Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Black paper moon por Yuusei Suzuki

[Reviews - 11]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Negritas-Letra de la canción.

Itálica-Algún recuerdo o alguna experiencia pasada.

Normal-La historia en si.

Notas del capitulo:

Holi c: Bueno,vengo aquí con este bonito fic basado en el OP de Soul Eater que es la canción "Black paper moon" además de que también me basé en el videito (?) Desd hace rato tenía ganas de hacerla pero no podía por tiempo u.u.

En fin,espero que sea de su agrado y que les satisfaga.

Yo no soy Tadatoshi Fujimaki-bebé (?) ¿O sí? ¿O no?

Tampoco soy de Tommy Heavenly y la canción no es mía,por lástima,el OP de Soul Eater no es mío y mucho menos el anime,solo es para pasar el rato.

¡Gracias por leer!

 

“Estoy cayendo hasta lo más profundo de mis sombras,

Respiro profundo y espero en esta mortal noche”

 

La noche inundaba totalmente la ciudad de Tokio, nublada sin ningún ápice de luz a la vista más que la resplandeciente luz de la luna que brillaba con elegancia, dándole una luz adecuada a la ciudad, ni muy brillante ni demasiado opaca. El justo medio, tal como si fuera una luna de papel.

—Aomine-kun…—Susurró Momoi por lo bajo viendo como su mejor amigo de la infancia se iba cabizbajo con un paso descuidado y las manos en los bolsillos rumbo a su casa. Molesto por su vida íntima que parecía efímera y decadente, una luz que no podía despegarse de su anterior sombra, no podía aceptar la derrota ante una luz más fuerte e intensa además de estar ahora un ínfimo rayo de sol dorado entrando en su corazón después de haberlo ignorado por tres largos años.

El moreno entró a su hogar después de una larga caminata nocturna de otoño, suspirando y cerrando su puerta tras de sí, tratando de esclarecer sus sentimientos entre Kuroko y Kise. Después de haber sido novio por tres años de Kuroko, cortaron abruptamente a final de la secundaria por malentendidos severos que había entre ambos. Cuando fue contra Seirin se encontró con una escena que le dolió hasta el fondo de su corazón, su amor de secundaria besando al bastardo de Kagami y por si eso no fuera poco, a Kise se le ocurrió declararse esa maldita tarde de otoño.

— ¿Q-Qué dices, Kise? Deja de andar diciendo estupideces—Dijo Aomine al escuchar la declaración que su sonrojado amigo le había hecho.

—No es ninguna estupidez Aominecchi…Tu en serio me gustas…Demasiado…He estado enamorado de ti desde secundaria pero al enterarme que andabas con Kurokocchi…Perdí toda esperanza—Aomine dejó su hamburguesa en paz para mirar penetrantemente al rubio.

— ¿Es en serio? Yo no sé qué decirte Kise…Sabes que yo—

—Amas a Kurokocchi…Lo sé pero me gustaría ser yo quien te haga olvidarlo—Aomine se quedó callado y bajó la mirada a su comida nuevamente sin saber que contestar ya que lo que dijo Kise de él era la pura realidad.

—Debo de hacer algo—El de cabellos azules se levantó rápidamente agarrando su mochila y sacando varios billetes de sus bolsillos para dejarlos en la mesa, ignorando totalmente las palabras suplicantes de Kise que le imploraba para no dejarlo solo en el restaurante.

Subió rápidamente las escaleras que lo llevaban a su habitación, aventando su mochila en cualquier lugar vacío en el piso para después aventar de igual manera su cuerpo a la cama que estaba tendida porque Momoi había ido a hacerlo mientras que él no estaba.

Cerró sus ojos con suavidad, respirando profundamente el frío aire emanado por la oscura habitación en la que estaba, abrió un ojo levemente, pudiendo contemplar la brillante luz de la luna que parecía de papel colándose por su ventana entre las cortinas azules, embelesándose casi al instante por aquella luz que lo arrullaba lentamente, haciéndolo dormir varios minutos después.

— ¿Dónde estoy? —Aomine estaba en alguna aldea campirana de la edad media a juzgar por sus mallas azul oscuro, sus zapatos café de tela y su sencilla playera de algodón azul atada con un cinturón de cuero; por alguna razón estaba en calma como si todo fuera normal, recostándose en el pasto viendo hacia la luna nublada.

—En un bonito pueblo de encanto medieval—El moreno se sorprendió y rápidamente se sentó viendo el lugar donde había salido esa voz.

— ¿Kagami? ¿Qué mierda haces aquí? —Preguntó anonadado al ver al pelirrojo con un traje igual al suyo pero más elegante y en color rojo intenso, provocando que fuera inevitable el confundirse en el campo.

No temas, si lo deseas podrás reflejar en tus ojos cualquier mundo…—Aomine subió una ceja tratando de comprender lo que el otro decía.

—Mira, quizá estoy dormido, drogado o dormido por lo drogado que estaba o quizá esto sea verdad pero no se qué diablos significa lo que dices, habla más claro, Bakaga…Mi…—Antes de que Aomine pudiera seguir hablando, esos ojos rojos le cautivaron totalmente, haciendo que callara inmediatamente, al pestañear estaba en Teiko.

— ¿Qué mierdas me metí para estar en Teiko? —El joven de cabellos azules miró el gimnasio de su vieja escuela, sonriendo por los buenos recuerdos que tenía de ese lugar.

Akashicchi…Lo lamentoSusurró en un sollozo el rubio que estaba hincado abrazado a un balón.

Tranquilo, fue nuestro error el no decirte nada de Kuroko y Aomine ¿No es así, Murasakibara?Murasakibara asintió mientras se hincaba al nivel de su compañero ofreciéndole un dulce para que se calmara.

¿Cuánto llevan saliendo?

Desde primero de secundariaContestó el pelirrojo viendo como Kise aceptaba el dulce que Murasakibara le ofrecía, dejándose acariciar suavemente los cabellos por éste.

Ahhh…Creo que…Fui muy imbécil al no darme cuentaAkashi le tendió la mano a Kise, el cual aceptó levantándose para poder llorar en el hombro de su amigo, que solamente le consolaba y acariciaba con suavidad su espalda, tratando de animarlo.

—No quiero ver esto, es deprimente…Llévame a otro lado—Dijo Aomine cerrando sus ojos y mordiéndose el labio por la punzada de dolor que sentía en su corazón al ver a Kise llorar por su culpa.

En tus ojos puedes reflejar cualquier mundo…—Volvió a decir Kagami sonriéndole, comenzando a caminar en ese oscuro lugar sin nada más que pétalos de flores cayendo en el piso que por lo visto era agua por las ondas que se formaban debajo de los pétalos caídos. Aomine cerró nuevamente los ojos y al abrirlos vio de nuevo Teiko, ahora era el salón de clases de Kuroko por la tarde cuando no había nadie.

No sabes cuánto te amo, Aomine-kunAomine sonrió al escuchar esas palabras de su novio.

Yo también te amo, con todo mi corazón, incluso más que al basketballAmbos rieron cuando el moreno terminó de decir eso y se besaron justo cuando el sol se ponía en el horizonte, tiñendo de tonalidades rojizas su salón, entrelazando sus dedos casi al finalizar su beso, encerrándose en su propio mundo.

…Tu tampoco sabes cuánto te amo AominecchiSusurró Kise mientras se deslizaba por la pared para sentarse en el piso fuera del salón donde los chicos tenían su romántico momento, tapando su boca y apretando con fuerza sus ojos para que su llanto no fuera escuchado por la feliz pareja.

¿Qué haces llorando Kise-kun?Preguntó Kuroko tomado de la mano del moreno cuando salían del salón.

A-Ah…Ku-Kurokocchi es que…Veía un dorama muy, muy triste donde la chica rubia no se queda con el protagonista, al contrario, el chico tiene novia…Una muy linda novia que es amiga de la rubia y que no sabe de los sentimientos de su amiga hacia su novio, en serio que duele mucho ver el doramaKise se levantó rápidamente para secarse las lágrimas, sonriendo como habitualmente lo hacía.

Que cursi eres KiseContestó el moreno riendo mientras le despeinaba sus dorados cabellos ¿Vienes con nosotros al Maji burger? Kuroko quiere su licuado de vainilla y yo quiero mis hamburguesas

Oh no, debo de hacer tarea y ver que fotos quiere la agencia para que modele…

Vamos Kise-kun, será divertidoEl peliceleste se le quedó mirando con una tenue sonrisa, Kise vio como Aomine también le sonreía brillantemente y apretando su corazón asintió sonriendo para ir junto a ellos al restaurante.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).