Capitulo 5… La bestia
Luego de que los caballeros junto a los príncipes y sus sirvientes partieron al bosque y en la entrada del mismo se podía apreciar un rastro de tierra y hojas algo chamuscadas, cabalgaron todo el rato hasta que llego la noche, sin encontrar algo que dijera que era la bestia que acechaba ese bosque o que hubiera al menos una bestia en él; teniendo que acampar en el mismo sin esperar que cierto sirviente se enfermara gracias a ello.
Merlin y Harry estaban preocupados por su hermano, no era bueno que se enfermara y estaban dispuestos a quedarse con el y esperaban que los demás también esperaran pero la voz de uno de los príncipes los sorprendió bastante.
-Tenemos que irnos, hay una mision por cumplir. Dijo Wolfram acomodando las riendas de su caballo y de los demas caballeros y hermanos suyos.
-¿Esta bromenado señor? Dijo León, sin poder creer la actitud del principe.
-No. Dijo terminando de amarrar y ajustar las riendas del ultimo caballo, el de Arturo.
-Pero, su Alteza. Iba a replicar Harry cuando la mirada de su amo lo termino callando.
-Entiendo, vamos. Dijo Draco subiendo a su caballo.
-Esperen, ¿vamos a seguir así nada más? Pregunto Arturo sin comprender la nueva actitud de sus hermanos, si, tal vez no fueran muy buenas personas pero...irse sin sus sirvientes y abandonarlos a su suerte no era algo propio de ninguno de los dos.
-Arturo...Dijo Merlin algo sorprendido, esta vez Arturo, el arrogante Arturo, estaba abogando por él y sus hermanos.
-Arturo, vamos. Dijo Draco con un imperceptible tono de resignación.
Arturo conocía ese tono en su hermano y por fin comprendió, ellos no querían abandonar a los hermanos sino, que estaban pensando en acabar la misión con la mayoría de hombres fuertes mientras que uno se queda a cuidar del sirviente.
-Está bien- dijo resignado subiendo a su caballo- Merlin, vamos. Dijo ya con su voz de mando.
-Harry. Dijo Draco también con aquel tono de mando.
Ambos sirvientes estaban que no se la creían, no irían, estaban seguros de quedarse con Yuri pero algo les llamo la atención, dos de tres príncipes estaban en sus caballos, los caballeros, cuatro de 5 también montaban el corcel, eso quería decir que...
-Entendido. Ambos montaron cada uno de los caballos mientras veían como Percival y Wolfram se acercaban a su hermano menor.
Eso quería decir que el príncipe Wolfram se encargaría de cuidar a su hermano.
Los ocho partieron en busca de la bestia y los otros dos se quedaron a cuidar del otro sirviente.
Merlin estaba preocupado, no sabia que hacer habia dejado a su hermano en manos del príncipe Wolfram y ahora estaba cabalgando al lado de Arturo tratando de encontrar quien sabe que cosa en aquel bosque, Arturo habia notado lo distraído que estaba su sirviente e hizo una cara de enfado, por primera vez en el mundo Draco también miro a Harry y su cara estaba con una expresión de compasión y sus ojos demostraban calidez.
-No se preocupen, Wolfram cuidara bien de su hermano. Dijo Draco para sorpresa de todos que momentáneamente pararon sus caballos mirándolo con los ojos bien abiertos.
-Draco… ¿Tu… acabas de… Arturo estaba que no se la creía, su frio hermano había confortado a los azabaches.
-¿Acabo de qué? Pregunto el susodicho arrastrando las palabras y mirando a todos con frialdad.
-No, nada. Respondió Arturo sonriendo y logrando que su caballo volviera a avanzar, sí que Draco, Wolfram y él eran demasiado orgullosos.
Merlin y Harry seguían viéndolo con los ojos como platos y la boca algo abierta, un comentario asi lo podían esperar de Arturo, León, Gwaine, Lancelot y Elian pero no de Draco, el nunca, nunca, reconfortaba, decía palabras dulces, lloraba o sonreía sinceramente solo hacia bromas crueles, se comportaba como un reverendo idiota, o sonreía burlonamente, no creian lo que oyeron o lo que vieron en su expresión cuando dijo esas palabras.
-Merlin, deja de estar como tonto y cabalga. Grito Arturo.
-Cuatro ojos, no me digas que ahora tienes miedo. Grito Draco.
Ambos gritos los sacaron del trance y con molestia se dirigieron a donde estaban los demás, ya después se encargarían de devolverles los cumplidos.
Conforme iban adentrándose mas en aquel bosque se podía apreciar un rastro de tierra y hojas quemadas, los troncos chamuscados y mientras seguían avanzando un olor a quemado y un poco de humo se podían apreciar en gran cantidad; llevaban ya un gran trecho avanzado cuando se encontraron con algo que no podían creer que llegarían a ver en sus vidas.
Los jóvenes y los caballeros quedaron asombrados con tal criatura, su majestuosidad y gran tamaño eran de admirarse y también la ferocidad en que mostraba su gran hilera de colmillos, nadie esperaba ver uno después de la prohibición de la magia en Camelot y mucho menos que lucharían uno a uno con un dragón.
Merlin y Harry más que asustados estaban preocupados el único dragón al que conocían era Kilgharrah y el que ahí hubiese otro dragón no era nada bueno, la gran bestia alada se estaba preparando para dar el primer ataque mientras los 6 caballeros aun no despertaban de su estupor, ya estaba listo para lanzarles una gran bocanada de fuego que los hubiera carbonizado sin piedad de no ser por Merlín y Harry que reaccionaron primero que todos y arrastraron a los que pudieron atrás de unos árboles en el momento preciso para que los demás también se escondieran y no ser alcanzados por aquella llamarada gigante.
Harry estaba mirando a Merlin como diciendo “¿Qué hacemos?” y este le devolvía la mirada respondiendo “no se”, hubieran seguido comunicándose por medio de sus miradas pero otra gran llamarada de fuego hizo que se voltearan dando la espalda a la misma.
Ambos se preguntaban qué hacer, ¿cómo detener al dragón?, ¿Cómo enfrentarse a la bestia y doblegarla como los señores de los dragones que eran?
Continuara...