El revuelo que causó este acontecimiento duró un par de días antes de que la convocatoria del cuerpo académico de la universidad mandara un correo explicando las medidas cautelares de acuerdo a la detención de NichkHun por abuso y las evaluaciones que faltaban (un poco más de la mitad y del grupo de amigos, LuHan), lo que significaba que el proceso cambiará drásticamente, pero eso no detenía el nerviosismo de LuHan, mientras todos estaban en su casa luego de días sin asistir a la universidad, debido a que mandarían un aviso por ese mismo medio para seguir con las clases.
SeHun se encontraba abrazando dulcemente a LuHan por su cintura mientras este estaba delante de él, apoyando su cabeza en uno de sus anchos y varoniles hombros descansando, tomando sus manos y entrelazándolos con los propios. Casi la mayoría estaba de esa forma, ya que todos estaban con su respectiva pareja.
.- ¿Sigues nervioso por lo que pasó? – Pregunta SeHun. LuHan negó con la cabeza.
.- Estoy bien, Hun. Aunque e siento mucho más tranquilo que estés bien, aunque tengas muletas y no puedas pararte por ti mismo.
.- ¡Eso me hizo sentir un debilucho como un escuálido fideo! pero, cuando me saquen el yeso te probaré que puedo protegerte y hacer un par de cosas más sin ayuda de nadie.- Dicho esto lo abrazó aún más fuerte, LuHan solo rió.
.- ¡Oye, cuidado con lo que dices! No queremos saberlo- Grita BaekHyun de repente mientras llegaba con un recipiente con papitas dentro- Bueno, no nos interesaría tampoco.
.- No te debería interesar, Baek. Estás conmigo. ¡Ni siquiera lo mires! Es como una zarigüeya con muletas- Chanyeol le arrojó un par de papitas, SeHun solo reía mientras atrapaba unas cuantas y se las comía.
En todo el camino de tener a LuHan a su lado y tener amigos tan geniales como ellos, ¿había estado tan feliz? Al parecer no, porque no había nada de qué preocuparse ahora a pesar de que estaba lesionado por una situación que nunca lo habían visto venir, estaba feliz con el resultado final de toda esa travesía. La sonrisa de LuHan brillaba aún más, los abrazos eran más cálidos y los besos más húmedos y apasionados. Significaba, que ahora todo estaría bien.
LuHan, quien desde un principio rechazaba cada vez la idea de creer en sí mismo, quien pensaba que nunca podría ser como JongIn para conseguir una vida más sociable (lo cual no fue para nada necesario) se dio cuenta de que los amigos que tenía, quienes estaban reunidos en su hogar, eran quienes lo querían por cómo era en realidad y que confiaban su vida para su amistad. Lo protegieron de un casi abuso, su mejor amigo estaba más que feliz al encontrar el amor, la persona que estaba amando más que nunca estaba a la vuelta de la esquina y no fue difícil darse cuenta de que, a fin de cuentas, terminaría ofreciendo todo de él para algo de lo que nunca pensó arriesgarse: amar y ser amado por igual.
La misma suerte pasó KyungSoo quien era tachado como tímido y nervioso con sí mismo, logró tener una oportunidad y aprovecharla como se debía al tener a su lado a alguien que le gustaba desde hace ya muchísimo tiempo, aunque la historia no se contara. Pero, al pequeño quien estaba acariciando los cabellos de JongIn en sus piernas, todavía le estaba molestando algo. O alguien.
Ryewook.
Aunque JongIn había prometido “darle una lección” al chico, KyungSoo aún no había podido hablar con él desde aquel incidente con romper el compromiso de trabajar juntos para la evaluación por un tema de sentimientos (y de sentirse rechazado). Habían sido amigos desde hace ya mucho tiempo y solo costó unos segundos y el sentimiento de un amor no correspondido para que se terminara en un abrir y cerrar de ojos. ¿En verdad no podía hacer que volviera a la normalidad?
Tan distraído estaba pensando en eso que JongIn se dio cuenta de eso, y detuvo sus caricias en su cabello para tomar la mano con la que hacía esa acción y lo miró preocupado.
-. ¿Qué te preocupa, Soo? – Dijo con una voz suave y algo dormida, ya que las caricias de Kyungsoo eran muy relajantes para él. Kyungsoo dudó en hablar al principio, pero ya no podía aguantarlo más. Suspiró pesadamente y se acercó a besar sus labios por unos segundos- Oye… pocas veces me besas primero, esto es extraño… mh, ven.- Se levantó primero, tomó su mano y lo llevó al patio trasero de la casa, la cual era bastante grande. Se sentaron en medio del césped en silencio. JongIn tomó la otra mano de Soo y lo miró.- Ahora estamos solos… puedes decirme lo que quieras, Soo.
.- Me incomoda el hecho de que… Ryewook todavía no me ha hablado, y ya pasó demasiado tiempo desde que “discutimos” con lo que ya sabes… – demostró entre comillas con sus dedos - ¿qué pasa si ya no quiere ser mi amigo, JongIn?
.- Oye, tranquilo. Creo que es normal que se aleje, puesto que… no le respondiste de vuelta, ¿verdad?
KyungSoo solo asintió. JongIn amaba que se comportara como un niño indefenso, aunque tenga demasiada fuerza que hace que Chanyeol llore por su vida. Esas dos caras lo tenían demasiado atrapado. Se prometió a sí mismo que ayudaría en lo que sea al chico que quería, estaba haciendo su mejor esfuerzo en no querer matar a Ryewook porque preocupa de esta manera a KyungSoo.
.- Sentirse rechazado obviamente despierta nuestra ira al no conseguir algo que queremos con todo nuestro corazón. Pero luego de un tiempo, pensamos de nuevo fríamente y seguimos con nuestras vidas, así que creo que debe estar pensando en cómo resolver las cosas, porque simplemente uno no puede vivir con ese rencor con alguien que significó tanto. Así que preferiría que… hables con él… para cerrar el asunto y encontrar la felicidad por ambos lados – Tomó la barbilla de Kyungsoo para hacer que lo mirara, le regaló una hermosa sonrisa para tranquilizarlo.
Kyungsoo no podía creerlo. De todo el tiempo que había conocido a JongIn jamás había escuchado algo tan profundo de sus propios labios. Al parecer, el chico que le gustaba era realmente una caja de sorpresas. Se sintió más tranquilo ya que podría ser una buena solución, el conversar con Ryewook y al fin dejar de sentir la oscura conciencia por ese tema. JongIn lo besó nuevamente al ver una sonrisa del más bajo.
.- Gracias… yo, ah… honestamente, jamás había pensado que dirías algo tan inspirador.- Susurró Kyungsoo aún con los ojos cerrados, luego del beso. JongIn rió algo avergonzado.
.- Oye, también puedo ser un buen consejero, por si no lo sabías. Yo fui el que le dijo a Chanyeol que hiciera un movimiento con Baekhyun y míralos ahora. ¡En serio lo soy, no te rías! – KyungSoo rió fuertemente por la confesión de JongIn. Sabía que Chanyeol no lo había hecho solo, por más que lo haya alardeado con todos sus amigos. JongIn se sintió contagiado por esas risas y siguieron así por unos minutos, ya que después de eso se colocaron de la misma forma cuando estaban en el sofá, pero en este caso, viendo el cielo nocturno despejado y conversando sobre cosas triviales.
Estaban comenzando a pararse para entrar a la casa cuando JongIn tomó nuevamente las manos de KyungSoo y se acercó hasta tocar sus narices sin previo aviso. Soo se sintió demasiado nervioso y titubeó antes de decir algo coherente.
.- ¿J-JongIn…? ¿Q-Qué…? ¿Qué pasa…?
.- Soo, creo que hay algo que no te he preguntado, algo muy importante. Se me ocurrió justo ahora, ¡debes decirme que sí!
.- ¿Qué sería…?
.- Soo… tú… ¿quieres ser mi novio?
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Al día siguiente:
- Presentación inédita de LuHan.
- Enfrentamiento Ryewook y Kyungsoo.
.- ES… EN… ¡¿SERIO?! – LuHan exclamó en frente de su computador en la mesa junto a su desayuno. Despertó al pobre de Golden durmiendo aún en el sofá y asustó a JongIn que se preparaba unos panqueques.
.- ¿Te pasa algo? – Dijo JongIn con el plato y su té en ambas manos, sentándose a su lado, mirando la pantalla. Ya que su primo no le respondió, leyó en voz alta.- “Estimado Lu Han: junto con saludarlo hemos llegado a la conclusión de que el día de hoy usted dará a cabo su evaluación a las 11:30 a.m. en el auditorio del campus. Estarán solamente tres profesores debido al incidente pasado. Le deseamos lo mejor de las suertes. Saludos…” – Miró el reloj de la pared para ver la hora.
Solo faltaban 30 minutos para su evaluación. JongIn le dio un golpe suave en la cabeza para que dejara de estar paralizado.
.- ¡DESPIERTA LUHAN! TIENES EXACTAMENTE 5 MINUTOS PARA TRAGAR TU DESAYUNO E IR POR TUS PAPELES, ¿ESCUCHASTE?
.- ¡SÍ, SEÑOR! – Hizo un saludo de soldado y comenzó a tragar su desayuno. Incluido el de JongIn.
.- ¡OYE, NO TE COMAS ESO, LUHAN, SON MIS…! Ugh, no importa. ¿Llamarás a SeHun para que te venga a buscar?
.- No lo creo, es demasiado temprano, dijo que iba a pasar a un lugar a estas horas, tomaré un taxi.- Dijo levantándose para irse camino a buscar su carpeta y bajar a la velocidad de la luz, procurando no caer como JongIn aquella vez que saldría en la noche. Agarró su mochila, sus llaves, teléfono y quizás, su dignidad. Fue a despedir a Golden con un besito, se levantó y sintió unos brazos alrededor de su cintura.
.- Yo, ah… quería desearte suerte.- Susurró JongIn.- Olvida por un momento tus responsabilidades y todo lo que pasamos todo este tiempo… olvida todas esas lágrimas y tristezas que te he hecho experimentar por SeHun y lo que has tenido que pensar para estar mejor… ve y haz lo que mejor sabes hacer, lo que es tu sueño… sé que te irá muy bien…
LuHan se dio la vuelta y le dio un fuerte abrazo, riendo, estando muy feliz de que al fin había vuelto a la normalidad.
.- Eres tan cursi cuando te lo propones, JongIn. Pensé que solo se daría con KyungSoo.
.- ¡Eres un tonto! ¿por qué nadie cree que puedo ser muy inspirador? Aish, será mejor que te vayas, se te hará tarde.
.- Sí, mamá.- LuHan rió camino a la puerta.- ¡Deséame suerte!
Y así, LuHan salió como un halcón en busca de un taxi a la esquina de su vecindario, deseándole a los dioses de la música que pasara con buena nota. No una excelente, pero lo suficiente para decir que se esforzó al máximo y se la merecía. Esperaba que SeHun también le deseara mucha suerte, pero sabe en el fondo que lo estará apoyando sin importar donde esté.
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Kyungsoo estaba en una banca instalada en medio de una plaza, con el teléfono en mano mientras revisaba la hora y el chat abierto con Ryewook, quien le mandó un mensaje preguntando si se iban a encontrar en aquella plaza donde iban varias veces comiendo un helado, o simplemente pasando la tarde. Como antes. Cuando eran amigos.
No era como si hubiesen perdido la amistad, pero Kyungsoo estaba tan aterrado que su mente aún hace juegos sucios con algo que ni siquiera ha pasado aún. Mejor se ocuparía de las palabras que utilizaría para comenzar a disculparse y finalmente…
.- KyungSoo.- La voz seca de Ryewook le aterró más de lo que estaba. Se paró de la banca guardando su celular y mirándolo con una pequeña sonrisa, tratando de no parecer asustado o nervioso por la situación.
.- H-Hola, hyung. ¿Cómo estás? – rascó su nuca, Ryewook solo asintió sonriendo un poco, pero aún mantenía esa distancia que lo harían dos completos extraños.
.- Mh. ¿Para qué me mandaste ese mensaje? ¿vas a decirme algo?
.- Ah… sí, claro… el mensaje, sí… yo…-dio un profundo suspiro mirando la tierra que pisaba, y con un rostro sereno miró directamente los ojos de su hyung y por fin hablo sin tartamudear. Estaba hablando con su corazón- quería hablar contigo luego de lo que pasó en aquella sala. Sé que no te di una respuesta concreta porque en serio me agarró por sorpresa la manera en que te comportaste, de ahí en más, nuestra comunicación se cortó. ¿Lo recuerdas?
.- Sí, lo recuerdo. Admito que estuve fuera de lugar, pero debías comprenderme, Kyungsoo.
.- Ahora lo comprendo. Y, quiero pedirte perdón por haberte hecho esperar por una respuesta, fue algo malo de mi parte, además de no pensar en tu lugar, me siento terriblemente mal por eso. Con respecto a lo de JongIn…
.- ¿Están saliendo, verdad? – No le dejó terminar sus palabras con esa voz que se oía con más tranquilidad, pero con un poco de dolor. Como si quisiera que le dijera que no, pero sabía que en el fondo…
.- Nosotros… sí. Estamos saliendo. JongIn… es mi novio ahora. Es por eso que… no… no puedo responder tus sentimientos, hyung. Eres una persona muy especial para mí y no quiero perderte, pero si es demasiado el daño puedes hacer lo que creas mejor, quizás el alejarte de mí sea lo más sensato, ya no quiero hacerte sentir triste, quiero que seas feliz y no causarte más problemas. – Dijo sin rechistar con las manos a punto de hacerse agua por la cantidad de sudor que estaba soltando por los nervios. Ryewook se quedó unos minutos en silencio mirando el piso.
Sabía que estaba arriesgándolo todo, el silencio era una tortura para Kyungsoo. Había dicho lo que sentía de verdad, ¿era tan malo acaso? Bueno, se la pasaba golpeando a Chanyeol y a Baekhyun, pero esto era mil veces donde estaba siendo un villano de lo peor. El romper el corazón de uno de sus grandes amigos, su hyung favorito.
Pero, después de todo, Kyungsoo quiere ser feliz junto a JongIn, sin que nadie lo molestara, por lo muy egoísta que sea, se lo merecía.
Luego de una eternidad en silencio, Ryewook comenzó a mostrar una pequeña sonrisa y apretó sus labios. Habló sin dejar de mirar el piso.
.- Ahora me siento mucho más tranquilo que de costumbre. Seguramente es porque al fin tuviste las agallas de decir realmente lo que sientes y que piensas en mí, cosa que nunca he visto de parte tuya. ¿Quién eres y qué le hiciste a Do Kyungsoo? – Dijo. KyungSoo rió nervioso, pero con el corazón más aliviado.
.- ¿Me perdonas, hyung?
.- Claro, Kyungsoo. Pero, si ese JongIn te saca una lágrima o una cara triste, se las verá conmigo, ¿entendido? – Dijo Ryewook con su dedo índice arriba, como si lo estuviese regañando.-
.- Claro que sí.- Ryewook estrechó su brazo y KyungSoo hizo lo mismo, dándose un pequeño abrazo. Ahora se podría decir, que estaba completamente feliz.
Salvo que…
.- ¡Bien! Se dieron las paces, ahora sepárense.- Gritó JongIn saliendo detrás del tronco de un árbol. KyungSoo negó con la cabeza y Ryewook lo miró extraño.
.- ¿De dónde saliste, JongIn?
.- ¿Crees que voy a dejarte solo con mi novio? No, claro que no.
.- Está bien… mira, si le haces algo a KyungSoo, yo mismo…
.- Sí, sí, me darás una paliza, pero… no si tú te sobrepasas, porque seré yo el que lamentarás haberlo hecho. ¿Estamos claro, Ryewook?
.- …
.- Oigan, ya paren…
.- ¿Estás diciendo que voy a aprovecharme de KyungSoo solo porque hicimos las pases? Pero qué clase de confianza tienes…
.- No tengo confianza contigo, por más que seas mayor que yo. Así que, si te sobrepasas…
.- Y si tú lo haces sufrir…
.- Voy a devolverte el sufrimiento- Dijeron al unísono. KyungSoo volvió a su rostro de malignidad descendiente de Satán andante y les pegó a ambos en la cabeza. También, era tiempo de que Kyungsoo dejara las cosas en claro, agradeciendo que JongIn vino-
.- ¡SE CALLAN LOS DOS Y SE DEJAN DE AMENAZAR EN FRENTE DE MÍ! Ahora. Sentados. Los dos.
Tal como la vez pasada con LuHan y SeHun, los dos hicieron caso a los milisegundos después de dar la orden. Porque sí, por más inseguro que sea Kyungsoo, tenía voz de mando. Lo que él dice, se hace. Uno al lado del otro, como si fuesen dos alumnos de primaria después de una pelea.
.- Quiero dejar esto en claro… no quiero perder a ambos por una estúpida pelea. No soy un premio, ni tampoco soy su peluche que pueden decir que es su propiedad. Soy TU novio.- Le apuntó a JongIn.- y TU amigo.- Apuntó a Ryewook.- Sí, por más que duela. Los quiero a ambos, pero si se siguen comportando como dos niños mimados entonces habrán problemas y no seré yo quien les hable, serán mis manos. Ustedes ya saben cómo conversan, ¿verdad?
.- S-Sí, KyungSoo.- dijeron al unísono. En verdad, era vergonzoso para ambos.
.- Entonces…- suspiró pesadamente y los miró como el KyungSoo “normal” que era.- en serio, no quiero que peleen por cosas triviales, así que…
KyungSoo perdió totalmente el hilo de lo que iba a decir al momento que sintió un tono de llamada del celular de Ryewook. El mencionado se mostró sorprendido y contestó inmediatamente.
.- ¿K-Kyuhyun hyung…? ¡Sí, sí! ¡V-Voy enseguida! ¡L-Lo siento! ¡O-Oye…! ¿Me… cortó…? – Susurró lentamente al ver su pantalla del celular que se volvió negro. JongIn y Kyungsoo se miraron al no comprender sus balbuceos, pero el más bajo recordó algo.
.- ¿Kyuhyun? ¡Ah! ¿es el hyung que te iba a buscar y a dejar a la sala de clases? Había escuchado una vez que le gustas…
.- Pues, sí… es una larga historia de hecho, pero, me tengo que ir.- Tomó la camisa de JongIn bruscamente.- Estás advertido, JongIn.- Lo soltó y se levantó a abrazar a KyungSoo.- Si te molesta algo de él o las cosas no van muy bien, puedes venir conmigo cuando quieras.
.- ¡TE ESCUCHÉ, RYEWOOK! – Gritó JongIn. KyungSoo aceptó torpemente el abrazo. Se soltó de él y Ryewook se alejaba metro tras metro hasta perderse en una esquina donde se encontraba la estación de metro.-
JongIn y KyungSoo se quedaron mirando al mismo tiempo. Se sonrieron. Rieron. Y se abrazaron. Era una de las situaciones más extrañas que Kyungsoo había experimentado en su vida. Pero, se alegraba el hecho de que pudo soportar la situación con ayuda de JongIn, así que no podía estar más feliz.
En medio del abrazo, KyungSoo le susurró un suave “te amo” al oído de JongIn antes de separarse y caminar hacia atrás unos cuantos pasos con una brillante sonrisa.
Kyungsoo no tenía ninguna otra palabra que describiría lo que sentía por JongIn. Lo amaba, solo eso importaba. Ah, y que podía ser nuevamente feliz, no como en un principio.
.- ¡JongIn! Me dieron ganas de comer un helado. Abrieron una heladería por aquí cerca, ¿vamos?
.- S-Sí… vamos…
JongIn sin duda se había ganado la lotería en cuanto a conocer más a Kyungsoo y a su particular personalidad. No tenía por qué decirlo, pero el más bajo sabía que podía contar con él… y que lo amaba con todo su corazón.
Al fin, podían vivir su vida sin molestias ni inseguridades. Al fin, podían ser un KaiSoo como se debía, comenzando con una cita comiendo helados, una nueva historia podía aparecer nuevamente.