Y tras las pervertidas tonterías del maestro Roshin, todos los jóvenes acompañados por éste y el señor Ronsem, llegaron por fin a la sala Lonume, donde sin previo aviso (pues no hacía falta porque todos lo sabían), el señor Ronsem se dirigió a la pared cerca de la puerta, y marcó un pequeño código y pulsó un pequeño botón, transformando mecánicamente la sala Lonume, dejando a unos saiyajines sorprendidos, en una especie de estadio con una especie de tatami en el centro donde se suponía que iban a tener por turnos un combate por pareja
Y así fueron todos al centro del estadio, donde el señor Ronsem metió su mano en la urna, dejando a todos algo tensos y nerviosos ante las ganas de luchar, sufriendo redobles de tambores imaginarios mientras esperaban
Y así el señor Ronsem sacó el primer nombre de la urna…
Ronsem: ¡Kairin! Contra… - Volvió a meter su mano en la urna y sacó otro papel para nombrar al adversario
Ronsem: ¡Arturo! – Y volvió a meter los papeles en la urna para luego
Kairin: “¿En serio? ¿Con Arturo? Lo que me faltaba. Con el pesado… Espero que se concentre en el combate…” - Pensó bastante molesta y decepcionada Kairin
Arturo: “¡Qué bien! Con Kairin. Lo más probable es que me derrote. Pero procuraré que disfrute conmigo jeje” – Pensó sonriendo con algo de malicia
Y así, mientras todos se dirigían a las gradas, Kairin y “Arturo” subieron al tatami para empezar el combate. Hicieron el saludo tradicional que consistía en una reverencia, y se colocaron en posición de pelea
Y de pronto, oyeron que el señor Ronsem aporreó un gong como señal que daba el inicio del enfrentamiento
Kairin, para no levantar sospechas, se limitó a esquivar los simples golpes que Arturo le mandaba en vano, colocándose tras “él”, golpeándolo en la espalda sin dañarlo mucho, lo cual aprovechó el chico para usar su poder de invisibilidad rápidamente antes del próximo golpe, y se posicionó tras su contrincante, sujetándole los brazos deleitándose en secreto con el tacto
Pero dicho agarre no duró mucho. Pues Kairin se vió obligada a usar su fuerza, sujetándolo por los brazos que sabía que la tenían sujeta pues los sentía aunque no podía verlos, y de un fuerte tirón, sacó volando sobre su cabeza al pobre Arturo fuera del tatami cayendo al suelo volviendo a hacerse visible
Ronsem: ¡Kairin es la ganadora! – Anunció Ronsem por un megáfono desde su asiento especial en una parte de las gradas, reservado solo para él y el maestro Roshin quienes aplaudieron
Goku: ¡Bravo Kairin! Bien hecho – Le alentó a gritos a su amiga quien lo saludo como agradeciéndoselo^^
Vegeta: Sólo fue suerte. No ha sido nada del otro mundo… - Decía con indiferencia cruzado de brazos
Ronsem: Siguiente combate…
(redoble de tambores xD)
Vegeta contra Jhon
Vegeta: “¡Bah!... Un insecto inútil contra mí. Mejor sería que se quedara tocando el piano en su cuarto para su Mica…” - Se burla con prepotencia y superioridad
Jhon: “Vaya… este chico nuevo da miedo. Tiene pinta de ser muy fuerte. Buf… Creo que preferiría ser chamuscado por mi querida Mica” – Pensaba el pobre chico asustado y profunda y clara decepción
Se subieron al tatami, tras haberse bajado Kairin, imitaron el protocolo antes del combate (Vegeta sin ganas ninguna) y se colocaron en posición
“GONG”
Vegeta no veía necesario desperdiciar toda su fuerza y energía con un oponente tan indigno, por lo que de antemano, había decidido concederle a Jhon la oportunidad de atacar primero.
Cosa que hizo, lanzándole una fuerte bola de energía que Vegeta esquivó con facilidad con un simple gesto de mano
Y tras esto, al ver Jhon como sonreía Vegeta triunfante, supuso que ahora atacaría él, por lo que tuvo suerte de esquivar su golpe antes de recibirlo. Cosa que a Vegeta dejo algo sorprendido, pues no se esperaba que aquel insecto consiguiera esquivarlo, y ante este pequeño despiste, Jhon no dudó un segundo en aprovechar para dispararle energía a Vegeta por la espalda, dañándolo levemente… Tras lo cual se levantó furioso sintiéndose humillado, y salió disparado hacia él, deteniéndose de golpe en seco al mirarlo a Jhon a los ojos fijamente
No podía moverse absolutamente nada.
Jhon no quería tener que usar este poder. Pero ver a Vegeta tan enfadado por su anterior ataque, le dio tanto miedo, que simplemente lo hizo sin pensar, controlando la mente de Vegeta para garantizarle unos minutos más de vida antes de que Vegeta lo “matara”.
Vegeta trataba de moverse, pero simplemente no podía. Como mucho, la fuerza de su mente le permitía mover muuuuuuuuy lentamente un milímetro sus articulaciones. Tenía que hacer algo pronto. Sentía que la humillación aumentaba con cada minuto. Y eso no podía permitirlo. Jamás se dejaría vencer por alguien tan débil como él
Pero entonces, a Jhon se le ocurrió a través de su control mental, ordenarle a Vegeta que se disparase a sí mismo una de sus energías no muy fuerte para herirlo gravemente, pero si para dejarlo mínimamente inconsciente. Y así lo hizo
Goku estaba de los nervios. Ya sabía que Jhon podía controlar las mentes. Pero no se esperaba que llegara a utilizarlo de forma tan rastrera. Y en parte al ver a Vegeta tan impotente sin poder hacer nada, se sentía como si pudiera notar el sufrimiento y la angustia que ahora mismo debía estar soportando su querido príncipe.
Quería ayudarlo, pero no se permitían las intervenciones. Solo se les permitía animar o desalentar a gritos
Mientras tanto Vegeta, a pesar de estar empleando todas sus fuerzas, no podía evitar que aquel control estuviera dominando su mano que se levantaba lentamente hacia su cabeza, formando una pequeña bola de energía.
Mentalmente se sentía petrificado de miedo y totalmente incapaz de nada, pero su orgullo le impedía rendirse por nada del mundo y seguía haciendo fuerzas con su brazo para no disparar
Pero no conseguía nada. La mano seguía subiendo, Jhon lo seguía mirando, y él se sentía casi derrotado
Pero justo al cerrar los ojos con fuerza, justo cuando estaba a punto de darse por vencido sin remedio… Escuchó claramente una potente y masculina voz a sus espaldas gritándole animos…
???: VEGETAAA… NO TE RINDAAAS… ¡VAMOS! SACA TODAS TUS FUERZAS… ¡VAMOS!... – Le grito la voz
Vegeta aunque hubiera podido voltearse para mirar al dueño de aquella voz, no le hacía falta. Reconocería aquella tonta voz de su soldado Kakaroto en cualquier parte. Y no sabría decir cómo, pero Goku había gritado aquellas palabras con tanta fuerza, confianza y apoyo hacia su persona, que de algún modo, surgieron efecto. Porque de pronto Vegeta hizo un último y potente esfuerzo en aumentar su ki, pegando un fuerte y sonoro grito, para liberarse por fin de aquel dichoso control mental. Y lo consiguió con serio esfuerzo, dejando al pobre Jhon de lo más temeroso. No solo por saber que su fin era inminente, sino por la sorpresa que se llevó al ver a Vegeta cuando gritó aumentando su ki para liberarse de su control mental. No estaba seguro, pero diría que durante un segundo Vegeta se había vuelto… ¿rubio?... ¡No! Eso era imposible. ¿No? No tuvo tiempo de pensar más, cuando Vegeta en menos de un segundo lo saco de un golpe fuera del tatami dejándolo bastante aturdido pero aun consciente a pesar de semejante golpe.
Ronsem: ¡Vegeta es el ganador! – Todos estaban emocionados por tan interesante combate. Especialmente cierto dúo casi inseparable que miraba a Vegeta estupefactos y algo eufóricos
Goku: Sabía que Vegeta ganaría. No podía perder. Es el mejor ^^ - Sonrió hablando con su amiga Kairin al lado
Kairin. Si. Es cierto. Es muy fuerte. Pero es increíble. ¿No te diste cuenta Goku? – Lo miró con una sonrisa algo pícara e indirecta señalando a Vegeta abajo
Goku: ¿Fijarme en qué Kairin? – Le pregunto confundido e inocente
Kairin: ¿Pues de qué va a ser bobo?... Si no llega a ser por tus gritos de ánimos, Jhon hubiera conseguido su propósito y Vegeta se hubiera disparado a sí mismo sin remedio. Creo que tu voz le dio la fuerza para pelear. ¿Lo habrá hecho para impresionarte? – Le dijo con indirecta picardía para molestar a su amigo muy interesada
Goku: ¿Im- impresionarme? ¿Qué dices Kairin? No digas tonterías. Vegeta no me necesita para vencer a nadie. El es fuerte. Se basa solito para ganar – Trató de ocultar el gran sonrojo que le provocaron las palabras de Kairin ante la idea de ser importante para Vegeta
Kairin: Y si es verdad que no te necesita… ¿Por qué no lo hizo antes? – Le preguntó arqueando una ceja
Goku: … - Su sonrojo aumentó y se volteó la cabeza hacia otro lado
Kairin: “Qué timido… Mira lo rojo que está jijiji… ¿Pero qué habrá visto en Vegeta? Bueno. Aun así Goku me cae muy bien. Creo que lo ayudaré” ^^ - Pensaba la observadora y algo metiche Kairin
Pero ambos fueron sacados de sus pensamientos cuando llegó Vegeta al lado de Kakaroto y se sentó sin decir nada cruzado de brazos sin mirarlos.
Kairin: Muy buen combate Vegeta. Ha sido impresionante. Ahora mismo Goku y yo estábamos comentándolo. Goku decía que eres increíble. Y tiene razón ^^ - Goku rápidamente con disimulo, mucha vergüenza y todo rojo le tapo la boca a Kairin para que se callara.
Vegeta: Ya sé que soy increíble Kakaroto. Y descuida. No hace falta que me animes a semejantes gritos cada vez que yo luche. Ahorra tus energías - Decía con los ojos cerrados igual que antes con los brazos cruzados. No se lo podía creer ni él mismo. Sabía que si no llega a ser por Kakaroto, ahora mismo a saber cómo estaría tras haberse disparado quedando en el suelo derrotado y humillado. Pero ni por asomo estaba dispuesto a reconocerlo. ¿Hasta cuándo seguiría dependiendo él, el príncipe de la raza más poderosa del universo, de un soldado de clase baja?
Interiormente, hacía tiempo que ya no lo veía como un simple soldado de clase baja. Sino como su único y verdadero amigo. En quien más podía confiar para todo y el único superviviente de su raza, y que lo ha salvado en tantas ocasiones
Pero su inmenso orgullo y arrogancia más la profunda vergüenza que le daba todo el asunto y tener esos pensamientos, le impedían reconocerlo
Por lo que seguiría siendo frío y solitario como aquella chica intratable
O al menos procuraría serlo…
Y su meditación fue interrumpida por el sonido del megáfono anunciando el tercer combate del día.
(Nuevo redoble de tambores)
Goku VS… ¡Ryosuke!
Goku: ¿Ese niño? No quiero hacerle daño – Dijo inocente y preocupado
Vegeta: Por favor Kakaroto. No digas tonterías. Que sea un niño no quita que siga siendo un combate. Debes ir. Deja que te demuestre de lo que es capaz. Ya que usará nuestros poderes, espero por su bien que los sepa aprovechar bien
– Su pose seguía sin cambiar
Goku: D-de acuerdo Vegeta – Goku obedecío no muy convencido pero igualmente decidido a luchar
Ambos chicos se subieron y tras el obligatorio protocolo, y prepararse, Ronsem hizo sonar el Gong de nuevo
Goku imitando a Vegeta, dejó que aquel “inocente y adorable” niño atacara primero. Y tras copiarle los poderes a Goku, el niño voló al suelo a pocos metros para dispararle, pero Goku no se movió de su sitio. Y el niño aprovechando esto, sonriendo con malicia, formó primero una fuerte bola de ki que no le hizo ni cosquillas al saiyajin. Pues sin esfuerzo alguno, le dio una simple y directa cachetada a la bola, devolviéndosela al niño quien la esquivó con algo de dificultad por la sorpresa, y decidió atacar con otra técnica que consistía en un disco cortante. No era una técnica que usará mucho, pero se parecía mucho al Kienzan de su amigo Krilin. Y por culpa de haberse distraído un poco, aquel disco casi lo parte a la mitad. Por lo que volvió a centrarse en el combate, hasta que vió como el niño seguía en el aire algo harto de atacar y atacar sin éxito, y decidió juntar sus manos primero adelante y luego hacia detrás, formando una potente bola de ki, que no llegó a lograr lanzar, pues Goku al ver que aquel niño pretendía volver a utilizar su técnica secreta, se vió obligado a dispararle una pequeña bolita al niño para evitar que completara el kame hame ha, y al no esperarse aquel ataque por parte del mayor, el niño aunque no resultó prácticamente herido, recibió el impacto perdiendo el vuelo, empezando a caer con miedo del impacto que nunca recibió, porque Goku lo había sujetado en brazos para evitarle el golpe al niño
Y delicadamente, viendo que no estaba en condiciones de continuar por su ataque y el cansancio, aprovecho que el niño se encontraba algo aturdido y lo puso echado fuera del tatami.
Ronsem: ¡El ganador es Goku!
Kairin: Goku es un chico encantador. Que considerado ha sido con el niño – Dijo mirando de reojo a Vegeta quien seguía indiferente y serio cruzado de brazos con el ceño fruncido sin más
Vegeta: ¡Bah…! La compasión sólo lo hace más débil. No debería ser tan considerado con los adversarios – Dijo directa y tajantemente ante esa bondad
Kairin: A ti lo que te pasa es que tienes envidia… Ya podrías coger más ejemplo de Goku. Un chico como él no debería estar soltero. Es curioso. ¿Es que no le gusta nadie ahora mismo o a lo mejor tiene alguna “novia” secreta por ahí? – Dijo en voz alta para sí misma, con toda la intención de que Vegeta lo escuchara sin que se notará la indirecta para ver su reacción. Estaba decidida a juntarlos
Vegeta: Ni lo sé ni me importa. ¡Y deja ya de decir estupideces mocosa! – Le gritó encarándola unos segundos hasta que Goku llegó y se sentó en medio de los 2, haciendo que Vegeta ignorase a Kairin y mirase para otro lado con los brazos más cruzados y los ojos más cerrados que antes y un sonrojo bastante evidente en su cara que hizo que Kairin sonriera eufórica para sus adentros. Pero afortunadamente para Vegeta, solo Kairin vió aquel sonrojo
Ronsem: Cuarto combate…
(Redoble de tambor por favor…)
Vegeta VS… Adam
Adam: “¿Con Vegeta? ¡Perfecto!” – Pensó impaciente y de forma algo pervertida
Vegeta: “Lo que me faltaba… Definitivamente hoy no es mi dia…” – Se auto-compadecía de sí mismo por gafe
Goku: “¿Con Adam? Oh no. Más le vale a ese idiota no tocarle ni un solo pelo a Vegeta porque si no, lo echo yo mismo del tatami de una sola patada o puñetazo”
- Se dijo a sí mismo mirando con rabia y desprecio a Adam, cosa que Kairin notó
Kairin: Vegeta es fuerte. Se sabe defender sólo. ¿Recuerdas? – Dijo intentando calmarlo. Pero Goku seguía pendiente de Adam a pesar de Kairin
Goku: “¡Vaya con Kairin! ¿Sabrá leer las mentes? ¿Cómo lo hará para enterarse de todo?” – Se preguntó mirándola de reojo con disimulo, y algo avergonzado
“GONG”
Al escuchar el “Gong” rápidamente giro el cuello tan velozmente que parecía de saldría volando y prestó toda su atención en el combate de su Vegeta contra ese idiota y osado confianzudo
Y así empezó el combate.
Vegeta esta vez aunque seguía confiando plenamente en sus capacidades, no estaba muy seguro de si debía o no dejar que el otro diera el primer golpe o darlo él mismo y ya.
Vegeta: “No recuerdo muy bien cuáles eran los poderes de este tío. Me concentré demasiado en preguntarme por qué nos miraba tanto a Kakaroto y a mí con semejante descaro, que ni lo escuché. ¿Se acordará Kakaroto? ¡Bah! Tampoco podría preguntarle. Sólo espero no tener que volver a depender de él. Resulta demasiado humillante que me salve siempre una y otra vez como si yo fuera incapaz de defenderme solo haciéndome sentir como una pobre y débil mujer terrícola. Kakaroto, te demostraré que puedo yo sólo. No pierdas ningún detalle y aprende de mi”
– Pensaba Vegeta en lo que subía al tatami, se inclinaba y se colocaba en posición para enfrentarlo de una vez
Adam: Vaaamos Vegeta. Vamos. Deja de pensar en tu novio Kakaroto y enfréntame de una vez – Le decía de forma serena pero algo molesta
Vegeta: “¿Qué demo…? ¿Cómo sabía que estaba pensando en Kakaroto…? ¡Mierda! Es cierto. Este tío sabía leer la mente. Debo tener cuidado con él” - Se dijó a si mismo otra vez sin darse cuenta de que todo eso lo había dicho pensando
Adam: Cierto Vegeta. Puedo leer la mente. Pero no sólo eso. Así que descuida. He podido comprobar cuanto disfrutas con un buen combate. Procuraré estar a la altura – Dijo lo más amablemente posible, pero algo sensual
Vegeta: ¡Cállate de una vez! – Le gritó Vegeta dejándose llevar por la rabia del momento cometiendo el error de haberse precipitado a atacarlo. Pues Adam al leer la mente, no le costó mucho esquivar su ataque, sabiendo de antemano lo que pretendía hacer el sexy y orgulloso Vegeta por quien babeaba
Y justo tras esquivar su ataque, Adam al segundo ya estaba tras Vegeta, para pegarle una patada bastante eficaz, ya que también tenía súper fuerza, provocando que Vegeta casi se callera del tatami. Cosa que no dejaría que ocurriera tan fácilmente, pues no estaba dispuesto a rendirse por nada. Y justo cuando estaba a punto de caer por el eco del golpe, se agarró del borde del tatami, dando un par de volteretas en el aire con gracias y estilo desplegando elegancia quedando de pie frente a su oponente mirándolo muy seriamente
Adam: Vaya Vegeta. Realmente eres admirable. No te vas a rendir tan fácilmente, ¿verdad? – Le dijo encarándolo un poco pero sin malicia
Vegeta: ¿Tú no lees mentes? Entonces deberías saberlo. Mientras me quede un soplo de aire en los pulmones, no daré m brazo a torcer por nada ni nadie.
- Habló muy firme y decidido. Sentía que estaba en juego su honor y reputación
Adam: Me gusta. Este combate será memorable… - Le sonrió desafiante
Vegeta: Más te vale insecto. Aunque dudo que estés a mi altura… - Y saltó hacia él para golpearlo, siendo nuevamente esquivado, pero evitando él rápidamente también con unos pocos giros en el aire, que Adam lo golpeara de nuevo. Y acto seguido se elevó en el aire aprovechando que él no podía y le disparó una bola de energía olvidando que Adam también podía, imitándolo provocando el impacto de ambas bolas
Vegeta: “¡Maldita sea!... ¿Cómo puedo derrotarlo si lee todos mis movimientos antes de realizarlos? Tengo que dejar la mente en blanco… ¿Pero cómo?” – Pensaba algo exasperado Vegeta
Vegeta: “Piensa Vegeta… ¡Ah ya sé!...”
– Pensó Vegeta, pero sin querer ni estar del todo seguro de lo que iba a hacer
Vegeta: “La mejor forma de dejar la mente en blanco… Creo que será cantando. No me queda más remedio si quiero vencerlo. Debo hacerlo” – Pensaba con una jaqueca de sólo planteárselo…
Vegeta: “¿Pero cuál canto? No me sé ninguna. Salvo…” - Miró un momento a Kakaroto provocando el sonrojo alegre de éste, el cual no pudo notar por lo lejos que estaban el uno del otro, y volvió a mirar a Adam con la idea de cantar ya decidida pero sin ganas.
Adam había leído todos sus pensamientos pero tampoco podía evitar que Vegeta cantase. Hiciera lo que hiciera, el cantaría. Aun sabiendo que eso le daría una oportunidad de atacarlo sin problema de esquives
Y para sorpresa de todos, Vegeta empezó a cantar una canción que recordaba una vez haberle oído cantar a Kakaroto cuando eran niños. El sabía que era una nana que su madre le cantaba antes de morir en una misión al igual que la suya. Y la canción la conocía porque un día fingiendo estar dormido tras un pequeño virus que había pillado, Kakaroto lo estuvo cuidando día y noche hasta que sanara. Y una noche simplemente empezó a cantársela en la cama pensando que dormía. Podría haberle dicho que no estaba dormido. Pero sencillamente, no supo porque no quiso hacerlo. Y su voz de algún modo, poco a poco empezó a surtir efecto en Vegeta adormeciéndolo poco a poco de verdad, como si la tierna voz de Kakaroto fuera el tranquilizante más dulce y suave que existiera sobre la faz de la Tierra…
Lo que no entendía es porque después de sólo haberla oído en aquella ocasión, después de tantos años, aun la recordaba como si la estuviese escuchando ahora. Y a veces cuando creía que se le estaba olvidando la letra le bastaba con mirar otra vez un momento a Kakaroto y la recordaba. Durante los primeros 5 segundos de canción profundamente entonada, todos estaban de los más confundidos preguntándose a qué venía semejante tontería a excepción de Goku y Kairin, que simplemente estaban sin habla. Pero luego todo empezó a cobrar sentido cuando vieron estupefactos como mientras cantaba, Vegeta atacaba con golpes simples a Adam y éste no conseguía detener casi ninguno, puesto que no sabía por dónde vendría cada uno. El plan de la canción funcionó. Y tras un par de golpes, Vegeta le propinó un puñetazo en el brazo, que finalmente dejó a Adam fuera del tatami justo cuando Vegeta estaba a punto de terminar la canción, mirando a Kakaroto nuevamente de reojo, y soltando la ultima melodiosa frase y acabó.
Ronsem: Esto… Y el ganador es Vegeta.
Vegeta simplemente estaba con ganas de morirse de la vergüenza. No le quedó más remedio que hacer eso, pero su consuelo es que funcionó, no perdió y hasta ahora nadie se rió. Y más les valía no hacerlo. Porque sería un grave error
Y sin más volvió a su asiento donde se encontraba un Goku de lo más callado por no decir boquiabierto. Parecía en shock. Esto parecía un sueño para él.
Goku: “¡¿Vegeta entonces estaba despierto aquel día?! Pero, ¿después de tantos años y la recuerda perfectamente de principio a fin…? No me lo creo…” ^^ - Goku sonrió levemente para disimular la alegría llena de ilusión que lo inundaba
Kairin entendió porque Vegeta cantó. Pero no entendía del todo las reacciónes de Goku. ¿Es que acaso aquella canción tenía algo que ver con él? Quería saberlo. Pero mejor ahora no.
Ronsem: Quinto combate
(Maestro, redoble de tambor…)
Goku VS… Vegeta
Vegeta se quedó levemente sorprendido de que le tocara dos veces seguidos. Pero tampoco era del todo extraño. Cada vez que alguien perdía un combate, el señor Ronsem retiraba su nombre de la urna. Por lo que ahora al haber menos papeles (4 en total), las probabilidades de que fuera su nombre el elegido, aumentaban. Por lo tanto dejó de darle importancia y se levantó del asiento para ir al tatami, girándose un momento al comprobar que Kakaroto aún no se había levantado de la silla y seguía como en shock sin moverse.
Kairin: ¿Goku?...- Le pasó una mano por delante de su cara y con la otra lo agitó levemente por el hombro, hasta que finalmente Vegeta se le unió y de un grito suyo sumado a uno de Kairin lo devolvieron finalmente a la actualidad
Vegeta y Kairin: ¡KAKAROTOOOOO…! – Gritaron al unísono mientras Vegeta le dio una colleja en la nuca espabilándolo
Goku: ¡Ay!... Eso dolió Vegeta… - Se quejó Goku mirándolo con reproche
Vegeta: Déjate de tonterías y levántate. Nos toca luchar - Se dio la vuelta y sin más que decir ni mirarlo se fue
Goku: ¿Eh? ¡Ah! Si Vegeta… - Se levantó para seguirlo antes de que Kairin lo detuviera por un momento
Kairin: ¿Estás bien? – Le preguntó algo preocupada por el reciente shock
Goku: Si claro. Descuida. Estoy bien^^ - Le sonrió tiernamente antes de irse
Ambos saiyajines subieron al tatami y se prepararon para combatir
Se conocían demasiado bien y después de tantos entrenamientos juntos, sin darse cuenta se dejaron llevar por la costumbre, empezando a golpear al otro a la par. Todos miraban a los saiyajines con gran interés. Era sin duda la pelea más interesante y fuerte hasta ahora. Y los movimientos, golpes y esquives entre ambos estaban tan perfectamente sincronizados que simplemente daba gusto verlo en plena acción de poder
Y por otra parte sorprendía que ambos chicos aun tuvieran tantas energías para combatir después de haber tenido más enfrentamientos anteriores. Sobre todo Vegeta que había tenido dos combates, y Goku solo uno y flojo.
Y mientras peleaban y esquiaban, peleaban y esquivaban, Goku quiso hablar con Vegeta.
Goku: Oye Vegeta, ¿estás enfadado conmigo por algo? ¿He dicho o hecho algo que te haya molestado? Si es así te pido disculpas. Dime… – Decía mientras esquivaba los golpes del príncipe
Vegeta: ¡No me pasa absolutamente nada idiota! Concéntrate de una vez en el combate y lucha con todas tus fuerzas como se debe. No tengas compasión. Y ataca con todo tu poder – Decía tratando de ocultar sus nervios
Goku: No puedo hacer eso. Tú eres más fuerte que yo. Lo sabes… - Mintió para no ofender a Vegeta como siempre
Vegeta: Deja de burlarte de mi Kakaroto. Sé que no eres tan flojo como finges ser. ¿Por qué demonios no luchas con todas tus fuerzas? ¿Pretendes humillarme o qué? Pelea en serio - Le exigió con las manos apretadas en un puño y la quijada apretada muy molesto
Goku: Ya lo estoy haciendo Vegeta. Y no. No quiero humillarte. Nunca he hecho eso. Ni pienso hacerlo. Pero es que no entiendo porque estas así conmigo últimamente. Creo que tengo derecho a saberlo Vegeta. Dímelo – Le suplicaba Goku cada vez más a Vegeta
Vegeta: Te he dicho que no pasa nada. Hazme el grandísimo favor de pelear en serio de una buena vez Kakaroto - Seguía atacándolo cada vez más harto por tanta interrupción sin querer reconocerle a Kakaroto que estaba de lo más avergonzado por el tema de la canción y por tener que depender de su soldado constantemente. Se sentía realmente humillado sin ningún remedio
Goku: Te conozco demasiado bien Vegeta. Y sé que algo te pasa conmigo y por eso estas tan frio y distante. (Más de lo normal…) – Le decía mientras comenzaba a atacarle como exigiéndole a Vegeta una justa y merecida respuesta haciendo que Vegeta ya no pudiera más
Vegeta: No tengo por qué decirte nada… No tienes porque saberlo todo de mí. ¡Estoy harto! Deja de agobiarme. ¿No puedes entenderlo? Estoy harto Kakaroto! Sin darme cuenta toda la vida he estado dependiendo de ti una y otra vez sin remedio y me siento humillado. Me siento un maldito inútil, y tú sigues salvándome mas y mas veces… Y ahora mismo encima para el colmo de las humillaciones me ha tenido que ver toda esta gente cantando esa estúpida canción que me cantaste y que me caló tan hondo aquella vez sin darme cuenta… - Rápidamente se tapó la boca al percatarse de todo lo que soltó de golpe, pero inconsciente mente ninguno de los dos dejaba de pelear…
Goku: ¿Qué? O_o
Vegeta: ¿Qué? 0_0
Estaban los dos tan despistados que sin darse cuenta se pegaron un puñetazo en la cara el uno al otro a la vez, cayendo en un tropiezo Vegeta sobre Goku, lo que provocó un claro sonrojo en las mejillas de ambos. Pero las de Vegeta eran más disimuladas. Y tras mirarse a los ojos durante unos segundo, Vegeta como en un acto reflejo sin poder evitarlo ni darse cuenta, viajo su vista a los suaves labios rosados de Kakaroto, sintiendo la invitación de un beso, que nunca llegó, pues Vegeta agitó su cabeza negando cualquier pensamiento de ese tipo, y se levantó rápidamente pero con algo de dificultad por los múltiples golpes y el cansancio, y mirando a Kakaroto, solto como en un susurro algo parecido a un “lo siento”, solo imperceptible por el otro saiyan tirado en el suelo, y le pego una patada con las pocas fuerzas que le quedaban y lo expulsó del tatami quedando él victorioso. A Goku no le pareció muy justa la victoria, pero tampoco tenía cabeza para pensar en otra cosa que no fuera todo lo que a Vegeta se le escapó
Ronsem: Y el ganador es Vegeta
Y en cuanto se bajó del tatami, Kakaroto le sujetó el brazo y lo arrastró a algún sitio donde tuvieran una mínima intimidad para hablar. Lo necesitaba
Goku: Vegeta, eres tu el que no se da cuenta de nada. ¿Lo sabías? – Le dijo de espaldas con tono severo
Vegeta: ¿De qué hablas insecto? ¿De qué no me doy cuenta? ¡Habla! – Le ordeno con el ceño fruncido y los brazos cruzados mirándose a los ojos.
Goku: Eres tu el que no se da cuenta de nada. Esa arrogancia tuya es la que no te deja ver con claridad las cosas, ni hacer las cosas que quieres. ¿Hasta qué punto piensas dejar que te domine tu maldito orgullo Vegeta? – Le dijo algo molesto sujetándole los hombros
Vegeta: ¡Quítame las manos de encima Kakaroto! – Dijo amenazante zafándose bruscamente de los brazos de su soldado y encarándolo nuevamente
Vegeta: Ese es mi problema. A ti no te incumbe. Deja de meterte en mi vida de una vez Kakaroto ¡maldita sea! -
Vegeta estaba demasiado alterado. Eran demasiadas cosas que pensar, que asimilar. Que sentir… No se sentía con fuerzas para reprimir las lágrimas que amenazaban fuertemente con salir
Goku al ver a Vegeta llorando se derrumbó. Ver el sufrimiento en su rostro era algo con lo que no podía. Después de todo, para que el príncipe llorase, algo grave debía de pasarle. Así que sin saber que decir, solo intentó disculparse para intentar al menos ver si conseguía que se calmara Vegeta
Goku: Vegeta yo… - Estaba deprimido y cabizbajo mirando al suelo en silencio.
Vegeta: No te atrevas a compadecerme. Ya sería lo que me faltaba. Ahora encima doy pena… No necesito tus consuelos – Seguía esforzándose por no llorar dándole la espalda a Kakaroto
Goku: Ya sé que no necesitas mis consuelos ni los de nadie. Eres alguien fuerte. Siempre lo has sido y siempre lo serás. Pero no debería avergonzarte que alguien se preocupe por ti. ¿Exactamente, que es lo que necesitas? Por favor Vegeta. No quiero estar así contigo. Lo siento. ¿De acuerdo? – Volvió a agachar su cabeza algo depre
Vegeta: No lo sé Kakaroto. No lo sé. Ahora mismo no tengo ganas de pensar en nada. Déjame en paz – Dejo de llorar y seguía de espaldas hablando serio
Goku: De acuerdo Vegeta. Te dejaré solo… Si cambias de opinión, ya sabes dónde estoy… - Se dio la vuelta lentamente dispuesto a irse cuando ambos sintieron un fuerte ki acercarse.
Vegeta: ¿Quién es? – Preguntó en alto buscando el origen de ese extraño ki
Goku: No lo sé. Es un poco más fuerte que nosotros. ¿Quién podría ser? – Decía buscando también al dueñ@…
Vegeta: Aquí no hay nadie. ¿Has sido tú verdad Kakaroto? Seguro que has aumentado tu ki al máximo posible para asustarme y que vuelvas a tener tus ansiados momentos de gloria volviendo a salvarme – Ni él mismo sabía lo que decía. Estaba como perdido. Apagado
Goku: ¿Otra vez Vegeta? ¿Pero por qué esa maldita obsesión…? ¿Qué no puedes pensar en otra cosa? - Le miro fijamente para que hablaran sus ojos. Pero pudo ver confusión y odio. Eso lo dolió. Así que decidió irse de su lado sin decir nada para seguir con los combates. Pensó que a lo mejor un tiempo a solas le ayudaría a aclararse
Pero antes de poder irse, vuelven a sentir el ki, y se quedan como en trance unos momentos con los ojos bien abiertos, viendo a través de ellos los momentos compartidos entre ambos
Las veces que de niños entrenaban juntos y el niño Vegeta no podía evitar reír ante las payasadas de su amigo. Las veces que Vegeta se hacía daño y Kakaroto lo curaba. Cuando iban cazar juntos y se ayudaban mutuamente en caso de necesitarlo… Kakaroto cuando salía algunas tardes por asuntos propios (amigos terrícolas) y Vegeta entrenaba solo extrañándolo a rabiar
Cuando Vegeta le explicaba a Kakaroto cualquier cosa que no entendiera y éste le prestaba toda su atención
Cuando se bañaban juntos comían juntos, y entonces empezaron a enumerarse todas las veces que Kakaroto lo había salvado o ayudado
En su mirada con la mayoría de las ayudas se veía algo de sufrimiento e impotencia, al no saber cómo ayudar o si podría hacerlo. Pero luego al haberlo logrado, no se sentía para nada bien con él mismo. Sino bien por Vegeta. Por los dos. Ambos lo habían pasado muy mal. Han perdido y arriesgado mucho. Y no se tenían más que el uno al otro.
Y pudieron ver también a pesar de todo, que de las miles y miles de veces que Vegeta insultaba o trataba a Kakaroto con inferioridad, a veces sin pretenderlo, a pesar de todo él siempre le tenía una sonrisa guardada. Esa cautivadora sonrisa que no quería que perdiera. Y Vegeta se sintió mal por ello.
Entonces el trance desapareció, y ambos saiyajines parpadearon un par de veces hasta garantizar que volvieron a la normalidad. Y fue entonces cuando se miraron, de forma neutral sin expresión ninguna en los rostros de ambos. No había tristeza, ni alegría, ni rabia. No había nada. Solo indiferencia
Hasta que Kakaroto se dio la vuelta y hablo sin poder olvidar los motivos
Goku: Comprendo que tengas muchas cosas en que pensar Vegeta. No te preocupes. Te dejaré tu espacio si es lo que deseas. Respetaré cualquier decisión que tomes. Después de todo, esa decisión es solo tuya. No mía… - Dijo con melancolía en el tono de voz, y mirando de reojo por última vez a Vegeta, empezó a caminar algo depre y cabizbajo, hasta que un fornido brazo lo detuvo y con gran dificultad le habló
Vegeta: Kakaroto… - Goku se dio la vuelta levemente para mirar con intriga a su príncipe esperando oír algo
- Kakaroto… yo… creo que tienes razón – Dijo soltando el agarre y mirando al suelo apretando el puño casi sin habla
- Tú sabes que yo me he criado toda la vida siendo un príncipe. No sé actuar de otra forma. Soy demasiado orgulloso y arrogante. No solo por mi rango. Sino por el hecho de que nuestra raza es orgullosa por naturaleza. Por lo que tú también debes de tener tu orgullo
Pero entiende que me sentí demasiado humillado. No me entraba en la cabeza. Siempre he sido y siempre seré como tú dices fuerte y orgulloso. Pero eso no significa que no… Que no aprecie lo que has hecho hasta ahora y siempre. Yo… yo lo… - No pudo terminar la frase porque un sereno Kakaroto le dio un suave abrazo inesperado y profundo
Goku: No hace falta que te disculpes. Sé que te resulta muy difícil hacerlo. Me basta con que lo hayas intentado Vegeta – Se separo del abrazo y lo miró durante un par de segundos antes de voltearse de nuevo dándole la espalda
Goku: Yo… Nunca he querido causarte problemas. Todo lo contrario. Sabes muy bien que desde lo de… Vegita (agachó la cabeza), sólo nos hemos tenido el uno al otro. Y siempre me esforcé por hacerte olvidar la tragedia y ayudarte a ser en feliz en todo lo posible
Pero no podré hacerlo si no colaboras. Solo dime qué necesitas para ser feliz y lo tendrás – Dijo mirándole de reojo sonriéndole al príncipe un poco triste
Y discúlpame si te sientes humillado cuando yo me entrometo demasiado en tus asuntos. Pero me veo incapaz de verte en apuros y quedarme de brazos cruzados. Ni a ti ni a mí nos gusta sentirnos inútiles y/o impotentes, ¿verdad? – Se volteó del todo y lo miró
Vegeta: ¡Hmp!... Supongo… - Dijo con algo de duda aun sabiendo que así era.
Goku: No quiero volver a pelearme contigo Vegeta. Pero espero que comprendas que si estas en apuros, no podré contenerme. Lo siento mucho. No me lo perdonaría nunca – Dijo mirando fijamente con seriedad el suelo
Vegeta se quedó callado. Le conmovían las palabras de su amigo. Pero no entendía del todo lo que quería decir
Vegeta: De acuerdo Kakaroto. Dejémoslo ya. Tenemos que volver al tatami. Olvidemos este asunto – Se fue
Goku: “Ojalá pudiera decirte que daría mi vida por ti sin dudarlo – Por ahora, yo me conformo con que no me odies” - Pensó
Vegeta: “Ojalá mi maldito orgullo me dejara darte las gracias y tratarte como debería. Realmente eres un amigo muy especial para mí Kakaroto. Para hacerme feliz como tú dices, me basta con tener que aguantarte a ti y tu espíritu alegre e inocente, acompañado siempre de una sonrisa. Sólo con eso me basta… Goku”
Ambos cambiaron de golpe de tema pensando de repente de quién sería aquel ki poderoso que aun sentían cerca. Pero al llegar a la zona del tatami y ver que estaban peleando la alocada metamorfa de Kairin peleando contra la indomable Mica, de una forma realmente feroz se quedaron de pie disfrutando el espectáculo. Ambas chicas eran fuertes. Algo fuera de lo común. Era sin duda un combate digno de ver. Mica era peligrosamente fuerte pero por muy dolorosos que fueran a simple vista los golpes de Mica por la potencia que ponía en ellos a la hora de repartirlos, Kairin no se quedaba atrás. Ella parecía tener una buena defensa y tampoco era mala en el ataque. Se manejaba bastante bien a pesar de todo. Pero desgraciadamente para Kairin, ella estaba algo distraída con el tema de Goku y para colmo Mica era demasiado agresiva y tenía muy poca paciencia, y este combate para su gusto ya se estaba alargando más de la cuenta. Así que se hartó y tras darle un golpe en la barriga doblándose por el dolor y golpearle acto seguido con una patada, mandó a Kairin fuera. A lo que Vegeta que se encontraba a varios metros junto a Goku, se quedaron estupefactos. Y cuando Vegeta se giró un momento para mirar a Kakaroto, justo antes de empezar a girar el cuello, oyó un “Zip”, y cuando se giró del todo hacia Goku, vio que no estaba en ninguna parte
Vegeta: “¿Dónde se habrá metido?” – Se preguntó mientras lo buscaba con la vista por todos lados y lo vio al lado de la dolorida pero consciente Kairin
Vegeta: “Pero… ¿Cómo?... Sé que nosotros somos veloces. Pero, ¿tanto?... ¿Cómo ha llegado ahí tan rápido? Lo habría oído si hubiera sido corriendo. Así que corriendo no fue…” – Se preguntó sin poder salir aun de su peculiar asombró
Vegeta sin duda sentía que había subestimado a aquella chica. Cada vez tenía más ganas de enfrentarla
Goku: Kairin, ¿Estás bien? – Le preguntó agachando la cabeza y su cuerpo sobre Kairin para ayudarla lentamente y muy suave a incorporarse.
Kairin: Si Goku. Gracias. Créeme. Esto no es nada. Me he llevado palizas peores. Pero Mica es muy fuerte. Lo reconozco. ¿Y tú? ¿Cómo estás tú? – Le dijo mirándolo fijamente preocupada
Goku: ¿Eh? ¿Yo? No te preocupes por mí. Yo estoy bien. La que está herida eres tú. Vamos anda. Te llevo a las gradas. Y ayudándola a levantarse colocando uno de los brazos de Kairin sobre sus hombros para que se sujetara y una mano suya en la espalda de Kairin, tomó vuelo y la ayudó a sentarse antes de volver al lado de Vegeta un momento viéndolo ahora muy interesado en el tatami y la razón: MICA
Pero procuró ignorar los celos y la preocupación y se acercó a su príncipe
Goku: Vegeta, oye, que si no me equivoco, me parece que el próximo combate es tuyo. Ya que ustedes dos, tú y Mica son los únicos que quedan.
Vegeta: Ya lo sé Kakaroto – Dijo serio sin mirarlo prestándole atención a Mica y el tatami pero con sumo interés
Goku: Sólo quería desearte suerte – Y se fue antes de dejarlo hablar
Vegeta abrió los ojos y miró como Goku estaba cada vez más lejos volando hacia las gradas y sonrió susurrando un “gracias”. Volviendo a mirar impaciente y decidido al lugar del enfrentamiento
Ronsem: Y por fín, la gran final. Mica contra Vegeta. El séptimo y último combate. Mica y Vegeta, suban aquí
Ambos subieron decididos al tatami, dispuesto a dejarse la piel si era necesario. Y sin más, tras el saludo, y prepararse con la pose, se miraron fijamente a los ojos de la manera más desafiante posible. Ambos querían ganar. Eran demasiado orgullosos para perder tan fácilmente. Y eran testarudos hasta la médula. Por lo que la palabra “rendirse” no figuraba en su diccionario
Como ninguno atacaba primero, terminaron tomando la iniciativa los dos a la vez. Los golpes eran simples pero directos y potentes. Sobraban las palabras. Ambos peleaban con furia y destreza. Indestructible defensa, implacable ataque, y sorprendente velocidad. Era casi invisible la diferencia de ambos a la hora del combate. Tenían un estilo casi 100% idéntico en la lucha. No obstante, ambos sin que el otro lo notara, empezaban a aburrirse. Por lo que querían demostrar y rapidito, quién de los dos era el más fuerte. Así que Vegeta a pesar de lo débil y cansado que estaba en comparación a Mica, debido a la diferencia de combates que han tenido, aumentó su ki notablemente aumentando así sus habilidades. Por su parte, Mica no iba a quedarse atrás. El problema era que para triplicar su poder, debía enfadarse. Así que no tuvo más remedio que ponerse a pensar en su odioso y repugnante pasado que tanto la enfermaba, provocando un cambio bastante llamativo en el ambiente. Empezaba a hacer calor por todos lados. El aura de Mica se volvió roja, al igual que su pelo y sus ojos. Empezaron a atacarse despiadadamente ante varios pares de ojos aterrorizados ante semejante lucha que parecía ser a muerte, a pesar de ir contra las reglas.
Mica, ataca con fuerza, Vegeta se defendía y viceversa. Y así estuvieron por largo rato, consiguiendo sin embargo propinarle al otro algún que otro golpe. Pero como Vegeta estaba algo más flojo que Mica por obvias razones, se sentía y notaba que estaba en peor estado que su adversaria. Pero jamás lo reconocería. Iba a seguir. Hasta que cometió un grave error. Sabía que Mica debía estar en una especie de trance o algo así relacionado con sus emociones (en este caso la ira), tal y como la encontró horas antes mientras prácticamente quemaba el gimnasio. Pero vegeta al no saber ni la mitad de lo que aquella siniestra y solitaria chica ocultaba bajo ese rostro tan bello a la par de rebelde, sufrió las consecuencias, al querer provocarla, preguntándole osadamente con descaro y burlonamente, si no tenia calor.
Lo cual, provocó que le respondiera a su “chiste” con otro “chiste”
Mica: ¡¡¡Al menos puedo asomarme a la ventana y tomar el aire sin tener que subirme a una silla enano!!!! – Dijo esto con una potente voz infrahumana solo perceptible para el saiyajin, quien al instante sentió un fuerte dolor en los oídos con solo escuchar aquella terrorífica y siniestra voz tan diferente a la de Mica. Pues cuando Mica estaba enfadada como ahora, sus poderes y habilidades se triplicaban, pero su voz cambiaba peligrosamente. Si alguien la escuchaba, le dolería un montón los oídos. Y eso era lo que le pasaba a Vegeta. Pero por mucho que le dolieran los oídos, no estaba dispuesto a rendirse. Así que se levanto como pudo con las manos en los oídos, y miró con odio a Mica. Ella le sonríe con malicia, y Vegeta se harta, olvidando por un momento su dolor de oídos que poco a poco iba desapareciendo, y se lanzó al ataque, intentando golpearla sin mucho éxito, pues Mica consigue esquivar sus ataques de a poco… Algunos los esquivaba. Otros simplemente no podía. Y el combate seguía bastante igualado. No parecía haber un ganador fijo. Y ambos estaban ya hartos, deseando terminar de una vez. Por lo que aumentaban con esfuerzo como podían la fuerza de sus poderes, con las pocas energías que les quedaban.
Especialmente para el herido Vegeta, y seguían repartiéndose golpes sin ton ni son, esquivando y atacando sin parar. Hasta que en un momento de desesperación, producto del cansancio y la impaciencia, Vegeta se precipitó a golpearla, en el estómago, pero no llegó a alcanzarla, debido a una patada que le propinó Mica con todas sus ganas en la cara, dejándolo bastante más aturdido de lo que ya estaba por todo lo que su cuerpo sufría en conjunto en ese momento. Y sin esperar más, ni darle tiempo a Vegeta ni siquiera de recobrar el aliento, le dio un fuerte puñetazo en la cara, un golpe en la nuca que lo noqueó y de nuevo volvió a atizarle una patada a Vegeta, que lo sacó disparado del Ring, pero sin llegar a chocar contra nada, puesto que Goku en un momento desesperado que no pudo evitar, al ver la paliza que su príncipe estaba recibiendo, sabía que su derrota era inminente, por lo que cuando notó que se acercaba el fin del combate, no dudó en salir volando rumbo al tatami,
para sujetar a Vegeta antes de que cayera, evitando que se hiciera más daño aún.
Y aunque el combate fue de lo más emocionante y evidentemente, nombraron a Mica ganadora, algunos no estaban del todo conformes. Después de todo, cuando empezó el combate, Mica estaba prácticamente en perfectas condiciones ya que sólo había tenido una lucha que no le costó mucho vencer, mientras que Vegeta había tenido 3 enfrentamientos antes, por lo que se encontraba moderadamente bien, aunque se notaba un poco cansado y magullado por los golpes.
Y a pesar de todo y del insufrible dolor de oídos que Mica le provocó, Vegeta había soportado bastante bien y durante mucho tiempo el combate como todo un campeón. Simplemente era digno de admiración. Pero ahora esta semiinconsciente y aun aturdido y exhausto, sin notar que se encontraba en los protectores brazos de su soldado
Ronsem: Goku, será mejor que lo lleves a la enfermería. Probablemente tarde algo de tiempo en recuperarse del todo. Pero con un poco de descanso, creo que bastará… - Le sugirió de forma serena y éste asintió mirando a Vegeta
Rápidamente se lo llevó a la enfermería y de camino, sin que nadie lo notara, Vegeta había abierto levemente los ojos, viéndolo todo borroso sin poder ver más que la alta y musculosa figura difuminada de Kakaroto sujetándolo en brazos, quedando nuevamente inconsciente en cuestión de segundos. Llegaron a la enfermería guiados por Kairin, quien prefirió dejarlos a solas una vez llegaron. No había nadie dentro aun. Por lo que Goku sólo recostó a Vegeta en la camilla, y fue rápidamente a su cuarto colocando dos de sus dedos sobre la frente, desapareciendo y reapareciendo en un segundo, con una bolsa en la mano, de la que sacó una especie de semilla que le colocó a Vegeta en la boca para que la tragara. Y al momento pudo notar que se encontraba mejor y prácticamente recuperado. Pero aun estaba agotado y aturdido por todo, incluído el dolor de oídos que por así decirlo, aun le molestaba levemente, por lo que Vegeta aun no despertó y seguía durmiendo.
Goku estaba pensando en irse y dejarlo descansar, pero sencillamente no pudo. Se quedo mirando a su bello príncipe durmiendo con un rostro no tan sereno pero algo calmado, y sonrió tiernamente
Entonces recordó todo lo sucedido a lo largo del primer día, y cuando se quiso dar cuenta, se sentó en la camilla a su lado, y como un acto reflejo que le salió del alma sin aviso y descontrol, empezó a tararear suavemente la misma canción que le había cantado hacia años a Vegeta de niños, y que éste utilizó para vencer en uno de sus otros combates
Pero estaba tan concentrado en relajar a Vegeta y compartir aunque fuera de forma inconsciente un momento tan tierno con él, que no se dio cuenta de que Vegeta lo estaba escuchando todo con suma atención, y algo sonrojado, y que en la puerta, una silueta femenina y fuerte con el mismo ki misterioso que hace unas horas los había interrumpido, se encontraba espiándolos en la puerta sonriendo con la más tierna y pura de las sonrisas mirándolos esperanzada ^^
Continuará……………………………………