Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Buscando al verdadero Torao. por MonkeyDKarla

[Reviews - 10]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Hola *-*/. Como dice el resumen, hay un aviso con el Fic de "Es un idiota, pero lo amo", bueno, ocurrió un problema con el Fic, por lo que se tuvo que eliminar, pero no se eliminó por completo, cuando este solucionado, se volverá a subir por los que leían esta historia :). 

Por lo tanto, como disculpa, les traigo este nuevo Fic, de un LawLu, ya que el Fic mencionado, la pareja principal era esta. Así que disfrútenlo n_n. 

Notas del capitulo:

Todos los personajes son del Mangaka Eiichiro Oda-Sama :3.

Un joven peli negro soñaba un sueño un tanto peculiar. Estaba es una extraña habitación, cubierta de negro total, sólo se veía la luz de la luna entrar por la gran ventana del lado izquierdo. Los pasos de una persona en frente suyo se escuchaban cada vez con más fuerza. Un hombre, más alto y delgado qué él se paró delante de él, a una distancia un tanto alejada, no se le veía muy bien el rostro pero con lo poco que veía, el sujeto era moreno. Pudo observar un poco su vestuario, tenía una sudadera amarilla con mangas negras, unos pantalones azules vaqueros con motas negras y nada más, no pudo verle más.

-Mugiwara-ya…-Alzo un poco el rostro, logrando ver un plateado ojo por parte de aquel hombre al igual que una sarcástica y sádica sonrisa…

Estaba durmiendo plácidamente en mi suave cama, pero por mi mala suerte y costumbre de moverme tanto, he caído en ella. Aún estoy medio adormilado, por lo que me incorporo un poco para quedar sentado en el frío piso con cobijas arrastrándolas, un hilo de saliva cae de mi boca, me rasco la nuca y bostezo. Estoy dispuesto a volver a dormirme, aunque sea en el piso, pero una familiar voz me llama desde abajo. Es mi hermano.

-¡Luffy! ¡Baja o llegaras tarde!-Es mi hermano mayor, no quiero hacerle caso y seguir durmiendo, aunque llegue tarde, pero lo segundo que dijo ha hecho que ponga mi atención en el.-¡El desayuno está listo!-Y salí como rayo, ya que si trata de comida, por más que tenga sueño y quiera seguir durmiendo, iré como un rayo al saber que hay comida. Así que me puse mi uniforme lo más rápido posible, con maletín en mano y baje al primer piso para entrar a la cocina. Ahí estaba mi hermano mayor, desayunando. Mi porción estaba en mi asiento de siempre, me senté y empecé a comer todo de una velocidad impresionante como si fuera una aspiradora. Me serví 10 porciones más, creo que eso sería suficiente para aguantar mis clases.

-Siempre es lo mismo, si no te digo que hay comida, no eres capaz de bajar.-Me reprocha mi hermano Sabo, que es 3 años mayor que yo, es rubio y tiene una melena ondulada de color dorado y por lógica, más alto que yo, con una cicatriz surcando su ojo izquierdo.

-Pero acabe despertando, shishishishi.-Me rió, le contesto de esa forma, él sólo suspira y se resigna, acaba sonriendo conmigo. Es hora de que me vaya al instituto, así que agarro mi maletín y salgo de casa, no sin antes despedirme de mi hermano.-¡Nos vemos al rato! ¡Sabo!-Estoy a punto de salir, pero Sabo me jala la oreja.

-¡Oye! ¿No crees que se te olvida algo?-Agarra mi cabeza y hace que giré a un cierto mueble, en el cual está la fotografía de alguien muy importante para nosotros dos.

-¡Oh! ¡Es cierto!-Me avergüenzo un poco ante mi descuido, voy con prisa a esa foto seguido por mi hermano atrás y ambos le hacemos una oración a la persona del retrato.-Bueno, ahora sí, me voy.

Me voy corriendo, se preguntarán, ¿el va a un instituto? Pues no, la respuesta es no, se salió de la escuela, no quería seguir estudiando. Pero trabaja, es barman de un bar llamado “Shin Sekai” gana bien, lo suficiente para mantenerlo a él y a mí. Aunque a veces esté muy cansado y necesite dormir más, pero estamos estables.

¿Y bien? ¡Así! No me he presentado, ehem… ¡Me llamo Monkey D. Luffy! Tengo 14 años, voy en segundo de secundaria en una escuela llamada One Piece. Mi cumpleaños es el 5 de mayo, soy moreno y según mi hermano y otros amigos, soy bajo. ¡No soy bajo! ¡Sólo que ellos son más grandes! ¡O se hacen brujería para crecer! Tengo una característica cicatriz bajo mi ojo izquierdo, me la hice para impresionar a Shanks de que soy un hombre, luego te hablaré de él, sólo puedo decir que él es… ¡Genial! Mi cabello es desordenado y negro, no sé más como describirme, ya tendrás idea de cómo soy. ¡Continuemos con el mundo en el que vivo! ¡Ah! ¡Casi lo olvido! Tengo un sombrero de paja portando siempre conmigo, nunca lo dejo atrás, ya que Shanks, sí, de nuevo él, me lo regalo. ¡Es genial! Ahora sí, continuemos…

He llegado a mi instituto, voy rápidamente a mi salón y ahí esta él… La persona de la cual me he enamorado y hasta el momento, es mi mejor amigo, queriendo ser algo más que eso. Él se llama Roronoa Zoro, es más alto que yo, de hecho, él es de esas personas que me dicen “bajo” o “chaparro” pero no me molesto mucho, ya que se trata de él. Tiene el cabello verde, me recuerda a un marimo, pero eso no le quita lo lindo. Como he dicho antes, es mi mejor amigo, llevo conociéndolo hace 5 años, desde la primaria hemos estado juntos. Pero no sé, en que momento me enamoré de él, lo ignoré, sólo sabía que mi corazón le pertenecía a Zoro. Aunque, creo, él no sentía lo mismo por mí, el sólo estar a su lado, me hacía feliz…

-Buenos días Luffy. ¿Qué no te moverás de ahí?-Llama mi atención, tiene razón, tan metido estaba en mis pensamientos que me quede parado en el marco de la puerta. Voy a mi asiento, en cuál es el último de la última fila izquierda a lado de una ventana. Que cada vez que me aburro, me pongo a contemplar el paisaje que ofrece el día.

-Buenos días Zoro.-Le saludo, mientras me acomodo en mi lugar, tengo sueño, por alguna extraña razón, ayer me dormí tarde, ya que me quede hasta muy tarde jugando con mi consola… Además, pues tuve anteriormente un extraño sueño del cual en un momento les contaré. Las clases iniciaron, ¡que aburrido! Nunca se me ha dado el estudio, incluso pensé en dejar la escuela como Sabo, pero él me lo prohibió, que yo si debía de estudiar y sobresalir, alguien mejor que él, termine aceptando, aunque, no soy un caso totalmente perdido, mis notas no serán excelentes, pero nunca he reprobado. Lo más bajo un seis y eso en matemáticas, como odio los números, ecuaciones, divisiones, multiplicaciones, la regla de tres, ¡arg! Me da un dolor de cabeza. Pero me gusta la historia, pues hay divertidos relatos de piratas o personas que han hecho cosas geniales que no me aburro. Creo que esa es la única clase en la cual saco 10. Por lo tanto, me valen las demás materias.

Así que, para ganar tiempo, ¿qué les parece si les cuento mi extraño sueño? No recuerdo del todo bien, sólo a un hombre en frente de mí que me decía “mugiwara-ya”, que extraña forma de llamarme… En fin, recuerdo que vestía con una sudadera amarilla con mangas negras, unos pantalones azules con manchas negras. Y creo, no sé muy bien, un sombrero blanco con motas color… Em… No recuerdo…Pero no sé, jamás había conocido alguien así que yo recuerde. Es sumamente extraño, bah… No le tomaré importancia.

Las clases transcurrían con habitual normalidad, hasta que llegó la hora del descanso, ¡al fin! Es hora de descansar de estas aburridas clases…

-Luffy, nos están esperando.-Zoro aparece a mi lado, mientras me espera dispuesto a ir con nuestros demás amigos.

-¡Vale!-Me paró rápidamente y quedo a lado de Zoro, salimos del salón y vamos con nuestros demás amigos, que van en otro grupos o grados. Nos reunimos atrás de la escuela, ahí están todos, bueno, casi. Nami, mi amiga de cabello anaranjado, quien es del mismo grado que Zoro y yo, pero va en otro salón, junto con Usopp, el tipo con la nariz más larga que haya visto. También esta Chopper, quien es el menor de todos, pues va en primero de secundaria. Franky también nos acompaña, él va en tercero, hace unas poses de lo más geniales. Falta Brook, quien también es nuestro amigo, pero que, a diferencia de nosotros, él es profesor de música, por lo que no nos podemos ver muy seguido. En fin, ahí estamos casi todos y empezamos a almorzar. Yo uso mi astucia para quitarles a mis amigos parte de su comida, excepto Zoro, que él me da con gusto.

-¡Joder Luffy! ¡Deja de robarme comida!-Me reprocha Usopp, pero no le hago caso y sigo comiendo.

-¡Cierto! ¡Deja de robarnos comida!-Nami me da un fuerte coscorrón, haciendo que mi cabeza parará al suelo. La levanto y sobo la parte afectada.

-¡Nami! ¡No me pegues!-Le reclamo, pues ella tiene una fuerza inexplicable cuando se enoja, incluso hace que yo tiemble de miedo y yo no me asusto con simples cosas, pero cuando se trata de Nami enojada, nadie se salva.

-¡No le pegues arpía!-Zoro se pone de mi lado, una de las razones por la cual lo amo, siempre me defiende demasiado, es muy lindo conmigo… Pero de nuevo, una nueva discusión comenzó, Zoro y Nami se están gritando entre sí. Mientras yo continúo comiendo, junto a Usopp y Chopper. Al final, Nami termino ganando con otro buen golpe por parte de ella. Zoro no tuvo otra opción que aceptarlo y sobarse el nuevo chichón que está en su cabeza. Continuamos comiendo, haciendo bromas, yo le quitaba comida a mis nakamas y me ganaba golpes por parte de Nami y Zoro me defendía, y otros más golpes se agregaban a su cabeza. Reía, realmente me gusta estar con mis amigos de esta forma… Son geniales… Pero… siento algo, y no sé qué es. Volteo rápidamente mi cabeza a la derecha… ¡Puedo ver una sombra! Pero desaparece de inmediato, eso sí ha sido extraño, me paro por instinto, ganándome miradas de curiosidad por parte de mis compañeros.

-Oe Luffy, ¿qué pasa?-Me pregunta Zoro, yo aún sigo viendo a esa dirección, mis ojos están bien atentos, pero después de unos segundos, nada ocurre, tal vez fue sólo mi imaginación…

-No… Nada.-Vuelvo a tomar asiento y actuar como si nada hubiera ocurrido, comiendo de la misma forma que hace unos momentos. Pero estoy seguro que mis amigos no pasan desapercibido mi extraño comportamiento, principalmente a Zoro, pero al rato, se les olvida. Terminamos de comer, platicamos con más tranquilidad, Usopp nos contaba geniales historias que Nami y los demás decían que eran mentiras salvo Chopper y yo lo hacíamos, brillitos salían de nuestros ojos. Después, Franky hizo esas geniales poses para luego meterse palillos en la nariz y bailar, seguido por Chopper, yo les veía divertido al igual que los demás. Hasta que la hora llego… El descanso se terminó, bah…

Nos hemos despedido y cada quien para su salón. Otra vez las aburridas clases… ¿Qué se le puede hacer? ¡Espera! La hora que me toca en estos momentos es historia, ¡genial! ¡El hermano de Zoro! Le digo Mihi de cariño, se me quedo por Shanks, que también, es amigo suyo. Tomo a Zoro de la mano y lo llevo con prisa a la clase para no perderme ni un momento de la clase de hoy. Terminó… Ojalá todas las horas del instituto fueran de historia y Deportes, que también me gusta. Pasan mis clases con habitual lentitud… ¡Aburrido! Pero, ¡al fin! Escucho el timbre de que se terminaron las clases, hago una de esas típicas poses que hace Franky. Me arrastro a Zoro conmigo, para que nos vayamos juntos. Pues nos vamos casi por el mismo camino. Paramos un momento a por un helado por petición mía, Zoro acepta gustoso, el mío es de 10 bolas, mientras que el suyo es de 2. Siempre me han caracterizado por comer mucho, no como mucho, sólo que siempre me sirven porciones muy pequeñas de comida.

Sigo con mi tranquila caminata junto a Zoro, que me mira divertido al estar a punto de caerme con una piedra. Camino de espaldas, el de dice que tenga cuidado, pero le digo que estaré bien. Me aburro de caminar de esa manera, así que me volteó para caminar normal como Zoro, pero al hacerlo, al frente, veo una oscura sombra de nuevo, viéndome específicamente a mí, como si siempre estuviera atento a mí, me he quedado estático al ver una sádica sonrisa salir de esa sombra. Zoro se ha dado cuenta que no sigo avanzando, por lo que se detiene y se voltea a verme.

-¿Pasa algo, Luffy?-Me pregunta un tanto preocupado y sorprendiéndome por qué no pueda verlo, ya que él siempre ha sido bueno para darse cuenta por ese tipo de cosas. Volteo hacía a él con un semblante algo asustado.

-Zoro, ¿no lo ves?-Le pregunto, esperando con ansiedad la respuesta y con la esperanza a que si se diera cuenta.

-¿Ver qué?-Se extraña por mi pregunta mientras frunce el ceño.

-Eso.-Señalo mi dedo a donde debería estar esa negra sombra y volteo mi mirada a verlo de nuevo, pero ya no está… No puede ser. Zoro voltea a ver por dónde estoy señalando pero no logra ver nada, de nuevo se voltea a verme.

-No veo nada, Luffy.-Puso una cara de incredulidad.-¿Estás bien?-Me pregunta, se acerca un poco más a mí y pone su mano en mi frente, al parecer para verificar que no tenga calentura o esté enfermo.-Estás normal, que extraño…

-Estoy bien Zoro…-Me deprimo un poco, estaba seguro, muy seguro que esa sombra estaba ahí, ¿y si Zoro tiene razón? ¿Y si estoy enfermo o algo por el estilo? Aunque yo que recuerde, nunca me he enfermado, es extraño.-Me voy, Zoro.-Empiezo a caminar a mi casa, sin voltear a ver a Zoro.

-¿Seguro que estás bien?-Su pregunta hace que me detenga un momento, giro mi cabeza y le dedico una de mis típicas sonrisas.

-¡Por supuesto!-Creo que no le he convencido del todo, aun así sigo con mi camino de ir a casa, dudando de mí mismo y tratando de saber que era esa extraña sombra. Cuando llegue, estaba oscuro, ya me había acostumbrado, tengo algo de hambre, así que voy a la cocina por algo de comida. Enciendo la luz y me dirijo a paso lento al refrigerador, ahí me doy cuenta que había una nota, la tomo y comienzo a leer.

“Llegare tarde, no te quedes despierto a esperarme. Hay comida suficiente para ti, solo caliéntala, no explotes el microondas.

A.T. Sabo”.

-Llegara tarde…-Suspiro resignado, la mayoría de veces, me quedo en la sala a esperarlo, a veces me gana el sueño de que llega muy tarde, otras veces aguanto soportar. Pero esta vez llegara más tarde de lo normal. Así que, resignado, abro el refrigerador, como había puesto en la nota, había suficiente comida para mí. La caliento por partes en el microondas y me llevo toda esa comida a mi cuarto, mientras veo tele o juego con la consola. Y como he dicho, lo hago. Estoy jugando un juego de peleas, en el cual estoy muy entretenido, no sé cuánto tiempo he estado así, ya me he comido todo lo que he llevado a mi cuarto y los platos están amontonados a lado mío mientras sigo jugando, sentado en el frío piso. Pero, de pronto, escucho un raro ruido provenir de abajo. Me he puesto en alerta. Tal vez sea un ladrón, vale, me he preparado para eso, Sabo me ha entrenado. Agarro un bate que dejo debajo de mi cama por si algo así llegaba a pasar. Me asomo desde mi cuarto, sólo veo el oscuro pasillo sin rastros de que alguien estuviese ahí, salgo lo más silencioso posible y empiezo a bajar las escaleras con paso delicado.

Asomo un poco la cabeza y nada, no hay nada extraño en la sala, aun se escuchan extraños ruidos, pero los escucho provenientes de la cocina, debe estar ahí. Tomo el bate con más fuerzas entre mis manos y me dirijo lo más discreto posible a la cocina. Es ahí, donde veo algo negro, más negro a pesar de que esta oscuro, no se ha dado cuenta de mi presencia, pero como es típico de mi hermano y yo, somos algo (muy…) desordenados, por lo que una cuchara está al lado de mi pie y consigo pisarla, haciendo que ese ruido metálico llamara la atención de ese individuo. Puedo ver unos ojos plateados hacía mí, retrocedí ante eso, pensaba correr, pero fui demasiado lento y ese ladrón se ha aventado hacia mí, trato de quitármelo de encima, pero es fuerte, muy fuerte. Acorrala ambas manos mías, las pones arriba de mi cabeza y las agarra con fuerza con su mano derecha. La mano izquierda toma mi rostro con brusquedad y me obliga a mirarle, esta oscuro, por lo que no le puedo ver bien, pero si puedo ver un par de ojos grises observándome detenidamente como hace un principio.

-¿Cómo te llamas?-Me pregunto el ladrón, eso me desconcertó y me asusto al mismo tiempo. Como respuesta, he soltado un fuerte grito que probablemente los vecinos escuchen y se alarmen, pero el extraño me tapa rápidamente la boca para que no siguiera.-¡Cállate!-Me grito, y me levantó para llevarme al piso de arriba, puedo escuchar morbos de la gente de afuera, pero desaparecen. Él extraño, aun si poder ver su rostro, me lleva a donde hay luz, que es mi cuarto, me empujo a él sin delicadeza, así que caí al suelo. Me incorpore para quedar sentado y sobarme la cabeza, ya que me di un buen golpe en ella. El extraño atrajo mi atención, así que alzo la vista y puedo ver ahora como es. Es más alto que yo, es moreno, con unas ojeras muy notorias bajo sus ojos. Tiene una sudadera amarilla con mangas negras y capucha del mismo color, unos pantalones vaqueros azules con manchas negras, unos zapatos del mismo color. También traía un gorro blanco con manchas negras. Me fijo en su piel, tiene unos extraños tatuajes, puedo ver lo de sus nudillos que forman la palabra DEATH y lo principal, lo que pude diferenciarlo al principio, sus plateados ojos…

Ahora que lo pienso, lo he visto, no me puedo equivocar… Es la misma persona de mi sueño…

Se acerca con lentitud a mí y eso hace que retroceda, pero no puedo más, ya que topo con mi cama que no me deja retroceder. Él se pone a mí misma estatura, sus ojos son muy penetrantes, por lo que le evito la mirada.

-Puedes verme… Sorprendente.-Dice él, toma mi rostro con “delicadeza” y hace que lo girara a ver, de nuevo esos penetrantes ojos, una sonrisa sarcástica de une a ellos.-Hola. Me llamo, Trafalgar Law…-El extraño se presentó ante mí, haciendo más gruesa su escalofriante sonrisa haciendo que yo temiera más…

-Es un placer-

 

Continuará...

Notas finales:

¿Les gusto? Eso espero, y que apoyen este Fic como los demás ^-^.

Comentarios, buenos o malos, son bien recibidos para mejorar :).

Hasta la próxima o/.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).