Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

A song for you (Layhan/Baekyeol) por adnaquiel

[Reviews - 156]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

importante leer notas finales 

la última canción de Lay=https://www.youtube.com/watch?v=ezyG_ZnhFX0

 

 

-Lay…mi hermana… se va a morir

Con esas palabras en mente fui llevado hacia el hospital donde se encontraba la hermana de Suho, en cuanto la noticia fue esparcida en la fiesta todo terminó y el padre de Baek nos hizo el enorme favor de facilitarnos el transporte. En el camino Suho lloraba desconsolado dejándome ver un lado bastante devastador de él, alguna vez cuando llegamos a mantener una buena relación, él mencionó que Sun era prácticamente todo lo que él tenía en esta vida.

Una vez en el piso donde se encontraban algunas otras personas esperando, Suho corrió hacia una señora que al parecer tenía la misma edad que mi madre. La señora lo abrazó rompiendo en un llanto que sólo una madre preocupada podría emitir, esa escena nos quebró el alma a quienes estábamos apenas saliendo del ascensor y nos dejó pasmados al otro lado del pasillo. Lay por su parte dejó de sostener mi mano para correr hacia donde se encontraban esas personas saludando a algunas de ellas y colocó sus manos en una mujer bastante parecida a él quien lo envolvió en un gran abrazo, la mujer que lloraba desconsoladamente, al notar la presencia del pianista fue directo a él con un brazo para acercarlo a Suho y de algún modo repartir su dolor entre tres personas.

-debe estar pasando un mal rato- Baek me tomó del hombro llevándome a unos asientos que se encontraban cercanos- ¿vamos por algo de tomar?

-gracias- me aclaré la garganta esperando disolver el nudo que se había formado- voy a esperar a mamá

-esperamos aquí contigo- me dijo Chanyeol ofreciéndome un cálido abrazo- tranquilo, no pasa nada.

Saliendo del ascensor se encontraba mi madre angustiada, además de su enorme abrigo llevaba uno extra y se dirigía hacia donde estaban las demás personas pero al reparar en mi presencia se desvió excusándonos un momento con Baek y Chan quienes ya iban en busca de una cafetería. Me llevó entrelazando su brazo con el mío y caminando lentamente hacia la señora que se encontraba hecha un mar de lágrimas, cuando la señora vio a mi madre le regaló una cálida sonrisa abrazándola efusivamente por lo que Jian me soltó para corresponder, yo me sentía de algún modo bastante incómodo ya que mientras mi madre le ofrecía palabras reconfortantes, Suho no soltaba la cintura de Lay llorando mientras el más alto sólo atinaba a acariciar su cabello.

-¿qué pasó?

-al parecer un idiota no respetó las señales y le chocó el carro. Tiene varias costillas fracturadas y perdió mucha sangre

-¿qué tipo de sangre es?- pregunté sin dudar, quería hacer algo por la chica que se encontraba mal en esa habitación, la señora me miró extrañada al igual que Suho haciéndome sentir el doble de incómodo- tal vez coincidamos…o si no podemos poner un aviso en la academia

-Lu amor, ella es Yoon mi mejor amiga desde la academia… Es la madre de Suho y Sun. Yoon, él es mi hijo Luhan

La señora se soltó del abrazo de Jian para limpiar sus lágrimas con un pañuelo tratando de tranquilizarse y hacer menos pesado el ambiente

-así que tú eres el que cuida de mi niño ¿se porta bien?- volteamos a verlo, en un momento tan malo como este no debería decirle a esa señora que su hijo es la cosa más odiosa del mundo y que todos mis golpes son por él ¿o sí? – claro que se porta bien. Con su látigo a lado es obvio que no va a hacer nada

No comprendí de qué hablaban hasta que todas las señoras presentes se giraron hacia un Lay que estaba más que sonrojado pero aún seguía abrazando a Suho que ya se veía más calmado al igual que su madre. La mujer que tenía un increíble parecido con Lay lanzó una risa bastante similar a la del pianista y le revolvió el cabello hablando con esa autoridad que solo las madres tienen

-te han mentido Yoon, últimamente he recibido más llamadas por parte de la academia. Al parecer este pequeño rufián volvió a hacerse un travieso como antes, Luhan ¿no te dan dolores de cabeza estos dos? Desde pequeños eran un par de traviesos- miró al par de mencionados que elevaban una leve sonrisa llena de respeto- oigan ustedes dos, cuando sean exitosos quiero que mencionen a la directora y a este lindo joven en cada recital

La dulce voz de esa señora calmó bastante el ambiente logrando sacar varias sonrisas a los presentes, incluyendo a mi madre que me empujó levemente del hombro para que dijera algún comentario bueno ya que, según sus enseñanzas, como futuro director tenía que decir sutilmente lo buenos que eran todos y cada uno de nuestros alumnos a sus padres. Aunque me costara un trabajo impresionante tragarme el orgullo y expulsarlo en forma de halagos esbocé una sonrisa muy bien fingida y comencé los elegantes cumplidos

-usted debe ser la madre de nuestro mejor pianista. No se preocupe, todo genio tiene sus desplantes de vez en cuando. En cuanto a Suho, como parte de mi familia y primo mayor merece todo mi respeto y a la vez el doble de cuidados- me dolía bastante meter esos dos nombres en una sola oración pero el brillo en los ojos de mi tía indicaba que había hecho bien, así mismo la madre de Lay me sonrió orgullosa de lo que su hijo estaba logrando… todo eso me estaba haciendo sentir que sobraba en esa escena, que yo sólo era el director y encargado de guiar los futuros de estas familias para que el orgullo plasmado en sus ojos siguiera presente, sintiendo mi estómago revolverse me giré hacia mi madre que ya entregaba el abrigo a mi tía- madre, iré a hablar con Baek. Mucho gusto a todas, voy a esperar en la otra sala

-gracias por cuidar bien de mi hijo Lu y sé que Jian le está dando todos los cuidados pero ¿primo?- la madre de Suho miró a mi madre con bastante alegría, no comprendiendo la situación reparé en el rostro de mi madre que sonreía bastante nerviosa- ¡vaya Jian cumpliste tu promesa de hacerlo sentir como en casa!

En verdad no comprendí para nada la expresión de esa señora, obviamente él era mi primo y ella mi tía, digo… ya sabía por mi mamá que Suho es hijo de un primo suyo, eso lo convertía en mi primo ¿o no? Comencé a creer por unos segundos que realmente no tenía parentesco con Suho pero me di una bofetada mental atribuyendo mi paranoia al poco descanso que había tenido últimamente. Me giré hacia el otro lado del pasillo mirando por algunos segundos con la estúpida y egoísta esperanza de que Lay reparara en el daño que me estaba haciendo ver a esos dos tan unidos creando una especie de escena digna de película pero él sólo tenía la mirada perdida en algún lugar de sus pensamientos. Con un nudo en la garganta incrementando caminé por el pasillo hasta llegar hacia la otra sala de espera dejándome caer en una de las sillas, suspiré cansado mirando la hora, noté que faltaban muchas horas para que terminara la noche y tomé una de las revistas que se encontraban esperando a ser leídas, cuando llegué por la mitad me fueron extendidos un paquete de galletas y un vaso desechable con tapa de donde salía humo acompañado de un agradable olor a café. Levanté la vista encontrándome con Baek que me sonreía tranquilamente invitándome a aceptar la bebida

-no te vi comer muy bien en la fiesta- una vez que tomé las cosas él se sentó a mi lado para tomar tranquilamente de un vaso mientras se acurrucaba en un enorme abrigo- ¿qué lees?

-¿te acuerdas cuando Tao empezó a llorar por los pechos de Angelina Jolie?- le extendí la revista con la noticia en grandes letras rojas y la foto de dicha artista, él dejaba su café para abrir las galletas mientas leía- se los tuvieron que quitar

-¿no sabías? Ya tiene mucho tiempo

-escuché algo pero no supe bien ¿y tu novio?

-está llevando café, insistió en decirle fighting a las señoras mediante café y galletitas

Dirigí la vista hacia el otro lado del pasillo donde en efecto, Chanyeol se encontraba repartiendo vasos a  todas las señoras. La madre de Lay lo abrazaba con orgullo y le decía algunas palabras que lo hicieron lanzar una poco discreta sonrisa, mi mirada se dirigió inconsciente hacia unos asientos donde Suho sostenía su vaso con ambas manos, su mirada estaba bastante perdida y Lay le daba reconfortantes caricias en la espalda mientras le decía algunas cosas que no logré entender. Evité seguir mirando y mi mirada se encontró con la de Chanyeol que ya se dirigía hacia nosotros y me regalaba una sonrisa llena de comprensión

-tienes un buen novio Baek

-¡oye! Ni creas que voy a dejarte pensar cosas estúpidas Luhan- Chanyeol se colocó a lado de su novio observándome con fingida seriedad al comprender mis pensamientos- Lay está igual de preocupado que Suho y Jian está cerca

-¿qué tiene si Jian está cerca?- Baek preguntó girándose hacia su novio quien repentinamente se tornó a un tono bastante pálido abriendo el doble los ojos- ya no son nada, no tienen nada que ocultar

-bueno pero ya sabes que a Jian le gusta tener a sus alumnos ahí sentados a su lado. O sea… yo debería estar ahí pero mejor no porque aquí es menos frío ¿quieren más galletas? Me gustaron las de chocolate ¿quieren más? Yo voy por más

Se colocó una galleta en la boca y salió prácticamente corriendo de la pequeña sala, ni siquiera esperó a que su novio se levantara. Bueno, igual su novio no podía levantarse porque estaba igual de confundido con las palabras de su gigante pero solamente se encogió de hombros tomando otra revista para hojearla distraídamente, imité dicho gesto encontrándome con viejas noticias y compartiéndolas con mi amigo. Pasó aproximadamente media hora hasta que Jian apareció frente a mí terminando una de sus conversaciones por celular

-entonces lo veo en unos minutos- colgó el celular sujetando sus cienes en señal de stress- Lu amor, no pude cancelar la reunión con el director de Londres así que ya voy tarde. La hermana de Suho ya pasó lo más grave, ahora sólo queda estabilizarla, me quedo tranquila dejando a Yoon contigo ¿está bien?

-si madre. Ve con cuidado, si ocurre algún cambio yo te informo

-gracias. Hasta luego Baek, felicidades por tu…no boda…creo

-gracias señora. Vaya con cuidado

Me iba a ofrecer para acompañarla al auto pero me sentía bastante cansado como para mover un solo milímetro, Chanyeol ya había regresado de la cafetería para abrazar al pollito que parecía Baek debido al frío, no es como si hiciera mucho frío pero mi amigo simplemente quería abrazarse al pelirrojo, en verdad me llenaba de una inmensa felicidad volver a verlos de ese modo. Esbocé una sonrisa escuchando sus conversaciones triviales acerca de comida y películas, estaba tan metido en escuchar que no sentí a alguien más entrando a la sala sino hasta que sentí una mano apoyándose en mi hombro, me giré encontrando la mirada seria de Lay. El silencio se apoderó de la sala y fue interrumpido hasta que Chanyeol y Baek comenzaron a “tener más hambre”

-Lay estás muy inútil últimamente ¿puedes ir a traerme un frapuccino a la cafetería?- Baek se giró hacia su novio con la misma sonrisa triunfante que llevaba el pelirrojo- ¿tú qué quieres amor?

-pídeme una bebida, la más elaborada que tengan y de paso invita la otra ronda de café para las señoras. También tráenos donas a todos

-¿ustedes están locos?-fingió molestia pero una sonrisa lo delató- yo no puedo cargar todo eso. Luhan, ven conmigo

-¿quién? ¿Yo?

-no, tu gemelo. Ya ven

Sin darme tiempo a negarme, me tomó por la mano haciéndome sentir la calidez que emanaba de su cuerpo y en parte reconfortando el frío que estaba comenzando a sentir. Bajamos en el ascensor aún tomados de la mano y en completo silencio, lo miré por los espejos del cubículo y él sólo sonreía con tranquilidad cantando una apenas audible melodía. Al llegar a la cafetería pedimos todo lo que nos habían encargado sentándonos en una de las varias mesas vacías que se encontraban en el frío lugar para esperar la inmensa orden. Lay apoyó sus codos sobre sus rodillas para llegar hacia mí tomándome de nuevo pero esta vez de ambas manos logrando que quedáramos en la misma posición, mis ojos se encontraron con una sonrisa bastante segura de estar haciendo lo correcto y en sus ojos se irradiaba una felicidad digna de otro momento más feliz…no precisamente este

-¿tienes frío Lu?

-es el frío que se siente en todos los hospitales… ¿tú?

-no, estoy bastante bien. Estuviste muy bien allá arriba,  hablaste como todo un director

-gracias, aprendí de la mejor- de pronto una duda asaltó mi cabeza al recordar aquellos momentos- ¿tu madre alguna vez supo de nosotros? Es que…bueno ella parecía bastante cómoda con Suho y contigo…de hecho todos parecían bastante cómodos con eso

-Lu- su sonrisa desapareció haciéndolo suspirar con pesadez tratando de encontrar las palabras adecuadas para luego hablarme con toda la seriedad posible- si mi madre y la de Suho están cómodas con que yo esté ahí es porque ellas siguen viéndonos como esos niños que jamás crecieron. Te consta por el modo en que mi madre nos regañó por recibir llamadas de la academia

-sí pero… la verdad me sentí sobrando. Digo no es como que yo sea fundamental en ese lugar pero sentí que todos encajaban de maravilla menos mi madre y yo y la verdad… no tengo idea porqué te estoy reclamando si la vez que me terminaste estabas más que convencido de vivir para Suho, creo que mejor mando a Chanyeol para que te ayude

-no Lu- intenté levantarme pero él de inmediato me sujetó por los hombros regresándome a la misma posición y tomando con su mano mi mentón para que lo mirara a los ojos-Luhan mírame, entiende que tú jamás vas a sobrar en ninguna situación de mi vida…perdóname en serio si te ignoré de ese modo créeme que en esos momentos quería ser yo el que estuviera escondido en un abrazo tuyo pero recuerda que estaba Jian…¿recuerdas cuando me pediste que ocultara lo nuestro para que tu madre no se enterara? Pues lo cumplí y aunque moría de ganas por decirle a mi mamá que había encontrado a alguien maravilloso no pude porque como escuchaste, Jian habla con nuestros padres una vez al mes y mi mamá llega a soltar todo lo que le digo… ¿crees que eso nos hubiera favorecido?

-no… perdón es que hoy, bueno no hoy digo…más bien desde la despedida te has portado más…tu sabes

-¿cariñoso?- me preguntó susurrando con una sonrisa en los labios sin dejar de verme

-¡sí! Me salvas de mi madre, me besas, bailas conmigo y lanzas esas sonrisas que vuelan mentes

-¿Cuáles sonrisas?

-¡justamente esas!- señalé una que estaba esbozando en ese momento logrando que se convirtiera en risa- te parece muy fácil llegar y sonreírme de ese modo dejándome hipnotizado y luego te portas como un caballero pero luego llegas con la madre de Suho y me ignoras ¡sé que te preocupa mi prima! Y sé que está mal ponerme así en un momento tan serio pero supongo que me afectó que estuvieras tan… como antes

-¿me perdonas? Ya no está Jian ven y vamos a presentarte como es debido- me tomó de la mano besándome y su mirada volvió a esa que mantuvo durante todo el baile de esa noche, estuve tan hipnotizado en ella que casi no noto las palabras que me sembraron una duda

-¿por qué desde que terminamos tú te cuidas más de Jian?

-bueno, es mi directora y siempre me voy a cuidar de ella. Eso es lo que hacemos todos los alumnos

Aunque aseguraba que ese era su motivo yo sabía que pasaba algo más. Llevaba tiempo pensando que algo no encajaba aquí e intentaba recordar alguna pista para que toda la maraña de dudas se fuera disolviendo de a poco pero nada surgió,  preso de mis pensamientos me desconecté tanto que no vi cuando Lay depositó un beso en mi cuello haciéndome despertar de inmediato

-¿por qué hiciste eso?

-quería que volvieras a la realidad. Ya está  nuestra orden, voy a pagar y preguntaré si hay hoteles cerca

-¿para qué quieres los hoteles?

-tu tía no puede estar mucho tiempo despierta, ya está demasiado estresada y no le caería nada bien desvelarse. Igual en unos minutos mamá caerá rendida

-no te preocupes- me levanté para ir llamando al ascensor mientras Lay cargaba las bolsas que le entregaron para llevar todo el pedido sin problema- ya resolveremos todo eso

Llegando al lugar donde estaban las salas de espera observamos que solamente estaban la madre de Suho y la de Lay, al parecer las otras personas ya se habían retirado. Chanyeol platicaba animadamente con la madre del pianista mientras ella le dirigía tiernas sonrisas a Baek escuchando atentamente la historia que el pelirrojo le contaba. Lay comenzó a repartir las bebidas y yo me acerqué hacia Suho y su madre para hablar con ellos

-¿cómo se encuentra señora?- me senté a su lado ganándome una mirada hostil de mi primo- mi madre me dijo que mi prima ya pasó lo peor

-sí hijo, afortunadamente no pasó a mayores. En unos minutos voy a ver lo de su traslado a algún hospital cercano a mi casa, no puedo estar dejando el trabajo para viajar hasta acá. El gasto se duplicaría

-no se preocupe por eso. Las puertas de la academia están abiertas para ustedes-conforme hablaba noté que había captado la atención de las demás personas que se encontraban en ese lugar- de hecho me gustaría que pasen la noche en la academia, no está nada lejos de aquí

-me encantaría pero tengo que ver lo del traslado Lu. Este hospital es muy bueno pero no creo poder pagar la cuenta

-le repito que no se preocupe. Yo me voy a encargar de todos los gastos pero por favor vayan a descansar-me giré hacia Lay quien al igual que todos, me miraba impresionado- Lay, ¿crees que puedan quedarse en tu dormitorio? No tengo disponibles otros dormitorios

-hijo enserio muchas gracias pero ya sería mucho pedir

-¡de eso nada señora!- Baek habló con una mirada que me estaba dando un muy mal presentimiento- usted y la madre de Lay se van al dormitorio de Lay, Suho tú vas a atenderlas ahí. Lay puede quedarse en el dormitorio de Channie porque él y yo vamos a dormir juntos. Por favor no rechace lo que mi amigo le ofrece

-bueno en ese caso- mi tía me observaba con lágrimas en sus ojos tomándome ambas manos- gracias Luhan, no cabe duda que eres un ángel

-no diga eso. Solamente me preocupo por darle lo mejor a mi familia. Voy a mandar traer una camioneta para que las lleve hacia la academia, yo les aviso cuando ya esté afuera

-te tomas muy en serio eso de la familia- Yoon me miró bastante extrañada pero sonreía agradecida por mis atenciones- no cabe duda que Jian tomó la mejor decisión al quedarse contigo

-¡mamá! Ya estás hablando demasiado- Suho por primera vez habló dedicándole una mirada reprobatoria a su madre- creo que tu cerebro está haciendo corto circuito

-iré a hacer una llamada, permiso- fruncí el ceño demasiado extrañado por no comprender ni una palabra de lo que mi tía estaba diciendo, creo que Lay tenía razón cuando dijo que a ella no le haría bien desvelarse

Fui caminando con mi celular hacia la otra sala de espera y Baek corrió a alcanzarme, mientras terminaba la llamada lo estaba observando. Había algo en su sonrisa que no me estaba gustando del todo así que colgué para esperar a que lanzara eso que tenía en mente

-oye Lu, ya es tarde y tú no tienes dónde dormir

-¿de qué hablas?.... ¡maldita sea es verdad!-recordé que esa misma mañana había empacado todas mis cosas para irme de ese dormitorio y me palmeé la frente al notar que en efecto me había quedado sin nada en el dormitorio más que mis llaves- bueno no importa, pediré un taxi cuando todos se vayan y me voy a casa porque no creo tener espacio en tu dormitorio esta noche

-nop- sonrió de un modo travieso dándome a entender que esta noche se iban a escuchar varios gritos en la academia- no te preocupes no es tan tarde, si quieres me adelanto con Chanyeol para ir al cuarto de lavado y por lo menos recuperar tu cama

-si hicieras eso serías un excelente amigo. Sólo es recuperar la cama porque la sala se quedó prácticamente igual, hay varias maletas en el piso si quieres déjalas en donde estaba el comedor

-¿entonces ya no te vas a mudar?

-tal vez sí- noté que lentamente comenzaba a salir la cara de cachorro que Baek siempre ponía e incluso la mejoró haciendo que sus ojos se volvieran cristalinos como si estuviese a punto de llorar- pensándolo bien… quiero estar ahí cuando Chanyeol y tú incendien la cocina así que trata de recuperar todas mis mantas

-¡SÍ!- Baek me abrazo con tanta fuerza que casi me deja sin respirar- ¡no te preocupes que Chan y yo vamos a recompensarte todo esta misma noche!

Debí preguntarle a qué se refería pero decidí dejarlo ya que sus niveles de alegría eran demasiado altos y me  arriesgaba a arruinárselos con alguna pregunta mal hecha, además por las cantidades enormes de café que había consumido también me arriesgaba a recibir una sesión nada agradable de golpes así que mejor los dejé irse antes para que hicieran de las suyas.

Pasados unos veinte minutos la camioneta de la academia avisó que iba en camino por lo que  dije a las señoras que ya era hora de ir bajando hacia el estacionamiento, les di tiempo a que visitaran por última vez en el día a Sun y mientras bajé para esperar al conductor. El aire realmente se sentía fresco y la luna ya estaba en todo su esplendor regalándole un aire de romanticismo a esa noche, respiré profundamente al percibir el aroma de unas flores que se encontraban en un jardín a lado del estacionamiento, caminé tranquilamente con los brazos cruzados para protegerme de la fresca brisa para seguir observando el lugar y me encontré con un par de columpios que se hallaban solos. Aún no llegaba la camioneta, mi tía estaba tardando y ya era de noche así que no dudé en sentarme para comenzar a columpiarme tranquilamente observando todo a mi  alrededor, de nuevo no pude notar que había alguien más hasta que unas manos se posaron en mis hombros empujándome levemente

-cuando era niño los columpios eran mi juego favorito, me ponía una capa de superhéroe y me recostaba sobre el columpio para imaginar que volaba

-¿nunca te caíste?

-muchas veces. Pero según mi mente de niño así es como Superman había aprendido

Me reí por las anécdotas que Lay compartía por segunda vez en el día conmigo, al parecer era un niño bastante travieso. Seguí columpiándome manteniendo la fuerza con la que él me impulsaba y él se colocó frente a mí con una sonrisa que expresaba lo feliz que le hacía recordar esos momentos

-hoy me contaste muchas cosas de tu infancia- sonreí dejando ver todos mis dientes debido a los recuerdos de esa misma tarde- me siento feliz de haberlos escuchado

-yo me siento más feliz de haber sido escuchado por un torpe strudel de manzana-la velocidad con la que iba se fue interrumpiendo por mis pies y las manos de Lay en las cadenas, cuando no me moví más él se inclinó hacia delante para hacer chocar nuestras respiraciones- ¿dónde te gustaría estar en este momento?

-en la noria…

-sí- asintió lentamente sin perder de vista mis ojos, sus susurros se iban sintiendo cada vez más cerca mientras acortaba la distancia- a mí también

-mi mamá y tu mamá ya están en la camioneta, Lay- Suho interrumpió con esa voz tan falsa causándonos un suspiro de frustración y obligando a Lay a separarse para mirarlo con fastidio- ¿puedes ir con ellas? Quiero hablar con Luhan

-Suho, sabes que no…

-no te preocupes, ya sé que Luhan es intocable cuando tú estás cerca. Solo quiero hablar

Lay dudó un momento en dejarme, paseó su vista de Suho hacia mí preguntándose qué debía hacer, le ayudé asintiendo en señal de aprobación y tomé su brazo para mostrarle que podía estar tranquilo. El dudó unos segundos más pero luego volvió a inclinarse

-parece que hoy es el día de interrumpir los besos de Lay- se giró hacia Suho caminando despreocupadamente mientras lo señalaba a modo de advertencia y al pasar a su lado le regaló unas palmadas en el hombro- pasa, hay un columpio vacío

Lentamente Suho se acercó hacia el columpio sentándose sin columpiarse, no pregunté nada ni le hice señas para que comenzara, sabía que él no estaba en las mejores condiciones emocionales y por ende no quería causar algún tipo de disputa. Simplemente cerré los ojos volviendo a respirar el fresco aire que me estaba regalando la noche hasta que él quisiera comenzar la conversación

-¿por qué lo haces?- abrí los ojos de inmediato girando con un semblante confundido, había muchas cosas que hice ese día y no sabía a cuál se refería- ¿por qué quieres ayudarme?

-porque eres mi familia Suho…-miré hacia el frente comenzando a columpiarme levemente de nuevo mientras le daba la respuesta que pedía- la familia se apoya no importa qué 

-¿estás loco?- su voz ya se escuchaba quebrada por las lágrimas que había vuelto a derramar- Luhan ¡te destrocé en estos meses! ¡Te hice creer cosas y te engañé para que me dieras tu confianza! ¡Te dejé esos moretones en la cara!

-y también me confiaste muchas cosas Suho. Sé que tu hermana es lo más preciado que tienes en tu vida y que si llega a pasarle algo… entiendo a la perfección tu miedo, si llegara a pasarle algo a Baek yo simplemente no lo soportaría

-¡eres un idiota Luhan!-sus lágrimas corrían descontroladamente, no pensé más y me levanté para quedar frente a él y abrazarlo. A veces es lo que muchas personas enojadas necesitan. Él solamente me correspondió el abrazo con bastante fuerza mientras sus sollozos se tranquilizaban- eres un primo bastante idiota

-pero soy el único que tienes, para tu mala suerte… y soy más guapo que tú, doble mala suerte

Sus risas lo ayudaron a calmarse un poco más, nos separamos y le ofrecí una servilleta que guardé de la cafetería, él la aceptó limpiando sus lágrimas, respiró unas cuantas veces para tranquilizarse y se levantó con el semblante más calmado

-voy a quedarme unas horas más en el hospital, Minho habló y ya viene en camino, me iré con él. Cuida bien a mi madre

-claro. Si tu hermana necesita algo no dudes en pedirlo, los familiares vienen incluidos en el seguro de la academia

-estás loco, eso no existe

-pues ahora sí. Descansa

-Luhan- me detuve a medio camino para girar y encontrar la primera sonrisa verdadera que mi primo me regalaba desde que lo conocí- gracias

-cállate, me das miedo cuando no estás de venenoso

-maldito malagradecido, jamás le agradezco a nadie y tú sales con esas cosas

-así está mejor  

Baekhyun POV

-bebé ¿seguro que Luhan no se enoja si ponemos esto en su dormitorio?

-¡no! Amor, esos pétalos van alrededor de la cama- terminé de poner las mantas rojas y corrí para tomar las velas afrodisiacas colocándolas por todo el dormitorio, Channie se había desviado a una tienda que tenía todo ese tipo de cosas- ¿ya quitaste todas las bombillas?

-ya- escuché una profunda risa girándome para ver a mi Channie depositar una botella de lubricante en la mesada de Luhan- ¿crees que les alcance con este?

-compré dos- dejé el asunto de las velas para ir con Channie y ver dentro de la bolsa que tenía sosteniendo- ¿no me los pusieron?

-sí, pero yo tomé uno- se acercó a mi lóbulo comenzándolo a lamer entre risas y ronroneos- creo que esas velas ya están teniendo efecto

-tienen que estar encendidas amor pero ahh…ah- cerré los ojos al sentir su lengua en mi cuello- me llevo dos para nosotros

-perfecto ¿les dejo las esposas o me las llevo?

-¡llévatelas! ¡Y también el baño de burbujas!

Luhan POV

-Como mañana es día de descanso los desayunos se sirven a partir de las diez pero si gustan tengo varios teléfonos de restaurantes

-no creo que sea necesario Lu- la madre de Lay me miraba con una enorme sonrisa mientras quitaba las mantas de la gran cama- ya me las arreglaré para preparar algo delicioso y me encargaré de llevarte

-¡es verdad! Perdone, casi olvido que estoy frente a una profesional. Disculpe

-no te preocupes, anda vayan a dormir. De nuevo gracias por todo y nos vemos mañana. Lay acompaña a Luhan hasta su dormitorio

-a la orden, general- Lay hizo el típico saludo de soldado mientras nosotros reíamos levemente y su madre se quejaba de lo irrespetuoso que podía llegar a ser

-Luhan pobre de ti, tienes que soportar a este irrespetuoso todos los días- señaló a su hijo con un gesto de duda bastante cómico- ¿alguna vez te ha sacado de quicio?

-desde que lo conocí señora

Fui hacia la puerta mientras los demás reían por mi comentario, Lay por su parte sólo esbozó otra sonrisa recordando lo tonto que era los primeros días mientras salíamos del dormitorio cerrando la puerta con toda la cautela posible ya que por las horas lo más probable era que todo el pasillo estuviera dormido. Comencé a abrir mi puerta mientras Lay tocaba la puerta de Baek para pedirle las llaves a su amigo, reí por lo bajo al verlo un poco desesperado

-mejor llama a su celular porque esos dos están recuperando el tiempo perdido

-maldita sea- sacó su celular marcando a su amigo mientras se tomaba el puente de la nariz con los dedos pinza, al parecer el cansancio ya le estaba ganando- ¿por qué tienen que estar follando todo el tiempo?...sí ¿hola? Chan…Chan soy yo Lay…sí, no me importa… no, no quiero saber qué lleva puesto la diva… sólo quiero tus llaves para poder ir a dorm… ¡¿qué?! ¿Cómo que las perdiste? Chanyeol pero si vives ahí…. ¿en casa de tu abuela?... No tú me estás jodiendo ¿y dónde crees que voy a dormir?

Abrí la puerta de mi dormitorio mientras observaba a Lay perder cada vez más la calma, seguía regañando a Chanyeol y le exigía que lo dejara entrar al dormitorio de Baek pero al parecer eso nunca sucedería. Sentí algo de pena al verle de ese modo y le hice señas para invitarlo a pasar, Lay sin dudarlo entró para seguir reclamando a Chanyeol sus descuidos, lo seguí con una gran sonrisa al imaginar cómo Baek se desesperaba porque había sido interrumpido por el pianista estúpido pero dicha sonrisa se borró cuando traté de encender el interruptor varias veces sin resultado alguno. No tenía luz

-¡perfecto!, Lay- lo tomé por el hombro para pedirle un favor- ¿puedes preguntarle a Chanyeol si tienen luz?

-sí, ¿por lo menos puedes servir de algo y decirme si tienes luz?...si tienes…perfecto ¡pues entonces me iré a la calle y te va a pesar cuando encuentren mi cuerpo congelado y mordido por los perros Park Chanyeol!- con esto último, Lay colgó su celular maldiciendo y tirándose del cabello- perdón Lu, haré unas llamadas a mis amigos para ver si alguien sigue despierto…me iría hacia mi dormitorio pero no me apetece la idea de dormir con mi madre y su amiga

-no te preocupes, mientras resuelvo lo de la luz

-¿quieres ayuda?

-no. Realmente no es gran problema, al parecer los de la mudanza se llevaron las bombillas, tal vez tenga unos repuestos en algún cajón, tu haz tus llamadas- caminé a tientas para llegar hasta la cocina y Lay se dejó caer en una silla del comedor…bueno, de hecho esa mañana se llevaron el comedor entonces se dejó caer en el suelo causándonos una enorme carcajada que apenas pude controlar para ir a ayudarlo extendiéndole una mano pero las risas nos impidieron movernos y quedé a su lado en el suelo- perdón, no te dije que ya no hay comedor

-no te preocupes- se limpió una lágrima que salió por sus carcajadas. Acostumbrándome a la oscuridad pude observar esa profunda mirada que llegaba a tranquilizarme de muchas maneras- que raro, normalmente no quitan las bombillas

-sí…creo que tus amigos ya deben estar dormidos. Si quieres, yo tengo un informe que entregar en unos días y…

-¡lo siento! Puedo llamar a alguien de mantenimiento para que me abra el dormitorio de Chan

-de hecho iba a decirte que puedes dormir aquí mientras yo trabajo, pero si quieres hacer eso adelante

-tú…-nuestras palabras ya se habían vuelto susurros, nos encontrábamos bastante cerca para ser dos amigos per muy lejos para ser amantes- ¿me dejarías?

-¿por qué lo dudas si eres la mejor compañía que he tenido en mis noches de trabajo? - mi mano se deslizó desde mi pierna hacia el suelo para buscar un nuevo apoyo pero se encontraron con un objeto cilíndrico de consistencia sólida que parecía estar cubierto con una especie de cera, lo tomé con ambas manos debido al gran diámetro y Lay tomó su celular para alumbrarlo, era una gran vela que parecía tener una mezcla de colores rosas y rojos, nos levantamos lentamente y fuimos hacia los cajones donde guardaba unos fósforos para encenderla- que raro, no recuerdo haber comprado esta

-mira, ahí hay otra- señaló una pequeña vela blanca que se dejaba iluminar por la que recién habíamos encendido, decidimos encenderla y caminamos hacia la sala donde había grupos de tres velas esperando ser encendidas en cada mueble- huele extraño… huele bien pero no sé de qué sea

-sí… a lo mejor es de frutos rojos por el color- tomé otra vela que se encontraba en una mesa a lado del sillón sintiendo el aroma para tratar de encontrar de qué tipo era, mientras Lay tomó otra vela para seguir iluminando la parte del dormitorio donde se encontraba mi cama- supongo que Baek las compró para que no me quede a oscuras

-Lu… no creo que sean para eso- me giré para verlo encontrándome con un juego de mantas rojas cubriendo mi cama, a su alrededor estaba el mismo tipo de velas en la misma cantidad que en la sala y en el piso se encontraba una alfombra de pétalos creando un ambiente demasiado comprometedor- bueno… esto explica por qué Chanyeol no quiere darme las llaves

Al ver que accidentalmente Lay y yo habíamos creado un escenario bastante erótico todos los colores subieron a mi cara haciéndome parecer una de esas extrañas velas, entonces al fin pude comprender las extrañas sonrisas y palabras que Baekhyun había dicho, claro que nadie de la academia se había llevado las bombillas, eso también era obra suya y obviamente Chanyeol sí tenía las llaves de su dormitorio. Tomé mi celular con más fuerza de la necesaria para llamarle a ese pequeño engendro con eyeliner y regañarlo como merecía

-usted está hablando al dormitorio donde una bestia sexual me hace suyo por cuarta vez ¿qué desea?

-que dejes de abrir las piernas y me devuelvas mis bombillas

-de eso nada. No voy a dejar a medias a un ardiente pelirrojo para ir y hacerla de plomero

-los plomeros no hacen eso, idiota….mira Baekhyun, es la una de la madrugada, estoy muy cansado porque tuve un día bastante movido, tengo un montón de velas por todo mi dormitorio y me siento bastante excitado…. ¿yo dije eso?

-oh sí lo dijiste- Baek comenzaba a jadear a través del teléfono, en verdad no quería ni preguntar qué estaba pasando en su dormitorio- amigo… no puedo moverme de aquí y… si te sientes cansado acuéstate….y si  te sientes excitado hay otra persona en el dormitorio

-¡maldita sea Baekhyun estoy que me lleva el tren y tú te pones a jadear como perro! ¡No te pido más! ¡Cámbiame el dormitorio y quédate con todas estas cosas!

-no…no puedo….Channie…aahh…adiós

-¿Baekhyun? ¿Hola?- miré el celular comprobando que me había cortado la llamada, mi vista fue hacia Lay que comenzaba a pasear por el cuarto como si fuera una bestia enjaulada, las manos en la cintura y su respiración acelerada me hacían ver que algo no andaba bien- ¿qué hacemos?

-yo… Lu no me hables, perdón no lo tomes a mal pero no puedo escuchar tu voz si quiero controlarme- me miró fijamente caminando a paso rápido hacia mí pero se detuvo en el librero buscando algo con preocupación, cuando lo encontró fue hacia el reproductor de música que Baek había instalado de nuevo- esto…esto va a calmar la situación

En efecto la había calmado, ese era el disco que me regaló el día de la noria.  Tenía tanto tiempo que no lo había escuchado… recordé que desde la vez en que Lay vino a terminar conmigo estuve escuchando ese disco a diario durante meses, el dormitorio se sentía tan vacío cuando las canciones dejaban de sonar…recordé a la perfección el sonido de mis lápices paseando por las hojas debido al inmenso silencio que se burlaba de mi soledad. Lay se sentó en el banquillo de su descubierto piano abriéndolo con calma y acariciando cada tecla con nostalgia

-tú siempre encuentras la manera de tranquilizarme… aun en momentos como este

-sí… ¿te importa si toco las canciones? Tengo que hacer algo para distraerme

-claro. Tu piano tus canciones tus decisiones

Comenzó recordando las notas adecuadas a la canción que estaba sonando por todo el dormitorio, lentamente  iba tocando cada tecla correspondiente a la melodía creando al principio el sonido de dos pianos que a los pocos minutos se volvió uno solo… sin darme cuenta terminé en un sillón observando cómo todo el dormitorio se llenaba de esos recuerdos que estaban escondidos en algún lugar y ahora salían para escuchar cómo un músico les devolvía la vida. La misma intensidad del sonido, la misma calma y atención brindada a cada tecla, incluso el mismo sentimiento que transmitía esa persona frente a mí, esa que me estaba cautivando como la primera vez que accidentalmente lo escuché tocar. Como si el destino estuviera jugándonos alguna broma se soltó sin previo aviso una vasta cantidad de lluvia por las calles dándole un fondo más relajante a mi concierto privado…recordando esa vez que lo vi hacerse uno con sus canciones volví a mirar su semblante. Ojos cerrados, su cabeza bailaba suavemente con los sonidos que emitía el piano, labios entreabiertos que no decían palabra alguna ya que todas se escapaban corriendo por sus brazos para bajar hacia sus dedos y hablar en forma de música. Esos dedos delgados y alargados que dominaban a la perfección cada espacio de ese preciado instrumento acariciándolo a cada cambio de nota, sus manos danzando cada que cruzaban para ir de un extremo al otro llenando mis sentidos, apresando cada pensamiento haciéndome sentir un hermoso calor llenando mi pecho, un calor parecido al que sentía hace unos meses… mis ojos no podían ver nada ajeno a Lay y mi piel no sentía más que las perfectas notas chocando contra cada espacio permaneciendo ahí para cubrirme del frío. Pasaron dos, tres canciones y sólo cuando Lay tomó un descanso notamos que el disco se había detenido. No tenía nada malo, solamente se había expulsado la bandeja deteniendo la música pero no lo notamos ya que Lay había recordado el orden de grabación de sus canciones, al  percatarme de esto me levante para ir hacia el reproductor y empujar la bandeja presionando los botones para adelantar las canciones pero Lay me interrumpió pausando el disco

-¿ya no quieres escucharlo?

-tengo algo mejor- me llevó de la mano hacia el sillón donde anteriormente lo escuchaba para luego volver a posicionarse en el banquillo, su sonrisa jamás desapareció durante todo el trayecto- quiero que escuches algo nuevo, bueno no…no es tan nuevo, la hice meses atrás pero jamás la toqué en público. Quería que me dieras antes tu opinión ¿quieres escucharla?  

-de seguro es muy buena- sonreí aplaudiendo para darle más ánimos- pero sería un honor ser el primero en escucharla

-de acuerdo, cierra los ojos por favor

Obedecí sus indicaciones cerrando los ojos con una sonrisa en el rostro debido a la emoción que me producía ser el primero en escuchar una creación de mi pianista favorito. Después de unos segundos en los que solamente respiraba hondo para darse ánimos se escuchó el primer juego de notas, notas simples pero con una profundidad bastante significativa. Era una canción que de inmediato iluminó e hizo salir de mi pecho miles de emociones, felicidad, amor, compasión, melancolía, tristeza… esa canción parecía ser de cierto modo romántica pero el aire de melancolía que la adornaba era algo angustiante. Cerré con fuerza los ojos tratando de reprimir unas lágrimas que querían salir corriendo al igual que yo, quería detener a Lay para abrazarlo pero también quería seguir escuchando esa parte romántica de la canción, la canción más hermosa que había escuchado….eso… eso ya lo había dicho meses atrás… de pronto me vino a la mente el día en el que todos los malentendidos comenzaron y esa canción fue de los principales motivos por los que había decidido no permanecer a lado de Lay. Al darme cuenta de mis pensamientos abrí los ojos levantándome para detener la mano de Yixing quien salió de su concentración para observarme con la confusión tatuada en el rostro

-basta… no hagas eso, toca otra cosa pero esa canción no

-¿perdón?- se levantó bastante alarmado de su banquillo para enfrentarme- creo que sabes bastante bien que uno de los peores insultos para un músico es que detengan sus composiciones, además ¿cómo que esta canción no?

- ya había escuchado esa canción antes… y no sabes cómo la odio

-¡¿qué?!-rio con ironía mientras se colocaba las manos en la cadera, al parecer comenzaba a enojarse- creo que la estás confundiendo de un modo terrible Luhan, te estoy diciendo que es una composición mía y que jamás la he presentado ¿cómo que ya la escuchaste?

-¡ya sé que es tu composición! ¡Y la escuche porque un día  Suho vino hasta acá y me enseñó esa misma canción! ¡Y la odio porque es para él!

-¡¿de qué estás hablando?! ¡ni siquiera Suho la conoce, sólo Mbandi la conoce porque él me ayudó a cambiarle algunas cosas porque yo quería presentarla como pieza final el día de las evaluaciones porque es una canción muy especial porque la hice para ti porque quería demostrarte que te amo pero todo se fue a la mierda y jamás la toqué hasta le cambié notas y suena maldita sea muy depresiva porque así me siento y justo hoy que por fin decido tocarla esperando un “oh Lay pero que linda te ha quedado” para que yo te diga “oh la he hecho para ti Lu” pero lo único que recibo es un “no la toques porque Suho quien se la pasa mintiendo todo el tiempo me dijo que es para él y la odio”… y lo peor es que ni siquiera puedo enojarme contigo porque te amo Lu

-…para mí…

-¡sí!

-es que es hermosa

-gracias

-Lay ¿por qué me dices que me amas y no me dejas regresar contigo? Es que no entiendo eso y la verdad me cansa demasiado

-Lu…-su mirada se desvió desde mis ojos hasta el reproductor de música para pensar por unos momentos y tranquilizarse, luego regresó a esa expresión serena y  sus manos fueron hacia mis hombros- te entiendo a la perfección, hay varias cosas que no entiendes y otras que no encajan, entre ellas mis palabras con mis actos… y aunque no lo creas he hecho varias cosas para que seas feliz, no preguntes cuáles ni cuándo sólo créeme …algún día todo va a tener sentido y todas tus dudas se van a aclarar pero hoy sólo confía en mí cuando te digo que te amo como jamás creí que podía amar a alguien

-Lay… no sé qué decir

-por favor sólo dime que me amas- la angustia en su mirada incrementaba con el paso de los segundos y sus manos habían salido de mis hombros para tomar mi rostro plantando un beso en mis labios- por favor… sólo una vez para que todo esto siga valiendo la pena

-…no

-por favor Lu, dilo… dime que me amas- sus besos seguían repartiéndose dulces pero desesperados por todo mi rostro, yo quería decirlo, sus palabras habían despertado algo en mí, yo en verdad creía que Lay sentía algo más que cariño por mí y quería responderle pero aún tenía miedo de que todo esto fuera momentáneo, como si mi mente diera ordenes por separado, mi cabeza negó lentamente haciéndolo separarse resignado, cabizbajo fue hacia el reproductor apretando botones para que siguieran sonando las últimas canciones, como si hubiese leído mi mente explicó sus acciones- lo dejaré corriendo para que te ayude a borrar mi nueva canción de tu mente… aún no es tan tarde, iré a buscar un hotel. Apaga las velas cuando vayas a dormir  

No me dio tiempo a responderle cuando tomó su celular cerrando el piano y caminó con pasos acelerados hacia la puerta, mi cuerpo seguía congelado en recuerdos pero todos ellos desaparecieron cuando se escuchó la puerta cerrándose, lo único que quedaba eran esas canciones que ya comenzaban a recordarme con burlas mi soledad

-no… no, esta vez no te escapas Lay

Corrí hacia la puerta tropezando una vez gracias a la tenue iluminación y salí lo más rápido que pude dejando la puerta abierta ya que mis llaves estaban perdidas en algún lugar del dormitorio y no quería perder tiempo buscándolas, primero giré hacia su dormitorio pero no lo encontré, luego giré hacia el lado opuesto viéndolo caminar cabizbajo. Corrí los pocos pasos que faltaban y lo tomé del brazo haciéndolo girar

-…quédate

-¿por qué?

-porque si terminan esas canciones y tú no estás solamente voy a escuchar mi respiración. Y es como si me estuviera recordando que alguna vez estuviste ahí conmigo pero que ahora solamente ella me acompaña… no tienes idea de lo horrible que eso se siente  

Lentamente avanzó hacia donde me encontraba, su respiración calmada y cada paso calculado comenzaron a ponerme los nervios de punta por lo que comencé a retroceder por instinto. Ante sus indicaciones entré en mi dormitorio seguido de él que, sin quitar la vista de mis labios cerró cuidadosamente la puerta abalanzándose hacia mí en un tierno y superficial beso, tomó con cuidado mis mejillas para acercarme más hacia sus labios haciéndolos bailar provocando que soltara un suspiro de alegría, aun sin apartarse de mi boca comenzó a caminar llevándome consigo. Mis ojos se encontraban cerrados y mi confianza estaba puesta totalmente en él a pesar del peligro que corríamos de tropezar o tirar alguna vela pero no tenía miedo ya que frente a mí se levantaba el hombre más protector de mi vida que me tomó por la cintura en un abrazo mientras que la otra mano viajaba hacia mi cabeza acariciando mis cabellos con un poco más de fuerza, intenté respirar abriendo la boca y Lay aprovechó introduciendo su lengua para saborear la mía. Al toparnos con el borde de la cama Lay me recostó con sumo cuidado como si yo fuese una tela bastante fina que necesitara estar en la cama, mis ojos se abrieron con pesadez al cortar el beso y sentir el cuerpo de Lay sobre el mío acomodándonos a lo largo de las mantas. Sentí mi mirada suplicarle a sus labios que siguiéramos con el mejor beso de la noche aunque mi respiración pidiera un descanso. Lay trataba de regular su respiración llevando mis manos hacia sus hombros y acariciando mis mejillas con el dorso de su mano, a la luz de las velas pude admirar toda su belleza, su piel se veía el doble de tersa y en su mirada podía jurar que se encontraba toda una veneración hacia mí. La misma veneración con la que yo lo estaba mirando… sus labios entre abiertos dejándome aspirar ese aroma fresco que le caracterizaba ya dibujaban una leve sonrisa mientras asentía como si estuviese pensando que esto era lo mejor que le podía estar pasando, por lo menos eso estaba pensando yo cuando tomó una de mis manos para darle suaves besos por el dorso, pasó a la muñeca girándola para depositar uno más y recargó su mejilla en mi palma para recibir una caricia de mi parte, el ambiente definitivamente había cambiado a uno de total romance y la lluvia ya había detenido todo el desastre que estaba haciendo para convertirse en una ligera brisa. Sus labios esta vez fueron hacia mi mejilla para depositar otro beso dirigiéndose hacia mi lóbulo donde dio una leve mordida, mis manos por instinto tomaron sus brazos con una leve presión que se volvió más fuerte cuando sentí su lengua recorriendo a lo largo de mi cuello, al notar la reacción que causó me lanzó una mordida junto con un movimiento que permitió a todo su cuerpo restregarse contra el mío ocasionando que lanzara el primer gemido de la noche. Fue apenas audible pero lo suficiente para que él se entretuviera lamiendo el otro lado provocando otro gemido pero esta vez más fuerte. Sus manos pasaron a acariciar mi pecho, bajaron por mis costados y luego colándose en mi camisa para ir hasta mi espalda y recorrerla a su gusto levantándome unos centímetros de la cama donde aproveché para llegar hasta su cuello devolviendo un poco de lo que él me había comenzado a hacer, mis dedos parecían estar en casa cuando se perdieron entre los castaños cabellos de Lay aumentando las caricias, como si hubiésemos pensado al mismo tiempo nuestros labios volvieron a juntarse en un beso cargado de pasión que duró varios minutos donde podíamos reclamar al otro como nuestro provocándonos más jadeos. Se separó para comenzar a desabotonar lentamente mi camisa, cada parte expuesta de mi piel era besada con ternura, su lengua paseaba por mi pecho succionando las zonas que me conocía como sensibles llevándome a otro nivel de placer, se detuvo en el margen de mis pantalones entreteniéndose un rato con mi abdomen, mis piernas inquietas se movían acariciando las suyas haciéndolo moverse en un delicioso vaivén que me hacía lanzar la cabeza  hacia atrás. Regresó hacia mi cuello dándole especial atención a mi torso con sus manos, cada roce hacía que la temperatura de mi cuerpo subiera unos cuantos grados. Mis ojos se abrieron cuando sentí la parte inferior de mi ropa desaparecer y se abrieron como platos cuando noté la perfecta figura de Lay deshaciéndose de su camisa y quedando solamente en ropa interior bastante ajustada, jamás supe cuando se quitó los pantalones. Me observé desnudo y vulnerable tratando de cubrirme pero él de inmediato tomó mis manos frenándome en todo movimiento comenzando a admirarme con ayuda de la acogedora luz que nos regalaban las velas

-eres hermoso… cada parte de ti- aún con sus manos controlando mis muñecas bajó esa mirada de fascinación hasta mi eje, a diferencia mía su semblante se encontraba calmado

Dejó de aplicar presión en mis muñecas cuando comprendí que a él le gustaba lo que veía. Como si mi piel fuera lo suficientemente suave, sus manos avanzaron por todas mis piernas acariciándolas, pasaron a mi abdomen de nuevo paseando por todo mi torso mientras su lengua estaba ocupada invadiendo la mía, con gemidos me indicaba que cada caricia que me daba estaba siendo disfrutada al máximo. Tomé valor colocando ambos brazos alrededor de su cuello abrazando sus caderas con mis piernas que lograron encontrar más contacto aumentando de este modo el placer que salía en forma de gemidos los cuales Lay recibía gustoso en su boca, sus manos acariciaban incesantes cada espacio de mi piel regalándome miles de caricias y sensaciones que me dejaron a sus pies, me estaba manejando a su gusto logrando que comenzara a retorcerme por las mil sensaciones que se instalaron en mi pecho y con esto comenzamos el más delicioso vaivén que hacía a nuestros cuerpos conectarse en cada centímetro aumentando el ritmo de nuestras respiraciones convirtiéndolas en jadeos. En ese momento solamente yo estaba causando los movimientos pero cuando Lay decidió seguir mis movimientos tomando el mando del ritmo tiré la cabeza hacia atrás pensando que nuestros cuerpos estaban hechos para hacerse uno mismo a la perfección. Después de unos minutos llenos de jadeos, caricias y besos mis pensamientos más cuerdos comenzaron a abandonarme y giré en la cama para quedar arriba, Lay confundido por haber terminado abajo detuvo todo movimiento para preguntar qué hacía pero no di tiempo a articular palabras ya que fui a gatas hacia su entrepierna sin perder de vista su mirada. Una vez hincado acaricié su miembro que pedía salir de la ropa que lo apresaba por lo que comencé a bajarla con una lentitud mortal, la lancé con cuidado de no tirarla en algunas velas y de nuevo mire a Lay hacia los ojos lamiendo mis labios con una sonrisa bastante traviesa, me acerqué tomándolo por la base dando unas cuantas caricias a todo el eje para después lamerlo deleitándome con las reacciones de Lay quien cerraba los ojos frunciendo el ceño suspirando de gusto. No conforme con esa reacción lamí la esponjosa cabeza saboreando las primeras gotas que me eran regaladas, con ganas de sentir más la erección del castaño metí todo el eje de una vez comenzando a subir y bajar mis labios a lo largo de todo el miembro, mi lengua a los pocos segundos comenzó varias lamidas bastante rápidas mientras mis labios trabajaban en apretar un poco toda la erección y Lay comenzaba a jadear colocando las manos en mi cabello para tomarlo con delicadeza comenzando un ritmo más lento

-ahh…Lu…Luhan...tú…no estás… sintiendo…

Confundido por sus palabras detuve mis movimientos para observarlo con la duda en mi rostro, abrió los ojos que tenía cerrados y sus manos pasaron hacia mis hombros para atraerme a  él, pensé que me quería besar pero cuando me acerqué hacia sus labios él me tomó de la cintura girándome con una fuerza bastante impresionante. Quedé de espaldas y sentado sobre él aún sin comprender lo que quería hacer hasta que sentí su mano recorrer mi espalda baja subiendo por toda la línea de mi columna, a la mitad del trayecto se le unió la otra mano y cuando ambas llegaron a mis hombros fui empujado hacia adelante donde me esperaba su mojado miembro, ahora comprendía lo que él quería decir así que de nuevo comencé a lamer todo el eje sobresaltándome cuando sus manos comenzaron a acariciar mi trasero y la zona que rodeaba mi entrada provocándome leves gemidos que hacían vibrar mi garganta dándole el doble de placer, mismo placer que me devolvía aprovechando que mis piernas se encontraban cada una a sus costados para tocar todo mi eje estimulando con apretones y masajes de los cuales se encargaba una mano mientras la otra se dirigía hacia mi boca llamando mi atención a las nuevas órdenes que Lay me daba entre jadeos

-bebé, lame esto

Sin dudar dejé su miembro provocando un sonido bastante obsceno y comencé a darle atención a sus dos dedos mientras su lengua se unía al juego que tenía en mi entrada comenzando con lamidas que me hicieron ronronear gracias al placer que estaba sintiendo recorrer todo mi cuerpo aunado al de escuchar los sonidos acuosos que inundaban el dormitorio. Cuando Lay sintió que sus dedos se encontraban lo suficientemente mojados me tomó de las caderas hincándome en la cama para luego situarse tras de mí, me hizo separar ambas piernas y llevó su mano hacia mi miembro para darle la atención adecuada subiendo y bajando en movimientos que me brindaban cada vez más calor, a esto se le aunaron los besos que regalaba a todas las zonas que alcazaba de mi cuello dedicándose a succionar todo lo que podía, me encontraba en el quinto nivel del cielo dejándome llevar por todas sus atenciones hasta sentir un dedo entrando lentamente en mí provocándome un escalofrío que me hizo abrir los ojos, cuando Lay notó mi reciente tensión siguió moviendo la mano que tenía mi miembro apresado pero esta vez con movimientos más precisos mientras su lengua se dirigía hacia mi lóbulo para hacerlo suyo entre susurros

-todo va a estar bien

Como si esas palabras tuvieran magia comencé a relajarme comenzando a sentir el primer dedo invadiéndome y activando un nuevo tipo de placer que me hizo mover las caderas a su ritmo. Una de mis manos fue hacia su cabello para acariciarlo y la otra hacia el brazo perteneciente a la mano que me estaba regalando placer por delante, mis gemidos aumentaron cuando un segundo dedo se unió a la fiesta, al principio se sentía bastante apretado pero comenzó a hacer movimientos circulares dilatando más mi entrada y aumentando más el vaivén que me tenía haciendo desde hace unos momentos. La habitación se había inundado con el sonido de mis continuos gemidos que ya alcanzaban notas bastante agudas cuando Lay tocó un punto que intensificó todas las sensaciones causando un enorme nudo en mi vientre que poco a poco se iba deshaciendo en las sensaciones más cálidas que había tenido en mi pelvis haciendo crecer todo el placer que me hacía el doble de sensible al más mínimo roce de Lay para luego juntarse en una explosión que llegó a todo mi cuerpo estallando  en un orgasmo bastante fuerte que me hizo salpicar parte de mi cara con mi propia semilla, estaba temblando y bañado en sudor, jadeaba y me sostenía de Lay quien me giró para recostarme junto a él con una sonrisa. Intentaba regular mis respiraciones mientras él limpiaba lo que había quedado en mi cara y abdomen avergonzándome un poco. Abrí los ojos al notar que su erección seguía intacta y como si me hubieran dado un energizante volví a despertar con la lascivia recorriendo mis venas, iba a tomarlo de todo el eje pero su mano me  lo impidió mientras él me veía con una sonrisa en ese rostro tan hermoso

-¿no quieres que te ayude a terminar?

-¿crees que ya terminamos? Sólo te estaba dejando descansar unos minutos

Mordí mis labios de una forma traviesa al descubrir que apenas llevábamos la mitad del proceso, volví a besarlo con la misma pasión que traíamos minutos atrás y él siguió acariciando toda mi espalda envolviéndome en un abrazo lleno de caricias que le respondía con la misma intensidad, estaba dedicado a dejar una gran marca en su cuello mientras él entre jadeos estiraba su mano hasta la mesilla que se encontraba a lado de la cama tomando una botella de líquido que no supe distinguir bien hasta que Lay la abrió colocando un poco en sus dedos, definitivamente íbamos a llegar bastante lejos esa noche

-voy a hacer lo que tú me permitas- me decía Lay entre susurros mientras yo seguía dando atención a su lóbulo- pero si quieres detenerte también lo voy a hacer

Al verlo nervioso por lastimarme tomé la botella de lubricante untando tres de sus dedos para luego abrazarme a su cuello mientras él se sentaba recargado en la cabecera de la cama subiéndome en su regazo y comenzando de nuevo ese sensual vaivén con el que habíamos empezado la noche. Estaba tan concentrado en su lengua que sólo cuando su primer dedo comenzó a moverse en círculos supe que ya había entrado, igual el lubricante lo hacía todo el doble de fácil, al ver lo rápido que me había acostumbrado adentró el segundo dedo continuando  con los movimientos circulares, no me costó tanto trabajo adaptarme pero las molestias comenzaban a sentirse, decidido a ignorarlas comencé a moverme apoyando mis rodillas en la cama  empalándome contra sus dedos, cuando Lay sintió mis paredes relajarse se abrió paso con el tercer dedo, esta vez la incomodidad se hacía presente por lo que lo rodeé con mis brazos enterrando mi cara en su cuello con leves respiraciones agitadas mientras él esperaba a que me relajara, a la primera oportunidad continuó con los círculos creando sensaciones que convertían el dormitorio en un paraíso. Buscó mis labios para darme más seguridad y le respondí haciendo nuestras lenguas bailar a un ritmo lento y lleno de sentimientos, su brazo libre me rodeó por la cintura pegando más nuestros cuerpos y sus dedos continuaban sacándome el doble de gemidos, me sentía un poco avergonzado por la posición en la que nos encontrábamos y por verme tan vulnerable pero como si él se hubiera metido en mis pensamientos me hizo mirarlo a la cara, tenía la frente perlada por el sudor y sus cabellos ya se encontraban fuera de lugar igual de mojados que los míos, su mirada estaba cargada de placer y de su boca salían suaves jadeos que iban al ritmo de sus manos en mi entrada, tomó aire tratando de regular su respiración y habló después de varios minutos en silencio

-no tienes idea de cuánto deseaba esto

-entonces…hazlo…-me costaba trabajo hablar entre gemidos y ya me sentía preparado para lo que vendría a los pocos segundos-… Lay… te necesito… dentro

No comprendía cuando decían que hay un periodo en el que esperas con ansias que la otra persona se encuentre dentro de ti hasta ese instante en el que Lay retiró sus dedos desesperándome a cada segundo que pasaba mientras tomaba de nuevo el lubricante vaciándolo en mis manos para que le colocara la cantidad que quisiera. Intenté calmarme y deposité una cantidad bastante generosa provocándole varios gemidos al esparcirlo por todo su miembro, una vez listo y por sus indicaciones me recosté en la cama recibiéndolo arriba de mí con ambos codos a los lados de mi cabeza, me acarició la cara con el dorso de su mano dedicándome una sonrisa bastante calmada y llevó mis piernas hacia su cintura para que lo rodeara con ellas mientras se colocaba en mi entrada mirándome a los ojos con la misma veneración que tenía tatuada esa noche, mis manos fueron nerviosas hacia sus hombros pero igual le regalé una sonrisa haciéndole saber que me sentía bien con lo que estaba a punto de pasar

-¿listo?- su sonrisa y su mirada haciendo que desapareciera todo lo que nos rodeaba,  centrando toda mi atención en él, en su respiración, en su calma, incluso en estos momentos lograba tranquilizarme y hacerme saber que todo estaría bien. Devolviendo esa sonrisa asentí ganándome un tierno beso en la mejilla y un susurro igual de íntimo que el momento- te amo

-Lay yo también te a…aa…oh por…

No pude terminar mi frase cuando le sentí adentrarse lentamente en mí. Las estocadas eran suaves y se abrían paso poco a poco entre jadeos, una vez adentro cerró los ojos conteniéndose mientras yo intentaba acostumbrarme a la punzada que me estaba provocando tenerlo completamente dentro de mí. Él realmente estaba haciendo un gran esfuerzo por contenerse y lo veía en los leves temblores que sacudían su cuerpo, cerraba los ojos tratando de tranquilizar su respiración entrelazando una de mis manos con la suya mientras la otra acomodaba con ternura mi cabello, cuando me observó debió ver una expresión de dolor ya que su semblante cambió a uno de preocupación

-¿estás…bien?

-sí…

Llevé mi mano libre hacia sus caderas para indicarle que podía seguir con sus movimientos,  captando mi señal volvió a sonreír comenzando con el suave y preciso vaivén de sus caderas, era un vaivén lento, cada movimiento llevaba parte de su atención, la otra parte se dividía entre la dedicación que tenía su mano en venerar con caricias cada rasgo de mi cara y cuerpo, la otra se encontraba recostada y entrelazada a la mía para encontrar un soporte. A cada estocada su dulzura me invadía corriendo por mis venas, la dedicación a venerarme había pasado niveles inimaginables y su mirada más que concentrarse en los gemidos que salían de mis labios se concentraban en mirar con fascinación mi mirada, eso no era simple sexo que tienen las personas… eso en verdad era conectar las almas, claro que había placer de por medio pero el sentimiento de concentrarse en hacer al otro sentirse parte del acto era superior a cualquier emoción, eso era un juego de dos personas, dos personas estábamos dedicándonos a venerar y acariciar cada tramo de piel de la otra persona, ambos habíamos hecho a un lado las palabras para expresarle al otro lo importante que era para nuestras vidas, estábamos demasiado inmersos en el lento vaivén que habíamos creado, nuestros dedos temblaban por volver a tocarnos y nuestros ojos atravesaban la mirada del otro. No existían otras manos que me tocaran como él, no existían otros ojos que miraran más allá de mí…

-te…te amo Lay…

-te amo Luhan… como jamás creí… amar a alguien

El ritmo comenzó a subir al igual que nuestra temperatura pero sin perder ese equilibrio entre erotismo y amor, nuestros gemidos acompañaban el sonido de nuestros cuerpos chocando e iban aumentando de tono. Después de unos minutos Lay me tomó de los hombros saliendo de mí para acomodarme hincado hacia la cabecera en donde me colocó ambas manos para sujetarla con fuerza, luego se hincó atrás de mí aprovechando que nuestras alturas se encontraban bastante similares en la cama, depositó un beso en mi mejilla y me tomó de las caderas para volver a ese lento vaivén que me estaba consumiendo cada vez más la cordura, cuando recuperó el ritmo uno de sus brazos rodeó mi cintura posando su mano a la altura de mi vientre logrando pegar mi espalda a su pecho para no quitar el aire tan romántico que habíamos formado, la otra mano fue hacia la cabecera para tomar otro apoyo aunque básicamente dependía de mí que la posición se mantuviera. Por el modo en el que nos encontrábamos sus estocadas dieron más profundo en mi interior logrando esparcir una bola de electricidad por todo mi cuerpo, simplemente estaba abrazando el cielo en esos momentos ya que además de todo ese placer podía sentir los gemidos de Lay en mi cuello mezclados con sus jadeos y el aire caliente que salía de ellos llegaba a mi oído junto con los besos que lograba darme, giré la cabeza hasta encontrar sus labios que me esperaban para juntarlos en un húmedo beso donde intercambiábamos suspiros y varios te amo, nuestros cuerpos estaban alcanzando nuevos niveles de placer por quinta vez en la noche y eso se vio por los violentos temblores que sacudían nuestros cuerpos ya bañados en sudor. Me di cuenta que prácticamente Lay estaba haciendo todo el trabajo por lo que le pedí que detuviera todo movimiento y usando todo el autocontrol que pude nos separé para tomarlo por los hombros y pedirle que se sentara en la cama recargándose en la cabecera. Le gustó que tomara la iniciativa ya que me lanzó una leve risa dejándose hacer por mí que lo besaba en los labios mientras colocaba cada pierna a los lados de su cadera acomodando mi entrada a la altura de su eje, me sentí bastante confiado al llevar sus manos hacia mi cintura y colocaba las mías en sus hombros para darme un apoyo, él solamente miraba fascinado todos mis movimientos como si estuviese admirando el paisaje más hermoso que haya tenido frente a él, en definitiva él me hacía sentir amado y venerado. Aproveché lo acostumbrado que me encontraba a su tamaño para dejarme caer dejándolo adentrarse en mí de un solo movimiento, logré que su expresión cambiara a una de placer total cuando subí para sentarme de nuevo, su ceño fruncido y su mirada totalmente perdida en el paraíso, sus labios se entreabrieron en un suspiro anunciando que Lay había descubierto un nuevo tipo de placer. Motivado por sus expresiones seguí mis movimientos esforzándome por llevarlo a lugares inimaginables mientras su mirada seguía conectando con la mía, me movía con más rapidez conforme pasaban los minutos, mis pulmones estaban pidiendo aire mientras miles de emociones se encendían en mi pecho pasando a mi abdomen donde se acumulaban con todas las sensaciones que captaba mi cuerpo. Lay tomó con fuerza mis caderas para cargarme y guiar el movimiento logrando tocar ese dulce punto donde todos mis pensamientos se arremolinaban escapando junto con mi cordura en forma de gemidos, el vaivén seguía su curso haciéndose cada vez más rápido, más fuerte, más placentero. Aprovechamos que estábamos a la misma altura y como si leyéramos nuestras mentes nos acercamos al mismo tiempo para calmar la urgencia que nuestros labios tenían por acercarse, recibíamos los gemidos del otro en la boca y nuestras manos bailaban acariciando cada tramo de piel que era alcanzado. El ritmo llegó a su máximo punto, nuestros gemidos eran prácticamente gritos y el sonido acuoso inundaba toda la habitación, estaba viendo miles de estrellas y los escalofríos recorrían todo mi cuerpo llegando como electricidad a mi pelvis haciéndome estallar en un fuerte orgasmo que me obligó a cerrar los ojos para seguir disfrutando la sensación más embriagadora que he conocido. Al sentir mis paredes contraerse, Lay dio unas cuantas estocadas más liberando su semilla para llenarme por completo uniéndose al temblor de nuestros cuerpos exhaustos, las palpitaciones de su miembro me causaron otro nivel de placer logrando que mi orgasmo se duplicara. Abrí los ojos encontrándome con su mirada iluminada y fui directo a sus labios para besarlo sin cansancio, esta vez eran besos más tranquilos, llenos de amor, seguridad, confianza…tan llenos de él

Poco a poco y con un jadeo Lay salió de mi interior recostándose en la cama, tomó mi mano para que me recostara en su pecho y nos cubrió con las mantas pasando un brazo bajo mi cabeza para abrazarme mientras su otra mano tomaba la mía en suaves caricias, algunas velas ya se habían consumido y otras estaban dando sus últimas llamaradas, esta vez fueron sus labios los que me buscaron comenzando un beso que duró mucho más tiempo del que ha durado otro, nos tomábamos la calma de sentir cada textura y sabor separándonos apenas unos centímetros para tomar aire y volver a juntar nuestros labios. Los besos esa noche habían sido demasiados pero nosotros siempre queríamos más del otro. Terminando ese largo beso apenas nos separamos para mirarnos a los ojos,  Lay acomodó mi cabello y su mano bajó por toda mi cara en caricias, levantó mi mentón para que nuestras miradas volvieran a encontrarse y juntó de nuevo nuestras manos para comenzar una conversación

-Luhannie- habló entre susurros apenas audibles por mí sin borrar esa sonrisa que expresaba una calma total- ¿en qué lugar te gustaría estar ahora mismo?

-estoy bien ahora mismo Lay, aquí…contigo. Olvidando el mundo, las personas, los problemas… ahora mismo no necesito nada más que tus labios

-no sé cómo describirte lo que estoy sintiendo en este momento. Un te amo no engloba todo lo que siento por ti… todo lo que representas… todo lo que has cambiado de mi vida… me encantaría detener el tiempo y quedarme aquí contigo siempre siempre olvidando al mundo

-quédate siempre conmigo Lay. Me eres tan necesario como respirar, me haces sentir que todo va a estar bien. Y tienes razón, un te amo me suena bastante común para describir todo esto que me haces sentir… pero aún no se ha inventado la palabra que busco para definirlo, sólo sé que desde el día en el que llegaste a llenar los huecos de mi alma gané algo más importante que un simple medio de apoyo

-Luhan eres todo lo que necesito para ser feliz… sólo tú y tu felicidad son lo único importante en mi vida

-y mi felicidad eres tú Lay. Por favor, te suplico que volvamos a lo de antes…me siento perdido sin ti

-tranquilo- me atrajo más hacia su cuerpo para brindarme esa calma que comenzaba a pedir mi cuerpo y repartió suaves besos en mi cabello- te juro que voy a hacer algo para que todo mejore, dame tiempo y te juro que volveremos a ser tú y yo ¿lo imaginas? Nosotros hablando entre besos bastante tranquilos hasta que llega Baek interrumpiéndonos, comienzo a tener una divertida pelea con él y luego llega Chanyeol para abrazarlo y besar ese anillo que tanto aman, luego lo va a regañar por pelear conmigo y los cuatro iremos hacia algún lugar donde nos estén esperando tus nuevos amigos para pasar una tarde increíble…

Con esas imágenes tranquilizando mi mente caí rendido de una vez por todas en cama. Todo el cansancio, emociones, recorridos y momentos íntimos que había tenido en el día estaban cobrando con intereses todas las gotas de mi energía creando una enorme pesadez en mis parpados a comparación de mi cuerpo que ya se sentía ligero pero aun así podía percibir las manos de Lay acariciándome acompañadas de leves frases susurradas que poco a poco iban perdiendo sentido, ahí es cuando supe que el cansancio también había hecho de las suyas con él.

La lluvia había estado presente toda la noche, incluso en la mañana siguiente las nubes parecían no querer abrirle paso al sol. El frío comenzaba a entrar de a poco al dormitorio y las últimas velas ya se habían consumido. Me envolví más en las mantas escuchando un quejido que no provenía de mí, aún entre sueños abrí lentamente los ojos sintiendo un brazo rodeando mi cintura y un cuerpo pegado a mi espalda. Preso del sueño y del pánico me removí girando lentamente para encontrar al dueño de esos quejidos llevándome una grata sorpresa

Ah, entonces no lo soñé

Lay aun dormía a mi lado, jamás lo había visto de ese modo. Su cuerpo al igual que el mío seguía desnudo, una de sus manos estaba apresada entre su cabeza y la almohada, la otra se encontraba abrazando mi cintura, sus respiraciones eran pausadas y tenía un semblante más calmado que el acostumbrado dejando salir leves respiraciones a través de sus labios entreabiertos. No pudiendo contener mis impulsos, guie el dorso de mis dedos hacia sus mejillas sintiendo esa suavidad característica admirando incrédulo la hermosa imagen que se presentaba ante mí mientras mi mano ya se paseaba entretenida por el brazo que me rodeaba. No conforme con eso me acerqué para sentir su respiración en mis labios dejándole un leve beso que resultó más como una caricia.

-¿por qué abusas de los dormidos? Pequeño patán- sonrió hablando aún con los ojos cerrados haciéndome creer que realmente no estaba tan dormido

-cuando despiertas y ves a otra persona normalmente dices buenos días- susurré en forma de reclamo pero no podía contener la sonrisa que me causó su comentario

Lanzando una amplia sonrisa abrió los ojos para removerse logrando abrazarme con más fuerza mientras estiraba todo su cuerpo lanzando un suspiro que indicaba lo bien que habíamos dormido, correspondí el abrazo sonriendo mientras me llenaba del fresco perfume que aún estaba impregnado en su piel

-buenos días- mencionó con una voz ronca separándose un poco para seguir regalandome otra sonrisa mientras me admiraba del mismo modo en el que yo lo hacía hace minutos con él- ¿cómo está la persona más  dormilona del mundo?

-recostado aquí a mi lado

 Mi comentario le sacó una leve risa dejándome admirar más de su belleza, como si fuera algún plan divino, el sol se abrió paso entre las nubes por leves momentos alumbrando parte del dormitorio dejándome apreciar los ojos del castaño que se volvían prácticamente color miel cuando eran iluminados, al sentir molestia se cubrió los ojos con el antebrazo pero su felicidad era tanta que esa sonrisa jamás se borró y en serio me hizo pensar ¿es alguna película o tiene algún privilegio como para lucir tan hermoso incluso después de dormir?

-yo no duermo tanto- al sentir de nuevo el sol ocultarse descubrió sus ojos mirándome con la misma dulzura- desperté hace unas horas pero te vi tan perdido que me quedé a observarte y luego me ganó el sueño

-¿ya ves? Tú eres el pervertido aquí… ¿qué hora es?

-mediodía- dijo mientras se estiraba de nuevo volviendo a acomodarse, al escucharlo abrí los ojos como platos

-¡mediodía! ¡¿Por qué dormimos tanto?!

-porque anoche hicimos el amor y nos dormimos tarde- me besó en las mejillas que ya se tornaban de un rojo intenso ante los recuerdos sacando otra leve risa a Lay- y no conforme con eso me despertaste a la mitad de la madrugada para que siguiéramos en el piano

-¿yo? No… no de seguro fue un sueño ¿el piano? ¿Cómo crees que íbamos a hacerlo en el piano?

-ni siquiera nos levantamos de la cama cuando tomaste el lubricante y me lo diste

-¿yo? ¡No! ¡Soñaste!

-¿quieres que te lo recuerde?- comenzó a hacerme cosquillas en el cuerpo mientras me besaba en el cuello logrando sacarme una enorme carcajada, trataba de alejar sus manos pero las risas no me dejaban actuar tanto, entre forcejeos casi no escuchamos unos ligeros toques en la puerta deteniendo todo movimiento- ¿quién será?

-de seguro es Baek queriendo ver si su plan funcionó. No le voy a abrir

-mmm- se recargó sobre los codos pensando en algún plan sonriéndome con malicia- ¿sabes algo amor? Llevo meses sin jugarle una broma

-¿qué planeas Yixing?- aunque no quería abrir la puerta me llenaba de curiosidad lo que Lay estaba planeando para mi mejor amigo

-bueno, él quiere comprobar si nosotros realmente hicimos algo…iré a abrirle para que lo vea con sus propios ojos

-¿qué…?- los golpes de nuevo sonaron haciéndolo levantarse. No comprendí el plan hasta que lo vi levantar sus calzoncillos para ponérselos en la cabeza, definitivamente tenía que ver la cara de Baek cuando viera a Lay sin nada más que los calzoncillos en la cabeza por lo que me levanté como rayo tomando el saco que Lay llevaba la noche anterior para cubrirme, no podía esperar para ver la cara de Baek

Baek… Baek toca la puerta como desesperado… ese no es Baek

-¡Lay no abras!

Fue muy tarde… Lay ya había abierto la puerta dejándonos ver a una mujer que sostenía una bandeja con dos desayunos mientras leía un mensaje en un sobre amarillo dejándole tiempo a Lay para cerrar la puerta lentamente pero ¡la maldita puerta tenía que rechinar! Así que nuestra invitada levantó la vista del sobre mientras hablaba para encontrarse al mejor pianista en plena desnudez con su ropa interior de sombrero

-Luhan te traje ¡oh por Dios! ¡Zhang Yixing!

-¡AAAHHH! ¡Mamá! ¿Qué haces aquí? ¡Se me olvidó que estabas al lado!

-¡le traje el almuerzo a Luhan! ¡¿No ibas a dormir en lo de Chanyeol?!- la señora miró interrogante a su hijo abriendo los ojos como platos al comprender la situación-  ¡oh por Dios ustedes…! ¡Lay qué estás…!  ¡Es el hijo de…!

-tranquilízate señora- Lay trató de calmar a su madre que sólo lo miraba interrogante y bastante preocupada a diferencia de su hijo que estaba demasiado tranquilo para la situación en la que nos encontrábamos

-¡no me digas señora! ¡Y ponte ropa interior hay gente en los pasillos!- en efecto algunas personas estaban caminando por los pasillos pero nadie se detenía a observar la escena

-ah sí- Lay tomó sus calzoncillos para colocarlos en el lugar indicado, una vez semi vestido sonrió con orgullo hasta que recordó algo bastante importante- mamá no digas nada de lo que viste aquí, luego te explico pero por favor no le digas ni a Yoon ¿de acuerdo?

-pero es que… ¡eres un irrespetuoso!...Lay, es el hijo de…

-¡sé muy bien quién es mamá! Pero lo amo y no le falté el respeto en ningún momento. Por favor deja de preocuparte tanto por algo que quisimos los dos.

La señora aún se veía bastante confundida, Lay al no obtener respuesta por su parte solo reprimió un grito de frustración para hacerse un lado y abrir paso para que su madre pasara con cautela tratando de absorber toda la información que su hijo le había soltado de golpe y no la culpo ya que me encontraba igual, de estar más que avergonzado pasé al shock total porque al señor sin vergüenza se le hizo muy fácil confesar sus sentimientos ante su madre

-Luhan te traje el almuerzo- la señora dejó amablemente la bandeja en la mesada de la cocina sin mirarme tanto a los ojos. Al parecer también se moría de vergüenza, giró para retirarse pero de nuevo fue hacia mi dirección hablando con bastante preocupación- Luhan, por favor disculpa a mi hijo si te faltó al respeto. Tiende a hacer cosas estúpidas la mayoría de las veces ¿esto le va a afectar en su carrera? 

-muchas gracias por el almuerzo y no se preocupe, esto no va a afectar a nadie… disculpe por recibirla de este modo- cubrí un poco mejor mi cuerpo con el saco apenándome el doble por haberle causado esa mala impresión-  Le agradecería que no dijera nada de lo que acaba de ver y nosotros personalmente se lo explicaremos más tarde. Le juro que no pasa nada malo

-no ya sé que no pero- colocó una mano en su frente para luego ir hacia su somnoliento hijo y reclamarle mientras me señalaba, la pobre era un manojo de nervios- ¡está muy bonito para ti! ¡Y todavía se te ocurre poner velas afrodisiacas!

-¿son velas afrodisiacas?- Lay confundido le preguntó a su madre mientras ella asentía con euforia- espera… ¿cómo sabes?

-¡a tu padre le encantaban!

-¡aahh! ¡Mamá no quiero saber eso!

-tienes razón ya estoy hablando demás… bueno. Les dejo su almuerzo, iba a dejarte el tuyo en lo de Chanyeol pero ya que estás aquí… ¡ah sí! Luhan- la señora señaló el sobre que se encontraba en la bandeja- Suho me dejó ese sobre, dice que lo leas cuanto antes. Bueno yo me voy hacia el hospital buenos días

-gracias y disculpe- intrigado tomé el sobre mientras la señora salía de la habitación no sin antes darle un golpe en la cabeza a su hijo

-¡no! Disculpa tú… este pedazo de loco jamás mide sus acciones

-adiós mamá también te quiero

Y por fin la puerta se cerró permitiéndonos dejar salir la carcajada que estábamos conteniendo desde que llegó la madre de Lay, al tranquilizar mis risas volví mi atención hacia el sobre amarillo que tenía un mensaje bastante extraño

“Luhan, léelo cuanto antes. Primero el sobre blanco”

Mi intriga subió a otro nivel por lo que busqué mi ropa interior y una camisa cubriéndome del frío para luego dirigirme hacia la sala sentándome en uno de los sillones aún con el sobre en las manos. Debo confesar que también tenía miedo de abrirlo ya que en el pasado Suho me había dicho varias cosas que comenzaron a afectar mi relación con Lay. Como si hubiera leído mis pensamientos, Lay se acercó depositando un tierno beso en mi mejilla mientras me daba un vaso con jugo de naranja

-ábrelo. Lo leeremos juntos, sea lo que sea estoy aquí para aclararte cualquier malentendido

-gracias, eso en verdad me ayuda mucho- le devolví el beso sintiendo sus labios mojados gracias al jugo, esperé a que se colocara la camisa que llevaba puesta la noche anterior mientras tomaba de mi jugo. Una vez listo tomó un trozo de tocino para masticarlo con alegría causándome una risa que necesitaba para bajar mis nervios- ¿te gusta el tocino?

-me gusta todo lo que se coma- entre risas terminó su bocado quitándome el sobre al ver que yo estaba aplazando el tiempo y lo abrió con cuidado sacando otro sobre blanco con una carta escrita por el mismo Suho además de varios documentos que no tenían sentido para nosotros, extendió las hojas sin borrar la sonrisa mirándome con alegría pura en sus ojos a pesar de la situación en la que nos encontrábamos- ¿lo leo con voz de Suho?

Sabía que estaba haciendo todas esas tonterías para quitarle seriedad al asunto y así evitar que me preocupara demás, sonreí ante las imitaciones que hacía de mi primo asintiendo agradecido por tenerlo aquí en momentos como este

-leamos con voz de Suho

-de acuerdo… querido Luhan, es muy ligera la línea que separa la...- Lay interrumpió sus bromas y la sonrisa que mantenía desapareció al instante, sus ojos pasaron de alegría a confusión recorriendo con rapidez cada línea que Suho había escrito y conforme pasaban los renglones su desconcierto era reflejado por el modo en el que fruncía el ceño. El cambio repentino y el modo de enfrascarse en la lectura me alarmaron por lo que le arrebaté la primera hoja de la carta al notar que la había terminado de leer mientras él se llevaba ambas manos al cabello jalándolo a modo de frustración, su expresión era un completo shock emocional. Definitivamente no me iba a gustar lo que estaba a punto de leer

 

Querido Luhan

Es muy ligera la línea que separa la realidad de la falacia.

La mayoría de las veces no pensamos en el daño que podemos llegar a ocasionar porque solo nos enfocamos en nuestros objetivos y planes no importando con quién arrasemos en el camino, no importa si son personas que jamás nos hicieron daño, no importa si son personas que conocemos de toda la vida… y muchas veces enmascaramos ese daño tras el objetivo de cumplir una promesa bastante fuerte en nuestras vidas, ya sea una promesa que hicimos o una que nos obligaron a hacer.

Sé que fui muy mala persona contigo desde el primer momento en que te vi, incluso fui malo antes de conocerte porque yo tenía un objetivo y ese era destrozarte a toda costa para que dejaras a Yixing. Todo trato, todo saludo, todo encuentro ocasional, todo tiempo a solas fue planeado y debo admitir que no fue fácil al principio ya que eres una persona que como pocas, me abrió las puertas a su vida desde la primera vez que me vio. Poco a poco mi objetivo se deformó a venganza porque te llevaste a la persona que más he amado y estuve a punto de hacer todo para destrozarte el doble pero… pero hoy me demostraste que tienes un increíble valor que pocos tienen y ese es el perdón.

No tengo cómo agradecerte por estar ayudando a mi hermana, lo único que puedo regalarte es mi historia y algo que les va a servir mucho a Yixing y a ti así que por favor aunque te duela, aunque quieras saber qué son los demás papeles y aunque tengas dudas no dejes de leer mi carta y poco a poco todas esas dudas irán tomando bastante sentido.

Luhan, no soy tu primo

 

Notas finales:

:3 qué tal? es el cap más esperado del fic espero se hayan enamorado de Lay...por fiiiiin lo hicieron!!!!!!!!!!!! 

y ya Suho ya va a hablar por fin. en el proximo cap van a conocer su historia 

como dije en face estaba desaparecida porque estuve trabajando en el nuevo fic que va a comenzar en cuanto termine este. Les iré dejando el "trailer" de cada pareja y ojalá lo esperen con la misma emoción que yo. en total voy a trabajar con cinco parejas, van a ir siendo reveladas en las notas de los proximos capitulos de a song for you y aquí va el primer "trailer" (no sé cómo llamarle) 

Sé tú mismo 

Bienvenidos a la preparatoria de Jonseon, la mayoría de los estudiantes se encuentran entre los dieciséis y dieciocho años, son alumnos normales con gustos y vidas correspondientes a su edad. La escuela cuenta con un programa educativo que podría llevarla a la cima de la pirámide escolar dentro de una generación ¿por qué en ese tiempo? Porque como todas las escuelas tiene un fallo. Un grupo de alumnos que ponen al director Lee Soo Man con los nervios de punta, para mejor control educacional colocó a estos cuatro jóvenes  en un grupo donde convivirán con algunos de los mejores promedios de la escuela y estarán a cargo de un nuevo profesor que tiene nuevos proyectos para comenzar a educar a estos jóvenes. ¿será realmente bueno el plan de control educacional del director? ¿realmente estos ocho alumnos problema tienen que aprender a adaptarse a la sociedad? ¿o la siciedad a ellos? tal vez sólo necesiten ser ellos mismos 

1.       “Satansoo” (Kaisoo)- Kyungsoo usa una máscara para quedarse con sus recuerdos, Kai usa una máscara para olvidar esos recuerdos

Mi nombre es Kim Jongin, enemigo por nacimiento de Xiao Luhan. Mis pasatiempos ante las personas son deportes y videojuegos, en mi casa son ver pororo y bailar como loco. Todo era bastante divertido y calmado hasta que mi madre comenzó a salir con un tipo bastante extraño, el problema de esto es que se casaron y ahora tengo que vivir a lado de Do Kyungsoo, mejor conocido como Satansoo. Estoy muerto de miedo y creo que terminaré siendo uno de sus adornos de jardín

-Satansoo…ya que viviremos juntos ¿haces algo los viernes?

-los viernes son viernes de sacrificios… mejor no bajes a la cocina 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).