El equipo se movió al área de descanso que solían visitar, y tras cerciorarse de que se quedaban ellos solos durante un rato ahí, comenzaron a pensar en cómo iban a acceder a la base. Tony disponía de toda la información necesaria sobre datos que habían ido recogiendo diferentes espías sobre cómo debía estar configurada. Parecía un simple edificio militar, pero no era más que una fachada. En realidad esa entrada se debía extender a una amplia base subterránea, similar a la que estaban metidos ahora mismo. Tony ya había revisado todos los datos, y muy a su pesar iba a tener que meterse en otra cueva.
- También hay informes sobre el tipo de seguridad que hay en el exterior, y un infiltrado consiguió recopilar información sobre la estructura interior, pero no pudo avanzar más allá de cierto punto del subterráneo - siguió comentando el genio, a la par que pasaba archivos con la tablet y les iba comentando a todos. - Bruce y yo hemos estado revisando la distribución de las torretas y cámaras de vigilancia, turnos de guardias que parecen llevar...
- Ah, ¿pero que vamos a entrar en modo silencioso? - preguntó Clint mientras observaba a Thor y Bruce.
- Esa es la idea... en un principio - contestó Bruce recolocándose las gafas mientras se reía un poco. - De otra forma no nos daría tiempo a alcanzarles si intentan huir con el bastón. Otra opción sería intentar entrar por una puerta acorazada que hay en el exterior, junto a una presa no muy lejos del edificio. Es ir un poco a ciegas... pero juraría que se trata de alguna compuerta para desplegar elementos de transporte.
- Sí que habéis estado ocupados mientras yo dormía la mona... - comentó Steve un tanto sorprendido.
- Es lo que pasa cuando el cerebro te funciona al doble de velocidad. Que te aburres - explicó Tony de forma cómica mientras movía su dedo índice en torno a su cabeza.
- Y por lo de la compuerta - continuó Bruce. - Parece realmente robusta y grande, yo diría que de unos cinco metros de largo. Seguramente sea de acero o alguna aleación similar. Pero... en fin... - soltó una risotada mientras se inclinaba un poco hacia delante cruzando los brazos - veamos qué puede hacer el otro tío.
- La idea sería dividirnos, que alguien se cuele por esa entrada, y a ser posible tapiarla para que no puedan salir - terminó de contar Tony. - Y si no nos queda otra que salir por ahí de nuevo... - le puso la mano sobre el hombro a Bruce - Hulk, si estás ahí escuchando, sé un buen chico, y prometo recompensarte...
Bruce enarcó una ceja mientras lo observaba un poco avergonzado.
- Entonces los más sigilosos entraremos por la principal, salteando la seguridad - comentó Natasha. - Pero las cámaras nos van a dar bastantes problemas... Tal vez en cuanto nos vean cierren alguna compuerta en la zona inferior.
- También había pensado en ello... - explicó Tony. - Desde luego que había una idea mejor, pero mucho más arriesgada.
- Continúa. En líos más disparatados me habré metido - exclamó la pelirroja.
- Oh no, pensaba usarlo a él - señaló a Thor.
- ¿Yo? - pregunto éste, extrañado.
- Tu hermano - explicó el genio mientras sonreía. - Sus ilusiones son perfectas para misiones de infiltración. Que por cierto, no deberíamos haber empezado esto sin él... - murmuró mientras se frotaba la barbilla.
Thor lo observó durante un momento, sorprendido pero feliz porque hubiera confiado en él de esa forma. Clint, por el contrario, frunció el ceño y se quedó mirándolo bastante perplejo.
- ¿Acaso has perdido la cabeza? ¡Antes preferiría entrar lanzando granadas! - exclamó, mientras se cruzaba de brazos.
- Ya está bien con tanta hostilidad - Thor se puso serio. - Él también quiere el bastón, así que seguramente aceptaría el plan.
- ¿Y quién nos puede asegurar que no simplemente lo cogerá y se irá? ¿O que hará un trato con los soldados de Hydra?
- Bueno, ya se opuso a ellos en el combate - comunicó mientras desviaba la mirada, recordando los hechos. - Vi como un soldado, que parecía ser quién estaba al mando, se acercaba a hablar con él. Temí que le metiera alguna idea extraña en la cabeza, aprovechando su... estado... - frunció el ceño, sintiéndose molesto por recordarlo. - Pero después los encontré enzarzados en combate...
- ¿Cómo era exactamente ese sujeto que apareció ante vosotros con el bastón? - preguntó Steve, interesado.
- Sólo recuerdo como característica algo distintiva que llevaba una máscara morada y un estoque.
- Qué rimbombante - comentó Tony mientras abría los ojos de forma cómica.
- Dice eso un tío que normalmente va con una armadura de color rojo y amarillo chillón - describió Natasha mientras sonreía de medio lado.
- ¡Ey! No es chillón... - se quejó éste de forma teatrera.
- En general aquí todos llevamos unos trajes algo llamativos - puntualizó Steve.
- "Algo" dice... - murmuró Tony mientras no podía evitar contenerse la risa.
El rubio lo encaró mientras sonreía y fruncía el ceño.
- El plan, el plan... - interrumpió Thor mientras señalaba esa... cosa que tenía ahí delante que estaba mostrándoles todo.
- ¡Oh! Sí... Bueno, pero antes de seguir... - miró al asgardiano mientras entrecerraba los ojos, pensativo. - ¿Qué clase de poder tiene ese bastón? Nos has comentado que lo habían modificado. Y estaría bien saber a qué nos enfrentamos.
Thor se quedó un momento en silencio, no sabiendo muy bien cómo describir la situación. Levantó la vista, mirando a todos, mientras se veía algo fastidiado.
- Sí, definitivamente no teníamos que haber empezado a planear esto sin Loki...
-------------------------------------------------------------------------
El asgardiano de menor edad estaba echándose una pequeña siesta, por lo que parecía hasta el momento bastante placentera. Tenía tantas o más ganas que el resto para establecer bien el plan para recuperar ese artefacto, pero primero necesitaba recuperarse del agotamiento físico y mental que conllevaba el utilizar la magia de curación élfica que conocía. Era más poderosa que la asgardiana, pero tenía sus consecuencias.
Mientras parecía que, simplemente estaba teniendo un sueño en blanco, de pronto se encontró en un vasto campo desértico. Era extraño, no parecía el comienzo de alguna de sus pesadillas. Y de alguna forma, él mismo se sentía diferente, como si no estuviera soñando, como si simplemente se encontrara ahí físicamente presente. Dio unos pasos sobre esa tierra, dándose cuenta de que era una cubierta de roca grisácea. Alzó la mirada y vio una superficie enorme de color azulado, con decenas de anillos a su alrededor, y un montón de pequeños mundos rodeándolo. Fue entonces cuando se dio cuenta de que estaba pisando la superficie de una luna de algún planeta.
Cayó en la cuenta de lo que podía estar reviviendo y sintió que su corazón comenzaba a palpitar de una forma demencial. Deseaba con todas sus fuerzas que eso sólo fuera una pesadilla, pero de pronto sintió una presencia en su espalda. Se giró, muy lentamente, intentando ocultar su pánico. Observó la figura del ser que se temía encontrar al voltearse, y muy lentamente levantó la mirada hasta que llegó a unos ojos celestes que brillaban en aquella semi-oscuridad. Intentó tranquilizarse, pero cuando decidió empezar a hablarle, sintió cómo su grave y profunda voz retumbaba y hacía que incluso su alma temblara.
- Ya te advertí... que si no conseguías lo que te había encomendado, terminaría encontrándote allá donde fueras. Y desde luego que no te has molestado demasiado en esconderte...
Loki lo observó con los labios apretados, sin decir ni una palabra. Era incapaz de hablar ni de apartar la mirada de él.
- No pienso volver a darte otra oportunidad. Enmienda tu error, y puede que te perdone. De lo contrario... - de pronto desapareció en frente de sus ojos y lo sintió en su espalda, haciendo que se estremeciera completamente - destruiré todo lo que aprecias, incluido ese planeta. Te proporcionaré tal sufrimiento, ¡que realmente desearás haber permanecido muerto!
Acto seguido notó cómo le clavaba algo en el pecho y atravesaba su corazón. Se levantó de un salto sobre la cama. Estaba completamente alterado, sudando por el pánico, e hiperventilando muy fuertemente. Se quedó así un par de minutos, intentando tranquilizarse, mientras se agarraba la cabeza con ambas manos. En ese momento empezó a echar de menos las pesadillas. Aquello que acababa de experimentar era completamente real, un tipo de comunicación que ya había realizado antes. Simplemente desconocía que pudiera llevarse a cabo mientras estaba dormido.
Se levantó de la cama cuando pudo tranquilizarse un poco y entró al baño. Se refresco la acalorada cara y se quedó observando su reflejo en el espejo durante unos segundos. Aún estaba un poco en shock, y al observar su propio rostro dominado por el miedo, se puso incluso más nervioso.
Tras acicalarse e intentar adoptar una expresión apática como siempre, salió de la habitación para enterarse de cómo habían ido las cosas. Seguía algo cansado, pero en ese momento lo último que deseaba era quedarse sólo.
- Ese maldito ser... - levantó un momento su mano para llevársela a la cara, dándose cuenta de que estaba temblando. Tenía una mirada totalmente tétrica y demencial - Tengo que tranquilizarme.... Recuperaré este artefacto.
Llegó a la puerta y se quedó un momento escuchando la conversación de su interior. Intuyó que estaban hablando de él.
- Parece ser que ahora ese arma tiene el poder de extraer los sentimientos y pensamientos más profundamente enterrados en las mentes de sus víctimas. Ese humano planeaba utilizarlo para que nos volviéramos los unos contra los otros - continuó explicando Thor.
- Oh vaya, de nuevo la misma estrategia - murmuró Clint, sonriendo sarcásticamente.
- Está claro que con un poder u otro, tenemos que tener cuidado - advirtió Natasha.
- Aunque parece que sus efectos ahora no duran mucho - comentó Bruce. - ¿Qué fue exactamente lo qué... - empezó a preguntar, algo dubitativo.
- Eso mismo - continuó Tony. - Cuando lo trajiste, Loki parecía devastado, pero no tenía apenas signos de combate - levantó la mano y se dio una palmada sobre su reactor. - Salvo lo del impacto del pecho.
- Está claro que si hubiera intentado matarte, hubiera terminado con algún golpe... - murmuró Clint.
Thor levantó la mirada y lo volvió a mirar enfurecido, para después soltar una risa y girar la cabeza. En ese momento se dio cuenta de que ninguno de esos humanos conocía mínimamente a su hermano.
- Sé que todos vosotros le guardáis bastante rencor, - empezó a comentar de forma extraordinariamente seria - y no os voy a culpar por ello, pero... - desvió la mirada. - Mi hermano ha pasado por muy malos momentos. Yo realmente... - apretó un poco sus labios mientras se dibujaba una expresión de tristeza en su rostro, que conmocionó a todos los presentes - no pensé que hubiera sufrido tanto hasta que esa cosa le impactó, y entonces...
En ese momento se escuchó la puerta abriéndose fuertemente, y apareció el jotun con una expresión llena de ira. La cerró también con fuerza y se quedó observando a su hermano. Éste se giró, sorprendido.
- Loki... Justo ahor-
- Tú... ¿Qué... pretendes...? - le preguntó, con un tono de voz grave y amenazante, que sorprendió al rubio.
Thor se levantó de su sitio y se aproximó hacia él, mientras el resto del equipo observaba la escena sin saber muy bien cómo reaccionar. Algunos se medio levantaron, sintiendo el aura de profundo peligro que emanaba en ese momento el moreno.
- Sólo intentaba hacer que simpatizaran un poco contigo. No me agrada estar en medio de toda esta hostilidad.
- ¿Y crees que eso iba a hacer que me sintiera mejor? - preguntó, iracundo. - ¡Prefiero que me odien a que se dediquen a mirarme con lástima! - gritó de repente, casi con un tono gutural, mientras fruncía más el ceño.
- Oye Loki...
- ¡CÁLLATE! - en ese momento sintió que su corazón se contraía dolorosamente, a la par que comenzaba a latir con fuerza. - ¡Deja de decidir por tu cuenta lo que es mejor o no para mí! ¡Yo soy el único que puedo decidir sobre ello! ¡Y no necesito su estúpida simpatía! - les señaló estirando el brazo.- ¡Ni la de nadie!
Thor de pronto se mostró bastante dolido y desvió la mirada. Loki volvió a sentir otra punzada dolorosa en su pecho, mientras no dejaba de observarlo. Estaba entrando en pánico, y sentía cómo poco a poco dejaba de ser dueño de sus palabras. Parecía que su mente salía de su cuerpo y ya no era él quién estaba ahí, soltando maldiciones de forma tan mezquina.
- ¡Tú! - señaló al asgardiano. - Tú tienes la culpa de todo... - murmuró más bajo en un tétrico tono, mientras abría los ojos, confuso y desorientado. - Si no fuera por ti, ¡nada de esto me habría pasado! ¡Tú eres el culpable de todo!
El rubio dejó el dolor que le estaban causando esas palabras de lado e intentó acercarse a él.
- Loki, por favor, cálmate - le dijo con un tono tranquilo mientras intentaba agarrarle del brazo.
Éste se estremeció en cuanto notó el tacto y de forma totalmente instintiva, como si estuviera en un estado de hiperalerta, le propinó un puñetazo en un pómulo. Se tambaleó y retrocedió un par de pasos. El resto del equipo se disponía a levantarse para reprender al menor de los asgardianos, pero se quedaron un poco consternados al observar cómo este, de pronto, empezaba a temblar, se tambaleaba y caía al suelo.
- ¡Loki!
Thor se acercó hacia él, rápidamente, agarrándolo antes de que sufriera el golpe, y lo observó preocupado, quedándose completamente en shock. Tenía los ojos entrecerrados y perdidos, como mirando a la nada, mientras parecía que le costaba respirar, movía la cabeza de un lado a otro y sufría espasmos en sus extremidades. Se estaba poniendo aún más pálido y frío, y había comenzado a sudar muchísimo. No sabía qué le ocurría, por lo que comenzó a ponerse realmente nervioso al verlo así.
Bruce se aproximó rápidamente a observarlo. Le puso la mano sobre el pecho, sintiendo cómo su corazón palpitaba fuertemente a gran velocidad y ritmo constante. Se dio cuenta de la situación en seguida, e intentó tranquilizar al asgardiano.
- Sé que da la impresión de ser algo grave, pero sólo es un ataque de ansiedad. A veces... se desarrolla de esta forma... Ayúdame a moverlo al sofá - observó al resto de individuos que ahora estaban de pie, todos alrededor. - Vosotros quedaos en la mesa. Cuantas menos personas estemos alrededor, mejor - comunicó seriamente.
Lo movieron y Bruce indicó de mientras a Tony que trajera un paño caliente. Thor se sentó junto a él, agarrándolo para que no se cayera, a la par que lo seguía mirando bastante preocupado.
- Ah, rayos... - murmuró mientras le retiraba el pelo de la cara. - Esto cada vez va a peor - le comentó a Bruce, ya que parecía que él entendía de estos asuntos.
- ¿Lleva así desde que le impactó el bastón? - preguntó, mientras Tony volvía y empezaba a secarle un poco el frío sudor de la cara. Estaban los tres bastante serios.
- ... En realidad... lleva comportándose así desde que aparecí por la torre. Pero ahora se ha acentuado.
- ... - el genio se frotó la barbilla. - Entiendo...
- ¿Debería... alejarme? - preguntó, bastante entristecido.
- Permitidme que interrumpa, pero no creo que eso vaya a mejorar su estado - comentó Tony, observándolo preocupado, mientras seguía retirándole el sudor.
Parecía que Loki empezaba a volver en sí, aunque aún tenía los ojos entrecerrados y se veía realmente desorientado. Miró un momento a Thor y se apoyó sobre él, cerrando los ojos.
- ¿Loki?
Visto que no despertaba, decidió dejarlo así. Soltó un suspiro mientras se revolvía la melena.
- Ojalá supiera qué le ocurre.
- Parecen signos de algún tipo de estrés postraumático... Por desgracia sé lo que es eso - explicó mientras se frotaba la nuca y cerraba los ojos. - También fue lo mismo por lo que te estuve tratando a ti, como pude... - miró a Tony. - Si ha habido algo por lo que lo haya pasado mal en el pasado, y ya estaba teniendo comportamientos de este estilo debido a ello, ese arma ha podido acentuarlo más... Es la única explicación que le encuentro. Tú debes estar relacionado con ello, pero... - soltó un suspiro. - En estos momentos realmente necesitas a alguien, o terminas... pegándote un tiro.
El ingeniero lo observó un momento, algo entristecido. Si aquella historia era cierta, hubiera deseado conocerlo antes para evitar que llegara a ese extremo. Lo debía haber pasado fatal.
- Ahora tampoco hay mucho más que podamos hacer. Esperemos que al despertarse se encuentre mejor.
Thor lo dejó tumbado en el sofá, le puso una manta por encima y cogió una silla para sentarse él al lado.
- Volved con los demás, ya me quedo yo con él. Gracias por la ayuda - les comunicó a los científicos.
Esperó pacientemente a que se despertara mientras le acariciaba el pelo. Tony y Bruce se sentaron a la mesa, y se hizo un incomodísimo silencio entre ellos. Nadie dejaba de darle vueltas a lo que acababa de ocurrir. Sus trabajos eran bastante estresantes, y en más de una ocasión habían sufrido algún problema relacionado con la ansiedad, pero no esperaban ser testigos de que algo así le ocurriera a ese sujeto.
- En el fondo es más humano de lo que parece - terminó comentando Tony tras dejar de dar vueltas con el móvil.
- Yo sólo digo que... a veces no eres consciente de lo que haces - murmuró Bruce mientras sonreía de medio lado. - Y creedme que sé muy bien de lo que hablo.
- Y a veces terminas haciendo verdaderas barbaridades - interrumpió Natasha con una expresión un poco sombría.
Se volvieron a quedar en silencio.
- Pff... - Clint echó la cabeza hacia atrás. - ¿En serio vais a empezar a intentar entender a ese chalado?
- Antes era nuestro enemigo, así que nuestro deber era simplemente reducirlo, independientemente de sus motivos - explicó Steve. - Pero está claro que la situación ha cambiado - dirigió la mirada hacia el sofá, pensativo. - Detrás de cada acción siempre hay una explicación.
- Y una idea que en principio no es mala puede desencadenar consecuencias desastrosas - comentó Tony.
- Sí. Como cuando creas algún arma para proteger un país y termina siendo utilizada para la guerra - interrumpió Clint mirando al ingeniero con burla.
- Bueno, bueno... - éste se cruzó de brazos, algo molesto, mientras desviaba la mirada.
- Me pregunto qué habrá pasado entre esos dos... - murmuró Steve, mientras seguía observándolos, interesado y preocupado.
Al final dejaron ese tema de lado y volvieron a revisar los archivos de la base subterránea de Hydra. Se pasaban la tablet entre ellos a ratos, mientras se mantenían en absoluto silencio. A ratos miraban a Thor. Al final, fue Steve quién se aventuró a hablar.
- Entonces no vamos a poder contar con Loki para lo de las cámaras.
- Ya, es un fastidio... - murmuró Tony.
- ¿Tú no usaste un dispositivo para cambiarte los rasgos faciales? - preguntó Clint a Natasha. - Podría venirnos bien ahora.
La pelirroja suspiró.
- Aquel que tenía se estropeó. Y son dispositivos demasiado especializados como para que vayan a tener uno aquí.
- Así que un dispositivo facial... - murmuró Tony mientras se frotaba la barbilla y entrecerraba los ojos. - Si pudieras conseguirme algún esquema a lo mejor puedo fabricarlo.
- ¿Y eso cuánto te llevaría? Creo que es mejor pensar en otra cosa - concluyó la espía.
- Si supiéramos dónde está la sala de vigilancia... Simplemente nos podríamos colar por la ventana más próxima - comentó Clint.
- ¿Y si resulta que está abajo, en el búnker? - preguntó Bruce.
- Ay madre mía, qué jaleo... - se quejó Tony mientras se frotaba el pelo.
Tras haber estado un buen rato totalmente quieto, Thor comenzó a sentir que Loki se movía en el sofá. Estaba escuchando más o menos la conversación, y decidió interrumpir.
- Si seguís pensando en infiltraros mañana, yo me quedaré aquí con mi hermano - comunicó, seriamente.
- Como empecéis otra vez a discutir sobre si nos vamos o esperamos, me va a dar algo... - murmuró Tony.
De pronto el jotun comenzó a balbucear algo, aún medio dormido.
- No... Yo voy a...
Thor se acercó hacia él, con expresión de preocupación, mientras le acariciaba la mejilla. Loki terminó de poder abrir los ojos.
- Yo voy a ir - susurró con total seguridad.
- No te fuerces, Lok-
- He dicho que voy a ir - rectificó con voz calmada, mientras se levantaba del sofá. Parecía un poco en trance.
Se quedó de pie durante unos segundos, mirando a la nada, hasta que decidió voltearse para encarar al resto de individuos. Tenía un rostro totalmente inexpresivo, casi parecía un muñeco. Tras observarlos durante un instante, descendió la mirada y se giró hacia Thor.
- Contad conmigo... Ahora me voy a la habitación.
Thor seguía observándolo, fijamente, entendiendo que debía sentirse realmente incómodo.
- De acuerdo, después te llevaré la cena.
Hizo un amago de darse la vuelta para ir con los demás, ya que pensaba que Loki se dirigiría directamente hacia la puerta, pero de pronto notó que le agarraba de la muñeca. Se giró y lo observó, con ese rostro apático de nuevo.
- Ven... - susurró de forma casi imperceptible.
- ¿Qué? - preguntó el dios del trueno, ya que no había alcanzado a oírlo.
Loki levantó la mirada lentamente, hasta que llegó a esas profundas orbes azules. Salió un poco del trance, abriendo los ojos. Observó la mano con la que estaba agarrando el brazo de Thor, y lo soltó.
- Oh, nada... - murmuró mientras se empezaba a ver algo alterado.
Volvió a adoptar una actitud apática y se alejó de ahí. Todos se quedaron en silencio, siguiéndolo con la mirada, cuando lo vieron dirigirse a la salida. Thor volvió a la mesa e intentaron seguir con el plan, esperando que al día siguiente el moreno volviera a encontrarse bien y pudiera realizar su parte. El dios del trueno había decidido quedarse para enterarse de todo, pero realmente no parecía que su cabeza estuviera ahí, para nada. Tony se dio cuenta y al final terminó dándole cuerda.
- Deja de pensártelo tanto y ve con él. Mañana os contaremos los detalles - le dijo mientras le daba unas palmaditas en la espalda.
El rubio asintió, algo avergonzado, y se dirigió a los dormitorios. Entró a su habitación y ahí se encontró a su hermano, hecho un ovillo con la almohada, temblando en una esquina de la cama. Se sentó en el colchón y se acercó lentamente para besarlo en la frente, intentando no asustarlo. Éste separó el rostro de la almohada y Thor pudo percibir que lo observaba con la mirada totalmente perdida. Se tumbó junto a él, a la par que seguía mirándolo con una expresión de tristeza. Lo rodeó con sus brazos y empezó a acariciarle el rostro y el cabello.
- Loki... - lo llamó, a lo que este terminó reaccionando y volvió el brillo a sus ojos.
Observó al rubio un momento, y levantó sus puños en torno a su pecho. Realmente parecía que había vuelto a ser él. Parecía que iba a intentar empujarlo, pero en vez de ello se encorvó y dejó caer su cabeza sobre ese amplio pecho. Acto seguido, volvió a encarar al rubio, con esa desvalida mirada. Le temblaban las manos.
- Bésame - le ordenó, casi en un susurro.
Thor no titubeó ni un segundo y lo rodeó con sus fuertes brazos mientras unía los labios de ambos tiernamente. Después lo abrazó de nuevo, dejando caer su cabeza contra su pecho, a la par que seguía acariciándole el cabello.
---------------------------------------------
Los científicos volvieron a quedarse solos en la sala de descanso cuando el resto del equipo se retiró a los dormitorios.
- ¿Seguro que no prefieres dormir en una cama? Mañana vamos a necesitar estar totalmente descansados, y dormir encima mío debe ser súper incómodo - comentó Bruce mientras sonreía y se recolocaba las gafas.
- Nah... - Tony desvió la mirada, despreocupadamente, como si todo aquello no le importara. - Prefiero quedarme contigo viendo películas.
El físico soltó un suspiro e hizo realidad sus peticiones, de tal forma que terminaron otra vez en aquel sofá. Tony lo tanteó durante un momento, pensativo. Se veía algo preocupado. Entonces encaró a Bruce, y sonrió.
- Me ha encantado cómo te has portado antes con ese diablillo - se acercó con aire sensual y le dio un beso en los labios a la par que acariciaba su mejilla. - Definitivamente eres un médico muy sexy.
Dicho eso, se subió encima suyo lentamente, dejando a Bruce tumbado sobre el sofá. Éste empezó a ponerse algo nervioso porque estuviera colgándose de él nuevamente de esa forma. Pero entonces Tony comenzó a abrazarlo cariñosamente, y se le quitaron los nervios.
- Realmente... parece que le has cogido cariño - comentó mientras se recolocaba las gafas.
Tony desvió la mirada y suspiró mientras se alborotaba un poco el pelo, fastidiado.
- Supongo que tienes razón... - terminó confesando.
- ¿Qué fue lo que pasó exactamente antes de que llegara a la torre? Parecía que... - desvió la mirada, nervioso, y se recolocó las gafas. - Bueno... en algunos momentos... me di cuenta de que hasta parecía que... flirteabais entre vosotros.
En ese momento Tony se separó de él, totalmente sorprendido. Bruce vio perfectamente que comenzaba a ponerse muy nervioso.
- Yo... em... - realmente parecía entrado en pánico.
- Me comentaste que no te había hecho nada malo, pero algo como eso... supongo que no es nada malo - observó que Tony se apoyaba sobre él mientras temblaba un poco. - Está bien, no voy a enfadarme por algo... así.
- ¡Pero... - Tony había vuelto a incorporarse y ahora lo estaba mirando a los ojos muy fijamente con una expresión agónica.
- Además eres bisexual, ¿no? - preguntó mientras desviaba la mirada. Intentaría no parecerlo, pero realmente se notaba que había empezado a estar un poco molesto.
- Aaah Bruce... No digas eso como si fuera por ahí acostándome con la primera persona que encuentre - murmuró mientras hacía un poco un puchero, agarrándole fuertemente de la camisa.
- ...
- Está bien, te contaré qué pasó... - se incorporó y dejó de estar encima de él para sentarse en el sofá. - Loki llegó a la torre con la apariencia de Pepper mientras yo estaba... bueno... - miró a Bruce por el rabillo del ojo, avergonzado. - Después de que te fuiste al congreso, estuve...
- Volviste a recaer - interrumpió el físico con seriedad. Tony no respondió nada pero parecía que había dado en el clavo, por lo que suspiró y se sintió un poco mal consigo mismo. - Sabía que aún era demasiado pronto para dejarte sólo... - se disculpó mientras se cruzaba de brazos.
- El asunto es que... no me encontraba muy bien, y él se me echó encima con ese aspecto - se agarró la cabeza con ambas manos, abatido, recordando aquello. - Una broma muy pesada por su parte. Yo creí que era un sueño, y cuando deshizo la ilusión, me desquité con él. Al día siguiente, al darme cuenta de que todo era real... - soltó una risilla - casi me da un infarto - Se giró y vio que Bruce lo seguía observando muy seriamente. - El punto es que después de aquello recordé que... bueno... - se frotó el cuello, nervioso. - Cuando era joven tuve algún novio. Sólo que con el paso de los años, empecé a temer la imagen que fuera a dar por ello. No me importaba que todos me vieran como un playboy, pero ese asunto se me atravesó en la cabeza, y empecé a estar únicamente con mujeres, porque era más cómodo y fácil - se giró hacia Bruce. - Pero siempre he sido bisexual.
Bruce se quedó durante unos segundos pensativo, mientras fruncía el ceño.
- ¿Seguro que ese asgardiano no te hizo daño?
- Haha... ¿Eso es lo único que te importa de todo lo que te he contado? - preguntó el ingeniero, sorprendido y nervioso porque en cualquier momento perdiera la calma.
- Sí... - contestó mientras cerraba los ojos.
- No, no me hizo nada - le dijo mientras se acercaba de nuevo a él y le acariciaba la mejilla. Prefirió obviar aquella noche que casi lo viola en la mesa del minibar, con tal de conservar su tranquilidad mental.
- Bien... - parece que Bruce finalmente empezó a tranquilizarse un poco. Miró a Tony con esos cálidos ojos marrones - Es sólo que... ese asgardiano es... bueno... - se recolocó las gafas. - Tan alto y atractivo. Y estoy seguro de que el resto de hombres con los que estuviste también lo eran. Yo no tengo ninguna cualidad física que destaque, y no soy más que un científico aburrido. ¿Estás seguro de que soy... de tu tipo? - preguntó, bastante avergonzado.
- Bruce... - lo mencionó éste, con tono amenazante, ya que había vuelto a empezar con esa manía de menospreciarse.
- ... - desvió la mirada, incómodo.
- ¿En serio quieres que te lo diga?
- ... - miró a Tony, totalmente avergonzado, sin saber muy bien a qué se refería. - ¿Decir el qué?
El ingeniero se acercó a su oído y le comentó con una voz sensual.
- Que me pones un montón.
Notó cómo el físico se estremecía al escuchar aquello y se separó muy lentamente de su oído para encararlo. Esas orbes color ámbar lo observaban totalmente nerviosas y confusas. Se acercó con sutileza a sus labios y comenzó a besarlo tiernamente, sintiendo cómo se sofocaba con ello. Dirigió dos de sus dedos a la comisura de los labios de Bruce, a la par que lamía sus labios y lo miraba de nuevo a los ojos.
- Abre la boca - le pidió con un tono de voz dominado por el deseo.
Volvió a juntarse con él y notó cómo el físico dejaba de poner resistencia. Exploró esa cálida cavidad mientras lo abrazaba y notaba que su cuerpo se estremecía. Se separó un momento, intentando recuperar el aire, ya que se había empezado a acalorar bastante.
- Mira... - agarró una de las muñecas de Bruce y la llevó a su entrepierna, para que sintiera directamente que había comenzado a excitarse mientras lo besaba.
El físico apartó la mano, nervioso, al notar aquello. Tony se acercó y le dio un beso en la frente. En ese momento mostró una expresión algo entristecida, que Bruce llegó a observar. La verdad era que aunque él sí fuera bisexual, Bruce jamás había estado con un hombre, y no sabía cómo iba a reaccionar.
- ¿Quieres... que me quite de encima? - le preguntó, algo abatido.
Bruce lo notó y lo envolvió gentilmente con sus brazos.
- No... Está bien. Quédate así.
El ingeniero soltó un suspiro y se acomodó encima de él, dejando sus cuerpos más o menos a la misma altura. Bruce sentía perfectamente el duro miembro de Tony chocando sobre su ingle.
- Tony...
- ¿Hm?
- Estás...
- No pasa nada, en seguida se bajará.
Le dio un beso en la mejilla y volvió a quedarse en esa posición, totalmente quieto. Aún así notaba que Bruce estaba muy tenso, y no dejaba de respirar fuertemente. Era incapaz de tranquilizarse en ese estado.
- Se ha puesto así... por mi... - pensó para sí mismo, mientras sentía que su corazón no se estaba quieto. - Maldita sea... - aquella opresión que sentía en su pierna no desaparecía y cada vez se estaba acalorando más y más.
Observó el rostro de Tony, con los ojos cerrados pero sudando levemente por el calentón que llevaba encima. Estaba intentando tranquilizarse con todas sus fuerzas, pero Bruce ya había notado que era en vano.
- Tony... - al final desistió y lo llamó, a lo que este levantó la cabeza y se encontró con que ahora era Bruce quien había comenzado a besarlo de forma apasionada. Aprisionó su lengua con ansia mientras notaba la encendida entrepierna del ingeniero chocar contra la suya. Al final Tony se sorprendió al notar que aquello comenzaba a ponerse realmente caliente.
- ¡Woah! - pensó para sí mismo mientras se separaba y observaba su pantalón. - Estás...
- Sí... - confesó este mientras se recolocaba las gafas e intentaba respirar calmadamente.
Tony se lanzó a abrazarlo, totalmente feliz, y comenzó a bromear un poco.
- El otro tío no saldrá también cuando te excitas, ¿no? Porque sería un problemón.
- Excitar... - Bruce sintió que su cara comenzaba a arder al escuchar esa palabra. - No, tranquilo. Sólo es cuando me enfado.
- Entonces intentaré no hacer nada que te cabree.
- No creo que pudieras... - murmuró mientras sonreía y se sonrojaba un poco.
- Tan adorable... - pensó para sí el ingeniero, a la par que notaba que su cabeza estaba ardiendo y su corazón se le iba a salir del pecho en cualquier momento. - Entonces... Deja que te haga pasar un buen rato.
- ¿Eh?
Observó cómo Tony le desabrochaba el pantalón y liberaba su excitado miembro. Su propietario se sentía realmente avergonzado así que apartó la mirada durante un momento, mientras sentía que esas cálidas manos comenzaban a toquetearlo. Su corazón seguía palpitando fuertemente. De pronto, notó algo realmente caliente y húmedo envolver esa parte de su cuerpo. Se encorvó, aturdido, y vio que Tony había empezado a introducírselo en su boca.
- Oye... No tienes que hacer eso - le comentó el físico, algo abrumado, mientras le agarraba la cabeza.
Éste se separó, y tras deslizar su lengua a lo largo del miembro, sonrió y le contesto.
- Lo hago porque quiero hacerlo.
Bruce suspiró y desistió en seguir resistiéndose. Disfrutó del servicio que le estaba dando, mientras intentaba controlar su respiración, lo cual era complicado porque se sentía increíble. De pronto, un montón de incógnitas empezaron a invadir su mente. ¿Por qué se sentía tan bien? ¿Se lo habría hecho a muchos hombres? ¿A cuántos? ¿También había hecho esto con aquel asgardiano? Totalmente abrumado por el sentimiento de opresión que tenía en su pecho, se incorporó y agarró a Tony fuertemente del cuello de la camiseta, separándolo de él. Éste se quedó sorprendido, observando el rostro molesto del físico.
- ¿No se siente bien? - preguntó, algo descolocado porque eso de ahí abajo estaba duro como una roca.
- Tsk...
Bruce se acercó y comenzó a palpar la entrepierna del ingeniero, que soltó un suspiro porque llevaba ya un rato bastante encendido. El físico le desabrochó los pantalones como había hecho con él y comenzó a masturbarlo mientras dejaba algún beso sobre su cuello. Finalmente llegó a su oído y le susurró.
- No es justo si soy el único que pasa un buen rato.
Tony lo apartó de él y lo empujó sobre el sofá, observando que estaba totalmente abochornado. Se fijó en que observaba los miembros excitados de ambos y el ingeniero decidió hacer algo al respecto.
- Está bien... - aceptó, sintiendo que no podía aguantar más esa situación. - Maldita sea... Deja de provocarme tanto...
Se acercó hacia él, haciendo chocar sus dos miembros, y comenzó a masturbarlos. Bruce también extendió su mano para ayudar. Ambos comenzaron a sudar y a estremecerse sumidos en esa oleada de placer. El físico podía sentir las gotas de sudor caer de la frente de Tony sobre su rostro, ya que estaban totalmente pegados. Hizo un amago de acercarse para besarlo, pero Tony se apartó.
- Espera...
Se acercó rápidamente a la mesa para alcanzar una botella de agua y hacer unas gárgaras. Nada más terminar, se abalanzó sobre los labios de Bruce y lo besó con ansia.
- No hacía falta... - empezó a comentar éste.
Tony aprovechó la oportunidad para introducir su lengua, a la par que continuaba tocando a ambos. Terminó retirándole las gafas a Bruce, porque notaba que estorbaban, y no tardaron demasiado en hallarse totalmente extasiados y a punto de terminar. En ese momento les daba igual que estuvieran haciendo aquello en una zona pública donde cualquiera podía entrar y verlos. Sus mentes no pensaban en otra cosa más que en darse placer mutuamente. Tony empezó a sentir que no le faltaba mucho y se separó de los labios de Bruce para dejar caer su cabeza sobre su cuello. Podía escuchar los jadeos de su compañero a esa distancia, aunque era incapaz de distinguir quién de los dos estaba más alterado.
- Bruce - lo mencionó, con un tono de voz sofocado, mientras empezaba a tocar únicamente el miembro de su compañero, ya que él estaba a punto de explotar.
Aún así, el físico se dio cuenta, y dirigió su mano hacia el glande de Tony, acariciándolo suavemente con sus dedos. Notó cómo éste se tensaba y soltaba un gemido, y de pronto su mano se halló totalmente empapada. Con el estremecimiento, sus dedos se deslizaron fuertemente sobre el miembro de Bruce, pillando también a éste por sorpresa, que no pudo aguantarlo más tampoco. Tony sintió cómo ese cuerpo que estaba bajo él sufría un espasmo mientras Bruce echaba la cabeza hacia atrás, contra el sofá, y acallaba un gemido apretándose los labios. El ingeniero sintió el cálido néctar sobre su mano y se dejó caer sobre ese cuerpo, mientras ambos recuperaban sus agitadas respiraciones. Bruce se llevó el brazo que tenía libre sobre su cara, tapándosela por la vergüenza.
- ¿Cómo ha estado? - preguntó Tony mientras se lo retiraba y le daba un beso.
- Bien... Pero... ¿ahora? - levantó su mano manchada y observó que también se habían ensuciado algo la ropa.
- Aaah... Al final sí que vamos a tener que ir a la habitación...