Tu perfume
No entendía porque las chicas te tenían de hace bastantes minutos rodeado, escuchaba el griterío, sí, pero no le prestaba demasiada atención después de todo era como cualquier día en Fairy Tail. En medio de un silencio se alzó una voz.
— ¡Vamos Natsu, tienes que decirnos!
Era Lucy la que te gritaba, con aura parecida a la de Erza cuando se comían su pastel, seguía sin entender a que se debía tanto jaleo. Por pura y mera curiosidad me acerqué, me senté al lado de Lisanna que tenía su rostro sostenido por sus manos y los hombros apoyados en sus rodillas, copie su posición y le murmuré:
— ¿Qué está pasando?
—Parece que a Natsu le gusta alguien…—Soltó ella y mi corazón se encogió. Aunque trate de no exteriorizar el sentimiento, dibuje una sonrisa de medio lado forzada.
—Que va, será Lucy seguro.
—No lo creo. —Respondió la albina y se giró guiñándome un ojo, yo solo logré hacer una mueca de “No comprendo” y nuestra conversación quedó allí.
Cana se acercó con una botella de vino en la mano, giré levemente mi rostro para verla. — ¿Por qué dicen que a Natsu le gusta alguien?
—Está usando perfume… —Me respondió antes de darle un trago a su botella.
Volví mi mirada al frente, no entendía que sorprendía tanto a las chicas, era solo perfume aunque también estábamos hablando de Natsu. Con curiosidad me acerqué hasta dónde Lucy y Erza te mantenían amarrado. Me miraste fijamente pidiendo ayuda a gritos pero sin decir palabra. Sonreí burlón y me acerqué a ti, nuestros rostros estuvieron a escasos centímetros y me fue inevitable recordar el beso de la otra noche, ¡solo quería oler tu perfume! Pero alguien de atrás me empujó antes de que pudiera alejarme y nuevamente mis labios se encontraron con los tuyos en un rápido y fugaz beso.
Algo que jamás te diré: me encanta tu perfume, Natsu. Me encanta.