Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

No sé a dónde voy. por bluegirl31

[Reviews - 3]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Bien, me tomó algo de tiempo escribir esto porque no escontraba las palabras adecuadas, pero sentí que ya estaba completo en cierto punto y decidí subirlo a la web antes de dudar.

 

Si el mundo afuera estaba helando, su carro aún más, y a pesar de tener una bufanda azul marino que cubría su cuello, encendió la calefacción; las calles se veían tranquilas, era lunes pues, la gente tenía que salir de sus casa a hacer algo. Le causó gracia             que en el auto de un lado había un niño luchando con el sueño y con una sonrisa melancólica se recordó a sí mismo teniendo seis años y agarrado fuertemente a la falda amarilla de su madre que olía a jabón y a piel limpia, sintiéndose seguro de la compañía de su mamá; se preguntó qué estaría haciendo ella.


Cruzó la última cuadra en los treinta minutos que tomaba llegar de su apartamento a su trabajo y descendió por el estacionamiento de la compañía, uh oh, tres de sus compañeros ya habían llegado, ahí estaban los autos que había aprendido a reconocer, estaba a tiempo, si subía rápido evitaría el contacto directo con ese último integrante que realmente no quería ver.


Tomó el ascensor directo al piso seis del edificio, haciendo una parada en el piso dos entro Ayanami, la encargada de la recepción, vestía una falta hasta debajo de las rodillas y color dorado que se escondía bajo la blusa blanca semitransparente que a través de una costura dejaba un poco al descubierto sus hombros, su piel rosada resaltaba en sus zapatos de tacón negros y a Uruha le pareció que quizás la compañía le exigía demasiado a una recepcionista, ella realmente debía gastar la mitad de su sueldo en ropa, y más si uno se fijaba en los tres anillos Cartier que llevaba en la mano izquierda y la pulsera con incrustaciones de Swarovski. La chica entró al ascensor repiqueteando en sus tacones e hizo una reverencia pronunciada a Uruha  quien respondió con un simple movimiento de cabeza, ya habían tenido muchos encuentros formales en los primeros años como para desearse buenos días.


El ascensor sonó y las puertas se abrieron en el piso seis, Uruha sintió su estómago subir y luego bajar, caminó hacia la conocida puerta de su estudio de grabación y entro sin tocar, pensó que quizás debió invitar un café a sus compañeros por el clima frío, pero era algo que ellos no hacían por él así que desechó la idea y camino a través del corto pasillo hasta encontrar primero a Ruki quien parecía haberse dando cuenta de su llegada pero estaba demasiado ocupado hablando por su teléfono como para saludar; Kai lo vio unos segundos e hizo un movimiento con su cabeza indicando un “hola” muy vago. Reita lo vio unos segundos y sonrió un poco.


— Has sentido el frío, ¿no es así? — la expresión de su cara era burlona y su ceja arriba indicaba el humor y sentido de su frase, mirando fijamente la gruesa bufanda alrededor del cuello de Uruha y luego la chaqueta de cuero que tenía un estampado de tela suave y gris por dentro.


— Tus guantes dicen que tú no— el sarcasmo flotó entre sus dientes y sus cuerdas vocales vibraron cuando rió por lo bajo. Reita soltó ese tipo de sonrisa que surge desde el fondo por un comentario que te hizo mucha gracia y que no te esperabas.


Sea la madre, escuchó unos pasos por el pasillo y sintió un vacío en el pecho cuando pensó en Aoi, actuando normal se sentó en diván donde solía estar y tomó en sus manos la agenda de la semana, hoy todo acababa a las 5:00 pm y apenas eran las 9:00am.


— ¡Buenos días!— Aoi había sonreído, lo sabía a pesar de que no lo había visto, no es que no tuviera el valor de verlo, simplemente no quería.


— Deja el escandalo—Ruki pasó a su lado viniendo de atrás y lo tropezó con propósito en el hombro, tal parece que hoy no está de humor para tolerar a nadie que esté alegre. Uruha pensó que cuando Ruki estaba de esa manera era mejor mantenerse lejos si no querías terminar haciendo la mitad de su trabajo, vaya que él sabía convencer al manager para dejarte algo o todo su trabajo.


— Quiten esa cara de “el-lunes-es-malo” —sugirió Aoi cuando vio la cara de seriedad que tenían todos, no es que estuvieran molestos, solo algo aburridos de que empezara la rutina que conllevaba un lunes. —Definitivamente ustedes están perdidos— dijo rindiéndose, no es que hubiese puesto su mejor empeño, pero lo intentó.


— Mira quién lo dice, la persona que incluso tiene una arruga entre ceja y ceja— Dijo Kai desafiante, parece que su humor no estaba del todo perdido aquella mañana.


— Oh vaya, yo siempre había pensado que era por la manera en que arrugas tu ceño para las fotos, pero resulta que nuestro Aoi se pone viejo— Añadió Reita, poniendo un poco de peso a lo que había dicho Kai y esperando un poco de dolor por parte de Aoi, quien por su expresión parecía listo para responder.


— Ah, pero déjenme decirles que esta cara de viejo, según ustedes, causa los mismos efectos que hace años; no tengo nada de qué preocuparme— Aoi se veía airoso, descansado, y Uruha se preguntó qué lo había mantenido tan sereno y apacible, pensando en cómo era el moreno se podía hacer una idea, y no le agradaba.


— Tú sí que deberías preocuparte por no dejarte ver sin maquillaje— Uh, el mensaje oculto tras lo que Ruki dijo hizo que Aoi frunciera el ceño, parecía que se estaba esforzando por encontrar algo bueno que decir, pero decidió no pelear esa mañana, todo parecía entretenido de ver.


— Aprovecharé que están todos aquí para decirles algo importante…— Kai había adoptado un todo de seriedad al hablar.


— ¿Qué no es importante cuando hablas así? — Pensó Uruha en voz alta, él había pensado en como cambiaba todo de Kai cuando él se aproximaba a decir algo sobre el trabajo.


Kai hizo un gesto con la mano desechando el comentario de Uruha y este se sintió ofendido pero le restó atención, estaba esperando que el líder hablara, aunque realmente no quería escuchar. Su ojos volaron hacia Aoi, quien se había sentado en la silla giratoria frente a la pantalla de la computadora y observaba su cuenta de twitter,  Uruha sabía que Aoi se había renunciado en esta red social, pero sin embargo siempre se conectaba y husmeaba lo que la gente decía sobre él o de lo que se estaba hablando, quejándose en voz baja cuando leía algo que no le parecía y haciendo muecas cuando el traductor no hacía bien el trabajo y dejaba leer cosas  que no tenían coherencia. Se fijó en la manera de sus labios gruesos y la forma de su mentón, él había observado fugazmente, buscaba convencerse de que no le gustaba lo que veía.


— Aja, tendremos un pequeño meet & greet la semana que viene, el próximo Lunes, creo. El punto es que deben prepararse porque es primera vez que tendremos un contacto directo con las fans, con esto quiero decir que habrán cosas permitidas como darse las manos y posiblemente abrazos— El líder fue interrumpido brutalmente por Ruki, que parecía no muy feliz con el evento.


— No me parece— claro, él siempre tenía que llevar la contraria— creo que es peligroso, y no me veo en la posición de abrazar a ningún fan, me gusta mantener el misterio de no ser del todo accesible para ellos, eso los mantiene constantes.


—Estoy de acuerdo con eso— surgió Aoi, quién había estado escuchando todo pero no había dejado de ver la pantalla del monitor del computador. — Se apagará la chispa, ¿sabes?


— No sean ridículos, obviamente habrá seguridad— Reita volteo los ojos cuando dijo eso, impresionado de la ingenuidad de sus compañeros.


— Kai respiro hondo antes de hablar— Esto es algo por lo que es club de fans oficial lleva luchando años, no nos vamos a morir por esto. En cuanto a lo que Ruki y Aoi dicen, podemos modificar el evento de tal manera que los fans no se puedan acercar, solo hacer preguntas desde el público y nada de contacto.


—Me parece mejor así, si lees lo que dicen los fans ellos se conformarán con el simple hecho de vernos y hacer preguntas, pero estas deben ser moderadas, no podemos darles el poder de preguntar cosas… ya sabes…— Uruha se sintió bajo la mirada de Aoi, y en deseó estar más tiempo bajo la mirada del moreno pero pronto Aoi estaba viendo a Ruki.


—Nos van a preguntar si nos acostaríamos con ellas o entre nosotros, y no estoy dispuesto a responder eso para después terminar en un lío, definitivamente no— él subía sus hombro a la vez que movía la cabeza de lado a lado y Uruha pudo notar lo incomodo que Ruki debía sentirse con el tema.


—Yo sí estaría dispuesto a responder que me acostaría con ellas— dijo Aoi tan pronto como Ruki terminó de hablar, él definitivamente estaba siendo un patán, Uruha se imaginó formando una escena en momento donde ellos fueran algo, pero luego le pareció patético — Ugh, solo pensar que ellas adoran el hecho de pensar nosotros somos gays me enfurece, no puedo creerlo— El castaño de cabello corto abrió sus ojos de par en par y sintió como su respiración faltaba, su mandíbula tembló.


—Las preguntas serán moderadas, habrá una serie de reglas que deben seguir y las preguntas que quieran hacer deben enviarlas al personal de staff para ser aprobadas, después de esto, no pueden cambiar sus preguntas. —Explicó Kai con emoción, él sí parecía más que entusiasmado.


— Esto es emocionante, déjenlo ser— Dijo Reita señalando a Ruki y Aoi que parecían conspirar en contra del evento.


Tan pronto como terminó la charla, se pusieron a practicar lo que sea que tuvieran que practicar o arreglar sobre sus nuevas producciones musicales.


Para la hora del almuerzo Uruha ya no soportaba estar en la misma habitación con Aoi, él había aceptado la situación, podía ver a Aoi como su crush o algo así, pero era algo que tenía que guardarse para sí mismo, buscaba convencerse de que el moreno pronto haría algo que le quitaría todo este asunto de pensar en él.


— Hey Reita, voy a almorzar, vamos— invitó Uruha evitándose la molestia de almorzar solo.


— Vamos— el bajista ya había tomado su chaqueta y estaba por empezar a caminar cuando Aoi los interrumpió.


— ¿A dónde vamos? — ya parecía listo para salir y se veía bien entusiasmado. Uruha no sabía cómo reaccionar el solo se quedó allí y podría haber durado una eternidad viendo al pelinegro pero recordó que debía actuar con normalidad.


— Vamos saliendo—  empezó a caminar pasándolo por  un lado y dejando la invitación en el aire, Reita le siguió.


En el ascensor los tres estaban en silencio por la repentina presencia de Aoi. — Llevo mi auto—  dijo este mirando fijamente a Uruha, quien no había captado la invitación a que fuese con él.


—Parece que vamos en un solo auto entonces, porque no iré en el mío solo. — señaló el bajista.


Cuando Uruha se sentó en el asiento del copiloto se sintió extasiado, este acarro tenía una fragancia, un aroma, olía a Aoi, a cigarrillos y perfume, a él, a su esencia. Se contuvo las ganas de cerrar los ojos e inhalar todo solo para él.


— Vamos por algo de carne de cerdo, lo que sea más rápido— Reita estaba viendo su teléfono pero se notaba que su estómago tenía un concierto allí en su cuerpo.  Uruha podía ver de reojo como los nudillos de Aoi se ponían blancos al colocar su mano sobre la palanca para retroceder, sus manos se veían tan fuertes que pensó que un simple golpe de Aoi lo dejaría totalmente en KO, rió por lo bajo.


_


— Después de dar un sorbo a tu té helado, Reita comenzó a hablar— A ver Aoi, ¿qué es lo que te tiene tan feliz un lunes? Quizás tú… tuviste una buena noche…


— Ah no, no quiero escuchar nada de eso— y definitivamente no quería, mientras su noche había sido miserable la de Aoi había sido bien divertida… y para evitar pensar en eso masticó una cantidad no generosa de arroz, quizás masticar alejara el pensamiento sobre lo de Aoi, pero lo que este dijera no.


— Que bien me conoces…— Aoi miraba a Reita con una sonrisa picarona. — Tuve bastante acción anoche para recordar, una extranjera. Ella tenía unas grandes… ya sabes— ubicó sus manos en su pecho para evitarse hablar en voz alta y puso sus ojos en blanco como si el recuerdo de eso lo hiciera delirar, Uruha lo miraba boquiabierto, impresionado por su fascinación al describir lo que había pasado, la estupefacción en su cara debía ser legendaria, a pesar de saber lo mucho Aoi amaba hablar de esos temas — Y entonces eso me daba la posibilidad de hacer…— Uruha sentía sus mejillas arder, y no sabía muy bien por qué era, miro a su alrededor y la gente comía normalmente, algunos reían y entonces estaba esa pareja del fondo, esa chica con unos shorts bastante cortos y con la mano del chico en su muslo que se movía hacia arriba mientras esta lo miraba y hablaban de algo. Pudo imaginarse a Aoi igual o peor y el hambre abandonó su cuerpo. —…definitivamente guardaré  su número, ella está más que dispuesta a todo. — su cara tenía una expresión triunfante, por lo menos uno de los dos la había pasado bien.


— Ohh, no debes dejar ir chicas así, ¿sabes?, y más si es groopie, ella siempre estará dispuesta. Me quedo con mis tsunagaris, me dan cierto aire de importancia, por todo lo de ser buscado y eso…— definitivamente Reita ya no tenía hambre después de comer y hablar tanto. Uruha sintió la necesidad de decir algo para no quedar mal, él tenía se fingir, hacerlos creer que todo estaba en orden.


— Lo mismo con eso, me quedo con mis tsunagaris— ¿hace cuánto Uruha había estado rechazando chicas que de infiltraban para llegar a él?


En el camino de vuelta a la compañía decidió ir en el asiento trasero para evitar estar al lado de Aoi, pero su decisión fue peor cuando comprendió que le había dado el espacio a Reita y Aoi para conversar más sobre sus aventuras sexuales, y se tuvo que forzar a seguir el hilo de la conversación para que todo estuviese bien.


_


— Por donde entran salen— dijo el líder mientras caminaba hacia su auto en el estacionamiento de la compañía. — Nos han dado el día libre porque la directora pidió desalojar el lugar, quién sabe por qué, pero nos podemos ir— abrió la puerta de su auto y lanzó su bolso al asiento del copiloto.


— ¿Ruki lo sabe? — Reita caminaba a su moto y se ponía los guantes mientras esperaba la respuesta.


— Él ha salido de primero, no desperdicia oportunidad para irse, tú sabes—  así mismo como terminó de hablar encendió el motor y se fue del lugar.


Uruha en su camioneta vio desaparecer al auto de Kai seguido del de Aoi, oyó el rugido de la moto del bajista y salió detrás de él…


…no se dio cuenta hasta que llegó a su casa y la ausencia de la calefacción se hizo sentir, la bufanda que había estado en su cuello, la bufanda azul marino… ya no estaba, sus manos vagaron de su cuello a su pecho cuando después de cerrar la puerta cayó en cuenta, la había dejado en el carro de Aoi.

Notas finales:

Lo siento un muchísimo si hay algún error, pero yo realmente sentía la necesidad de actualizar hoy, a las 2:47am. 

Si hay alguna duda pueden preguntarme.

-A


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).