída era porque había mantenido relaciones sexuales con su otro chico y había quedado embarazada. Sasuke entonces comprendió el porqué de la urgencia de la chica por tener relaciones con él en los últimos meses habían aumentado hasta llegar a la fastidioso, puesto que él no había querido dar ese paso aun, pero en fin, para Sasuke eso era lo de menos, lo que más le molestaba era la presión que toda aquella situación creó en él, Sakura y él terminaron, sus padres la dejaron a su suerte y al final se fue a vivir con el otro sujeto, desde entonces no sabían nada de ella y a Naruto no le importaba saber algo de aquella tonta en lo absoluto, solo el informe de su tan esperada muerte repentina, pero en fin, la cosa era que por todo eso Sasuke se había deprimido como nunca en su vida lo había hecho.
El Uchiha se sentía usado, había dejado todo por aquella chica, había cambiado, incluso se había alejado de su mejor amigo, quien nunca dejó de serlo a pesar de todo, se encerró durante dos días sin salir ni una sola vez de su habitación, solo lo había hecho una vez a media noche para comer y después de eso se había asegurado de introducir a su cuarto una cantidad absurda de comida chatarra para sobrevivir algunos días sin sentir la luz del sol. Los padres de Sasuke llamarón a Naruto, Itachi les dijo que eso había sido un error, hacer que Naruto cargara con las penas de Sasuke cuando el primero en sufrir por toda esa relación había sido él, quien tenía que aguantar como Sasuke y Sakura demostraban lo mucho que se querían en sus narices al igual que a su tonto hermano menor que no se cansaba de contarle a Naruto todos los días alguna tontera de Sakura como tonto enamorado, aun así Mikoto ya no sabía qué hacer para que su hijo saliera de su habitación y no tuvieron otra opción que pedirle a Naruto que viniera a verlo.
Aquella vez Itachi fue quien le abrió la puerta, sus padres estaban detrás pero eso no le impidió que le pidiera a Naruto que se fuera, que todo eso no era justo para él, Itachi habló tanto como pudo para convencer a Naruto que lo mejor era irse y sin embargo el menor dijo que estaba bien. Aquella sonrisa demostraba que no le molestaba para nada esa situación, al contrario, se sentía alagado al ser una opción de los padres de Sasuke para ayudar a este último y, ante la atenta mirada de los tres Uchiha, subió a la habitación de Sasuke.
Dos horas después Naruto había limpiado la habitación del menor de los Uchiha, lo había mandado a ducharse y después lo había obligado a bajar y comer algo decente, sus padres estaban asombrados por la facilidad con la que Naruto manejaba a su hijo, pero se sentían felices por ver a Sasuke fuera de aquella habitación. El menor se pasó el día entero con Sasuke en la sala, prohibiéndole rotundamente ir a su cuarto al saber que se volvería a encerrar, sus padres e Itachi los dejaron solos todo el día y fue por eso que el mayor se desahogó con el menor, Naruto prestó su hombro, sus oídos y todo lo que Sasuke pudo necesitar y, para que Sasuke pudiera volver a ser el mismo, pasaron varios días, más de los que hubiera pensado que tomaría todo aquello sí de quien hablaban era de Sasuke, pero en fin, él nunca se fue de su lado, siguió ahí, como el mejor amigo que se suponía debía ser.
Y bueno, después de tanto tiempo, ahí estaba de nuevo, frente al baño de Sasuke y en una situación similar a la de aquella vez con él lamiendo heridas que no eran suyas mientras las propias se hacían cada vez más y más grandes, Naruto, como cualquier persona que es lastimada, se estaba cansado de todo eso. Quería curarse, quería volver a pensar en Sasuke como un amigo y enamorarse como el Uchiha ya lo había hecho, sin importar que fuese de la persona equivocada, quería sentir lo que era el desamor, llorar, gritar, sentir que era el todo de alguien y que ese alguien fuera su todo, porque si, estaba llegando a su límite, estaba a punto de irse sobre sus pasos para dejar atrás aquella relación torcida que tenía con Sasuke donde solo él participaba y el Uchiha se dejaba querer mientras poco a poco las ganas de hacer eso se iban esfumando.
Pero no podía. Naruto no podía hacerle eso. No cuando la carga de siete años de estar enamorado y toda una vida de ser amigos estaban detrás de él preparados para llenarlo de culpa si se atrevía a dejar a Sasuke solo.
-¿Naruto? -Dios. Su corazón se rompió en mil pedazos al escuchar la voz rota de Sasuke, el Uchiha pensaba que se había ido. Naruto sonrió un poco y dejó salir un Dime lo suficientemente fuerte como para que Sasuke lo escuchara -Pensé que te habías ido -Del otro lado de la puerta Sasuke tenía apoyada la frente en la madera justo como Naruto, tenía los ojos cerrados y ahora que sabía que Naruto no se había ido, podía respirar con tranquilidad. Por un momento se había aterrado al pensar que había sido demasiado duro y en verdad su amigo se había enojado para dejarle solo, cuando en verdad lo que quería era su compañía y la de nadie más.
-Nunca voy a dejarte solo-ttebayo-
La manera en la que Naruto dijo eso hizo que un escalofrío lo atacará, algo dentro de él le decía que había algo más detrás de esas palabras de apoyo que Naruto quería que le llegaran, pero no sabía cómo interpretar todo eso así que se le hizo simple ignorarlo y abrir la puerta para encontrase con la sonrisa cansada del menor.
Aquel día como Naruto había previsto, no fueron a la universidad. Sasuke le contó lo de Karin aunque él ya lo sabía todo, había ocurrido prácticamente lo mismo que con Sakura, solo que esta vez Sasuke no lo quiso llevar tan serio y no había presentado a la pelirroja con Naruto ni a los seis meses de relación, que fue el tiempo que duró la relación y el que bastó para que Sasuke se llegara a tomar en serio todo aquel lio, sin embargo, Karin había resultado ser una más del montón, Naruto recordaba a las tantas chicas que pasaron entre Sakura y Karin como novias en turno, las cuales no duraron más de un mes o incluso dos semanas con Sasuke.
La cosa era que Karin había engañado todo el tiempo a Sasuke, había salido con él y con un tal Suigetsu, un chico de la antigua escuela de Karin, quien al enterarse de que lo engañaba había ido con Sasuke y le había reclamado, cuando los dos se dieron cuenta que los dos eran víctimas del jueguito de Karin la mandaron al diablo, todo había ocurrido tan rápido que Sasuke se vio bastante afectado e incapaz de creer que la esta era la segunda vez que había sentido que de verdad se estaba enamorando y repentinamente la vida se había encargado de impedirlo.
Por suerte tenía a Naruto quien, a pesar de que nunca dejó de ser apegado a Shikamaru pero nunca tanto como con él, estaba ahí, a su lado, demostrándole todo y el único apoyo que necesitaba.
Sasuke de verdad no se daba cuenta lo mucho que a Naruto le incomodaba la situación, como aquellas palabras llenas de dolor que decían haberse sentido engañado después de haberle dicho tantas veces a Karin que la quería le abrían más heridas que sabía sería incapaz de curar por sí solo pero, aun sabiendo eso, no se aparto de Sasuke, no se fue, no lo dejo solo ni ese día, ni los siguientes, Naruto se guardaba las lágrimas y todo lo demás para cuando él estaba solo mientras que con Sasuke mostraba sonrisas y apretones, abrazos y palabras de apoyo que poco a poco ayudaron a Sasuke a ser el mismo de antes, todo esto en un tiempo considerablemente menor al que le tomó que Sasuke superara a Sakura.
-Estoy harto de las relaciones y las chicas y de todo, ¡Es demasiado para mí! -Naruto sonrió con pena mirando a Sasuke quejarse, en ese momento estaban en la universidad y era tiempo libre, solo que Sasuke y él decidieron pasar el tiempo en el salón para evitar a la gente que se amontonaba en la cafetería.
-Encontraras a alguien que valga la pena, claro, hasta que cambies el tipo de chica que sueles elegir porque vaya que tienes mal gusto -Sasuke lo fulminó con la mirada y él solo lo miró con una sonrisa prepotente, al final Sasuke apartó la vista y bufó.
-¿Y qué sabes tú de chicas? Ni siquiera te gustan, así que no puedes opinar -Naruto se rió de la actitud infantil que Sasuke dejaba relucir cuando estaba a solas con él, mientras que la mayor parte del tiempo frente a todos los demás seguía siendo reservado y callado, además de egocéntrico y presumido.
-Él que no me gusten las chicas no significa que no conozca de ellas, puedo decirte quienes son candidatas a novias leales y todo eso que dices que te hace falta en tu vida amorosa y quienes son unas zorras -Directo e hiriente, a Sasuke le encantaba cuando Naruto decía comentarios como ese, con despreocupación y sin un interés real en el tema.
-¿Así? ¿Cómo quién? -Naruto lo miró confundido -Es en serio cuando digo que quiero encontrar a alguien Naruto, no te doy la razón con lo que tengo malos gustos -Lo dicho hizo que Naruto se riera y, aunque Sasuke lo miró con severidad, el mayor no dejó de hablar -Pero si he elegido fatal y me cansé de eso, así que ¿A quién más que a ti le puedo dejar la tarea de elegirme a alguien que de verdad valga la pena? Eres mi mejor amigo, y si de verdad dices conocer a las chicas sé que me presentaras a la ideal -Sasuke le sonrió, se paró y cuando pasó a su lado le tocó el hombro para después dejarlo solo. Naruto se quedó mirando el asiento de Sasuke, pidiendo que todo fuera una maldita broma.
¿Acaso había cavado su propia tumba? Vaya que sí. Sasuke le había pedido que le consiguiera novia ¡A él! Naruto dejó salir un gran bufido y miró hacía al techo intentando calmar las ganas de llorar, aun así las lagrimas se negaron a esconderse hasta llegar a casa del menor cuando justo en ese momento estaba solo y podía descargar toda la frustración y dolor que le producía aquel momento. ¿Y ahora qué se supone que debía hacer?... Él evidentemente no iba a elegir a alguien que fuera capaz de lastimar a Sasuke ¿Cómo hacerlo si después se sentiría culpable y como todo un traidor? Tampoco podía simplemente negarse a hacerlo porque la sinceridad en las palabras del Uchiha le habían provocado miles de cosas, Sasuke quería encontrar a alguien que no estuviera con él solo por el dinero, las apariencias o para pasar el rato, quería a alguien serio y tan dedicado como lo era el Uchiha en una relación.
Sasuke no era partidario de ir de chica en chica hasta decidir sentar cabeza por mucho que su aspecto y conducta indicara que era justo lo que hacía, no, Sasuke no era ni lejos a parecerse a alguien así, Sasuke era alguien que se tomaba las relaciones de un modo serio, tanto que durante mucho tiempo no pensó que hubiera alguien digno de merecer su cariño, hasta que encontró a Sakura y esta le destrozó, luego fue Karin y tuvo el mismo resultado, Sasuke se había cansado de tener que dar todo para no recibir nada y sabía que Naruto le elegiría a alguien que pudiera hacer eso y mucho más por él.
Pero en toda aquella situación, Sasuke no era el único que estaba cansado de dar, Naruto también estaba cansado y aquella petición había hecho que todo se desbordara. El menor quería que Sasuke fuera feliz, por lo menos se haría de la idea que, después de presentarle a esa persona que sabía era todo lo que el Uchiha esperaba, se haría a un lado. Era tiempo de acabar con el problema de raíz, porque si, para Naruto el estar enamorado de Sasuke pasó de ser la mejor cosa que le había pasado, a un problema, y uno que estaba acabando con él poco a poco. Por lo miso, Naruto se limpió las lágrimas, tomó sus cosas y fue detrás de Sasuke para pasar el último día juntos porque al atardecer le presentaría a alguien y a partir de ese momento, ellos dos ya no seguirían ni siendo amigos.
Aquel día Naruto se encargó de que la pasaran bastante bien, habían hecho bromas, recordaron viejos tiempos, se comportaron como los niños que alguna vez fueron y se olvidaron de cumplir sus deberes como jóvenes adultos y universitarios que eran, Sasuke después de tanto tiempo se había sentido como en los viejos tiempos, cuando los único que existían en el mundo solo eran ellos dos, siempre juntos e incondicionales.
Las horas pasaron y el atardecer hizo su aparición, a esa hora aun quedaba bastante gente en la universidad y Naruto sabía que aquella chica que tanto esperaba encontrar Sasuke aun estaba ahí, minutos atrás le había mandado un mensaje para que subiera a la azotea, lugar en donde el Uchiha y él habían pasado el rato, Sasuke miró de reojo a Naruto pues todo se había puesto extrañamente silencioso y bueno, lo que vio no le gustó.
Naruto miraba con tristeza el atardecer, sus ojos su cuerpo entero transmitía lo desolado que estaba y él no entendía cual era la razón, era como si cada vez que el sol se ocultaba más una parte de Naruto iba cayendo destrozado, esto lo alarmó y unas ganas de abrazarlo y decirle que todo estaba bien, sin saber realmente cual era el problema, le invadieron, pero antes de siquiera poder hacer algo, la puerta de la azotea fue abierta y él, quedó embobado.
Era una chica. Y una muy guapa. A primera vista se veía mayor que ellos, pero era algo que le tenía sin cuidado, era alta, de su estatura, cabello rubio y corto amarrado a cuatro coletas haciendo un peinado gracioso pero que en verdad le sentaba muy bien, tenía un porte elegante, una sonrisa muy linda y unos ojos verdosos oscuro que hicieron que se le quedara mirando como tonto durante algunos minutos, son casi tan bonitos como los de Naruto. Pensó inconscientemente el Uchiha.
-Sasuke, ella es Temari, hermana mayor de Gaara -Sasuke entonces apartó la mirada de la chica para mirar a Naruto, quien ya se había parado y miraba con una sonrisa a Temari, quien correspondía el gesto. Sasuke se paró y entonces razonó las palabras de Naruto para luego fruncir el ceño. ¿Sabaku no Gaara? Ese mapache sin cejar, nunca consiguió llevarse bien. El pelirrojo estudiaba en la universidad pero en otra carrera, casi nunca se veían, mientras que con Naruto quedaban casi diario aunque fuera para verse de cinco a diez minutos, Gaara era la otra persona capaz de catalogar a Naruto como su mejor amigo después de él, la amistad de esos dos eran igual que la de Naruto y Sasuke puesto que los padres de Gaara y los Uzumaki/Namikaze también eran inseparables como con los Uchiha, pero en fin, el problema era que Gaara tenía dos hermanos, pero nunca pensó que uno de ellos fuera una chica y una muy linda -Me pediste que te presentara a alguien y aquí la tienes, no conozco a alguien que sea más compatible con alguien como tú que ella y sé que al instante se llevaran muy bien, así que no seas un lento y preséntate baka -En ese momento Sasuke miró a Temari y esta se río de toda la situación, el Uchiha fulminó a Naruto con la mirada para después acercarse a la chica y presentarse como Uchiha Sasuke, la sonrisa que le dio Temari fue más que suficiente para que estuviera seguro que ella tenía interés en él y eso era más que suficiente para dar el siguiente paso -Bueno tortoles, yo me voy, quedé con Gaara -Naruto se despidió de Temari con un beso en la mejilla no sin antes y susurrarle un gracias en el oído para que Sasuke no lo escuchara, ella lo miró con pena pero con una sonrisa que sabía era especial, Sasuke que esperaba un abrazo de parte del menor se quedó sumamente sorprendido cuando este pasó de él y simplemente se fue, corriendo.
Y si, a Naruto no le importaba que el hecho de irse así indicara que estaba huyendo, porque eso era precisamente lo que estaba haciendo, Naruto en ningún momento miró atrás, era consciente de que si lo hacía regresaría sobre sus pasos y le diría a Sasuke que lo amaba, lo cual no era una opción. Sasuke había aceptado que era gay, pero nunca dijo que también él lo era, ni siquiera que fuera bisexual, siempre había salido con chicas y de vez en cuando le decía que aun no podía creer que no quisiera disfrutar de tener a una con él, eran frases y palabras inocentes llenas de broma cargadas en ellas pero que al final eran como puñales a su corazón, con esos pensamientos Naruto corrió más fuerte hasta estar seguro de encontrarse lo suficientemente lejos de la escuela, miró a su alrededor y se dio cuenta que había acabado a dos cuadros de su casa y eso lo reconfortó, a unos pasos más Gaara lo estaría esperando en la entrada listo para consolarlo.
Naruto sabía que si quería presentar a Temari con Sasuke tendría que hablar con Gaara primero, no había sido tan difícil convencer a la chica de verse con Sasuke, sabía que nadie podía simplemente pasar al lado del Uchiha y no pensar que era guapo, Temari claro se negó porque sabía que estaba enamorado dl pelinegro, pero él le dijo que se había rendido y que Sasuke se merecía a alguien mejor que solo la compañía de su mejor amigo, después de un rato Temari acepto, luego le marcó a Gaara, todo esto mientras estaba en el baño mientras Sasuke estaba esperándolo en la azotea cuando decidieron saltarse las clases. El pelirrojo como era obvio se negó a que la cacatúa saliera con SU HERMANA, pero después de suplicas por parte de Naruto aceptó, más cuando le prometió que de ahora en adelante se verían más a menudo, fue entonces cuando le explicó todo, cuando le contó que Sasuke le había pedido elegir a su pareja ideal, le contó que ya era tiempo de rendirse y que si quería de verdad olvidarse de ese tonto enamoramiento tendría que dejar de ser amigo de Sasuke, porque para él Sasuke nunca podría ser solo eso, Gaara gritó miles de maldiciones sobre el Uchiha y le dijo a Naruto que iría a su casa al atardecer.
Cosa que comprobó Naruto después de estar metido en sus pensamientos durante todo ese tiempo sin dejar de caminar, había llegado a su casa y Gaara estaba sentado en el porche de esta, cuando el pelirrojo lo vio se paró y él se acercó, Naruto por primera vez sintió lo que era tener el corazón roto, la depresión y el dolor de un amor que él se imaginó alguna vez podía nacer en Sasuke, en ese momento agradeció tanto la presencia de Gaara porque, si no fuera porque él estaba ahí, nadie lo hubiera abrazado cuando comenzó a llorar como nunca antes en su vida lo había hecho.
Sus padres no estaban, se habían ido a un viaje de negocios y no volverían hasta dentro de tres días, los cuales Gaara decidió pasar con él después de horas y horas sin parar de llorar, de lamentarse, de llamar a Sasuke un estúpido y muchas cosas más, por suerte era fin de semana y Naruto tendría oportunidad para calmarse y dejar a Sasuke atrás con todo y sus sentimientos, el lunes, al entrar a la universidad haría como que no lo conocía y lo evitaría tanto como le fuera posible, daba gracias de que Shikamaru estuviera en la carrera de administración de empresas igual que ellos dos, por lo menos iba a contar con su compañía de ahora en adelante y tal vez, Naruto por fin iba a tomarle la palabra e iban a intentar salir juntos, Shikamaru se lo merecía... Él se lo merecía.
-Sí, estaremos en contacto, adiós Sai -Naruto, que estaba acostado en el sillón de la sala, miró a Gaara con burla, el pelirrojo suspiró y le hizo una señal a Naruto para que alzara la cabeza y él pudiera sentarse, Naruto así lo hizo y pronto las caricias en su cabello por parte de Gaara se volvieron a reanudar como antes de que este recibiera una llamada de su novio Sai Uchiha.
-Parece que las cosas van bien entre los dos -Gaara miró la sonrisa de su amigo y este le asintió sin tomar realmente atención a lo que había dicho, Naruto sabía que Gaara no quería hablar de Sai, quería fijar su atención en él y aunque se lo agradecía, él no quería solo pensar en sí mismo, no era su costumbre -Vamos, hablemos de las flores y bombones que rodea tu relación -Naruto se incorporó y solo para mirar la mirada de reproche de su amigo.
-Sé que estas acostumbrado a dar el hombro, a dar las palabras de apoyo y a nunca ser el centro de atención, pero por una vez Naruto, sé egoísta y piensa en ti, te he dejado llorar y que insultes a Sasuke tanto como has querido, pero no hemos hablado de cómo te sientes y tenemos que hacerlo, no puedes solo ignorar tus sentimientos -Naruto miró sus manos y al final volvió a acostarse con la cabeza en el regazo de Gaara pero esta vez de lado con la cara hacía el televisor, el cual estaba apagado.
-¿Y qué se supone que debo decirte? Sabes que yo guardo todo Gaara, lo he hecho durante toda mi vida, yo no sé hacer eso de soltarse -Gaara sonrió con ternura por el menor, y solo le susurró un inténtalo para después sentir como el cuerpo que tenía a su merced se relajaba por sus caricias al sentir el apoyo que desde hace años le había hecho falta -Quiero olvidarlo... Dejar que sea tan feliz como siempre ha querido porque sé que lo será con Temari, pero no puedo echar a un lado siete años de ilusiones -A Naruto se le quebraba la voz, esta vez volvía a llorar y Gaara sabía que no iba a parar de hacerlo por muchos días más, que estaría triste durante un largo tiempo y se odiaba por no poder evitarlo, la razón era simple, el tiempo que Naruto estuvo enamorado de Sasuke había sido demasiado, ser su mejor amigo no ayudaba en nada, el menor estaba acostumbrado a tener al Uchiha a su alrededor y, de un día para otro, ya no podría hacerlo más -Siempre le dije a Sasuke que encerrarse y deprimirse no era lo correcto, qué debería salir y demostrarle a esa zorras de lo que se habían perdido, de lo equivocadas que estaban pero ¿Y yo? ¿Qué se supone que debo hacer si en primer lugar Sasuke no fue más que mi amigo? Estoy lamentándome por algo que nunca llegó a ser, llorando por alguien que nunca fue mío -Naruto se limpiaba con más fuerza de la necesaria las lágrimas que surcaban sus mejillas sin parar, pero ni así podía pararlas, el menor siguió hablando, dejándose llevar y por primera vez esta vez era él a quien tenía quien lo abrazara, que le dijeran que todo iba a estar bien, a alguien que simplemente se prestara a escuchar... Porque eso era lo que más falta le hacía, dejar de ser el que escuchaba y ser escuchado.
Al final Naruto cumplió con lo que había dicho, después de ese fin de semana las llamadas insistentes de Sasuke y los mensajes mandados a media noche nunca fueron contestados, decidió que lo mejor era cambiar de número y así lo hizo, Gaara le dijo que no era necesario que se tomara muchas molestias e intercambiaron números ya que Sasuke nunca se interesó por tener el celular de Gaara, quien al contestar una llamada de Sasuke le dijo que Naruto tenía un número diferente ahora y que se negaba a dárselo, no dio explicaciones, ni dijo ningún porqué, fue hasta el lunes que Naruto se vio obligado a llegar un tanto tarde para no encontrarse a Sasuke en la entrada como siempre esperándolo, cuando llegó al aula el mayor lo saludo desde lejos y, en vez de ocupar su lugar de siempre a su lado, lo ignoró y tomó asiento al lado de Shikamaru, quien estaba al tanto de todo y no podía evitar sonreír con prepotencia al saber que tendría una oportunidad con Naruto y Sasuke ya no significaría un problema.
Durante el día Sasuke no pudo cruzar palabra con Naruto, ya fuera porque se distraía, porque el menor evidentemente lo evitaba o porque Temari y él se cruzaban en el camino, Sasuke de cierta manera se sentía fatal por no saber porque su amigo no quería estar con él, pero cada vez que miraba los ojos de Temari se olvidaba de todo y se concentraba en la chica frente a él, quien extrañamente le recordaba a Naruto y eso lo hacía sentirse bien en su compañía, sin darse cuenta que dentro de su cabeza comparaba constantemente a Temari con Naruto, justo como lo hacía con Sakura y Karin en su tiempo.
Y en fin, los días pasaron, Sasuke se dio cuenta que por más esfuerzo que ponía Naruto ya no quería saber nada de él y aunque le dolía, por más que intentó conseguir su número, ir a su casa a plantarse frente a la puerta y recibir negativas de los padres del menor, había decidido dejar las cosas, porque si había hecho algo al parecer no tenía remedio. Había pasado exactamente un mes entero en el que no paró de intentar, pero cada vez hacía algo sentía que eso hacía que se alejaran el doble de lo que ya estaban, fue por eso que lo dejo estar.
Las cosas con Temari iban bien, se habían tomado las cosas con calma y hasta ese momento no había decidido formalizar la relación, y la verdad es que no creía poder hacerlo. No después del primer beso que se dieron el día anterior, Sasuke había cerrado los ojos con la imagen de Temari en la cabeza y los había abierto deseando que no fuera Temari sino Naruto quien le hubiera besado en ese momento.
Fue entonces cuando todo le llegó tan claro como una bofetada.
Por más que quisiera ocultarlo no podía mentirse ni un minutos más, necesitaba a Naruto, lo necesitaba más que nada en el mundo, Sasuke se había dado cuenta que sentía algo por él, pero aun no podía decir que ciertamente era algo parecido al gustar.
-¿Así que crees sentir algo pero no sabes qué? -Temari lo miró con curiosidad, Sasuke aun no podía creer que la chica no se hubiera enojado cuando minutos atrás le había dicho que no podían salir juntos, en cambio, una vez que le explicó lo que últimamente había pasado con Naruto y lo que había estado pensando, ella se emocionó y sonrió con ternura, como si esa hubiera sido una noticia que esperaba desde que se conocieron.
-No puedo decirte que me gusta, ha estado toda mi vida al lado mío y no es fácil acostumbrarse a su ausencia, él siempre estaba ahí y ahora que estuve pensando me di cuenta que soy el peor de los amigos -Temari tomó su mano y apretó con fuerza para demostrarle su apoyo -Era Naruto el que hacía todo y yo solo estaba ahí como piedra, recibiendo sus mimos y su cariño incondicional y nunca me había parado a pensar que tal vez él también necesitaba de eso o algo más que un simple abrazo -Temari permaneció callada esperando que Sasuke terminara de hablar para darle su opinión-Quiero hablar con él, que me diga por qué ya no quiere verme, pero es casi imposible, sus padres no me dejan pasar a verlo en su casa, he conseguido números que según son suyos y son basura, en la universidad evita pasar por donde estoy, se sienta con Shikamaru y antes de que pueda alcanzarlo se va con él, esta todo el tiempo a su lado y si te soy sincero, eso me enferma - Temari se rió de él y Sasuke frunció el ceño al darse cuenta.
-Estas celoso -Sasuke no negó nada, ya le habían dicho eso y no tenía ningún problema con aceptarlo -Tienes que hablar con él, sé que ya has intentado de todo, pero no le has pedido ayuda a Gaara -Sasuke volvió a fruncir el ceño con la sola mención del hermano menor de Temari -Oye, justo ahora él es el mejor amigo de Naruto y él único que te va a decir como acercarte a él, y eso si logras convencerlo - Sasuke dejó salir un gran quejido al no querer hablar con Gaara, pero sabía que era el único que lo podría ayudar, así que, con los ánimos de Temari por detrás, fue a la universidad, lugar en donde Gaara aun seguía por estar como ayudante de la biblioteca escolar.
Cuando llegó a la universidad una parte de él le decía a gritos que aun estaba a tiempo para regresar a su auto y pasar de Gaara mientras pensaba en otra manera de acercarse a Naruto, con solo suspiró porque sabía más que nadie que no había otra manera, no existía, ya lo había intentado todo, menos suplicarle al pelirrojo un poco de apoyo para poder hablar con el rubio menor.
Con pasos lentos Sasuke se dirigió a la biblioteca, cuando estuvo ahí escuchó a Gaara despedirse de la bibliotecaria, Shizune, y entonces lo vio salir para encontrarse cara a cara con él, el ceño fruncido del más bajo le hacía asegurarse que tampoco a él le había gracia tenerlo frente a él, pero Sasuke no iba a dar vuelta, no cuando tenía la oportunidad de estar de nuevo con Naruto.
-Necesito hablar con Naruto -Gaara lo miró sin decir ninguna palabra, esperando que dijera algo más, después de todo si eso era lo único que iba a decir estaba muy equivocado si creía en verdad que le iba ayudar con Naruto, Sasuke suspiró -Pongamos algo en claro, no te agrado, no me agradas, nunca llegamos a ser amigos que llegamos a soportarnos por Naruto, él ha sido mi amigo de toda la vida, de toda, no puedo quedarme con los brazos cruzados mirando como él sigue ignorándome sin saber por qué, si tengo que pedirle perdón lo haré, si tengo que arrodillarme lo haré, pero por lo menos quiero saber el motivo por el cual tengo que hacerlo, no leo mentes, no soy adivino y por mucho que quiera no puedo saber que fue lo que hice mal para que Naruto se comporte así conmigo, solo sé que no puedo más y necesito hablar con él, sé que tú tienes su número pero también sé que no quieres ayudarme, pero si es necesario te acosaré día y noche, no me despegaré de ti hasta que me lo des -Por desgracia Gaara sabía la seriedad con la que Sasuke decía todo eso, sabía que si en verdad se negaba lo tendría como lapa durante mucho tiempo porque no quería, de verdad que no quería darle el número de Naruto, no cuando aun el menor seguía llegando a la escuela con ojos hinchados por llorar la noche entera por alguien tan estúpido y cabeza hueca como lo era Sasuke.
-Naruto está mejor sin ti - Gaara no quería ser cruel, no quería poner en evidencia a su amigo pero tampoco quería que Sasuke se le acercara más, el daño ya estaba hecho y mientras el Uchiha no pudiera darle el cariño que Naruto había esperado obtener de él durante todo esos años no quería verlo cerca de él, Naruto estaba suficientemente roto, ya había sido demasiado para él saber que Temari, una amiga incondicional, iba a salir con el chico que amaba, por eso no le importó decir aquello y ver como Sasuke perdía su serenidad, como había hecho sus manos puños y poner el cuerpo tenso -Si no te das cuenta de lo que pasa por ti mismo no tienes derecho a pedirme ayuda, piensa un poco y deja de ser un idiota, pregúntate por qué Naruto nunca se apartó de tu lado, por qué siempre estuvo ahí, haz algo más que concentrarte en la falta que te hace y piensa en la manera en que te miraba, como sin importar lo que hicieras o dijeras, o en este caso, a pesar de lo que nunca dijiste ni hiciste, él siempre estaba ahí, esperando, preguntándose si algún día lo que hacía podría hacer que reaccionaras -Después de esto Gaara simplemente se fue, en cada una de sus palabras podía sentir el odio que desprendía hacía él y no podía estar más de acuerdo... ¿Tanto daño le había hecho a Naruto? ¿Cómo?
Sasuke caminó de regreso a su auto, el cual estaba en el estacionamiento subterráneo de la escuela, estaba tan metido en sus pensamientos que no escuchó dos voces en el lugar hasta que, cuando pasaba al lado de un pilar, los vio. Eran Naruto y Shikamaru, el castaño tenía acorralado al menor contra su auto, algo en su pecho se rompió al verlos, Naruto tenía la cabeza gacha y Shikamaru no le dejaba escapatoria con las manos a sus costados recargados en el auto, estaban hablando y él decía esconderse detrás del pilar siendo incapaz de interrumpirlos.
-Me gustas -Sasuke cerró los ojos con fuerza al escuchar a Shikamaru, el tipo era serio, directo y quería a Naruto, pero él no podía evitar pensar que él es el que debería de decir eso y no el castaño, aunque en ese momento no era consciente de lo que pensaba -Me gustas Naruto -Sasuke se asomó un poco para ser testigo de cómo Shikamaru tomaba a Naruto del mentón y le alzaba la cara para poder mirarlo a los ojos, desde donde estaba podía ver a Naruto mirando a Shikamaru con pena, tristeza y suplica, no sabía a qué se debía la expresión pero eso quedó en segundo plano cuando miró a Shikamaru acercarse más a Naruto, anulando la distancia entre los dos y besándolo... Besando a Naruto.
Momentos antes.... (Shikamaru y Naruto)
Naruto y Shikamaru se habían quedado a ayudar a Gaara en la biblioteca porque al parecer alumnos de primer semestre habían dejado la biblioteca patas arriba, después de dos horas, cuando faltaban solo algunos libros Gaara les pidió que se fueran puesto que ya habían hecho suficiente, Naruto no pudo protestar, su pelirrojo amigo había estado preocupado por él por su actitud y lo entendía, desde lo de Sasuke ya no era el mismo, aun seguía llorando por el pelinegro cuando se quedaba solo en casa y no podía evitar pensar en él, comía por obligación, salía por obligación, hacía todo automáticamente porque si, le hacía falta Sasuke, le hacía más falta de lo que pensó y, aunque ahora si había intentado tener algo con Shikamaru, las cosas no habían avanzado demasiado, solo besos casuales y caricias inocentes.
Caminaron en silencio hasta el estacionamiento, él no iba pensando en nada en particular, solo evitando la mirada insistente de Shikamaru, quien había intentado acercarse a él íntimamente entre los estantes de la biblioteca cuando Gaara estaba haciendo otras cosas algo apartados de ellos, una parte de él se odiaba por haberlo apartado, pero en su momento, cuando lo empujó lejos de él se sintió aliviado porque nunca se imagino en una situación como esa con alguien que no fuera Sasuke.
-Naruto, tenemos que hablar -El menor suspiró, ya estaban en el estacionamiento al lado del auto de Shikamaru, él estaba recargado en este y el mayor estaba frente a él mirando algo enojado, y lo entendía, se suponía que lo iban a intentar, que él iba a poner de su parte en la relación pero no podía, no por el momento, no cuando prácticamente las 24 horas del día no podía evitar pensar en Sasuke.
-Lo siento, si es por lo de la biblioteca de verdad lo siento-ttebayo -Naruto tenía la mirada gacha, de verdad se sentía mal por todo eso, más que nada por Shikamaru que no se merecía nada de eso, el castaño lo quería y él hacía lo que podía por corresponderlo. Shikamaru lo miró y suspiró, entendía que Naruto seguía amando a Sasuke, había estado enamorado de él durante mucho tiempo y supo que hacerlo olvidarse de aquel idiota no iba a ser fácil, pero quiso intentarlo, porque en su momento Naruto de verdad le gustaba y quería que el pequeño fuera feliz, sin embargo, después del tiempo que pasaron juntos no podía seguir diciendo que de verdad le gustaba porque comprendía que no había alguien más para Naruto que no fuera Sasuke pero... Pero el Uchiha hasta el momento solo le había hecho daño y él, por mucho que ya no le gustara Naruto, seguía considerándolo especial y no iba a permitir que siguiera con esa actitud, el quería hacer que Naruto fuera el de antes, que volviera a sonreír, cosa que durante ese mes supo que no iba a ser posible a menos que lograra que el Uchiha regresara al lado del menor, algo que tampoco quería que pasara si el idiota ese no se daba cuenta lo mucho que Naruto lo amaba.
Shikamaru se quedó en silencio durante unos segundos, necesitaba pensar. Justo estaba por darse por vencido cuando escuchó la puerta del estacionamiento ser abierta, Naruto por el contrario estaba más concentrado en sí mismo, tal vez regañándose por lo poco que había colaborado con aquella supuesta relación, pero en fin, el punto no era ese, el punto era que justo en ese momento Shikamaru estaba mirando a Uchiha Sasuke caminar hacía ellos sin darse cuenta que estaban ahí, fue entonces que todo se le iluminó, Shikamaru sonrió y, cuando vio de reojo a Sasuke esconderse detrás de un pilar al tiempo en que Naruto le preguntaba si estaba enojado con él, se acercó al menor, acorralándolo contra el auto, pasando sus brazos para no dejar escapatoria a Naruto y lo miró, lo miró a los ojos tan intensamente que Naruto por instinto bajó la mirada y él no pudo evitar pensar sobre lo tierno e inocente que era.
-Me gustas - El cuerpo de Naruto sintió un escalofrío por las palabras tan directas de Shikamaru, el menor se odio así mismo porque no, no podía decirlo, no podía sentirlo y no sabía si sería capaz de hacerlo algún día, Naruto quería acabar con todo eso, estar solo, seguir llorando por Sasuke hasta superarlo pero sin intentar algo con alguien que no merecía su rechazo -Me gustas Naruto - El menor quiso negarse pero las palabras se trabaron en su garganta, cuando Shikamaru le alzó el rostro con su mano en el mentón quiso transmitirle con la mirada que tenían que parar, aun así Shikamaru lo besó, lo besó con dulzura, como si con aquel beso se fuera a romper. No era la primera vez que lo besaban, de hecho su corazón se rompía aun más al recordar que su primer beso había sido con Sasuke y todo porque eran unos críos, Sasuke ya había tenido algunas novias Y tenía experiencia, por el contrario él ni siquiera sabía besar, como algo casual Sasuke se ofreció a enseñarlo, así pasó una semana entera con Sasuke enseñándole debajo del escritorio del profesor de música en las horas de receso a besar, entonces solo tenían 12 años y aun no podía decir estar enamorado de Sasuke, sin embargo fue aquello lo que hizo que una atracción incomprensible fuera creciendo en él hasta convertirse en un gustar y después en algo más.
-Lo siento-ttebayo -Naruto no había correspondido con el beso, al separarse Shikamaru lo miró rendido y dejó salir un suspiro lastimero, Naruto se sintió la peor persona del mundo en ese momento.
-¿Es por Sasuke, verdad? -
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Escuchar su nombre hizo que dejara de respirar momentáneamente, había estado tentado a irse porque no podía soportar verlos juntos, sin embargo se había quedado y una parte de él lo felicitaba por haberlo hecho.
-Sí, es por Sasuke -¿Qué tenía que ver él? ¿Por qué Naruto se escuchaba tan destrozado cada vez que pronunciaba su nombre? ¿Qué había hecho? -No puedo Shikamaru, no puedo ignorar 7 años y toda una vida de ser su amigo -¿7 años? ¿7 años de qué? -Intento e intento olvidarlo, pensar en ti y en nosotros, el bueno que sería estar juntos y en el bien que me haría enamorarme de ti, pero no puedo -Sasuke sintió un dolor en el pecho al ver una lágrima rondar la mejilla de Naruto, él era el culpable de que estuviera llorando, lo sabía y se odiaba por eso -Cuando estoy contigo pienso en él y no puedo evitar compararlos, imaginarme como sería que él fueras tú, imaginarme que él es quien me besa, me abraza y está aquí conmigo, pensar en lo perfecto que sería estar a su lado no como su amigo, sino como algo más -Su corazón comenzó a palpitar con rapidez, lo que estaba escuchado, lo que Naruto estaba diciendo no podía creerlo, ¿Naruto estaba...? -Lo amo Shikamaru... lo ame durante siete años y lo seguiré haciendo la vida entera, porque el primer amor nunca se olvida y no quiero hacerlo, no cuando en él encontré un gran amigo, no cuando pasé los mejores años de mi vida con él -Sasuke miró a Naruto alejarse de Shikamaru y salir del estacionamiento caminando por la salida de los autos, quería correr hasta él y abrazarlo, aun así estaba tan sorprendido que sus pies se quedaron pegados al suelo, no podía asimilar todo eso tan rápido, no cuando se estaba dando cuenta de lo imbécil que había sido por no haberse dado cuenta de algo más que obvio, y no solo estaba hablando de los sentimientos de Naruto, sino de los suyos por igual...
Aquella vez cuando besó a Temari y se imagino que era Naruto, aquellas veces en las que los comparó, diciéndose así mismo que el cabello de Temari no era tan lindo como el de Naruto, que sus ojos azules eran más opacos que los del menor, que si fuera un poco más baja como Naruto sería perfecta, todas esas veces, siempre pensando en Naruto y nunca se había dado cuenta.
Sasuke, sin importar si Shikamaru alcanzaría a verlo, regresó por donde iba para encontrarse con Gaara, estaba metido en sus pensamientos, mirando el suelo pero sin hacerlo en verdad, recreando las palabras una y otra vez de Naruto, colocando las piezas del rompecabezas una a una y sabiendo por fin porqué lo había estado evitando aunque sin enterarse muy bien del asunto, necesitaba hablar con alguien y no había nadie cerca más que Gaara, la rivalidad que sentía por él podía quedar de lado por ese momento porque en lo único que podía pensar en ese momento era en querer estar con el menor, cosa que solo iba a suceder si estaba seguro de poder corresponder a sus sentimientos.
Cuando llegó a la biblioteca Gaara estaba a punto de irse, al verlo la mirada cansada y de enojo no le sorprendió, Sasuke caminó hasta él mirando al suelo, pensando en Naruto, en él y en las incontables veces que Naruto quiso decirle algo pero siempre pasaba alguna cosa que lo hacía retroceder, Sasuke se sentó en una silla porque sentía que en cualquier momento se iba a caer, Gaara lo miró confundido y justo cuando iba a decirle algo, lo recordó.
Recordó la estupidez más grande que pudo haber hecho, la cosa más injusta que le pidió a Naruto hacer y la posible razón por la que Naruto ya no lo quería ni ver.
"¿A quién más que a ti le puedo dejar la tarea de elegirme a alguien que de verdad valga la pena? Eres mi mejor amigo, y si de verdad dices conocer a las chicas sé que me presentaras a la ideal"
-Soy un idiota - Aunque Gaara estaba totalmente de acuerdo ante el auto insulto de Sasuke no pudo evitar sentir un deje de preocupación por aquel pedazo de tonto, el chico tenía una cara de espanto, estaba pálido y tenía una mirada llena de terror, como si hubiera visto o descubierto algo de vida o muerte, Gaara dejó sus cosas y se sentó a su lado, movió su mano frente a Sasuke preguntándose si de esa manera lo haría reaccionar cuando, de la nada, el Uchiha dejó caer su cabeza contra la mesa golpeándose ruidosamente la frente -Naruto... Naruto está enamorado de mi -Y entonces Gaara frunció el ceño ¿Cómo sabía Sasuke sobre eso? ¿Por qué tanto drama ahora que lo sabía? ¿Acaso tenía algún problema con ello? Miles de preguntas se formaron en su cabeza, todas al finalizar le dedicaba una muerte dolorosa a Sasuke si la respuesta era afirmativa, Gaara estuvo a punto de decir algo, decirle a Sasuke que Naruto ya no estaba enamorado de él por muy mentira que fuera pero, el Uchiha se le adelantó - Yo... Estoy enamorado de él -Sasuke sintió su cuerpo temblar, unas ganas horribles de llorar y de golpearse así mismo, quería tirarse por una ventana por lo estúpido que había sido y estaba seguro de que si le pedía a Gaara para matarse así mismo, el otro aceptaría gustoso, por otro lado Gaara se quedó sin respiración en cuanto escuchó decir aquello a Sasuke, el enojo se apoderó de él, frunció el ceño y, tomando en cuenta que ya no había nadie en la biblioteca, gritó.
-¡¿Qué tú qué!? -Gaara tomó el cuello de la camisa de Sasuke con fuerza e hizo que lo encarara, los ojos brillosos por las lagrimas retenidas fueron un detalle que su enojo no tomó en cuenta en Sasuke y se dispuso a seguir gritando en nombre de Naruto -¡¿Estas de coña, no?! ¿¡Tú, enamorado de Naruto?! ¡No me jodas, Sasuke! ¡¿Por qué te gustaría Naruto tan repentinamente?! ¡Si esto es un juego para ti, puedes irte a la mierda! ¡Esto es serio! ¡NARUTO TE AMA, TE AMA DESDE HACE SIETE JODIDOS AÑOS Y AHORA TE ENTERAS Y ¿DE LA NADA ESTAS IGUAL QUE ÉL?! ¡Que te den! -Sasuke sabía que se merecía esos gritos, incluso imploraba que Gaara le pegara, porque sí, el pelirrojo tenía toda la razón, ¿Cómo podía estar tan seguro de que estaba enamorado del menor? No lo sabía, solo sabía que lo estaba y por eso dejó de pensar, se tragó las ganas de llorar y se dejó llevar.
-Gaara, no lo entiendes ¡Estoy enamorado de él y nunca me di cuenta! ¡Le hice daño, algo que siempre me prometí que nunca haría y no me di cuenta! Éramos los mejores amigos... ¿Cómo te das cuentas que amas a la persona que llamas amigo cuando siempre lo has querido intensamente? ¿Cuándo y cómo se supone que iba a darme cuenta que dejé de verlo como un amigo y comencé a quererlo cómo algo más? ¡¿Cómo iba a ser consciente de las miles de veces que lo comparé con Sakura, Karin e incluso con Temari?!... ¿Cómo saber que no había nadie mejor que él para mí? -Gaara entonces lo soltó pero no dejó de estar enojado, suspiró cansado de toda esa situación y dejó que el pelinegro se acomodará de nuevo en su lugar mientras él hacía lo mismo, Sasuke puso sus manos a los costados de su cabeza, repitiendo una y otra vez lo idiota que había sido.
-¿En serio no te habías dado cuenta? -El silencio de Sasuke se lo confirmó -Supongo que no te culpo, Naruto nunca quiso que lo supieras sino era por su propia boca, el hecho de que muchos nos diéramos cuenta fue porque él mismo nos lo dijo o porque Itachi lo hacía -Sasuke con la mención de su hermano lo volteo a ver sorprendido, ¿Itachi lo sabía? ¿Desde cuándo? -Tu hermano lo supo incluso antes de que Naruto se diera cuenta de sus sentimientos, incluso sabía que a ti te gustaba pero nunca te lo dijo porque pensó que te darías cuenta -Gaara suspiró, recordando la conversación que había tenido con el Uchiha mayor cuando sucedió lo de Sakura, cuando Naruto dejó de estar seguido con él por estar pegado al Uchiha -El me dijo que cuando le presentaste a Sakura, cuando se fueron por algo de tomar a la cocina tú dijiste "Es tan linda como Naruto, pero tiene un carácter que deja mucho que desear, aun así cuando está tranquila me recuerda a él" -Sasuke lo recordaba y se reprendió por no haberlo hecho antes, no estaba equivocado cuando dedujo que siempre había comparado a todos con Naruto, no había persona a la que no mirara y pensara en el menor instantáneamente, como deseando que todos fueran como él -Me dijo que ni siquiera te diste cuenta de lo que dijiste pero supuso que estar con Sakura haría que te darías cuenta de las mil y un veces que la comparaste con Naruto mientras hablabas con él, pero eso no pasó, luego ella te dejó y el hecho de que Naruto fuera quien te sacará de tu habitación, después de que hizo todo eso por ti pensó que al fin abrirías los ojos, pero tampoco fue así, Itachi se desesperó y deseo que alguien apareciera y se llevara a Naruto lejos de ti porque solo le hacías daño una y otra vez -Sasuke apretó los puños y se maldijo así mismo más veces de las que podría contar, Gaara lo miró y pudo sentir su arrepentimiento como si fuera suyo, sintió pena por Sasuke, tal vez ya era demasiado tarde para que Naruto lo perdonara, pero no podían estar seguros hasta que el Uchiha lo intentase, cosa que no quería que pasara pero sabía que no había de otra, Naruto está mal sin Sasuke y Sasuke estaba cayendo a un abismo sin el menor al darse cuenta de todo -Cuando le pediste que te buscara una novia fue el colmo, no voy a perdonarte nunca las lágrimas que tuve que secar por tu culpa ese día, estuvo llorando por horas y hasta el día de hoy sigue haciéndolo, todo por ti, siempre por ti -Gaara no quería que Sasuke se sintiera peor con sus palabras pero... ¿A quién quería engañar? ¡Por supuesto que eso quería! Quería que con todo lo que dijera el Uchiha entrara en razón, saliera de ese trance de mocoso arrepentido en el que se había sumergido y fuera a buscar a Naruto antes de que a él se le acabase la paciencia -Si tú te sientes miserable ¿Adivina como se siente Naruto después de siete años de estar enamorado, de toda una vida siendo un amigo incondicional y esperando el momento perfecto para decirte lo enamorado que estaba para qué, cada vez que se atrevía, tú le presentabas a alguien, le hablabas de la chica perfecta y le pedías que buscara a tu pareja ideal cuándo la tenías justo frente a ti, !lastimándola con cada puta palabra que salía de tu boca!? -El sonido sordo de la silla al chocar con el piso fue la señal que Gaara estaba esperando para callarse, Sasuke se había levantado estrepitosamente y lo miraba con enojo porque... porque lo sabía, sabía lo muy idiota, miserable, egoísta y despistado que había sido todo ese tiempo, y quería pensar que aun tenía una oportunidad, quería pensar que si iba a casa de Naruto aun podría tenerlo en sus brazos para nunca más dejarlo ir, para amarlo hasta que sus corazones se fundieran, corresponderle y hacer que esos siete años de estar enamorado de un tonto valieran la pena y no fuesen un desperdicio en la vida de Naruto, quería eso y quería más, quería todo de Naruto porque él estaba dispuesto a darle hasta su último aliento con tal de tenerlo a su lado -Vamos, te llevaré y hablaré con sus padres para que te dejen pasar -Sasuke miró sorprendido a Gaara, el pelirrojo suspiró y se cruzó de brazos -Quiero que Naruto vuelva a ser el mismo de antes y solo tú harás que eso pase, vamos -Sasuke no esperó más y se fue detrás de Gaara con una llama de esperanza en él, Sasuke se subió a su coche y siguió al de Gaara de cerca, estaban de camino a casa de Naruto y esperaba que los padres de este, con ayuda de Gaara, de verdad lo dejaran pasar.
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Naruto estaba frente a la computadora de su habitación, mirando un video sin prestarle atención, sintiendo el tiempo pasar y sin poder reaccionar, esperando un milagro, preguntándose si después de Temari tendrían una oportunidad, si Sasuke lo seguiría buscando, preguntándose si en algún momento podrían estar juntos de nuevo, tratando de hacerse falsas esperanzas, porque si, quería ir y buscarlo, seguir estando con él aunque solo fueran amigos, conformarse con eso porque era lo que lo hacía feliz.
Porque la verdad era esa, Naruto no podía culpar a Sasuke de nada, porque para Naruto el ser amigo de Sasuke era su límite, un límite que él solo se dibujo, porque nunca se atrevió a decirle lo que sentía, nunca se había mostrado vulnerable ante él por miedo a que se diera cuenta de sus sentimientos, por so Sasuke nunca se había dado cuenta y lo que había hecho, lo que había pasado había sido su error, tuvo que haberle dicho, Sasuke se merecía una explicación como también él se merecía ser rechazado o aceptado, porque nunca lo había intentado, nunca se había atrevido, y si lo hubiera hecho, si tan solo le hubiera demostrado que lo amaba las cosas pudieron haber sido diferentes, podrían seguir amigos, podrían no ser nada o podrían ser algo más.
Naruto entonces se preguntó si aun estaría a tiempo, preguntándose si Sasuke y Temari aun no eran más que amigos, de solo pensarlo nació la esperanza en él más fuerte que nunca, como si fuera un resorte se paró de su lugar y buscó su chaqueta para salir corriendo en busca de Sasuke, para decirle, para gritarle lo mucho que lo quería, que lo amaba, fue hasta su puerta y, preparando su mejor sonrisa, la abrió.
-¿Sasuke...? - De todas las cosas que esperaba que sucedieran a partir del momento en que abriera la puerta nunca se imaginó aquello, Sasuke tenía el puño en alto para tocar su puerta, con una mirada que parecía desesperada, con la respiración agitada y con sus padres y Gaara subiendo las escaleras rápidamente tratando de detenerlo, lo siguiente que hizo fue actuar por instinto, Naruto abrazó a Sasuke y escondió su rostro en el cuello de este mientras sentía como su abrazo era correspondido, como Sasuke lo aferraba a su cuerpo como si fuera a desintegrar en sus brazos -Te amo -El cuerpo más grande se tensó con sus palabras y él no supo en qué momento comenzó a llorar, solo sabía que no podía callárselo ni un segundo más, sabía que si quería sincerarse con Sasuke era ahora o nunca -Te amo y lo he hecho durante años, sé que no soy la chica perfecta, ni siquiera soy mujer, pero... ¡Pero no hay nadie Sasuke! No hay nadie que pueda amarte más de lo que yo lo hago -Naruto se separó lo suficiente para mirar los ojos negros de Sasuke sin parar de hablar -Siempre he sido incondicional a ti, no me imagino una vida lejos de tus enojos, tus sonrisas, de todo tú, he disfrutado de mi vida solo porque la he compartido contigo y no, no tengo dudas, nunca voy a querer a nadie tanto como te quiero a ti, tú eres el primer y único amor que quiero sentir, y si tu quieres quisiera ser el tuyo por igual - Sasuke sentía su corazón palpitar con rapidez, si le había quedado alguna duda estas se habían borrado al escuchar decir todo eso a Naruto, ahora que lo sabía y que estaba seguro era imposible guardarlo, estaba rotundamente...
-Enamorado -Naruto lo miró confundido, incapaz de comprender el susurro que Sasuke había dejado salir muy cerca de sus labios -Estoy enamorado -Naruto lo miró sorprendido, más aun cuando Sasuke acortó la distancia entre los dos y lo besó, Sasuke estaba enamorado y lo estaba de él, lagrimas tras lagrimas salieron por la emoción que sentía en su cuerpo por sentirse correspondido, sus brazos rodearon el cuello del mayor para atraerlo a él y degustar aquellos labios que tanto había querido volver a besar, Gaara y los señores Uzumaki se habían ido para dejarlos solos, Naruto agradecía el gesto, más aun cuando sintió que la caricia llena de ternura que habían estado compartiendo se iba intensificando poco a poco, robándole el aliento, haciendo que el sonrojo de sus mejillas fuera más evidente, descontrolando su respiración y sacándole un gemido ahogado por tanta intensidad.
-Te amo, te amo y lo siento por no haberme dado cuenta antes -Cuando ninguno de los dos pudo más y tuvieron que separarse por falta de aire, Sasuke había pegado sus frentes y esta vez fue el Uchiha quien dejó que las palabras salieron por si solas de él -Nunca podré decirte desde cuándo es que siento esto por ti, pero tal vez ha sido desde siempre, o tal vez fue desde que te enseñé a besar para darme cuenta que besarte había sido lo mejor que me había pasado en la vida, porque te mentí, te dije que no sabías hacerlo cuando desde el primer beso pudiste hacer muy bien y entonces te obligue a repetirlo todos los recesos de esa semana, haciendo que me preguntara por qué me gustaba tanto besar a mi mejor amigo, escondiendo la verdad debajo de un amor fraternal que nunca existió... Porque te amo, porque lo he hecho desde entonces y tal vez desde antes y soy un idiota por no darme cuenta antes, ni de ti ni de mi -De nuevo Sasuke besó a Naruto, esta vez más calmado, pegando la espalda del menor a la pared al lado de la puerta de su habitación, Naruto nunca pensó que el momento en que dijera lo que sentía por Sasuke iba a ser tan perfecto, porque para él ese momento lo era, era perfecto y no había nada que pudiera mejorarlo más -Si tu quieres Naruto, si aun me quieres después de lo que pasó con Temari y todo el tema de alejarnos... Si tu quieres ¿Serías mi novio? -No, ahora sí que era perfecto... ¿Cuántas veces había soñado despierto imaginándose ese momento? ¿Cuántas noches en vela habían pasado mientras se comportaba como una chica enamorada y se preguntaba qué le diría Sasuke cuando se lo pidiera? Había imaginado miles de maneras, miles de posibilidades, lo imaginó en infinidades de lugares, fechas y ciertas personas a su alrededor, aun así estaban ahí, solos, una tarde de un viernes de un trece de junio, en su casa y con sus padres y su mejor amigo en la planta baja, y era perfecto, era lo que siempre había deseado y era perfecto.
Sasuke no tuvo que esperar demasiado para que Naruto le dijera que sí para luego volver a besarse; ese día, el trece de junio desde ese momento formaba parte de las fechas importantes en sus vida, el si tu quieres se convierto en si quiero y los dos dejaron el pasado donde debería estar, en el pasado. Perdonarse era tonto porque no había nada que perdonar, los dos comprendían la culpa que llevaban en sus hombros, Sasuke por no darse cuenta de lo que sentía él mismo y Naruto por nunca intentar algo que hubiera sido desde mucho tiempo atrás si se hubiera arriesgado, si hubiera dejado de esconderse detrás de la máscara de amigo.
Pero en fin, aquellas eran cosas que no iban a perturbar su relación, habían sido momentos que en el futuro se contarían entre risas y sin resentimientos, porque lo importante era el presente, porque no había nada mejor que lo que estaba ocurriendo, los dos lo sabían, los dos estaban consientes que no había espacio para nada que no fueran ellos dos, porque ese era su momento...
Y era perfecto.
Fin