El camino fue calmado. Entre canciones y leves pláticas se fueron las horas. En ningún momento del camino JongHyun me dijo a dónde íbamos y yo… yo no tenía ni idea.
Esto hasta me asustaba.
-Jonghyunnie… ¿A dónde vamos? – cuestione observando algo nervioso el paisaje que me daba la ventana.
Él a cambio solo rio, y de un momento a otro su mano se encontró con la mía.
-No creí que tardarías tanto en preguntarme jaja y lo lamento gatito pero es sorpresa.
¡Genial, aún a estas alturas era sorpresa!
-Ah, okey.- suspire derrotado recargándome en el vidrio de la ventana.
-No te enojes, sé que te gustará. –escuche lo suave que había salido su voz como también las leves caricias que le daba a mi mano. Provocando que mis labios formaran una leve sonrisa.
~~~
-Bummie… Key…
¿JongHyun?
-Gatito, despierta.- los leves zarandeos que su mano ejercía sobre mi hombro, además de su dulce voz, me despertó. Abrí los ojos de golpe sorprendiéndome de ver a JongHyun tan cerca de mí. Estaba por fuera del auto por lo que podía suponer que ya habíamos llegado.
¿Cuándo me quede dormido?
Bajo su atenta mirada me talle los ojos sintiendo como algo caía de mis hombros, su chaqueta. En eso un muy conocido olor capto mis fosas nasales.
-Estamos en… ¿el mar? –cuestione saliendo de mi trance y mirando por los vidrios del auto. ¡Sí! Era el mar.
Salí del auto con algo de torpeza. Estaba sorprendido. Hace mucho que no iba al mar. Era, era hermoso.
-Sorpresa, ¿Te gusta? – cuestiono cerca de mi oído mientras me abrazaba por la espalda.
Sonreí mientras asentía. La vista que tenía frente a mí era única.
-Gracias, es hermoso. – dije acercando mi cabeza a su hombro, no dudando en recargarme en el.
- ¿Qué te parece si vamos a desempacar y luego vamos a dar un paseo por la playa?
-¿Desempacar? – cuestione mirando hacia todos lados. No se miraba ningún hotel ni nada por el estilo. De hecho pudiera jurar que éramos los únicos aquí.
En eso su risa me volvió a sacar de onda.
-Ven.- Me dijo mientras me ayudaba a subir de nuevo al auto. Una vez él arriba comenzó a conducir. – sabes, desde pequeño siempre me había gustado los lugares espaciosos y privados. – comenzó a hablar calmadamente. – por eso decidí comprar eso. – dijo señalando a lo lejos. Mis ojos por poco salen de su lugar al mirar una linda y grande casa frente a nosotros.
JongHyun tenía una casa en la playa. ¡Y era hermosa!
Una vez ya más cerca de la casa estaciono el auto y nos bajamos.
-Wow, es hermosa.- dije aun con la sorpresa, casi tropezando con la arena.
-Me alegra que te guste. Este es como mi escondite de descanso. Ahora también tuyo.- hablo caminando enseguida de mi con las dos maletas en sus manos. –Ven.
Observando hacia todos lados lo seguí dentro de la casa.
¡Enserio que era hermosa!
Se miraba muy juvenil y fresca. Siendo decorada con muebles muy sencillos pero elegantes. Además de las paredes… ¡La mayoría eran de puro vidrio! Dando una hermosa vista hacia la playa.
-Los cuartos están en el segundo piso, vamos. – ah sí, también era de segundo piso. ¿Ya mencione que era enorme?
-¿Jong, esta es solo tu casa? – cuestione al ver la variedad de habitaciones.
-Sí, bueno, hay veces que invito a mis padres pero por lo regular solo yo estoy aquí en vacaciones.- Por un momento se detuvo observando dos puertas.
Lo mire algo extrañando notando ese hecho.
-¿Todo bien?
-¿Eh? Si.- dejo su maleta cerca de una puerta y sin más abrió la otra. – esta es tu habitación. – dijo adentrando al cuarto y dejando la maleta en la cama.
-Wow, no me importaría vivir aquí para siempre.- dije asombrado ante la bella habitación.
Recorrí todo con la mirada hasta dar con el pequeño balcón.
-Mi habitación es la de enseguida. –soltó algo nervioso. De cierta manera me sentía algo triste por tener mi propia habitación. No lo sé. Yo pensaba que al ser… ¡ha! Si aún no somos nada, creo que es entendible.
-Gracias, puppy.- solté mientras caminaba hacia él y lo abrazaba. Besando tiernamente su mejilla. – Es hermoso, enserio que la sorpresa valió toda la pena.
-Jaja lo bueno es que pudo mantenerse como sorpresa. – Sonrió – no sabes cuantas veces estuve a punto de decirte a dónde íbamos jaja Eres persistente.- dijo acariciando mi mejilla para después unir nuestros labios.
Sentir sus manos sobre mis caderas, sus labios sobre los míos era malditamente placentero.
En poco tiempo el beso se había vuelto algo demandante, sintiendo de la nada su húmeda lengua sobre mis labios, los cuales no tarde en abrir dejando que su lengua jugara con la mía. Poco a poco su cuerpo caminaba más al mío haciéndome retroceder hasta que la orilla de la cama nos volvió a la realidad.
-¿Va-vamos a la playa? – solté algo apenado y agitado al separarme del beso.
Él estaba igual que yo solo que lo aparentaba mejor.
-Claro, cámbiate. Te daré tu espacio.- dijo para después acariciar mi cabello y salir de la habitación cerrando la puerta tras de él.
¿Qué rayos fue eso?
Lentamente me acosté sobre la cama sintiendo como mi corazón se movía demasiado rápido. Como si en cualquier momento saldría de mi pecho. –Cálmate Key, es solo el primer día y tú ya te alborotas por eso.
Me auto convencí rodando en la cama para después tomar mi maleta y dejarla sobre de la cama.
Busque mi traje de baño o algo así. Lo bueno es que había traído de todo tipo de ropa. Algo muy inteligente de mi parte.
Mi “traje de baño” consistía en un short amarillo, algo corto, y en una playera blanca la cual me quedan algo grande. En menos de cinco minutos me cambie. Mirándome detenidamente en el espejo de piso que había en la habitación.
~ toc toc~
-Pase.
Me sentía raro diciendo eso en una casa que ni siquiera era mía.
-Key, sé que… oh. Veo que si traías un traje de baño.- Reí bajo al escucharlo hablar. Ni si quiera me di la vuelta para mirarlo para responder.
-Vine preparado JongHyunnie, y más ya que tú no me dijiste nada.- sonreí alegre mientras me peinaba un poco y lo encaraba. Dejando casi mi mandíbula en el suelo al mirarlo.
-Te miras muy bien Bummie.
-Y tú también Jonghyunnie.- hable como pude al mirar esa nueva vestimenta en él. Y digo nueva ya que estaba acostumbrado a verlo formal o con trajes normales. Nunca imagine verlo… así.
Llevaba un short rojo, el cual le quedaba ajustado a sus muslos y emm… y una playera negra también ajustada, haciendo que su ancha espalda sea notoria y haciendo en sí que se mirara bien condenadamente sexy.
-¿Vamos? – cuestiono sonriendo de lado mientras me estiraba la mano.
-Va-vamos.- conteste acercándome a él y tomando de su mano.
-Sabes, si no fuéramos los únicos aquí, estuviera celoso de lo que traes puesto. Enseñando tanta piel a otros.- creo que había notado mi pequeño short.
-Mm creo que no serias el único.- dije algo apenado mirando lo que traía puesto de reojo.
Antes de salir de la casa él tomo una pequeña maleta y sin más salimos. Nuestras manos nunca se separaron en todo el camino hacia la orilla de la playa.
Al llegar no dude en soltarme y correr a pasar mis pies por el mar.
-¡Ah! Hace mucho que no venía al mar.- dije alegre sintiendo como mis pies, los cuales habían sido liberados de mis zapatos en la corrida, jugaban con la arena mojada.
Seguía en lo mío cuando escuche risas a mis espaldas. Girándome para mirar a un sonriente JongHyun mirándome.
-Me alegra darte esa satisfacción.- dijo dejando la maleta en la arena.
La tarde estaba perfecta. Y más al ver que el sol no nos molestaba para nada.
-¿quieres meterte al agua o dar un paseo? – cuestiono sin separar la mirada de mí.
Sonreí de lado acercándome a él y rodeando sus hombros con mis brazos.
Estuve a punto de besarlo cuando decidí jugarle una pequeña broma.
-Quiero… - reí internamente al sentir como tragaba en seco.- quiero… bañarme.- solté alejándome de golpe y corriendo hacia el mar, no dudando en sumergirme hasta llegar a un punto donde el agua llegara hasta mis caderas.
El agua estaba deliciosamente fresca. Me encantaba.
Moje un poco mi cabello mientras giraba mi vista hacia él. El cual me miraba con algo de shock en su rostro.
-¡Anda Jong! – grite moviendo mis brazos hacia arriba. Mis ojos pudieron contemplar su hermosa sonrisa para después ver como… ¿se quitaba la playera?
Sentí un calor invadir mi cuerpo. JongHyun se había quitado la playera para después caminar hacia mí. ¡Dios! Sé que JongHyun estaba bueno pero… ¡ah! ¡Tiene un cuerpazo!
Trate de apartar mi acosadora vista mientras él caminaba hacia mí. Pero no pude.
-Cierra la boca gatito.- soltó burlándose un poco de mi mientras se sumergía y mojaba su pelo.
-¿Eh? Jaja ¿de qué hablas? – dije dándome la vuelta, tratando de disimular mi sonrojo.
En eso pude sentir sus fuertes brazos cargándome y llevándome un poco más al fondo.
-No me engañas gatito malo. – hablo cerca de mi oído.
¡Dios! Podía sentir su pecho tocar mi espalda y sus abs… ah, trágame mar.
-¿Pasa algo?
Mi cordura volvió a mi cuerpo cuando él me giro y me miro algo preocupado.
-¿Eh? Si… es solo que el agua está algo helada.- mentí.
-Eso se puede arreglar.-sonrió para después abrazarme.
Recargue mi cabeza en su hombro izquierdo mientras enrollaba mis brazos y piernas a su cuerpo. Si pensaba cargarme pues que lo hiciera bien.
-Gracias por aceptar venir conmigo.- dijo cerca de mi odio.
-Gracias por invitarme.- hable calmado sintiéndome tan bien como estaba. Estar así con JongHyun era muy cálido, me gustaba.
Lentamente me aparte de su cuerpo para mirarme a los ojos y depositar mis labios sobre los de él.
El beso fue calmado y tierno, solo moviendo nuestros labios y haciendo poca presión en estos. Era uno de esos besos que parecían eternos y demostraban tanto en el acto.
Las horas se fueron entre besos abrazos y juegos en la playa. Fue muy divertido nadar y jugar con el agua, más que nada nos tirábamos el agua el uno al otro.
~~~
El sol se había ido dejando la cálida noche. A lo cual, decidimos dar un paseo por la orilla de la playa. Debo admitir que era muy relajante el hecho de estar solos en la playa.
Además de que… JongHyun seguida sin playera cosa que provocaba tanto en mí. ¡Ah! Creo que podría ser muchas cosas más no solo maestro.
-Bummie, te traje aquí a la playa pero eso no significa que es lo único que haremos. – lo mire algo extrañado mientras movía un poco el agarre de nuestras manos y caminaba al compás de sus pasos.
-¿Cómo?
-Bueno.- por un momento me miro fijamente, cosa que agradezco a la luz de la luna por dejarme ver su hermosa mirada. O por lo menos parte de esta. – pasaremos tiempo aquí. Pero también quiero llevarte a la ciudad que está a menos de diez minutos de aquí. Haremos varias cosas.- término por sonreír.
Enterneciéndome al ver que había planeado todo.
-Gracias.- dije sonriente envolviendo mis brazos alrededor de su cintura para después depositar un casto beso en su cuello. Sintiendo al instante como esa parte reaccionaba ante mi toque.
Hubo un momento de un silencio algo incómodo.
-¿Tienes hambre? – cuestiono a los segundos rompiéndolo.
-Sí, algo.
Y en menos de lo esperado nos encontrábamos de nuevo en su casa.
Enserio que aún no superaba lo hermosa que era.
Aun tomados de las manos nos dirigimos al segundo piso.
-Si quieres puedes tomar el baño de allá.- señalo la puerta que estaba al final del pasillo. – yo me bañare en el que está en mi habitación. Saliendo prepararé algo rico para cenar. – termino de hablar acariciando mi mejilla y sonriendo a la par que me miraba dulcemente.
Enserio que JongHyun terminaría por derretirme.
-Claro. – dije al soltarme del agarre de nuestras manos y dirigirme hacia la habitación.
¡Rayos! ¡¿Qué es eso que siento dentro de mí?! Es algo cálido que crece al estar con él. ¡No me gusta! Bueno… si me gusta pero me es incómodo. Creo que mejor dejo de pensar en eso y simplemente me doy un baño con agua fría. ¿Me estaré enfermando?